Recorrimos hace varios años en respuesta a las necesidades pastorales de nuestra Diócesis, así para realizar la misión evangelizadora al servicio de nuestro pueblo. 2.- Un Plan en clave de conversión pastoral y misionera. Nuestro Plan debe estar en sintonía y comunión con el momento que vive el mundo y la Iglesia. El Papa Francisco en Evangelii gaudium N° 25, “Que todas las comunidades procuren poner los medios necesarios para avanzar en el camino de una conversión pastoral y misionera, que no puede dejar las cosas como están. Ya no nos sirve una simple “administración”. 3.- La Iglesia Diocesana al servicio de la evangelización de nuestro pueblo Nuestra Iglesia particular de anuncia la Palabra de Dios, celebra los misterios de la fe y vive el testimonio de la caridad, en comunión, con signos de esperanza y solidaridad. La transformación misionera de la Iglesia es respuesta al mandato de Jesucristo: “Vayan al mundo entero y proclamen el Evangelio a toda la creación” (Mc 16,15; cfr. Mt 28, 19). El Papa Francisco nos vuelve a insistir con especial fuerza y con sus gestos proféticos en la “conversión pastoral”. Con palabras apremiantes nos exhorta a inaugurar “una nueva etapa evangelizadora marcada por la alegría” (Evangelii gaudium, 1). 4.- Un trabajo en comunión y con participación de todos Para poner en marcha el Plan Diocesano de Pastoral necesitamos una espiritualidad de comunión, en la línea señalada por san Juan Pablo II: “Hacer de la Iglesia la casa y la escuela de la comunión: éste es el gran desafío que tenemos ante nosotros en el milenio que comienza, si queremos ser fieles al designio de Dios y responder también a las profundas esperanzas del mundo […] No nos hagamos ilusiones: sin este camino espiritual, de poco servirían los instrumentos externos de la comunión. Se convertirían en medios sin alma, máscaras de comunión más que sus modos de expresión y crecimiento” (Juan Pablo II, Carta apostólica, Novo Millennio Ineunte, 43). No hay duda de que la participación de todos en la aplicación del Plan Diocesano de Pastoral contribuirá a que nuestra Iglesia Diocesana y todas las realidades eclesiales se conviertan más y más en casa y escuela de comunión. 5.- Una Iglesia Diocesana de “puertas abiertas” y en salida. El Papa Francisco en la exhortación apostólica Evangelii Gaudium y en su constante magisterio y gestos está insistiendo en edificar una Iglesia de “puertas abiertas”, acogedora. “Cada cristiano y cada comunidad discernirá cuál es el camino que el Señor le pide, pero todos somos invitados a aceptar esta llamada: salir de la propia comodidad y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio” (EG 29). 6.- Bajo el signo de la esperanza “Ojalá que el mundo pueda percibir la Buena Nueva no a través de evangelizadores tristes y desalentados, impacientes y ansiosos, sino a través de ministros del Evangelio, cuya vida irradia el fervor de quienes han recibido la alegría de Cristo” (Pablo VI, Exhortación apostólica, Evangelii Nuntiandi, 79). Ideal de la Diócesis “Somos Pueblo de Dios vivimos como familia diocesana saliendo al encuentro de los demás”. Ideal de la parroquia - Son células vivas de la Iglesia y el lugar privilegiado en el que la mayoría de los fieles tienen una experiencia concreta de Cristo. - Espacios para la iniciación cristiana, de la educación y celebración de la fe, abiertas a la diversidad de carismas, servicios y ministerios. - Son comunidades de fe y amor. Casa, familia de todos los fieles. - Son comunidades nacidas para el servicio del pueblo, por ello son evangelizadoras y misioneras, en constante formación y renovación de los laicos. - Cuenten con un plan pastoral parroquial que responde a un plan diocesano. Meta diocesana 2019 Al finalizar el año 2019 la Diócesis de Huaraz, se habrá fortalecido en valorar el rol de la familia en la tarea evangelizadora dentro de un camino a la fraternidad, viviendo a través de su mayor participación en las fiestas de fraternidad, en las zonas, parroquias, decanatos y en las acciones diocesanas. Meta parroquial 2019