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¿COMO CONSTRUIR UNA SEXUALIDAD SALUDABLE?

La sexualidad forma parte del ser humano desde su concepción, evolucionando a lo largo de la vida y el entorno
social condiciona este desarrollo.
Los conocimientos sobre la sexualidad y las actitudes varían según la edad, el sexo y el nivel sociocultural. Por lo
tanto surgen dudas ante concepciones negativas, informaciones y creencias erróneas que limitan la capacidad de
tomar decisiones respecto a cómo vivir tu propia sexualidad.
En estos momentos la sexualidad en los adolescentes y jóvenes está mediatizada por la televisión, cine,
publicidad,... hacia el acto sexual, pero esto es sólo una parte de un todo mucho más complejo estimulante y
enriquecedor para el individuo (como la amistad, las relaciones con otros, el sentimiento de afecto, cariño,
complicidad y comprensión entre dos personas). La sexualidad en el ser humano es bastante más que el coito y,
expresiones como abrazos, caricias, besos forman parte de la relación sexual y son tan satisfactorios como las
anteriores.
CAUSAS DE UNA MALA SALUD SEXUAL:
• El inicio precoz de las relaciones sexuales (12-14 años)
• La falta de educación sexual
• La baja autoestima
• La falta de afecto y comunicación en la familia
• Alcohol y drogas
• El desconocimiento del propio cuerpo
• Desconocimiento y no utilizar métodos anticonceptivos.
• La mala planeación
• El exceso de confianza
• La ingenuidad
¿Pueden los y las jóvenes construir una sexualidad sana? La respuesta es SI, ¿Qué necesitan?, necesitan tener un
marco de valores personales que les permitan tomar decisiones responsables en cuanto a su sexualidad.
Aunque la sexualidad es algo inquietante, representa para los adolescentes una fuente significativa de dudas y
angustias por tanto desconocimiento y prejuicios que la sociedad tiene acerca de la sexualidad de las y los jóvenes.
Los y las jóvenes pueden (y tienen derecho) a disfrutar de una sexualidad PLENA, SATISFACTORIA Y SIN RIESGOS.
Cuando decimos “sin riesgos” nos referimos a la construcción de una sexualidad saludable, al ejercicio de una
sexualidad en la cual prevalezca la salud sexual.
VALORES LIGADOS A LA SEXUALIDAD:
LA AUTONOMIA: La identidad reúne, vincula y da sentido a los asuntos relacionados con la sexualidad y con la vida.
Idealmente, se tiene que vivir desde la propia identidad, desde lo que cada quien es, piensa, siente y valora, desde
la propia capacidad de decidir y de asumir la consecuencia de las decisiones. En esto consiste la autonomía, en la
posibilidad de vivir de acuerdo con la identidad y conciencia propias.
LA LIBERTAD: Es un valor universal. Las relaciones sexuales tienen que ocurrir sin amenazas, castigos o
manipulaciones, en el marco de la libertad. Decir “NO” a una relación no deseada es una manera de hacer uso de
la libertad. En esta línea de pensamiento, un “no” siempre debe respetarse. Las relaciones sexuales tienen que
responder a una decisión personal que brota del deseo y de la libre voluntad informada. La información es un
importante componente de la libertad, la sexualidad libre es una sexualidad informada.
LA INTEGRIDAD: La integridad de las personas que viven la sexualidad también es importante. La actividad sexual
nunca tendría que producir ni enfermedad, ni dolor, ni alteraciones físicas, sociales o emocionales. En este sentido,
el ejercicio de la sexualidad no tendría que producir embarazos no deseados o contagios de enfermedades, y la
sexualidad tendría que vivirse sin el riesgo de que la familia o la sociedad respondieran con discriminación, violencia
o castigos físicos, psicológicos o judiciales.
LA INTEGRALIDAD: La sexualidad también tendría que vivirse de manera plena e integral, es decir, con tiempos y
espacios para la comunicación en los que se expresen y comuniquen el afecto, el respeto, el erotismo y el placer.
El ejercicio de una sexualidad libre, íntegra e integral, conduce al desarrollo.
LA RESPONSABLIDAD: El ejercicio de la sexualidad tiene que ser responsable, es decir, tiene que tomar en cuenta a
la propia persona y también a la persona del otro.
LA ASERTIVIDAD: Más que valor es una forma de vida, la asertividad debe estar presente en nuestros pensamientos,
sentimientos, actitudes y conductas. Ser asertivos nos asegura una vida plena y feliz. Consiste en saber expresar
mis sentimientos y deseos de manera correcta y sin hacer sentir mal a los demás. También es saber decir NO sin
sentirnos culpables. ES UN DERECHO que tenemos.
APRENDIENDO A VIVIR UNA SEXUALIDAD SALUDABLE
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