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Sesión Plenaria

Sexualidad y desarrollo
Introducción
H. Paniagua Repetto
Centro de Salud Dávila. Santander

La atención pediátrica tradicional comenzó a modificarse en los tidad sexual, adquirida al comenzar la etapa escolar, se verá refor-
años 60 cuando en Estados Unidos, al disminuir la prevalencia de zada al inicio de la adolescencia, momento en que el pediatra, ade-
las enfermedades infecciosas en la infancia, Haggerty et al.(1) pro- más de explicar y asesorar sobre los cambios orgánicos que se irán
pusieron el concepto de la nueva pediatría. El pediatra comenzó, produciendo a partir de esas edades, puede jugar un papel impor-
entonces, a dirigir sus esfuerzos también a otras cuestiones hasta tante ayudando en la comprensión de las nuevas vivencias con-
ese momento no adecuadamente atendidas y que, sin embargo, secuencia del desarrollo de la sexualidad.
eran motivo de preocupación entre pacientes, familias y educado- Las variantes de la normalidad, como la homosexualidad, serán
res. En 1983, la Academia Americana de Pediatría recomendaba la vividas con angustia por algunos adolescentes, que se verá incre-
atención sanitaria al adolescente homosexual y a todos aquellos mentada si se asocia con hostigamiento, rechazo o aislamiento
jóvenes angustiados por su expresión sexual(2). Estas recomenda- social y sentimientos de culpa. Las conductas sexuales anormales,
ciones se revisaron en 1993 y recientemente en 2004, momento en que pueden tener una aparición temprana, tendrán un mejor pro-
que se aconseja la derivación de aquellos adolescentes a los que nóstico si son detectadas precozmente. Pueden observarse, ade-
no se les pueda ofrecer una atención con un consejo sobre homo- más, trastornos de la identidad sexual, difíciles de resolver durante
sexualidad(3). la adolescencia. El pediatra, además de seguir el desarrollo de la
En la década de los 80, Prandi en España alentaba a los pedia- sexualidad de sus pacientes, puede aconsejarles para evitar las
tras a adentrarse en el desafío que suponía la nueva pediatría sugi- conductas de riesgo y ofrecer apoyo y ayuda a los que lo requie-
riendo profundizar en estas cuestiones para intentar resolver los ran, investigar la presencia de conductas sexuales anormales y ante
nuevos problemas que presentaba la atención pediátrica(4). La pedia- un trastorno de la identidad sexual, dentro de un enfoque interdis-
tría primaria española ha ido por estos derroteros, con un impor- ciplinar, asesorar para una ulterior toma de decisiones(6,7).
tante desarrollo en los últimos 20 años, pasando de una atención Las tres ponencias de esta Sesión Plenaria desarrollarán con
en que primaba lo asistencial, a otra donde se intentó ofrecer una detenimiento estos aspectos esbozados brevemente, que sin duda
atención integral del niño y adolescente. Así, puede considerarse aportarán al Pediatra Extrahospitalario y de Atención Primaria una
como una rutina en el trabajo pediátrico actual encontrarse frente a visión que le será de utilidad en su tarea diaria de atención integral
motivos de consulta relacionados con la nueva pediatría. Esto ha que brinda a niños y adolescentes.
motivado al pediatra a profundizar en determinadas áreas menos
desarrolladas dentro de la formación pediátrica clásica para poder BIBLIOGRAFÍA
atender estas nuevas situaciones con la mayor evidencia científica 1. Haggerty R. De la pediatría ambulatoria a la pediatría global. An Esp
posible y entre ellas se encuentran las relacionadas con la sexua- Ped 1991; 35 S45:173-82.
lidad en la infancia y la adolescencia. 2. American Academy of Pediatrics. Committee on Adolescence. Homo-
Diversas teorías explican el desarrollo de la sexualidad desde sexuality and adolescence. Pediatrics 1983; 72: 249.
los primeros años de vida. Sin embargo, sus diversas manifesta- 3. Frankowski BL; American Academy of Pediatrics Comittee on Adoles-
cence. Pediatrics 2004; 113: 827-32.
ciones a lo largo de la infancia no están del todo determinadas, pro-
4. Prandi F. Una visión integral del adolescente y de su salud. Bol Pediatr
bablemente por una cuestión cultural que niega de alguna manera 1992; 33: 321-7.
su existencia en estas edades y por razones éticas que impiden 5. López Sánchez F. Intervención en la sexualidad infantil y adolescente.
estudios observacionales directos o a través de cuestionarios con Bol Pediatr 2001; 41:275-89.
menores. Aún así, hay datos concretos en estas edades, como la 6. Ehrhardt AE, Remien RH. Orientación sexual. En: McAnarney ER, Kreipe
frecuencia de preguntas y teorías infantiles relacionadas con la RE, Orr DP, Comerci GD editores. Medicina del adolescente. Buenos
sexualidad planteadas entre los tres y seis años de edad y los Aires: Editorial Médica Panamericana; 1994. p. 1167-70.
juegos sexuales de imitación, además de los datos sobre la mas- 7. Carter DR, Al-Mateen C, Brookman R. Sexualidad. En: Parmelee DX,
turbación por debajo de los once años de vida, recogidos de recuer- editor. Psiquiatría del niño y el adolescente. Madrid: Harcourt Brace;
dos de los jóvenes o referencias de padres o educadores(5). La iden- 1998. p. 293-310.

1
Desarrollo sexual normal
M. Pérez Butragueño
Pediatra. EAP S. Juan de la Cruz. Pozuelo de Alarcón. Madrid

INTRODUCCIÓN minadas proteínas transductoras en el cromosoma Y (SRY,


La sexualidad forma una parte importante de la vida del ser ZFY)(5,6) es imprescindible para la diferenciación de la gónada
humano y por ello tiene reflejo en el desarrollo y maduración del primitiva en testículos, y su ausencia provocaría el desarrollo de
niño. los ovarios(1,5,6). Otros genes, tanto autosómicos como del cro-
La posición del pediatra extrahospitalario le sitúa en un lugar mosoma X, son también necesarios para la diferenciación del
privilegiado para detectar y orientar los problemas que puedan sur- testículo fetal. Los genes necesarios para la diferenciación y
gir en el desarrollo sexual del niño, resolver las dudas que pre- mantenimiento del ovario son aún menos conocidos(2).
senten, tanto los niños y adolescentes como sus padres, y preve- 3. Sexo genital: la determinación del dimorfismo sexual de los
nir actitudes y comportamientos de riesgo. Para lograrlo el pediatra genitales internos y externos depende de la secreción y acción
debe: de varias hormonas por parte de la gónada fetal masculina,
• Explorar el fenotipo sexual en cada etapa de la maduración es decir, del testículo11. Por el contrario, la diferenciación feme-
detectando anomalías, variantes de la normalidad y alteracio- nina ha sido considerada como el resultado de la ausencia de
nes del ritmo evolutivo. los diversos factores masculinizantes.
• Favorecer la exposición de dudas y temores, tanto por parte de • Genitales internos: cada embrión desarrolla dos tipos de estruc-
los niños y adolescentes, así como de sus cuidadores, creando turas (los conductos de Wolff y los conductos de Müller). Las
un ambiente de confianza. estructuras genitales que derivan de los conductos de Wolff son:
• Detectar comportamientos anómalos o aquellos que el niño o epidídimo, vasos deferentes, y vesículas seminales. De los con-
sus padres perciben como tales o les preocupan. ductos de Müller derivan las estructuras genitales femeninas:
Para ello, el pediatra debe valerse de ciertos conocimientos, las trompas de Falopio, el útero y los dos tercios superiores de
habilidades de comunicación y técnicas de entrevista específicos la vagina. Los testículos (a partir de la 6-8 semana) segregan
de la adolescencia, la psiquiatría infantil y el comportamiento sexual testosterona (células de Leydig del intersticio), y factor inhibidor
sobre los cuales en la mayoría de los casos no ha recibido forma- de los conductos de Müller (MIF) (células de Sertoli del túbulo
ción suficiente, por lo cuál, generalmente, no se encuentra a gusto seminífero). Andrógenos y MIF estimulan los conductos de Wolff
cuando se enfrenta a esta faceta de maduración del niño. de los que derivarán los genitales internos masculinos y ade-
A la hora de abordar el desarrollo sexual normal, es necesario más el MIF provoca que se atrofien los conductos de Müller.
describir aspectos somáticos y psicológicos y sus relaciones. Tam- Los ovarios también a partir de las 6-8 semanas de gestación
bién se tocará ,brevemente, el tema de la educación sexual. producen estrógenos, pero no son los responsables de la for-
mación de los genitales internos y externos de la mujer, sino
DIFERENCIACION SEXUAL TÍPICA(1,2,4) que es la ausencia de testosterona, la que permite el desarro-
Fase prepuberal llo de los conductos de Müller y la atrofia de los de Wolff(1).
El pertenecer a uno de los dos sexos queda determinado en • Genitales externos: la testosterona mediante la acción de la
el mismo momento de la fecundación, pero el proceso de diferen- enzima 5 alfa-reductasa se transforma en dihidrotestosterona
ciación sexual conlleva alcanzar sin quebrarse tres etapas conse- (DHT),de gran poder androgénico, siendo también responsa-
cutivas: 1) la diferenciación cromosómica o sexo genético; 2) la dife- ble de la formación de los genitales externos masculinos. En la
renciación gonadal y hormonal o sexo gonadal; y 3) la diferenciación semana 7ª de gestación, los genitales externos de ambos sexos,
genital o sexo genital (Fig. 1)(1). son idénticos. En la 8ª semana la testosterona y la DHT inducen
En el individuo normal los tres coinciden. la formación del pene, la próstata y el escroto. En su ausencia
1. Sexo genético: en el momento de la concepción se determina se desarrollarán el clítoris, los labios mayores y menores y el
el sexo cromosómico: 46XX para la mujer y 46XY para el varón, tercio inferior de la vagina.
según sea fecundado el ovocito por un espermatozoide con un Las gonadotropinas hipofisarias no influyen, ni en la producción
cromosoma X o Y respectivamente. Durante las seis primeras inicial de testosterona por los testículos fetales ni en la diferencia-
semanas de vida fetal las estructuras sexuales son idénticas en ción sexual fetal, pero son esenciales para promover el desarrollo
los dos sexos y consisten en el “ribete” gonadal o genital que de los ovarios y de los testículos. En la octava semana de gesta-
dará lugar 1) al testículo y al ovario; 2) las células germinales ción, el hipotálamo empieza a segregar el factor precursor de las
que penetran en la gónada indiferenciada y que darán lugar a gonadotropinas.
espermatocitos y ovocitos; 3) dos pares de conductos, deno- Desde la 7ª semana de gestación y durante toda la infancia, las
minados de Wolff y de Müller (los primeros darán lugar a los hormonas gonadales están presentes en pequeñas concentracio-
genitales internos masculinos y los segundos a los femeninos); nes. Cada vez hay más pruebas que indican que en el hombre, como
y 4) los genitales externos constituidos por el tubérculo genital, ocurre en algunos mamíferos hay una diferenciación cerebral fetal,
los pliegues labioescrotales y uretrales y el seno urogenital. dependiendo de si ha estado o no en un ambiente con esteroides
2. Sexo gonadal: dependiendo del sexo cromosómico se desa- sexuales masculinos prenatalmente(6,7). Las hormonas sexuales
rrollarán en el embrión, a partir de una gónada primitiva e indi- influyen en el desarrollo y programación del sistema nervioso cen-
ferenciada, los testículos o los ovarios. Esto ocurre entre la 6ª y tral, y parece que son las responsables de forma muy determinante
2 8ª semanas de gestación. Se cree que la presencia de deter- en la conducta y desarrollo psicosexual (Fig. 2)(2,8-10).
SF-1/WT-1?? XX Sexo genético XY SF-1/WT-1

Wnt-4? SRY Wnt-4?

1 locus Xp21 (DAX-1??) 2 locus Xp21 (DAX-1)

Ovarios Sexo gonadal Testículos SOX-9...

hCG/LH
FSH

Célula de Leydig Célula de Sertoli

T T MIF

Conductos Conductos Sexo genital Conductos de Wolff Conductos de Müller


de Wolff de Müller + +
Receptor andrógenos Receptor MIF

Trompas Epididimo
Útero Interno Deferente
2/3 vagina Vesículas seminales

Seno urogenital Externo Seno urogenital y genitales externos


y genitales externos
DHT
+5α redutasa
+ Receptor andrógenos

1/3 vagina Próstata


Labios mayores y menores Bolsas escrotales
Clítoris Pene

FIGURA 1. Esquema de la diferenciación sexual genética, gonadal y genital en el feto humano. SF-1: steroidogenic factor 1; WT-1:
Wilm’s tumor factor 1; SRY: sex determining-region. De: Audi L. Fisiología de la diferenciación sexual(1)

Fase puberal(2,14) rrenales (ver luego adrenarquia precoz) pero esta es independiente
La pubertad se inicia por una serie de cambios neurohormo- del eje hipotálamo-hipófiso-gonadal.
nales en los que interactúan SNC, hipotálamo, hipófisis y gónadas. El comienzo y progresión de la pubertad varía mucho de un
En la infancia y época prepuberal la hormona liberadora de gona- adolescente a otro pero de forma práctica se considera normal su
dotropinas (GnRH) y las gonadotropinas hipofisarias (FSH y LH) inicio entre 8 y 13 años en niñas y 9 y 14 años en niños. Así consi-
están inhibidas por la alta sensibilidad del gonadostato (zona hipo- deraríamos pubertad precoz antes de 8 años en niñas y 9 en niños
talámica productora de GnRH) a los muy bajos niveles de esteroi- y pubertad retrasada después cuando no hay signos de pubertad
des gonadales. La pubertad comienza con una disminución de la a los 13 y 14 años respectivamente. Hay una tendencia secular, de
sensibilidad del gonadostato a la inhibición ejercida por los este- causa multifactorial, a irse adelantando la pubertad (3 meses por
roides gonadales (estrógenos o testosterona), aumentándose la decenio)(14,15).
secreción en pulsos de GnRH estimulando la secreción de gona- En las chicas el primer cambio puberal es la aparición del botón
dotropinas por la hipófisis que provoca, a su vez, un aumento de mamario (antes ocurre un aumento en la velocidad de crecimiento15)
andrógenos y estrógenos. y en los chicos es el aumento del tamaño testicular (4 mL).
En la pubertad también se activa el eje hipotálamo-hipofiso- En la pubertad ocurren cambios físicos a distintos niveles:
somatomedínico (GnRh-Gh-IGF1-IGFBP3) que es importante para • Aceleración y desaceleración del crecimiento óseo y de órga-
el estirón puberal así como para el normal desarrollo de las góna- nos internos. Es un crecimiento por segmentos y de distal a
das. También en esta época se produce la maduración de las supra- proximal. El cierre de las epífisis marca su final (16-17 años en 3
CONCEPCIÓN RUTA MASCULINA RUTA FEMENINA
XY XX

DESARROLLO
EMBRIONARIO Factor SYR, ZFY
Y FETAL transcripción específica cromosoma Y)

TESTÍCULOS OVARIOS

• Sustancia que inhibe conductos de Müller ¿Estrógenos?


• Testosterona

NACIMIENTO Genitales int. y ext. S.N.C. Genitales int.y ext. S.N.C.

Respuestas Imagen Respuestas Imagen


del ambiente corporal del ambiente corporal

INFANCIA Identidad y papel Identidad y papel


.
sexual infantil sexual infantil

PUBERTAD Hormonas Hormonas


sexuales puberales sexuales puberales

Erotismo Morfología Erotismo Morfología


puberal corporal puberal puberal corporal puberal

ADULTO
HOMBRE IDENTIDAD Y MUJER
PAPEL SEXUAL ADULTO

Cohen-Kattenis(5); 2003. Modificado de Money; 1994.

FIGURA 2. Desarrollo sexual y psicosexual

chicas y hasta los 21 en chicos). Su valoración es por medio de frente al grupo de iguales es muy importante para el adoles-
la antropometría seriada (períodos de 6-12 m y comparación cente, pudiendo ocasionarles problemas de autoestima.
con antecedentes familiares, gráficas de referencia y estadio También las hormonas sexuales, en la etapa adolescente, pro-
puberal) y la edad ósea. vocan cambios en el núcleo estriado del hipocampo lo cual se ha
• Cambios de la composición corporal y desarrollo de los sis- relacionado con el proceso evolutivo de la identidad sexual(2).
temas y órganos. Las chicas acumulan más grasa que los chi- En esta etapa se completa la maduración psicosexual que con-
cos y en estos predomina el crecimiento óseo y muscular. En lleva: 1) consolidación de la identidad sexual; y 2) decidir sobre la
los chicos hay mayor desarrollo del sistema cardiovascular y actividad sexual, bien participando o absteniéndose en las rela-
respiratorio. ciones sexuales.
• Maduración sexual (gónadas, órganos reproductores y carac-
teres sexuales secundarios). Se valora en la práctica con la Pubarquia precoz, telarquia aislada y ginecomastia(3)
clasificación de Tanner en 5 estadios. En el sexo femenino se • Pubarquia precoz(3,12): el término descriptivo pubarquia indica
caracteriza por el desarrollo mamario, vello púbico y axilar, cam- la aparición de vello púbico. Este proceso se considera pre-
bios del aparato genital y aparición de menarquia. La menar- maturo cuando aparece antes de los 8 años en las chicas y
quia suele ocurrir en un estadio P3-P4 de Tanner (de media a de los 9 años en los chicos. No se acompaña de otro signo de
los 12,4 años), unos 3 años después del inicio del estirón pube- pubertad, virilización franca o avance anormal de la edad ósea
ral. Tras la menarquia las niñas crecen entre 4,3-10,6 cm. Los (superior o igual a 2 DE). El tamaño testicular o de la mama per-
primeros 2 años muchos ciclos son anovulatorios con sangra- manecen siempre a nivel prepuberal. La causa más frecuente
dos irregulares. En el sexo masculino se caracteriza por el desa- de pubarquia prematura es la adrenarquia precoz, pero tam-
rrollo de testículos, pene, vello púbico, axilar, facial y corporal bién puede ser expresión de una hiperplasia suprarrenal con-
y la espermarquia o inicio de la emisión de esperma (sobre génita no clásica, tumores gonadales o suprarrenales o una
4 los 13,4 años). La maduración sexual adelantada o retrasada pubertad precoz.
• Adrenarquia precoz: producción precoz de andrógenos adre- signos de producción hormonal como vello púbico o axilar,
nales. Generalmente aparece entre los 3 y los 8 años aunque tamaño del pene y testículos, olor corporal y aumento de la velo-
puede presentarse tan pronto como a los 6 meses. Las niñas cidad de crecimiento. Testículos pequeños o apariencia mar-
se afectan mucho más con una proporción de 10 a 1. En aque- fanoide obligarán a realizar un cariotipo para descartar el sín-
llos pacientes en los que el vello púbico se acompaña de acné drome de Klinefelter.
quístico, aceleración de la maduración esquelética (EO/ET > – Ginecomastia del recién nacido: está presente en el 60-90% de
1), hipertrofia de clítoris o aumento del tamaño mamario o tes- los recién nacidos durante la tres primeras semanas de la vida.
ticular, es necesario descartar que el cuadro sea secundario Suele ser bilateral y se debe muy probablemente al aumento de
a hiperplasia suprarrenal congénita no clásica de comienzo estrógenos de la unidad fetoplacentaria. Puede existir secre-
tardío, pubertad precoz y excepcionalmente tumor gonadal, ción láctea y se resuelve espontáneamente hacia el cuarto mes
suprarrenal o administración iatrogénica de andrógenos. La de vida. No precisa de ningún estudio. La asimetría, el eritema,
evaluación del paciente constará de historia clínica detallada, la induración y el dolor a la palpación deben hacernos sospe-
examen físico y valoración del crecimiento y edad ósea . La char un absceso mamario.
valoración hormonal está indicada sólo si en la exploración ini- – Ginecomastia puberal: es el aumento del volumen mamario
cial se aprecian hechos atípicos. El mejor indicador de adre- en un adolescente sano tras el comienzo de una pubertad nor-
narquia es el sulfato de dehidroepiandrosterona (SDHA): nive- mal (6-12 meses desde el comienzo-estadio III de Tanner). AI
les de este metabolito superiores a 40-50 microgr/dL se principio suele ser unilateral y el paciente puede referir aumento
consideran indicadores de su inicio. La adrenarquia prema- de la sensibilidad. En la exploración se evidencia un nódulo de
tura se ha considerado como una variante normal del desa- consistencia firme, centrado, no adherido, ligeramente doloroso
rrollo sin consecuencias a largo plazo. Sin embargo, esta opi- a la presión y de un diámetro habitualmente de entre 0,5-4
nión ha sido recientemente cuestionada debido a que muchas cm. Parece el resultado de una disminución de la relación andró-
chicas con adrenarquia prematura muestran hiperinsulismo genos/estrógenos en el tejido mamario o bien de un aumento
prepuberal, aumento de la incidencia de disfunción ovárica, de la sensibilidad a unos niveles normales de estrógenos. El
hiperandrogenismo ovárico funcional, dislipidemia y obesidad examen físico debe ser suficiente para distinguir, en la mayoría
en la adolescencia(3,12), por lo que, aunque no precisa trata- de los casos, la verdadera ginecomastia de la pseudogineco-
miento, conviene programar controles periódicos de estos mastia producida por el aumento de la grasa. Los tumores de
pacientes. la mama, primarios o metastásicos, son raros y la exploración
• Telarquia precoz: desarrollo aislado del tejido mamario en la clínica muy diferente de la ginecomastia puberal. En el 90% de
niña menor de 8 años. El 60% de los casos aparece antes de los casos la ginecomastia puberal se resuelve espontáneamente
los 2 años y en un porcentaje importante ya está presente al en tres años, si el diámetro es inferior a 4 cm.
nacimiento. En la mitad de los casos el tamaño mamario se
mantiene estacionario, en un 10% aumenta progresivamente A PROPÓSITO DE LA EDUCACIÓN SEXUAL (ES)(16)
y aproximadamente en un tercio de las pacientes desaparece La ES no tendría que significar aleccionamientos ni acúmulo
de forma espontánea. El 14-18% de las niñas el cuadro desa- de información, sino la pretensión de ayudar a desarrollar chicos
rrollan una pubertad precoz, sin que en el momento del inicio y chicas con capacidad crítica y posibilidad de tomar decisiones
del cuadro presenten signos clínicos ni hormonales que nos libremente. Existe amplia bibliografía que demuestra que la ES con-
permitan predecir que pacientes van a desarrollarla, aun- tribuye a la asunción de mayores cotas de responsabilidad por
que frecuentemente, afecta a niñas en las que la telarquia parte de los y las jóvenes, retrasa la edad de inicio de las prime-
aparece después de los 2 años. El diagnóstico habitualmente ras relaciones coitales y disminuye la incidencia de infecciones de
es sencillo y consiste en la realización de una historia clínica trasmisión sexual. No educar es una forma –por omisión– de edu-
detallada, recogiendo especialmente la edad de aparición de car. Significa fomentar el “riesgo” y privar de herramientas para
la telarquia, la posible exposición de la niña a la acción de la vida.
estrógenos externos y la valoración de la edad ósea. La eco- La ES se debe enfocar desde el bienestar y la comunicación
grafía ovárica es muy útil en el diagnóstico diferencial entre interpersonal positiva y no exclusivamente desde el peligro y el
telarquia prematura aislada y pubertad precoz incipiente: los miedo. La prevención de riesgos es una parte fundamental pero no
signos más tempranos y característicos de la pubertad pre- cubre todas las posibilidades. Hablar de sexualidades, de opcio-
coz son el aumento de volumen del útero (> 1,8 mI) y del ova- nes y de respeto es el camino para evitar muchos sentimientos de
rio (>1,2 mL). La ecografía además nos permite descartar la culpa y sufrimiento.
posibilidad de un quiste ovárico productor de estrógenos. En Algunos errores o falacias cuando trabajamos con padres:
el caso de la telarquia aislada benigna de aparición dentro de • “Los niños aprenden solos”. Intenta justificar el pudor parental
los dos primeros años de vida, debemos limitamos a reafir- e incita a los niños a buscar fuentes de información alternativos
mar a los padres que se trata de un proceso benigno, autoli- no siempre acordes con la realidad.
mitado y compatible con un futuro desarrollo puberal normal • “Delante de los niños no”. Cuando los padres mantienen com-
a la edad adecuada. Es necesario un seguimiento clínico pro- portamientos de ocultamiento y vergüenza ofrecen a los niños
longado. patrones de conducta donde la sexualidad adquiere esas con-
• Ginecomastia(3,13): crecimiento glandular de la mama mascu- notaciones.
lina. Se presenta cuando, de forma transitoria o permanente, • “Los hijos son siempre pequeños”. La demora es una estrate-
disminuye la relación andrógenos/estrógenos. Se debe consi- gia frecuente, pero el tiempo pasa. La pubertad en lo que se
derar algo normal en neonatos, en la adolescencia y en per- refiere a interiorización de normas y valores puede que sea
sonas de avanzada edad. Toda ginecomastia prepuberal es, demasiado tarde.
por definición, patológica y obligará a un estudio adecuado. Se Los ámbitos en los que los sanitarios podemos participar en la
investigará la posible administración, tópica o por vía general, ES son múltiples: en la consulta diaria, revisiones del niño, ámbito
de fármacos y se registrará la edad de comienzo, así como otros escolar, medios de comunicación, etc. 5
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6
Comportamiento sexual y sus variantes
R. Hernández Guillén

Al igual que los demás aspectos en la infancia y adolescencia, la TABLA I. Desarrollo psicosexual o formación de la identidad
sexualidad presenta unas manifestaciones propias de cada etapa del sexual
desarrollo. En primer lugar, vamos a ver como se alcanza la identidad
sexual en los distintos momentos del desarrollo, después trataremos las Integrada por tres componentes:
distintas variantes normales del comportamiento sexual, para terminar 1. Sentido de pertenencia a un sexo
abordando las pautas que pueden ayudar al Pediatra de Atención Pri- 2. Actividad o papel sexual
maria en la evaluación de las conductas sexuales problemáticas. 3. Orientación sexual o la atracción o el interés romántico y/o erótico
hacia otra persona
DESARROLLO DE LA IDENTIDAD SEXUAL
Desarrollo psicosexual es sinónimo de identidad sexual y a su vez, Rutter 1980(2).
forma parte de la identidad del yo o lo que es lo mismo del concepto
íntimo que tenemos de nosotros mismos y de lo que somos. En la mayo-
ría de los individuos la identidad sexual es coincidente con su fenotipo del hipocampo que se relaciona con el proceso de identidad sexual
sexual. que continuará durante toda la adolescencia.
El recién nacido no tiene conciencia de su sexo ni tampoco una Las enseñanzas de los padres, las recompensas y castigos que
conducta con él relacionada. Conocimiento y conducta se desarrollan recibe el niño, derivados de su forma de actuar, y la imitación de
gradualmente a lo largo de la infancia y adolescencia. Hay diferentes personas significativas para el niño serán determinantes en la adqui-
teorías que han tratado de explicar esta evolución, resaltando la influen- sición de la identidad del yo.
cia del aprendizaje cognitivo y emocional en la interacción con los La identificación es un proceso en parte inconsciente que impulsa
padres, los iguales y el medio social. al niño a querer comportarse y ser como la persona que está utili-
Saber a qué sexo pertenece, se desarrolla de forma gradual. Pri- zando como modelo. Habitualmente será el padre el modelo a imi-
mero el niño aprenderá a decir si es niña o niño, posteriormente sabrá tar en el caso del varón. Hay dos aspectos que se cree que facili-
que el sexo es estable y más tarde que es constante, que no cambia. tan la adopción de determinada persona como modelo: 1) debe
Inclinarse hacia unos juegos y elegir o preferir determinados compa- provocar en el niño el deseo de poseer alguno de los atributos exter-
ñeros para jugar o estar con ellos se manifiesta antes de que el niño nos del supuesto modelo y 2) tiene que pensar que él y el posible
alcance el concepto de consistencia del sexo que se tiene(1). modelo son similares en algunas cosas.
La identidad sexual o de género (Tabla I) es la forma de perci- Se pensaba que la identidad sexual y la conducta sexual depen-
birse a sí misma la persona como hombre o como mujer y de la que dían fundamentalmente del ambiente y forma de crianza, esto es
se derivan conductas y actitudes. Está formada por tres elementos: del aprendizaje, independientemente de su sexo cromosómico.
a) sentido de pertenencia, b) conducta o papel sexual y c) orienta- Pero el estudio a largo plazo de niños varones que al nacer se les
ción sexual(2). asignó una identidad sexual femenina, porque quirúrgicamente tenía
a. Sentido de pertenencia: a partir de los tres-cuatro años los niños mejor resultado la reconstrucción del aparato genital (presentaban
saben decir si es niño o niña y también puede identificar el género extrofia de cloaca), desmiente este postulado, por el número de
de los otros, aunque solo se fijan en el aspecto externo (pelo, ropas). ellos que han tenido problemas de identidad sexual. En la actuali-
A partir de los 6-7 años saben que el cambio de peinado, ropas o dad se consideran determinantes para el desarrollo posterior de la
juegos no implica que se cambie de sexo, es decir, que el sexo es identidad sexual del individuo, la influencia que ejercen durante
una característica permanente. Por lo general, también a partir de la etapa fetal, tanto las hormonas masculinas (factor biológico más
los tres años, se establece un convencimiento interior de perte- potente de la identidad sexual) como la acción directa de los fac-
nencia a un sexo, que se pone de manifiesto a través de la con- tores de transcripción del cromosoma Y (SRY, ZFY) sobre el cere-
ducta del niño. bro del feto durante la vida embrionaria(4,5).
Hay algunas conductas sociales que son diferentes o que predo- b. Actividad o conducta sexual (Tabla II)(6): desde el nacimiento y durante
minan en función del sexo al que se pertenezca. A partir de los 3- toda la infancia la estimulación de los genitales externos produce
5 años las niñas prefieren jugar con otras niñas, juegan con las satisfacción y placer. Durante la infancia, se pueden observar
muñecas y a juegos que implican menos actividad física. En gene- juegos sexuales normales. Hasta los cinco años suelen tocarse los
ral a los niños les gusta jugar con los niños y sus juegos suelen ser genitales ante la gente si son niños, las niñas se tocan menos en
más violentos y de más actividad física. Los niños suelen ser más público. Tanto los niños como las niñas se sienten atraídos por el
agresivos y tienen conductas menos socializadas que las niñas. pecho de las mujeres, suelen tocarlos. Tanto los niños como las
La identidad sexual es parte de la propia identidad del individuo niñas entre los tres años hasta el inicio de la pubertad suelen mos-
y desde la primera infancia comienza su desarrollo(3). Son muchos trar mucha curiosidad sobre los genitales del otro sexo, sobre el
los factores biológicos y ambientales que influyen en su formación. cuerpo desnudo o cuando se desvisten delante de ellos, también
Al comienzo de la pubertad, las hormonas gonadales (estrógenos, sobre la conducta sexual de los adultos o ante diferentes expre-
testosterona) aumentan en cantidad, siendo esenciales para com- siones eróticas. Los juegos de médicos y enfermeras o de papás
pletar el desarrollo de los genitales externos, los caracteres sexua- permiten que puedan ver y tocar el cuerpo y los genitales de sus
les secundarios y también producen cambios en el núcleo estriado compañeros de juego. A partir de los diez-doce años los niños y 7
TABLA II. Actividad sexual y desarrollo incluso universitarios con ideas tan equivocadas y peregrinas como
creer que masturbarse produce “granos” que “agranda las orejas” o
De 2 a 5 años cualquier otro mal(10).
Se aproximan excesivamente a las personas
Se tocan los genitales en público, las niñas habitualmente en Actividad heterosexual
privado En cuanto los adolescentes entran en la pubertad la actividad sexual
Tocan o tratan de tocar el pecho de sus madres o de otras mujeres aumenta rápidamente y en la actualidad, la mayoría de los adolescen-
Tratan de ver a las personas desnudas o desvistiéndose tes de nuestra sociedad tienen una vida sexual activa, aunque no es en
De 6 a 9 años ningún modo excepcional que algunos practiquen la abstinencia. Dada
la importancia de las enfermedades de transmisión sexual y otros pro-
Se tocan los genitales en privado
blemas como los embarazos en adolescentes, es de capital importan-
Curiosidad por ver el cuerpo humano adulto desnudo cia mejorar la educación sexual de nuestros adolescentes(11).
Interés por ver manifestaciones eróticas La media de edad en la que empiezan a tener experiencias hete-
De 10 a 12 años rosexuales (besos, abrazos, roces, etc.) es de 13 años para los niños
Interés manifiesto de carácter platónico por el sexo opuesto y de 14 para las niñas. Para la primera relación sexual la media de edad
son los 17 años. En la década de 1950 solo el 1% de las chicas y el 5%
Friedrich WN. Barbaresi WJ 2002(4). de los chicos habían tenido relaciones sexuales, frente al 20 y 30% res-
pectivamente de la década de 1990(12). Son muchos los problemas aso-
ciados a esta precocidad en los comportamientos sexuales como: las
niñas tienen mucho interés por el sexo opuesto y se sienten atraí- enfermedades de transmisión sexual, los trastornos depresivos aso-
dos de forma romántica por alguno de sus compañeros o ídolos del ciados a la pérdida de la pareja, los embarazos no deseados y también
espectáculo. los abortos (más del 50% de las adolescentes embarazadas recurren
Durante la adolescencia se produce un incremento en la impulsi- al aborto)(13). En 1990 la tasa de abortos en menores de 18 años fue del
vidad y deseo sexuales que están relacionados con el pico en la 21% y en el 2000 alcanzó el 48% (subió 27 puntos en diez años). En
secreción de andrógenos. Unido a este ambiente interno hormo- cuanto a embarazos, en 1990 había 6,42% embarazos con menos de
nal, la ausencia o presencia de estímulos sexuales exteriores y/o 18 años por cada 1.000 embarazadas y en el año 2000 subió a 10 por
de experiencias sexuales previas pueden ser de forma conjunta cada 1.000 (lo que supone una subida del 31% en la última década).
determinantes en la sexualidad de los adolescentes. Tales expe- Quedarse embarazada durante la adolescencia conlleva una serie de
riencias no solo pueden afectar a la intensidad del impulso sexual riesgos como: partos prematuros, bajo peso del recién nacido, reduc-
sino también a la elección del objeto sexual. ción de las probabilidades de un nuevo embarazo y otros(14).
c. Orientación sexual: aunque desde la etapa escolar los niños se sien-
ten atraídos de forma platónica por otros niños, es en la adoles- Conductas homosexuales
cencia donde se empieza a desarrollar en su total plenitud. En el La homosexualidad es la atracción sexual y emocional persis-
adolescente la orientación sexual puede separarse de la norma con tente hacia los miembros del mismo sexo. El Comité de Adolescencia
la consiguiente carga de estrés para el adolescente aumentado los de la Academia Americana de Pediatría(15,16) a partir de 1983 ha emitido
riesgos de desarrollar alteraciones psicopatológicas(7,8). informes sobre homosexualidad y adolescencia con una periodicidad
de diez años. Consideraron que era pertinente publicar ese primer
VARIANTES NORMALES DEL COMPORTAMIENTO SEXUAL informe porque el decenio anterior había presenciado un cambio de
Masturbación actitud frente a esa orientación sexual, (dejó de ser trastorno mental en
Es la estimulación de los genitales para provocarse placer. Es común 1973), y por el impacto que había supuesto el virus de la inmunodefi-
a niños y niñas. Puede aparecer desde los primeros meses de vida y a ciencia humana. Aconsejan que los pediatras que asisten a adoles-
veces provoca cambios similares a un orgasmo: hay una excitación centes conozcan los aspectos médicos y psicosociales de los jóvenes
importante, movimientos pélvicos, jadeo, rubefacción facial; en estos con orientación homosexual.
casos el niño tiene más de 2-3 años. Habitualmente no tiene un signi- Etiología y prevalencia. Se desconoce la frecuencia en que chi-
ficado patológico, pero hay que descartar que no reciba un trato negli- cos o chicas pre y adolescentes están involucrados de forma ocasio-
gente o que esté siendo objeto de abuso sexual en aquellos casos en nal o regular en actividades homosexuales como por ejemplo la mas-
que se considere excesiva o compulsiva(9). turbación mutua. La conducta sexual durante este período de la
La mayoría de los adolescentes varones se masturban más o menos adolescencia, no predice la orientación sexual en el futuro. Se estima
ocasionalmente para obtener placer y para disminuir la tensión sexual. que el 15% de los varones que viven en internados o comunidades
El hábito es probablemente menos frecuente en las chicas. No se con- cerradas masculinas, pueden tener actividad homosexual, frente al 3-
sidera que la presencia o ausencia de masturbación tenga signifi- 4% de la población masculina normal. Por ello se cree que solo una
cado patológico. pequeña cantidad de chicos que hayan podido tener actividad homo-
En el caso de los adolescentes con retraso mental, puede consti- sexual durante la adolescencia continuará con ella durante la edad
tuir un problema, porque lo hagan de forma habitual en público, gene- adulta. En las niñas pre y adolescentes se estima que hay actividad
rando malestar en su entorno. En estos casos puede ser necesario tra- homosexual en el 10% y en la edad adulta está presente en el 1-2%.
tamiento de modificación de la conducta, para que admita retirarse a La etiología de la homosexualidad no está resuelta. Se sabe que
su cuarto o contenerse si no está solo. ha existido desde siempre, en todas las sociedades y culturas. La socie-
Algunos adolescentes intelectualmente normales pueden experi- dad ha rechazado, estigmatizado e incluso penalizado la orientación
mentar sentimientos de culpa de importancia, en relación con la mas- homosexual, con la excepción de algunos ámbitos fundamentalmente
turbación. La obtención de información a través de los programas de artísticos que se han mostrado más permisivos. En general los indivi-
educación sexual sobre la universalidad del hábito y la ausencia de duos tienden a ocultar que son homosexuales. Por otra parte, solo desde
efectos adversos derivados de la masturbación, deberían ser de utili- 1973 se deja de considerar trastorno mental por parte de la Sociedad
8 dad, pero todavía no es infrecuente encontrarnos con adolescentes Americana de Psiquiatría recalificándola de orientación o expresión
sexual(15). Cada vez hay más pruebas de la contribución genética. La TABLA III. Evaluación de una conducta sexual problemática
concordancia entre gemelos homocigóticos es mayor que entre hete-
rocigóticos. También es frecuente que los adolescentes con antece- 1. Frecuencia: ocasional o persistente
dentes de trastorno de identidad sexual en la infancia, evolucionen hacia 2. Contexto: interfiere en las relaciones con sus iguales, con sus
una orientación homosexual durante la edad adulta. No está determi- padres, con los profesores
nado el papel que pueden desempeñar los antecedentes de abuso 3. Riesgo: derivado del tipo de conducta: relaciones precoces,
sexual durante la infancia o adolescencia. promiscuas, sin profilaxis (adolescentes)
Concepto y tratamiento. En la adolescencia es frecuente la con- 4. Falta de consentimiento
fusión sobre la orientación sexual. En estos casos puede estar indicado 5. Edad: niños con edad y capacidad cognitiva diferente
y beneficiarse de una asesoría u orientación psicoterapéutica. El tra- 6. Intimidación: si hay amenazas físicas o psicológicas
tamiento dirigido específicamente hacia el cambio de orientación sexual 7. Otros problemas de conducta asociados: mentir, robar,
no está indicado, porque puede provocar ansiedad y culpa, pero desobedecer, crueldad, absentismo escolar, alcohol, etc.
además las posibilidades de conseguir un cambio son prácticamente 8. Existen o no factores desencadenantes o de estrés coincidentes
nulas(15,16).
9. Familia: costumbres, criterios en cuanto a la sexualidad, posibilidad
Los jóvenes con orientación homosexual con frecuencia luchan con- de sobreestimulación sexual
tra ella y se sienten muy aislados incluso dentro de sus familias. Por ello
estos jóvenes son a veces más vulnerables a presentar distintos pro- Friedrich WN, Barbaresi WJ. 2002(6,7).
blemas psiquiátricos, siendo los más frecuentes: conducta suicida y
suicidio, depresión, abuso de drogas, estrés, violencia física y victimi-
zación en la escuela o en su entorno(6-8,15,16). GLOSARIO (Definiciones de la Academia Americana de Pediatría)(15,16)
Los pediatras deben poder dar, de forma confidencial, informa- – Identidad sexual: sensación personal de la propia masculinidad o
ción positiva, actual y no crítica a aquellos jóvenes homosexuales que feminidad. Aparece típicamente hacia los tres años de edad.
puedan acudir en busca de asesoramiento y consejo. Deben ofre- – Papel sexual: expresión pública de la identidad sexual. Forma
cer ayuda para afrontar las dificultades que entraña su orientación de actuar y de elegir que señalan a los demás la masculinidad o
sexual y realizar un screening de posibles trastornos asociados como feminidad de una persona.
depresión, abuso de sustancias o enfermedades de transmisión – Orientación sexual: patrón persistente de atracción física y/o emo-
sexual(18). cional hacia los miembros del sexo opuesto o del mismo sexo. Se
incluyen en ella: la heterosexualidad (atracción hacia el sexo
EVALUACIÓN DE CONDUCTAS SEXUALES PROBLEMÁTICAS(6) opuesto); la homosexualidad (atracción hacia el mismo sexo); la
(Tabla III) bisexualidad (atracción hacia sujetos de los dos sexos). En la actua-
Pueden ser motivo de consulta al pediatra determinados com- lidad prefieren los términos para las mujeres homosexuales el de
portamientos de carácter sexual que resultan incómodos o perturba- lesbianas y para los hombres el de “gay”.
dores para la familia o los que conviven con el niño. Algunas de estas – Trastorno de identidad sexual (TIS): deseo intenso y persistente
conductas pueden ser: un lenguaje muy sexualizado, interés excesivo de ser del sexo contrario al que se pertenece. Como entidad psi-
sobre actos o imágenes de contenido erótico o sexual, exhibicionismo, quiátrica, está en la actualidad en debate.
forzar a participar en los intercambios sexuales a sus iguales, u otro tipo – Disforia sexual: engloba un grupo heterogéneo de individuos, que
de violencia o intimidación sexual. Estas conductas, pueden darse de expresan diferentes grados de malestar con su diferenciación sexual
forma aislada o formar parte de otros trastornos y manifestarse desde anatómica. Indica que hay un conflicto entre la identidad sexual y
edades muy tempranas. el sexo asignado. Suele iniciarse en la infancia. En algunas perso-
Para determinar si es anormal una forma de conducta tenemos que nas puede ser transitoria y relacionada con situaciones de estrés
hacer un despistaje de la misma, y averiguar si los padres o cuidado- específicas(10).
res consideran que es normal o anormal la conducta estudiada. Es fun- – Transexual: es el grado más extremo del trastorno de identidad
damental evaluar las características de la familia y sus costumbres. sexual. El individuo cree ser del sexo opuesto al que biológicamente
También debemos saber que puede haber alteraciones conductuales pertenece. La persona con este trastorno desea ser transformado
que no son persistentes y que pueden estar relacionadas con situa- mediante tratamiento hormonal y quirúrgicamente para que se le
ciones de estrés familiar o ambiental. reasigne un nuevo sexo y ocupar su papel en la sociedad. El tran-
El comportamiento sexual problemático, tanto en los niños como en sexualismo se da prácticamente en todos los grupos étnicos. Hay
adolescentes, puede ser un síntoma más de otros trastornos psiquiá- subtipos diferentes según la orientación sexual que desarrollen
tricos como: trastornos de ansiedad, trastorno bipolar, estrés postrau- en la edad adulta: a) con orientación homosexual, b) heterosexual.
mático, trastorno de conducta, déficits en la capacidad de interacción c) bisexual y d) sin orientación sexual.
social, delincuencia y trastornos del desarrollo. Durante la edad esco- – Trasvertido: no es indicativo de orientación sexual. Al individuo
lar siempre hay que descartar la posibilidad de trato negligente así como le gusta vestirse con ropas del otro sexo y siente satisfacción por
estar conviviendo en un ambiente familiar con sobreestimulación eró- ello.
tica, incluyendo los abusos sexuales. Niños con enfermedad de Guilles – Homofobia: temor o aversión irracional de la homosexualidad.
de la Tourette, que cursa con tics crónicos graves, pueden de forma Puede expresarse por estereotipos, estigmatizaciones o prejuicios
compulsiva tener un lenguaje provocativo u obsceno, y también hacer sociales. Puede interiorizarse en forma de autoaversión.
gestos igualmente hipersexuales y reiterativos. En estos casos el trata-
miento es el de su trastorno de base. BIBLIOGRAFÍA
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10
Desarrollo sexual anormal. Trastornos de la identidad
sexual
M. Rodrigo Alfageme

INTRODUCCIÓN TABLA I. Diferenciación sexual atípica


Pertenecer a uno de los dos sexos queda determinado en el mismo
momento de la fecundación, pero el proceso de la diferenciación sexual A. Diferenciación cromosómica/gonadal:
conlleva alcanzar sin quebrarse tres etapas consecutivas: 1) la dife- a) Síndrome de Klinefelter (47XXY) Genitales masculinos, pequeños
renciación cromosómica (sexo genético), 2) la diferenciación gonadal b) Síndrome de Turner (45XO) Genitales femeninos. Ovarios
y hormonal (sexo gonadal) y 3) la diferenciación genital o fenotipo sexual. (o disgenesia gonadal) atróficos
En el individuo normal, las tres coinciden(1).
B. Pseudohermafroditismo femenino: niñas con genitales virilizados de
DIFERENCIACIÓN SEXUAL ATÍPICA. ESTADOS INTERSEXUALES intensidad variable por:
Concepto a) Madre con tumor virilizante durante el embarazo o por medicación
Se utiliza el término de intersexo o estado intersexual, para definir (p. ej.: progestágenos)
aquellas personas en las que hay incongruencias entre una o más de b) Hiperplasia adrenal congénita o síndrome adrenogenital: genitales
las distintas etapas de la diferenciación sexual (cromosómica, gonadal, ambiguos, si es niña
hormonal y genital). En los estados intersexuales no siempre los geni-
tales son ambiguos, y si lo son, el grado de ambigüedad también es C. Pseudohermafroditismo masculino: niños con 46 XY, poco virilizados
muy variable; por ello, al nacimiento o en el periodo neonatal puede no 1. Síndrome con insensibilidad a los andrógenos (feminización testicular)
haber alteraciones médicas ni en los genitales externos que hagan sos- a) Parcial: 46XY, genitales femeninos casi normales, o ambiguos
pechar el trastorno. En estos casos el problema puede permanecer b) Completo: 46 XY pero con genitales externos femeninos
ignorado hasta etapas más tardías de la vida y así hacerse el diag- Crecen con apariencia externa completamente femenina
nóstico en la infancia, al estudiar un retraso en la talla, en la adoles- 2. Deficiencias enzimáticas: afectan la síntesis de testosterona o la
cencia por un retraso en la menarquia, o bien en la edad adulta al estu- conversión de testosterona a DHA. Los genitales externos se afectan,
diar una esterilidad. No se conoce la prevalencia de los estados pero los genitales internos son normales y los ductos de Müller regresan
intersexuales, se estima que está dentro de un rango de 0,1 a 2%. a) Déficit de 5alfa RD: XY. Testes. Genitales ambiguos/femeninos
Por otra parte, hay una serie de trastornos que sin tener alteracio- b) Déficit de 17 beta HSD: XY. Testes. Genitales ambiguos/femeninos
nes en la diferenciación sexual propiamente dicha, cursan con mal-
formaciones en el aparato urogenital, provocando genitales externos D. Otros trastornos asociados con genitales ambiguos:
ambiguos de mayor o menor gravedad. Pertenecen a este apartado: la
Extrofia de cloaca
extrofia vesical, la agenesia de pene, micro pene, testículos evanes-
Micropene congénito idiopático
centes, hipospadias graves, hipoplasia de las células de Leydig, etc.
Todos estas malformaciones provocarán dificultades en el momento de Agenesia congénita de pene
asignar el sexo al neonato. Hermafroditismo verdadero
Disgenesia gonadal mixta
Clasificación de los estados intersexuales(2,3) (Tabla I) Hipoplasia de las células de Leydig
Los trastornos en la diferenciación sexual o estados intersexuales Síndrome de los testículos evanescentes
se clasifican en torno a dos organizadores principales que son: el sexo Fusión de labios posteriores
genético, determinado mediante un cariotipo y el sexo gonadal deter-
Megaloclítoris
minado mediante histología del tejido gonadal. Pueden dividirse en tres
grandes grupos: 1) el pseudohermafroditismo femenino (en el que solo DHA: dehidroepiandrosterona; RD: reductasa; HSD: hidroxiesteroide
está presente tejido ovárico) o masculino (en el que está presente tejido deshidrogenasa.
testicular); 2) el hermafroditismo verdadero (que tienen tejido ovárico y Cohen-Kettenis P, Pfäfflin F 2003(3).
testicular); y 3) los trastornos en la diferenciación gonadal o disgenesia
gonadal, completa o incompleta, donde una de las gonadas o ambas
son defectuosas. Se asocian con alteraciones en los cromosomas sexua-
les, bien en todas las células o en mosaico. Algunos tienen el cario- la acción de los andrógenos en el cerebro, desde el periodo neonatal,
tipo normal. (“sexo cerebral”), y la influencia que ello tiene en el comportamiento
sexual del adulto y en la identidad sexual parecen indicar el posponer
Tratamiento ambas actuaciones. No obstante, no hay todavía guías clínicas de actua-
El tema de esta ponencia, no es el tratamiento propiamente dicho ción bien definidas(4,5).
de los estados intersexuales. Constituyen un reto para el médico y por
su complejidad debe ser asumido por varios especialistas. Ultimamente Apoyo y orientación a los padres y a los propios niños, con
se está cuestionando el paradigma previo de actuación que consistía estados intersexuales o genitales ambiguos(6) (Tabla II)
en hacer lo antes posible la reconstrucción quirúrgica de los genitales Cuando el estado intersexual se pone de manifiesto desde el naci-
y la asignación de sexo. Se basaban en la función sexual tradicional y miento, hay que dar una información inmediata y lo más completa posi-
en la posibilidad o no de ser fértiles. Los conocimientos actuales sobre ble a los padres. Pero con frecuencia, el médico que hace esta infor- 11
TABLA II. Atención y orientación a los pacientes con estados TABLA III. Criterios diagnósticos para el trastorno de identidad
intersexuales sexual

Edad pre-escolar: de 3 a 5 años A. Identificación marcada y persistente con el sexo contrario


• La cirugía temprana En los niños tiene que haber cuatro o más de los puntos siguientes:
• La medicación 1. Deseos o la insistencia en que se es del otro sexo
• Las visitas al hospital 2. Preferencia por ponerse ropa o simular vestimentas del otro sexo
• Las exploraciones físicas 3. Preferencias por desempeñar el papel del otro sexo, o fantasías de
• La apariencia atípica de los genitales ser del otro sexo
Edad escolar: de 6 a 12 años 4. Participar en los juegos del otro sexo
• Problemas de lenguaje y aprendizaje 5. Preferencia por tener compañeros del otro sexo
• Problemas de relación social En los adolescentes y adultos: se manifiesta con un deseo firme de
• Pubertad precoz pertenecer, ser considerado, vivir o ser tratado como del otro sexo.
También tienen la convicción de que sienten y reaccionan como los
• Estatura corta o excesiva
del otro sexo
• Información adicional sobre medicación (hormona de crecimiento)
B. Sentimiento de desempeñar un papel inadecuado a su identidad
Adolescencia. Escuela secundaria: de 12 a 18 años
• Los niños: aborrecen sus genitales externos. Rechazo a orinar de
• Necesidad de hormonas feminizantes o masculinizantes pie. No querer tener pechos (las niñas). No les gusta jugar con los
• Ausencia de menstruación juguetes propios para su sexo
• Retraso o pubertad incompleta • Los adolescentes y adultos: piensan cómo tratarse para modificar
• Necesidad de tratamientos genitales (dilataciones vaginales) los caracteres sexuales secundarios: operándose, tomando
• Infertilidad hormonas, etc. Creer que se ha nacido con el sexo o los genitales
equivocados
• Ayudas técnicas cuando tengan contactos sexuales en relación a su
situación anatómica concreta C. No coexiste el trastorno con una enfermedad intersexual
Mayoría de edad: a partir de los 18 años D. La alteración es persistente y provoca malestar significativo o
• Explicar el cariotipo desajuste en el área social

Cohen-Kettenis 2003(6). Academia Americana de Psiquiatría (DSM-IV), 1995(7).

mación en los primeros momentos, es un médico en formación, con la experiencia de disconfor o malestar por el sexo biológico al que se
poca o nula experiencia en casos similares, y que posiblemente tenga pertenece, no por rechazar el papel que la sociedad exige hacer en
el mismo impacto emocional que tienen los padres del recién nacido. función del sexo que se tiene asignado. Hay autores que recomiendan
Es necesario emplear varias visitas, para posibilitar que los padres una actualización de los ítems diagnósticos. Apuntan los que defien-
entiendan el problema y puedan adaptarse emocionalmente al mismo. den este enfoque, que los criterios diagnósticos, se basan fundamen-
Cuando el diagnóstico se hace en edades posteriores, hay que talmente en el comportamiento de género más que en el sentimiento
incluir en el proceso informativo al propio niño, teniendo en cuenta interno de ser o no de determinado sexo. De esta forma se está eva-
sus capacidades cognitivas. En la tabla II se recogen los momentos luando principalmente papel sexual, más que identidad sexual. Tam-
que deben atenderse de forma específica. bién esos comportamientos cruzados, con el paso del tiempo van desa-
pareciendo en muchos casos, en parte por que el individuo los
TRASTORNOS DE LA IDENTIDAD SEXUAL (TIS) autocensura y corrige porque los rechaza la sociedad(8).
Concepto Los síntomas aparecen pronto, entre los 3-5 años, a veces incluso
La característica esencial de este trastorno es el rechazo intenso y antes. En el caso de los niños, manifiestan que quieren ser niñas,
profundo del sexo al que se pertenece junto con el deseo de ser o la pueden incluso decir que lo son, les gusta jugar con las muñecas de
insistencia de que él o ella es del sexo contrario. Esta alteración no se las niñas y elegir en los juegos los papeles femeninos, rechazan los jue-
trata de un inconformismo estereotipado relacionado con las posibles gos de mucha actividad física y los agresivos; les gusta tocar tejidos
ventajas que se derivan de pertenecer a uno u otro sexo sino una suaves, pintarse y maquillarse, incluso se ponen ropas de la madre.
alteración profunda con la propia identidad masculina o femenina. En
las niñas hay un rechazo marcado y duradero a las ropas femeninas e Etiología
insisten en vestir como un varón junto con una aversión a las caracte- No tenemos una explicación adecuada y contrastada que nos pueda
rísticas anatómicas propias. Los chicos tienen preocupación por las aclarar las causas del trastorno(9-11). Estudios en animales sugieren que
actividades propiamente masculinas y también rechazan sus caracte- una exposición del cerebro fetal a andrógenos, durante un periodo crí-
res anatómicos. tico, podría inducir conductas masculinas(12). En los humanos no hay
Aparece como entidad diagnóstica en 1980. Diez años antes, en dudas sobre la influencia que ejercen las hormonas masculinas tanto
1973, la homosexualidad fue oficialmente retirada del Manual de enfer- en el desarrollo corporal, como en el establecimiento de la identidad
medades mentales de la sociedad Americana de Psiquiatría (DSM). Los sexual. Los andrógenos, tienen una acción directa sobre el sistema ner-
criterios diagnósticos están recogidos en la tabla III(7). Hoy día se dis- vioso central durante la vida intrauterina, que actuaran sobre el senti-
cute si se debe seguir considerando un trastorno o si es mejor inter- miento de pertenencia al sexo masculino en etapas posteriores de la
pretarla como una variante atípica, no patológica, de la identidad sexual. vida. También hay pruebas que avalan la influencia sobre el cerebro de
12 Señalan que el diagnóstico de TIS solo debe hacerse cuando se tiene las hormonas masculinas segregadas durante el periodo puberal. De
TABLA IV. Comportamientos cruzados en el trastorno de TABLA V. Factores temperamentales y vulnerabilidad para
identidad sexual en la infancia desarrollar TIS
• Declaración de la identidad • Vulnerabilidad física, evitan juegos bruscos, de riesgo
• Juguetes preferidos • Timidez, miedoso (expresiones de excesiva ansiedad)
• Compañeros preferidos (contrarios a su sexo asignado) • Muy vulnerable a las separaciones y a las pérdidas
• Conductas amaneradas • Gran capacidad para conectar emocionalmente con otros
• Malestar y/o rechazo de su anatomía • Gran habilidad en la capacidad de imitar
• Juegos de violencia o toscos (rechazados o buscados) • Sensibilidad acusada para los sonidos, el color, la textura, el olor, la
temperatura y el dolor
Bradley, 1990(9). Modificado de Zucker, 1985.
Coates, 1990(17).

esta forma, las hormonas masculinas influirían en el proceso de identi-


dad, conducta y actividad sexuales(12-14). Se han encontrado diferencias una historia evolutiva minuciosa para detectar las manifestaciones tem-
anatómicas cerebrales entre los transexuales y no transexuales(15). Diver- pranas que nos pongan en la dirección correcta para hacer un diag-
sos autores han propuesto que la homosexualidad y el transexua- nóstico(18).
lismo son el resultado de una anomalía hormonal durante la vida intrau- No se conocen los factores que determinan que un niño con un tras-
terina que provocaría una diferenciación en el hipotálamo contraria a la torno de identidad sexual, evolucione posteriormente hacia una orien-
del sexo al que se pertenece. Se ha estudiado la prevalencia del TIS tación heterosexual, homosexual, o transexual. Algunos de los homo-
en gemelos y parece que hay un componente genéticamente deter- sexuales, con antecedentes de TIS en su infancia, continuarán con un
minado(16) y que el trastorno de identidad estaría más bien determinado malestar profundo hacia su sexo corporal y buscarán cambiarlo mediante
por la biología que por el ambiente. el uso de hormonas, y/o cirugía hasta en algunos casos conseguir
Los niños con TIS se han descrito con un temperamento que les una nueva asignación sexual(19).
haría vulnerables para que el trastorno se manifestara y desarro-
llara. Esos aspectos de temperamento se recogen en la tabla V(17). La Tratamiento
presencia en la vida del niño de modelos adultos a los que quiere En edades tempranas: entre los 3-5 años, lo más apropiado es cen-
parecerse o al contrario ser totalmente opuesto, por ejemplo, a una trar la intervención en los padres. Debemos descartar que estemos ante
figura paterna o materna que rechaza. Por ello, determinados ambien- un trato de los padres aberrante. Si el niño se muestra muy sensible e
tes, también puede ser de importancia sobre todo para niños vulne- inseguro y está sobreprotegido, tendremos que estimular a los padres
rables(9,17). para que den al niño el grado de independencia que le corresponda
por edad. Con respecto a los comportamientos cruzados, hay que inten-
Epidemiología tar reducirlos o quitarlos, los padres deben ser firmes pero no puniti-
No hay estudios de prevalencia en la población normal. Se toma vos. Hay también que informar a los profesores del niño, si su conducta
como referencia, la prevalencia de homosexualidad en la vida adulta. está presente en el colegio. Normalizar sus juegos y poder jugar con
Se considera que este trastorno o una variante subclínica del mismo se sus iguales, mejorará su aceptación en el colegio y ejercitará relacio-
da en el 3-4% de los niños. Por otra parte coincide con las estadísticas nes sociales.
sobre conductas cruzadas en niños considerados normales. Los lla- No está indicado hacer tratamiento psicoterapéutico con el obje-
mados comportamientos cruzados (Tabla IV) no son habitualmente tivo de lograr un cambio en la identidad u orientación sexuales, porque
motivo de consulta, y lo son menos cuando los niños son mayores por- no son eficaces(6,9,10).
que por lo general el propio sujeto intenta esconderlos ya que son recha-
zados por su entorno. Por sexos, la incidencia en niños es mayor, se BIBLIOGRAFÍA
estima que es de 7 niños por 1 niña, pero hay que tener en cuenta que 1. Rodrigo Alfageme M, Hernández Guillén R. Sexualidad y desarrollo. Tras-
los comportamientos femeninos en los varones provocan más rechazo torno de identidad sexual. Pediatría 2004; 148: 33-65.
social que a la inversa. 2. Grumbach MM, Hughes IA, Conte FA. Disorders of sex differentiation. En:
Larsen PR, Kronenberg HM, Melmed S, Polonsky KS (Eds.). Willians texbook
of endocrinology.10 th. Philadelphia: Saunders; 2003. p. 842-1002.
Curso clínico
3. Cohen-Kettenis PT, Pfäfflin F. Atypical sexual diferentiation. En: Cohen-Ket-
En la mayoría de los casos los comportamientos cruzados comien- tenis PT, Pfäfflin F (Ed.). Transgenderism and intersexuality in chilhood and
zan entre los 3 y los 5 años de edad e incluso a los 2 años. Típicamente adolescence. London: Sage Publications; 2003. p. 23:49.
en los niños hay una atracción hacia las ropas, maquillaje, joyas de la 4. Reiner Wg. Assignement of sex in neonates with ambiguous genitalia. Curr
madre bien para ponérselas o para jugar con ellas. En las niñas ade- Opin Pediatr 1999; 11: 363.
más de menos frecuente, también es menos manifiesto y/o también 5. Daaboul J, Frader J. Ethics and the management of the patient with inter-
mejor tolerado. Ellas suelen mostrar rechazo a sus genitales, o dicen sex: a middle way. J Pediatr Endocrinol Metab 2001; 14: 1575.
que quieren tener pene, y también pueden orinar de pie. Les gusta ves- 6. Cohen-Kettenis PT, Pfäfflin F. Clinical management of intersex conditions.
tir con ropas masculinas y prefieren estar con niños y jugar a sus jue- En: Cohen-Katenis PT, Pfäfflin F (Ed.). Transgenderism and intersexuality in
chilhood and adolescence. London: Sage Publications; 2003. p. 85-104.
gos. Los varones preferirán los juegos de las niñas, estarán más agusto
7. Academia Americana de Psiquiatría. Manual diagnóstico y estadístico de
en compañía de niñas y en sus juegos adoptarán las figuras femeninas. los trastornos mentales (DSM-IV). Versión en español. Barcelona, 1995.
A partir de los 8-12 años, puede hacerse muy evidente en los varo- 8. Wilson I, Griffin C, Wren B. The validity of the diagnosis of gender identity
nes, ademanes muy estereotipados en la forma de hablar y moverse, disorder (child and adolescent criteria). Cl Child Psychl & Psychtr 2002; 7
que puedan ocasionar el rechazo y burlas de sus iguales provocando (3): 335-51.
el aislamiento, e incluso agresiones. 9. Bradley Sj. Gender dysphorias of chilhood and adolescence. En: Garfinkel
Cuando se van haciendo mayores, las conductas tempranas pro- BD, Carlson GA, Weller EB (Eds.). Psychiatric disorders in children and ado-
pias del trastorno, pueden haber desaparecido y habrá que hacer lescents. Philadelphia/London: Saunders Company; 1990. p. 121-34. 13
10. Mardomingo Sanz MJ. Trastorno de la identidad sexual. En: Mardomingo 16. Coolidge FL, Thede LL, Young SE. The heritability of gender disorder in
Sanz MJ (Ed.). Psiquiatría del niño y adolescente. Madrid: Díaz de Santos, a child and adolescent twin sample. Behav Genet 2002; 32 (4): 251-7.
SA.; 1994. p. 595-621. 17. Coates S. Ontogenesis of boyhood gender identity disorder in a child
11. Cohen-Kettenis PT, Goorenn LJ. Transexalism: a review of etiology, diagno- and adolescent twin sample. J Acad Am Psychoanalysis 1990; 18:
sis and treatment. Journal Psychosomatix Research 1999; 46 (4): 3315-33. 414-38.
12. Xu J, Burgoyne PS, Arnold AP. Sex differences in sex chromosome gene 18. Zucker KJ, Bradley Sj, Doering RW, Lozinsky JA. Sex-typed behavior in
expression in mouse brain. Hum genet 2002; 11: 1409-19. cross-gender identified children: Stability and change at one year follow-up.
13. Wilson JD. The role of androgens in male gender role behavior. Endocr Rev J Am Acad Child Psych 1985; 24: 710-9.
1999; 20: 726-37. 19. Cohen-Kettenis PT, van Goozen Shm. Sex reassignment of adolescent tran-
14. Barembaun SA, Bailey JM. Effects on gender identity of prenatal androgens sexuals: A follow-up study. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry 1997; 36:
and genital appearance: evidence from girls with congenital adrenal hyper- 263-71.
plasia. J Clin Endocrinol Metab 2003; 88: 1102-6.
15. Chung WC, Thede LL, Young SE. Sexual differentiation of the bed nucleus
of stria terminalis in humans may extend into adulthood. Journal Neurosc
2002; 22 (3): 1027-33.

14
Talleres Simultáneos

Guías anticipatorias en Pediatría de Atención Primaria


M. Duelo Marcos, E. Escribano Ceruelo1
Pediatra de Atención Primaria C.S .El Naranjo Área 9. Fuenlabrada, Madrid.
1Pediatra de Atención Primaria C.S. Barcelona. Área 8. Móstoles, Madrid

INTRODUCCIÓN dir la atención sanitaria más apropiada en circunstancias clínicas


Uno de los aspectos más importantes del trabajo de los pediatras concretas. Una de las limitaciones más importantes es que en el momento
de Atención Primaria (PAP) en la supervisión de la salud es el desa- actual, no hay pruebas que demuestren la utilidad de muchas de las
rrollo de actividades preventivas y de promoción de la salud dentro del recomendaciones. No obstante, la falta de evidencia respecto a algu-
programa del niño (PN)(1,2). El sostenimiento del sistema sanitario, la nas intervenciones no quiere decir que estas no deban realizarse(1),
mejora de la asistencia y de la calidad de vida de la población pasa por especialmente por la importancia del problema a prevenir (p. ej.: obe-
que la prevención sea su máxima prioridad. sidad).
En otros países existen desde hace tiempo grupos consolidados
Prevenir es mejor que curar de expertos (Task Force) que trabajan con esta metodología y elabo-
La promoción de la salud trata de mejorar por un lado las habili- ran informes sobre la pertinencia y aplicabilidad de las actividades pre-
dades de la persona individualmente, y aumentar la capacidad de gru- ventivas. En Estados Unidos existen actualmente tres grandes grupos
pos o comunidades, para que colectiva, o individualmente actúen que se ocupan de las intervenciones preventivas en la infancia y la ado-
con la finalidad de controlar los condicionantes de la salud. Una pro- lescencia:
moción de la salud eficaz produce cambios en estos condicionantes, • La Guide to Clinical Preventive Services del U.S. Preventive Ser-
tanto en los que están bajo el control del individuo: conductas indivi- vices Task Force(6). Evalúan el grado de evidencia científica de
duales orientadas a la salud y el uso de los servicios sanitarios, como la efectividad de las principales actividades preventivas realizadas
en los que no se pueden controlar: condiciones sociales, económicas en Atención Primaria.
y del entorno, así como las prestaciones sanitarias. Las acciones diri- • Las Guidelines for Health Supervision de la American Academy
gidas a mantener un estilo de vida saludable son la clave de una pro- of Pediatrics. Guía de las actividades preventivas aconsejadas
moción de la salud eficaz(3). La prevención primaria o universal incluye durante la infancia y la adolescencia(7).
los consejos y la mejora de conocimientos de padres e hijos en el desa- • El Bright Futures, editado por Morris Green y patrocinado por
rrollo de enfermedades prevenibles, la prevención secundaria o selec- el Maternal and Child Bureau del US Public Health Service(8). Da
tiva incluye la intervención en niños de riesgo. mayor importancia a la educación de la familia incluyendo el momento
La evidencia demuestra algún resultado en las intervenciones rea- psicológico evolutivo del niño.
lizadas por los sanitarios, y son poco concluyentes acerca de la efica- En Canadá: la Canadian Task Force on the Periodic Health Exa-
cia de los programas y mensajes de promoción de salud realizados por mination(9) ha analizado la evidencia científica de la eficacia de dis-
profesionales de Atención Primaria(4). En general, se reconoce que el tintas actividades preventivas (Evidence-based clinical prevention)
sector sanitario solo, no aporta grandes cambios a las conductas orien- y, entre ellas, las dirigidas a la infancia y la adolescencia.
tadas a la mejora o el mantenimento de la salud, es más bien la acción La Canadian Paediatric Society y el College of Family Physi-
coordinada con otros sectores sociales: el educativo (p. ej: salud buco- cians of Canada han publicado su Evidence based infant/child health
dental) y las medidas fiscales y legislativas (p. ej. obligatoriedad de uti- maintenance guides, incluyen tablas de actividades preventivas (Rourke
lizar asiento adecuado para el niño y el bebé en el automóvil, uso exten- baby record) basadas en la evidencia y organizadas por edades hasta
sivo del cinturón de seguridad, leyes antitabaco), las que se han los 5 años.
demostrado más eficaces. En España, el principal grupo de expertos está incluido en el Pro-
Desde el punto de vista de las actividades preventivas, la Pediatría grama de Actividades Preventivas y de Promoción de la Salud
de Atención Primaria ha obtenido una gran mejoría en la morbi-morta- (PAPPS), vinculado a la Sociedad Española de Medicina Familiar y
lidad infantil en los últimos 25 años gracias, fundamentalmente, al con- Comunitaria (SEMFyC), con un subprograma dedicado a Prevención
trol de las enfermedades infecciosas con la vacunación sistemática de en la Infancia y Adolescencia(PrevInfad)(10), grupo de trabajo a la
la población, y a las intervenciones de cribado o detección precoz. vez del PAPPS/SEMFYC y de la AEPap desde el año 2000.
En la actualidad, en nuestra práctica habitual las recomendaciones y La clasificación de la Canadian Task Force 2003, por su claridad
herramientas preventivas empleadas en Atención Primaria deberían y sencillez es la más utilizada para indicar la calidad de la evidencia
contar con el apoyo de la Medicina Basada en la Evidencia (MBE). Per- disponible y la fuerza de la recomendación para cada actividad con-
manecer actualizado en cualquier rama de la medicina resulta cada día templada en este texto (Tabla I). Así, por ejemplo, (II,B) corresponde
más difícil. Por un lado está la presión asistencial que todos sufrimos a Calidad de la evidencia II, Fuerza de la recomendación B. Si sólo se
y por otro el desarrollo científico con numerosas publicaciones. La meto- muestra uno de los valores, será la fuerza de la recomendación exis-
dología de la MBE pone a disposición del clínico atareado informa- tente para esa actividad preventiva.
ción médica valida y relevante que responde a las dudas clínicas, supone
un filtro de calidad ante el exceso de información. En cada actividad de OBJETIVO DEL TALLER Y JUSTIFICACIÓN
prevención, la eficiencia y la efectividad deben ir acompañadas de la El objetivo de este taller es repasar las recomendaciones actua-
sensatez, para no aumentar artificialmente el contenido y número de las les en forma de guías clínicas de cribado, consejos y recomendacio-
intervenciones preventivas, en unas consultas ya de por sí sobrecar- nes de actividades preventivas evaluadas con esta metodología, y expo-
gadas(5). Las guías clínicas y las guías anticipatorias son herramientas ner determinadas herramientas que nos parecen útiles para la práctica
que recogen recomendaciones que en ocasiones emplean MBE, y son habitual de los pediatras de Atención Primaria, práctica en constante
realizadas con el fin de ayudar a los médicos y a los pacientes a deci- cambio de necesidades. 15
TABLA I. Niveles de la evidencia científica y recomendaciones basadas en la fuerza de la evidencia científica

Niveles de la evidencia científica


Tipo de evidencia
I. Evidencia obtenida de al menos un ensayo clínico aleatorizado controlado o de un estudio de metaanálisis
II-1. Evidencia obtenida de ensayos clínicos con grupo control sin distribución aleatoria
II-2. Evidencia obtenida de estudios analíticos de cohortes o de casos y controles, preferentemente hechos en más de un centro o equipo de
investigación
II-3. Evidencia obtenida por múltiples series temporales con o sin intervención. Los resultados sorprendentes en experiencias no controladas
también pueden ser incluidos en este grupo de evidencia
III. Opiniones de reconocidos expertos, basadas en la experiencia clínica, estudios descriptivos o informes de comités de expertos

Clasificación de las recomendaciones basadas en la fuerza de la evidencia científica


Tipo de evidencia
A. Hay buena evidencia que sostiene que la actividad preventiva sea específicamente incluida en un examen periódico de salud
B. Hay suficiente evidencia que sostiene que la actividad preventiva sea específicamente incluida en un examen periódico de salud
C. Existe una evidencia conflictiva para la inclusión o la exclusión de la actividad preventiva en un examen periódico de salud, pero se puede
recomendar en situaciones especiales
D. Existe suficiente evidencia que sostiene que la actividad preventiva sea excluida de un examen periódico de salud
E. Existe buena evidencia que sostiene que la actividad preventiva sea excluida de un examen periódico de salud
F. Existe insuficiente evidencia (en calidad o cantidad) para hacer una recomendación de la actividad preventiva en un examen periódico de salud,
pero se puede recomendar en situaciones especiales

ESTRATEGIAS DE INTERVENCIÓN QUE SE HAN DEMOSTRADO EFICACES(10-13)

Actividad Nivel de evidencia Recomendación

SEGUIMIENTO RN < 15Oog – LM mejora DPM a largo plazo B


– Dx precoz retinopatía evita ceguera A

SMSL – L materna II-2 A


– Supino hasta 6º m II-2 A
– Evitar colchones, cadenas cuello II-2 A
– Tabaquismo II-2 A
– Tª 20-22° C II-2 A

LACTANCIA MATERNA – Elección 6 primeros meses I A


– A demanda I A
– No suplementos I B
– Refuerzo profesionales I B
– Consejo por escrito I B
– Rechazo publicidad I B
– Formación de los profesionales I A
– Apoyo grupal I B

LACTANCIA ARTIFICIAL – Alternativa L materna I


– No es preciso hervir el agua I
– Suficiente lavarse las manos I

ALIMENTACIÓN COMPLEMENTARIA – L materna exclusiva 6º m A


– Conservación LM en nevera B
– No aportes extras hasta 6º m B
– 50% de la E alimentación complementaria A
– Gluten 6-7 m B
– Alimentos potencialmente alergénicos 9-10 m B

SALUD BUCODENTAL – Flúor oral en grupos de riesgo II C


– Colutorios 5-6ª/diarios I B
– Geles y barnices I A
– Cepillado diario dentífricos 1.000-1.450 ppm II-2 A
– Sellado de fisuras I A
16
CRIBADOS(10,14-18)
Actividad Nivel de evidencia Recomendación

Control seriado P/T/PC hasta 2ª III B


Diagnóstico displasia evolutiva – Barlow y Ortolani neonatal precoz II-1 B
de la cadera – Asimetría de pliegues y clics con Ortolani y Barlow (-) II-1 B
Control 2 s
– Eco cadera (4-8 s) o Rx 3-4 m si FR o Expl dudosa II-3 B
Criptorquidia – Exploración RN, < 6 m, 12 m III B
– Derivación a los 6 m en RN N III B
– Derivación inmediata si bilateral y/o hipospadias III B
Anomalías de la visión – Neonato y lactante expl ojos B
– > 4 m fijación de la mirada y ausencia de estrabismo B
– Preescolar cribado universal optotipos B
Cribado de hipoacusia – Prueba electrofisiológica objetiva (OEA,PEA) II-1 B
– Cribado a RN de riesgo I A
– Lactantes y preescolares con FR III B

ACTIVIDADES PREVENTIVAS(10,19-22)
Actividad Nivel de evidencia Recomendación

ACCIDENTES – Accidentes de tráfico. Consejo de adecuados asientos en II-1 B


los vehículos.
– Consejo de barreras de seguridad en ventanas y escaleras I B
– Uso de cascos en ciclistas reduce lesiones encefálicas II-2 B
– Medidas de seguridad en piscinas II-2 B
– No dejar niños <3ª en la bañera B
– Incremento de conocimientos sobre intoxicaciones A
– Consejo en prevención de intoxicaciones I B
VIOLENCIA – Reconocer la violencia doméstica o abuso a la mujer III B
como prevención del maltrato infantil
– Visita domiciliaria a familias de alto riesgo desde RN a 2 a/mes I B,A (Canadian Task Force)

OTROS CONSEJOS(10)
Actividad Nivel de evidencia Recomendación

Prevención cáncer de piel – Advertir exposición excesiva o alto riesgo de Ca piel B

ACTIVIDADES DIRIGIDAS A LA PREVENCIÓN DE OBESIDAD(10)


Actividad Nivel de evidencia Recomendación

CRIBADO – Identificación pacientes de riesgo: obesidad padres, I


sobrepeso RN, sedentarismo, dieta inadecuada
– Identificación cambios IMC a partir de los 2 a: I
rebote adiposo < 5 a
ACTIVIDADES – PRG intervención múltiple: medio escolar:dieta, actividad
– Control comportamiento sedentario Prometedor
– Intervención familia padres y madres agentes del
cambio estilo de vida

SUPERVISIÓN DEL DESARROLLO PSICOMOTOR(10,23,24) 2. Identificar a aquellas familias de alto riesgo psicosocial (ARPS).
1. Identificar mediante anamnesis aquellos recién nacidos de riesgo • Antecedentes de trastornos psiquiátricos o de adicciones.
de trastorno del desarrollo psicomotor (DPM). (Tabla II) • Antecedentes de negligencia, abuso o maltrato en cualquier miem-
• Debe valorarse el DPM de todo niño desde su nacimiento hasta los bro de la familia.
2 a de edad. • Pobreza y marginalidad.
• Esta valoración puede realizarse en todas las visitas del programa • Madres adolescentes.
del niño sano. 3. Desarrollar programas de educación orientada al desarrollo en
• Debe procederse al estudio de las causas del retraso psicomotor casos de ARPS, ya sea de forma individual o grupal.
y a su derivación a centros especializados si es procedente. 4. Promoción de la lactancia materna como alimentación exclusiva en
• En los niños con riesgo de parálisis cerebral infantil se deben super- todos los niños y hasta los 6 meses de edad.
visar el tono muscular, los patrones posturales y los reflejos oste- 5. Realizar siempre que sea posible una visita al domicilio por parte
otendinosos. de un profesional de atención primaria en los casos de ARPS. 17
CALIDAD DE LA EVIDENCIA Y FUERZA DE LA RECOMENDACIÓN DE LAS INTERVENCIONES RELACIONADAS CON UNA MEJORÍA
EN EL DPM
Intervención Población Calidad de la EV y FR
Escalas del DPM Niños sanos III-C
Preocupaciones padres Niños sanos III-C
Interv neuroconductual Sanos o prematuros o riesgo PCI II-1-C
Interv neuroconductual RN de madres deprimidas II-1-B
Escalas de patrones posturales y motores Niños en riesgo de PCI II-1-B
Identificar riesgos de PCI Niños de 0-3 años II-2-B
Madres canguro Prematuros II-1-C
Visita a domicilio Alto riesgo psicosocial II-1-B
Lactancia materna Recién nacidos III-C

TESTS DE CRIBADO DEL DESARROLLO PSICOMOTOR TABLA II. Signos de alarma en la supervisión del desarrollo
Test de Denver (Denver II) psicomotor
Valora el desarrollo psicomotor del niño desde el nacimiento hasta Área evaluada Signos de alarma
los 6 años de vida. Para los nacidos antes de las 38 semanas de ges-
tación la edad debe corregirse hasta los dos años. Social • No sonrisa social > 2 meses
En la literatura anglosajona se refieren a él como Developmental • No fija la mirada > 2 meses
• Irritabilidad permanente
Screening Test II (DDST-II). Segunda revisión o Denver II. Según el pro- • Persistencia del reflejo de moro > 6 meses
pio autor las principales diferencias entre el Denver II y la primera ver- • Pasar ininterrumpidamente de una actividad a
sión son: 1) Un aumento del 86% en ítems de lenguaje; 2) Dos ítems de otra > 34 meses
pronunciación; 3) Una escala de edad diferente; 4) Una nueva cate- • No desarrollo del juego simbólico > 24 meses
goría de interpretación para detectar retrasos más leves; 5) Una escala Manipulación • Adducción permanente de los pulgares > 3 meses
de conducta; y 6) Nuevos materiales en el maletín original. • Asimetría permanente de las manos
Es el test de cribado más extensamente utilizado e investigado.
Postural • Hipertonía de adductores (suele aparecer
Tiene una sensibilidad del 43%, una especificidad del 83% y un VPP 4-8 meses)
del 37%. De la aplicación de este test se producirá por tanto, un exceso • No sujeción cefálica > 3 meses
de derivaciones y nuevas valoraciones, de las que el 14 % son debidas • No deambulación > 18 meses
a la motricidad gruesa, 39% a la motricidad fina y al área personal-social Lenguaje • Pérdida del balbuceo
y el 47% al lenguaje. • Esterotipias verbales > 24 meses
La edición en español está disponible en: http://www.denverii.com/ • Lenguaje incomprensible > 36 meses
DenverII.html

Test de Haizea-Llevant TESTS ESPECÍFICOS


Este test ha sido realizado en España, utilizando áreas de valora- Cribado de transtorno por déficit de atención (TDH-A)
ción muy similares a las del DDST-II y se aplica de forma rutinaria en Es el trastorno neuropsiquiátrico más frecuente en la edad escolar.
los programas del niño de algunas Comunidades Autónomas (Cataluña, La prevalencia varía según los estudios oscilando entre el 3 y el 7% de
País Vasco, Aragón y La Rioja). Aplicable a niños menores de 4 años. los niños entre 6 y 16 años. La importancia de su correcto diagnóstico
radica en que tiene un riesgo moderado-alto de producir problemas
Test de Crecimiento Psicológico secundarios graves. Está infradiagnosticado en nuestro medio, y tiene
Englobado en el estudio enKid, que valora también aspectos físi- un tratamiento eficaz en el 80% de los casos.
cos y nutricionales, además del desarrollo psicomotor. No pretendemos tratar el tema de forma exhaustiva sino presen-
Se aplica a niños de 2 a 14 años. Se compone de dos partes: tar dos herramientas útiles para establecer la sospecha diagnóstica. Se
1. Un cuestionario específico para cada edad que recorre cinco áreas: emplean los criterios diagnósticos según el manual DSM-IV de la Aso-
motor-postural, cognitiva, comunicativo-lingüística, afectivo-emo- ciación Americana de Psiquiatría con el Cuestionario de Conners para
cional y social-adaptativa. Alterna preguntas a los padres con prue- profesores y padres (Tabla III)
bas que ha de realizar el pediatra/enfermera y que necesitan el
material que viene incluido en el maletín del test. Cada ítem se pun- Cribado de los trastornos del espectro autista
túa de 0 a 2 (se explican los criterios de valoración en cada cues- 1. No se recomienda el cribado sistemático de trastorno del espectro
tión). Se adjunta una tabla con el punto de corte de la puntuación autista (TEA) con tests específicos en todos los niños en la super-
para el percentil 5, por debajo del cual se establece la sospecha visión general del desarrollo psicomotor.
de retraso o alteración en esa área. 2. Los niños que son hermanos, con mayor motivo si son gemelos, de
2. Un cuestionario sobre “señales de alerta” que consta de 25 pre- niños con TEA u otros trastornos no clasificados del desarrollo psi-
guntas y es común a todas las edades, también se puntúa de 0 a comotor deben ser sometidos a tests específicos de cribado tipo
2 según la respuesta sea “nunca”, “a veces” o “siempre” que sirve CHAT-M (Tabla IV).
para reafirmar la posible situación de retraso. 3. Los niños que presentan algunas de las características, síntomas
Este interesante test, por su brevedad y sencillez, se ha distribuido o indicadores de riesgo de TEA deben realizar los tests específicos
a los pediatras españoles tras un estudio piloto realizado con 277 niños de cribado tipo CHAT o ASSQ.
de la Comunidad de Madrid. y ha recibido el apoyo de la Asociación 4. Los niños que resultan positivos en el test de cribado CHAT en dos
Española de Pediatría. Está pendiente de la validación definitiva por ocasiones con un intervalo de un mes, deben remitirse a un espe-
18 lo que no se dispone de su valor predictivo positivo y negativo. cialista para pruebas diagnósticas específicas para TEA.
TABLA III. Criterios diagnósticos DSM-IV. Cuestionario de conners para profesores y padres

Criterios diagnósticos según el manual DSM-IV del TDA-H


• TDA-H global o combinado: presencia de 6 síntomas de cada una de las dos listas
• Déficit de atención aislado: 6 o más ítems de la lista 1, < 6 ítems lista 2
• Hiperactividad aislada: < 6 ítems lista 1, > 6 ítems lista 2
• Algunos de los síntomas han comenzado antes de los 7 años
• Los síntomas se presentan al menos en dos ambientes. Por ejemplo en casa y en el colegio
• Está afectada la actividad social y académica
• Se descarta la existencia de un trastorno generalizado del desarrollo, esquizofrenia u otra entidad que justifique la sintomatología

Lista 1: déficit de atención Lista 2: hiperactividad e impulsividad


– No presta atención a los detalles y comete errores en las tareas – Se mueve frecuentemente en el asiento
escolares y otras actividades por descuido – Le cuesta permanecer sentado y se levanta muchas veces en
– Tiene dificultad para mantener la atención en las tareas y en los clase y en casa
juegos – Corre y salta en circunstancias inapropiadas
– No parece escuchar cuando se le habla directamente – No juega con tranquilidad
– No sigue instrucciones y no finaliza las tareas – Parece un “motor en marcha”
– Tiene dificultades para organizar tareas y actividades – Habla en exceso
– Evita, le disgusta desempeñar tareas que requieren un esfuerzo – Contesta antes de terminar de oir la pregunta
mental sostenido
– No guarda turno
– Extravía objetos necesarios para el colegio y para jugar
– Interrumpe y se entromete en las actividades de los demás
– Se distrae con estímulos irrelevantes
– Es descuidado en las actividades diarias

Cuestionario de conners para profesores

No Poco Bastante Mucho

1. ¿Es un niño intranquilo, “nervioso”?


2. ¿Hace ruidos inapropiados cuando no debería?
3. ¿Exige que se le atienda de inmediato?
4. ¿Es algo respondón, insolente?
5. ¿Tiene explosiones de mal genio o humor impredecible?
6. ¿Es hipersensible al criticismo?
7. ¿Se distrae mucho, se concentra poco?
8. ¿Molesta o interrumpe a otros niños?
9. ¿Sueña despierto o “está en babia”?
10. ¿Se enfurruña o pone de mal humor fácilmente?
11. ¿Cambia de humor rápida o drásticamente?
12. ¿Es pendenciero, petulante?
13. ¿Muestra una actitud sumisa a la autoridad?
14. ¿Es inquieto, está siempre moviéndose?
15. ¿Es irascible, impulsivo?
16. ¿Solicita excesivamente la atención del profesor?
17. ¿Da la sensación de no ser aceptado por el grupo?
18. ¿Da la sensación de dejarse dirigir por otros niños?
19. ¿Carece de la noción de lo que es recto, justo?
20. ¿Da la sensación de ser incapaz de dirigir, liderar?
21. ¿Deja inacabadas las tareas que empieza?
22. ¿Es infantil, inmaduro?
23. ¿Niega sus errores o culpabiliza a otros?
24. ¿Se lleva mal con otros niños?

Se puntuarán los ítems: 1, 3, 7, 8, 14, 15, 21, 22, 26 y 28. Se adjudican 0 puntos a “no”,1 punto a “poco”, 2 a “bastante”y 3 a “mucho”. Una
puntuación superior a 15 es “sugestiva”de TDA-H. Este cuestionario y otros parecidos no sirven para realizar un diagnóstico sino para sugerirlo o
corroborarlo, así como para evaluar el seguimiento académico y de conducta escolar.
19
Cuestionario de conners para padres

No Poco Bastante Mucho

1. Es impulsivo, irritable
2. Es llorón
3. Es más movido de lo normal
4. No puede estarse quieto
5. Es destructor (ropas, juguetes, otros objetos)
6. No acaba las cosas que empieza
7. Se distrae fácilmente
8. Cambia bruscamente sus estados de ánimo
9. Sus esfuerzos se frustran fácilmente
10. Suele molestar frecuentemente a otros niños

Se adjudican 0 puntos a “no”, 1 punto a “poco”, 2 puntos a “bastante” y 3 a “mucho”. Para niños entre 6 y 11 años > 16 puntos es sospechoso de
DAH. Para niñas es sospechosa una puntuación superior a 12.

TABLA IV. Cuestionario M-CHAT

1. ¿Disfruta su niño cuando lo balancea o hacen saltar sobre sus rodillas? Sí/No
2. ¿Se interesa su niño por otros niños? Sí/No
3. ¿Le gusta a su niño subirse a las cosas, por ejemplo, subir escaleras? Sí/No
4. ¿Disfruta su niño jugando al cucú y al escondite? Sí/No
5. ¿Le gusta a su niño simular que habla por teléfono, que cuida de sus muñecos o simular
cualquier otra cosa? Sí/No
6. ¿Utiliza su niño su dedo índice para señalar algo o para preguntar algo? Sí/No
7. ¿Usa su niño su dedo índice para señalar algo o indicar intereses en algo? Sí/No
8. ¿Puede su niño jugar bien con juguetes pequeños (como coches o cubos) sin llevárselos a la boca,
manipularlos o dejarlos caer? Sí/No
9. ¿Le trae su niño a usted (padre o madre) objetos o cosas con el propósito de mostrarle algo alguna vez? Sí/No
10. ¿Lo mira su niño directamente a los ojos por más de uno o dos segundos? Sí/No
11. ¿Parece su niño demasiado sensitivo al ruido (p.ej.: se tapa los oidos)? Sí/No
12. ¿Sonríe su niño en respuesta a su cara o a su sonrisa? Sí/No
13. ¿Lo imita su niño? Por ejemplo, si usted le hace una mueca, ¿su niño trata de imitarlo? Sí/No
14. ¿Responde su niño a su nombre cuando lo llama? Sí/No
15. Si usted señala un juguete que está al otro lado de la habitación, ¿su niño lo mira? Sí/No
16. ¿Camina su niño? Sí/No
17. ¿Presta su niño atención a las cosas que usted está mirando? Sí/No
18. ¿Hace su niño movimientos raros con los dedos cerca de su cara? Sí/No
19. ¿Trata su niño de llamar su atención sobre las actividades que está realizando? Sí/No
20. ¿Se ha preguntado alguna vez si su niño es sordo? Sí/No
21. ¿Comprende lo que otros dicen? Sí/No
22. ¿Fija su niño su mirada en nada o camina sin sentido algunas veces? Sí/No
23. ¿Su niño le mira a su cara para comprobar su reacción cuando está en una situación diferente? Sí/No

Anormal si puntúa dos de las preguntas en negrita (items críticos) o tres en toda la lista.

20
TABLA V. Cuestionario de cualidades y dificultades the strengths and dificultéis questionnaire (SDQ)
1. Tiene en cuenta los sentimientos de las otras personas
2. Es inquieto/a hiperactivo, no puede permanecer quieto/a por mucho tiempo
3. Se queja con frecuencia de dolores de cabeza, de estómago o de nauseas
4. Comparte frecuentemente con otros niños chucherías, juguetes, lápices
5. Frecuentemente tiene rabietas o mal genio
6. Es más bien solitario/a y tiende a jugar solo
7. Por lo general es obediente, suele hacer lo que le piden los adultos
8. Tiene muchas preocupaciones, a menudo parece inquieto o preocupado
9. Ofrece ayuda cuando alguien resulta herido, preocupado o enfermo
10. Está continuamente moviéndose y es revoltoso/a
11. Tiene por lo menos un/a buen/a amigo/a
12. Pelea con frecuencia con otros niños o se meten con ellos
13. Se siente a menudo infeliz, desanimado o lloroso/a
14. Por lo general cae bien a los otros niños/as
15. Se distrae con facilidad, su concentración tiende a disiparse
16. Es nervios/a o dependiente ante nuevas situaciones, fácilmente pierde la confianza en sí mismo/a
17. Trata bien a los niños/as más pequeños/as
18. A menudo miente y engaña
19. Los otros niños se meten con él/ella o se burlan de él/ella
20. A menudo se ofrece para ayudar: a padres, maestros, otros niños
21. Piensa las cosas antes de hacerlas
22. Roba cosas en casa, en la escuela o en otros sitios
23. Se lleva mejor con adultos que con otros niños/as
24. Tiene muchos miedos, se asusta fácilmente
25. Termina lo que empieza, tiene buena concentración

Anormal Límite Normal

Puntuación para docentes


SE: Síntomas emocionales (ítems 3,8,13,16,24) 5-6-7-8-9-10 4 1-2-3
PC: Problema de conducta (ítems 5,7,12,18,22) 5-6-7-8-9-10 4 1-2-3
HA: Hiperactividad (ítems 2,10,15,21,25) 8-9-10 7 1-2-3-4-5-6
CO: Problemas con compañeros (ítems 6, 11,14, 19, 23) 4-5-6-7-8-9-10 3 1-2
TD: Puntuación total (suma de los 4 anteriores) > 18 18 < 18
PS: Conducta pro-social (ítems 1,4,9,17,20) 1-2-3-4-5 6 7-8-9-10

Puntuación para padres


SE: Síntomas emocionales (ítems 3,8,13,16,24) 5-6-7-8-9-10 4 1-2-3
PC: Problema de conducta (ítems 5,7,12,18,22) 5-6-7-8-9-10 4 1-2-3
HA: Hiperactividad (ítems 2,10,15,21,25) 8-9-10 7 1-2-3-4-5-6
CO: Problemas con compañeros (ítems 6, 11,14, 19, 23) 4-5-6-7-8-9-10 3 1-2
TD: Puntuación total (suma de los 4 anteriores) > 19 19 < 19
PS: Conducta pro-social (ítems 1,4,9,17,20) 1-2-3-4-5 6 7-8-9-10

Cada ítem presenta tres posibilidades: no es cierto: puntúa 0; a medias es cierto: puntúa 1; y 0 absolutamente cierto. Existen 5 ítems inversos
7,11,14, 21 y 25, que se puntúan al revés: no es cierto: 2, a medias es cierto: 1, absolutamente cierto: 0. La escala total de dificultades se valora de 0
a 40, sumando los resultados parciales de las cuatro de las cinco escalas, ya que la escala de conducta pro-social no interviene. Valora por tanto
cada una de las escalas y la escala total de dificultades con lo que valora el problema de manera global. Los puntos de corte están validados para
población española. Algunas de las ventajas en su utilización para los pediatras de Atención Primaria son: solo ocupa un folio, aplicable a población
entre 4 y 16 años, la misma versión es para padres y docentes (aunque con diferentes puntos de corte), representa tanto problemas, como
cualidades del individuo.

21
CALIDAD DE LA EVIDENCIA Y FUERZA DE LA RECOMENDACIÓN DE LAS INTERVENCIONES RELACIONADAS CON EL CRIBADO DE
LOS TRASTORNOS DEL ESPECTRO AUTISTA

Intervención Población Calidad de la EV y FR

Test CHAT o ASSQ Niños sanos II-2-D


Test CHAT o ASSQ Hermanos de niños con TEA II-2-A
Test CHAT o ASSQ Niños con algunas características de TEA III-C
Derivación especialista Niños con CHAT o ASSQ positivos II-2-A

Cribado de los trastornos y problemas de salud mental AEPap ed. Curso de actualización Pediatría 2003. Madrid: Exlibris Edicio-
Decidir si un síntoma o conjunto de síntomas corresponde a un tras- nes, 2003; p.133-66.
torno mental, “la normalidad o anormalidad”, constituye uno de los desa- 12. Alonso Franch M, Bedate Calderon P, Calvo Romero C. Recomendacio-
nes de ingesta durante el primer año de vida. Guías practicas sobre nutri-
fíos más complejos a los que se enfrentan los pediatras de Atención Pri-
ción. Alimentación en el lactante. An Esp Pediatr. 2001;54:153-7.
maria. Sin embargo, la alta prevalencia de estos trastornos, muchos de
13. Vitoria Miñana I, Barutell Castillo A. Promoción de la Salud Bucodental. Grupo
comienzo en la infancia (10-15%) y la posibilidad de que un abordaje PREVINFAD/PAPPS. Web de la Asociación Española de Pediatría de Aten-
precoz modifique el pronóstico, creemos que justifica la búsqueda activa. ción Primaria. Disponible desde octubre 2003 en http://www.aepap.org/pre-
Creemos que el Cuestionario de Cualidades y Dificultades The vinfad/Dental.htm.
Strengths and dificultéis Questionnaire (SDQ) que valora tan solo 25 items 14. Delgado Domínguez JJ. Anomalías oculares y de la visión. Grupo PRE-
puede ser útil (Tabla V). Se encuentra disponible en: www.sdqinfo.com VINFAD/PAPPS. Web de la Asociación Española de Pediatría de Atención
Primaria. [En línea] [Fecha acceso 26 julio 2005]. URL disponible en
http://www.aepap.org/previnfad/Vision.htm
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3. Unión Internacional de Promoción de la Salud y Educación para la salud PREVINFAD/PAPPS. Web de la Asociación Española de Pediatría de Aten-
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des Preventivas en la Infancia y Adolescencia del Grupo PREVINFAD. En: maria. Instituto Madrileño de la Salud, 2002.

22
Exploración ORL
L. Jiménez Ferreres
Madrid

El programa clásico consiste en una exposición teórico práctica • Laringoscopia indirecta, enseñando como usar un espejo frontal y
con claves en la exploración pediátrica, y especialmente enfocada a la las utilidades de este sencillo medio en la práctica ambulatoria, para
exploración en ambiente no hospitalario, sin los medios propios de una visualizar la cavidad bucal y la laringe. Y su utilización para extrac-
consulta de ORL. ción de cuerpos extraños.
Posteriormente un taller práctico: • Video-fibrolaringoscopia, mostrando la anatomia nasal, bucofarin-
• Otoscopia con video-otoscopia participando los propios asistentes. gea y laringea, con plena participación de los asistentes.

23
Sistemas de inhalación
J. Pellegrini Belinchón
Pediatra de Atención Primaria. Centro de Salud de Pizarrales. Salamanca

La utilización de la vía inhalatoria para la administración de medi- El mecanismo de sedimentación por gravedad en la pequeña vía
camentos es muy antigua, sin embargo, no ha sido posible aplicarla a aérea y alvéolos es directamente proporcional al tamaño de la partícula
niños pequeños hasta que se han desarrollado dispositivos con las e inversamente proporcional a la velocidad de salida del aerosol, a
características técnicas precisas para la aplicación de fármacos a este mayor velocidad de emisión se produce un mayor impacto en las vías
tipo de pacientes. aéreas superiores.
En el momento actual, la vía inhalada es la de elección en el trata- El flujo inspiratorio del niño influye en la cantidad y tamaño de las
miento del asma para la administración de broncodilatadores y gluco- partículas depositadas, el flujo ideal es entre 30 y 60 L/minuto. También
corticoides y permite conseguir efectos más rápidos y potentes con es muy importante el volumen inspirado, un volumen elevado permite
menores dosis de fármacos. Además, se consigue una acción directa la entrada de una buena cantidad de producto, y por supuesto, una
del medicamento sobre el órgano diana y dado que la absorción es apnea postinspiración de unos 10 segundos es fundamental para que
mínima y, por lo tanto, los niveles plasmáticos alcanzados son muy se produzca una correcta sedimentación de las partículas aerosoliza-
pequeños, los efectos secundarios indeseables son también escasos. das en la vía aérea. La posterior espiración suave parece mejorar la bio-
Pero la vía inhalada también puede tener inconvenientes, algunos disponibilidad del fármaco.
específicos de niños como la respiración nasal, vías aéreas más peque- Las alteraciones anatómicas congénitas o adquiridas pueden tam-
ñas, frecuencia respiratoria elevada, el llanto y la resistencia activa al bién dificultar la penetración del aerosol.
tratamiento y otros generales para todos los pacientes como la dificul-
tad técnica para su manejo que hace que a veces rechacen los dis- TIPOS DE SISTEMAS DE INHALACIÓN
positivos, la imposibilidad de comprobar si la dosificación ha sido correcta, En los últimos años además de aparecer nuevos dispositivos para
el efecto terapéutico es muy rápido por lo que puede prestarse al abuso la inhalación de fármacos, se han perfeccionado, mejorado y adaptado
y, en ocasiones, se han descrito dependencias psíquicas. otros ya existentes, incrementándose con ello el arsenal terapéutico.
De cualquier forma, el principal inconveniente en pediatría para la Pero esto, que ha supuesto una mejoría en el tratamiento del asma infan-
uso de la vía inhalada en el tratamiento del asma bronquial, es la utili- til, ha llevado también a aumentar la complejidad del tratamiento y a
zación de una técnica incorrecta por parte del paciente o el uso de sis- una mayor necesidad de formación del personal sanitario implicado.
temas no apropiados para la edad o capacidad de los niños. Por lo Vamos a tratar a continuación de los cuatro sistemas de inhalación
tanto, es fundamental por parte del personal sanitario, instruir a los niños de que disponemos en la actualidad, y de los distintos dispositivos y
y sus familias en la utilización de los sistemas adecuados y técnicas artilugios para aplicar la medicación, de cómo utilizarlos correctamente
precisas que permitan un adecuado manejo de la enfermedad. y como mantenerlos limpios.
El objetivo de este taller es ofrecer las bases para poder escoger
en cada caso la técnica inhalatoria más adecuada, y desarrollar la capa- Inhaladores dosificados presurizados de dosis controlada (MDI:
cidad de adiestrar correctamente en el manejo de los distintos dispo- Metered Doser Inhaler) y con sistema de autodisparo (Autohaler y
sitivos a los niños, adolescentes y familiares de los pacientes más peque- EasyBreathe)
ños, para una adecuada utilización de los mismos. No existe el inhalador Se llaman así a los sistemas de inhalación que utilizan un cartucho
o la cámara ideal, hay que adaptarse a las necesidades individuales presurizado, producen partículas heterodispersas de distinto tamaño,
de cada paciente. las que llegan a vías aéreas inferiores oscilan entre 2-4 micras. Están
constituidos por tres elementos:
FACTORES QUE INFLUYEN EN EL DEPÓSITO DE FÁRMACOS EN • Cartucho presurizado. Contiene el medicamento activo en solución
LA VÍA AÉREA o suspensión en un gas propelente y a una presión de 3 ó 4 atmós-
Consideramos aerosol a una suspensión de pequeñas partículas feras.
líquidas o sólidas en un gas. Los nebulizadores generan aerosoles de • Válvula dosificadora. Necesaria para liberar en cada pulsación o
partículas líquidas, mientras que los inhaladores lo hacen de partículas “puff” una dosis controlada y reproducible de fármaco.
sólidas. • Envase externo de plástico en el que encaja el cartucho y facilita
Los factores que condicionan el depósito de fármacos en la vía res- su administración.
piratoria dependen del generador del aerosol, de las características del La utilización de propelentes clorofluorcarbonados (CFC) ha sido
paciente y de la técnica de inhalación utilizada. cuestionada por su relación con la destrucción de la capa de ozono, se
Una parte importante de las partículas generadas chocan contra la deben utilizar otros compuestos libres de cloro como los hidrofluor-
superficie de la vía aérea y se produce el depósito por un mecanismo carbonados (HFC).
de impactación, por eso es fundamental el tamaño de las partículas Como ventajas de este sistema, podemos destacar su pequeño
emitidas por los distintos dispositivos, para medirlas utilizamos el diá- tamaño que permite que sea llevado habitualmente por el paciente,
metro de la masa media aerodinámica (DMMA). aporta una dosis fija y reproducible en todo momento, son fáciles de
El tamaño ideal de las partículas aerosolizadas para que se depo- limpiar y poco sensibles a la humedad.
siten en las pequeñas vías y regiones alveolares es de 1 a 5 micras, El principal inconveniente en pediatría es la necesidad de una
tamaños superiores impactan en orofaringe y en vías aéreas superio- correcta coordinación entre el disparo y la inspiración, para evitar
res y cuando son menores de una micra no se sedimentan y no pare- este problema se utilizan las cámaras espaciadoras de las que habla-
24 cen tener implicación terapéutica. remos más adelante. Además el gas sale a gran velocidad (100 km/h)
y si el propelente es CFC está a baja temperatura y puede producir tos Las válvulas deben comprobarse periódicamente, si no están en
e impedir la maniobra de inhalación, si el propelente es HFC no se pro- buen estado deben cambiarse o rechazar la cámara. Reemplazar la
duce el “efecto frío”. La dosis puede variar si no se agita correctamente cámara cuando existan fisuras.
el dispositivo.
• Sistema de “autodisparo”. Easy Breathe (sistema inducido por ins- INHALADORES DE POLVO SECO (DPI DRY POWDER INHALETR)
piración): este inhalador que también cuenta con un cartucho Los inhaladores de polvo seco generan aerosoles del tipo hetero-
presurizado merece una mención aparte ya que su sistema valvu- disperso y un tamaño de partículas de entre 1 y 2 micras. El flujo ins-
lar permite que la emisión del aerosol se active de modo simultá- piratorio ideal que precisan es entre 30 y 60 L/minuto.
neo a la inspiración del niño, eliminando por tanto la necesidad Entre las ventajas de su utilización hay que destacar que la efica-
de coordinación tan difícil de conseguir en pediatría, además se cia clínica es igual o superior a la obtenida con los MDI, incluso con
activan con flujos inspiratorios reducidos, entre 18-30 L/minuto y cámara, ya que el depósito pulmonar llega a alcanzar un 25-35% de la
son muy silenciosos. En el momento actual, en España solo exis- dosis administrada. Es muy fácil de utilizar, no precisa coordinación pul-
ten corticoides con este sistema. sación-inspiración, de muy pequeño tamaño y no precisa cámara por
La limpieza se debe realizar extrayendo el cartucho y con agua y lo que puede llevarse habitualmente, a partir de una determinada edad
jabón suave cuidando solamente de no dejar obstruida la válvula. son los preferidos por los pacientes y además no contienen propelen-
tes contaminantes.
Cámara espaciadora con boquilla y/o mascarilla a la que se aplica MDI El inconveniente principal es que debido al flujo inspiratorio que
Son aparatos diseñados para ayudar a mejorar la eficiencia en el precisan no se pueden utilizar antes de los 6-7 años o en pacientes con
caso de los MDI. Estos dispositivos obvian el problema de la coordi- un grado de obstrucción muy alto, algunos niños no aprecian la inha-
nación ya que permiten un retraso entre el inicio de la inspiración y el lación del fármaco, son más caros que los MDI y además hay que tener
disparo. Al aumentar la distancia entre el cartucho y la boca provocan cuidado de no espirar sobre la boquilla una vez cargado para no per-
un flujo del aerosol más lento, por lo que disminuye el impacto orofa- der la dosis. Por último, se pueden afectar por la humedad al quedarse
ringeo de las partículas y se obtiene un depósito pulmonar más impor- apelmazado el fármaco.
tante: 21% versus 9% con o sin cámara de inhalación. Además dismi- Según el número de dosis del fármaco que proporcionan se pue-
nuyen la aparición de candidiasis oral tras la inhalación de corticoides. den dividir en 2 grupos: DPI monodosis y DPI multidosis.
Como inconvenientes hay que señalar que son objetos volumino- Los monodosis, (Aerolizer®) fueron los primeros, se trata de cáp-
sos, difíciles de llevar y que hay incompatibilidades entre los orificios sulas con una sola dosis del fármaco que son perforadas por agujas al
de sus boquillas y los cartuchos presurizados. accionar el dispositivo y quedan preparadas para la inhalación. Si bien
Hay algunos factores que hay que tener en cuenta con las cáma- el método puede resultar algo engorroso, tiene la ventaja para algunos
ras de inhalación: pacientes que si la cápsula es trasparente se puede ver vacía si la inha-
Las cámaras espaciadoras para asociar al MDI con mascarilla, son lación ha sido correcta.
los dispositivos recomendados para los menores de 3-4 años y cuanto Los DPI multidosis son los más utilizados en pediatría y dispone-
menos colaborador sea el niño, más seguro y rígido debe ser el sistema mos de 3 sistemas: Turbuhaler® y Accuhaler® y Novolizer®.
de unión de la mascarilla a la cámara. Además, la mascarilla debe ser El sistema Turbuhaler® proporciona 200 dosis de fármaco sin gases
de un material flexible para que se acople de una forma correcta al propelentes ni aditivos. El tamaño de las partículas que produce es
tamaño facial del niño, si no se consigue se reducirá la dosis adminis- de 1-2 micras, que al ser inhaladas adquieren una gran turbulencia, cre-
trada. ada al pasar el aire por unos conductos de forma helicoidal, de ahí viene
El efecto electrostático sobre las partículas del aerosol producido su nombre, avisa cuando quedan las últimas 20 dosis con una marca
por las cámaras de plástico disminuye su vida media, será preciso roja en el indicador que tiene en la parte inferior.
impregnarlas previamente con el aerosol, las cámaras de metal pro- En el sistema Accuhaler® el fármaco viene colocado en pequeños
longan la vida media de las partículas y no se afectan por la limpieza. depósitos de una tira autoenrrollable. Cada vez que se acciona el gati-
Se recomiendan las cámaras con válvulas que mejoran la admi- llo un óvulo se desplaza a la zona de inhalación y es agujereado simul-
nistración de los fármacos. Algunas cámaras, en lugar de una o dos táneamente. Proporcionan 60 dosis de producto con un dispositivo en
válvulas tienen orificios que permiten la entrada del aire en la inspira- el exterior que indica el número de dosis que quedan por utilizar.
ción y pueden reducir la cantidad de medicamento administrado. El sistema Novolizer® presenta un cartucho con 200 dosis. Aunque
El volumen de la cámara influye en la cantidad de producto inha- se apriete el botón dosificador varias veces solo se carga una dosis.
lado. En niños mayores se recomiendan cámaras grandes de alrede- Tiene un sistema de ventana que cambia de color rojo a verde tras una
dor de 700-800 cc. En lactantes y niños pequeños, las cámaras deben inhalación correcta.
ser menores, así la concentración del aerosol es mayor y requieren Como norma general los DPI se afectan con la humedad y nunca
menos tiempo para ser vaciadas. Cuanto más pequeño sea el niño es deben limpiarse con agua, limpiar la boquilla después de utilizarse con
importante que las válvulas funcionen a flujos más bajos. un paño o papel.
Solo debe efectuarse una sola pulsación por dosis. Dar más pul-
saciones pueden provocar pérdidas de hasta el 30%. Se ha compro- NEBULIZADORES
bado que entre 3 y 5 inhalaciones a volumen corriente tras cada pul- Mediante algunos sistemas neumáticos o ultrasónicos pueden gene-
sación son clínicamente más eficaces que una pulsación profunda. rarse aerosoles de bajo DMMA para que puedan ser inhalados fácil-
Tanto las cámaras de metal como las de plástico exigen una lim- mente a través de una mascarilla facial o una boquilla. El jet nebuliza-
pieza periódica con agua y jabón suaves. Ahora bien, estas últimas por dor o nebulizador neumático se basa en el efecto “venturi” por el que
su efecto electrostático sobre las partículas se deben remojar al menos se transforma un fluido en un aerosol rompiendo la tensión superficial
una vez por semana y durante una hora con un detergente domes- del mismo. Puede utilizarse con aire comprimido, oxígeno o compre-
tico, aclarándola y dejándola sin secar durante 24 horas, cuando la sor. El nebulizador ultrasónico, es más caro, requiere una fuente de
cámara es nueva o no da tiempo a realizar esta operación, se debe electricidad y está desaconsejado en la utilización de corticoides.
impregnar las paredes con 5-10 pulsaciones del fármaco y esperar unos La administración de medicamentos inhalados mediante los MDI o
minutos antes de utilizarla. DPI es la que reúne mayores ventajas, puesto que ofrece una mayor 25
TABLA I. Dispositivos de inhalación según edad dejando para niños mayores o adolescentes bien entrenados la utiliza-
ción del cartucho presurizado sin cámara.
Edad Dispositivo recomendado Entre nebulización o inhalación con cámara preferimos este último
De 0 a 3 ó 4 años MDI + cámara espaciadora con mascarilla
sistema, dejando la nebulización para casos muy concretos de niños
pequeños no colaboradores.
De 4 a 5 ó 6 años MDI + Cámara espaciadora con boquilla o
mascarilla (según habilidad)
Por supuesto es necesaria la revisión periódica del sistema de inha-
lación, de su aplicación correcta y se debe plantear el cambio de un
Mayores de 6-7 años DPI o MDI + cámara espaciadora con boquilla
sistema a otro dependiendo de la edad, de la preferencia del niño mayor
o cuando el asma no evolucione correctamente.

rapidez en su acción terapéutica y tiene menos efectos secundarios. BIBLIOGRAFÍA


De cualquier forma, en algunos pacientes que por su edad o situa- 1. Grupo de Trabajo de la SEPAR: Giner J, Basualdo LV, Casan P, Hernández
ción no toleren las cámaras, en caso de no disponibilidad de éstas en C, Macián V, Matínez I, Mengíbar A. Normativa sobre la utilización de fár-
crisis graves que requieran nebulización continua o traslados desde el macos inhalados. Arch Bronconeumol 2000; 36: 34-43.
medio rural al hospital, puede ser de utilidad. 2. Domínguez Aurrecoechea B, Lora Espinosa A, Torregrosa Bertet P, Garnelo
En el momento actual sus únicas ventajas son que no requieren Suárez L, Bamonde Rodríguez L, Blanco González JE, Praena Crespo M.
Manejo de Inhaladores en el asma de niños y adolescentes. En: Cano Gar-
colaboración por parte del niño, fluidifican las secreciones, su capaci- cinuño A, Díaz Vázquez CA, Montón Álvarez JL, eds. Asma en el niño y ado-
dad para administrar fármacos a dosis altas y en asociación y que lescente. Aspectos fundamentales para el pediatra de Atención Primaria.
son compatibles con oxigenoterapia. Madrid: Ed Exlibris; 2001. p. 173-86.
Como inconveniente, la retención de fármaco que se produce en 3. Barrio Gómez de Agüero MI, Alonso Martínez I. Sistemas de inhalación en
las paredes del equipo es muy alta y no se produce un aumento pro- la infancia. Revista Pediatría de Atención Primaria 2000; 5: 83-94.
porcional de la cantidad de producto que alcanza los pulmones. Pre- 4. Villa Asensi JR. Terapéutica del asma. ¿Sólo farmacológica? En: Cobos
cisan más tiempo, son más caros, complejos y engorrosos que los MDI Barroso E, ed. Asma. Enfermedad crónica infantil. Madrid: Ed Doyma; 1998.
y los DPI. p. 167-93.
Resumiendo: en pediatría, la elección del sistema de inhalación 5. Gil R, Pérez Ruiz E, Pérez-Frías J. ¿Cámara, nebulizador o dispositivos de
depende fundamentalmente de la edad y de la capacidad de aprendi- polvo seco? Monografías de Pediatría 2004; Número extraordinario; 101-
6.
zaje del niño. En la Tabla I, de forma orientativa, se recomiendan los
dispositivos de inhalación dependiendo de la edad. 6. Torregrosa Bertet P, Domínguez Aurrecoechea B, Garnelo Suárez L. Manejo
de inhaladores en el asma del niño y adolescentes. Curso de Atención Inte-
Como norma general se recomienda utilizar en lactantes y niños gral al Niño y Adolescente con Asma. Módulo 9 (16). 2004; 209-22.
pequeños las cámaras espaciadoras con mascarilla, en cuanto el niño 7. Pellegrini Belinchón J, Del Molino Anta A.M. Educación del paciente asmá-
sea capaz de colaborar se intenta sustituir la mascarilla por una boqui- tico en edad pediátrica y su entorno. En García-Marcos Álvarez L, Garde
lla. Intentamos mantener la cámara espaciadora hasta que el niño domine Garde JM, Escribano Montaner A, Malmierca Sánchez M, eds. Asma en
la técnica de inhalación del polvo seco que no precisa coordinación, Pediatría. Barcelona: Ed. Edipharma; 2002. p. 221-46.

26
Dermatología por la imagen
H. Fernández Llaca

La dermatología es probablemente de las especialidades que sólo van a depender de que el tratamiento sea el adecuado sino, de
durante los últimos años más ha aumentado la demanda y dentro de saber adaptarlo en cada momento, al proceso evolutivo de las lesio-
ella y de forma particular la dermatología pediátrica. Aunque las urgen- nes.
cias reales son más bien escasas, cada vez las consultas se deman- El planteamiento de ambos talleres tiene el propósito de analizar
dan con un carácter más urgente, hecho que no es de extrañar al ser una serie de situaciones clínicas que son motivo de consulta frecuente
el propio entorno familiar del niño quien en todo momento sigue la evo- en dermatología pediátrica. Se expone en cada taller un total de quince
lución de la enfermedad. Un aumento llamativo de lesiones o el estado casos clínicos, divididos en tres bloques, cada uno con distinto nivel de
de disconfor que produce su sintomatología van a ser ya motivo sufi- dificultad diagnóstica. A continuación de cada bloque se establece un
ciente para demandar una consulta con carácter urgente. turno de discusión en el que se analizan los principales diagnósticos
Por otra parte, a diferencia de otras especialidades en las que se diferenciales, diagnósticos definitivos, así como los problemas que
precisan obtener datos por pruebas más o menos sofisticadas para puede plantear su tratamiento.
poder llegar a un diagnóstico, en dermatología se tiende a exigir un Al inicio de cada taller se da a cada asistente un cuestionario en el
diagnóstico inmediato y exacto. Tal vez algo tan necesario en muchos que podrá ir estableciendo simultáneamente al desarrollo del taller sus
casos como el “wait and see” esperar y ver, solo se le permita con repa- propios diagnósticos. De tal manera que de una forma anónima cada
ros al dermatólogo y no por mucho tiempo. uno pueda evaluar el grado de acierto diagnóstico.
En cuanto al tratamiento exige un largo aprendizaje, sobre todo, Al finalizar se hará entrega a los participantes de un dossier donde
el arte del manejo de los tratamientos tópicos requiere cierto grado de queden recogidos el total de los casos presentados, así como los diag-
experiencia. Es una especialidad en la que los buenos resultados no nósticos considerados como correctos.

27
Manejo del niño diabético en Atención Primaria
P. Giralt Muiña

INTRODUCCIÓN. CONCEPTO TABLA I. Diagnóstico de diabetes


En el presente trabajo, hemos querido plasmar de forma práctica
Diagnóstico Ayunas Azar
todos aquellos aspectos que interesan en el manejo del niño diabé-
tico en Atención Primaria, evitando en lo posible, todo aquellos aspec- Diabetes (mg/dL) > 125 > 200
tos teóricos que pueden revisarse en la bibliografía que sugerimos. Normal (mg/dL) < 110 < 140
Por tanto, únicamente pretendemos realizar una guía para el uso dia-
Intermedios (mg/dL) AGA* (110-125) IG** (140-200)
rio. Aunque en el niño pueden aparecer diversos tipos de diabetes,
tales como diabetes tipo 2(1,3), Mody, neonatal(4), mitocondrial, etc., *AGA: alteración de glucemia en ayunas.**IG: intolerancia a la
nos vamos a limitar al manejo de la diabetes tipo 1 (DM1) al ser la más glucosa. Estos resultados son en glucemia plasmática, repetidos en
frecuente. La DM1(1) se trata de una enfermedad metabólica caracte- dos ocasiones y en ausencia de enfermedad
rizada por hiperglicemia resultado del déficit en la secreción de insu-
lina, derivadas de una exposición a factores ambientales, en pacien- TABLA II. Tipos y marcas de insulina más utilizada en el
tes con una determinada predisposición genética y que va a provocar tratamiento del niño diabético
la aparición de una serie de reacciones inmunológicas que van a des-
truir las células productoras de insulina. La DM1 es, por tanto, una Tipo Marca Presentación Inicio Máximo Final
enfermedad autoinmune(5,6), se han detectado múltiples anticuerpos efecto efecto efecto
implicados que según se va instaurando la enfermedad van desa-
Ultrarápida Humalog Vial, humaject, 10 min 30-90 min 3-4 h
pareciendo, ya que desaparece la función de la célula beta. Por tanto, (análogo) (Lispro) pluma precargada
al cabo de unos años de evolución o incluso desde el diagnóstico, (PEN)
puede que no aparezcan. Los más utilizados en la práctica clínica son Novorapid Vial, pluma 15 m 2h 4h
los: GADA (ac. contra la enzima decarboxilasa del ácido glutámico): (Aspart) (flex pen)
son los más específicos, y aparecen en el 90% de los diabéticos;
los IA2 (ac. antitirosina) y los IAA (ac. antiinsulina). Los ICA (ac. antiis- Rápida o Actrapid Vial, pluma 30 min 2-4 h 6h
lotes) cada vez se utilizan menos debido a su poca especificidad. En regular precargada
(Innolet)
cuanto a los factores genéticos(67-9) se trata de una enfermedad poli-
génica, ya que se han descrito más de 15 genes implicados, sin Humulina Vial, humaplus
embargo, los alelos de mayor susceptibilidad en la DM1 están en el Intermedia Insulatard Vial, precargada 1-2 h 4-8 h 12-18 h
sistema HLA y son: DR3, DR4, y los DQB: O3O2, 0201 y DQA 0301,0501. (NPH) (Innolet)
Entre los factores ambientales implicados destacan: virus(10-12), ali- Humulina Vial, humaplus,
mentos(13-15), drogas(15), agentes químicos, asociado a síndromes gené- NPH pen
ticos(1,6) y factores perinatales(16). La incidencia(17-19) en España es
muy variable de unas zonas a otras, por lo que es muy difícil de extra- Intermedia NPL Pluma precargada 1-2 h 4-8 h 12-18 h
polar los resultados, oscilando en España desde el 7,9% del País (NPL) (pen)
Vasco a alrededor del 20% en Ciudad Real, Canarias, Galicia o Málaga. Lenta Lantus Vial y pluma 90-120 min 2-20 h 20-24 h
En el conjunto de Europa estamos en una incidencia media, desta- (análogo) (Glargina) Optiset
cando en Europa(20) el gradiente norte-sur, excepto el caso de Cer- Devenir Pluma
deña. (Levemir) precargada 8-14 h 16-20 h

CARACTERÍSTICAS CLÍNICAS DE LA DM1(1)


Presenta de forma más o menos brusca síntomas característicos debe mezclarse con las NPH ni las R ya que pierde parte de su rapi-
como: hiperglucemia, glucosuria, poliuria, polidipsia, etc. dez. No autorizado en tratamiento IV. Hay también 2 tipos de análogo
Suelen detectarse los anticuerpos ya descritos. Tienen tendencia de insulina lenta. Tampoco debe mezclarse con otras insulinas. La NPL
a presentar otras enfermedades autoinmunes, como hipo/hipertiroi- es de efecto similar a la NPH. Hoy día se está comenzando a utili-
dismo, Addison, vitíligo, anemia perniciosa y enfermedad celiaca. Es la zarse de forma rutinaria en España las bombas de insulina, especial-
más frecuente en los menores de 30 años. mente en pacientes de difícil control. Las lentas y ultralentas no sue-
len utilizarse en diabetes tipo 1. Las más utilizadas en pediatría son las
DIAGNÓSTICO DE LA DIABETES(21) que se muestran en la tabla II.
Podemos resumirlo en el siguiente esquema (Tabla I).
Pautas de tratamiento
TRATAMIENTO DE LA DIABETES TIPO 1 La pauta debe individualizarse, aunque suele utilizarse la terapia
Insulinoterapia(1) intensiva(22).
Hoy día todas son humanas obtenidas por ingeniería genética. En Debut: recomendamos tratamiento hospitalario, según la tabla III.
la actualidad todas las insulinas vienen con una concentración de 100 Posteriormente se elegirá el tipo de pauta más adecuado para dicho
28 U por mL. Actualmente hay dos tipos de análogos insulina rápida. No paciente ajustando el número de dosis y el tipo de insulina o mezcla.
TABLA III. Pauta de tratamiento en el diagnóstico de la diabetes tipo 1

Día Dosis (u/k/d) Insulina Raciones (1 R= 10 g H.C.)

1º 0’5 Análogo rápido o regular. Cada 6 horas (antes de Probar tolerancia con líquidos y dieta blanda. Si tolera
las tomas) VO. En caso de IV no utilizar análogo pasar a dieta por raciones.
(no disminuir la glucemia más de 100 mg/hora) Si más de 250 mg/dL ofrecer agua o SSF

2º 0’5-1 Antes desayuno: 50% dosis total día. NPH: 2/3 (0,3 U/k) Calorías totales (CT): 1.000 + (años x 100)
R: 1/3 (0,2 /U/k) (Entre 2-12 años. Resto ver capítulo de alimentación)
Antes comida: 10% total día: NPH: 50% (0,1 U/k) Raciones/día = CT/80
R: 50% (0,1 U/k) Distribuidas en 6 tomas
Antes cena: 40%: NPH: 2/3: (0’3 U/k)
R: 1/3 (0,1 U/k)
La NPH puede sustituirse por Glargina en una sola dosis
diaria o Detemir en ,una o dos dosis diaria

3º Según perfil Para modificar glucemia: Calorías totales (CT): 1.000 + (años x 100)
Desayuno: modificar NPH cena (Entre 2-12 años. Resto ver capítulo de alimentación)
M. mañana: modificar I.R desayuno y/o rac. Des Raciones/día = CT/80
Comida: modificar NPH y/o rac. M.M Distribuidas en 6 tomas
Merienda: modificar IR comida y/0 rac. comida
Cena: modificar NPH comida y/0 rac. merienda
Media N: modificar I.R cena y/o rac. cena

Insulinoterapia en diabetes establecida no en el centro. Otros lugares alternativos son el pabellón auricular
• Un solo inyectable/día (NPH)-(GLARGINA): en fase de luna de o el antebrazo.
miel/ asociado a antidiabéticos orales. Deben realizarse un mínimo de un perfil completo semanal y a dia-
• 2 inyectables/día: tipos de insulinas: (NPH) o (NPH+R/análogo rio en desayuno, medianoche y a las 2-3 de la madrugada si tiene
rápido) o Nevemir. Horario: desayuno y merienda o cena. una glucemia de menos de 140 a 180 mg/dL. O si se ha practicado
• 3-4 inyectables/día: tipos de insulinas: glargina o NPH+análogo o deporte. Además, si hay cetonuria o descompensación por enfer-
regular. Horario: desayuno-comida-cena o medianoche. medad o cambio de pauta debe realizarse un perfil completo. Ade-
No recomendable mezclar en la misma jeringa insulinas de distin- más, cada día debe realizarse una glucemia a distintas horas de
tas marcas o NPH y análogos. Prohibida la mezcla con análogos de forma alterna.
acción lenta. • Glucosuria-cetonuria. Se debe medir la acetona en caso de glu-
Cambio de pauta: al estabilizarse, si no presenta perfiles adecua- cemia mayor de 250 mg/dL, enfermedad concomitante o si no es
dos valorar: posible medir la glucemia capilar. Hay que recordar que puede apa-
Sustituir insulina regular por análogo rápido. recer en hipoglucemias previas, por lo que hay que valorar la glu-
“NPH“ lento. cosa en caso de cetonuria y descartar un Somogyi. Existe un reflec-
• Disminuir la dosis total diaria al 80% de la previa. tómetro (medisensse de la casa Abbot), que mide la cetonemia.
• El 60% de glargina 1 vez al día.
• El 40% de análogo rápido en cada toma. Régimen de vida del diabético. Pauta de ejercicio en el diabético
• No en menores de 6 años. No mezclar las insulinas. Hay que individualizar, ya que es muy variable su acción interin-
Cambio a glargina (LANTUS). dividual, aunque hay que insistir en la necesidad de un control glucé-
Tratamiento con BICI/ISCI (bombas de infusión continua de insu- mico exhaustivo antes, durante y al final del ejercicio, hasta 24 horas
lina). No miden la glucemia, no modifican las dosis. después, especialmente por la noche. Hay que tener en cuenta que
Componentes: reservorio → jeringa con la insulina, émbolo, sis- el ejercicio a veces eleva la glucemia al principio del ejercicio o si se
tema de infusión → catéter con una aguja que se inserta bajo la piel y está con déficit de insulina.
se fija con un apósito, microprocesador → programa la dosis. Prohibido: en hipoglucemia, hiperglucemia mayor de 300 o ceto-
Programar: insulina basal → infusión continua, una o + dosis. Bolus sis. Su efecto sobre la glucemia puede durar hasta 24 horas, aunque
→ comidas o ante hiperglucemias. es muy variable. Ofrecer glucosa cada 30 minutos:
Ventajas: menor variabilidad en la absorción de insulina, dosis más – Menos de 10 años: 100-150 mg/dL: 1-3 R cada 30;’ 150-200: la
precisas y más ajustadas a la comida, mayor flexibilidad de vida, menos mitad de la dosis anterior.
riesgo de hipoglucemias. – Más de 10 años: 50% más que la pauta anterior
Desventajas: problemas técnicos, riesgo de cetoacidosis, infección En excursiones o ejercicio continuado poner un 20% menos de la
en los sitios de infusión, se lleva 24 h, alarmas. insulina habitual.
• Vacunaciones/medicamentos: siempre que no tenga cetonuria se
Autocontrol puede vacunar. El paciente diabético puede ser tratado con todo
Autoanálisis tipo de medicación, aunque algunos, especialmente corticoides y
Fundamental como parte del tratamiento intensivo. Para ello se nece- otras hormonas producen hiperglucemia, por lo que generalmente
sita motivar al paciente. requiere una modificación de la pauta previa.
• Glucemia. Método de obtención de muestra: lavarse las manos con • Educación diabetológica: es la formación continuada y constante
agua y jabón (no alcohol) y pincharse en la zona lateral de los dedos del diabético y sus familiares. Debe estar coordinada por un pedia- 29
Tratamiento cetoacidosis leve
• Reposo.
• Dieta pobre en grasas y abundante en líquidos.
• Insulina R: añadir a su pauta habitual 1 U de I. R. cada 50 mg que
queramos disminuir de glucemia o calculando el índice de sensi-
bilidad (IS): calcula la glucemia que disminuye 1 unidad de insu-
lina. Se calcula dividiendo 1.800 por la dosis total de insulina/día
• Tratar causa desencadenante.

Cetoacidosis diabética severa


Adjuntamos una pauta, aunque es tratamiento hospitalario. Hay que
recordar que lo fundamental en AP es coger dos vías intra venosas y
administrar líquidos (véase fig. 2).
FIGURA 1. Correspondencia de HbA1c en relación a la glucemia
(las cifras antes expresadas no son válidas en caso de anemia o Hipoglucemia. Pauta
algunas hemoglobinopatías) Definición (DCCT): < 54 mg/dL sangre venosa: la glucemia en
sangre venosa es un 5% inferior a la capilar, un 10% inferior a la san-
gre arterial y un 20% inferior a la del plasma.
tra diabetólogo y apoyado por educadora en diabetes y especia- Clínica: es muy variable. Al inicio de la enfermedad o si se produce
listas: asistente social, psicólogo, etc. Debe tener un programa pla- una disminución rápida de la glucemia pueden presentarse síntomas
nificado con contenido teórico y práctico. Debe iniciarse durante el con glucemias mayores de 60 mg/dL. Con el tiempo suele suceder lo
ingreso y seguido al alta dando cada vez y según capacidad unos contrario, no refiriendo ninguna clínica con cifras a veces inferiores a
conocimientos más amplios. Mejor individualizada. Se ha com- 40 mg/dL. En general, los síntomas autonómicos se presentan si la glu-
probado más eficaz la educación oral que los folletos. (Estos sirven cemia es inferior de alrededor de 56 mg/dL. Y los neuroglucopénicos
de apoyo). Debe haber un acceso fácil al educador Es muy impor- si la glucemia es inferior a 50 mg/dL.
tante un teléfono de apoyo las 24 horas.
• El niño diabético y el colegio: los profesores deben ser informa- Tratamiento de hipoglucemia en niños
dos de la enfermedad de su hijo y de las posibles complicacio- • Leve: por vía oral (VO), siempre que sea posible. Se debe ofrecer
nes agudas, en especial la hipoglucemia, y de como tratarla. Es 1 ración de glucosa (glucosport, refrescos, caramelos) o alimentos
muy útil ofrecer un teléfono de contacto. de absorción rápida (miel, zumo de fruta, etc.). Si a los 5-10 minu-
• Colonias para diabéticos: en general lo recomendable sería que tos persisten los síntomas repetir la dosis.
fueran a los 8-9 años y repitieran a los 13-14 años. Hay que tener Al recuperarse dar 1 R de alimento de índice glucémico lento (leche,
en cuenta que no todas las colonias son iguales, ni todos los niños galletas). Si es la hora de una toma adelantar dicha toma.
tampoco; por tanto, debe individualizarse. Identificar causa (ejercicio, error en dosificación, etc.).
• Moderada: si es posible VO. Si no es posible: glucagón: cargar el
CRITERIOS DE CONTROL DEL DIABÉTICO glucagón en jeringa de insulina y poner una unidad de la jeringa,
Además del control de la glucemia, deben controlarse periódica- por cada año de edad(25). Al recuperarse pasar a VO y pauta ante-
mente los lípidos, TA, desarrollo ponderoestatural y vigilar la aparición rior.
de complicaciones, especialmente retinopatía (fondo de ojo anual desde • Pauta en hipoglucemia severa: glucagón: 1/2 ampolla en meno-
el 5º año del inicio de la enfermedad), y nefropatía (microalbuminuria res de 6 años o entera en mayores. Repetir la dosis a los 10 minu-
anual). tos si persiste la hipoglucemia, mientras se coge una vía IV. Si no
Glicacion de proteínas: es la unión no enzimática de las proteínas cede:
con la glucosa; puede modificar la estructura y función de las proteí- Glucosmón 50%: diluir en 2 partes de SSF o agua destilada. Inyec-
nas. Se debe medir cada 3 meses (Fig. 1). tar 1 mL/K directamente. Repetir si no cede en 5’.
Posteriormente: GLUCOSADO 10%: 4cc/K/hora.
Criterios de derivación al hospital Al resolverse la hipoglucemia, es frecuente la cefalea, por lo que
Los motivos establecidos para la derivación de un niño con dia- es conveniente administrar un analgésico.
betes son: al diagnóstico, cetoacidosis que no pueda resolverse en el Tras una hipoglucemia severa no suspender la vía IV hasta com-
domicilio, hipoglucemia severa, diabetes gestante en parto, aparición probar que pueda tomar por boca, ya que son frecuentes los vómi-
de complicaciones, cambio de pauta en diabetes inestable o enferme- tos y se averigüe la causa de la hipoglucemia.
dad concomitante si no pueden resolverse en domicilio. • Síndrome de hipoglucemia inadvertida: al pasar el tiempo los dia-
béticos pierden la sensibilidad para reconocer los síntomas de la
COMPLICACIONES AGUDAS diabetes, pudiendo entrar en coma de forma brusca. Para recupe-
Cetoacidosis diabética (KAD). Pauta(23,24) rar la sensibilidad a la hipoglucemia debe evitarse en lo posible,
Sospechar si presenta pérdida de apetito, nauseas, vómitos, dolor o mejor aún siempre, las hipoglucemias durante varios meses.
abdominal, poliuria, polidipsia, somnolencia y aliento característico.
Diagnóstico diferencial: alteraciones respiratorias (asma), dolor abdo- RECOMENDACIONES NUTRICIONALES PARA DIABÉTICOS(26,27)
minal especialmente procesos quirúrgicos, acidosis metabólica secun- Según recomienda la ADA (Asociación de Nutrición Americana),
daria a otras causas, coma de otra etiología. las necesidades de un individuo sano y diabético son similares, y deben
ser las siguientes:
Concepto • Hidratos de carbono (50-60%). La alimentación debe ser rica en
Gl > 250; Ph: < 7,3 y/o bicarbonato. T < 15 meq/L. hidratos de carbono que procedan de farináceos, frutas, verduras
30 Hiperglucemia+cetonuria+deshidratación. y lácteos. La cantidad de estos HC es más importante que la fuente
Cereales Pan Legumbres
IG Azúcares Frutas Verduras Bebidas Lácteos Dulces Otros
Frutos secos Pastas Hortalizas

100 Maltosa Scanes


> 95 Arroz Baguette Pancake
en paella sin gluten
> 90 Glucosport
> 85 Crispit./ Patata puré
arroz Kellogs
> 80 Palomitas Patata asada, Tapioca
de maiz cocida
> 75 Miel Pasta sin gluten Calabaza Gatorade
> 70 Sandía Cereales Pan blanco, Isostar Biskuit
(Krispis) de molde
> 65 Piña Sémola Pan Refrescos Barritas Pizza
de trigo centeno (Colas, etc) Mars
Muesli
> 60 Sacarosa Pasas Pan con leche Zumo fresa Leche Pasteles Couscous
(Azucar) Pan condensada
Hamburgesa
> 55 Mango, Arroz cocido Pan Muesli Patata frita Helados Curry
Albaricoque Maiz dulce
> 50 Banana Pan centeno Guisante Zumo de Yogurt con Pastel de
Kiwi integral cocido Naranja azúcar bebido Manzana
> 45 Lactosa Uva Arroz Pan de salvado Zanahoria Malta Puding
vaporizado de avena Cocida con leche
> 40 Naranja, All Bran Macarrones/ Maiz Zumo Chocolate
Melocotón Trigo Espagueti Cocido manzana
> 35 Manzana Espagueti Tomate, Zumo Yogurt bebido Mousse Hamburgesa
Ciruela integral Judías verdes Tomate sin azúcar
> 30 Pera Centeno Fetuccini Alubias Leche entera
> 25 Duranzo Lentejas Leche Salchicha
desnatada
> 20 Pomelo Cebada Garbanzos Yogurt
Cereza Alubia Negra sin azúcar
> 15 Fructosa Soja
> 10 Cacahuete Bebidas
con fructosa
FIGURA 2. Índice glucémico (IG) en base a la glucosa

o el tipo. El uso de alimentos de bajo índice glicémico puede redu- – Nutritivos: es decir 1 gramo = 4 calorías.
cir la hiperglucemia postprandial Fructosa: es casi el doble de dulce que la sacarosa, por tanto requiere
• Proteinas (15%). Se recomienda aquellas proteínas que presen- menos cantidad para edulcorar. Además tiene un índice glucémico
ten la menor cantidad de grasa acompañante. muy bajo. No se recomienda su utilización en pacientes que no
• Grasas (25-30%) estén muy bien controlados ya que se puede almacenar como glu-
– Reducir el consumo de grasa saturadas < 10% (origen animal, aceite cógeno y liberarse muy rápidamente de forma inesperada sin saber
de palma y coco). cuándo. Si se utiliza mucho eleva el colesterol.
– Grasa polinsaturadas 10% (pescado azul, aceite maíz y girasol). Sorbitol: azúcar del alcohol. Se absorbe muy lentamente y es osmó-
– Grasa monoinsaturadas > 10% (aceite de oliva, cacahuete y colza tico, pudiendo dar lugar a diarreas y dolor abdominales en niños.
• Fibra. Es recomendable el consumo de 20-35 g de fibra al día en Se metaboliza en el hígado a fructosa. Es el más frecuente en cara-
adultos. La fibra retrasa el vaciamiento gástrico e incrementa el melos, chicles sin azúcar, etc., no recomendándose consumir más
tiempo de transito intestinal. Beneficios: laxante, disminuye la res- de 5 -7 “chucherías” sin azúcar a la semana.
puesta glucémica y los niveles de colesterol. Glucemius: Nuevo edulcorante mezcla de polialcholes
• Edulcorantes artificiales. Son sustancias que sirven para endul- – NO nutritivos: no aportan calorías.
zar los alimentos y que sustituyen al azúcar. Se clasifican en nutri- Sacarina: endulza unas 400 veces más que el azúcar. Si se hecha
tivos y no nutritivos. demasiado da sabor amargo. Es estable a cualquier temperatura 31
por lo que es el indicado para repostería o platos que requieran ser TABLA IV. Modificaciones de insulina/alimentación en función
cocinados, aunque el aspecto de estos no es igual que si se pre- del control glucémico
para con azúcar ya que no espesa. No debe ser usada durante el
Glucemia Modificaciones Observaciones
embarazo.
Aspartamo: aunque en sentido estricto es nutritivo (1 g = 4 cal) 140-200 Paseo y quitar 1 ración, A MEDIANOCHE NO tomar
debido a su gran poder edulcorante (20 veces más que el azú- especialmente en luna ninguna medida a no ser que
car) se requieren mínimas cantidades, por lo se considera no nutri- de miel, media mañana pase de 180 mg/dL
tivo. No tolera el calor y el frío por lo que no pueden elaborarse y merienda la glucemia
alimentos que requieran cocción. Es el recomendado en embarazo. > 200 Sin acetona: El IS es muy variable de unos
Contiene fenilalanina por lo que está contraindicado en fenilceto- Añadir 1 U de I R cada pacientes a otros. En fase de
núricos. Es el edulcorante de elección por su sabor. 50-100 mg que deseemos luna de miel suele haber
Ciclamato: no recomendado su uso en la infancia por su posible bajar la glucemia1 hipersensibilidad a la insulina
efecto cancerígeno, aunque sea a grandes dosis.
Acelsufame K: es 200 veces más dulce que la sacarosa y muy esta- Con acetona: En hiperglucemias muy altas
Añadir 1 U de I R cada o en adolescencia suele
ble a la cocción. 50 mg que deseemos haber resistencia a la insulina
• Vitaminas y minerales. No son necesarios suplementos excepto bajar la glucemia1 o
en determinadas circunstancias como puede ser dieta rica en fibra calculando el índice de Por tanto debe ser la
o hipocalórica (menos de 1.000 cal) y en enfermedades que pro- sensibilidad (IS). Indica experiencia la que nos
ducen descompensación. la glucemia que disminuye indique como realizar las
• Alimentos para diabéticos. No deben utilizarse ya que son caros 1 unidad de insulina modificaciones
y no son necesarios para lograr los objetivos, aunque llevan algo (I.S.) = 1.800/dosis total
menos de HC suelen ser muy ricos en grasas, con lo que se incre- de insulina al día
menta el poder calórico y el aumento de colesterol al creerse que
son dieta casi libre.
ÍNDICE GLUCÉMICO(28)
PLAN DE ALIMENTACIÓN POR RACIONES La respuesta de la glucemia postpandrial, se evalúa con el índice
Se define 1 ración de alimento a aquella cantidad de dicho ali- glucémico. En general, se recomienda consumir alimentos de bajo IG.
mento que contengan 10 g de hidratos de carbono. Factores que determina IG: tamaño de las partículas, relación ami-
Los pacientes diabéticos pueden comer de todo, lo que se limita losa/amilopectina, grado de gelatinización, proceso de absorción, pro-
es la cantidad. El método es de “recuento de hidratos de carbono”. ceso de elaboración, asociación a otros alimentos.
Fundamentos: los HC son el principal factor relacionado con la glu- A continuación exponemos una lista (Fig. 3), con el índice glucé-
cemia postprandial. Las proteínas y las grasas tienen poco impacto en mico de distintos alimentos en base a la glucosa. Como se puede obser-
los niveles de glucemia. El control de éstos ha de ir relacionado con var, los alimentos mezclados con grasas disminuyen su IG. Cuanto más
el control de peso y las dislipemias. elaborado, más IG.
Ventajas: permite integrar el plan de alimentación al menú familiar,
escolar o laboral. Facilitan variar los menús de forma equivalente en fun- NORMAS GENERALES DE LA ALIMENTACIÓN DEL DIABÉTICO
ción del contenido de HC. Es posible ajustar la dosis de insulina en fun- 1. Tomar a diario por lo menos un alimento de cada grupo de la rueda
ción del aporte de hidrato de carbono en los niños que son tratados con alimentaria.
terapia intensiva. Clasifican los alimentos en grupos en función de su 2. No saltarse ninguna comida.
nutriente principal. C, proteínas, grasas. 3. Evitar la obesidad, hiperlipemia y la hipertensión arterial.
4. Elegir en lo posible alimentos con índice glucémico bajo, que no
Cálculo de las necesidades calóricas sean ricos en grasas animales.
• Recién nacidos 120 cal/kg. 5. Es mejor la fruta que los zumos. No es recomendable dar más de
• Lactantes: 80-100 cal/kg. 1 zumo al día y siempre con comidas y no más de 3 frutas al día en
• 2-12 años: 1.000 + (años x 100). niños pequeños, aunque no debe darse menos de 2 piezas diarias.
• Adolescentes varones: 2.000-2.500 cal/día. Evitar frutas con desecadas, o muy maduras: dátiles, etc.
• Adolescentes mujeres: 1.500-2.000 cal/día. 6. No menos de 1/2 L de leche al día y no más de 1 (1 yogurt ó 30 g
de queso = 1 vaso de leche). Su diabetólogo le indicará que tipo
Cálculo de raciones de leche es la más adecuada para su hijo.
El nº de raciones se calcula dividiendo las calorías entre 80. 7. Las proteínas preferentemente en forma de pescados o aves.
Ej.: edad: 8 años: Calorías = 1.000 + (años x 100) = 1.800 c HC = 8. No pasar de 2-3 huevos a la semana. Nunca comerlos crudos o
50% = 900 kcal = 225 g de HC. Como 1 ración = 10 g = 22,5 racio- poco cocidos.
nes/día. 9. No recomendable: panceta, tocino, bacón, nata y demás grasas
Esta pauta se modificará en función de las necesidades individua- animales. De las vegetales excluir las de coco, palma, etc. Retirar
les. la grasa visible de los alimentos y evitar bollería industrial, dulces.
Distribución de las raciones: aunque teóricamente se distribui- 10. Evitar la paella ya que eleva mucho la glucemia. Mejor el arroz vapo-
rán según la tabla siguiente, se debe respetar las costumbres, obli- rizado o cocido o mezclado con legumbres, por ejemplo con len-
gaciones laborales u horarias de instituto, pauta de insulina, etc. Se tejas.
deben tomar los alimentos 30 minutos después de inyectarse la insu- 11. Repasar periódicamente los conocimientos adquiridos y ver si se
lina, excepto si se administra análogo. En general, se administrarán en practican.
6 tomas de la siguiente forma: desayuno: 10-20% cal/día; media 12. Dar información adecuada a profesionales, colegios, hospitales,
mañana: 10%; comida: 25-30%; merienda: 10%; cena: 25-30%; media guarderías y todos aquellos lugares que intervengan en la alimen-
32 noche: 5-10%. tación.
LÁCTEOS
Leche (cc) 200 (completa: 150 kcal Denat.: k70 cal.)
Yogurt natural 2 unidades 1 R (0,5 x unidad) (65 kcal x unidad)
Yogurt natural fruta 2,5 R. Por unidad (120 cal x unidad)
Yogurt natural desnatado fruta 2 unidades 1 R (0,5 R x unidad) (45 kcal x unidad)
CEREALES Y DERIVADOS CRUDO COCIDO FRITO ELABORADA
Arroz 13 (45) 30 (45) 15 (paella) (45)
Bollería 15 (75)
Cereales de la leche 12 (45)
Churros 40 25 (100)
Galletas maría 3 unidades (100)
Harinas 13 (45)
Maíz 100 (45) 15 (Palomitas) (45)
Pan 20 (50) 20 (110) 18 (tostada) (50)
Pasta 15 (50) 50 (60)
Pizza 40 (76)
FRUTAS: en general 1 R = 40 cal excepto: aguacate: 400; coco: 391; aceituna: 600
Melón, sandía (sin cáscara), aguacate, aceituna con hueso 200
Fresas, pomelo 150
Habituales: (albaricoque, ciruela, melocotón, naranja pelada, manzana, piña pelada, etc.) 100
Cereza, kiwi, pera pelada 70
Plátano pelado, uva, coco, higo, chirimoya, níspero pelado, higo 50-60 (15 el higo seco)
Frutas desecadas 15 g 1 R (60)
FRUTOS SECOS CON CÁSCARA SIN CÁSCARA
Almendra, avellana, nueces 250 60 (400)
cacahuete 120 40 (225)
Castaña 25 (50)
Pipas, piñones 150 50 (400)
LEGUMBRES CRUDA COCIDA FRITA
En general (Las habituales) 20 (60-80) 50-60 (60-80 sin aceite)
VERDURAS CRUDA COCIDA FRITA ASADA
Las “verdes” (lechuga, pimiento, etc.),
espárragos, etc. 200-250 (40) 300 (40)
Guisante 55 (175) 100 (75)
Cebolla 100 (50) 230 (50) 75 (50)
Patata, batata 60 (50) 60 (50) 35 (15 las de bolsa) (75) 50 (50)
Patata (puré) Polvo: R (45) 60 (50)
Setas 250 (70) 170 (450)
Tomate 250 (50) 260 (50) 200 (205)
Tomate: zumo 250 (50)
Verdura juliana 200 (50)
Zanahoria, remolacha 110 (45) 175 (50)
BEBIDAS SIN ALCOHOL NORMAL LIGHT
Batidos, refrescos, colas, horchatas, yogures líquidos, zumos de frutas 100 (40)
Colacao, Nesquik, etc. 15 g de polvo (50) 25 g de polvo (60)
Eko 10 g de polvo (42)
Isotónicas 150 (40)
Cerveza sin alcohol 250 (60)
FIAMBRES (Muy variables en su composición según marcas, costumbres, etc.)
Embutidos, morcillas, salchichas 60-140 g 1 R (4 kcal x g)
SALSAS
Agridulce, ketchup 90 (45)
Bechamel, mostaza, sofrito 120 (130)
BEBIDAS CON ALCOHOL
Anís 30 (280)
Cava dulce, vermut, vino dulce 50-70 (120)
Cava semiseco, sidra 200 (80)
Cerveza 300 cc x R (130)
DULCES: tartas, mazapán En general 20 g (80)
Mermeladas, miel, etc. En general 12 g x 1 R
Confitura Hero diet y Nutter diet 300 (40) se consideran libres
Para el cálculo de g que contiene una ración de alimento comercial, según indica la etiqueta del producto: dividir 1.000 por la cantidad de HC que
indica la etiqueta del producto. Nos indica los gramos de dicho producto que corresponde a 1 ración. En caso de obesidad debe controlarse la dieta
“libre”. Es decir sin hidratos de carbono. *Entre paréntesis las kcal por ración de alimento o por unidad cuando así se especifique.

FIGURA 3. Cantidad de alimento por 1 ración (resumen)* 33


FIGURA 4. Esquema de tratamiento de la cetoacidosis diabética. Fundación de Castilla-La Mancha para la diabetes.
34 Autor: P. Giralt Muiña
TABLA DE COMPOSICIÓN DE ALIMENTOS(29) 12. Blanco Quirós A. Infección, vacunaciones y riesgo de diabetes. VI Jorna-
das de Diabetes del niño y adolescente de la SEEP. 2001; 16-19
En la fig. 4, hacemos un resumen de los alimentos que contienen
13. Kostraba JN, Gray EC, Rewers M, et al. Nitrate levels in conmmunity drin-
HC según su forma de elaboración. Para una mayor información con- king waters and risk of IDDM: an ecological analysis. Diabetes Care 1992;
sultar las tablas de referencia en bibliografía. Las cantidades vienen 15: 1505-8.
expresadas en mL los líquidos o en gramos el resto. 14. Virtanen SM, Laara E, Hypponen E, Akerblom HK and the childhood Dia-
Las cifras que se exponen son aproximadas, ya que el contenido betes in Finland study group Diabetes. Cow´s milk consumption, HLA-DQB1
en HC de un alimento a otro varía según su grado de madurez, zona de genotype, and type 1 diabetes: a nested case-control study of siblings of
procedencia, tiempo de conservación, etc. children with diabetes. Diabetes 2000; 49: 912-7.
No todos los alimentos incluidos en la tabla deben incluirse en la 15. The EURODIAB Substudy 2 Study Group. Vitamin D Supplemente in early
dieta habitual (p. ej.: tartas). Se han expuesto para ofrecer informa- childhood and risk for type 1 diabetes mellitus. Diabetol 1999; 42: 51-4.
ción en caso de consumirse por diversas situaciones. 16. Dahlquist G, et al. Perinatal risk factors for childhood type 1 diabetes in
Europe. Diabetes Care 1999; 22: 1698-702.
En los productos elaborados como por ejemplo los yogures, hemos
17. Giralt Muiña P, Santillana Ferrer L, Madrigal Barchino D, Merlo Garrido A,
puesto las cantidades más habituales, pero siempre que lo tengan debe Toledo de la Torre B, Anaya Barea F. Incidencia en menores de 16 años y
mirarse la composición nutricional del producto. prevalencia de la diabetes mellitus tipo 1ª en la provincia de Ciudad Real.
An Esp Pediatr 2001; 55: 213-8.
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35
Manejo de los trastornos del sueño
G. Pin Arboleda
Unidad Valenciana del Sueño. Universidad Católica del Valencia. Hospital Quirón. Valencia

ALGUNAS IDEAS SOBRE EL SÍNDROME DE APNEA-HIPOPNEA TABLA I. Características clínicas del SAHS
DEL SUEÑO (SAHS) (EXTRAÍDO DEL CONSENSO NACIONAL
SOBRE EL SAHS EN EL QUE EL AUTOR FUE PONENTE Niños Adultos
REPRESENTANTE DE LA AEP) Presentación
Definiciones Edad Pico 2-2 años Aumento en 3ª edad
La obstrucción de la vía aérea superior (VAS) en el niño puede mani- Sexo Varón = hembra 2 varón > hembra
festarse como una apnea obstructiva completa o como una obstrucción Obesidad Minoría Mayoría
parcial con hipoventilación. Esta hipoventilación es el resultado de la Falta de medro Frecuente Infrecuente
obstrucción parcial continua que conlleva a una respiración paradójica, Hipertrof. adenoamigdalar Frecuente Infrecuente
hipercapnea y a menudo, hipoxemia. Hipersomnia diurna Infrecuente Común, a menudo
El ronquido es el síntoma que tienen en común los tres síndromes severa
clínicos respiratorios durante el sueño. Aproximadamente el 10-12% de
los niños roncan. Muchos de ellos tienen el llamado ronquido simple Sueño
no asociado a apnea, alteraciones del intercambio gaseoso o excesi- Obstrucción Apnea obstructiva
vos microdespertares. Su frecuencia declina a partir de los 9 años. El o hipoventilación
obstructiva
roncar más de 4 noches a la semana se asocia significativamente con
Arquitectura Normal Disminución
tos nocturna y asma(1). El ronquido primario se suele resolver en el 50% s. delta y REM
de los niños con el tiempo, su progreso a SAHS se observa en el 10% Microdespertares Pueden no verse Al final de cada
de los casos. apnea
En la actualidad, la inocuidad del ronquido simple está en entre-
dicho habiéndose encontrado una asociación con déficits neurocogni- Tratamiento
tivos probablemente relacionados con la fragmentación del sueño; así, Quirúrgico La mayoría En una minoría
los niños con ronquido simple (5-7 años) presentan menor porcentaje Médico (CPAP) Casos seleccionados Muy común
de REM en relación con el tiempo de sueño total, un mayor índice de
microdespertares y peores valoraciones en el test de Conners y en el
child behavioural test así como diferencias en la habilidad lingüística niños de 4-5 años se estima entre el 0,7% y el 3%(4) con un pico de inci-
y visoespacial(2) y el ronquido habitual único se asocia a pobre rendi- dencia entre los 2-5 años.
miento escolar. El ronquido se considera patológico si ocupa más del
30% del tiempo de sueño. Características clínicas
La hipoapnea en el niño es definida como una disminución del Se resumen en la tabla I.
50% o más de la amplitud de la señal de flujo nasal/oral, a menudo
acompañada de hipoxemia o microdespertar(3). Evaluación
Los niños con síndrome de resistencia de las vías aéreas supe- En asistencia primaria la evaluación clínica de un niño con el obje-
riores roncan y tiene una obstrucción parcial de la vía aérea superior tivo de descartar o confirmar la presencia de SAHS y priorizar su aten-
que ocasiona episodios repetitivos de un incremento del esfuerzo res- ción, debe incluir(5):
piratorio que finaliza en un microdespertar. El patrón del sueño se altera • Historia clínica standard completada con una historia de sueño.
y los síntomas diurnos pueden ser similares a los de la apnea obs- • Exploración pediátrica standard con especial valoración del área
tructiva, aunque estos niños no evidencian apneas ni hipoapneas o alte- ORL.
raciones del intercambio gaseoso en la polisomnografía. Su incidencia • Child behavioral test o un test de evaluación psicomotora de vali-
en niños es desconocida aunque parece ser más frecuente que el SAHS. dez semejante. Test clínico de sospecha de SHAS de Chervin o
La apnea obstructiva en niños se define como un desorden de la similar.
respiración durante el sueño caracterizada por una obstrucción parcial • Radiografía lateral de cráneo y cefalometría específica de la vía
prolongada de la vía aérea superior y/o una obstrucción completa inter- aérea superior.
mitente (apnea obstructiva) que altera la ventilación normal durante el • De manera optativa, en función de las posibilidades técnicas, se
sueño y los patrones normales de sueño. Se asocia a síntomas que debería incluir la valoración del trabajo respiratorio durante el sueño
incluyen ronquido habitual nocturno, dificultades con el sueño y/o mediante vídeograbación casera.
problemas de conducta diurnos. Las complicaciones pueden incluir La valoración conjunta de estas técnicas deberá facilitar la indi-
alteraciones del crecimiento, alteraciones neurológicas, y cor pulmo- cación o no de derivación del paciente a una unidad de sueño (prefe-
nale, especialmente en los casos severos. Se han identificado y defi- rible) o al servicio de OLR de referencia para completar el estudio e
nido varios factores de riesgo. indicar el tratamiento de elección.
Los factores de riesgo en cuanto a un compromiso respiratorio serio
Prevalencia en el postoperatorio inmediato mencionados en la literatura son(6):
Su prevalencia entre niños de 4-5 años se estima entre el 0,7% y el – Edad menor 3 años.
36 3% con un pico de incidencia entre los 2-5 años. Su prevalencia entre – SAHS severo diagnosticado por polisomnografía (PSG).
TABLA II. Diferencias clínicas entre parasomnia y epilepsia 10. Existe un elevado riesgo postoperatorio en aquellos niños que tie-
Parámetro Alt. despertar Epilepsia frontal nen un cuadro de apnea obstructiva severo, comorbilidad (por ejem-
(sonambulismo, lobal nocturna plo hipoplasia facial) o son menores de 3 años (III-2).
terror nocturno, etc.) No todos los niños con síndrome de apnea obstructiva del sueño se
curan con la adenoamigdalectomía. Aproximadamente el 20% nece-
Edad inicio Preescolar 10-20 años sitan se reevaluados y, posiblemente, ser tratados de nuevo (III-2).
Conducta Variada Puede ser estereotipada 11. La PSG nocturna es el método ideal para detectar y graduar la seve-
Duración Variada Generalmente corta ridad del síndrome de apnea nocturna en los niños (III-2).
Síntomas diurnos No Fatiga/letargia diurnal El tratamiento del SAHS ocasionado por hipertrofia adenoamigda-
Persistencia A menudo mejoran Persisten en adulto lar reduce el gasto sanitario de estos niños tras la intervenidos en 1/3.
Los gastos sanitarios previos a la intervención en el grupo de niños con
SAHS es 2,5 veces el gasto de los niños control. La intervención se aso-
– Cardiopatía congénita. Hipertensión pulmonar. Complicación car- cia a una reducción del 60% de ingresos hospitalarios, el 47% en el
diaca del SAHS. número de consultas, una reducción del 39% visitas a servicios de urgen-
– Obesidad mórbida. Retraso de crecimiento estaturoponderal. cia y una disminución del 27% de gasto farmacológico de manera que
– Historia de nacimiento pretérmino. durante el segundo año tras la intervención los niños intervenidos redu-
– Infección respiratoria reciente. Enfermedad neuromuscular. cen su gasto sanitario en un 32,5%(8).
– Anomalía craneofacial. Fisura palatina.
– Alteración cromosómica. PARASOMNIAS: CONCEPTOS BÁSICOS
Son sucesos físicos no deseados o experiencias que ocurren al ini-
Puntos básicos a tener en cuenta frente a la apnea obstructiva ciarse el sueño, durante el sueño o durante los microdespertares del
según la medicina basada en pruebas(7) sueño. Son manifestaciones de una activación del SNC transmitida al
1. Los tres síntomas con mayor poder predictivo de la presencia de SAHS músculo esquelético y al SNA. Incluyen movimientos anormales rela-
son el ronquido profundo, la dificultad para respirar durante el sueño, cionados con el sueño, conductas, emociones, percepciones, ensue-
y las pausas respiratorias (o esfuerzo respiratorio) durante el sueño ños y activación del SNA(10). Es importante conocer las diferencias que
observadas por los padres. El ronquido primario no puede ser dis- desde el punto de vista clínico (Tabla II) nos permitan diferenciarlas de
tinguido de la apnea del sueño sólo mediante la historia clínica (III-2). las crisis epilépticas (un tercio de los pacientes diagnosticados de epi-
2. El factor anatómico más frecuentemente asociado en los niños es lepsia lobar nocturna tienen familiares con el diagnóstico de para-
la hipertrofia adenoamigdalar. Sin embargo, el riesgo de obstruc- somnia(11)).
ción de la vía aérea superior no depende del tamaño de adenoides A nivel general, las características diferenciales de las parasom-
y amígdalas per se, sino de su tamaño relativo comparado con el nias NREM y las crisis epilépticas se pueden resumir en la tabla III(12):
tamaño de la vía aérea (III-2). De la misma manera, las características diferenciales de las para-
3. El SAHS altera claramente el desarrollo normal y el funcionamiento somnias REM y las crisis epilépticas(12) se resumen en la tabla IV.
del niño. En niños menores de 1 año, hay una serie de fenómenos clínicos
4. La compleja interacción de varios factores en el SAHS explica el que ocurren durante el adormecimiento o el sueño que pueden fácil-
retraso de crecimiento observado. mente ser confundidos con ataques epilépticos(13).
5. Se debe prestar especial atención a los detalles del sueño (movi- En la evaluación clínica y de laboratorio de las parasomnias(14)
mientos, sudoración, sueño intranquilo, etc.), un tiempo general- son precisas una historia y exploración clínica completas con espe-
mente olvidado en la historia clínica. cial atención a:
6. El examen realizado durante la vigilia a menudo es completamente • Hora habitual del episodio y descripción de la conducta y sinto-
normal. matología.
7. Una saturación sanguínea normal por la mañana no excluye la pre- • Respuesta a las maniobras de los cuidadores y abandono o no
sencia de hipoxemia o hipoventilación nocturna. de la cama.
8. Los niños con SAHS tienen mayor riesgo de complicaciones pos- • Presencia o ausencia de amnesia posterior del evento.
toperatorias. • Presencia o ausencia de síntomas durante el día. Horarios de sueño
9. La adenoamigdalectomía es el tratamiento de elección en los niños y alimentación.
con SAHS (III-2). El CPAP se indica en los niños que no responden • Presencia de movimientos estereotipados o conductas rítmicas
a la intervención o en los que ésta no es posible. durante el evento.

TABLA III. Diferencias clínicas parasomnias NREM-epilepsia


Epilepsia Despertar confusional Terror nocturno Sonamb. Soliloquia Enuresis SPI SMP

Incontinencia + - - - - + -
Mordedura de lengua + - - - - - -
Confusión + + + + + - -
Movimientos tónico-clónicos + - - - - - -
Salivación + - - - - - -
Amnesia + + + + + - -
También en vigilia + - - - - - +

SPI: síndrome de piernas inquietas; SMP: síndrome de movimiento periódico. 37


TABLA IV. Diferencias clínicas entre epilepsia y parasomnias REM
Epilepsia Pesadilla Cataplejía Parálisis del sueño Alucinaciones hípnicas Trastorno del REM

Incontinencia + - - - - -
Mordedura Lengua + - - - - -
Confusión + - - - - -
Movimientos Tónico-clónicos + - - - - -
Salivación + - - - - -
Amnesia + - - - - -
Ocurre también en vigilia + - + - - -

• Evolución psicomotora previa y actual: La alteración sugiere causa 6. Nixon GM, Kermack AS, Davis M, Manoukian J, A Brown KA, Brouillete
orgánica. RT. Planing Adenotonsillectomy in children with obstructive sleep apnea:
the role of overnight oximetry. Pediatrics 2004; 113 (3): e19-e25.
• Somnolencia diurna y presencia de sintomatología respiratoria diurna
7. Kennedy JD, Waters KA. Investigation and treatment of upper-airway obs-
y/o nocturna.
truccion childhood sleep disorders. MJA 2005; 182: 419-23.
• Descartar efecto secundario de drogas legales e ilegales.
8. Tarasiuk A, Simon T, Tal A, Reuveni H. Adenotonsillectomy in children with
Como pruebas complementarias se puede solicitar un video en el obstructive sleep apnea syndrome reduces health care utilization. Pedia-
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38
ANEXO 1. Cuestionario de screening de SAHS de Chervin(9)

Conteste SÍ o NO a cada pregunta


Mientras duerme su hijo/a…
Ronca más de la mitad de tiempo
Siempre ronca
Ronca fuertemente
Tiene una respiración agitada o movida
Tiene problemas para respirar o lucha para respirar

Alguna vez usted…


Ha visto a su hija/o parar de respirar durante la noche

Su hijo/a…
Tiene tendencia a respirar por la boca durante el día
Tiene la boca seca cuando se levanta por la mañana
Se orina de manera ocasional en la cama

Su hija/o…
Se levanta por las mañanas como si no hubiese descansado suficiente
Tiene problemas de soñolencia durante el día
Que algún profesor o tutor le haya comentado que parece soñoliento por el día
Es difícil de despertar por las mañanas
A veces tiene dolores de cabeza por las mañanas
En algún momento de su vida ha tenido un enlentecimiento de su crecimiento
Tiene sobrepeso

Su hijo/a a menudo…
Parece que no escucha cuando se le habla directamente
Tiene dificultades en tareas organizadas
Se distrae fácilmente por estímulos ajenos
Mueve continuamente sus manos o pies o no para en la silla
A menudo actúa como si tuviera un motor
Interrumpe o se entromete con otros (p. ej.: en conversaciones o juegos)

39
Ponencia

Actitud del pediatra ante la hiperlipemia


Sospecha y orientación diagnóstica
I. Vitoria Miñana
Sección de Nutrición Infantil. Hospital Lluis Alcanys. Xàtiva, Valencia

INTRODUCCIÓN favorablemente el curso de la enfermedad. Ya que la aterosclerosis


La aterosclerosis y su repercusión clínica en la enfermedad vas- se inicia en la infancia existen suficientes datos que indican que la pre-
cular constituyen la principal causa de morbilidad y mortalidad en adul- vención primaria debe iniciarse en la edad pediátrica, a partir de los 2-
tos en Europa. En España son la primera causa de mortalidad (34,5% 3 años de edad, mediante 2 tipos de estrategias ya sea para la pobla-
del total de muertes), tanto en varones como en mujeres. ción general o sea para la de alto riesgo, la cual en Pediatría se identifica
La aterosclerosis es un proceso patológico de las arterias, res- por los antecedentes en familiares (padres, tíos, abuelos) con enfer-
ponsables de la enfermedad cardiovascular (infarto de miocardio, angina medad vascular precoz (antes de los 55 años de edad).
de pecho y muerte súbita), accidente cerebrovascular (hemorragia, De los distintos factores de riesgo modificables nos centraremos
trombosis e infarto), aneurisma aórtico y/o enfermedad vascular peri- en la hipercolesterolemia. El objetivo de la presentación es actualizar
férica. Desde el punto de vista anatomopatológico, en la fase inicial hay las recomendaciones acerca de la estrategia de despistaje o cribado
un depósito subendotelial de lipoproteínas que son fagocitadas por de la hipercolesterolemia en la infancia.
macrófagos formando las llamadas células espumosas y que consti-
tuyen las estrías lipídicas; si esta lesión avanza, se forma la placa fibrosa; DEFINICIÓN DE HIPERCOLESTEROLEMIA
la progresión de ésta produce la lesión complicada caracterizada por Todo niño o adolescente que tenga una cifra de colesterol total igual
su calcificación, trombosis, ulceración y hemorragia. o superior a 200 mg/dL es catalogado de hipercolesterolémico, consi-
Las estrías lipídicas se encuentran en niños menores de 2-3 años derando como valores límite las cifras entre 170 y 200 mg/dL.
y son cada vez más frecuentes a partir de esta edad, siendo práctica-
mente constantes a partir de los 10 años independientemente de la raza, CLASIFICACIÓN DEL RIESGO DE HIPERCOLESTEROLEMIA
sexo y factores socioambientales; estas lesiones no se consideran clí-
nicamente peligrosas y pueden ser reversibles. A partir de la pubertad Valor Colesterol total Colesterol LDL
pueden transformarse en placa fibrosa, lesión aterosclerótica que puede
Normal < 170 < 110
causar sintomatología clínica en las siguientes décadas de la vida,
cuando la placa fibrosa se transforma en lesión complicada. Límite 170-199 110-129
Estudios en necropsias efectuadas en niños han mostrado la rela- Alto ≥ 200 ≥ 130
ción entre las lesiones ateroscleróticas iniciales y las concentraciones
elevadas de colesterol unido a lipoproteínas de baja densidad (C-LDL)
y disminuidas de colesterol unidos a lipoproteínas de alta densidad (C- DESPISTAJE DE HIPERCOLESTEROLEMIA
HDL). Además, es en esta época, infancia y adolescencia, cuando se Basándose en la fuerte asociación de agregación familiar de la
va configurando el estilo de vida en relación con los hábitos alimenta- enfermedad cardiovascular y los niveles de hipercolesterolemia, se reco-
rios, el consumo de tabaco y la actividad física. Es, por tanto, la niñez mienda realizar un despistaje selectivo y no universal de las cifras de
el momento adecuado para instaurar la prevención primaria de la arte- colesterol, de modo que el estudio analítico debe practicarse a los niños
riosclerosis mediante el control de los factores de riesgo. mayores de 2 años y adolescentes:
Los factores de riesgo de enfermedad cardiovascular ateroscle- a. Pertenecientes a grupos de riesgo:
rótica se indican en la tabla I. • Padres y abuelos menores de 55 años con historia de ateroscle-
En adultos se ha demostrado que la prevención primaria de la ate- rosis expresada en forma de:
roesclerosis muestra un retraso en el inicio de los síntomas y modifica – Angor.
– Infarto agudo de miocardio.
TABLA I. Factores de riesgo de aterosclerosis – Enfermedad vascular cerebral o periférica.
• Padres con cifras de colesterolemia igual o superior a 240 mg/dL.
Factores de riesgo modificables: b. Niños con historia familiar no fiable. En este caso se debe valorar
• Alta concentración de C-total y C-LDL sobre todo la coexistencia de otros factores de riesgo tales como:
• Baja concentración de C-HDL • Tabaquismo.
• Obesidad • La dieta con alto aporte de ácidos grasos saturados.
• Hipertensión c. En todo caso debe hacerse una valoración individual indepen-
• Tabaquismo dientemente de la historia familiar.
• Diabetes En todos estos casos se debe realizar un análisis de colesterol plas-
mático total y de sus fracciones (HDL y LDL), TG, valorando solicitar
• Sedentarismo
además apoproteínas B y A1. Debe efectuarse los estudios analíticos
• Personalidad pertinentes para descartar hipercolesterolemia secundaria. A los padres
Los factores de riesgo no modificables o marcadores de riesgo: y hermanos se les determinará el colesterol total y sus fracciones y tri-
glicéridos.
• Sexo masculino
Según el valor obtenido se actuará del siguiente modo:
• Edad
1. Según el valor del colesterol plasmático total.
40 • Historia familiar de arteriosclerosis precoz a. Si el resultado es menor de 170 mg/dL se repetirá cada 5 años.
TABLA II. Causas secundarias de hipercolesterolemia TABLA III. Causas primarias de hipercolesterolemia

Exógenas Alteraciones familiares del metabolismo C-LDL


• Alcohol • Hipercolesterolemia familiar
• Contraceptivos – Hipercolesterolemia familiar heterocigoto
• Esteroides – Hipercolesterolemia familiar homocigota
• Hipercolesterolemia poligénica
Enfermedades de depósito
• Hiperlipemia familiar combinada
• Cistinosis
• Enfermedad de Gaucher • Hiperapobetalipoproteinemia
• Enfermedad de Tay-Sachs • Apolipoproteína B100 defectuosa
• Enfermedad de Niemann-Pick Otras alteraciones primarias del metabolismo lipo-apoproteínas
• Glucogenosis más raras
• Hipertrigliceridemia familiar
Enfermedades endocrinas y metabólicas
• Hipoalfalipoproteinemia. Alteraciones apoproteína A
• Diabetes mellitus
• Deficiencia lipoprotein-lipasa
• Lipodistrofia
• Hipotiroidismo
• Hipopituitarismo Las principales causas secundarias de las hiperlipoproteinemias
• Porfiria aguda Intermitente (exógenas, enfermedades de depósito, enfermedades endocrinas y
• Embarazo metabólicas, renales, hepáticas y otras ) se indican en la tabla II.
Enfermedades renales
• Insuficiencia renal crónica CAUSAS PRIMARIAS DE HIPERCOLESTEROLEMIA
• Síndrome nefrótico De las distintas causas primarias de hipercolesterolemia que se
• Síndrome hemolítico-urémico resumen en la tabla III, se comentan a continuación las más frecuentes
en la infancia.
Enfermedades hepáticas
• Atresia biliar congénita Hipercolesterolemia familiar: hetero y homocigota
• Colestasis intrahepática benigna recurrente Es un trastorno genético en que está alterado el receptor de super-
ficie celular que reconoce e internaliza las LDL circulantes en el plasma.
Otras El acúmulo de LDL en sangre y su aumento de vida media provocan
• Quemaduras una alteración de su estructura química favoreciendo así la penetración
• Progeria en los macrófagos y su conversión en células espumosas, característi-
• Hepatitis cas de la placa de ateroma.
• Síndrome Klinefelter El gen para el receptor de LDL se localiza en el cromosoma 19. Esta
• Anorexia nerviosa hipercolesterolemia familiar es de herencia monogénica y transmisión
• Síndrome de Werner autosómica dominante (al menos el 50% de los familiares de primer
• Hipercalcemia idiopática grado estarán afectos).
• Lupus eritematoso sistémico
Hipercolesterolemia familiar heterocigota
Afecta a 1 de cada 500 individuos. La aparición de xantomas (sobre
b. Si el valor es mayor de 200 mg/dL se solicitará estudio completo todo en tendones aquíleos y extensores de las manos) pueden estar
que incluya análisis de apolipoproteínas y triglicéridos. presentes en la primera década. A partir de los 30-40 años puede tener
c. Si el valor está entre 170 y 200 mg/dL se repetirá, y según el resul- enfermedad coronaria.
tado se actuará como se indica en los apartados anteriores. Su diagnóstico requiere:
2. Según el valor del colesterol plasmático LDL. • C-LDL del paciente y de uno de sus progenitores en percentil mayor
a. Si el resultado es menor de 110 mg/dL se repetirá cada 5 años, de 98 (≥ 160 y 200 mg/dL, respectivamente). Suele ser 2-3 veces
se intentarán reducir los otros factores de riesgo y se le darán ins- mayor que la media: 280 ± 80 mg/dL.
trucciones dietéticas al niño. • C-total > 300 mg/dL en otro familiar junto con enfermedad cardio-
b. Si el valor de colesterol LDL está entre 110 y 130 mg/dL se esta- vascular a una edad ≤ 55 años.
blecerá una dieta y se hará una reevaluación anual.
c. Si el colesterol LDL es superior a 130 mg/dL se indicará una dieta, Hipercolesterolemia familiar homocigota
se hará despistaje en hermanos y se estudiará una posible etiolo- La hipercolesterolemia familiar homocigota afecta a 1 de cada
gía secundaria. 1.000.000 individuos. Los xantomas planos en nalgas, fosas poplíteas
y tendones extensores pueden estar presentes antes de los 5 años.
CAUSAS SECUNDARIAS DE HIPERCOLESTEROLEMIA Entre los 5 y 15 años pueden asociar xantomas tuberosos. La enfer-
Las hipercolesterolemias secundarias son aquellas causadas por medad coronaria puede ocurrir al final de la adolescencia.
otros trastornos primarios que provocan hipercolesterolemia como com- El colesterol total está en el rango de 600 a 1.200 mg/dL, con valo-
plicación. En sociedades en las que la hipercolesterolemia poligénica res de C-LDL dos o tres veces superior a los encontrados en las formas
es prevalente, como es el caso del Reino Unido y España, la hiperco- heterocigotas.
lesterolemia secundaria puede tener un alto impacto. Por ejemplo, en
el Reino Unido y EE.UU., la enfermedad coronaria es la causa más Hipercolesterolemia poligénica
común de muerte prematura en la diabetes mellitas, mientras en Japón Es la más frecuente de las hipercolesterolemias primarias (hasta el
es una rara complicación. 85% de las hipercolesterolemias, afectando hasta al 4-5% de la pobla- 41
ción general)y la de riesgo menos elevado. Se caracteriza por C-LDL 3. Un paciente y otro familiar tendrá o habrá tenido TG ≥ P90.
discretamente elevado, mayor de 130 mg/dL, con padres y familiares En todos los casos puede haber un patrón cambiante.
con concentraciones similares (agregación familiar).
Hiperapobetalipoproteinemia
Hiperlipemia familiar combinada El paciente tiene un valor de apoproteína B ≥ P90 (108 mg/dL), con
Es de herencia dominante con expresión incompleta en la infancia. un progenitor con enfermedad cardiovascular que tiene apoproteína B
Su frecuencia en la población general es del 0,5%. La etiología es des- ≥ 130 mg/dL y lípidos plasmáticos en P ≥ 90.
conocida.
Hay un riesgo aumentado de enfermedad vascular, aunque menor Hipertrigliceridemia familiar
que en el caso anterior. Suele haber historia familiar de obesidad, gota Se diagnostica cuando los TG son > P90 en tres generaciones, sin
o diabetes mellitus no insulin-dependiente. Suelen asociar aumento de hipercolesterolemia.
apoproteína B (> 80 mg/dL) con cociente apoB/apoA1 < 0,8. Los xan-
tomas tendinosos son raros. CUÁNDO REFERIR EL NIÑO A UN CENTRO ESPECIALIZADO
Su diagnóstico requiere: Los niños que tengan una colesterolemia superior a 200 mg/dL
1. El paciente tendrá: deberían remitirse a un Centro especializado si cumplen alguna de
• C-LDL ≥ P90 (aproximadamente 140 mg/dL (plasma)). los siguientes características:
• TG ≥ P90 (varones: 120 mg/dL; mujeres: 130 mg/dL). • Hª familiar positiva.
• C-LDL y TG ≥ P90. • Varios factores de riesgo.
2. Un progenitor tendrá: • Patrón lipoproteico cambiante.
• C-LDL ≥ P90 (aproximadamente 160 mg/dL (plasma)). • Para descartar HC secundaria.
• TG ≥ P90 (aproximadamente TG ≥ 170 mg/dL). • Que puedan precisar tratamiento farmacológico.
• C-LDL y TG ≥ P90.

42
Enfoque terapéutico: dietético y farmacológico
J. Dalmau Serra
Unidad de Nutrición y Metabolopatías. Hospital La Fe. Valencia

RECOMENDACIONES DIETÉTICAS pasado desapercibidos (consumo de alcohol, contraceptivos, taba-


Tras el diagnóstico debe instaurarse dieta fase 1, cuyas caracte- quismo…), etc., además de los factores de riesgo clásicos (Hª familiar
rísticas no difieren de las de una dieta prudente recomendable para de enfermedad vascular precoz, hipertensión, obesidad, C-HDL < 35
toda la población pediátrica sana: calorías adecuadas para mantener mg/dL, diabetes, sedentarismo).
el crecimiento; aporte lipídico 30-35% de las calorías totales, ácidos Se recomienda no iniciar tratamiento farmacológico antes de los 10
grasos saturados < 10%, poliinsaturados hasta el 10% y el resto como años, aunque cada caso debe ser valorado individualmente. Hasta hace
monoinsaturados; aporte de colesterol ≤ 100 mg/1.000 calorías; fibra unos años las resinas quelantes de ácidos biliares eran el tratamiento
dietética 8-28 g (dependiendo de la edad); alimentos ricos en vitami- de elección, siendo la dosis dependiente de la concentración de C-LDL;
nas antioxidantes (hortalizas, verduras y frutas). actualmente ya se inicia el tratamiento con estatinas (lovastatina, pra-
Dadas las características de la dieta actual de la población espa- vastatina, atorvastatina). La ezetimiba, de la que no hay ninguna expe-
ñola, las recomendaciones a realizar son: 1º disminuir la ingesta total riencia pediátrica, abre en un futuro próximo nuevas posibilidades de
de grasa (disminuir consumo de carne, embutidos, mantequilla/mar- tratamiento farmacológico.
garina, quesos cremosos y fritos); 2º aumentar la calidad de la grasa
consumida (aumentar aporte de pescados, aceite de oliva); 3º dismi- BIBLIOGRAFÍA
nuir consumo de colesterol (disminuir aporte de huevos, vísceras y bolle- 1. American Academy of Pediatrics.Committee on Nutrition. Cholesterol in child-
ría industrial). hood. Pediatrics 1998; 101: 141-7.
Tras 3-6 meses debe repetirse el estudio analítico inicial, y si la con- 2. Boyd H, Koenigsberg J, Falkner B, Gidding S, Hassink S. Effect of Obesity
centración de C-LDL sigue patológica valorar dieta fase 2, que difiere and High Blood Pressure on Plasma Lipid Levels in Children and Adoles-
cents. Pediatrics 2005; 116: 442-6.
de la anterior en el aporte de ácidos grasos saturados (< 7%) y de coles-
3. Cortner JA, Coates PM, Gallagher PR. Prevalence and expression of fami-
terol (< 200 mg/día). lial combined hyperlpidemia in childhood. J Pediatr 1990; 116: 514-9.
Debe vigilarse el crecimiento puesto que dietas hipograsas pue- 4. Durrington P. Dyslipidaemia. Lancet 2003; 362: 717-31.
den ser hipocalóricas para un determinado paciente. 5. Gidding S. Cholesterol guidelines debate. Pediatrics 2001; 107: 1229-30.
6. Kavey REW, Daniels SR, Lauer RM, et al: American Heart Association gui-
TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO delines for primary prevention of atherosclerotic cardiovascular disease
Si tras un mínimo de 6-12 meses con tratamiento dietético la con- beginning in childhood. J Pediatr 2003; 142: 368-72.
centración de C-LDL es superior a 190 mg/dL, o a 160 mg/dL y existen 7. Kavey REW. Hypercholesterolemia in children. Am Fam Physician 2000; 61:
otros 2 factores de riesgo (Hª familiar de ECV, hipertensión, tabaquismo, 633-4.
C-HDL bajo, obesidad, diabetes, sedentarismo) debe valorarse trata- 8. National Cholesterol Education Program. Report of the Expert Panel on Blood
miento farmacológico. Dada la poca experiencia pediátrica en este tipo Cholesterol Levels in Children and Adolescents. Pediatrics 1992; 89: 525-
de tratamiento, el paciente debe ser evaluado individualmente, y con 84.
el máximo de datos, por lo que recomendamos realización de apo- 9. Newman T, Garber A. Cholesterol Screening in Children and Adolescents.
Pediatrics 2000; 105: 637-8.
proteína B, lipoproteína (a), insistir en otros factores que pueden haber

43
Ponencia

Estado actual de la infección tuberculosa en el niño


Sospecha diagnóstica de la tuberculosis
M.J. Mellado Peña
Médico Adjunto. Servicio de Pediatría. Hospital Carlos III. Madrid

SITUACIÓN EPIDEMIOLÓGICA El estadio en el que el niño se encuentra se diagnostica funda-


La endemia de tuberculosis (TB) en cada área, está estrechamente mentalmente por la positividad de la prueba de la tuberculina, la radio-
relacionada con el desarrollo socio-económico, la situación de la infec- logía de tórax y el cuadro clínico. La prueba más valiosa para diag-
ción por VIH y con las medidas adoptadas por las autoridades sanita- nosticar al niño de infección tuberculosa en la prueba de tuberculina,
rias en cada zona. En los países desarrollados, el porcentaje de per- que precisa entre 8-12 semanas después de la infección para hacerse
sonas inmigrantes procedentes de países de endemia elevada para positiva y representa el desarrollo de inmunidad celular frente al MTB.
tuberculosis, es en la actualidad, otro factor a considerar. En España
los datos del Centro Nacional de Epidemiología(1) en 2004 reflejan una PRUEBA DE TUBERCULINA EN NIÑOS
tasa de enfermedad tuberculosa del 17,02 por 100.000 habitantes y una Los objetivos que se persiguen al realizar esta prueba en los niños
tasa de meningitis tuberculosa del 0,23 por 100.000 habitantes; sin son: detectar precozmente una infección tuberculosa latente y tratarla
embargo la tasa real estimada se calcula entre 25-30 casos por cada para evitar que se produzca la enfermedad y vigilar estrechamente a
100.000 habitantes. El porcentaje de resistencia a isoniacida en nues- los niños expuestos, evitando la infección con el tratamiento postex-
tro medio, se sitúa en 3,3% en población general y alrededor del 7% en posición. La prueba de tuberculina se basa en que la infección por
infectados por VIH(2). El porcentaje de inmigrante a final de 2004 en MTB produce una hipersensibilidad retardada a componentes antigé-
España se calcula en un 7% de la población, alrededor de 3 millones nicos del bacilo, llamados “tuberculinas”, el extracto proteico purifi-
de personas(3). Los países de origen de los inmigrantes a nuestro país cado derivado de tuberculina se conoce internacionalmente como PPD.
son prioritariamente: Ecuador, Marruecos, Colombia, Perú y Este de El pequeño tamaño de las proteínas constituyentes es la razón por la
Europa, todos ellos, con tasas de enfermedad tuberculosa estimadas cual, éste no sensibiliza a las personas no expuestas a micobacte-
superiores a 80 casos por 100.000 habitantes y con porcentajes de rias a pesar de repetirse el test. La técnica debe ser rigurosa, la tuber-
resistencia a isoniacida por encima del 6%(4). En nuestro país, debería culina debe conservarse 4 °C, sin congelar y preservada de la luz. Con
ser obligado realizar una prueba de tuberculina a las personas inmi- aguja de calibre 26, en cara anterior de antebrazo, en inyección intra-
grantes procedentes de zonas de endemia elevada para TB, con el dérmica de 0,1 mL/2 UT de PPD RT-23 (equivalente a 5 UT del pre-
fin de detectar precozmente a los infectados. La situación de los niños parado PPD-S, que es la tuberculina estándar internacional), se debe
es todavía más especial, ya que son más vulnerables a la enfermedad, producir al ponerla una pápula 6-10 mm. La reacción intradérmica que
con frecuencia han inmigrado con un núcleo familiar de alto riesgo y produce, cuando el niño está infectado, es lo que se conoce como
conviven en condiciones precarias socio-sanitarias. El niño adoptado intradermorreacción de Mantoux. qué debe leerse a las 72 h, cuando
del tercer mundo, es también de alto riesgo para desarrollar la enfer- consigue la máxima induración, el diámetro máximo transversal al eje
medad pues vivido en orfanatos de países de alta endemia de TB(5,6). mayor del brazo y siempre debe anotarse en milímetros, con la fecha
El correcto diagnóstico y tratamiento de la exposición, la infec- de la lectura. Si no existe induración deberá anotarse 0 mm de indu-
ción y la enfermedad tuberculosa, es el último determinante que puede ración en lugar de negativo. Una reacción inmediata las primeras 24
modificar la situación epidemiológica de la tuberculosis en cada país. horas que luego desaparece, es secundaria a la hipersensibilidad inme-
Son fundamentales, un adecuado régimen terapéutico y el correcto diata y no debe confundirse con la intradermorreacción de Mantoux.
cumplimiento del mismo. El régimen terapéutico debería diseñarse por La induración con vesiculación o necrosis se interpretará como posi-
una Unidad de expertos, especialmente en el caso de niños con formas tiva siempre.
graves de enfermedad, cepas multirresistentes y en niños infectados Actualmente, no se vacuna de BCG en nuestro medio a los recién
por VIH. La implantación de la “terapia directamente observada”, es nacidos, lo cuál garantiza aún más la fiabilidad de esta prueba. Sin
el indicador más fiable de cumplimiento terapéutico. embargo la población pediátrica inmigrante o adoptada originaria de
países con alta endemia de tuberculosis, con frecuencia está vacunada
CONCEPTOS GENERALES con BCG, lo que dificulta la interpretación de la prueba. Los factores
La tuberculosis es una enfermedad infecciosa producida por el que se asocian con resultados falsos positivos o falsos negativo de la
Mycobacterium tuberculosis (MTB) que se transmite al niño por vía prueba de tuberculina(8,9) se reflejan en la tabla I.
aérea a través de un adulto enfermo bacilífero. Un diagnóstico de infec-
ción o enfermedad tuberculosa en un niño es un “evento centinela” INTERPRETACIÓN DE LA PRUEBA DE TUBERCULINA EN NIÑOS
que representa la transmisión reciente de MTB en la comunidad. Un En cualquier población la posibilidad de que una prueba de tuber-
diagnóstico de infección tuberculosa o enfermedad en un niño quiere culina positiva traduzca una verdadera infección tuberculosa, está
decir, que existe un adulto cercano con enfermedad bacilífera. Los influenciada por la prevalencia de la infección por Mycobacterium tuber-
niños en contacto con bacilo tuberculoso, deben estudiarse siempre culosis en esa población. Así en los países con baja tasa de tubercu-
y clasificarse adecuadamente en uno de los tres estadios: exposición, losis, el valor predictivo positivo de la prueba de tuberculina es bajo y
infección, enfermedad. El desarrollo de uno u otro estadio depende en los países de alta tasa será elevado. La interpretación de la prueba
de: la intimidad del contacto con la fuente bacilífera, la duración de la en niños depende, como en el adulto, del diámetro de induración, pero
exposición, la cantidad de bacilos de la fuente y la situación inmuno- también de la edad del paciente y de la situación socioepidemiológica.
lógica y la edad del niño. Tanto la responsabilidad del diagnóstico En nuestro medio, la Sociedad de Infectología Pediátrica(10) de la AEP,
como el cumplimiento y el estudio de contacto recae sobre el sistema teniendo en cuenta nuestra tasa de tuberculosis(11,12), considera la intra-
44 sanitario(7). dermorreacción de Mantoux positiva en niños:
TABLA I. Factores que se asocian con resultados falsos TABLA II. Criterios diagnósticos de tuberculosis en niños
negativos y falsos positivos de la prueba de tuberculina
Diagnóstico de exposición a tuberculosis
Falsos negativos de la prueba de la tuberculina • Contacto sustancial con adulto sospechoso de tuberculosis
1. Factores relacionados con la persona • Mantoux < 5 mm
– Período ventana (entre exposición y positivización: 4-12 semanas) • Asintomático sin signos clínicos y con Rx tórax normal
– Tuberculosis diseminadas o con afectación de las serosas (miliar,
meningitis, etc.) Diagnóstico de infección tuberculosa latente
– Coinfección por VIH • Antecedente o no de contacto con tuberculosis
– Infecciones virales: sarampión, parotiditis, varicela y gripe • Mantoux positivo:
– ≥ 5 mm en caso de viraje, inmunodeprimido o de estudio de
– Infecciones bacterianas: fiebre tifoidea, brucelosis, tifus, lepra,
contactos de tuberculosis
tosferina
– ≥ 10 mm en todos los demás casos incluidos niños de población de
– Infecciones parasitarias intestinales en los 2 meses previos alto riesgo para desarrollar tuberculosis (inmigrantes, adoptados de
– Vacunas con virus vivos atenuados los 2 meses previos: sarampión, países del tercer mundo, hijos de adictos a drogas, etc.) o niños
rubéola, parotiditis, polio oral, varicela y fiebre amarilla. Vacuna sanos que no hayan recibido BCG en los 3 años previos
tifoidea oral – ≥ 14 mm en niños sanos vacunados con BCG en los últimos 3 años
– Terapia inmunosupresora, discutible terapia con corticoides • Asintomático sin signos clínicos y Rx de tórax normal
– Enfermedades neoplásicas de órganos linfoides
– Insuficiencia renal crónica Diagnóstico de enfermedad tuberculosa
– Malnutrición, depleción proteica grave • De sospecha:
– Antecedente o no de contacto con tuberculosis
– Edad: neonatos, ancianos
– Mantoux ≥ 5 mm
2. Factores relacionados con la técnica
– Clínica compatible pero puede estar asintomático
– Inyección demasiado profunda – Rx de tórax/TAC patológico
– Almacenamiento y conservación inadecuada • De certeza: además de todo lo anterior: cultivo positivo y/o
– Antígeno caducado o contaminación baciloscopia positiva y/o biopsia de tejido compatible
– Diluciones incorrectas
– Lectura errónea
– Permanencia > 30 minutos en la jeringa INDICACIONES DE PRUEBA DE TUBERCULINA EN NIÑOS
No se deben realizar cribados repetidos a la población infantil de
Falsos positivos de la prueba de tuberculina
bajo riesgo ya que tiene bajo rendimiento. En nuestro medio sería
• Infección por otras micobacterias no tuberculosis muy útil que las Autoridades Sanitarias realizaran estudios de preva-
• Vacunación con BCG lencia de infección en edad cercana a la adolescencia. La población
• Error en la lectura diana para realizar una prueba de tuberculina difiere según las áreas y
la endemicidad(15). En nuestro medio, la Sociedad de Infectología Pediá-
trica(16) de la AEP recomienda realizar prueba de tuberculina en:
1. Niño conviviente con un caso confirmado o sospechoso de tuber-
1. Con induración ≥ 5 mm en: culosis.
• Niños en contacto íntimo con casos índice ó sospechosos de tuber- 2. Niño con sospecha de enfermedad tuberculosa.
culosis. 3. Niños en situación de riesgo para tuberculosis: infección por el VIH,
• Niños sospechosos de enfermedad tuberculosa clínica o radioló- inmunodeprimidos, etc.
gica. 4. Niño inmigrante o adoptado procedente de países con alta ende-
• Niños en situaciones de inmunodepresión ó infección por VIH. mia de tuberculosis, será obligado realizar una prueba de la tuber-
• Niños con conversión de Mantoux previamente negativo. culina en el primer examen de salud, independientemente de su
2. Con induración > 10 mm en: situación vacunal con BCG.
• Cualquier otro caso, incluidos los niños inmigrantes y el cribados 5. Niños que viven en comunidades de riesgo, es aconsejable prueba
de niños sanos. de tuberculina anual y en niños sanos que residen en áreas de alta
3. Niños que han recibido vacuna BCG hace menos de tres años: prevalencia, a 4-6 años y/o entre los 11-16 años.
• Induración ≤ 10 mm se considerará un efecto postvacunal. 6. Antes de iniciar tratamientos prolongados con medicamentos inmu-
• Induración ≥ 15 mm siempre se considera positiva. nosupresores.
• Induración entre 11-14 mm: individualizar teniendo en cuenta que 7. En situaciones que hagan sospechar prueba tuberculínica falsa-
el efecto de la BCG sobre la reacción de Mantoux no se prolonga mente negativa, tales como: malnutrición, inmunosupresión, vacuna
más allá de 3 años y la positivización del mismo por la BCG no suele reciente de virus vivos, enfermedad parasitaria, etc., deberá repe-
exceder de los 10 mm(13). tirse dicha prueba cuando la situación se haya normalizado.
• En situaciones de riesgo de desarrollar enfermedad tuberculosa,
debe obviarse el antecedente de BCG. DIAGNÓSTICO DE EXPOSICIÓN A TUBERCULOSIS
Se ha suprimido la consideración de Mantoux > 15 mm, y que sigue Para considerar que un niño tiene una situación de exposición a
incluyendo la Academia Americana de Pediatría (AAP), para exámenes tuberculosis (Tabla II), debe comprobarse: 1) Contacto reciente y
de cribados(14), ya que nuestras tasas de incidencia se sitúan en torno sustancial de más de 4 horas diarias, en espacio cerrado, con adulto
a 25/100.000 habitantes frente a menos de 10/100.000 en Estados Uni- enfermo de tuberculosis; 2) prueba de tuberculina negativa; 3) niño asin-
dos y nuestra prevalencia de infección a los 14 años ronda el 5%. Se tomático, sin signos clínicos y con radiografía de tórax normal.
propone que todo Mantoux ≥ 10 mm, deba considerarse positivo, a No siempre se realiza tratamiento de la situación de exposición a
pesar de que se trate de un estudio de cribado. tuberculosis en niños. Algunos autores realizan la profilaxis en todos los 45
menores de 16 años, otros sólo realizan profilaxis de la exposición a pecha que puede llegar hasta el 50% de los casos. El diagnóstico de
tuberculosis bacilífera si el niño es menor de 5 años, incluso sólo en sospecha se basa en una clínica compatible con imagen radiológica
menores de 2 años. La Academia Americana de pediatría(8,14) aconseja patológica (tórax, TAC torácico o craneal, estudio isotópicos, etc.) o
realizarlo en todos los menores de 18 años; En nuestro medio, la Socie- LCR o pleural o articular compatibles o biopsia de tejido con granulo-
dad de Infectología Pediátrica(16) aconseja tratamiento de la situación mas y siempre con una prueba de tuberculina positiva. Habitualmente
de exposición a tuberculosis en todos los menores de 16 años. El tra- existe el antecedente epidemiológico, pero no es obligado. Los méto-
tamiento de elección es isoniacida a 5-10 mg/kg/día, con dosis máxima dos diagnósticos disponibles son:
de 300 mg/día en una sola dosis en ayunas, durante 8-12 semanas, • Técnicas de imagen: la radiografía de tórax aislada tiene una ren-
repitiendo entonces una segunda prueba de tuberculina y actuando tabilidad diagnóstica del 75% que si se asocia a TAC, supera el
según se considere negativa o positiva(16): 90%. Ante la sospecha clínica de TB pulmonar y radiología no con-
• Si Mantoux < 5 mm: se ha evitado la infección y se suspenderá la cluyente, es obligado realizar una TAC en los niños menores de 4
INH. años y posiblemente pueda indicarse aisladamente a cualquier
• Si Mantoux ≥ 5 mm: se ha producido una infección tuberculosa edad, para detectar adenopatías paratraqueales y mediastínicas(21).
latente. Los niños con TB del SNC, suelen tener con frecuencia radiología
• Si Mantoux ≥ 5 mm y radiografía patológica: existe enfermedad de tórax patológica y si se confirma estaría indicado para asegurar
tuberculosa. el diagnóstico microbiológico, realizar además aspirado gástrico.
Debido al riesgo de desarrollar infección o enfermedad tubercu- En casos de TB del SNC es indispensable un TAC cerebral con
losa tras la exposición a un adulto bacilífero, se aconseja realizar contraste y en muchos casos RNM. En adenitis cervical es útil la
estudio de contactos a todos los convivientes e iniciar profilaxis pos- ecografía y en casos de TB osteoarticular se empleará radiología
texposición a todos los niños y adolescentes, así como a determinados convencional, RNM y estudios isotópicos.
adultos con alto riesgo de infectarse. Puede ser prudente y conveniente • Estudios microbiológicos: en todas las muestras obtenidas de
recomendar que de forma temporal se rompa el contacto del niño y her- fluidos o tejidos se realizará el estudio de bacilos ácido-alcohol
manos con el adulto bacilífero si está identificado, asumiendo que la resistentes (baciloscopia), mediante tinción específica, midiendo
mayoría de los adultos bacilíferos son infecciosos hasta unas 8 sema- la cantidad de bacilos por mm3. Es obligado realizar tres mues-
nas después de instaurar tratamiento a no ser que la cepa sea resis- tras seriadas de esputo o jugo gástrico para aumentar la rentabili-
tente. Es importante conocer la evolución del caso inicial y la sensibili- dad y realizar este último preferiblemente con el niño ingresado, en
dad de la cepa causal antes de retirar la profilaxis al niño. Los niños ayunas de al menos 6 horas y antes de que haya realizado la pri-
infectados por el VIH pueden tener anergia y a su vez tienen alto riesgo mera deglución. Estudios recientes en niños, apuntan al esputo
de desarrollar una enfermedad diseminada, siendo difícil establecer inducido como una técnica menos agresiva y más barata y que
si ocurrió o no la infección. Sería prudente considerarlos potencialmente pudiera sustituir al aspirado gástrico, pero está pendiente de estu-
infectados y tratarlos como una infección tuberculosa latente por un dios más concluyentes(22). La siembra de las muestras debe ser
período no inferior a 9 meses(17). inmediata y todas ellas se procesarán para cultivo. Si se realizaran
punciones seriadas de LCR para valorar evolución con tratamiento,
DIAGNÓSTICO DE INFECCIÓN TUBERCULOSA LATENTE también deben ser procesadas todas, para baciloscopia y cul-
En nuestro medio se consideran en situación de “infección tuber- tivo, pues a mayor número de muestras analizadas mayor proba-
culosa latente”, los niños asintomáticos que, independientemente que bilidad de diagnostico de certeza. En casos de broncoscopia, o
pueda o no demostrarse un contacto con adulto bacilífero, presenten(16): biopsias de tejidos se procesarán también para tinción y cultivo. Es
• Un viraje de Mantoux ≥ 5 mm. obligado realizar un estudio de sensibilidad a fármacos del MTB
• Mantoux ≥ de 5 mm en un estudio de contactos de tuberculosis. aislado en el cultivo.
• Mantoux ≥ 10 mm: en todos los demás casos, incluidos niños de • PCR: es una técnica novedosa y que en manos expertas es rápida
población de alto riesgo para desarrollar TB (inmigrantes, adopta- y segura para diagnóstico de MTB, pues detecta en fluidos o teji-
dos de países del tercer mundo, hijos de adictos a drogas, etc.) o dos, una parte del núcleo de la micobacteria.
niños sanos sin BCG en los 3 años previos. • Respuesta a la terapia específica: en algunos casos imposibles
• Niños sanos vacunados con BCG en los últimos 3 años y Man- de llegar a un diagnóstico de certeza, es la respuesta a la terapia
toux ≥ 14 mm. la que orienta al diagnóstico.
A todos los niños en esta situación, se les realizará una radiografía
AP y lateral de tórax que debe ser normal. En casos de alto riesgo, sobre-
BIBLIOGRAFÍA
todo en niños pequeños convivientes con adultos bacilíferos, puede
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malidad(18,19). Es mucho más razonable realizar las exploraciones opor- nal de Epidemiología. La vigilancia epidemiológica de la tuberculosis en
tunas, para llegar al diagnóstico preciso, en este momento que tener España. VIII Taller Internacional sobre Tuberculosis UITB. Barcelona, 29 y
que resolver la duda al final del tratamiento. Cuando el estudio de ima- 30 de Noviembre de 2004. www.imsb.bcn.es/uitb/docs/taller.
gen es negativo, estando siempre asintomáticos, se considera una infec- 3. Ministerio del Interior. Anuario estadístico de extranjería. Boletín estadístico
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ciona idealmente un cultivo positivo para Mycobacterium tuberculosis Pediatr Infect Dis J 2002; 21: 257-8.
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o en su defecto una tinción positiva para bacilos ácido-alcohol resis- Pediatr Infect Dis 2004; 23: 71-2.
tentes(14,20); pero con frecuencia el diagnóstico de enfermedad tuber- 7. Simone PM, Fujiwara PI. Role of the health department: legal and public
46 culosa en niños no puede confirmarse y haremos un diagnóstico de sos- health implications. En: Schlossberg D, editor. Tuberculosis and nontuber-
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cents. Pediatrics 2004; 114: 1175-201.

47
Tratamiento de la tuberculosis en el niño
J. Arístegui
Jefe Clínico de Infectología Pediátrica del Hospital de Basurto, Bilbao. Profesor de Pediatría de la Universidad del País Vasco.

TRATAMIENTO DE LA INFECCIÓN TUBERCULOSA LATENTE 5. Isoniacida + rifampicina en pauta diaria a las dosis habituales
EN NIÑOS durantes 3 meses, es una pauta de tratamiento de la infección
La infección tuberculosa latente se define como una situación en la tuberculosa útil en niños(4,10). Puede utilizarse en niños en los que
que el niño presenta una prueba de tuberculina (PPD) positiva, está se prevé movilidad familiar o difícil acceso a la red sanitaria, ya
completamente asintomático y la radiografía de tórax es normal. En los que asegura que en tres meses el niño estará protegido frente a
niños el tratamiento de la infección tuberculosa latente permite evitar el la enfermedad. También es de utilidad, en casos concretos en que
desarrollo de formas de TBC que en ocasiones pueden ser graves (TBC existe verdadera dificultad en discernir infección de enfermedad
diseminadas), además de contribuir a una estrecha vigilancia de los tuberculosa, ya que sería posible posteriormente completar un tra-
núcleos familiares, lo que asegura un riguroso estudio de contactos. tamiento de enfermedad tuberculosa sin riesgo de desarrollo de
El tratamiento de elección es la isoniacida administrada diariamente, resistencias.
aunque no existe actualmente un consenso unánime sobre la dosifica- 6. Rifampicina + pirazinamida en pauta diaria durante 2 meses, ha
ción y duración de la misma. En este sentido, la Sociedad Americana de demostrado ser una alternativa eficaz en adultos, pero el CDC ha
Enfermedades del Tórax(1) y la Academia Americana de Pediatría(2,3) reco- desaconsejado su uso por hepatotoxicidad importante(11). En niños,
miendan 10 mg/kg/día y una duración de 9 meses, mientras que la Socie- solo existe un estudio que demuestra su eficacia y parece tener
dad Británica de Enfermedades del Tórax(4) y el Consenso Español del menos efectos adversos que en adultos(12), sin embargo actual-
año 20005 aconsejan 5 mg/kg/día durante un período de 6 meses. La mente no se aconseja su uso en niños.
Sociedad Española de Infectología Pediátrica, en un documento de con- 7. Caso índice multirresistente: no existe experiencia al respecto en
senso pendiente de publicación, recomienda administrar isoniacida cal- niños y no se conoce si es mejor una actitud vigilante estrecha sin
culando la dosis entre el intervalo de 5-10 mg/kg/día, redondeando al alza tratar o tratamiento estándar, ya que supuestamente las cepas resis-
según los miligramos de los comprimidos disponibles en el mercado. tentes pueden ser menos virulentas(13). En caso de disponer de la
Por lo que respecta a la duración del tratamiento tampoco existe sensibilidad de la cepa inicial y si se decide iniciar tratamiento de
acuerdo, variando la duración entre 6 y 12 meses de tratamiento. A la infección tuberculosa, habrá que asegurar un estricto cumpli-
mayor duración mayor protección contra el desarrollo de enfermedad; miento con “terapia directamente observada” (TDO) y un segui-
entre 9 y 12 meses la protección es muy similar(6). En resumen, la dura- miento por una unidad de expertos. El régimen de elección debe
ción del tratamiento en un niño con infección tuberculosa, no debe contener al menos dos drogas con sensibilidad conocida y la dura-
ser nunca menor de 6 meses y preferiblemente debe prolongarse hasta ción no debe ser inferior a 9-12 meses. Los niños infectados con
9 meses. una cepa resistente multirresistente (a isoniacida y rifampicina),
La tolerancia de la INH en niños es buena, mejor que en los adul- pueden tratarse con pirazinamida + etambutol. Cuando éste régi-
tos y no suelen presentar toxicidad hepática, por lo que no es obligado men no pueda utilizarse, pueden asociarse otras 2 drogas, tales
el control analítico de rutina, a no ser que presenten una clínica suges- como etionamida, cicloserina, PAS o fluorquinolonas, a las cuales
tiva de hepatotoxicidad. se conozca la sensibilidad de la cepa(13).

Pautas alternativas de tratamiento TRATAMIENTO DE LA ENFERMEDAD TUBERCULOSA


Existen pautas alternativas de tratamiento, como disminuir las dosis PULMONAR EN NIÑOS
o pautas intermitentes, que pueden ser utilizadas en caso de toxicidad Se define con una enfermedad tuberculosa pulmonar en un niño al
o intolerancia al régimen estándar o bien fármacos alternativos, en caso que presenta una prueba de tuberculina positiva (en 5-10% puede
de resistencia conocida del caso índice a la isoniacida. Los trata- ser negativa y en los anérgicos será negativa), y con imágenes radio-
mientos alternativos a la isoniacida en pauta diaria para niños son(3,7,8): lógicas compatibles con tuberculosis. La clínica puede ser sugestiva o
1. Isoniacida a 5 mg/kg/día con igual duración: si existe intolerancia puede estar asintomático y, en muchas ocasiones, no se encuentra el
a la isoniacida o toxicidad con elevación de enzimas hepáticas y foco inicial.
clínica asociada, una alternativa es disminuir la dosis de isoniacida, El régimen de elección para el tratamiento de cualquier forma de
si estaba recibiendo dosis más elevadas. tuberculosis pulmonar en niños es una pauta diaria de: 2 meses de iso-
2. Isoniacida en pautas de 2-3 días en semana a 20 mg/kg/día con niacida a dosis de 5-10 mg/kg/día + rifampicina a dosis de 10-20
igual duración. mg/kg/día + pirazinamida 15-30 mg/kg/día, seguido de 4 meses de
3. Rifampicina en pauta diaria a dosis de 10-20 mg/kg/día durante 6 isoniacida + rifampicina a la misma dosis(2,14,15). En niños la pauta reco-
meses. En caso de no tolerar ninguna pauta de isoniacida o si el mendada es la diaria aunque en casos especiales puede utilizarse la
caso índice, presenta resistencia conocida a la isoniacida, la alter- pauta de 2 ó 3 días por semana con dosis más altas y en estos casos
nativa aconsejada en niños es rifampicina durante 6 meses(9). Actual- es obligada la terapia directamente observada, que ha dado buenos
mente está aceptada en adultos la pauta diaria de rifampicina durante resultados(16). La Academia Americana de Pediatría y la Sociedad Ame-
4 meses, pero no hay todavía experiencia en niños para poder reco- ricana de Enfermedades del Tórax, aconsejan que todos los niños,
mendarla. independientemente del régimen de tratamiento deberían usar, tera-
4. Rifampicina en pautas de 2-3 días a la semana a dosis de 20 pia directamente observada(1,2,4). Los fármacos antituberculosos de pri-
mg/kg/día durante 6 meses. En caso de intolerancia o toxicidad a mera y segunda linea y las dosis aconsejadas en niños(22) se expo-
48 la pauta diaria de rifampicina nen en la tablas I y II.
TABLA I. Fármacos de primera linea recomendados para el TABLA II. Fármacos de segunda linea para el tratamiento de
tratamiento de tuberculosis en niños y adolescentes tuberculosis infantil en casos de resistencias
Fármacos Dosis Dosis Dosis Reacciones Fármacos Dosis diaria Dosis Reacciones
diaria 2 días máxima adversas mg/kg máxima diaria adversas
mg/kg/ semana
día mg/kg Capreomicina 15-30 (IM) 1g Ototoxicidad,
nefrotoxicidad
Isoniacida 5-15 20-30 Dosis diaria Hipertransaminemia Ciprofloxacino(1) 500-1500 mg 1,5 g Toxicidad teórica sobre
300 mg leve, hepatitis, (2 veces/día) cartílago de crecimiento;
Dosis bisemanal neuritis periférica, rash, cefalea,
900 mg hipersensibilidad alteraciones
Rifampicina 10-20 10-20 Dosis diaria Coloración naranja gastrointestinales
600 mg de orina y
Dosis bisemanal secreciones, Cicloserina 10-20 1g Psicosis, alteraciones
600 mg vómitos, hepatitis, del carácter,
reacción convulsiones, rash
pseudogripal
trombopenia, Etionamida 15-20 1g Alteraciones
interferencia con (en 2-3 dosis) gastrointestinales,
anticonceptivos hepatotoxicidad,
orales reacciones de
hipersensibilidad
Pirazinamida 15-30 50 Dosis diaria Hepatotoxicidad
2g Kanamicina 15-30 (IM) 1g Ototoxicidad;
Dosis bisemanal Hiperuricemia nefrotoxicidad;
2g alteraciones
vestibulares
Etambutol 15-20 50 Dosis diaria Neuritis óptica
2,5 g (generalmente Levofloxacino(1) 50-1.000 mg 1g Toxicidad teórica sobre
Dosis bisemanal reversible); menor (1 vez/día) cartílago de crecimiento;
2,5 g discriminación de alteraciones
colores (rojo-verde); gastrointestinales; rash,
alteraciones cefalea
gastrointestinales;
hipersensibilidad Ácido para- 200-300 10 g Alteraciones
Estreptomicina 20 - Dosis diaria Ototoxicidad; aminosalicílico (2-4 veces/día) gastrointestinales,
1g alteraciones (PAS) hipersensibilidad,
vestibulares; hepatotoxicidad
nefrotoxicidad, rash
Estreptomicina 20-40 (IM) 1g Alteraciones auditivas,
vestibulares,
ototoxicidad,
TRATAMIENTO DE LA ENFERMEDAD TUBERCULOSA nefrotoxicidad, rash
EXTRAPULMONAR EN NIÑOS
(1)Fluoroquinolonas indicadas para > 18 años. Se valorará
El régimen de elección de tratamiento para meningitis tuberculosa
y tuberculosis miliar en niños, es la pauta diaria de 12 meses de dura- individualmente el riesgo-beneficio si van a utilizarse en niños
ción: 2 meses con una asociación de cuatro fármacos: isoniacida + rifam- pequeños. (Resumido Reed book 26th ed; 2003).
picina + pirazinamida + estreptomicina o etambutol, seguido de 10 meses
de tratamiento diario con isoniacida + rifampicina(1,2,14). En caso de nece-
sidad puede utilizarse una pauta intermitente, siendo obligado adminis- miento estándar de 6 meses (2 meses isoniacina + rifampicina + pira-
trar los cuatro fármacos durante los 2 primeros meses en pauta diaria zinamida y 4 meses más con isoniacida + rifampicina), se tomarán
y posteriormente es posible pasar a pauta alterna de dos o tres días un mínimo de 182 dosis de isoniacida y rifampicina y 56 dosis de pira-
en semana de la asociación de isoniacida + rifampicina, durante diez zinamida si por algún motivo el tratamiento se interrumpe, el número
meses, siempre que se utilice la “terapia directamente observada” (TDO). total de dosis debe ser el mismo aunque se tarde más de 6 meses
Recientemente, se están utilizando pautas de 9 meses de duración en terminarlo.
en casos de meningitis tuberculosa y tuberculosis miliar, con éxito tera- La experiencia clínica en adultos, sugiere que pautas de 5 días a
péutico. Por tanto, quizás la tendencia actual estaría más en aconsejar la semana utilizando terapia directamente observada, muestran la misma
pautas de 9-12 meses de duración individualizando según cada caso(1,15,16). eficacia que 7 días a la semana sin supervisión, por tanto si se plan-
El uso de corticoides asociados a la terapia antituberculosa se ha mos- tea un tratamiento, a priori, con sólo 5 días en semana, el número mínimo
trado muy beneficioso en los casos de pericarditis, tuberculosis endo- de dosis de isoniacida y rifampicina, será de 130.
bronquial, derrame pleural, tuberculosis miliar con participación alveo- Actualmente el empleo de etambutol en los niños pequeños está
lar y meningitis tuberculosa(1,2). menos restringido ya que parece tener mucha menos toxicidad oftal-
En la tuberculosis osteoarticular no complicada el tratamiento se ha mológica que en los adultos. Este fármaco se ha demostrado seguro,
reducido a 6 meses, igual al de la enfermedad pulmonar(1). incluso si no se puede realizar estudio oftalmológico(1).
En niños inmigrantes con enfermedad tuberculosa, la actitud tera-
TENDENCIAS EN EL TRATAMIENTO DE LA TUBERCULOSIS péutica aconsejada depende de la forma clínica de la enfermedad:
EN NIÑOS • Niños inmigrantes con tuberculosis primaria: utilizar de entrada la
Un tratamiento completo se basa actualmente en el número total terapia estándar con 3 fármacos (a no ser que el foco inicial docu-
de dosis ingeridas de cada fármaco(1). De tal forma que en el trata- mentado sea resistente). 49
6. International Union Against Tuberculosis Committee on Prophylaxis. Efficacy
• Niños inmigrantes con tuberculosis cavitaria, tipo adulto: iniciar tra- of various durations of isoniazid preventive therapy for tuberculosis: five years
tamiento con 4 fármacos, añadiendo etambutol al régimen están- of follow-up in the IUAT trial. Bull World Health Organ 1982; 60: 555-64.
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En niños infectados por el VIH o niños convivientes con caso índice getd tuberculine testing and treatment of latent tuberculosis infection. N Eng
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en población adulta infectada por VIH en nuestro medio es mayor del 8. Pediatric Tuberculosis Collaborative Group. Targeted tuberculosis skin tes-
ting and treatment of latent tuberculosis infection in children and adoles-
4%, se recomienda iniciar tratamiento con 4 fármacos hasta conocer el
cents. Pediatrics 2004; 114: 1175-201.
patrón de sensibilidad del germen a los tuberculostáticos.
9. Villarino ME, Ridzon R, Weismuller PC, Elcock M, Maxwell RM, Meador J, et
Existe la posibilidad en niños con peso mayor de 40 kilos de utili- al. Rifampin preventive therapy for tuberculosis infection: experience with
zar los preparados combinados de medicaciones antituberculosas que 157 adolescents. Am J Resp Care Med 1997; 155: 1735-8.
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50
Sesión Plenaria

Antibióticos en las infecciones respiratorias del niño.


Puesta al día
Introducción
S. García de la Rubia
Centro de Salud Murcia-Centro

INTRODUCCIÓN pensar, tampoco se ha observado una disminución de visitas a la con-


Las infecciones representan el 50-70% de las consultas pediátri- sulta en los niños que reciben antibióticos. Por otra parte, la utilización
cas, siendo esta incidencia notoriamente superior a la del adulto. Las excesiva de éstos, fomenta el incremento de las resistencias bacteria-
infecciones pediátricas van a ser causa de la mayor proporción de nas. Además, pueden producir efectos secundarios como vómitos, dia-
absentismo escolar y de que una mayoría de niños reciba, en algún rrea, exantemas alérgicos y anafilaxia que, ocasionalmente, pueden ser
momento, un tratamiento con antibióticos. De éstos, un 60% son para graves. Un uso adecuado de antibióticos es socialmente beneficioso
infecciones del tracto respiratorio superior, un 10% para infecciones del por cuanto reduce las resistencias bacterianas, mantiene la eficacia far-
tracto respiratorio inferior y un 20% para infecciones pararrespiratorias. macológica para los niños con enfermedades graves y evita los costes
A este respecto, hemos de decir que los criterios diagnósticos y de uti- innecesarios que acarrea la excesiva utilización. Sin embargo, todo
lización adecuada de antibióticos en las infecciones respiratorias, junto médico reconoce que es preciso adaptar el tratamiento individualmente,
con los avances habidos en la antibioticoterapia para este tipo de pato- dependiendo de múltiples factores.
logía hacen que este tema concreto tenga gran relevancia. Sin embargo, Los programas educacionales dirigidos a los padres, en los que se
también es cierto que en la práctica, el dilema de utilizar o no antibió- les transmita la importancia de evitar las resistencias a los antibióticos
ticos, en muchas de las infecciones infantiles vistas en atención pri- debidas a la excesiva utilización de los mismos, así como el conoci-
maria, no tiene fácil solución. miento de sus indicaciones específicas (cuando están o no indicados
Conocemos que tan solo el 56% de las prescripciones de antibió- y porqué), resultan beneficiosos y es una cuenta pendiente de actua-
ticos en Primaria son adecuadas. En el 27,5% de ocasiones se pres- ción generalizada.
cribe un antibiótico sin ser necesario, en el 12,4% de prescripciones de Según conclusiones del Grupo Urano, el uso racional de los anti-
antibiótico, éste no es el adecuado y en el 3,7% de los casos no se microbianos supone aplicar con prudencia y acierto la terapéutica con
administra antibiótico estando indicado. antibióticos con el fin de obtener el resultado más beneficioso desde el
Los criterios de elección del antibiótico por parte del médico tam- punto de vista clínico y más eficiente desde el punto de vista fármaco-
bién han evolucionado. Así, mientras en la década de los ochenta los económico.
tres principales criterios de elección eran amplio espectro, escasos Esta Mesa de trabajo nos permitirá especialmente actualizar nues-
efectos secundarios y eficacia, en el año 2000 estos criterios son como- tros criterios de diagnóstico y tratamiento en infecciones del tracto res-
didad posológica, eficacia y precio. piratorio superior e inferior así como conseguir una puesta al día en los
En atención primaria se gastan 600 millones de euros al año en anti- avances en antibioticoterapia más destacables para los pediatras de
bióticos. Este gasto tan importante se está intentando paliar desde la Atención Primaria.
Administración Sanitaria con distintas medidas como son la utilización
de dosis unitarias (para los cinco antibióticos más utilizados), los pre-
BIBLIOGRAFÍA
cios de referencia, etc. Entre las causas de la excesiva utilización de
1. Levy SB. The antibiotic paradox: how the misuse of antibiotics destroys their
antibióticos citamos la prescripción inadecuada, la automedicación, el curative powers. 2ª ed. Cambridge: Perseus Publishing; 2002.
almacenamiento y el incumplimiento terapéutico. 2. García JA, Barberán M, Delgado A, González J, Mensa J, et al. Informe
Pero, de hecho, para afrontar las infecciones respiratorias utilizando acerca del Uso Racional de los Antimicrobianos en Pediatría (URANO).
antibióticos debemos mejorar la certidumbre diagnóstica y proveernos Scientific Communication Management, SL, 2002.
de unas pautas realistas que se amolden a nuestro medio. El uso 3. Trepka MJ, Belongia EA, Chyou PH, Davis JP, Schwartz B. The effect of a
adecuado debe repercutir en que se retrase la aparición de resisten- Community Intervention Trial on Parental Knowledge and Awareness of Anti-
cias a los nuevos antimicrobianos, en que disminuyan los efectos secun- biotic Resistance and Appropriate Antibiotic Use in Children. Pediatrics 2001;
107: e6.
darios relacionados con cualquier otro agente farmacológico y en que
4. Nash DR, Harman J, Wald ER, Kelleher KJ. Antibiotic prescribing by primary
se reduzcan los gastos sanitarios. Por otra parte, hay que recordar que
care physicians for children with upper respiratory tract infections. Arch
la satisfacción del paciente no viene por la prescripción de antibióticos, Pediatr Adolesc Med 2002; 156: 1114-9.
sino por una buena comunicación sobre la enfermedad. 5. Casani Martínez C, Calvo Rigual F, Peris Vidal A et al. Encuesta sobre el uso
Se carece actualmente de pruebas de eficacia clínicas que indi- racional de antibióticos en Atención Primaria. An Esp Pediatr 2003; 58: 10-6.
quen que las infecciones secundarias bacterianas se minimizan o abor- 6. Álvarez A, Martínez Cantarero C, Vidal A, et al. Prescripción de antibióticos
tan por la administración de un antibiótico. En contra de lo que se pudiera en el paciente ambulatorio. Aten Primaria 2002; 30: 490-5.

51
Manejo de las infecciones de vías respiratorias altas
en el niño
J.M. Jiménez Fernández
Centro de Salud La Consolación. Molina de Segura. Murcia

OTITIS MEDIA AGUDA usualmente de forma súbita de signos y síntomas; b) la presencia de


La otitis media aguda (OMA) es sin duda una de las situaciones a efusión en OM indicada por abombamiento de la membrana timpánica,
las que con más frecuencia se enfrenta el pediatra de AP y que más nivel hidroaéreo tras ella u otorrea; y c) signos o síntomas de inflama-
inquietudes diagnósticas generan, sobre todo en el lactante pequeño ción del OM: eritema de la membrana timpánica u otalgia (incomodi-
por las dificultades que entraña la exploración del oído medio a estas dad claramente atribuible a los oídos que imposibilita el sueño o la acti-
edades. Por ello existe un sobrediagnóstico de OMA que conlleva vidad normal). Sólo la otalgia es válida como criterio clínico de OMA,
una excesiva utilización de antibióticos (se considera que el 50% de los que en el niño pequeño debemos sospechar por bruscos cambios de
lactantes reciben un diagnóstico incorrecto de OMA). carácter, irritabilidad, insomnio y dificultad en la alimentación. La otal-
gia despierta al niño de madrugada, mientras que en el CVA el insom-
Epidemiología nio ocurre desde que el niño es echado en la cuna. El signo más espe-
Su frecuencia se ha incrementado en los últimos años tal vez por cífico de OMA es la otorrea, que también ocurre en la otitis externa, pero
la escolarización temprana. Se calcula que 2 de cada 3 niños sufren al ésta es muy rara en el lactante y más propia de la estación estival.
menos un episodio de OMA antes del primer año de vida y que más del Un signo muy debatido es el trago: en caso de utilizarlo se acon-
90% de los niños la han padecido antes de los 5 años, presentando 2 seja iniciar la presión en la región proximal al trago, considerándose
de cada 3 niños a esa edad 3 o más episodios. Los lactantes y niños positivo cuando sin lugar a dudas el llanto del niño se incrementa con
pequeños son los más propensos, con una mayor frecuencia entre la presión final sobre la zona específica. En ausencia de otorrea la otos-
los 6-12 m, seguido de los niños de 12-24 m. copia es imprescindible: el signo más importante es el abombamiento
del tímpano, en el que desaparecen los relieves del mismo quedando
Concepto una protrusión que simula un donuts. No es correcto utilizar el simple
A pesar de ser una enfermedad tan común no existe una definición enrojecimiento del tímpano como signo de OMA ya que puede ser
ampliamente aceptada de OMA. La Agency for Helthcare Research and debido a la miringitis producida por el mismo catarro acompañante o
Quality la define como “la presencia de derrame en el oído medio aso- por el llanto durante la exploración. Un color amarillento es sugestivo
ciada a uno o más signos o síntomas de inflamación (otalgia, otorrea, de colección purulenta retrotimpánica, y un tímpano deslustrado es
irritabilidad, fiebre) de instauración brusca (menos de 48 h de evolución). más propio de una otitis media exudativa (OME), en la que nunca exis-
ten síntomas agudos.
Etiología
La etiología de la OMA es eminentemente bacteriana. La revisión de Tratamiento
las distintas series publicadas tanto a nivel internacional (Dagan) como Pocas enfermedades como la OMA tienen un tratamiento más con-
nacionales (F. del Castillo en Madrid, hospital Sant Joan de Déu de Bar- trovertido, así, mientras que en EE.UU. (y España) prácticamente todas
celona) coinciden en que Str. pneumoniae es el germen más frecuente se tratan con antibióticos, en Holanda sólo se emplean en el 31% de
(27,9-33%) seguido de Haemophilus influenzae no tipable (25-27%), y los casos. Desde el año 1990 el Colegio de Médicos holandés reco-
a mucha distancia Moraxella catarrhalis y estreptococos del grupo A. En mienda que no se empleen antibióticos de entrada salvo en grupos o
conjunto neumococo y Haemophilus influenzae suponen más del 80% situaciones de riesgo, y aconsejan el tratamiento sintomático durante
de los agentes etiológicos. Por otro lado sabemos que la OMA presenta 24 h en mayores de 6 m, y 72 h en mayores de 2 años, y la prescrip-
un alto porcentaje de curación espontánea, sobre todo para H. influen- ción de antibióticos sólo si tras el periodo de observación no se obje-
zae (48%) y Moraxella (70-80%) siendo para neumococo sólo un 16%. tiva la resolución de los síntomas. Asimismo, la ya comentada guía de
Un problema de primera magnitud es el desarrollo de resistencias manejo de la OMA de la AAP indica que en el tratamiento de los niños
bacterianas: en la actualidad el 65,6% de las cepas de neumococos son de 2 m a 12 años se abren las siguientes posibilidades:
resistentes a penicilina, un 25% con resistencia intermedia y el 40,6% • La observación sin antibiótico siempre que el seguimiento esté ase-
altamente resistentes. Se ha observado que en aquéllas con resistencia gurado y la enfermedad no sea severa (temperatura < 39 °C y ausen-
intermedia a penicilina el 96,9% eran sensibles a amoxicilina con o sin cia de dolor intenso), criterio también aplicable a lactantes de 6-24
ácido clavulánico, el 42% a los macrólidos, el 35,5% a la cefuroxima axe- m con enfermedad no severa.
tilo y el 18,2% al cefaclor, mientras que entre las altamente resistentes • El dolor debe ser evaluado en todos los niños y el tratamiento con
a penicilina el 59% eran sensibles a amoxicilina el 39,9% a los macróli- analgésico (ibuprofeno o paracetamol) es capital en las primeras
dos y prácticamente ninguna lo era a las cefalosporinas orales estu- 24 h.
diadas. Se consideran factores de riesgo de infección por neumo- Así pues la opción de tratar una OMA con un antibiótico ha pasado
coco resistente a penicilina la edad inferior a 2 años, fiebre superior en los últimos años de ser una práctica incuestionable a convertirse en
a 39 °C, la asistencia a guardería y haber recibido tratamiento anti- una opción más, de forma que con frecuencia nos podemos decantar
biótico en los 1-3 meses previos. En cuanto a H. influenzae (30%) y M. por la observación clínica, siendo la primera medida la analgesia como
catarrhalis (90%) de las cepas, son productoras de β lactamasas. pilar fundamental.
Una reciente publicación que compara dos series, una con trata-
Diagnóstico miento antibiótico (AB) inmediato, y la otra con conducta expectante
Según la guía de manejo de la OMA de la Asociación Americana (CE), llega a las siguientes conclusiones: el 66% de los sujetos del grupo
52 de Pediatría se deben cumplir tres requisitos: a) reciente instauración, CE completaron el estudio sin antibiótico. El grado de satisfacción de
TABLA I.
postvacunal e indica que existe una disminución significativa del por-
• Distinguir la gravedad del cuadro centaje de pacientes que presentan, bien un fallo inicial al tratamiento
• Instrucción a los padres o una OMA persistente. También informa que Haemophilus no tipable
• Tratamiento sintomático sustituye a neumococo como germen predominante en niños con OMA
• Control de la evolución (Haemophilus se aísla en un 57% y neumococo en un 31%), con un
• Uso de una pauta antibiótica eficaz cuando sea necesaria mayor porcentaje de cepas productoras de blactamasas y un aumento
de las cepas de neumococo sensibles a penicilina, que pasaría de un
54 a un 72%. Con respecto a la utilización de dosis profilácticas de amo-
TABLA II. xicilina para prevenir nuevos episodios de OMA en niños que presen-
ten OMA recidivantes no existe un consenso en la comunidad científica
Duración antibioterapia por ser una práctica de alto riesgo de seleccionar microorganismos
OMA esporádica en > 12 meses 5-7 días resistentes. En este sentido algunos autores han propuesto sustituir la
práctica de la dosis diaria de amoxicilina a dosis profilácticas por el tra-
< 12 meses o historia de OMA recurrente 10 días
tamiento precoz con dosis estándar de todo proceso catarral.
Recaída temprana 12-14 días
AMIGDALITIS AGUDA
La faringoamigdalitis aguda (FA) consiste en la inflamación aguda
los padres fue similar en ambos grupos. En comparación con la CE, del tejido linfoide faríngeo de causa infecciosa, clínicamente más
el grupo AB inmediato se asoció con un menor número de fracasos y aparente en las amígdalas palatinas. Es uno de los procesos más fre-
un mejor control de los síntomas, pero también con un aumento de los cuentes en atención primaria y en la práctica médica sólo preocupan
efectos secundarios relacionados con los AB y un mayor porcentaje de especialmente las causadas por S. pyogenes (estreptococo beta hemo-
cepas de S. pneumoniae multirresistentes. Los autores proponen como lítico del grupo A, o EBHGA) por las complicaciones inflamatorias no
estrategia de CE las siguientes recomendaciones (Tabla I): supurativas que pueden conllevar (fiebre reumática, glomerulonefritis
Si decidimos tratar con antibióticos, el siguiente paso es plantear- postestreptocócica), y por tanto el tratamiento antimicrobiano sólo debe-
nos cual de ellos utilizar. Un aspecto trascendental de la terapia anti- ría hacerse bajo fundadas sospechas de etiología estreptocócica. Se
biótica es la asociación entre erradicación bacteriana y curación clínica: puede afirmar que este diagnóstico está sobreestimado en un 80-
los trabajos de Carlin y Dagan pusieron claramente de manifiesto que la 90% de los casos, lo que lleva a una utilización innecesaria de anti-
mayor parte de los fracasos clínicos se deben a fracasos bacteriológi- bióticos sobre todo en lactantes y niños menores de 3 años.
cos. El porcentaje de neumococos altamente resistentes a la penicilina
es escaso, sí son mayores los casos de resistencia intermedia pero que Etiología
no suelen tener repercusiones clínicas de trascendencia. Así las cosas, La etiología de la FA se relaciona claramente con la edad, así entre
el tratamiento de elección en nuestro medio es la amoxicilina a dosis de los menores de 3años los patógenos más habituales son los virus. Prác-
80 mg/kg/día repartidos cada 8 horas y con una duración de 8-10 días, ticamente todos los virus que afectan al aparato respiratorio pueden pro-
aunque pautas más cortas de 5-7 días pueden ser eficaces en niños ducir amigdalitis: adenovirus, virus Epstein Barr, coxackie, rinovirus, coro-
mayores de 6 años. Muchos clínicos prefieren de entrada la combina- navirus, influenza y parainfluenza. La mayor frecuencia de faringoamigdalitis
ción amoxicilina-clavulánico (proporción 8:1 de amoxicilina) también a por EBHGA es en niños en edad escolar, entre 5 y 15 años (rango 3-18
dosis de 80 mg/kg/día de amoxicilina por proporcionar mayor cobertura años). En este grupo de edad y en relación a todos los agentes que cau-
para la mayoría de cepas de Haemophilus y Moraxella. En caso de into- san infección faringoamigdalar la incidencia de las producidas por EBHGA
lerancia o alergia no anafiláctica a amoxicilina la mejor alternativa es se estima en un 20-30% (en los adultos es de un 5-24%). Es muy rara o
cefuroxima axetilo o cefpodoxima. No se aconsejan los antibióticos macró- improbable en menores de 2 años tal vez por una menor adherencia
lidos en el tratamiento de la OMA por la alta resistencia que presenta del estreptococo a las células epiteliales respiratorias en esta edad.
el neumococo. La duración de la antibioterapia debe ser individualizada
(Tabla II). Si el niño presenta una OMA esporádica y es mayor de 12m Criterios diagnósticos de FA estreptocócica
posiblemente sea suficiente de 5-7 días. Si es menor de esta edad o Los rasgos clínicos más típicos de la FA estreptocócica en niños
tiene historia de OMA recurrente serán necesarios 10 días. Si el niño pre- mayores de 3 años se pueden resumir en el siguiente cuadro:
senta una recaída temprana, 2-3 días de la retirada del antibiótico, se • Síntomas: comienzo brusco de la fiebre, dolor de garganta aso-
aconseja iniciar nuevamente el mismo tratamiento pero prolongando la ciado o no a dificultad de tragar, síntomas generales como cefalea,
duración hasta 12-14 días, ya que se trata de una OMA persistente mialgias, náuseas, vómitos y dolor abdominal
con difícil esterilización del exudado del oído medio. • Signos: eritema difuso, inflamación de la faringe y úvula e hiper-
trofia de tejido linfoide en faringe posterior, amígdalas eritemato-
Profilaxis sas, inflamadas, con exudado pultáceo o confluente blanquecino
Quizá una de las medidas preventivas más eficaces sería cambiar amarillento. Petequias en paladar blando, úvula o faringe posterior.
los hábitos de asistencia del niño a la guardería, con la reducción de Adenopatía cervical anterior, submandibular, dolorosa al tacto.
horas o la exclusión temporal. Otras medidas serían el fomento de la Aliento fétido
lactancia materna y la no exposición al humo del tabaco, así como tam- • Otros hechos sugerentes: presencia de erupción escarlatiniforme,
bién puede estar indicada la vacunación frente al virus de la influenza. ausencia de: tos, rinitis, ronquera, conjuntivitis, aftas o ulce-
Con respecto a la VCN (vacuna neumocócica conjugada), la serie fin- raciones en mucosa oral, diarrea.
landesa de 2001 analizó la eficacia de la vacuna heptavalente y obtuvo Para distinguir una amigdalitis estreptocócica tan importante es lo
un valor global medio del 6% e indicó que es eficaz frente a S. pneu- que encontramos como lo que no encontramos a la exploración. Nor-
moniae (30-34%) especialmente frente a cepas incluidas en la vacuna. malmente EBHGA no afecta a varios epitelios (faríngeo, conjuntival o
Se observó un aumento de OMA en niños vacunados por serotipos neu- digestivo). nNo produce rinitis serosa, conjuntivitis, ni tos, ni ronquera,
mocócicos no vacunales y un incremento de la OMA producida por ni diarrea, no provoca lesiones aftosas en orofaringe y produce sin
H. influenzae. Pichichero compara una población prevacunal VCN y otra embargo hipertrofia dolorosa de ganglios linfáticos submandibulares. 53
TABLA III.
En niños menores de 3 años la infección faringoamigdalar por
EBHGA aunque es mucho menos frecuente, produce un cuadro deno- No alérgicos a penicilina
minado estreptococosis que tiene una expresión clínica más nasofarín- • Penicilina V (fenoximetilpenicilina vía oral durante 10 días)
gea que amigdalar, con signos y síntomas más silentes y menos focales. – < 12 años o < 27 kg: 250 mg/12 horas
Lo más característico sería: fiebre de cualquier grado, inflamación y eri- – > 12 años o > 27 kg: 500 mg/12 horas
tema faringoamigdalar con o sin exudado, secreción nasal seromu-
• Penicilina G benzatina (inyección única IM profunda)
cosa persistente, adenopatía cervical, impétigo o excoriaciones en
– < 12 años o < 27 kg: 600.000 U
ventanas nasales, y es más frecuente en niños con dos o más hermanos.
– > 12 años o > 27 kg: 1.200.000 U
Diagnóstico • Amoxicilina
La mayoría de expertos indican que en aquellos casos en que existe – 40 mg/kg/día durante 10 días, dividida en 2 dosis
una sospecha clínico epidemiológica fundada de infección por SBHGA – En > 4 años 750 mg/día en una sola dosis
son necesarias realizar pruebas microbiológicas que confirmen el diag-
nóstico. De las pruebas de identificación antigénica rápida, el inmu- Alérgicos a penicilina
noanálisis enzimático del carbohidrato de la pared estreptocócica es • Estolato de eritromicina 30 mg/kg/día en 2 dosis durante 10 días
el más utilizado. Con prevalencias habituales de infección por EBHGA • Etilsuccinato de eritromicina 40 mg/kg/día en 2 dosis durante 10 días
de un 20-30% y una especificidad de 98%, la fiabilidad diagnóstica de • Si no mejoría en 36-48 horas cambiar a clindamicina
un test rápido positivo es mayor del 90%, por lo que no sería necesario
• Si no es posible cultivo y antibiograma de garganta para
confirmar la infección con un cultivo de garganta. Si la prueba es nega- comprobar resistencia de EBHGA, josamicina o
tiva y la sospecha de infección estreptocócica es alta, se debe realizar diacetilmidecamicina durante 10 días
un cultivo de garganta, que es el análisis de referencia diagnóstica. • Clindamicina 20 mg/kg/día cada 8 horas durante 10 días
• Cefadroxilo 30 mg/kg/día en 2 dosis durante 10 días
Tratamiento antibiótico
El objetivo principal del tratamiento antibiótico es la prevención
de la fiebre reumática (Tabla III). TABLA IV.

Comentarios al tratamiento Tratamiento de cada episodio con penicilina


Desde hace más de cincuenta años la penicilina es el antibiótico
Tratamiento con un fármaco alternativo
de referencia (indicado por la AAP, la Asociación Cardiológica Ameri-
– Penicilina-benzatina asociada a rifampicina
cana, la OMS, así como la mayoría de autores y guías nacionales con-
sultados). Hasta el momento actual y después de tantos años de utili- – Cefalosporina oral
zación, no existe ningún aislamiento de EBHGA resistente a penicilina. – Amoxicilina-clavulánico
En los últimos años se ha sugerido un aumento del número de fraca- – Clindamicina
sos bacteriológicos (que no clínicos) en la erradicación de EBHGA – Macrólidos
de la faringe tras un tratamiento con penicilina, datos muchos de ellos
cuestionables, pero que en todo caso, no han sido responsables del
aumento de casos de fiebre reumática, ni de un incremento global de completar cada tratamiento antibiótico de forma adecuada. Son
casos de FA estreptocócica ni de sus complicaciones. varias las posibilidades que explicarían esta situación: 1) Recaída,
• Amoxicilina. Comparado con penicilina su eficacia clínica y bac- cuando se trata del mismo serotipo de EBHGA y suele estar rela-
teriológica es equiparable, e incluso superior en la prevención de cionado con incumplimiento de la medicación. 2) Reinfección por
recaídas. Incluso en una dosis diaria puede ser efectiva. Por su un serotipo diferente por nuevas exposiciones en la escuela o en
mejor sabor y tolerancia es quizá de preferencia para médicos la familia. 3) Es una FA vírica en un portador crónico de EBHGA. En
padres y pacientes. esta situación especial se pueden considerar varias posibilidades
• Tratamiento de elección en alérgicos a penicilina. terapéuticas (Tabla IV):
• Macrólidos: están indicados en alérgicos con reacción inmediata No resulta fácil de aceptar el abandono casi total de la penicilina
a la penicilina, pero en el momento actual la tasa de resistencias para el tratamiento de la FA estreptocócica. No se entiende que un tra-
de EBHGA a macrólidos es del orden del 42%, y va en aumento. tamiento selectivo por su corto espectro, efectivo, económico y fácil de
Es muy resistente a eritro, claritro y azitromicina, y no afecta a josa- cumplir (dos dosis al día o un único pinchazo) sea ignorado de forma
micina, diacetil midecamicina ni a clindamicina. sistemática por los pediatras de todo el país. Resulta poco edificante
• Cefadroxilo: cefalosporina de 1ª generación indicada en alérgicos que España que ocupa el segundo puesto de la UE en consumo de
a penicilina con reacción retardada. antibióticos, de penicilinas de amplio espectro y macrólidos en espe-
• Otros antibióticos: otros antibióticos han demostrado su efectivi- cial, se sitúe en el puesto 13 en el consumo de penicilinas de espectro
dad, pero nunca serán de primera elección: las cefalosporinas, de reducido (4 veces menos que Francia, 10 veces menos que el Reino
1ª, 2ª y 3ª generación han demostrado ser eficaces, pero las de Unido, 20 veces menos que Alemania y 60 veces menos que Suecia).
más amplio espectro de actividad favorecen la aparición de resis- Como resultado tenemos una de las tasas más altas de resistencia anti-
tencias (neumococos), sobre todo en niños pequeños. biótica en neumococos, lo que nos hace cómplices de un problema
• Estado de portador asintomático de EBHGA. Se define como el sanitario de primerísimo orden. Para poder cambiar los hábitos de pres-
aislamiento de EBHGA de forma prolongada en niños asintomáti- cripción de la gran masa de pediatras y médicos que atienden a los
cos que han recibido un tratamiento correcto y no significa que niños en España sería preciso tener en cuenta algunos puntos: 1) No
exista fracaso clínico del tratamiento. No precisa tratamiento salvo es posible tener éxito si se plantean guías y algoritmos que generen
en muy contadas ocasiones. más trabajo. 2) Dar prioridad a algunos mensajes clave como el empleo
• Recurrencias o recaídas. A veces los pacientes presentan en el preferente de penicilina y la casi nula necesidad de tratar a niños meno-
54 plazo de varios meses episodios de FA por EBHGA después de res de 2 ó 3 años. 3) Crear las condiciones de trabajo adecuadas para
los médicos y pediatras, porque la masificación y la falta de incenti- sea cada vez menos recomendada. La tomografía axial computarizada
vos son el germen de la pérdida de motivación para mejorar la práctica es la mejor técnica radiológica porque permite valorar la anatomía de
clínica. todos los senos, incluido el complejo osteomeatal. Tiene, sin embargo,
una extraordinaria sensibilidad que puede dar lugar a problemas de
RINOSINUSITIS AGUDA sobrediagnóstico ya que un catarro de vías altas se puede acompa-
Se define como una inflamación de las mucosas de uno o más ñar de alteraciones radiológicas que desaparecen en los días siguien-
senos paranasales que ocurre tras cualquier inflamación de vías res- tes.
piratorias superiores. Se estima que entre el 0,5% y el 10% de los CVA
se complican con una infección bacteriana. De hecho hemos de con- Tratamiento
siderar clínicamente el diagnóstico de rinosinusitis aguda bacteriana Su objetivo es doble, erradicar la infección y favorecer la ventila-
todo proceso respiratorio de vías altas que dura más de diez días o ción y el drenaje del seno, y para ello, aunque el cuadro tiene un alto
aquellos casos que presentan una clínica inusitadamente severa para porcentaje de curación espontánea, para la mayoría de los expertos el
un catarro de vías altas. A pesar de tratarse de una enfermedad fre- uso de la antibioterapia es indiscutible. Al ser Streptococcus pneumo-
cuente, en muchas ocasiones no se diagnostica debido a la dificultad niae el germen más habitual, el tratamiento irá orientado a la erradica-
que entraña diferenciarla del proceso catarral que habitualmente la ción de esta bacteria. Al igual que en la OMA, amoxicilina a dosis altas
precede. (80-90 mg/kg/día) +/- ácido clavulánico, es el antibiótico de elección
(amoxicilina + ácido clavulánico aporta la cobertura adicional a las cepas
Etiología de H. influenzae productoras de β lactamasas). Otros antibióticos reco-
En circunstancias normales los senos paranasales son cavidades mendados serían cefuroxima y cefpodoxima. El tratamiento se man-
estériles, pero la mucosa sinusal está en continuidad con la mucosa tendrá en todos los casos un mínimo de 10 días. Otros tratamientos
nasal y faríngea, áreas habitualmente colonizadas por bacterias. Cual- acompañantes irían enfocados a la reducción de factores predispo-
quier alteración del normal funcionamiento del complejo osteomeatal o nentes. Así en el paciente alérgico serían útiles los antihistamínicos y
de las células ciliadas nasales favorece la aparición de un proceso bac- corticoides intranasales, en el RGE los procinéticos o los antiácidos; los
teriano. Así, la especial anatomía de los senos del niño, la hipertrofia mucolíticos no han demostrado especial beneficio; los vasoconstricto-
adenoidea, la alergia respiratoria, el resfriado común, el reflujo gastro- res tópicos no deben utilizarse más de tres días, y sí son efectivos los
esofágico, los déficit inmunitarios, la fibrosis quística, las alteraciones lavados nasales con soluciones salinas hipertónicas.
mucociliares y determinados factores medioambientales actúan de una
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y hemos de tener en cuenta que su diagnóstico es eminentemente clí- 386.
nico no precisando su confirmación mediante el recurso a la imagen 14. Del Castillo Martín F, Villafruela Sanz MA, Otitis media. En: Gómez Camp-
radiológica. El catarro persistente y la rinorrea purulenta anterior y pos- derá JA, Jiménez Ferreres L, Álvarez Calatayud G. Patología aguda ORL en
terior son los hallazgos que más orientan al diagnóstico. Los estudios pediatría. Ed Enar SA; 2004. p. 131-9.
radiológicos no están indicados en niños menores de seis años, y 15. Del Castillo Martín F. Otitis media aguda: criterios diagnósticos y aproxi-
por encima de los seis sólo para confirmar una sospecha diagnóstica. mación terapéutica. An Esp Pediatr 2002; 56 (Suppl 1): 40-7.
La comprobación de la escasa sensibilidad y especificidad de las Rx 16. García García JJ. Actualización en el diagnóstico y tratamiento de las otitis.
simples en la detección de la sinusitis han motivado que su práctica Clin Pediat 2005; 1: 9-14.
55
17. Álvez González F, Martín Martín C. Infecciones por el EGHGA y sus com- 18. Rodríguez Fernández R, Gómez Campderá JA, Jiménez Ferreres L. Sinu-
plicaciones. Estado de portador y recurrencias. En: Gómez Campderá JA, sitis aguda. En: Gómez Campderá JA, Jiménez Ferreres L, Álvarez Cala-
Jiménez Ferreres L, Álvarez Calatayud G, Patología aguda ORL en pedia- tayud G. Patología aguda ORL en pediatría. Ed Enar SA; 2004. p. 201-7.
tría. Ed Enar SA,; 2004. p. 83-96. 19. Delgado A, Faringoamigdalitis estreptocócica. Pediat Clin 1993; 4: 144-60.

56
Indicaciones antibióticas en las infecciones del tracto
respiratorio inferior
M.A. García Cabezas
Servicio de Pediatría. Hospital de Alarcos. Ciudad Real

Las infecciones agudas del aparato respiratorio son las infeccio- plasma pneumoniae y Clamydia pneumoniae; y cultivos virales y PCR
nes más frecuentes en la edad pediátrica; y dentro de éstas, las de las para virus(5).
vías aéreas superiores. La utilización de estos métodos diagnósticos ha permitido cono-
La mayoría de las infecciones del tracto respiratorio inferior (ITRI) cer que la etiología es mixta en el 8-40% de las NAC. Lo más frecuente
son leves y sólo requieren tratamiento ambulatorio; sin embargo, en cier- es la combinación de neumococo con virus respiratorio sincitial o Mico-
tos casos con unas características determinadas, puede existir un incre- plasma pneumoniae, que se ha constatado en un 25-50% de las neu-
mento importante de la morbimortalidad(1). monías neumocócicas diagnosticadas por serología. Inversamente,
El pronóstico va a depender de diversos factores como la edad, casi la mitad de los pacientes con neumonía por VRS, rinovirus, virus
ambiente socioeconómico, germen causal, estado inmunológico del parainfluenza y adenovirus, tiene evidencia serológica de infección
niño o presencia de enfermedad subyacente. concomitante por neumococo. Otras posibles, pero menos frecuentes,
La incidencia de ITRI es de 20-25 casos/100 niños/año en los pri- asociaciones son las infecciones dobles bacterianas y las dobles
meros 2 años de vida, y de 5 casos/100 niños/año entre los 9 y los 15 víricas(6,7).
años; como puede observarse, dicha incidencia disminuye claramente La etiología esta influenciada, de manera muy notable, por la edad.
con la edad. Así, las neumonías víricas ocurren preferentemente por debajo de los
Los virus son los agentes más frecuentes, sobre todo en menores 4 años de edad. Por el contrario, Micoplasma pneumoniae y Clamydia
de 5 años de edad, exceptuando el período neonatal. pneumoniae aparecen, sobre todo, en niños de 5 o más años de edad(8),
Cada microorganismo puede tener asociado un cuadro clínico deter- mientras que el neumococo aparece en todas las edades. A conti-
minado; la traqueobronquitis está asociada a VRS, virus influenza, parain- nuación detallamos los microorganismos más frecuentes por grupos de
fluenza tipo 3 y Micoplasma pneumoniae; la neumonía, a VRS, Mico- edad:
plasma pneumoniae, neumococo y Haemophilus influenzae (muy • Recién nacido: S. agalactie, Listeria y Gram negativos (E. coli y Ente-
infrecuente tras la vacunación); la laringitis, a virus parainfluenza tipo rococcus).
1, y la bronquiolitis a VRS. • De 1 a 3 meses, los mismos que en la etapa de recién nacido sin
Sólo se analizarán con detalle las neumonías adquiridas en la comu- olvidar la participación de VRS y otros virus respiratorios, H. influen-
nidad (NAC). zae (raro tras la vacunación), S. aureus y Listeria.
• Lactantes y preescolares (3 meses a 5 años): los virus son los agen-
DEFINICIÓN tes más frecuentes (2/3), el VRS fue el más frecuente en nuestro
Definimos neumonía como aquel episodio caracterizado por fiebre, país con el 60% en menores de 12 meses, seguido por adenovirus
síntomas respiratorios agudos o ambos, más la evidencia de infiltrados y parainfluenza (30%).
parenquimatosos en la radiografía de tórax. • Escolares-adolescentes: Micoplasma pneumoniae y Clamydia pneu-
Se considera neumonía adquirida en la comunidad la que afecta a moniae son los agentes más frecuentes.
niños no hospitalizados en los 8 días previos, o la que aparece en las • No debemos de olvidar mientras que el neumococo aparece en
48 horas siguientes a su hospitalización(2). todas las edades, con incremento de resistencias y una mayor agre-
En los países desarrollados, la máxima incidencia de neumonía ocu- sividad. Tampoco olvidar el descenso de la incidencia de H. influen-
rre en niños menores de 5 años de edad (35-40 casos/1.000 niños/años), zae tras la vacunación, con disminución del 95% en enfermedades
disminuyendo a 1-16 episodios en niños entre 5 y 14 años de edad. invasivas.
Al no ser una enfermedad de declaración obligatoria y presentar escasa
significación clínica en muchos casos, es difícil de evaluar su verda- ORIENTACIÓN DIAGNÓSTICA
dera incidencia. Manifestaciones clínicas
La aproximación diagnóstica basada en las manifestaciones clíni-
ETIOLOGÍA cas en un niño con fiebre y tos exige conocer el valor de cada uno de
La NAC del niño puede estar causada por una gran variedad de los síntomas y signos. El diagnóstico de sospecha es clínico, confir-
microorganismos (Tabla I)(3). Las variaciones en la etiología que se mado con la radiografía convencional de tórax. Además de la tos y la
encuentran en los diferentes estudios dependen de factores como: cri- fiebre, los síntomas que aumentan la probabilidad de neumonía, y
terios de inclusión, situación epidemiológica, edad de los niños estu- que por tanto deberían ser investigados por él médico, son: dificultad
diados y métodos diagnósticos utilizados. En un porcentaje que oscila respiratoria; retracción torácica; respiración ruidosa; dificultad para la
entre el 25-60% de los casos no se llega al diagnóstico. Entre otros posi- alimentación; fiebre; ansiedad e inquietud.
bles factores, esto se debe a la imposibilidad de obtener en los niños La taquipnea es el signo clínico más fidedigno para diferenciar la
muestras de esputo, a la baja rentabilidad diagnóstica de los hemo- infección de las vías respiratorias altas y bajas en niños con fiebre.
cultivos y a la tendencia a no realizar pruebas diagnósticas invasoras Para que la frecuencia respiratoria sea medida de forma objetiva,
en estos grupos de edad(4). Sin embargo, algunos estudios recientes es necesario contar las respiraciones antes de iniciar la exploración
han logrado demostrar la etiología de la NAC de los niños hasta en un física, mientras el niño está en el regazo de su madre. Además, el
65-85% de los casos, utilizando métodos serológicos para detectar anti- recuento debe extenderse durante un minuto, ya que se ha obser-
cuerpos frente al neumococo, anticuerpos frente a Haemophilus influen- vado que si se hace durante menos tiempo tiende a sobrevalorarse la
zae no tipificable y frente a Moraxella catarrhalis; serología para Mico- frecuencia respiratoria. Dependiendo de la edad del niño se utilizan las 57
TABLA I. Etiología de la NAC por grupos de edad

Recién nacido 4 semanas-3 meses 3 meses-5 años 5-9 años 9-14 años

Estreptococo del grupo B Virus Virus Neumococo Micoplasma

Gram negativos Gram negativos Neumococo Micoplasma C. pneumoniae


Listeria Estafilococo Micoplasma Neumococo
C. trachomatis C. pneumoniae C. pneumoniae Virus
H. influenzae

siguientes definiciones de taquipnea: más de 60 respiraciones/minuto aunque a veces puede haber falsos negativos si se realiza muy pre-
en niños < de 2 meses, más de 50 respiraciones/minuto en niños < cozmente. Sin embargo, no hay acuerdo general sobre las circuns-
de 2-12 meses, más de 40 respiraciones/minuto en niños > de 12 meses. tancias en las que se debe obtener una radiografía de tórax en un niño
La observación del trabajo respiratorio es también importante para para descartar una neumonía. En el caso de que no exista clínica com-
estimar la gravedad. Entre otros signos deben observarse las retrac- patible y la auscultación pulmonar sea normal, debemos hacer Rx de
ciones de los músculos respiratorios, el aleteo nasal y el quejido espi- tórax si existe fiebre prolongada sin foco evidente; aunque hay autores
ratorio. que opinan que no se debe hacer Rx de tórax si no existe taquipnea o
Como resumen de lo anterior, la Guía de la Sociedad Británica tiraje o si la auscultación pulmonar es normal.
del Tórax para el tratamiento de la NAC en los niños establece que debe- Siempre se debe hacer proyección posteroanterior para mini-
ría sospecharse neumonía en niños menores de 3 años de edad con mizar la silueta cardiaca y proyección lateral para evitar que pase
fiebre > 38,5 °C, retracción torácica y frecuencia respiratoria > de desapercibida una condensación retrocardiaca o retrodifragmá-
50/minuto(9). tica.
Las manifestaciones clínicas no permiten predecir la etiología de la No existen datos radiológicos patognomónicos que hagan pensar
neumonía. No suele haber grandes diferencias en los cuadros clíni- en un agente causal determinado, aunque existen signos orientativos
cos correspondientes a neumonías víricas y bacterianas, ni existen datos dirigidos hacia una u otra causa(10). Existen solapamientos entre los dife-
patognomónicos de una u otra etiología. rentes patrones y los diversos agentes etiológicos, teniendo más valor
En el caso de las neumonías bacterianas (neumonías típicas), el probablemente el ambiente epidémico, época del año o edad y gra-
cuadro clínico suele iniciarse bruscamente, y quizás el paciente tiene vedad del cuadro.
más afectación del estado general y con mayor dificultad respiratoria o Existen diferentes patrones radiológicos: el patrón alveolar puede
con fiebre más elevada de lo que ocurre con la neumonía viral; a veces corresponder a una condensación neumónica producida por inhala-
se añade al cuadro clínico vómitos y dolor abdominal o dolor torácico- ción de partículas con inicio en zonas periféricas, muy sugestiva de
pleural. En las neumonías bacterianas también puede detectarse mati- infección por S. pneumoniae, o puede ser debido a focos múltiples
dez a la percusión; y a la auscultación pulmonar es frecuente objeti- o bilaterales debidos a aspiración de grandes partículas infectivas
var hipoventilación alveolar y estertores subcrepitantes; el soplo tubárico con inicio de la patología en bronquios más centrales o proximales
es más infrecuente. con producción de infiltrados múltiples segmentarios que pueden con-
En las neumonías de etiología vírica o por Micoplasma pneumoniae fluir y hacerse difusos originando una bronconeumonía que suele aso-
o Clamydia pneumoniae (neumonías atípicas), el inicio suele ser insi- ciarse más fácilmente a necrosis cavitaria, abscesos y neumatoceles
dioso, puede ir precedidas o acompañadas de proceso catarral de vías y más frecuentemente producida por S. aureus, S. pyogenes, H. influen-
altas o exantema, no suele existir signos clínicos de gravedad. Mico- zae y Gram negativos. También puede referirse a un foco único, ori-
plasma pneumoniae aparece sobre todo en edad escolar en ambiente ginando la denominada neumonía redonda. La presencia de una con-
epidémico con inicio gradual de síntomas y tos persistente iterativa. densación lobar o derrame pleural es muy sugestiva de etiología
Clamydia pneumoniae suele iniciar su sintomatología también de una bacteriana.
forma insidiosa durante varios días y no suele ir acompañada de fiebre. El patrón intersticial e infiltrado perihiliar peribronquial suele estar
La conjuntivitis y tos pertusoide son características de Chlamydia tra- más relacionado con virus, Micoplasma pneumoniae, Legionella pneu-
chomatis. La neumonía por VRS suele aparecer en lactantes mayores mophila y Clamydia pneumoniae.
de 6 meses y presenta una clínica de inicio consistente en tos de 1 a Micoplasma suele presentar infiltrados intersticiales o con aspecto
3 días de duración; durante unos 10 días de media, se mantiene la sin- bronconeumónico mientras que Clamydia pneumoniae suele cursar con
tomatología consistente en tos y dificultad respiratoria, y la resolución atrapamiento aéreo y afectación intersticial.
se produce a las 3-7 semanas de inicio de los síntomas. La neumonía La radiografía de control post-tratamiento no es necesaria en
por parainfluenza tiene una clínica similar a la ocasionada por VRS. NAC si existe buena evolución clínica y el paciente está asintomático,
La neumonía por el virus influenza presenta una clínica y comporta- aunque si se decide hacerla, se debe retrasar al menos 2-3 semanas
miento diferente a las neumonías por los virus expuestos anteriormente, tras la recuperación clínica debido a una más tardía recuperación radio-
ya que produce fiebre elevada, malestar general importante y signos lógica (disociación clínico-radiológica)(11). En cambio, se debe hacer
de gravedad ya en las primeras 12-24 horas, es una enfermedad más siempre que exista alguna atelectasia en la primera radiografía o se
breve que las anteriores pues dura de 3 a 7 días, y la convalecencia trate de una neumonía redonda que pueda confundirse con una masa
suele ser larga, de semanas de duración. tumoral o exista afectación pleural o falta de respuesta a tratamiento.

Radiografía de tórax Laboratorio


La radiografía convencional de tórax es la piedra angular sobre la El hemograma es muy poco sensible, aunque a veces puede ser-
58 que descansa el diagnóstico clínico de sospecha de una neumonía, vir de ayuda y dirigir la actitud a seguir en un determinado paciente. La
leucocitosis importante sobre todo si > 20.000 leucocitos o > 6.000 – Pacientes con criterio de neumonía atípica: eritromicina, claritromi-
NT/mm3 puede ser sugestiva de etiología bacteriana, aunque las infec- cina y azitromicina.
ciones virales (sobre todo adenovirus y virus de la gripe) son capaces – Neumonía no bien clasificada: en muchas ocasiones, en la clínica
de causar enfermedad invasora y desencadenan en el huésped una existe una superposición entre la presentación clínica producida
respuesta similar a las bacterias; además las neumonías graves pue- por los diferentes microorganismos y no es posible diferenciar clí-
den cursar con leucopenia. nicamente la neumonía producida por Micoplasma pneumoniae de
Los reactantes de fase aguda, PCR, VSG y procalcitonina, son de la causada por otros microorganismos. En esta situación puede ser
más ayuda, aunque, como siempre, la edad, la gravedad y ambiente adecuada la asociación de amoxicilina y azitromicina o claritromi-
epidemiológico van a ser mucho más importantes en la catalogación cina por vía oral.
de cada paciente. En todos los pacientes diagnosticados de neumonía se debe rea-
lizar un seguimiento a las 48-72 horas del inicio del tratamiento. En los
TRATAMIENTO casos en los que la evolución clínica no es favorable, con persistencia
Una vez diagnosticada la neumonía, es necesario tomar algunas de la fiebre, se debe realizar una valoración física, radiológica y de labo-
decisiones como: tratar o no con antibióticos; tipo de antibiótico que se ratorio.
utiliza y vía de administración; cuándo cambiar al tratamiento oral; y Si tras la evaluación la neumonía sigue siendo no complicada, es
duración del tratamiento(12,13). razonable iniciar un segundo antibiótico o pautar un antibiótico alter-
Más que por la apariencia radiológica, el tratamiento debe estar nativo.
guiado por la gravedad, entorno epidemiológico, la edad del niño y La duración recomendada del tratamiento es de 7-10 días en la
las vacunas recibidas (gripe, Hib, neumocócica conjugada)(14,15). Es neumonía no complicada típica, de 10-14 días en los casos confirma-
importante, antes de iniciar tratamiento antibiótico, conocer las resis- dos o con sospecha de neumonía por Micoplasma pneumoniae y Clamy-
tencias bacterianas de cada zona geográfica en lo posible, sobre todo dia pneumoniae (5 días con azitromicina).
en el caso del neumococo, con aumento de resistencias a macrólidos
y β-lactámicos en los últimos años debido al abuso de antibióti-
cos(16-18). BIBLIOGRAFÍA
El tratamiento antibiótico empírico indicado por grupos de edad es 1. Salcedo Posadas A. Infecciones del tracto respiratorio inferior. Cuadernos
expuesto a continuación(19): de urgencias pediátricas en atención primaria. Madrid: Ergon; 2002. p. 99-
• Recién nacido: la neumonía en este grupo de edad aparece en el 126.
contexto de un cuadro séptico precisando de la antibioterapia indi- 2. Liñán S, Cobos N, Escribano A, Garmendia MA, Korta J, Martínez M et al.
cada para el tratamiento de la sepsis neonatal; ampicilina y gen- Sociedad Española de Neumología Pediátrica. Protocolo de tratamiento de
tamicina o ampicilina y cefotaxima. las neumonías en la infancia. An Esp Pediatr 1999; 50: 189-95.
• Niños de 1 a 3 meses: dada su corta edad, son susceptibles de 3. Irastorza I, Landa J, González E. Neumonías. Etiología y diagnóstico. An
ingreso hospitalario en todas las ocasiones. El tratamiento debe ini- Pediatr Contin 2003; 1 (1): 1-8.
ciarse con ampicilina más cefotaxima, y en casos de sospecha 4. Ruiz Contreras J, Rojo P. Neumonías adquiridas en la comunidad en niños.
de S. aureus se utilizara cloxacilina como primera elección o van- Rev Esp Pediatr 2004; 60 (1): 63-9.
comicina. 5. Michelow IC, Olsen K, Lozano J, Rollins NK, Duffy LB, Ziegler T, et al. Epi-
• En los lactantes y preescolares: S. pneumoniae es la causa más demiology and clinical characteristics of community-acquired pneumonia
frecuente de neumonía bacteriana en este grupo de edad. En los in hospitalized children. Pediatrics 2004; 113: 701-7.
pacientes ambulatorios, el tratamiento de elección es la amoxici- 6. Sinaniotis CA. Viral pneumoniae in children: Incidence and etiology. Pae-
lina oral a dosis elevadas (80-100 mg/kg/día, hasta un máximo de diatr Respir Rev 2004; 5 (Suppl A): 197-200.
1 g/8 h). Las posibles alternativas son amoxicilina-ácido clavulá- 7. Korppi M. Community-acquired pneumonia in children: Issues in optimizing
antibacterial treatment. Paediatr Drugs 2003; 5: 821-32.
nico 8:1 (80-100 mg/kg/día) o una cefalosporina oral de segunda
generación como cefuroxima-axetil (30 mg/kg/día) o tercera gene- 8. McCracken JR. Etiology and treatment of pneumonia. Pediatr Infect Dis 2000;
19: 373-7.
ración como cefpodoxima proxetil (10 mg/kg/día). Si las caracte-
rísticas clínicas sugieren una neumonía atípica, a partir de los 3 9. British Thoracic Society Guidelines for the Management of Community Acqui-
red Pneumonia in Childhood. Thorax 2002; 57 (Suppl 1): 11-24.
años de edad cabe utilizar también un macrólido.
• En escolares y adolescentes: la mayoría de las guías incluyen como 10. Virkki R, Juven T, Rikalainen H, Svedstrom E, Mertsola J, Ruuskanen O. Dif-
ferentiation of bacterial and viral pneumonia in children. Thorax 2002; 57:
tratamiento de elección, en los niños mayores de 5 años que no 438-41.
precisan hospitalización, los macrólidos (eritromicina a dosis de 40
11. Wacogne I, Negrine RJ. Are follow up chest X ray examinations helpful in
mg/kg/día, claritromicina a dosis de 15 mg/kg/día y azitromicina a the management of children recovering from pneumonia? Arch Dis Child
dosis de 10 mg/kg/día), dada la elevada frecuencia de Micoplasma 2003; 88: 457-8.
pneumoniae y Clamydia pneumoniae en este grupo de edad, y la 12. Alberta Medical Association. Guideline for the diagnosis and management
teórica efectividad de estos antibióticos para el tratamiento de S. of community acquired pneumonia. Pediatrics 2001.
pneumoniae. Sin embargo, el aumento de la prevalencia de resis- 13. Juven T, Mertsola J, Waris M, Leinonen M, Ruuskanen O. Clinical res-
tencia a los macrólidos de S. pneumoniae en nuestro país (la acti- ponse to antibiotic therapy for community-acquired pneumonia. Eur J Pediatr
vidad de los macrólidos frente a S. pneumoniae en la población 2004; 163: 140-4.
pediátrica fue sólo del 51,6%)(20), obliga a replantear el papel de 14. Bradley J. Management of community acquired pediatric pneumonia in an
este grupo de antimicrobianos en el tratamiento del S. pneumoniae. era of increasing antibiotic resistance and conjugate vaccines. Pediatr Infect
Así, podíamos establecer la siguiente recomendación en este grupo Dis J 2002; 21: 592-8.
de edad: 15. Kaplan SL, Mason EO, Wald ER, Schutze GE, Bradley JS, Tan TQ, et al.
– Pacientes con criterio de neumonía típica: amoxicilina oral a dosis Decrese of invasive pneumococcal infections in children among 8 children’s
elevadas (80-100 mg/kg/día, hasta un máximo de 1 g/8 h). Las posi- hospitals in the United States after the introduction of the 7-Valent Pneu-
bles alternativas son amoxicilina-ácido clavulánico o una cefalos- mococcal conjugate vaccine. Pediatrics 2004; 113: 443-9.
porina oral de 2ª ó 3ª generación. 16. Gaston B. Pneumonia. Pediatr Rev 2002; 23: 132-40. 59
17. McIntosh K. Community-acquired pneumonia in children. N Engl J Med 2002; 19. Moreno A, Liñán S. Neumonías. Orientación terapéutica. An Pediatr Contin
346: 429-37. 2003; 1 (1): 9-14.
18. Jacobs M. Worldwide trends in antimicrobial resistance among common res- 20. Garau J. Impacto de la resistencia a los macrólidos en la infección neu-
piratory tract pathogens in children. Pediatr Infect Dis J 2003; 22: S109-S19. mocócica. An Esp Pediatr 2002; 56: 58-62.

60
Estado actual de la antibioterapia en las infecciones
respiratorias. Nuevos antibióticos
F. del Castillo Martín
Servicio de Pediatría. Enfermedades Infecciosas. Hospital Infantil La Paz. Madrid

TABLA I. Nuevos antibióticos


NUEVOS ANTIBIÓTICOS
Existe en los últimos años algunas novedades en relación a nuevas Familia Molécula Nombre comercial
moléculas antibióticas, algunas de ellas de interés para el pediatra,
Ketólidos Telitromicina Ketek
especialmente en las infecciones respiratorias donde el estado de las
resistencias bacterianas es más preocupante. Realizaremos una revi- Oxazolidinonas Linezolid Zyvosid
sión de estos nuevos fármacos, especialmente de aquellos de uso domi- Estreptograminas Quinupristina-dalfopristina Synercid
ciliario y, también, haremos una actualización de algunos antibióticos Fluorquinolonas Levoploxacino Tavanic
más antiguos, pero que presentan modificaciones, especialmente en Moxifloxacino Varios
su dosificación e indicación. El listado de los nuevos antibióticos se Gatifloxacino
recoge en la tabla I. Hemos excluido de esta lista aquellas moléculas
muy próximas a las ya existentes y que poco aportan, poca novedad,
como es el caso de las cefalosporinas orales. tentes. Otra indicación perfecta de telitromicina es la faringitis estrep-
tocócica, supuesta o confirmada, en niños con alergia a betalactámi-
KETÓLIDOS cos donde las recientes resistencias de este microorganismo desa-
Los ketólidos son un nuevo grupo de antibióticos derivado de los conseja el uso de macrólidos. Otras posible indicaciones de telitromicina
macrólidos(1). La principal característica desde el punto de vista estruc- pueden ser en infecciones estafilocócicas como alternativa a cloxa-
tural y que le dota de las nuevas propiedades es la sustitución de la cilina y en infecciones por rickettsias o fiebre Q como alternativa a tetra-
L-cladinosa por un grupo ceto, de ahí su denominación. En el momento ciclinas.
actual sólo se encuentra comercializada la telitromicina.
Conclusiones
Telitromicina Telitromicina es un excelente antibiótico con un amplio espectro de
De todos los antibióticos que vamos a analizar, quizá sea más útil acción y baja toxicidad. Su indicación principal en niños sería en la infec-
para el pediatra. Su nombre comercial es Ketek®. Sin embargo, en el ción respiratoria de vías altas y bajas, aunque la formulación en jarabe
momento actual sólo hay la presentación oral en comprimidos en dosis no está aún comercializada.
para adultos, no existiendo aún la presentación en jarabe.
Su absorción intestinal está alrededor del 50% y no se afecta con OXAZOLIDINONAS
las comidas(2). Tiene una semivida larga de 10 horas, por lo que per- Es un nuevo grupo descubierto como molécula sintética en los años
mite su administración una sola vez al día. Su actividad antimicrobiana 70, no iniciándose su uso experimental hasta 1987, comercializado muy
es parecida a los macrólidos, con los que tiene una alta afinidad(3), aun- recientemente la primera molécula como linezolid(5) y aprobado en niños
que frente a S. pneumoniae telitromicina es mucho más activa que estos por la FDA en diciembre de 2002(6).
y no presenta resistencia, aunque es menos activa que penicilina, amo-
xicilina y otros betalactámicos. Su actividad frente a S. pyogenes (estrep- Linezolid
tococo beta hemolítico del grupo B) es parecida a claritromicina, el Está comercializado con el nombre de Zyvoxid ‚ en forma i.v., com-
mejor macrólido contra este patógeno. Frente a S. aureus es mejor que primidos y suspensión oral, por lo que puede ser utilizada en niños en
los macrólidos, pero peor que cloxacilina, todos ellos, no obstante, inú- el momento actual.
tiles en cepas resistentes a meticilina. También tiene una buena acción
frente a S. agalactiae, H. influenzae y M. catarrhalis, aunque inferior que Propiedades farmacológicas y toxicidad
betalactámicos. Como ocurre con los macrólidos, telitromicina tiene una Tiene una absorción por la vía oral del 100%, lo que permite trata-
excelente actividad frente a Mycoplasma pneumoniae, Chlamydia pneu- mientos adecuados por dicha vía, así como una perfecta terapia secuen-
moniae, Bordetella pertussis, Rickettsias, Coxiella burnetii y Legione- cial(7). Sin embargo, su farmacocinética se modifica notablemente en
lla pneumophila. recién nacidos, por lo que la dosificación es distinta a esta edad. La
dosis en niños de > 7días de vida a 12 años es 10 mg/kg/dosis cada
Indicaciones pediátricas 8 horas y en niños de < 7 días 10 mg/kg/dosis cada 12 h(8). La dosis en
Aunque actualmente no existe formulación ni dosificación pediá- adultos es de 600 mg dos veces al día.
trica, estudios experimentales señalan posibles indicaciones futuras Linezolid tiene poca toxicidad, aunque la experiencia es exclusi-
en pediatría, especialmente en infección respiratoria(4). En otitis media vamente de ensayos clínicos, por lo que no se conocen sus posibles
aguda y sinusitis aguda puede ser una excelente alternativa a amoxi- efectos secundarios en grandes poblaciones. Los efectos secundarios
cilina y amoxicilina-ácido clavulánico, tanto en alergias como intole- más frecuentes son los gastrointestinales y las cefaleas, siendo más
rancias, como en el caso de posible aparición de cepas altamente excepcionales otros efectos secundarios. Se elimina en un 60% por
resistentes a estas moléculas. En neumonía adquirida en la comuni- orina, por lo que en enfermos renales hay que ajustar la dosis.
dad (NAC), telitromicina tiene una perfecta indicación en aquellos casos
de NAC inclasificables del niño > 3 años donde puede existir una etio- Actividad antimicrobiana
logía por neumococo o por micoplasma, patología donde los macró- Es un antibiótico bacteriostático, con posible acción bactericida(6,8).
lidos eran una indicación hasta la reciente aparición de cepas resis- Esto puede limitar su uso en pediatría, especialmente en enfermeda- 61
TABLA II. Indicaciones de los nuevos antibióticos y las nuevas dosificaciones

Antibiótico Dosis Indicaciones

Telitromicina ND Otitis media, sinusitis, neumonía de la comunidad, faringitis y celulitis en niños con alergia a penicilina
Linezolid > 7 d a 12 a: Infección gram-posivos, especialmente resistentes
10 mg/kg/q 8 h Neumonía nosocomial, sepsis, infección piel y tejidos blandos
< 7 d 10 mg/q 1 2h
Quinupristina-dalfopristina ND Infección gram-posivos, especialmente resistentes
Ciprofloxacino O: 30-40 mg/kg/d Infección gastrointestinal grave; infección urinaria OMA por Pseudomonas aeruginosa
i.v: 20-30 mg/kg/d
Gatifloxacino O: 10 mg/kg/d Alternativa en OMA con fracaso terapéutico
Amoxicilina O: 80-90 mg/kg/d OMA, sinusitis, neumonía
O: 40-50 mg/kg/d Faringoamigdalitis
Amx-ac. clavulánico 7:1. 80 mg/kg/d OMA, sinusitis
Amx-ac. clavulánico 4:1. 40 mg/kg/d Celulitis. Faringitis estreptocócica recurrente. ITU

ND: no determinado

des graves o cerebrales. Su acción es especialmente sobre patógenos ESTREPTOGRAMINAS


grampositivos con o sin resistencias adquiridas frente a otros fármacos, Es un grupo antiguo con algunas moléculas ya conocidas, como vir-
como S. pneumoniae, S. pyogenes, S. aureus, S. epidermidis, Entero- giniamicina o pristinamicina, aunque muy poco usadas por su poca solu-
coccus, Listeria, Corynebacterias, anaerobios grampositivos y otros. bilidad en agua y dificultad de preparación iv.(10). Quinupristina-dalfo-
No tiene acción frente a bacterias gramnegativas. pristina es el primer preparado de la familia de administración sistémica.
En este sentido, su actividad sería semejante a la de los glico-
péptidos teicoplanina, vancomicina. Sin embargo, conviene recordar Quinupristina-dalfopristina
que en el momento actual existen algunas cepas de Enterococcus y de Quinupristina-dalfopristina está constituido por la asociación de dos
S. aureus con resistencia a glicopeptidos(9) en los que linezolid sería derivados semisintéticos de la pristinamicina, uno del grupo A, quinu-
una buena alternativa. pristina, y otro del grupo B, dalfopristina, lo que le dota de importante
actividad bactericida(11). Está comercializado con el nombre de Syner-
Indicaciones pediátricas cid®. Existe sólo en presentación i.v. por lo que tiene un uso muy limi-
Linezolid estaría indicado en infecciones por grampositivos, bien tado en Atención Primaria. Su actividad es frente a microorganismos
documentada o con fuerte sospechada clínica, especialmente si existe grampositivos, especialmente S. aureus incluido los resistentes a van-
información sobre la posible existencia de cepas resistentes a glico- comicina, estafilococos coagulasa negativos, neumococo sensible y
péptidos, circunstancia hoy excepcional. Linezolid ha sido autorizado resistente a penicilina, S. pyogenes, S. agalactiae M. pneumoniae, C.
en niños con infecciones graves de piel y tejidos blandos, sepsis y neu- pneumoniae y Legionella pneumophila. La dosis i.v en adultos es de 7,5
monía nosocomial asociado a aminoglicósidos, infecciones por S. aureus mg kg/dosis cada 8 horas, pero no existe actualmente dosis pediátrica.
resistente a meticilina e infección neonatal. Existe también indicación
en osteomielitis y endocarditis, aunque no hay actualmente licencia(8), Indicaciones pediátricas
siendo más dudoso su uso en meningitis. Una indicación no recono- Están lejos de ser establecidas, pero por las indicaciones en adul-
cida de la formulación oral, pero factible, podría ser en infecciones no tos y su actividad podríamos considerar a quinupristina-dalfopristina un
graves por cocos grampositivos en niños con anafilaxia a betalactá- antibiótico con indicaciones muy parecidas a las de los glicopépti-
micos, como faringoamigdalitis estreptocócica, infecciones de piel y dos, especialmente si las cepas resistentes a estos aumentan en pró-
tejidos blandos, neumonía típica, como una excelente alternativa a otros ximos años: neumonía de la comunidad, neumonía nosocomial en aso-
antibióticos conocidos, especialmente macrólidos, donde las resis- ciación con otros antibióticos, infecciones graves de piel y tejidos blandos,
tencias presentan altas tasas. La forma i.v. tendría las mismas indica- infecciones por catéteres y, en general, infecciones por estafilococos
ciones pero en casos graves. Quizá otra indicación teórica de la for- resistentes a vancomicina. No sería útil en meningitis por neumococo
mulación oral en pediatría sería en casos de gran dificultad para coger por no atravesar bien la barrera.
la vía iv.
FLUORQUINOLONAS
Conclusiones Los primeros estudios experimentales en animales encontraron toxi-
Linezolid tiene una excelente actividad frente a grampositivos, sola- cidad de las quinolonas sobre el cartílago de crecimiento en animales,
pándose con los glicopéptidos. La forma de jarabe es útil como terapia por lo que se restringió su uso en niños menores de 18 años(12). Esta
secuencial por su extraordinaria absorción. En el momento actual debe toxicidad, no obstante, no ha podido ser demostrada en seres huma-
ser un antibiótico de segunda línea en pediatría, indicado sólo en situa- nos, donde el uso masivo en niños con fibrosis quística ha demostrado
ciones especiales con información del antibiograma, excepto en aque- la ausencia de estos riesgos(13,14). Revisiones sobre varios miles de niños
llos sitios con alta prevalencia de cocos resistentes a vancomicina/tei- tratados con ciprofloxacino han encontrado dolores articulares en algu-
coplanina o fracaso o toxicidad de glicopéptidos. Podría ser usado en nos enfermos, pero semejante a lo que ocurre en enfermos adultos, que
casos de otitis media aguda causada por neumococo altamente resis- ceden al retirar el preparado, sin que existan complicaciones osteoar-
62 tente. ticulares irreversibles, lo que ha permitido el uso pediátrico.
Clasificación esta molécula es un antibiótico de segunda línea para esta patología,
No existe en el momento actual una clasificación universalmente aunque sin duda puede sustituir a ciprofloxacino y ser la primera indi-
aceptada de estos quimioterápicos. Una de las más razonables, sim- cación en el caso de ser necesario su uso en infección respiratorio de
plificada para su mejor aceptación pediátrica, puede ser(15): vías altas. La dosis utilizada en niños fue de 10 mg/kg/día en una dosis
• Grupo I. Fluorquinolonas orales limitadas a la infección urinaria: nor- día.
floxacino.
• Grupo II. Fluorquinolonas de uso sistémico y amplio espectro: cipro- NUEVA FORMULACIÓN/DOSIFICACIÓN DE ANTIGUAS
floxacino, ofloxacino. MOLÉCULAS
• Grupo III. Fluorquinolonas con actividad mejorada frente a gram- Amoxicilina
positivos y atípicas: levofloxacino, esparfloxacino, grepafloxacino. Es un antibiótico de primera elección en infección respiratoria de
• Grupo IV. Fluorquinolonas con actividad mejorada frente grampo- vías altas y bajas. Sin embargo, debido a la alta prevalencia de cepas
sitivos, atípicas y anaerobios: trovafloxacino, moxifloxacino, gati- de neumococo resistente, su dosificación en esta patología debe ser
floxacino, clinafloxacino. siempre a 80 mg por kg, excepto si se conoce su sensibilidad por el
Sin embargo, muchas de estas moléculas no han llegado a comer- antibiograma. Sin embargo, en la amigdalitis estreptococócica la dosis
cializarse o se han retirado al hacerlo debido a sus efectos secunda- es 40-50 mg/kg.
rios(16).
Amoxicilina-ácido clavulánico nueva formulación
Ciprofloxacino, ofloxacino La proporción de amoxicilina en relación a ac. clavulánico de la
Son dos moléculas muy semejantes en cuanto a actividad, pero con antigua formulación de 4 a 1, se ha transformado en la nueva formula-
modificaciones para ofloxacino en sus propiedades farmacodinámicas ción en 7 a 1. Esto permite administrar dosis altas de amoxicilina man-
que le hacen competitivo con respecto a bacterias gramnegativas como teniendo la dosis de ac. clavulánico, evitando así sus efectos secun-
H. influenzae, Enterobacterias, Salmonella, Shigella, Campylobacter y darios. Este antibiótico está indicado en las infecciones por neumococo,
Pseudomonas. Sin embargo, tiene una pobre actividad frente a cocos como otitis media aguda y sinusitis, patógeno con alta tasa de resis-
grampositivos, Mycoplasma pneumoniae y Clamydia pneumoniae, por tencias sólo tratables con altas dosis de amoxicilina, no estando indi-
lo que no tiene uso en la infección respiratoria. cada la antigua formulación en estas patologías. Sin embargo, la nueva
formulación no esta indicada en la faringoamigdalitis, en la infección
Indicaciones pediátricas urinaria, ni la celulitis e infección de tejidos blandos.
Ciprofloxacino es la fluorquinolonas de elección en infección gas-
trointestinal, tanto como terapia empírica (diarrea del viajero), como en Otros antibióticos orales
diarreas por Salmonella, Shigella, Aeromona, Yersinia o Campylobac- No existe en este momento ninguna otra nueva formulación ni molé-
ter(17). La gastroenteritis infantil no necesita generalmente tratamiento cula genérica oral. Hay nuevas cefalosporinas orales, pero no suponen
antibiótico, pero ciprofloxacino podría ser el tratamiento de primera elec- un cambio estricto ni un nuevo uso respecto a las ya conocidas. Tam-
ción en casos de afectación del estado general, de diarrea grave o poco hay nuevos macrólidos ni reformulación de los antiguos.
de shigelosis. También está indicada en infección por Pseudomonas.
No está indicada en terapia respiratoria empírica por su poca actividad BIBLIOGRAFÍA
frente a cocos grampositivos. La dosis pediátrica oral es 30-40 mg/kg/día 1. Picazo JJ. Ketólidos: un nuevo grupo de antimicrobianos. Enferm Infecc
en 2 dosis e i.v 20-30 mg/kg/día en 2 dosis. En el momento actual no Microbiol Clin 2001; 19: 1-3.
existe dosis pediátrica para ofloxacino. 2. Barman Balfour JA, Figgitt DP. Telitromicina. Drugs 2001; 61: 815-30.
3. García de Lomas J, Gimeno C, Esteban E. Actividad antimicrobiana de teli-
Levofloxacino tromicina. Enferm Infecc Microbiol Clin 2001; 19 (supl 2): 7-14.
Es un derivado de ofloxacino. La actividad de levofloxacino es dis- 4. Gobernado M. Antibióticos cetólidos. Rev Esp Quimioterap 2000; 13: 244-
cretamente superior a la ciprofloxacino/ofloxacino frente a cocos gram- 5.
positivos y bacterias atípicas como micoplasma, aunque no los susti- 5. García de Lomas J, Gimeno C, Esteban E. Las oxazolidinonas: una nueva
clase de antimicrobianos. Enferm Infecc Microbiol Clin 2002; 1 (supl): 8-14.
tuye frente a gramnegativos y Pseudomonas. Por su actividad sobre
6. Kaplan SL. Use of linezolid in children. Introduction. Pediatr Infect Dis J 2003;
neumococo y micoplasma está indicado en el tratamiento de la neu- 22: S 151-2.
monía de la comunidad de etiología indeterminada, pero no sustituye a 7. Jungbluth GL, Welshman IR, Hopkins NK. Linezolid pharmacokinetics in
ciprofloxacino en el tratamiento de la fibrosis quística. No existe dosis pediatric patients: an overreview. Pediatr Infect Dis J 2003; 22: S 153-7.
pediátrica en el momento actual, por lo que no tiene posible indicación 8. Tan TQ. Update on the use linezolid. Pediatr Infect Dis J 2004; 23: 955-6.
a esta edad en este momento. 9. Centers for Disease Control and prevention. Sievert DM, Boulton MS, Stol-
man G, et al. Staphylococcus aureus resistant to vancomycin-United Stated
Moxifloxacino 2002. MMWR 2002; 51: 565-7.
Recientemente comercializado en forma oral en adultos, pero sin 10. García-Rodríguez JA, Muñoz Bellido JL. Quinupristina-dalfopristina: primera
dosis pediátrica. Mejor que levofloxacino frente a neumococo, S. pyo- estreptogramina inyectable. Rev Esp Quimioterap 2002; 15 (supl 1):1-4.
genes, S. aureus, por lo que podría sustituirle en neumonía ya que tam- 11. Cantón R, Morosini MI, Loza E, Coque TM, Baquero F. Espectro microbio-
bién es activo frente a micoplasma y clamidia(18). Tiene buena actividad lógico de la quinupristina-dalfopristina: actividad in vitro y actividad bac-
tericida. Rev Esp Quimioterap 2002; 15 (supl 1): 15-28.
frente a gramnegativos, aunque tiene menos actividad que ciprofloxa-
cino para Pseudomonas, por lo que no sustituye a este en el tratamiento 12. Hooper DC. Quinolonas. En: Mandell GL, Bennett JE, Dolin R, eds. Basic
principles in diagnosis and management of infectious diseases. 5ª edition.
de la fibrosis quística. New York: Churchill Livingstone; 2002. p. 404-22.
13. Hampel B, Hullman R, Schmidt H. Ciprofloxacin in pediatrics: Worldwide cli-
Gatifloxacino nical experience based on compassionate use-safery report. Pediatr Infect
Muy recientemente se han realizado ensayos clínicos en fase III Dis J 1997; 16: 127-9.
para su uso en niños entre 6 meses y 7 años con infección del oído 14. Burkhart JE, Walterspiel JN, Schaad UB. Quinolonas arthropathy in animals
medio, especialmente OMA recurrente(19,20). No obstante, creemos que versus children. Clin Infect Dis 1997; 25: 1196-204. 63
15. Gomis M, Sánchez B, Ledesma F, Barberán J. ¿Ha llegado el momento de 19. Sáez-Llorens X, Rodríguez A, Arguedas A, et al. Randomized, investiga-
las quinolonas en el tratamiento de las infecciones respiratorias? Enferm tor-blinded, multicenter study of gatifloxacin versus amoxicillin/clavulanate
Infecc Microbiol Clin 1998; 16 (supl 2): 1-7. treatment of recurrent and nonresponsive otitis media in children. Pediatr
16. Azanza Perea JR, Sádaba Díaz de Rada B, García Quetglas E. Perfil de Infect Dis J 2005; 24: 293-300.
seguridad de las fluorquinolonas. Rev Esp Quimioterap 2000; 13: 246-56. 20. Sher L, Arguedas A, Husmean M, et al. Randomized, investigator-blinded,
17. Congeni BL, Thomson RB. Flouroquinolones: considerations for future multicenter, comparative study of gatifloxacin versus amoxicillin/clavulanate
use. Pediatr Infect Dis J 2002; 21: 345-6. of recurrent otitis media and acute otitis media treatment failure in chil-
18. Loza E, Morosini MI, Negri MC, Almaraz F, Cantón R, Baquero F. Estudio dren. Pediatr Infect Dis J 2005; 24: 301-8.
multicéntrico nacional de la actividad in vitro de moxifloxacino frente a pató-
genos respiratorios. Rev Esp Quimioterap 2000; 13: 37-43.

64
Sesión Plenaria

Conceptos actuales en ortopedia infantil.


Signos guía en la exploración oropédica del niño
pequeño: consultas más frecuentes
J.R. Ebri Martínez
Especialista en Traumatología y Ortopedia. Valencia

El conocimiento de lo normal y lo anormal, para cada fase del desa- el pequeño vaya adquiriendo el lenguaje paulatinamente, pero se pre-
rrollo músculo esquelético y el manejo de los problemas para las dis- ocupan si no comienza a caminar perfectamente desde el primer
tintas edades, nos hará sentirnos más cómodos ante un problema orto- día.
pédico infantil (L. Staheli, 1992). Cualquier alteración morfológica de las articulaciones nos va a
Siguiendo con el espíritu de Andry en 1741 cuando publicó el pri- llevar a unas asimetrías de cargas biomecánicas, con la consiguiente
mer tratado de ortopedia infantil con el título de El Arte de prevenir y aparición de las artrosis o desgastes articulares desde el punto de vista
corregir las deformidades en el niño, se entiende que el diagnóstico mecánico o funcional y las consiguientes alteraciones de los movimientos
precoz sería el fundamento de la ortopedia infantil, y al que debemos normales, aumentando el desgaste energético y la aparición de dolor
llegar a través de la exploración y anamnesis adecuada. e impotencia funcional al llegar a la madurez.
Hay que tener presente que el esqueleto infantil es un esbozo Estos síntomas junto con las deformidades-malformaciones, son las
cartilaginoso que a medida que va creciendo es susceptible de sufrir motivos de la consulta diaria. La familiaridad en el manejo de unos SIG-
alteraciones en su desarrollo y correcta formación por múltiples cau- NOS GUÍA en la exploración nos ayudará en la práctica diaria ante
sas. los problemas ortopédicos infantiles.
No solo es necesario hacer un correcto diagnóstico ante cualquier Es necesario valorar los patrones de normalidad para las diferen-
patología que se presente, sino que hay que hacer una relación de sín- tes edades, la laxitud articular va disminuyendo con la edad, el rango
tomas enhebrando la sintomatología con los antecedentes tanto del niño de movilidad articular marca ángulos diferentes para las distintas
y los familiares, resto de síntomas asociados y una detenida explora- edades, al igual que ciertas adquisiciones de desarrollo psicomotor
ción músculo-esquelética. Una limitación de la movilidad de una cadera como el caminar “a la pata coja” se consigue a partir de los 4 años, por
en un recién nacido, junto con otros síntomas infecciosos nos tiene que lo que tenemos que tener presente en la exploración los ítems norma-
hacer sospechar una artritis séptica de la cadera y su retraso diag- les para cada edad del niño.
nóstico puede tener un resultado fatal, un metatarso varo en un recién Tenemos que valorar los grados de afectación patológica para
nacido o un pie talo, nos tiene que hacer pensar en un minuciosa explo- poder determinar su gravedad, ya que un mismo diagnóstico se puede
ración y un seguimiento de una posible DDC, o una gonalgia con sín- presentar en su forma leve o grave, como en el metatarso varo, una
tomas de cojera en un adolescente puede ser diagnosticada de una cadera en abducción, una plagicefalia o un genu valgo. El rango de
osteocondritis de Schlatter-Osgood sin sospechar la epifisiolisis de la afectación y de reductibilidad va a condicionar su tratamiento y por tanto
cabeza femoral. su pronóstico, medidas a tener en cuenta a efectos de resultados y con
Que el diagnóstico sea preciso nos va a llevar a un tratamiento apro- las implicaciones de la responsabilidad profesional a efectos legales.
piado, es decir que sea necesario, que sea eficaz para la detención de Siguiendo con los protocolos de exploración que se adjuntan, se
esta incapacidad y, por último, que los beneficios están por encima de puede hacer un correcto examen ante cualquier problema que se
los riesgos y de los indeseados efectos psicosociales negativos. Tanto presente a diferentes edades, además es importante valorar cuantifi-
los pediatras como los ortopedas infantiles hemos asistido a niños inter- cando las mediciones de un proceso como: ángulos inter-maleolares,
venidos innecesariamente o con resultados desfavorables con el paso femoro-tibiales, arcos plantares, etc., con las tablas de percentiles para
del tiempo, o que han sufrido durante tiempo en uso y abuso de trata- cada edad del niño.
mientos ortésicos innecesarios. Es objetivo de esta exposición el abordaje de la exploración física
El inconveniente más grande del arte de curar es tener que iniciar ante signos y síntomas, obviando el manejo diagnóstico de las pruebas
un tratamiento antes de tener claro el diagnóstico (Marañón, 1950). complementarias, que son tremendamente útiles para llegar a un diag-
Con los avances por parte de los pediatras en la exploración del nóstico preciso en la mayoría de los casos.
niño, y al seguir los calendarios de supervisión y detección precoz, hoy
en día detectamos pequeñas alteraciones, que se van a poder subsa- BIBLIOGRAFÍA
nar y en muchos de los casos, con pequeñas correcciones, y en otros 1. Wenger D, M. Rang M. Art and Practice of Children´s Orthopaedics. New
casos van a ser susceptibles de alguna intervención quirúrgica. York: Raven Press.
En una inmensa mayoría la labor de el especialista va a ser el de 2. Common Orthopedic Problems. The Pediatric Clinics of North America. New
tranquilizar a los padres, ya que muchos de ellos acuden con la idea, York: McGraw-Hill.
de intentar tener unos niños "perfectos“, pensando en poder prevenir 3. Staheli L.Fundamentals of Pediatric Orthopedics. New York: Raven Press;
algunos problemas que ellos tienen sin atender a lo amplio del mar- 1992.
gen de la "normalidad". Con frecuencia se acepta a nivel familiar que 4. Tachdjan M. Ortopedia Pediátrica Enciclopedia. Masson.

65
ANEXO 1. Cuestionario a plantearnos ante el examen ortopédico

A modo de resumen podremos efectuar una revisión de los signos y síntomas necesarios para evaluar una exploración tanto en decúbito como en
bipedestación:

¿Caderas? ¿Estado general? ¿Miembros inferiores?


• ¿Limitaciones de la abducción? • ¿Está relajado? • ¿Rotación interna?
• ¿Asimetrías de pliegues? • ¿Contraído? • ¿Rotación externa?
• ¿Flexión? • ¿Fiebre? • ¿Torsión femoral?
• ¿Extensión? • ¿Signos inflamatorios? • ¿Torsión tibia?
• ¿Rotación interna? • ¿Se flexiona sin limitaciones? • ¿Ángulos maleolares?
• ¿Rotación externa? • ¿Clicks? • ¿Asimetrías?
• ¿Rigideces?
• ¿Dolor?

¿Sedestación? ¿La marcha?


• ¿Se sienta correctamente? • ¿Salta sobre una pierna?
• ¿Piernas cruzadas? • ¿Camina a la “pata coja”?
• ¿Postura de rana? • ¿Tiene fuerza en los talones?
• ¿Se levanta con dificultad? • ¿Son simétricos los movimientos?
• ¿Necesita la ayuda de los brazos para levantarse? • ¿Camina de puntillas?
• ¿Como son los Aquiles?
• ¿Caminaba normal antes?
• ¿Cojea?
• ¿Corre coordinado?
• ¿Se cae con frecuencia?
• ¿Cómo es la zancada?
• ¿Ángulo de paso?
• ¿Longitud de paso?
• ¿Anchura de paso?

¿Observación general? ¿Bipedestación frontal? ¿Raquis dorsal?


• ¿Cicatrices? • ¿Tortícolis? • ¿Al inclinarse de espaldas con las
• ¿Cómo es el calzado? • ¿Dismetrías de mm ii? manos juntas tiene asimetrías
• ¿Desgaste de las suelas? • ¿Dismetrías femorales? (postura de Adams)?
• ¿Antiguas fracturas? • ¿Dismetrías tibiales? • ¿Desnivelación pélvica?
• ¿Quiste poplíteo? • ¿Asimetrías rotulianas? • ¿Ángulos costo abdominales?
• ¿Manchas café con leche? • ¿Genu-valgo? • ¿Presenta gibas?
• ¿Anomalías congénitas? • ¿Genu-varo? • ¿Dismetrías?
• ¿Laxitud articular? • ¿Rotación tibial? • ¿Asimetrías escapulares?
• ¿Tiene trastornos del habla? • ¿Arcos plantares? • ¿Cifosis?
• ¿Otros trastornos neurológicos? • ¿Apoyo del talón posterior? • ¿Lordosis?
• ¿Antecedentes familiares? • ¿Anormalidades en los dedos de los pies?
• ¿Antecedentes obstétricos?
• ¿Etnias?
66
ANEXO 2. Gráficos de medición

Grados
110
ROTACIÓN DE CADERA
ROTACIÓN EXTERNA ÁNGULO
70 MUSLO/PIÉ
ROTACIÓN INTERNA
Años
30
0 1/2 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14

Grados
ÁNGULO FÉMORO-TIBIAL ÁNGULO
10 VALGO
FÉMORO/TIBIAL
0
VARO
10 Años
0 1/2 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14

Grados ROTACIÓN TIBIAL ÁNGULO


20 MUSLO/PIÉ
ÁNGULO MUSLO PIE
10
EJE INTERMALEOLAR Años
0
0 1/2 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14

ÁNGULO
Grados ÁNGULO DE MARCHA DE MARCHA
20

10
Años
0
0 1/2 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14

HUELLA
PLANTAR
1,2

1,0 DESARROLLO ARCO PLANTAR Antepié


RELACIÓN MEDIA ANTEPIÉ/RETROPIÉ
0,8
Arco plantar
0,6
Retropié
0 1/2 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14

67
Valoración de los problemas traumatológicos infantiles
en Atención Primaria
J. Gasco Adrién

INTRODUCCIÓN TABLA I. Indicadores de maltrato infantil


Los accidentes en la infancia son frecuentes.
En España se producen al año 8.000 politraumatizados y solo por 1. Maltrato físico
accidentes de tráfico mueren al año unos 500 niños y otro porcentaje • Magulladuras, moratones, fracturas
importante sufre algún tipo de incapacidad. En los países desarrolla- • Quemaduras, heridas o dermoabrasiones
dos es todavía la primera causa de muerte infantil con el 52% de los • Lesiones abdominales
fallecimientos, seguida del cáncer que supone el 10% de los mismos • Mordedura humana
(Amaya 1995, Dimeglio 2002).
• Intoxicaciones
El tipo de accidente más frecuente es el juego o el deporte y tiene
lugar a partir de los 11 años de edad y la causa más frecuente de lesión 2. Maltrato por negligencia
es la caída casual. • Escasa higiene, sucio, hambriento
Afortunadamente, la gran mayoría de consultas por traumatismos, • Falta de supervisión cuando hace el niño acciones peligrosas
especialmente en Atención Primaria, son por lesiones banales o de poca
• Cansancio o apatía permanentes
repercusión clínica (lesiones dérmicas superficiales o dermoabrasio-
nes, contusiones, artritis reactivas postraumáticas, esguinces leves, epi- • Necesidades médicas no atendidas
fisiolisis grado I, etc.). 3. Abuso sexual
No por ello debemos obviar una completa anamnesis (al paciente
• Dificultad para andar y sentarse
o a los padres o cuidadores) y exploración clínica, que en la mayoría
• Ropa interior rasgada o manchada
de los casos no nos ocupará más de diez o quince minutos, y de la que
generalmente obtendremos datos suficientes en los que basar nuestro • Dolor o picor en zona genital
diagnóstico y tratamiento. • Contusiones o sangrado en genitales externos
Muchas veces los padres o los propios niños de edades más avan- • Enfermedad venérea
zadas intentan asociar cualquier dolor musculoesquelético con un ante-
cedente traumático, aunque en realidad no tenga ninguna relación con 4. Maltrato emocional
el mismo y no debe desorientar nuestra exploración (por ello debemos • Retraso de crecimiento estaturoponderal
intentar que sea lo más sistemática posible, tanto general como del seg- • Retraso de algunas áreas madurativas
mento que nos ocupe) o diagnóstico. Es el caso de muchas cojeras que
pueden deberse a otras causas frecuentes no traumáticas como sino-
vitis transitorias de la cadera u otras artritis reactivas. También dolo- ción y tratamiento, encaminadas sobretodo a evitar una lesión iatro-
res lumbares mecánicos relacionados con espondilolistesis u otras mal- génica aún más grave (Gascó J y De Pablos 1997).
formaciones no diagnosticadas o bien de origen infeccioso como algunas • La anamnesis suele ser muy deficitaria, por la poca información
espondilodiscitis. que podemos obtener del paciente y nos obliga a basarnos en la
Por otro lado puede ocurrir lo contrario, que secundariamente a una “versión” de los padres. También la exploración física suele ser
consulta por un traumatismo leve que el paciente relaciona con sus dificultosa, especialmente en niños pequeños por estado de agi-
molestias, diagnostiquemos patologías ocultas más graves y que no tación o llanto o falta de comunicación. Como pauta general debe-
guardan ninguna relación etiológica con el mismo, como es el caso de mos primero observar los miembros y ver si existe aumento en
muchos tumores óseos. Por ejemplo el quiste óseo esencial es una tumo- el tamaño de alguno de ellos o movilidad espontánea disminuida
ración benigna que suele debutar con fractura patológica. e intentar evaluar el balance articular (BA) de las articulaciones
Otras veces un mecanismo traumático de bajo grado, pero repeti- vecinas del segmento afecto, observar signos de inflamación/infec-
tivo (salto, marcha prolongada) pueden ocasionar fracturas de fatiga o ción local o articular y palpar puntos dolorosos en estructuras
estrés y pueden confundirse con tumores malignos. óseas o músculoligamentosas. La información obtenida nos obli-
En niños pequeños nunca debemos olvidarnos del maltrato (Bat- gará en muchas ocasiones a solicitar radiología simple como estu-
tered Child Syndrome) o descuido (falta de atención suficiente por parte dio complementario, tanto para basarnos en un diagnóstico radio-
de padres o cuidadores), y siempre deberemos indagar en los meca- lógico como para descartar patologías más graves como
nismos y circunstancias del accidente, alertando a los servicios perti- comentamos anteriormente. Recordamos aquí que en niños muy
nentes (servicios sociales locales, parte judicial, centro de salud-pedia- pequeños las epífisis aún no osificadas no se ven a Rx, siendo
tra de área, etc.) ante la más mínima duda. aún más difícil el diagnóstico, que se debe basar en la sospecha
clínica relacionada con el mecanismo lesional. Pueden incluso
Manejo general de las lesiones traumáticas más frecuentes existir fracturas condrales no visibles que Moseley (1997) llamó
Como hemos mencionado anteriormente, la gran mayoría de lesio- fracturas ocultas.
nes traumáticas que atenderemos en el Centro de Salud serán leves o • En general, la mayoría de lesiones musculoesqueléticas infantiles
poco graves. Ello unido al potencial de crecimiento y “remodelación” requieren inmovilizaciones poco rígidas (tipo vendaje elástico) en
de la edad infantil conllevará a buenos resultados y ausencia de secue- caso de lesiones leves de partes blandas, o aún siendo yesos
68 las en la gran mayoría de los casos, con unas pautas generales de aten- son poco prolongadas, oscilando entre las dos semanas en las
lesiones de partes blandas y las cuatro o cinco semanas en caso
de fracturas o epifisiolisis. Esg. raquis
• Atención a la colocación de yesos y vendajes, revisándolos o cam- 13,8 Pies-dedos
biándolos ante la mínima duda de que puedan existir complica- Manos-dedos
13,1 Lig. rodilla
ciones. Signos de alarma frecuentes son dolor persistente en horas Pelvis
12,7
o días, a pesar de correcta inmovilización y analgesia apropiada, Vertebral

Tipo de fractura
especialmente si éste va en aumento. Edema distal persistente y 16 Cúbito-radial
Húmero
signos físicos de disminución de perfusión. Sensación de quema- 13,9 Tibia
zón debajo del yeso en caso de lesiones cutáneas. Fémur
15
• Generalmente no se requiere un programa específico de rehabili-
tación tras retirar la inmovilización, y se auto rehabilitan con el movi- 11,3
miento y el juego. No es inusual que quede una actitud “viciosa”, 7,3
de recuerdo antiálgico, durante unos días tras retirar el yeso, que 13
únicamente requerirá observación.
Vamos a dedicar un apartado a las fracturas infantiles, por su fre- 8,9
cuencia y las características específicas en el niño, que obliga a con-
templarlas y manejarlas de forma diferente al adulto. 0 5 10 15 20
FRACTURAS INFANTILES Edad media
Las fracturas de los niños difieren de las de los adultos debido a
que sus huesos tienen diferencias anatómicas, fisiológicas y biome- Frecuencia fracturas Edad y fracturas
cánicas que propician la aparición de determinados tipos de fractu- Tipo % Tipo Edad
ras que entrañan problemas diagnósticos específicos, y en muchos Fémur 21,7 Fémur 8,9
casos tratamientos diferentes a los empleados en el adulto. Esto es lo Tibia 21,5 Tibia 13
que llevó a RANG en 1974 a afirmar que “los niños no son precisamente
Húmero 17 Húmero 7,3
adultos pequeños”.
La localización más frecuente de los traumatismos es el cráneo Cubito-radio 14,7 Cubito-radio 11,3
(41%) siguiéndole en frecuencia el miembro superior (21%), miembro Vertebral 5,2 Vertebral 15
inferior (16%) y el abdomen (8%) (Amaya 1995). La fractura más fre- Pelvis 4 Pelvis 13,9
cuente es en el antebrazo en su parte distal, entre los 6 y los 11 años Lig. rodilla 4 Lig. rodilla 16
de edad. Antes de los 6 años de edad la localización más frecuente es Mano-dedos 2,6 Mano-dedos 12,7
en el codo debido a la frecuencia de las fracturas condíleas y supra- Pies-dedos 2,3 Pies-dedos 13,1
condíleas. En cuanto a las fracturas que requieren ingreso hospitalario Esg. raquis 1,2 Esg. raquis 13,8
la fractura más frecuente sería la de fémur.
Del 15 al 28% de las fracturas son fracturas que afectan al cartílago
FIGURA 1. Distribución de fracturas por región y edad.
fisario. Un 3% son fracturas abiertas y un 4% son niños politraumati-
zados.
Casi la mitad de los niños tienen la posibilidad de sufrir una frac- e. En niños pequeños y en determinadas localizaciones, pueden exis-
tura a lo largo del período de crecimiento (42%) mientras que en niñas tir epífisis aún no osificadas y plantear problemas diagnósticos radio-
es menor (27%). Esta frecuencia aumenta con la edad siéndolo mucho lógicos ante una fractura.
más los mayores de 6 años y variando las causas. Antes del año de f. Mayor grosor del cartílago epifisario dando lugar a que se pue-
edad siempre hay que pensar en que se trate de un niño maltratado dan producir fracturas condrales u osteocondrales.
(Battered child syndrome) (Fig 1). g. Hueso con módulo de elasticidad más bajo y por tanto con posi-
bilidad de sufrir mayor deformidad elástica y absorber más ener-
Características del hueso infantil (diferencias con el hueso adulto) gía que el adulto. Posible aparición de deformidades plásticas si la
Las diferencias son anatómicas, biológicas y biomecánicas (Ogden fuerza traumática continúa y no es excesivamente violenta.
1986, Beatty y Kasser 2001). Fundamentalmente: La refractura en niños no es rara y se pueden producir en un esta-
a. Presencia de cartílagos de crecimiento o fisis, generalmente más dio precoz cuando se retira precozmente la inmovilización o tardías si
débiles que los ligamento periarticulares, lo que condicionará que ha curado con deformidad (Wenger y Pring 2005).
se puedan localizar fracturas a este nivel con más frecuencia que Todas estas características hacen que aparezcan fracturas dife-
esguinces u otras lesiones ligamentosas, y posibles complicacio- rentes a las del adulto y también lo será la respuesta ósea de dicha frac-
nes de mal pronóstico por aparición de una deformidad progresiva tura ante un traumatismo y por tanto su tratamiento.
si se lesiona parcialmente el cartílago de crecimiento.
b. Periostio grueso, activo osteogénicamente y bien vascularizado, Fracturas específicas de la infancia
fácilmente separable del hueso y que puede cumplir un papel esta- Fracturas fisarias. Epifisiolisis traumáticas
bilizador importante cuando su rotura no es completa. Se trata de fracturas que asientan en la fisis o cartílagos de creci-
c. Estructura ósea más porosa, especialmente en las metáfisis. miento. Incluyen alrededor del 20-25% de todas las fracturas de la infan-
d. Vascularización rica que hace posible la rápida consolidación de cia. Se produce a cualquier edad, incluso puede darse como lesión
las fracturas y que sean raros los retardos y pseudoartrosis. Mayor obstétrica, pero es más frecuente en la pre o adolescencia. Se localiza
potencial de remodelación. Períodos de inmovilización más cor- con más frecuencia en el miembro superior que en el inferior. Las loca-
tos que en el adulto. Esto tiene el inconveniente de la dificultad que lizaciones de más a menos frecuencia son la parte distal del radio, falan-
existe para corregir desviaciones secundarias de los fragmentos ges de los dedos y la tibia distal. En algunos casos, si no existe des-
después de las 2 semanas de inmovilización. plazamiento de fragmentos o bien en niños pequeños si no está osificada 69
Fracturas en tallo verde
Reciben el nombre del aspecto que adquiere el trazo de fractura
similar al producido cuando intentamos romper un tallo verde provo-
cando una inflexión del mismo. Se localiza en huesos diafisarios finos
y con corticales delgadas, tales como son el radio, cúbito y clavícula.
Su diagnóstico es fácil, ya que el aspecto el miembro presenta una gran
deformidad. El tratamiento consistirá en la reducción del desplazamiento
entre los fragmentos. Para ello deberá convertirse la fractura en com-
pleta, fracturando la cortical que ha quedado íntegra. Esto se consigue
acentuando la incurvación o invirtiéndola de forma suave hasta notar
un crujido que indica la fractura de la cortical. Inmovilización con yeso
de 4 a 6 semanas.

Incurvación plástica diafisaria


Se trata de una deformidad de un hueso diafisario sin presentar
trazo de fractura alguno. Su localización típica son huesos diafisarios
FIGURA 2. Clasificación de Salter y Harris de las epifisiolisis. finos con corticales delgadas como son el radio, cúbito y peroné. Se
caracterizan por presentar escaso dolor e impotencia funcional si no
existe fractura asociada del hueso vecino. La deformidad del miem-
la epífisis, el diagnóstico por rx simple es complejo y se basa en la sos- bro por la incurvación del hueso afecto suele ser observable. La explo-
pecha clínica o recurriendo a otro tipo de exploraciones complemen- ración radiográfica mostrará la incurvación no anatómica. En caso de
tarias. La clasificación más utilizada es la de Salter y Harris (1963) duda debe hacerse radiografía comparativa contralateral. El tratamiento
que lo hace en cinco tipos (Fig. 2), atendiendo a su anatomía, trata- dependerá de la intensidad de la deformidad. Cuando es una defor-
miento y pronóstico. midad cosméticamente inaceptable, será necesaria la reducción y se
Debe sospecharse una lesión fisaria: obtiene invirtiendo la angulación del hueso afecto presionando durante
• Ante una deformidad yuxtaarticular en un traumatismo directo o unos cinco a diez minutos desde sus extremos sobre un fulcro colo-
entorsis (en un adulto sospecharíamos lesión cápsulo-ligamentosa). cado en el punto de máxima angulación (Borden 1974).
• Si el paciente es un pre o adolescente.
• En ocasiones los síntomas clínicos son menos llamativos que en Principios generales de tratamiento de las fracturas
una fractura en la misma localización. – El tiempo de reducción debe ser lo más precoz posible.
Debe confirmarse el diagnóstico mediante Rx. Muchas veces se – El método de reducción debe ser el apropiado para cada caso,
requiere, especialmente en niños pequeños, las radiografías compa- así como los criterios aceptables de la misma. Resaltar que en los
rativas del miembro sano. En casos tardíos o cuando existen compli- niños menores de 10 años raramente se requiere reducción ana-
caciones (bloqueos fisarios) pueden ayudar la resonancia magnética o tómicas (a excepción de fracturas articulares o epifisarias y fisa-
la captación de Tc99. rias).
El pronóstico depende del tipo de lesión (los tipos I y II son de buen – El período de inmovilización enyesada suele ser más corto en el
pronóstico, mientras el III, IV y V son de alto riesgo), de la edad (será miembro superior que en el inferior y cuanto menos edad. Hacia la
más grave cuanto más pequeño sea el niño ya que ante una compli- tercera semana la reparación de la unión fiso-metafisaria es lo sufi-
cación, la detención del crecimiento ocasionará una deformidad muy cientemente consistente como para permitir la movilidad del miem-
grave), de la lesión de la vascularización epifisaria (si con el despla- bro y la carga total hacia las 4-6 semanas.
zamiento se lesionan los vasos epifisarios se producirá necrosis epifi- – El vendaje enyesado primario como inmovilización de urgencia ante
saria y detención del crecimiento), de la gravedad de la lesión (en frac- una fractura reciente debe estar bien almohadillado o bien colocar
turas conminutas o muy desplazadas las posibilidades de lesión fisaria un vendaje compresivo con férulas. Si se utiliza el vendaje de yeso
son mayores), del método de reducción (si las maniobras de reducción completo debe siempre abrirse longitudinalmente. Si existen dudas
son bruscas y forzadas puede lesionarse el cartílago de crecimiento) y respecto a la circulación distal debe ingresarse siempre al niño para
si se trata de lesiones abiertas (aumenta la probabilidad de infec- vigilancia durante 24-48 horas para observación. El miembro debe
ción). permanecer elevado y estimular a movilizar los dedos que siempre
Las complicaciones más importantes serán la detención del cre- debe hacerse sin presentar dolor. A los 7-8 días debe colocarse el
cimiento por lesión fisaria parcial o total que crearía importantes defor- vendaje de yeso definitivo, con almohadillado escaso y buena esta-
midades angulares o acortamientos del miembro afecto, las necrosis bilización de la fractura, realizando remanipulación de los frag-
avasculares epifisarias por lesión de los vasos epifisarios, y la artrosis mentos si fuera necesario (Charnley 1950). Requieren más vigilan-
precoz por mala reducción en los tipos III y IV. cia que en el adulto ya que el niño, por no tener dolor utiliza el
miembro y deteriora el yeso.
Fracturas en rodete, torus o caña de bambú – Hay que tener siempre presente que son frecuentes los desplaza-
El término “torus” (latín “torus”= cordón) por recordar el aspecto mientos secundarios y es necesario realizar un control radiográfico
que forma el relieve de la cortical a nivel del foco de fractura a esta semanal, especialmente durante las dos primeras semanas.
estructura. Por esto, también recibe el nombre de fractura en rodete o – Es necesario someter a vigilancia y seguimiento prolongado, para
caña de bambú. Son más frecuentes a nivel del tercio distal del radio. descartar posibles alteraciones de la fisis durante un año, buena
El diagnóstico clínico no es evidente por escasa deformidad. En Rx corrección de deformidades y descartar dismetrías que requieran
se ve la imagen típica comentada, de abombamiento cortical. Única- corrección.
mente requiere inmovilización poco rigurosa del miembro afecto durante En líneas generales los métodos cerrados son de elección y gene-
10-12 días puesto que al no existir desplazamiento tampoco requie- ralmente suficientes en el tratamiento de la mayoría de las fracturas
70 ren reducción (Gascó 1995, Van Bosse y cols. 2005). infantiles. En caso de requerir cirugía, las técnicas a emplear suelen
ser poco invasivas, procurando evitar los abordajes al foco de frac- 2. Bety JH, Kasser JR. Fractures in children. Philadelphia: Lippincott Williams
tura. and Wilkins; 2001.
Las principales indicaciones para el tratamiento quirúrgico serán 3. Borden S. Traumatic bowing of the forearm in children. J Bone Joint Surg
de forma muy resumida: 1974; 56A: 611-6.
– Las fracturas articulares desplazadas (incluyendo las fisarias tipos 4. Charnley J. The closed treatment of common fractures. Edimburgo: Ed.
Livingstone; 1950.
III-IV) o bien si tras varios intentos no se ha obtenido una reducción
5. Dimeglio A. Epidemiología de las fracturas infantiles. 2ª ed. Madrid: Ergon;
adecuada y estable.
2002.
– Siempre que existan dificultades para el tratamiento conservador
6. Gascó J, De Pablos J. Bone remodeling in malunited fractures in children.
(polifracturados, TCE graves o traumatismos abdominales o torá- Is it reliable? J Pediatr Orthop 1997; 6 (Part B): 126-32.
cicos que requieran cuidados especiales. 7. Gascó J. Lesiones traumáticas del niño. Lesiones traumáticas óseas meta-
– Anomalías óseas congénitas. fisarias y diafisarias (rodete, tallo verde y deformidad plástica). Ed. Pana-
– Interposición de tejidos blandos en el foco de fractura o reduc- mericana; 1995.
ción cerrada imposible. 8. Ogden JA. Traumatismos del esqueleto del niño. Ed Salvat; 1986.
– Fracturas abiertas. 9. Moseley CF. Fracturas ocultas en fracturas infantiles. Conceptos y Princi-
– Todas aquéllas fracturas cuyo tratamiento quirúrgico representa pios. Pamplona. Gijón: Producción MBA; 2005-08-24.
una ventaja sobre el tratamiento cerrado. 10. Rang M. Children’s Fractures. Philadelphia: JB Lippincott; 1974.
11. Salter RB, Harris WR. Injuries involving the epiphyseal plate. J Bone Joint
BIBLIOGRAFÍA Surg 1963; 45A: 587-622.
1. Amaya Alarcón S. Principios generales del tratamiento de las fracturas en 12. Van Bosse HJP, Pater RJ, Thacker M, Sala DA. Minimalistic approach to tre-
lesiones traumáticas del niño. Ed. Panamericana; 1995. ating wrist torus fractures. J Pediatr Orthop 2005; 25 (Part A): 495-500.

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Ponencia

Infección por Helicobacter pylori en Pediatría


Introducción
F. Ardoy Medina
Pediatra de Atención Primaria. Granada

A comienzos de la década de los ochenta, en el Royal Perth Hos- La patología bacteriana no es la única que provoca el cuadro ulce-
pital de Australia, por Goodwin, se descubrió el Helicobacter pylori, una roso, tenemos que mencionar los AINES, la hipersecreción gástrica,
bacteria helicoidal que coloniza la mucosa gástrica, a pesar de su aci- el estrés y otras raras etiologías como posibles causantes.
dez y que se la considera la causante de la ulcera péptica y de la gas- Concretando en el niño, antes de los doce meses es muy poco pro-
tritis crónica tipo B. En 1986 se demostró que este microorganismo colo- bable esta infección, los anticuerpos maternos, la leche humana, son
niza también la mucosa gástrica del niño, causando frecuentes gastritis portadores de Ig Anticuerpo HP. A partir de los seis años se dan hasta
crónicas en la infancia. un 5% de infecciones, y entre menores de veinte años, en países desa-
Con este descubrimiento, se hace la luz en el campo de la com- rrollados, se llega a un 11%. Esto nos sugiere que la infección detec-
plicada patología gastro-duodenal; el tratamiento y en sí todo el cuadro tada en adultos se pudo adquirir en edades tempranas y ha persis-
patológico gástrico cambia, suponiendo un gran descubrimiento para tido durante muchos años asintomática.
la medicina de la época. Presentado el problema desde el punto de vista médico-sanitario,
En las anteriores décadas, el cuadro de la llamada vulgarmente voy a ceder la palabra a los ponentes que son los especialistas del tema
“úlcera de estómago”, era temido y terrorífico para el paciente y su y nos harán una revisión y actualización de esta patología en el niño.
entorno; este diagnóstico a veces no muy contrastado, llevó al quiró- El Dr. Carlos Maluenda Carrillo, es profesor titular de pediatría de
fano a muchos pacientes, se extirpaban estómagos y se cosían ulce- la Universidad Complutense de Madrid, y Jefe de Sección de la Unidad
ras; la búsqueda del último antiácido traspasaba nuestras fronteras; de Gastroenterología Pediátrica del Hospital Clínico San Carlos. Él
la vida de un ulceroso era un martirio personal y familiar. Los que ejer- nos hará una puesta al día del Helicobacter pylori en pediatría.
cimos por aquellos años tenemos casos que contar y hematemesis que Posteriormente, el Dr. Pedro Urruzunu Tellería, profesor asociado
relatar; el ulceroso en su carácter y en su cara reflejaba su enfermedad. de pediatría de la Universidad Complutense de Madrid desde 1988 y
Todo entró en vías de solución, el descubrimiento del Helicobacter desde 2000, profesor honorífico de dicha Facultad. También ocupa el
pylori bacteria espiciforme, gram negativa, con flagelos, cuyo hábitat puesto de Médico Adjunto de Pediatría en el Hospital 12 de Octubre de
natural y más importante es el estómago humano, que coloniza la mucosa Madrid desde 1980. Y entre otras, forma parte del European Pediatric
gástrica provocando gastritis y ulcera péptica; nos puso en el camino Task Forceo on Helicobacter pylori desde 1998. Nos hablará sobre
a la solución de este cuadro. El tratamiento médico reemplazó al qui- los aspectos prácticos, el diagnóstico y tratamiento, de la infección
rúrgico, los antibióticos han solucionado la mayoría de estos cuadros. en pediatría por el Helicobacter pylori.

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