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Santiago, Chile
2016
1
Índice
Página
Resumen…………..……………………………………….……………………...……………………………………..……….. 3
Agradecimientos……………………..………………………………...………..…………...…………………….………... 5
Introducción………..………………………….…………………………..…………...…………………………….…......... 6
Musicología feminista…………………....………..………………………………………………..….………. 9
Musicología popular ……………………………………………………………………………………………..12
Aspectos metodológicos………………………………………………………………………………………. 15
Objetivos……………………………………………………………………………….……………………16
Hipótesis…………………………………………………………………………………………………….17
Conclusiones……………………………………………………………………………………..…………………………… 111
Bibliografía………………………..…………………………………………………………….………………...………….. 116
2
RESUMEN
Esta investigación tiene por objetivo indagar sobre las diversas formas en que se construye
el género y de qué modo diversas prácticas sociales, culturales y musicales han contribuido
Chico Buarque, que tienen como característica común el estar escritas en primera persona
Este trabajo está dividido en tres capítulos; el primero “Chico Buarque de Brasil” presenta
por la sociedad en su obra, nos lleva a reflexionar en torno al concepto de alteridad para
descubierto una fuerte vinculación con la tradición del samba de los años treinta. El segundo
capítulo “La perspectiva femenina en las canciones de Chico Buarque” se inicia con una
de la mujer en la obra del compositor, terminando con el análisis de dos arquetipos clásicos
3
transgresoras, desmitificando y diversificando las representaciones convencionales. Por
un análisis comparado de tres versiones de la canción “Sem Fantasia” (1968) que permiten
ilustrar las diversas interpretaciones que puede tener la canción popular de acuerdo a su
una visión crítica poco común en el cancionero popular poniendo en tensión las
4
Agradecimientos
conocimiento y camaradería.
el camino, porque sin saberlo, hicieron este trabajo aún más valioso.
A mis amigos y colegas Memo Correa y Pamela Parra que acompañaron el proceso y
A mis profesores guías, Daniel Party y Fernando Pérez que me ayudaron a crecer, a
Esta investigación contó con el apoyo del Proyecto FONDECYT Regular N° 1140979,
5
Introducción
Esta investigación nace del interés por comprender de qué manera se construye el
género y de qué modo diversas prácticas sociales, culturales y musicales han contribuido a
selección de canciones del compositor brasileño Chico Buarque, que tienen como
para indagar a través del análisis de texto, música y performance, acerca de las diferentes
del artista, considerando además, aquellos factores que condicionan de un modo u otro la
musicales y performativos.
articuladora de identidades puede darse de distintas formas. López Cano (2008), observa al
menos tres: sujetos que son representados en ella, sujetos que se ven interpelados por ella
género.
El género como categoría de análisis y la canción como fuente documental nos permiten
6
Esta construcción ideológica del género podemos observarla en diversos textos que
por eso que me llama particularmente la atención aquellas canciones compuestas por
Chico Buarque, como “cancionista”, aborda diversas temáticas que van desde lo
amoroso a lo político, retratando, además, a una gran variedad de personajes urbanos y sus
entornos entre los que también se encuentra la mujer. La obra de Chico Buarque ofrece a
los estudios de género un generoso material de estudio, pues en ella, la figura femenina
ocupa un lugar importante siendo abordada desde diversos enfoques, en tercera persona,
otro: lo masculino.
década del 70, Buarque participa de varios programas de entrevistas en la televisión brasilera
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primeros artículos académicos sobre su obra y en 1999, Maria Helena Sansão Fontes publica
través de la obra del compositor. Tres años más tarde se publica Figuras do Femenino na
Canção de Chico Buarque (2001) de Adélia Bezerra de Meneses, quien realiza un análisis
temático de los textos de sus canciones, desde la perspectiva literaria, con ayuda del
años del compositor, Rinaldo de Fernandes edita su segundo libro de ensayos sobre Buarque
al que titula Chico Buarque o Poeta das Mulheres, dos Desvalidos e dos Perseguidos,
conferido a los textos/canción de Buarque el status de textos poéticos al considerar que sus
superior (Rennó 2003 53). Sin embargo, los principales estudios de la obra buarqueana
coinciden en que la canción, comprendida como una unidad entre música y texto, no puede
ser analizada únicamente desde el ámbito literario o desde el ámbito puramente musical,
sino que es precisamente en esta comunión música-texto que adquiere significado. Aun así,
cargo de esta afirmación. Nadine Hubbs (2014 154), señala: “Resulta irónico que en tantas
ocasiones ésta [la música] reciba menor atención crítica que cualquier otro aspecto […]
siendo el elemento que establece una conexión más poderosa con la audiencia”. Ante la
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sorpresa y frustración primera, frente a un panorama en el que a primera vista parece todo
Musicología feminista
encargado de abordar aquellos aspectos que habían sido marginales en los estudios de la
participación de las mujeres como compositoras, surge a partir de 1980 una nueva corriente
que pone atención a los modos en que se transmite la música: intérpretes, la enseñanza
que considera relevante el género como construcción social dando énfasis a sus significados
Aunque existen publicaciones pioneras sobre la música y las mujeres, no es sino hasta
1991 con la publicación de Susan McClary, Feminine Endings: Music, Gender, and Sexuality
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subjetivo y, por el contrario, lo "masculino" como fuerte, normal y objetivo. En este
manifiesto los mecanismos culturales y sociales que dan a una noción construida de género,
para representar diversos estados como la locura, la histeria o la ferocidad militar entre otras.
universal que opera independientemente del contexto social e histórico en el que surge,
Estos aspectos serían los más poderosos según McClary, pues operan por debajo del nivel de
1
“To be sure, music's beauty is often overwhelming, its formal order magisterial. But the structures graphed
by theorists and the beauty celebrated by aestheticians are often stained with such things as violence,
misogyny, and racism.”
10
consciente. La música –lejos de ser autónoma– se significa dentro del contexto social e
histórico en el que se crea y se transmite. Tal como otros discursos, no solo refleja una
realidad, sino que es la propia realidad la que se constituye dentro de estas prácticas
discursivas.
normal, considerado este como el grupo de mayor poder. Por otra parte, se aventura en
análisis musicales que se sostienen en las mismas observaciones de McClary, como el uso de
popular han abordado principalmente los textos y la performance dejando fuera la música.
Otros estudios intentan abordar de manera integral algunas propuestas musicales como los
de Sheila Whiteley (2000), que analiza obras de artistas mujeres como Joni Mitchell y Tracy
funcional al texto más que contener un significado en sí mismo. Lori Burns (1997), en cambio,
realiza un interesante y completo análisis de texto, música y performance que permiten ver
11
las transformaciones de la mujer en los últimos años y el poder de la música para reflexionar
Aunque la música popular ha debido soportar ser situada en una categoría menor
convenciones para representar el género y más específicamente a la mujer, pese a que las
el transcurso de los siglos, los códigos musicales constructores del género parecen ser
persistencia de actitudes sociales relativas al género (McClary 1991). Más que hablar de
femeninos.
Musicología popular
quedando marginadas las músicas populares de consumo masivo, que requieren por otra
parte, de un modelo de análisis que considere la compleja relación dialéctica entre sus
por otro, los significados, usos y funciones en el contexto social (Tagg 1982). Es por eso que
este trabajo se enmarca en lo que Derek Scott (2009), define como Musicología Popular y
como medio de circulación en las músicas populares, resulta fundamental lograr comprender
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la música popular desde la misma música. Los estudios buarqueanos han elaborado
femenina, siempre desde la perspectiva literaria, ignorando cómo estas palabras pueden ser
Este trabajo está dividido en tres capítulos que pretenden adentrar paulatinamente
al lector en el estudio, que va desde aspectos más generales de la obra de Chico Buarque,
canciones.
país, como enfatiza la publicación de Rinaldo de Fernandes, Chico Buarque do Brasil (2013).
la sociedad, es una cualidad fundamental en su obra, es por eso que dentro de este capítulo
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El segundo capítulo se inicia con una revisión de las diversas publicaciones e
estudios que han sido abordados desde distintas disciplinas y perspectivas como la música,
actividades, es por eso que me interesa determinar de qué modo las diversas
construir por oposición la figura de un otro: lo masculino. De este modo, más que limitarse
y la sociedad. Por otra parte, desde estas tradicionales construcciones de femineidad surgen
voces disidentes que vienen a reformular los cánones de género socialmente establecidos y
que cuestionan algunos paradigmas clásicos como la sexualidad y la maternidad entre otros.
Fantasia” (1968). Escrita como un dúo mixto, el texto propone una caracterización de género
poco usual, en donde la mujer es quien posee el control presentándose fuerte y segura,
mientras que el hombre es inseguro y frágil. La música cumple una clara función en la
música han sido moldeadas por las actitudes y valores de la sociedad de su época, del mismo
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performativos. Las versiones analizadas de “Sem Fantasia” permiten ilustrar las diversas
demostrando que más que un objeto, la canción es un proceso dinámico que se reinscribe y
Aspectos Metodológicos
responder a un modelo teórico apropiado a la musicología popular del siglo XXI, que permita
como señala Tagg (1982), analizarla en sus propios términos. Esto supone, además, extender
sus alcances más allá de los especialistas en áreas cercanas a la música, sino también al
público general experto (Yúdice 2007 22), aquellos en quienes las tecnologías y prácticas
musicales han fomentado el gusto y el conocimiento crítico. Por otra parte, se presenta
discurso y la performance.
videos que serán analizados de acuerdo al concepto de Musicología Popular planteado por
Scott. En todos los casos analizados, ha sido transcrita la primera versión grabada de cada
canción.
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Objetivos
Objetivo general:
género presentes en las canciones de Chico Buarque que asumen la perspectiva femenina
construcciones de género.
Objetivos específicos:
selección de canciones del compositor brasileño Chico Buarque, que tienen como
persona.
así como también aquellos recursos performativos utilizados por distintos intérpretes
16
Hipótesis
persona, introducen una visión crítica poco común en el cancionero popular poniendo en
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Capítulo 1: Chico Buarque de Brasil
uno de los artistas más importantes de la cultura contemporánea de Brasil. Su obra musical,
desde la elite intelectualizada hasta el auditor sin hábito lector ni formación especializada.
Buarque, señalándolo como uno de los principales artistas brasileros de todos los tiempos
acomodada e intelectual. Es el cuarto de los siete hijos del sociólogo y uno de los más
Alvim, amante de la música y pianista aficionada. Chico Buarque creció en medio de los libros,
la música y un ambiente cultural privilegiado, que sin duda fue fundamental en el desarrollo
con una generación de artistas e intelectuales amigos de su padre que frecuentaban el hogar,
entre los que se encontraban Antônio Candido, Vinícius de Moraes, Tom Jobim, João
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Sergio Buarque de Holanda figura entre los grandes intérpretes de la Historia de Brasil, al lado de Gilberto
Freyre, Caio Prado Jr., entre otros. Su libro Raízes do Brasil es considerado uno de los más importantes clásicos
de la historiografía y sociología brasileiras, reeditado varias veces y traducido al italiano, español, japonés
alemán y francés.
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Gilberto, entre otros. Antes de cumplir doce años, la familia se muda a Italia, en donde
de la Universidad de São Paulo, carrera que abandona tres años más tarde. Durante ese
mismo periodo inicia sus presentaciones musicales y compone sus primeras canciones,
año 1966. Sus primeros trabajos literarios datan también de la misma época.
Músico, compositor y dramaturgo, Buarque posee una prolífica obra artística que
incluye más de treinta y cinco discos, cuatro obras de teatro, seis novelas, a las que se suman
enorme producción artística ha sido elogiada por su público, pero además ha ganado el
Al cumplir en junio del 2014 los setenta años, Buarque fue homenajeado en su país y
lanzamiento del largometraje documental Chico: Artista Brasilero del director Miguel Faria
Jr., el rodaje de dos películas, una basada en su novela Leite Derramado y O Grande Circo
Místico para el que hiciese la banda sonora en 1982, entre otras. Con setenta años de vida y
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Fernandes (2013 9), como uno de los artistas brasileros más importantes de todos los
tiempos.
musical de Chico Buarque, han conferido a sus canciones el status de textos poéticos. Júlio
Cesar Valladão Diniz (273), advierte en Buarque la intención de destacar sus textos como
parte fundamental de sus canciones, al ser uno de los primeros compositores que incluye las
letras en las portadas y encartes de sus discos. Adelia Becerra de Meneses, una de las
común al que llama el signo del poeta: "Chico Buarque es un artesano del lenguaje" 3 (2002
17).
El interés de Chico Buarque por la literatura es tan temprano como su interés por la
música. En este desarrollo literario resulta fundamental el entorno familiar donde comienza
de algunos autores del modernismo brasilero como Mário de Andrade, que obtenía de la
biblioteca paterna. En 1966 publica el cuento “Ulisses” y en 1974 su primera novela, Fazenda
Modelo. El crítico literario Alexandre Amorim (2004), se refiere precisamente a estas obras,
años de Buarque:
3
“Chico Buarque é um artesão da linguagem”
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Chico Buarque es un esteta. A pesar de que su primera historia publicada no fue un
intento muy original para traducir el mito de Ulises para odiseas cotidianas, o incluso
su primera novela se refiere a la Revolución libro de animales, de George Orwell,
aplicado a los días de la dictadura militar en Brasil, su preocupación acerca de la
palabra ya estaba presente en estos textos.4
Eric Nepomuceno (2003), Chico Buarque es un compositor que tiene la palabra escrita como
Chico Buarque comienza su carrera musical en 1964. Nueve años después aparece
en el diario Jornal do Brasil uno de los primeros ensayos referidos a su obra titulado “Chico
Buarque: a música contra o silêncio”, de Affonso Romano de Sant’Anna, que será reeditado
por Fernandes con motivo de los sesenta años del compositor. Estos ensayos, aunque
literaria. En este estudio, Sant’Anna (161), divide las composiciones de Buarque en dos fases.
La primera de ellas, que alude a sus tres primeros long plays, es señalada como una etapa
personajes y pequeños incidentes del día a día y retratar su propio quehacer musical, la
música el cantor y el acto de cantar. Parece haber acuerdo respecto de escisión de la obra
buarqueana que fija en sus tres primeros long plays una primera etapa. Tárik de Souza
(2004), reafirma esta idea señalando que esta primera etapa está marcada por una mirada
4
“Chico Buarque é um esteta. Mesmo que seu primeiro conto publicado tenha sido uma tentativa não muito
original de traduzir o mito de Ulisses para as odisséias cotidianas, ou mesmo que sua primeira novela remeta
ao livro Revolução dos bichos, de George Orwell, aplicado aos dias de ditadura militar no Brasil, sua preocupação
com a palavra já estava presente nesses textos”.
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nostálgica ante las cosas que pasan -el tiempo, la banda, los amores, el carnaval, en donde
por otra parte, se distinguen dos miradas: en primer lugar la “metacanción pura”, canciones
que tratan sobre la canción como “Sonho de um Carnaval”, “A Banda”, “Olé Olé”, etc. y la
canción mediada por un personaje, llena de elementos anecdóticos como “A Rita”, “Tereza
Tristeza”, “Lua Cheia”, entre otras. En una segunda etapa, se observa una apertura a la
fundiendo la vida del individuo con la de la sociedad. Sin embargo, para Adelia Becerra de
Meneses (2002 41), estas características no constituyen etapas separadas como algunos
pretenden tomando como su obra teatral Roda Viva, como un quiebre en su producción del
posterior, sino que: “el camino que se pretende trazar no debe ser visto como algo lineal,
romper el silencio y visibilizar aspectos ignorados hasta entonces. Esta primera fase está
marcada por la nostalgia de volver a un tiempo anterior a las desdichas y miserias del pueblo
y por otra parte, por el pasar del tiempo. Pasan el tiempo y las cosas -el carnaval, la banda-
frente a la inmovilidad de las personas, que observan para luego regresar a sus acciones
cotidianas. Este lirismo nostálgico asumirá dos direcciones. Por un lado, una “vertiente
5
“a trajetória que se pretende traçar não deve ser encarada como algo linear, más antes imaginada como
uma trajetória em espiral”.
22
utópica”, proponiendo un espacio-tiempo mítico como el carnaval, el samba y la canción que
estrenada en Rio de Janeiro en 1968, que relata la vida de un ídolo de la canción manipulado
por la industria de la música y los medios, con el fin de propiciar la reflexión en torno al artista
devorado por sus fans y su corazón, representado por un hígado de buey sangrante, lanzado
al público atónito. La obra, dirigida por José Celso Martinez, fue censurada y calificada de
la censura federal en São Paulo. A pocos días del estreno, un grupo que se identificó como
miembros del Comando de caza a los comunistas irrumpió en el teatro destruyendo todo y
golpeando a los actores. Para algunos investigadores, esta obra es el símbolo de la ruptura
dentro de la obra buarqueana. A partir de ella desaparece la imagen de niño bueno que los
medios habían explotado desde su éxito “A Banda” y se dibuja un Buarque más social y crítico
que lo llevaría a una segunda fase o “vertiente crítica” manifestada a partir del disco
Construção.
El ensayista Anazildo Vasconcellos da Silva (2004), advierte que desde la década del
‘50 las letras de la MPB van ganando mayor calidad artística y poética. Por otro lado, José
Miguel Wisnik (2008), señala la importancia de la música popular en Brasil, la que cumple a
su juicio, una labor única en el mundo que es la función de “puente” que une a generaciones
y que conecta a la audiencia con la literatura, suceso que se observa en la popularización que
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alcanzaron algunas canciones de gran valor poético. La obra de Chico Buarque ilustra
claramente esta idea, pues sus canciones con textos sofisticados y poéticos no solo traspasan
varias generaciones, sino que logran instalarse en los gustos de una audiencia heterogénea.
Marcos Napolitano (43,44), señala los años sesenta como un periodo de “corte
epistemológico y sociológico” en donde surge otro estilo de canción moderna que se alzaba
como punto medio entre la tradición folclorizada do morro y do sertão y las conquistas
cosmopolitas de la Bossa Nova. Es en este momento donde surge la sigla MPB como si fuese
un género musical específico capaz de sintetizar toda la tradición musical brasilera. Charles
Perrone (5), menciona la utilización de otros términos tales como “música urbana popular”
derivadas de la misma, buscaban también diferenciarse del rock y pop emergente. Para
Perrone, aunque la MPB se comienza a desarrollar a fines de los años sesenta, podría situarse
más específicamente en la década del setenta (Id. 6). La MPB incorporó nombres venidos
del Bossa Nova como Vinícius y Baden Powell, Sérgio Ricardo, Geraldo Vandré, Nara Leão y
Edu Lobo, a los que se sumaron nuevos artistas entre los que se encontraba también Chico
Buarque.
Buarque reconoce en una entrevista publicada en el diario Folha de São Paulo en septiembre
de 1977, que aprendió a cantar y tocar guitarra escuchando a João Gilberto: "... Yo incluso
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imité. Sólo imitaba. Sólo hacia música, queriendo imitar a Gilberto. Y mal. Lo que yo quería
hacer era Bossa Nova...”6 Sugiere, además, que todo lo anterior a la canción “A Rita” (1965)
Chico Buarque trae de vuelta a la escena musical la memoria del samba urbano de
Rápidamente la prensa lo asocia con Noel Rosa quien contribuyera a la legitimización del
samba del morro en el mundo de los blancos y en los medios de difusión. Si Noel deja la
facultad de medicina para ir desde Vila Isabel, barrio de clase media donde vivía, en dirección
a los morros y periferias a buscar el samba, Chico Buarque, deja la facultad de arquitectura
No creo que Noel ejerza influencia sobre Chico. La mayor similitud entre los dos es la
temática: urbana. Caymmi, Ataulfo e Ismael le marcan más que Noel. Chico además,
no es un compositor de clase media, como afirman por ahí. No hay duda, Noel y Chico
también se parecen un poco, debido a que ambos se enfocan en cuestiones urbanas.
Nada más7(Buarque, S. 1991).
Efectivamente, como lo señalara su padre, la asociación hecha por la prensa entre Chico
producción musical. Ambos son compositores urbanos, con educación universitaria que se
6
“…eu imitei mesmo. Só imitava. Só fazia músicas, querendo imitar João Gilberto. E mal. Eu queria era fazer
Bossa Nova…”
7
“Não acredito que Noel exerça influência sobre Chico. A maior semelhança entre os dois é a temática: urbana.
Caymmi, Ataulfo e Ismael marcaram mais que Noel. Chico também não é um compositor de classe média, como
afirmam por aí. Não há dúvida, Noel e Chico também se assemelham um pouco, porque ambos enfocam temas
urbanos. Nada mais.”
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interesan por la música de los sambistas del morro, sin embargo, Buarque va a recoger no
solo la tradición musical del samba sino también su vertiente temática que enfatiza en
esta característica de la obra buarqueana, una de las que va a suscitar mayor interés y
Si bien el samba de los años treinta ha sido señalado como la mayor referencia
mineiro, baiano - abogando por una identidad brasilera más que localista: “Soy un artista
compositores como Dorival Caymmi, Ary Barroso, Luis Gonzaga, Pixinginha y Erasmo Carlos,
poetas letristas como Vinicius de Moraes y Orestes Barbosa, instrumentistas como Nelson
Cavaquinho y Jackson do Pandeiro y sambistas como Noel Rosa y Cartola. Sin embargo, es
Tom Jobim, uno de los creadores de la Bossa Nova a quien señala como su gran maestro, su
maestro soberano:
8
“Sou um artista brasileiro”
26
Vou na estrada há muitos anos Me voy en el camino hace muchos años
Sou um artista brasileiro Yo soy un artista brasileño
Resulta un tanto paradójico sin embargo, que Buarque, a quien la crítica le atribuyó en sus
inicios el rol de revindicar el samba ante los influjos modernizantes del bossa nova, reconozca
habla de Jobim como “maestro” lo hace de forma literal. Buarque afirma que después de
escuchar “Chega de Saudade” su forma de concebir la música cambiaría para siempre y que
desde entonces su sueño era: "cantar como João Gilberto, hacer música como Tom Jobim y
letras como Vinícius de Moraes"9. Por otra parte, uno de los primeros trabajos colaborativos
o parcerías que hace Buarque es precisamente con Tom Jobim, con quien reconoce haber
(Buarque 2005).
artistas contemporáneos suyos con quienes comparte la escena musical, entre los que se
cuentan intérpretes como Roberto Carlos, Gal Costa, Maria Bethania, Nara Leão, Rita Lee y
Clara Nunes y algunos compositores de su generación como Hermeto Pascoal, Edu Lobo,
Jorge Ben Jor, Milton Nascimento (Bituca), Caetano Veloso y Gilberto Gil. En torno a estos
dos últimos, creadores del Tropicalismo, la prensa y critica de la época tejería una polémica,
9
“cantar como João Gilberto, fazer música como Tom Jobim e letra como Vinícius de Moraes “
27
enfrentando el naciente movimiento con la obra de Buarque durante la segunda mitad de
los sesenta.
artística, musical como literaria, podemos apreciar diversas apelaciones a obras clásicas
universales. Sin embargo, sus principales referentes pertenecen a Brasil. Así también lo
samba de los años treinta, también encontramos la poesía de Caymmi, el estilo interpretativo
de João Gilberto y las armonías de Tom Jobim. Chico, más que un defensor de la tradición
10
“[…]O Brasil é capaz de produzir um Chico Buarque: todas as nossas fantasias de autodesqualificação se
anulam. Seu talento, seu rigor, sua elegância, sua discrição são tesouro nosso. […] O samba nos cinejornais de
futebol do Canal 100, Antônio Brasileiro, o Bruxo de Juazeiro, Vinicius, Clarice, Oscar, Rosa, Pelé, Tostão, Cabral,
tudo o que representou reviravolta para nossa geração foi captado por Chico e transformado em coloquialismo
sem esforço. Vimos melhor e com mais calma o quanto já tínhamos Noel, Haroldo Barbosa, Caymmi, Wilson
Batista, Ary, Sinhô, Herivelto. […] Chico está em tudo. Tudo está na dicção límpida de Chico. Quando o mundo
se apaixonar totalmente pelo que ele faz, terá finalmente visto o Brasil”.
28
1.3. Chico y la escena musical
A partir del éxito de la canción “A Banda” en la segunda versión del Festival da Música
Popular Brasileira (1966), promovido por TV Record de São Paulo, Chico Buarque es llamado
por el escritor y columnista Millôr Fernandes: "…única unanimidad nacional". Sin embargo,
esta afirmación estaba lejos de ser cierta. Sus ojos verdes, su apariencia de niño bueno y
debía lidiar con diversas tendencias modernas como la popularización de los instrumentos
se reunían con otros músicos de su generación para proponer una renovación musical más
allá del nacionalismo y las consignas de protesta y también una forma de organización que
les permitiese lidiar con la industria de la música. Los medios de comunicación de la época
que representaban Chico Buarque y el naciente Tropicalismo. Si bien la tradición crítica del
contribuyeron a perpetuar ciertos mitos que crearon sus adeptos y defensores de la apertura
hacia el pop como un sinónimo de línea evolutiva de la música brasilera. Entre los principales
mitos negativos eran que la MPB era una música nacionalista de izquierda, que privilegiaba
29
El Tropicalismo incorpora materiales sonoros y formas que la MPB consideraba de
mal gusto e interpretaba como señal de alienación, como el uso de los instrumentos
eléctricos ausentes en los festivales realizados por TV Record hasta la participación de Gil y
modernidad y la ruptura, negando un “gusto medio”. Chico Buarque y su música que refería
al samba, las marchinhas y otros ritmos tradicionales, representaba de alguna forma, una
Augusto de Campos (159), uno de los creadores de la poesía concreta y uno de los
escritores hecha por Ezra Pound, señala que la figura de Buarque se enmarca en la de un
joven "maestro", es decir, aquel que no ha propuesto nada nuevo (a diferencia de los
inventores cuya obra es el primer ejemplo de un proceso creativo que rompe con las
convenciones), pero que sin embargo combina características de tales procesos creativos y
los utilizan tan bien o mejor que los mismos inventores. Inventores son para Campos,
Caetano y Gil, cuya creación artística musical sí propone una ruptura con lo establecido. Pues
ellos asumieron el “riesgo y el coraje de la aventura” como Tom Jobim y João Gilberto en su
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Gilberto, Chico rindió homenaje a la redundancia. La Familia Musical Tradicional
celebra apresuradamente otro éternel retour, otro ‘retorno a las fuentes’ (Id. 168).11
Declaraciones como la de Campos logran reflejar las tensiones existentes en la época entre
Durante la tercera versión del Festival Internacional da Canción (FIC) en el año 1968,
promovido por Rede Globo TV, Caetano y Gil se presentan acompañados por Os Mutantes y
los Beat Boys, recibiendo pifias y agresiones del público, quienes en señal de desaprobación
terminan por dar la espalda a los artistas. Caetano responde con un acalorado discurso en
donde critica a la juventud y se señala a sí mismo junto a Gil como innovadores: "[...] Pero yo
y Gil ya abrimos el camino. [...] Nosotros, yo y él [Gil], tuvimos la valentía de entrar en todas
Chico Buarque en tanto, frente las constantes críticas como la de Augusto de Campos,
por la continua alusión al samba en su obra y el escándalo reciente del FIC, responde en
diciembre de 1968 en una columna en el diario Última Hora titulada “Ni toda locura es genial
Es cierto que se debe romper con las estructuras. Pero la música brasileña, a diferencia
de otras artes, ya lleva en sí los elementos de renovación. No se trata de defender la
tradición, la familia o la propiedad de nadie. Pero fue con el samba que João Gilberto
rompió las estructuras de nuestra canción. Y si el rompimiento no fue universal, la
11
“A Banda de Chico Buarque foi uma ducha de serenidade, um tranqüilizante para o equilíbrio nervoso da
nossa música. Mas, na sua indecisão entre Noel e João Gilberto, Chico pagou tributo à redundância. A
Tradicional Família Musical festejou, precipitadamente, mais um éternel retour, mais um ‘retorno às fontes’".
12
“…Mas eu e Gil já abrimos o caminho. […] Nós, eu e ele [Gil], tivemos coragem de entrar em todas as
estruturas e sair de todas.”
13
“Nem toda loucura é genial, como nem toda lucidez é velha.”
31
culpa es del brasilero, que no tiene vocación de exportar nada. [...] Y no necesita
mucho tiempo para darse cuenta de que no toda la locura es genial, como no toda
lucidez es vieja.14
Para terminar con la polémica creada en torno a una supuesta enemistad, Chico Buarque y
Tarik da Souza (129), diría más tarde que Chico se transforma paradojalmente en un
haciendo uso de los instrumentos eléctricos. Los componentes musicales de su obra podían
Tal como lo demuestran los diversos homenajes con motivo de sus setenta años,
transformándolo en uno de sus principales referentes artísticos. Chico César (2004) afirma:
Nos encanta Chico Buarque, porque él es una denuncia de nuestros defectos. [...] Y
nuestro esfuerzo patético en la búsqueda de sus cualidades parece mostrar más,
descubrir de una vez nuestra debilidad. Somos seres mal hechos, gente ruin y sin
14
“É certo que se deve romper com as estruturas. Mas a música brasileira, ao contrário de outras artes, já
traz dentro de si os elementos de renovação. Não se trata de defender a tradição, família ou propriedade de
ninguém. Mas foi com o samba que João Gilberto rompeu as estruturas da nossa canção. E se o rompimento
não foi universal, culpa é do brasileiro, que não tem vocação pra exportar coisa alguma.[…] E não precisa dar
muito tempo para se perceber que nem toda loucura é genial, como nem toda lucidez é velha”.
32
belleza. Sin carácter, sin firmeza en la defensa de las ideas, de las mujeres, de las
personas necesitadas.15
Es esta función social de la música en defensa de las ideas y los necesitados una de las
resistencia durante la dictadura. Desde entonces Chico será el principal blanco del Servicio
poder de decidir lo que podía y no podía ser escuchado por el pueblo brasileño. Esta
persecución constante obliga al compositor a buscar diversos medios para burlar la censura.
Meneses (2002 49), sostiene: “Es importante señalar, además, que, en la mayoría de los
casos, la crítica se hace a través de un lenguaje que no podría ser más indirecto - el campo
término driblar, tomado del deporte y principalmente del fútbol, significa esquivar al
adversario en la medida que se avanza. Del mismo modo, Buarque esquiva el constante
seudónimos. Con Buarque entre sus filas, la MPB se transforma en un movimiento ideológico
compromiso político. Esta brasilidad es distinta a la del ufanismo que aparece en temas como
15
“Nós amamos Chico Buarque porque ele é uma denuncia de nossas imperfeições. [...] E nosso esforco
patético em perseguir suas qualidades parece mostrar mais ainda, desnudar de uma vez nossa fraqueza. Somos
uns escrotos, gente ruim e sem beleza. Sem caráter, sem firmeza na defesa das idéias, das mulheres, das gentes
necessitadas”.
16
“Importa ressaltar, aliás, que, na maior parte dos casos, a crítica se faz nele através de uma linguagem que
nao poderia ser mais indireta - o campo privilegiado da ironia, da sátira, paródia, alegoría”.
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“Aquarela do Brasil” de Ary Barroso, que canta a las bellezas naturales o humanas del país,
social. En esta nueva brasilidad desde la conciencia social convergen la cultura legitimada y
la cultura popular.
del Carnaval de Río de Janeiro, con un multitudinario homenaje a Chico Buarque basado en
el samba enredo “Chico da Mangueira”, de los paulistas Nelson Dalla Rosa, Carlinhos das
Camisas, Nelson Csipai e Villas Boas. En él, el artista es descrito con diversos nombres y
adjetivos. Algunos de ellos están directamente relacionados con su oficio de cantor, sabiá
(ave), ángel, querubín, iluminado, genio, poeta y otros que parecen adoptar una
diversos artistas y amigos de Buarque, muchos de ellos sus intérpretes y “parceiros”, entre
los que se encuentran María Bethania, João Nogueira, Nana Caymmi, Ney Matogrosso, Edu
34
Lobo y Zizi Possi. Otros como Gilberto Gil y Beth Carvalho desfilan bailando en el piso. A
corsarios, piratas. En el último carro, junto a la directiva de la escuela, Chico Buarque saluda
y reconocimiento del pueblo brasilero frente a su obra, pues como señala Eric Nepomuceno
(1989 18), Chico Buarque de una forma u otra se tornó retratista y portavoz de las
Sin importar el soporte estético, canción, texto teatral o romance, el principal eco unificador
describe a sí mismo como “um artista brasilero”. Sin embargo, su nombre ha trascendido las
Chico es de Brasil, su música se resignifica a través del tiempo y sin considerar fronteras, le
17
E jamais conseguiu, se é que alguma vez quis, aplacar o sentimento, nítido e cristalino, de indignação que
explode em parte considerável de seu trabalho, da mesma forma que em outra parte flutua, intocavel, sua
ternura pelos humilhados e abandonados do destino.
35
1.5. Voces y alteridad en las canciones de Chico Buarque
habían sido abordadas desde una perspectiva conservadora y estereotipada o bien, habían
aparecen en la obra buarqueana, Fernandes (2004 37) señala que sus textos no son
circunstanciales, sino existenciales, por lo tanto, universales al hombre del siglo XX.
épocas. Por otra parte, en el ámbito académico es precisamente el modo en que Buarque
aborda la alteridad uno de los aspectos que ha despertado mayor interés en su obra.
Para comprender mejor como se construye esta idea de alteridad en la obra de Chico
Buarque, nos remitiremos al concepto de alteridad según Emmanuel Lévinas (1995). Este
puede ser entendido como aquello que no soy Yo, aquello anterior gracias a lo cual Yo soy
quien soy, un exterior constitutivo. Pero esa alteridad, ese otro no es “otro yo” -igual a mí-,
sino que tiene distintos intereses, costumbres o tradiciones. Esta relación con la alteridad es
para Lévinas exclusivamente ética, en el sentido de que el Otro me afecta y me importa, por
36
lo que me exige que me encargue de él, situándome en su lugar, tomando en cuenta una
perspectiva ajena. Pareciera que esta apreciación del otro, solidaria, pero por sobre todo
Maria Helena Sansão Fontes (11) enfatiza esta idea de alteridad al proponer una
“yo poeta” a estos “otros desplazados”. El escritor Suênio Campos de Lucena (117) reconoce
además, a Chico Buarque como un hijo de la elite intelectual de Brasil, que sin embargo
nunca tuvo un compromiso de clase. Efectivamente, desde ese lugar social privilegiado, el
universo de figuras marginadas y excluidas, pero también de todos aquellos sujetos que por
otro es apoyada por Meneses, que sugiere que la formación de Chico en un ambiente político
populista influyó en su obra (2002 18). Buarque crece durante el gobierno populista de
Getulio Vargas y es un adolescente cuando Juscelino Kubitschek llega al gobierno con todas
sus propuestas de desarrollo nacional, tales como la industrialización del país, numerosas
obras públicas y la fundación de Brasilia. Por otra parte, Buarque entra a la universidad en
1963, una época de gran fermentación ideológica y social en que se generan diversos
movimientos populares que serán sucesivamente aplacados por la dictadura militar a partir
37
Buarque solidariza con diversos personajes marginales y populares dentro de su obra puede
ser comprendida al considerar que es hijo de uno de los historiadores que mejor representa
y por centrar su atención en los dominados más que en la clase dominante (Ib. 19).
diferencia de otros compositores de su generación como Caetano Veloso, Gilberto Gil, João
Bosco o Milton Nascimento y pese a esta innegable filiación a una elite intelectual brasilera
señalada por Lucena, declara: “No soy un intelectual, yo no gusto de ese insulto [...] Yo soy
un músico popular, soy un artista popular y me gusta pertenecer a la cultura popular, yo soy
persona como un observador distante las diversas problemáticas sociales, sino que se
incorpora a esa alteridad asumiendo la perspectiva del otro no solo individualmente, sino
18
“Eu não sou um intelectual, eu não gozo de esse insulto [...] Eu sou um músico popular, eu sou um artista
popular e gosto de pertenecer a cultura popular, faço que sou um artista popular me orgulho de isso”.
19
“Busca o sentido da vida humana em que a sua própia está inserida, descrevendo a trajetória de um eu lírico
integrado na problemática humano-existencial e não diferençado em sua individualidade, daí que o sujeito do
discurso esteja coletivizado no "a gente" e não particularizado no "eu", e o destinatario seja "minha" gente e
não "me", qualificando-se, dessa forma, como porta-voz da sua comunidade”.
38
Esta forma en que Buarque se incorpora a la alteridad ha convertido sus canciones en
verdaderas alegorías nacionales y su condición de disidencia política en los años ’60 y ‘70 le
ha valido ser llamado “el Bob Dylan brasilero”.20 Para Ligia Vieira Cesar (2007), ambos
vencidos más que la de los vencedores, coherente con el pensamiento radical que señalara
Meneses.
Carnaval”, “Tem Mais Samba”, “A Rita”, “Amanhã, Ninguém Sabe”, “Você Não Ouviu”, “Olê,
Olá” y “Meu Refrão”. En canciones como “A Banda”, “Juca” y “Sonho de um Carnaval” retrata
fiesta. Por otra parte, en esta primera producción también encontramos canciones que
tematizan a la mujer, como en “A Rita”, “Ela y sua Janela” y “Madalena foi pro Mar”. Pero
sin duda, es en la canción “Pedro Pedreiro”, donde alcanza mayor madurez estética y se
observa un modo menos romántico y más crítico de abordar a alteridad. Esta tendencia se
39
Una de las principales influencias en la obra de Chico Buarque es el samba urbano de
los años 30, expresión asociada en su origen a estratos sociales bajos y marginados. Podría
pensarse entonces, que esta integración a un yo colectivo pudo darse de un modo forzado al
considerar dicha filiación como elemento fundamental del género determinando así, la
forma en que el compositor aborda esta alteridad. Sin embargo, buscando en su propia obra
podemos encontrar algunas respuestas que refieren más bien, a inquietudes de carácter
existencial en este interés por explorar estas alteridades. Esto se observa claramente en la
canción “O que Será (A flor da terra)” (1976), que deja al descubierto el afán del compositor
por descubrir el misterio que mueve a quienes disfrutan la vida - amantes, poetas delirantes,
profetas embriagados, bandidos y meretrices-, así como de los que la padecen, desvalidos,
infelices y esta peregrinación de mutilados que viene a engrosarse con otros mutilados no
Esta tematización del sujeto marginado aparece en lo que Meneses (2002), llamó “vertiente
crítica”, una de las tres áreas temáticas de la producción artística de Buarque, que estaría
40
1.5.2. ¿Innovación o tradición?
El samba de morro de los años 30 aborda diversos temas relativos a la vida en las
favelas, mujeres de mal vivir o el malandraje y su astucia, a diferencia del samba canção
asociado a lo urbano y los músicos blancos, que además contaban con una formación musical
que les permitía expresar mejor, subjetividades como el sufrimiento y dolor asociados a los
temas amorosos (Amaral 2010 64). De este modo podemos observar en sambistas de los
años 30 como Wilson Batista, Ismael Silva, Cartola o el mismo Noel Rosa, la tematización
sistemática del sujeto desplazado que se atribuye el samba como un valor de esta
marginalidad. Conocido es el duelo que realizaron Wilson Batista y Noel Rosa que enfrenta
la figura del sambista do morro con el sambista da vila, visibilizando la tensión social que
existía en la época y que quedó registrado en el LP Polêmica grabado por Odeon en 1956.
Ismael Silva también retrata al malandro en canciones como “Que será de mim” o “Amor de
Malandro” y es quien compone uno de los primeros sambas con contenido social, “Não Há”,
a la que Buarque aludiría más tarde en su “Pedro Pedreiro”. Chico Buarque dirá: “Ismael es
la mayor influencia que yo tengo en toda mi obra […] es mi verdadero padre musical” 21 .
Por otro lado, la tematización de la mujer en el samba de los años 30 excede el ámbito
21
“Ismael é a maior influência que eu tenho em toda a minha obra (...) é o meu verdadeiro pai musical”
Citado en http://revistapiaui.estadao.com.br/blogs/questoes-musicais/geral/o-grande-ismael-silva
41
desde entonces una imagen femenina transgresora. Chico Buarque entonces, no solo
Sin embargo, aunque esta tematización del sujeto marginado o transgresor no sea
nueva, esta no había sido abordada como la alteridad planteada por Lévinas, pues estos
propias vivencias y la de sus pares las que ilustraban en sus letras. Por otra parte, Noel Rosa,
urbano, participa de esta escena musical marginal como parte de su propio desarrollo
creativo, sin embargo asume una posición crítica ante las apologías del malandro y la excesiva
autoreferencia del samba del morro, que contribuyen a crear una imagen negativa que
dedicado a Wilson Baptista: “… sácate del pescuezo el pañuelo blanco, compra zapato y
corbata, deja fuera esa navaja que te entorpece […] Malandro es palabra derrotista que solo
sirve para tirar todo el valor del sambista…”22 A partir de los años ‘30 la creciente
focalizándose en subjetividades más universales como el amor, influido en gran parte por la
22
“…tira do pescoço o lenço branco, compra sapato e gravata, joga fora esta navalha que te atrapalha […]
Malandro é palavra derrotista que só serve pra tirar todo o valor do sambista…”.
42
Por otra parte, con el surgimiento del bossa nova a fines de los años ’50, se produce
una reformulación estética del samba carioca, que afecta no solo aspectos musicales sino
también sus textos. Los asuntos cotidianos o sociales van a quedar fuera para dar paso a
temas ligados al amor en primer lugar, para luego exaltar las bondades de la geografía
brasilera, el mar, la playa, la belleza natural, etc. (Amaral 64,65). La vuelta al samba,
propuesta por Chico Buarque al retomar la vertiente tradicional musical y temática adquiere
o el sambista son parte de esta reivindicación, sin embargo, Buarque amplía y diversifica esta
representaciones de la alteridad son abordadas con respeto y solidaridad y sobre todo, sin
emitir juicios de valor. Además, como ya nos hemos referido anteriormente, las
composiciones de Chico Buarque van a alcanzar una mayor sofisticación tanto en el plano
musical como en el literario. A diferencia del samba de los años ’30, sus textos no son literales
sino poéticos. Silva (2004), dirá que la lírica buarqueana se inscribe en la elaboración
relación al acto creador. Lejos de entorpecer la línea evolutiva de la música popular brasilera
como plantearan algunos23 lo que hace Buarque es revitalizar el samba, actualizando sus
23
Diversas polémicas generadas a partir del movimiento tropicalista que tuvieron eco en algunos críticos
literarios y periodistas. Ver Augusto de Campos. (1978). Balanço da bossa e outras bossas. São Paulo:
Perspectiva; Caetano Veloso. (2004). Verdad Tropical. Música y revolución en Brasil (1° edición.). Barcelona:
Salamandra.
43
1.5.3. Evolución en la figura de la alteridad
presentes desde un comienzo en la obra de Chico Buarque, podemos observar en ella una
evolución. Este desarrollo puede ser observado especialmente a partir de las figuras del
malandro y la mujer. En los primeros discos una de las figuras más recurrentes en su obra
es la del malandro, un personaje marginal que vive al borde de la ley, con un código moral
particular, pero que sin embargo es portador de una parte fundamental de la cultura, el
samba. Por extensión entonces, aparece fuertemente la figura del músico sambista, a quien
atributos de esta marginalidad. La obra buarqueana revindica el valor del samba y por otra
inevitablemente a la figura del malandro que es quien carga la tradición que permite a un
pueblo oprimido sobreponerse a las vicisitudes de la vida, sin embargo este pueblo se
compone de múltiples sujetos que comienzan a aparecer en las voces buarqueanas a medida
A partir del malandro y el sambista comienzan a surgir otros personajes que, a pesar
de estar dentro del sistema, -y a diferencia del malandro que siempre busca burlarlo- han
Aparecen entonces, otros personajes como los obreros (“Pedro Pedrero”, “Construcción”,
“Deus lhe Pague”), niños de la calle (“Pivete”, “Brejo da Cruz”, “O meu Guri”) o funcionarios
44
oficinistas (“Ela e Dançarina”). Precisamente es el disco Construção, lanzado en 1971 luego
de su autoexilio en Italia, el que marca una escisión respecto del universo de sujetos que
personajes.
Por otra parte, la figura de la mujer, también presente desde sus primeras
conservadora- de la mujer tras la ventana que observa pasiva sin participar del movimiento
de la vida. Dos años más tarde, aparece la primera figura femenina transgresora en “Ela
Desatinou” que nos revela como la mujer se toma el espacio público y sigue bailando aun
cuando la fiesta ya ha terminado. Chico Buarque aborda esta alteridad femenina desde tres
asumiendo en primera persona su perspectiva. Es interesante que Fontes (11) señale que la
conservadora sin embargo, a partir de su cuarto disco Chico Buarque de Hollanda - vol.3 de
1968, van a aparecer numerosas representaciones de femineidad que están fuera de este
45
orden social. Estas nuevas representaciones femeninas que se revelan en las canciones de
dejando entrever un cambio social que va a tomar mayor relevancia en Brasil en la década
del ’70.
la película Quando o carnaval chegar de Cacá Diegues. Esta idea de alteridad parte en la
concepción levinasiana del Otro como un sujeto distinto de mí con el cual se tiene una
valida la diversidad de sujetos y sus experiencias. En este colectivo, los desplazados son
grupal: el pueblo. Mambembe es un adjetivo que se utiliza para nombrar aquello de menor
[…] […]
Poeta, palhaço, pirata, corisco, errante judeu Poeta, payaso, pirata, corisco, errante, judío
46
Este colectivo desplazado surge metafóricamente del submundo -desde debajo de los
puentes, debajo de la tierra- para empoderarse, apropiándose del espacio y la vida pública:
“Usted va a saber de mi”; “Voy a hacer mi festival”; “ese mundo es todo mío” 24. Es dentro
de este colectivo fortalecido bajo la identidad de pueblo, que Chico Buarque se instala para
revelar las experiencias de diversos sujetos que lo conforman, no como un vocero, sino como
24
“Você vai saber de mim”; “Vou fazer meu festival”; “E esse mundo é todo meu”
25
“Na boca do povo, cantando”
47
Capítulo 2: La perspectiva femenina en las canciones de Chico Buarque
en la música popular continúan siendo demasiado restringidas. Como advirtió Virginia Woolf
(28), hace ya casi un siglo, parece ser que las mujeres son leídas únicamente a través de su
relación con el otro sexo, a partir del amor como único intérprete posible, ignorando otros
tantos ámbitos en los que se desenvuelven. Probablemente, esta sea una de las razones por
contexto, la escritura de Chico Buarque adquiere gran relevancia al incorporar otras facetas
bien, interpelándola directamente; sin embargo, lo que más ha llamado la atención son
muchas cantoras, por lo tanto, no era una práctica aislada (De Oliveira). Su primera canción
escrita en femenino fue "Com Açúcar, Com Afeto", a pedido de Nara Leão. A partir de
48
Con el objetivo de ilustrar y describir cómo ha sido abordada la figura de la mujer por
canciones a partir de dos excelentes publicaciones escritas desde el ámbito de los estudios
arquetipos clásicos de femineidad, para centrarme luego en aquellas canciones que están
escritas desde la perspectiva de la mujer. Aunque la canción debe ser concebida como una
unidad música/texto, los estudios sobre la figura femenina en canciones de Chico Buarque
han dejado fuera el aspecto musical, es por eso que mi objetivo principal es explorar de qué
Para esto, he considerado como modelo de análisis algunos trabajos sobre música
popular, como el de Sheila Whiteley (2000), sobre Joni Mitchell y el de Nadine Hubbs (2014),
sobre Morrissey, que realizan una revisión música/texto, tomando como principal elemento
de análisis el “contorno melódico”, la forma y algunos aspectos armónicos. Para este análisis
he considerado y transcrito las melodías de la primera versión grabada de cada canción, con
el cifrado armónico. Algunas de las canciones analizadas forman parte de obras mayores
como teatro o cine, sin embargo, han tenido amplia difusión a través de diversas grabaciones
realizadas por otros intérpretes o por el mismo Chico Buarque. La performance como
49
2.1 La figura femenina en canciones de Chico Buarque
desde esta misma perspectiva literaria, con ayuda del psicoanálisis y la sociología, que Adélia
Bezerra de Meneses, realiza un análisis temático de los textos de las canciones en su libro
estereotipo conservador que coexisten con los arquetipos de femineidad más clásicos.
Rinaldo de Fernandes, reunirá en el año 2013, una serie de artículos periodísticos y ensayos
académicos bajo el nombre de Chico Buarque - o Poeta das Mulheres, dos Desvalidos e dos
Perseguidos, en donde la mujer se levanta como una figura más en este colectivo marginado.
“Cecilia”, “Bárbara”, “Ana de Amsterdam”, “[Acalanto para] Helena”, “Beatriz”, “[Não fala
de] Maria”, “Cecilia”, “Geni [e o Zepelim]”, “Januaria”, “Joana [Francesa]”, “Lola”, “Luisa”,
“Madalena [foi pro Mar]”, “Renata María”, “Cristina”, “[Tango de] Nancy”, “Tereza
[Tristeza]”, “[A historia de] Lily Braun”, “Nina”. Fontes (73), interpreta este uso de nombres
propios femeninos como una forma de homenajear a la mujer. Esta observación puede ser
50
confirmada al observar que, en contraste, en aquellas canciones referidas a sujetos
Fontes, actúan como una forma de individualizar diversas representaciones femeninas por
Atenas”, “Ela e sua Janela”, “Ela é Dançarina”, “Ela Faz Cinema”, “A Violeira”, “Umas e
Outras”, “Essa Moça tá Diferente”, “Ela Desatinou”, “Deixe a Menina”, entre muchas otras.
Y como si no bastase, encontramos otras tantas canciones que se refieren a la mujer desde
amoroso y en pocas ocasiones como emisora de un mensaje que revele rasgos específicos y
específicamente de femineidad.
al sujeto socialmente marginado. Es desde esta exclusión social que surge la figura de la
Esta característica es destacada por Fontes al señalar que en gran parte de la obra del artista
51
se constata la preocupación por temas sociales, denunciando la realidad de los sectores
de la vida, la soledad y la falta de afecto. Años más tarde, el compositor abordará desde
La figura de la lesbiana por su parte, aparece por primera vez en el repertorio del
artista en la obra Calabar (1972), con la canción “Bárbara” dejando al descubierto el drama
del amor prohibido, que aun consciente de la sanción social sucumbe ante la posibilidad del
26
“Também a mulher é considerada em sua porção marginal e transgresora de um sistema social de valores
preestablecidos”.
52
estrofas B en tanto, confieren el tenor erótico a través de expresiones que buscan reflejar la
las dos versiones grabadas por Chico Buarque -una en estudio en 1972 y otra en vivo junto a
Caetano Veloso en 1973-, en donde la censura de la época silencia el final del verso donde
este amor lésbico queda en evidencia. Esta figura transgresora volverá a aparecer en 1980
delicadeza de una relación lésbica. Las figuras femeninas son representadas por los
elementos “mar” y “luna” que sostienen una atracción natural, pero que sin embargo
transgresor: “de aquella ciudad/ distante del mar”; “en aquella ciudad/ que no tiene luz de
luna”27. La sanción social se evidencia de manera literal: “Amaban el amor prohibido/ hoy ya
es sabido/ todo el mundo cuenta/ que una andaba tonta/ grávida de luna/ y otra andaba
desnuda, ávida de mar”28. El elemento agua, al que el texto alude en repetidas ocasiones,
actúa como símbolo de vida y transformación llevando a las protagonistas lejos de los
Es interesante observar, que ambas figuras femeninas propuestas por Fontes como
a reprimir la sexualidad de las mujeres y transformarla en un tabú. Es por esto que las
27
“daquela cidade/ distante do mar”; “naquela cidade/ que não tem luar””
28
“Amavam o amor proibido/ pois hoje é sabido/ todo mundo conta/ Que uma andava tonta/grávida de lua/ E
outra andava nua/ávida de mar”
53
erotismo y sobretodo, el poder de la mujer sobre su propio cuerpo, se muestran como
ocupar el espacio público, exponer y disponer de su cuerpo para satisfacción personal como
ocurre en “Ela Desatinou” (1968) y “Deixe a Menina” (1980) o por necesidad como se
observa en “Ela é Dançarina” (1981), en donde además del espacio público, la mujer participa
Además de los dos topos transgresores propuestos por Fontes, es posible identificar
modo su relación con el otro sexo. Estas figuras femeninas se vuelven transgresoras a través
En las canciones “A Rosa” (1979), “Ela Faz Cinema” (2006) o “Folhetim” (1978),
encontramos la figura femenina que ejerce poder sobre el hombre a través de la astucia y
Medida” (1979) aparece la figura femenina desafiante y segura de sí misma, cuya forma de
capaz de identificar las dificultades y medir los riesgos, a diferencia del hombre, que se
54
Las figuras femeninas presentes en estas canciones, aparecen como transgresoras
pues problematizan las convenciones tradicionales del género. En la mayoría de ellas, parte
de la acción se desarrolla en la calle y fuera del control masculino. En todos los casos, la mujer
de una visión sociológica y psicoanalítica. Describe dos tópicos presentes en su obra: la mujer
su función como defensora de la vida ante la violencia, y por otra parte, el lugar que ocupa
en la esfera social. De Meneses propone como ejemplo de mujer prometeica aquella que
aparece en la canción “Mulheres de Atenas” en donde se aprecia a la mujer, que al igual que
los esclavos, está fuera del orden social y participación política (52). La exclusión de las
Tal como lo plantea Meneses, diversas figuras femeninas están construidas en torno
al espacio doméstico del hogar y sus quehaceres, como podemos observar en canciones
masculina, o en la propia voz femenina en “Com Açúcar, com Afeto” (1966) o “Biscate”
(1993). Lo que Meneses no menciona sin embargo, es de qué modo la experiencia doméstica
55
legitimización social, la mujer transforma su rutina doméstica en única forma de
como gestos de amor y preocupación por el otro, mientras que la actividad referida al orden
principio del placer y la transgresión (Meneses 43). Es justamente aquí donde se produce
una ruptura del discurso habitual sobre la mujer. Meneses, comprende el concepto de
transgresión en un sentido mucho más amplio que Fontes, de modo que algunas figuras
“Podríamos, cuando mucho, hablar de una evolución en espiral, donde hay una expansión, y
se retoman los temas fundamentales” 29 (Meneses 96). Sin embargo, sí podemos observar
de la canción popular a los cambios sociales y la capacidad del autor para recogerlos.
29
“Poderíamos, quando muito, falar em evolução em espiral, em que há uma expansão, e uma retomada de
temas fulcrais”
56
Podemos ilustrar esta evolución en la actitud de la mujer observando tres episodios
(1966) o en “Carolina” (1967), en donde la mujer es retratada con una actitud pasiva, que se
fiesta y el samba. En los años siguientes, ese lugar de la mujer cambia radicalmente como
se observa en “Ela Desatinou” (1968) y “Essa Moça tá Diferente” (1969), en donde la mujer
a este cambio en la actitud femenina. Diez años más tarde, las canciones “Deixe a Menina”
(1980) y “Ela é Dançarina” (1981), dan cuenta del cambio social, pues el hablante lírico
etapas de su obra. Sin embargo, lo que resulta realmente interesante, es encontrar ambas
desde la perspectiva femenina en primera persona, que abordan dos de los arquetipos
57
por ejemplo, sin embargo, en el repertorio buarqueano se presentan como sujetos
convencionales.
amor incondicional, el refugio ante los infortunios y desilusiones de la vida. Así lo expresa,
por ejemplo, el tango “Madre hay una sola”30 en donde la figura materna aparece dentro del
universo femenino como la única mujer confiable: “…Besos y amores/ amistades, bellas
farsas/ y rosadas ilusiones/ en el mundo hay a montones/ por desgracia ¡Madre hay una sola!
...” Sin embargo, más allá de esta representación edípica de la relación madre/hijo, el
todo arquetipo, posee un lado positivo y otro negativo. Estas posibilidades de representación
del arquetipo de la madre son descritas por Carl Jung en Arquetipos e inconsciente colectivo:
30
“Madre hay una sola” (1930). Letra: José de la Vega. Música: Agustín Bardi.
58
En esta representación arquetípica de la madre, coexisten dos opuestos: la madre
A continuación, revisaré las tres únicas canciones de Chico Buarque que asumen la
“Angélica”, “Uma Canção Desnaturada” y “O meu Guri”. Las canciones “Angélica” y “O meu
Guri” abordan el duelo de la pérdida de un hijo desde dos perspectivas distintas que son
determinadas por las diferencias de clase social y las circunstancias particulares en que se
popular del arquetipo materno descrito por Jung -la madre terrible- que pone en tensión
aquellos gestos maternales que han sido “naturalizados” socialmente como lo normal o
correcto.
Inspirada por el caso de Zuzu Angel, conocida diseñadora de moda cuyo hijo fuera
materno, destacando acciones que revelan la intención de proteger al hijo y protestar por su
muerte. Con cuatro estrofas iguales, la canción “Angélica” opera conceptualmente como un
encontramos otra voz que la anima a compartir su experiencia. Esta voz aparece en los dos
primeros versos de cada estrofa, que se repiten casi idénticos: “Quien es esa mujer que canta
31
“Quem é essa mulher/ que canta sempre esse estribilho/lamento/arranjo/como dobra um sino”
59
entonces, que esta voz no constituye un personaje que se desarrolle durante la canción, sino
que cumple únicamente el rol del observador que interpela indirectamente a la protagonista
para que esta se pueda expresar. Por el contrario, las diversas respuestas y acciones de
y sus sentimientos. De este modo, la voz presente en los dos primeros versos puede
interpretarse como la voz del compositor, Chico Buarque, una voz masculina que realiza una
distintos:
clama justicia para su hijo, simbólicamente levanta la voz por otras víctimas de violaciones
de los derechos humanos. En ella observamos algunos de los aspectos más clásicos del
arquetipo propuesto por Jung, el rol instintivo y protector, que se ven ilustrados en lo que
60
Meneses reconoce como deseos y acciones propiamente maternales –cantar, mecer,
recordar, envolver,32- que nos hablan del cuidado y preservación de aquello que es valioso y
frágil (55). Meneses destaca también, cierta dimensión política: el hecho de cantar por aquel
que ya no puede hacerlo, supone una representación cuya función es la denuncia ante la
El hablante lírico pregunta reiteradamente por esta mujer que “canta” – en un acto
propiamente maternal -reiterando el mismo “estribillo, lamento, arreglo” 33. Sin embargo,
de cualquier forma cuidados al hijo perdido. Es en relación al hijo que esta madre se
identifica. De un modo instintivo sitúa las necesidades del hijo sobre las propias,
campana”34.
generalmente por grado conjunto, podemos observar ciertos aspectos que delimitan el
antecedente- se mantiene en la tonalidad de Do Mayor, con una tensión al final del primer
inicia en la última nota de la sección masculina y desciende para luego resolver no en Do,
sino en su relativa menor. Por otra parte, el uso de un bajo cromático descendente puede
32
“cantar, embalar, lembrar, agasalhar, cantar”
33
“estribilho, lamento, arranjo”
34
“como dobra um sino”
35
“mulher”
61
Podemos observar que antecedente y consecuente no son simétricos, aunque ambos hacen
permite tomar el tiempo necesario para expresar ese anhelo de proteger y preservar de
algún modo lo perdido. La melodía que desciende, bajo la última nota de la sección masculina
En esta misma línea del orden de lo trágico, como lo llama De Meneses (42),
madre quien demanda protección al mostrarse insegura y frágil. Pese a estar escrita hace
más de tres décadas, esta canción sigue siendo tremendamente actual y sus protagonistas
contemporáneo. En ella se relata la historia de una madre soltera cuyo propio desamparo y
62
La canción posee cuatro estrofas iguales –divididas en dos cuartetas- más un
Quando, seu moço, nasceu meu rebento Cuando, señor, nació mi retoño
Não era o momento dele rebentar No era buen momento para retoñar
Já foi nascendo com cara de fome Fue naciendo con cara de hambre
E eu não tinha nem nome pra lhe dar Y yo no tenía ni nombre para darle
Como fui levando, não sei lhe explicar Como me las arreglé, no le sé explicar
Fui assim levando ele a me levar Un poco guiando y dejándolo guiar
E na sua meninice En su niñez
ele um dia me disse que chegava lá El un día me dijo que iba a llegar
Olha aí, olha aí Míralo, míralo
observarse en el ritmo y carácter repetitivo de la melodía del primer verso como en una
especie de salmodia:
36
“seu moço”, como una expresión respetuosa hacia quien se dirige.
37
“seu moço”
63
Esta salmodia, adquiere mayor vehemencia en el segundo verso - “Ya fue naciendo con cara
la nota más alta de la tesitura, cuya tensión se ve aumentada al ser la primera nota “alterada”
de la armonía.
desplazamiento melódico más activo, sino en el contenido que enfatiza dos ideas centrales:
por un lado, señalar con amor y orgullo a su hijo en el comienzo de la canción, que se
38
“…Já foi nascendo com cara de fome/ e eu não tinha nem nome pra lhe dar…”
39
“ele chega”
64
Toda la historia parece estar resumida en la primera y última estrofa, mientras que
en la segunda y tercera, esta madre evoca diversos momentos de su vida junto a su hijo que
dejan ver como se comparten e invierten los roles del cuidado y protección maternal: “…Yo
lo consuelo a él, el me consuela/ lo pongo en mi regazo para que él me acune…” 40. Para
Fontes, la carencia afectiva y social logra disipar la distancia etaria nivelando a madre e hijo
(107). Esta nivelación y fusión de los personajes se deja ver no solo en las acciones que
realizan, sino también en la puntuación de los versos: “como salí adelante, no le se explicar/
fui así llevándolo dejándome llevar”41. Una ausencia intencional de la coma [fui assim levando
Por otro lado, se presenta cierta alienación de esta madre: “…rezo hasta que él llegue
a lo alto, esa ola de asaltos es un horror”42- que de algún modo permite anticipar el desenlace
de la historia. Ante la violencia de los hechos consumados, esta madre evidencia su fragilidad
y desamparo recordando la promesa de su hijo: “…en su niñez/ el un día me dijo que iba a
llegar/ y él llega”43. Una promesa que en la segunda y tercera estrofa cumple de manera
literal, pero que en esta última lo hace de una forma casi irónica:
40
“…Eu consolo ele, ele me consola/ boto ele no colo pra ele me ninar…”
41
“Como fui levando, não sei lhe explicar/ Fui assim levando ele a me levar”
42
“Rezo até ele chegar cá no alto/ essa onda de assaltos tá um horror…”
43
“…E na sua meninice/ ele um dia me disse que chegava lá/ e ele chega…”
65
Chega estampado, manchete, retrato Llega estampado, titular retrato
Com venda nos olhos, legenda e as iniciais Con venda en los ojos, subtítulo e iniciales
Eu não entendo essa gente, seu moço Yo no entiendo a esta gente, señor
Fazendo alvoroço demais Haciendo tanto alboroto
O guri no mato, acho que tá rindo El muchacho en el bosque, parece estar riendo
Acho que tá lindo de papo pro ar Yo lo veo tan lindo, como descansando
Desde o começo, eu não disse, seu moço Desde el comienzo no lo dije, señor
Ele disse que chegava lá Que él dijo que llegaría
cuarta estrofa. Cada una de ellas se divide en dos cuartetas. En la primera, la madre relata
personal y subjetiva. Los dos primeros versos de esta segunda cuarteta tienen igual melodía,
lo que sugiere cierta perplejidad de la madre, que al no lograr procesar la información que
posee, tampoco es capaz de producir una nueva variación melódica: “…como fui guiando, no
le se explicar/ un poco guiando dejándome guiar…”; “El muchacho en el bosque, parece estar
riendo/Yo lo veo tan lindo con la panza al aire”44. En la última estrofa la ingenuidad de esta
muerte: “…el muchacho en el bosque parece estar riendo/ yo lo veo tan lindo con la panza
estereotipos más o menos comunes y aceptados socialmente, no son las únicas formas
44
“…Como fui levando, não sei lhe explicar/ fui assim levando ele a me levar”; “O guri no mato, acho que tá
rindo/ Acho que tá lindo de papo pro ar”
45
“O guri no mato, acho que tá rindo/Acho que tá lindo de papo pro ar…”
66
posibles, tal como lo describe Jung. La transgresión en la imagen socialmente aceptada de
la madre se hace aún más evidente cuando se rompe el paradigma de lo maternal por
canciones anteriores, esta madre se dirige a una hija mujer. Contrariamente al instinto de
una serie de acciones crueles que contribuyen a dañarla, para terminar por fin declarando
su condición no deseada:
46
Para la versión paulista de Ópera do malandro, 1979 y en Ópera do Malandro, 1985.
67
Esta madre, en clara oposición al instinto de protección y preservación de la vida, expresa el
deseo de revertir el tiempo para tomar una serie de acciones crueles - “Y negarte el regazo;
ignorar tu llanto; dejarte arder en fiebre; quebrar tu muñeca; en el piso donde gateaste,
salpicar mil trozos de vidrio” 47- como una forma de castigar al ser que ya no puede controlar.
Fontes, interpreta esta actitud como la desesperación ante la pérdida luego de la súbita
fragilidad del ser humano ante la pérdida del otro, sino que deja ver además según Fontes,
los cuidados otorgados durante la infancia. Esta conciencia lleva a la madre a reconocer el
tiempo no vivido y las pérdidas personales que le ha significado: “Recuperar las noches,
Curuminha/ que pase en claro”; “Convertir el aceite en leche/ del pecho que marchitaste”;
47
“E eu te negar meu colo; Ignorar teu choro; Deixar-te arder em febre; Quebrar tua boneca; No chão que
engatinhaste, salpicar mil cacos de vidro”
48
“Recuperar as noites, curuminha/ que atravessei em claro”; “Tornar azeite o leite/ Do peito que mirraste”;
“Ignorar teu choro/ E só cuidar de mim”.
68
En los dos primeros versos nuevamente nos encontramos frente a una melodía que se mueve
insistentemente sobre una segunda menor. El ritmo retarda la fluidez del texto, como si este
se murmurara reteniendo la carga emocional contenida en él. Lo mismo ocurrirá en los dos
versos finales. Pese a la crudeza del texto que va en crescendo, en los versos 3, 4, 5 y 6, se
cuestionamiento que el que ella misma pudiese tener respecto de sus sentimientos y que se
expresa más en los gestos melódicos que en el texto mismo; sin embargo, la sanción social
aquella visión tradicional de maternidad que limita sus atributos a una sola dimensión del
69
Como podemos observar, la figura de la madre es abordada por Chico Buarque
además, características particulares que dan cuenta de una complejidad que permite
Tanto “Angélica” como “O meu Guri” hablan de una maternidad herida por la
violencia y la pérdida. Las mujeres que inspiran estas canciones provienen, sin embargo, de
sectores y realidades opuestas: una del mundo de la moda, la otra de la favela. Una pierde a
su hijo en una lucha legitimada contra el régimen dictatorial, la otra lo pierde como
por su hijo, la otra es débil, ingenua y consciente o inconscientemente insiste en ignorar las
ensayo Un cuarto propio, uno de los textos fundacionales de la crítica feminista, Virginia
Woolf señala que históricamente las mujeres han sido leídas a través de su relación con el
otro sexo, teniendo el amor como único intérprete (28). En este caso, si bien observamos
por ejemplo- podemos observar que la mirada del otro sexo sigue operando como
70
discurso femenino. Es a través del otro/masculino que la experiencia y el discurso femenino
sin embargo, pese a la empatía que nos produce el personaje, la ingenuidad, fragilidad e
características disidentes de esta construcción ideal de maternidad. Por otra parte, la figura
descrito por Jung. Esta imagen de la madre terrible, en su aspecto tenebroso, alude a la
no obstante, resulta útil observar a quienes constituyen la figura del hijo en cada uno de
estos casos. En “Angélica” y “O meu Guri”, la figura del hijo es masculina. La pérdida de
manifiesta en ambas canciones provocando la empatía del auditor con sus respectivos
dramas.
71
Por el contrario, en “Uma Canção Desnaturada”, estamos frente a una hija en vez de
un hijo: Curuminha. Es otra mujer la receptora del discurso y quien sufre el desprecio
femenina: “Afeitar tus cabellos/e ir exhibiéndote por los/bares”49. El quitarle el cabello -que
con la exposición pública, y que gana más peso al observar el sitio que escoge esta madre
para dicha exposición: los bares. El deseo de esta madre no es solo castigar a la hija, sino
menoscabarla ante los hombres. Nuevamente es el juicio masculino el que parece otorgar
Por otra parte, Adelia Bezerra de Meneses (2000), observa en la obra de Chico
Buarque dos tópicos que marcan la construcción de figuras femeninas: la mujer órfica y la
prometeica, el orden de la fiesta y lo trágico. Según este planteamiento, las tres canciones
analizadas pueden ser enmarcadas dentro del ámbito de lo trágico. En el caso de “Angélica”
se presenta según Meneses, una situación femenina límite que denuncia la injusticia y la
la muerte del hijo, “O meu Guri”, nos muestra la alienación femenina que no le permite
emociones señaladas por el compositor como antinaturales aparecen por si mismas como
violentas y la muerte no aparece de un modo literal, sino que lo hace de manera simbólica.
buarqueana, todas las experiencias maternales abordadas en primera persona por Buarque
49
“Raspar os teus cabelos/ e ir te exibindo pelos/ botequins”
72
pertenecen al ámbito de lo trágico, transformándose en experiencias de maternidad
En lo que respecta al ámbito musical, podemos observar que las melodías se mueven
en un ámbito estrecho y sin grandes saltos o intervalos que desestabilicen el discurso textual.
La ausencia de mayor información melódica nos centra en el contenido del texto, pero al
musicales. En el tango, por ejemplo, la figura de la prostituta -tan antigua como el inicio del
género- aparece marcada por una visión de la mujer denigrada en su condición moral. Así lo
podemos observar en tangos como “Flor de fango” (1919), “Margot” (1919), “Zorro gris”
(1921), “Mano a mano” (1920), o “Esta noche me emborracho” (1928) de Enrique Santos
cuándo no aguanto más/ al verla así, rajé,/ pa' no llorar…”. En el bolero en cambio, la
73
prostituta aparece como una figura paradigmática. Objeto de deseo del hombre, se presenta
misteriosa e inalcanzable por una parte y por otra, como víctima de un destino del que no
puede librarse. Así lo podemos observar en los boleros de Agustín Lara, “Pecadora”: “Por qué
te hizo el destino pecadora/ si no sabes vender el corazón”- o en “Te vendes”: “La vida, la
empatía, pero siempre desde la perspectiva del observador masculino como podemos
apreciar en “Flores Nocturnas” (1994) de Silvio Rodríguez, “Embajadora Del Sexo” (1995) de
Frank Delgado, “Una canción para la Magdalena” (1999) de Joaquín Sabina o la Una
excepción la constituye la canción de Manu Chao, “Me llaman calle” (2007), que plantea el
Sin embargo, casi cuatro décadas antes, Chico Buarque había sido pionero al abordar
la figura femenina en la canción “Umas e Outras” (1969), terminando por reconciliar ambas
a las que la suerte siempre separó/ se crucen por la misma calle/ mirándose con el mismo
dolor…”50. Años más tarde, escribirá una serie de canciones que abordan la figura de la
50
“…O acaso faz com que essas duas/ que a sorte sempre separou/ Se cruzem pela mesma rua/ Olhando-se
com a mesma dor…”
74
prostituta en primera persona para las obras teatrales Calabar: o Elogio da Traição (1973)
escrita en colaboración con Ruy Guerra, en la que encontramos “Ana de Amsterdam” y para
Opera do Malandro (1978), adaptación de la Opera de los tres centavos de Bertolt Brecht y
La ópera del mendigo de John Gay, en donde se encuentran “Viver do Amor”; “Folhetim”, “O
meu Amor” y “Las muchachas de Copacabana”. Si bien todas estas canciones están escritas
desde la perspectiva femenina, cada una de ellas trata el tema de la prostitución con un tono
prostituta.
donde la mujer es víctima de un sistema social desigual; en “Viver do Amor” vemos el oficio
elevado al nivel de una práctica sagrada. En “O meu Amor”, en cambio, podemos observar
reconociendo las virtudes de su amante. Estas canciones señalan situaciones distintas frente
a la prostitución, sin que sean necesariamente excluyentes una de la otra, sino más bien
“Ana de Amsterdam” fue compuesta en colaboración con Ruy Guerra para la obra
“Calabar: o Elogio da Traição” (1973). De forma binaria, con dos secciones fuertemente
ella una alusión explicita a la prostitución, Fontes advierte que el complemento adnominal
del título confiere el origen al nombre Ana, refiriéndose metonímicamente al meretricio que
es ejercido libremente por las mujeres en Ámsterdam (93). De este modo, el yo poético
75
adquiere el carácter de un colectivo y el nombre “Ana” se transforma en un sinónimo de
“prostituta”:
Sou Ana do dique e das docas Soy Ana del dique y los muelles
Da compra, da venda, da troca das pernas De la compra, la venta, el intercambio de piernas
Dos braços, das bocas, do lixo, De los brazos, de las bocas, de la basura, de los
dos bichos, das fichas animales, de las fichas
Sou Ana das loucas Soy Ana de las locas
Até amanhã Hasta mañana
Sou Ana, Soy Ana,
da cama, da cana, fulana, sacana De la cama, de la caña, fulana, bastarda
Sou Ana de Amsterdam Soy Ana de Ámsterdam
con su oficio mercantil que evidencia en el segundo verso: “…De la compra, la venta, el
intercambio de piernas…”51, sino que sugiere además, una promoción de él. La continua
En tonalidad menor, podemos observar un motivo rítmico repetido. Los tres primeros
51
“…Da compra, da venda, da troca das pernas…”
76
Este énfasis se acrecienta a partir del cuarto y quinto verso –que se repetirá igual en todas
las estrofas- llegando a la nota más aguda de la tesitura y al punto de mayor tensión. Si bien
continuación, el penúltimo verso -con sucesivos intervalos de cuarta justa- evoca rapidez y
promiscuidad: “De la cama, de la caña, fulana, bastarda”; “Del cabo, del raso, del rabo, de las
ratas”; “De las marcas, las hamacas, las vacas, el dinero” 52 . La aliteración y asonancia
como lo sugiere Fontes - “sou Ana de Amsterdam”-, pero termina en la tercera sostenida,
Una segunda sección, compuesta por cuatro versos en tonalidad mayor y tempo más
lento, nos remite a una dimensión íntima, en donde la protagonista revela sus ilusiones
frustradas:
52
“Da cama, da cana, fulana, sacana”; “Do cabo, do raso, do rabo, dos ratos”; “Das marcas, das macas, das
vacas, das pratas”
77
En frases de mayor simetría y movimientos por grado conjunto en un ámbito melódico
promiscuo de su condición - “soy Ana de cabo a teniente”; “soy Ana de veinte minutos” 55- y
por otro lado asumiendo con resignación su destino: “soy Ana de los dientes rechinando/ y
los ojos apretados”56. Las estrofas B en cambio, resguardan el espacio de lo privado en donde
puede confesar la ingenuidad de sus expectativas no cumplidas. El contraste entre esta mujer
espacio íntimo, deja en evidencia la naturaleza forzada de su condición que la denigra física
y moralmente.
Sin embargo, la prostitución puede ser asumida de distintas formas. Así lo podemos
observar en la canción “Viver do Amor” (1978), escrita para la pieza teatral Opera do
53
“eu cruzei um océano/na esperança de casar”
54
“…hoje sou carta marcada/ hoje sou jogo de azar…”
55
“sou Ana de cabo a tenente”; “sou Ana de vinte minutos”
56
“sou Ana dos dentes rangendo/ e dos olhos enxutos”
78
malandro. Como una versión extendida de la clásica forma canción del Tin Pan Alley (AABA’),
la canción “Viver do Amor” reconoce la prostitución como un trabajo legítimo que implica
Las dos primeras estrofas (A), redundan sobre la idea de una postergación personal en
beneficio del otro. El amor como fuente de sustento - “vivir del amor”; “ganar del amor”57-,
exige renunciar a las expectativas personales respecto del mismo. En este caso, la palabra
57
“viver do amor”; “ganhar do amor”
79
El texto, en un claro propósito de desestigmatizar el oficio de la prostituta, destaca la
exigencia en el plano doméstico contractual: “Hay que amar/sin amar/ sin placer/ y con
despertador/ como un funcionario”; “Es necesario hacerse cargo/y sangrar/ y sudar/ como
un trabajador”58. Este propósito es acentuado con la melodía ascendente del sexto verso,
ganando tensión que alcanza su punto máximo en el último verso para reiterar la formalidad
de su oficio de meretriz, alienante como como cualquier otro oficio de la vida moderna: como
en la dominante con séptima. Este final abierto invita a la repetición, como ocurre
En la sección del puente (B), la protagonista niega la existencia del amor idealizado y
lo ratifica con su propia experiencia. El amor, no es un sueño en donde crecen las ilusiones
y expectativas, sino un veneno que termina con ellas. De este modo, el verso que comienza
con el signo de un lamento adquiere un carácter épico con notas largas y repetidas. La
58
“Há que se amar/ sem amar/ sem prazer/ e com despertador/ como um funcionario”; “Há que apanhar/ e
sangrar/ e suar/ como um trabalhador”
80
inactividad melódica es compensada con el cromatismo del bajo, que se desplaza luego a la
En la última estrofa -variación de A- podemos observar el contraste entre los versos 1 y 3 con
el resto de los versos, que mantienen notas largas para acentuar los verbos
81
Finalmente, los dos últimos versos declaran la función mística y sagrada del oficio: iluminar
que tiene como fin la compasión y el altruismo. En esta especie de apología, la prostituta se
transforma en un mártir que asume su oficio como un acto compasivo, del que solo es capaz
Buarque en el año 1978 para la obra Ópera do Malandro, al estilo de “Love For Sale” -versión
extendida de la clásica canción del Tin Pan Alley de 64 compases-, escrita por Cole Porter
para el musical The New Yorkers estrenado en Broadway en 1930, “Folhetim” tiene la clásica
relación amorosa no es más que una rutina que le proporciona entretención y pequeños
popularidad en Brasil en la segunda mitad del siglo XIX, y que consiste en una suerte de
novela melodramática publicada por capítulos en los diarios, que captaba la atención del
lector con una narrativa ágil y el suspenso generado de un capítulo a otro. Si dentro del
de esas mujeres/ que solo dicen sí59), a diferencia de “Ana de Amsterdam” o “Viver do Amor”
sobrevivencia:
59
“sou dessas mulheres/que só dizem sim”
82
Se acaso me quiseres Si acaso me deseas
Sou dessas mulheres Soy de esas mujeres
Que só dizem sim que solo dicen sí
Por uma coisa à toa por cualquier cosa
Uma noitada boa una buena noche
Um cinema, um botequim una película, un bar
La protagonista se presenta sin rodeos como una mujer disponible, sin embargo, no
un bar” “60- y pequeños regalos - “una piedra falsa/un bom bom/o un corte satín”61-, lo que
revela que su disponibilidad no se debe a un fin lucrativo sino al deseo de satisfacer caprichos
y darse pequeños gustos. Esta mujer se muestra segura de sí misma y dispuesta a manipular
Los versos cortos señalan un modo de hablar escueto y directo que se deja ver
también en la melodía, que se mueve en forma oscilante, pero por grado conjunto. El énfasis
en el tercer verso - “que solo dicen sí”-, está dado por el tresillo de negras en notas repetidas
60
“uma noitada boa/um cinema, um botequim”
61
“uma pedra falsa/um sonho de valsa/ou um corte de cetim”
83
Toda la tensión está sobre el cuarto verso de las estrofas A que llega a la dominante -“por
cualquier cosa”; “como una piedra falsa” 62- en donde revela la verdadera intención de su
propuesta.
hombre y sus debilidades, por eso es capaz de manejar la situación, diciendo y haciendo lo
aparecer, de este modo el verso “diré medias verdades siempre a media luz” 64, refleja el
El tercer y cuarto verso se inician con un arpegio mayor con séptima, generando tensión (y
62
“por uma coisa à toa”; “como uma pedra falsa”
63
“eu te farei as vontades”
64
“direi meias verdades sempre a media luz”
65
“e te farei vaidoso supor/ que és o maior e que me possuis”
84
En la estrofa final (A), con una actitud igualmente directa que, en las anteriores, la
compromiso, sino la falta de valoración hacia el otro - “pues ya no vales nada”66- una vez
“Folhetim” presenta una dinámica de relación entre los géneros poco expuesta en música
sexual y espiritual al hombre. De este modo, el deseo masculino se presenta con mayor valor
sexual y parece aceptar esta condición como un orden natural de las cosas. En “Viver do
66
“pois já não vales nada”
85
las atenciones que el hombre requiere, aun en desmedro de su propio bienestar. La
felicidad con su condición. Por el contrario, ambas dan cuenta de una postergación personal
“Folhetim” en cambio, puede ser reconocida como del orden de la fiesta o lo que De
Meneses llama mujer órfica (43). Al contrario de las figuras anteriores, la mujer protagonista
para manipularlo y así obtener algún tipo de beneficio. Por otra parte, a diferencia de las
una autoestima disminuida. Por el contrario, es ella quien desprecia al hombre - “pues ya no
sexuales, estos buscan satisfacer siempre el deseo masculino. La dimensión corporal sexual
placer físico a la mujer, sino que es vehículo para la realización femenina en otro plano que
parece tener más importancia: servir al hombre, redimirlo o conseguir bienestar material.
Aunque las tres canciones muestran una forma distinta de asumir la prostitución y por ende,
pertenece.
67
“pois já não vales nada”
86
La figura de la madre y la prostituta, han sido estereotipadas y reproducidas a través
del tiempo en diversos repertorios, condicionando los discursos sobre la mujer. Estos
discursos, no solo reflejan una realidad, sino que es la propia realidad la que se constituye
dentro de estas prácticas discursivas. Chico Buarque retoma estos estereotipos y los
realistas que revelan la multiplicidad de posibilidades de ser mujer. Por otra parte, ningún
gesto musical esta intrínsecamente asociado al género, aunque algunas convenciones han
recursos para reforzar alguna de estas construcciones de género, pero también para
enriquecer, diversificar y romper los estereotipos. Buarque parece prestar especial atención
a aquello que los personajes femeninos “no dicen” en el discurso de otras músicas populares.
Las mujeres a través de las que Chico Buarque habla, no pretenden reafirmar aquello que se
87
Capítulo 3: “Sem Fantasia”: construcción de género y performance
gran poder comunicador, sobre todo cuando circula en un ambiente mediatizado que le
permite alcanzar una masividad tal, que la convierte probablemente en la forma musical más
fundamentales abordados por Susan McClary en uno de los estudios pioneros sobre música
y género, Femenine endings: music, gender & sexuality (1991). Su intención es deconstruir la
cambio, considerar la música como un discurso cultural que mantiene una directa relación
con el sistema social y cultural en donde se origina. Este discurso es recíproco, es decir, que
actitudes y valores que prevalecen en la sociedad de su época, pero al mismo tiempo estas
88
hombres y mujeres (37). Este planteamiento sugiere un factor temporal y espacial
Este modelo de estudio se ha trasladado desde la música de tradición escrita a las músicas
nuevas formas de registro, interpretación, circulación y usos. Para Philip Tagg (1982), la
música antes de los años cincuenta, el cual sería relevado por el registro sonoro que puede
además, ser apreciado indistintamente por el investigador especialista como por un auditor
utilizar como base del análisis de la música popular, es de gran utilidad en una segunda etapa
89
que podemos hacer de la música popular. La partitura, como una primera mediación-, es
incapaz de hacerse cargo del estudio y análisis de estos fenómenos que, a diferencia del texto
anteriores, que coinciden en que la canción debe ser comprendida como una unidad entre
música y texto, pues es precisamente en esta comunión que adquiere significante. Sin
embargo, tanto Fontes como Meneses, han abordado únicamente el ámbito literario,
dejando fuera los otros textos presentes en la canción popular. Por esta razón, además del
femineidad presentes en la obra buarqueana. Letra y música como texto primario inmaterial,
a una vibración sonora, con todos sus parámetros en juego” (González 2013 147-148). Letra
De este modo, cualquier análisis resultará parcial, constituyendo una de tantas posibilidades
del espacio y el tiempo. La performaticidad permite describir y comparar una obra con otra,
90
introducido desde el campo de la lingüística en cambio, define a aquellos actos que no
representan una realidad previa, sino que crean aquello que nombran en el momento en
no solo comunican, sino que establecen una realidad a partir del mismo. La recurrencia de
existían anteriormente (López Cano 2014). Estas nociones son fundamentales para
comprender la construcción del género, tal como lo propone Judith Butler: “no existe una
performativamente por las mismas «expresiones» que, al parecer, son resultado de ésta”
(2007 85). Antes que una performance o actuación, el género sería performativo, es decir,
y cómo estas canciones y sus contenidos, pueden ser resignificados o subvertidos a través
canción “Sem Fantasia”, abordando tres de sus múltiples textos: letra, música y performance.
Para esto consideré algunos estudios de performance grabada como el de Sheila Whiteley
(2000), en donde analiza el disco Blue de Joni Mitchell. Al igual que en esta investigación, el
objeto de estudio de Whiteley es un corpus de canciones, por lo cual presta especial atención
influye en su obra. Whiteley incorpora el análisis musical tomando como base la melodía,
además de la tonalidad y las cadencias. De este modo, logra reconocer algunos recursos
91
expresivos utilizados por la compositora, que identifica con una subjetividad femenina
Morrissey con referencias musicales como las de Whiteley. Hubbs no remite únicamente al
música, sino que considera además, diversas facetas del artista desde un ámbito político y
artístico. Por otra parte, en “’I Will Survive’: musical mappings of queer social space in a disco
anthem” (2007), Hubbs analiza los contextos en donde se inscribe la canción, comparando
la canción original con múltiples versiones, para luego determinar diversos significados de
género, entre los cuales destaca la teatralidad, los ostinatos y el uso y connotación de la
homosexual. Sin embargo, mi principal referencia es el trabajo de Lori Burns quien realiza un
crítica esta puede tener una función política poniendo en tensión los estereotipos de género.
Burns realiza además un análisis musical detallado que permite comprender de qué manera
En una primera parte del capítulo se abordará letra y música, como primera
mediación para establecer cómo operan las caracterizaciones de género para observar a
92
canción. Mi intención es explorar los significados de género que puede adquirir la canción
La canción “Sem Fantasia”, fue escrita por Chico Buarque en 1967 para su primera
incursión en la dramaturgia, la obra Roda Viva, una obra musical que fuera estrenada en Rio
de Janeiro en 1968 bajo la dirección de José Celso Martinez Corrêa. Concebida como un dúo,
debilidad/fuerza.
canción, que aparece en el disco Chico Buarque de Hollanda, volumen 3, interpretada por
La canción cuenta con dos secciones, una femenina y otra masculina, que se
insistente llamado que se evidencia en el imperativo “ven”, que se repetirá nueve veces en
los catorce versos. En la primera sección, la protagonista identifica al hombre como un niño
el control de la situación:
93
Vem, meu menino vadio Ven, muchacho vago
vem, sem mentir pra você ven sin mentirte a ti mismo
Vem, mas vem sem fantasia Ven, pero ven sin disfraz
Que da noite pro dia Que de la noche a la mañana
Você não vai crescer no vas a crecer
Ante este hombre infantilizado, la mujer/amante adquiere una actitud maternal al advertirle
supone. La seguridad de esta mujer se aprecia desde el primer verso, donde marca su
completa. Los inicios y finales alargados aparecen como signos de moderación y seguridad,
idea reforzada con sucesivos intervalos de cuarta justa descendente en los versos 1 y 2 y
ascendente en el 3 y 4:
que quedan expuestos en la segunda sección - “por favor no evites/ mi amor, mis
invitaciones/ mi dolor/ mis súplicas”-68, por esta razón el llamado va adquiriendo un tono
68
“por favor não evites/meu amor, meus convites/minha dor, meus apelos”
94
persuasivo. Finalmente, se manifiesta nuevamente el rol de amante/madre que acoge en sus
La idea del encuentro - “Ven a perderte en mis brazos/ por amor de Dios”69- lleva al clímax la
tesitura justo en la palabra “amor”. Este verso lleva implícita una doble súplica, al hombre
y a Dios:
Para De Meneses, la mujer en “Sem Fantasia” se manifiesta como piedra de tope, cuyo
69
“Vem perder-te em meus braços/pelo amor de Deus”
95
masculina (2000 100,102). Esta imagen infantilizada del hombre remite también a los ritos
y pruebas al final de las cuales se transformará finalmente en hombre adulto (Ibid.). Según
De Meneses (2000 101), “Sem Fantasia” es la primera canción del compositor en donde
superar diversos obstáculos que han dejado marcas en él y que exhibe como pruebas de su
hombría:
96
Eu quero a recompensa Quiero la recompensa
Eu quero a prenda imensa Quiero la prenda inmensa
Dos carinhos teus De tus cariños
De Meneses (2000 103), compara “Sem Fantasia” con los cuentos de hadas, que lidian
madurez. Las diversas pruebas que el hombre ha debido superar para consumar el encuentro
evocan los diferentes estados de desarrollo que el niño debe atravesar para alcanzar la
madurez. Para lograr una realización afectiva y sexual, el niño debe elaborar su situación
edípica que supone enfrentamientos con el padre: “Las luchas contra el rey/ las discusiones
con Dios”70.
Esta lucha masculina contra los obstáculos que lo alejan de su enamorada puede
observarse también en la melodía que avanza oscilante, desplazándose por grado conjunto,
refleja en los finales de versos del primer cuarteto, terminados en un intervalo ascendente
de cuarta justa. Cada verso termina en una nota más aguda que el anterior:
70
“Nas lutas contra o rei/nas discussões com Deus”
97
Curiosamente, ambas voces llegan al clímax coincidiendo en la palabra “Deus”, que se reviste
de una connotación distinta para cada uno. Si para la mujer es una fuerza superior capaz de
La parte masculina está dividida en diecinueve versos, hexasílabos (a excepción del primer y
cambio, posee catorce versos. Si quitamos de ellos el imperativo “ven” tendremos también
versos hexasílabos, pero de rima asonante. Aunque ambas voces dialogan describiendo sus
“Sem Fantasía”. Un primer análisis de letra y música contiene al menos dos representaciones
de género, sin embargo, este discurso puede ser desestructurado de acuerdo a parámetros
98
Para esto me referiré a tres versiones de la canción, grabadas entre 1968 y 1978 (fig 1).
Dos de estas versiones poseen un registro audiovisual que ofrece diversos elementos
que constituye tal vez, la versión más difundida de la canción. En las tres versiones, Chico
Buarque interpreta al personaje masculino, mientras sus acompañantes al femenino. Las tres
Do menor con
1975 Audio María Bethania y Chico Buarque Orquesta
modulación a La menor
Figura 1
Las tres versiones se inician con el sonido clave del samba canção estableciendo desde el
mismo texto musical y poético, cada una de estas versiones adquirirá una significación
distinta. ¿De qué modo cambia el discurso masculino en las diferentes versiones, si se
mantiene la misma melodía y el mismo intérprete?, ¿Qué elementos aporta cada uno de los
escuchar la misma melodía cantada por Cristina, María Bethânia o Caetano. Tampoco es lo
99
3.2.1 Chico y Cristina
La primera versión de “Sem Fantasia” fue grabada por Chico Buarque y su hermana
Buarque señala: “[…] Se lo debo a los muchachos de MPB-4 compañeros de ‘Roda Viva’. Y se
lo debo a Cristina, mi hermana pequeña que ya es grande”71. Aunque el grupo graba junto
a Chico la canción “Roda Viva” 72, no participa de la versión de estudio de “Sem Fantasia”, sin
veintidós de agosto de 2015, el video de “Sem Fantasia” es catalogado como una “rareza de
colección”73. En blanco y negro, el video se inicia con un plano corto en donde podemos ver
a Cristina de perfil y a Chico detrás, mirando de frente a la cámara. Aunque la toma solo
enfoca el rostro de los intérpretes, es posible deducir que Chico toca la guitarra.
La canción se inicia con dos compases de guitarra y una percusión discreta. Cristina
canta sin mucha fuerza y sin mirar a su interlocutor ni a la cámara. La voz de Cristina
71
“[…] Devo os rapazes de MPB-4, tão companheiros de ‘Roda Viva’. E devo à Cristina, mina irmã que está
grande”
72
Existe una grabación amateur de “Sem Fantasia” muy parecida a la versión de Buarque junto a Cristina, en
donde participa Chico Buarque,Nara Leão y MPB-4 y filmada probablemente, durante una serie de shows
realizados en el circuito universitario en 1973.
73
https://www.youtube.com/watch?v=RBGcYHh78PQ
100
acompañamiento vocal realizado por voces masculinas; un acompañamiento no de un
Foto 1
perfil, sin embargo, parte de la toma está desenfocada y no distinguimos bien sus
y segura, en el video se mantiene en segundo plano, igual que su imagen. Ambos intérpretes
miran a puntos diferentes e indeterminados, ignorando la presencia del otro sin establecer
Buarque recibe refuerzo de las voces de MPB-4, transformándose en un canto polifónico que
además de tener más fuerza que la voz femenina, pierde su carácter individual de sujeto,
101
no solo por el timbre y registro, sino también por la oposición de la voz femenina solista y el
coro masculino.
La segunda versión que revisaré fue grabada durante un show realizado por Chico
Buarque y María Bethania en Rio de Janeiro en 197574, el cual sería lanzado como álbum por
Phonogram el mismo año bajo el nombre Chico Buarque e Maria Bethânia Ao Vivo.
menor a Do menor, de este modo y a diferencia de Cristina, ella aborda el canto en su octava
más grave. La canción se inicia con una especie de fanfarria de los bronces, que desciende
protagonismo con secciones responsoriales de los vientos. Una variación dinámica a partir
segunda estrofa genera un contraste que no está en la versión de Cristina: “te voy a envolver
el cabello / ven a perderte mis brazos por el amor de Dios” 76. El volumen de la voz va en
crescendo y la nota más aguda de la melodía coincidente con la palabra “amor” será alargada
por María Bethânia, reforzando el carácter de ruego. Las cuerdas acentúan el carácter
74
https://www.youtube.com/watch?v=vSY8xSrymnM
75
“menino vadio”
76
“vou te envolver os cabelos/ vem perderte en meus brazos pelo amor de Deus”
102
dramático del texto, para desaparecer en el último verso, devolviendo la connotación privada
a la declaración: “ven, que te quiero todo mío”77, que a diferencia de la versión anterior,
termina en tonalidad mayor dando paso a una modulación a La menor, para la entrada de la
voz masculina.
Al abordar la canción en La menor, Chico canta una cuarta más arriba que en la
versión original, lo que le permite sonar con fuerza y seguridad en el inicio. A diferencia de
la versión con Cristina, la primera estrofa y el comienzo de la segunda será cantada solo por
Chico, mientras la melodía femenina sigue presente, reemplazada por la flauta. Al final del
quinto verso se incorpora la voz femenina que será anticipada por la aparición de las cuerdas
y el crescendo de la orquesta.
versión. Los roles se han invertido, es María Bethânia quien se encuentra en un registro
cómodo sobre el que demuestra total dominio, mientras que Chico se esfuerza por llegar a
las notas más agudas, en coherencia con el texto de la canción que sugiere un obstáculo tras
otro para consumar el encuentro. El arreglo orquestal acentúa este carácter, para
desaparecer casi del todo en el último verso en donde se consuma el encuentro de las voces
al unísono. La canción termina con la repetición de los tres últimos versos de cada personaje,
Aunque no existe un registro audiovisual de esta canción, la carátula del disco Chico
77
“vem, que eu te quero todo meu”
103
Foto 2
En ellas podemos ver a María Bethânia y Chico interactuado, cantando mirándose de frente,
apoyados de espaldas uno contra el otro y de frente enlazados con uno de sus brazos. En las
tres fotografías se aprecia la fuerte comunicación e interacción entre ellos. Chico no está
tocando la guitarra, sino dedicado exclusivamente al canto. Podemos deducir entonces, que
orquestal conforma desde el inicio el escenario en donde se recrea la acción. Los matices
La tercera versión pertenece a un especial sobre Chico Buarque que fuera exhibido por TV
composiciones en femenino e interpretan algunas de ellas. De este modo Chico canta “Esse
78
https://www.youtube.com/watch?v=etIDQpIk5a0
104
cara” de Caetano que cantará a continuación “Tatuagem” de Chico, para luego interpretar a
dúo, “Sem Fantasia”, también de Buarque. En el video podemos observar a Chico y Caetano
Foto 3
Ambos se encuentran vestidos cómodos e informales, Chico sentado en una banca y Caetano
en el suelo. Se observan algunas plantas y una hamaca; el ladrido de un perro confirma ese
espacio familiar y privado. Este ambiente, la familiaridad entre ambos y las semejanzas de
otro hombre. Chico Buarque toca la guitarra en el tono original, Mi menor, de este modo la
sección femenina será abordada por Caetano en la octava inferior. A diferencia de las
versiones anteriores, no existe una introducción instrumental: guitarra y voz parten al mismo
tiempo. La cámara enfoca a ambos intérpretes, pero avanza hacia un primer plano de
Caetano, en donde podemos ver como busca con su mirada y sonrisas cómplices,
105
comunicación con su interlocutor. Caetano canta con menos fuerza que María Bethânia,
la sección femenina, matizando el volumen para destacar la voz de Chico. La cámara alterna
ellos. Ambos enfatizan el final de la canción aumentando la intensidad de las voces, para
terminar al unísono. Tanto Chico como Caetano se muestran cómodos en sus respectivos
registros, pudiendo manejar sin dificultad la tesitura y diversos matices dinámicos, lo que no
ocurre en las versiones anteriores en donde uno de los intérpretes se encontrará más a gusto
que el otro. Sin embargo, mientras Chico se mantiene contenido por la ejecución de la
su cuerpo y llevando el pulso con los pies a ratos. La idea del registro audiovisual lleva
En las tres versiones descritas, Chico Buarque canta la sección masculina, mientras
el tono original de Mi menor, cómodo para la voz masculina, como podemos apreciar en
Chico y Caetano. Sin embargo, aunque provoca un contraste atractivo, para la voz femenina
resulta demasiado agudo. Es por esto que la versión junto a María Bethania, se inicia en Do
106
menor, presenta una mayor exigencia vocal al hombre, lo que indirectamente favorece la
coherencia entre texto y música. Sin embargo, no es el único dato que podemos extraer de
la dimensión sonora de la voz. En diversos estudios citados por María Teresa Soto Sanfiel
(2008), los juicios sobre la personalidad de los hablantes se relacionaban con la percepción
de atractivo de las voces que los auditores utilizaban para evaluar la personalidad del otro.
El estudio, específicamente, halló una relación entre el tono de la voz y el atractivo percibido.
Las voces con frecuencias fundamentales más bajas eran consideradas más atractivas. De
hecho, los receptores asociaban a los tonos bajos con rasgos más favorables de la
como más “atractiva”, sino que además encarnaría mejor la figura de la mujer segura de sí
misma, fuerte y maternal a la vez. La voz aguda de Cristina no solo da una idea de fragilidad
o infantilismo, sino que se contrapone a la figura femenina que describe nuestro texto
primario.
mediada por el acompañamiento (Moore 2012 189). En la primera versión Buarque canta
canto polifónico masculino, que además de tener más fuerza que la voz femenina, pierde su
segunda versión con María Bethânia, el arreglo orquestal juega un papel fundamental en la
107
transforman un relacionamiento privado en un acontecimiento público contribuyendo a la
Caetano Veloso, se hará únicamente con guitarra, destacando las voces y el contenido del
texto. Los roles de cada interprete –femenino y masculino-, definidos por las versiones
precedentes, se ven reforzados por la concepción binaria occidental que delimita los
Chico y sus exigencias técnicas actúan restringiendo otras áreas de expresividad corporal y
asume el rol definido previamente como femenino, despliega mayor expresividad a través
de diversos gestos físicos y vocales. Sus sonrisas, miradas, énfasis vocales e incluso el
balanceo del cuerpo o la forma de arreglarse el pelo, dan cuenta de una mayor afectación
determina lo irracional y corporal como femenino. La voz, en este caso actúa como una
extensión de la corporalidad.
situación, la versión de Caetano introduce una nueva figura, la del amante comprensivo y
108
instancia una relación amorosa homosexual, propiciado también por la ausencia de
autoreferencia de género gramatical del texto. De este modo el discurso adquiere otra
“…ven, sin mentirte a ti mismo/ ven, pero sin disfraz…”79. El llamado es a asumir la relación
compresivo está dispuesto a recibirlo “frágil” y “torpe” para iniciarlo en el camino del amor.
interlocutor interpretado por Chico Buarque, todas las pruebas y enfrentamientos que ha
debido superar y que ameritan la recompensa del amor y la consumación del encuentro.
Esta reinterpretación es posible a partir del reemplazo de la voz femenina por la de otro
hombre, sin embargo, la dimensión sonora de las voces iguales masculinas contiene en sí
produce un contraste entre el timbre y registro vocal natural de las voces femenina y
masculina que suaviza las tensiones interválicas, en la interpretación de Chico y Caetano las
de segunda:
79
“…vem sem mentir para voce/vem, mas vem sem fantasia…”
109
La comunicación y proximidad entre ambos personajes se puede apreciar en la forma en que
trabajo que instale el género como categoría de análisis, pues es en ella en donde ocurren
buarqueano ofrece un extenso material en donde aparecen no solo figuras femeninas, sino
también varios dúos en donde es posible apreciar diversas dinámicas relacionales entre los
géneros. Una revisión que integre la performance es fundamental para observar de qué
clásicos.
110
Conclusiones
de la cultura brasileña, quien ha desarrollado una carrera no solo como compositor, sino
sectores socioculturales. Una de las principales razones de esta popularidad es el interés por
tematizando de este modo, a diversos personajes entre los que destacan aquellos
pertenecientes al segmento más vulnerable de la sociedad como los niños de la calle, los
obreros, malandros y también las mujeres. Esta tematización del sujeto marginado se ha
resistencia cultural durante la dictadura brasileña, para la cual la canción “Apesar de Você”
Chico Buarque se ha esmerado por presentarse ante todo como un músico popular,
de modo que las figuras de alteridad compuestas por este colectivo marginado son
otro, para abrirse enseguida, hacia la conformación de una identidad colectiva capaz de
popular.
111
Sin embargo, lejos de lo que parece a primera vista, la tematización del sujeto
samba de los años 30, con figuras como Wilson Batista, Ismael Silva, Cartola y Noel Rosa,
persona en la música popular brasileña también datan de esa época. Buarque retoma la
vertiente musical y temática de los años 30, potenciando sus alcances gracias a su formación
intelectual que le permite popularizar su música no solo por sus contenidos temáticos, sino
también por el alto grado de sofisticación de su música y sus letras. Lo mismo ocurre con las
Otros estudios de la obra buarqueana han situado la figura femenina dentro del
colectivo marginal, sin hacer distinción de las características que le han conferido ese estatus.
No todas las figuras femeninas son marginales, sino solo aquellas construcciones de
propios. Por otra parte, la percepción del público y la crítica especializada de la capacidad
de Chico Buarque de representar la experiencia femenina está justificada por esta diversidad
112
que van desde las más tradicionales como la mujer enamorada o la madre, hasta las más
experiencias femeninas más allá del tradicional imaginario presente en la música popular.
Por otra parte, las figuras femeninas disidentes son tratadas por Buarque con empatía y sin
innovadores. Algunas prácticas musicales en la significación del genero parecen colarse sin
extensión del registro vocal y los arreglos son algunos de los recursos utilizados por Buarque
en la caracterización del género. Sin embargo, si bien utiliza algunos de estos recursos para
Es por eso que la performance tiene el enorme poder de reforzar o subvertir diversas
113
su propia experiencia. Las diferentes performances de “Sem Fantasia” suman un nuevo texto
de acuerdo a sus medios de producción y circulación. Por otra parte, permiten observar que
significados de género de la canción popular, aportando una nueva mirada y saldando una
deuda pendiente de estudios anteriores que abordan la figura de la mujer en las canciones
Por otra parte, este estudio constituye un modelo musicológico posible de replicar
en el estudio de otras músicas populares. Si bien los estudios de música popular han
interesarse en algunas áreas más que otras como la industria, la producción musical y las
popular, como sus medios de creación y circulación y nos permita examinarla en sus propios
términos, sin recurrir necesariamente a las herramientas del análisis clásico. De este modo,
esta investigación se presenta como un modelo que incorpora diversas perspectivas, con
114
La obra de Chico Buarque es extensa, y las canciones incluidas en este estudio solo
representan una pequeña parte de ella. Sin embargo, así como algunas canciones retratan la
experiencia femenina, muchas otras han sido concebidas como diálogos entre hombre y
mujer - “Pedaço de Mim”, “Biscate”, “Se Eu Suobesse”, etc.-, abordando temáticas que van
canciones que Buarque ha escrito para piezas de teatro y cine, pues muchas de estas
canciones escritas desde una perspectiva femenina están asociadas a personajes masculinos
por estos procedimientos, sino más bien por los cruces posibles entre los diversos textos, y
latinoamericanos.
115
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