Floristan.

Ruptura de la cristiandad occidental

El S. XVI vivió una conmoción religiosa, la cristiandad occidental se quebró en varias Iglesias y desde sus particulares
fundamentos dogmáticos pretendieron moldear la vida de sus fieles en todos los aspectos, la familia, relaciones económicas,
manifestaciones artísticas y festivas entre otras. Así se fueron configurando Iglesias territoriales en un proceso de
confesionalizacion que sirvió para reforzar y definir los nuevos estados de la Edad Moderna.
Reforma y contrarreforma: A principios del siglo XVI reclamaban una profunda reforma de la iglesia, con ello se pedía la
purificación de los abusos y el perfeccionamiento de la vida cristiana mediante el retorno a la doctrina primitiva pero
manteniendo la unidad y la continuidad en la fe. Sin embargo pronto resultó evidente que el Lutero, Zuinglio o Calvino
habían iniciado cambios profundos que romperían con Roma. Dice el siglo XIX se utiliza el término de “reforma” para
englobar a todos los movimientos que formaron las iglesias de 1517, los luteranos surgen como grupo inicial mayoritario
pero en pocas décadas los zuinglianos, anabaptistas, anglicanos y calvinistas se diferenciaban entre ellos y entre sí. Con el
tiempo la fragmentación de la reforma y su adaptación en distintos países resultó en el surgimiento de nuevos matices:
Puritanos en Inglaterra; presbiterianos en Escocia y hugonotes en Francia.
La porción de la cristiandad que se mantuvo unida en torno al papado se reconoció como “católica” aunque sus enemigos
los denominaban “papitas”, el surgimiento de la Reforma provocó un intento de modificación interna tratando de recuperar
por todos los medios el terreno ocupado por quién desde su perspectiva no eran sino meros herejes. Para denominar este
proceso complejo qué incluye tanto la renovación interna del catolicismo con su reacción político-militar se acuñó en
Alemania en el siglo XIX el término de contrarreforma. Algunos autores católicos consideran equivocó tal concepto preferido
el de reforma católica para destacar que fue mucho más que una reacción antiprotestante.
Abusos morales y eclesiales: Eran muchos y antiguos los males de la iglesia que se denunciaron, en las parroquias rurales el
clero carencia de preparación intelectual para adoctrinar a sus feligreses y además eran incapaces de atender sus
inquietudes espirituales, muchos vivían faltando a la vida comunitaria en pobreza, obediencia castidad; los obispos muchas
veces se dedicaban acumular beneficios. Lutero y los reformadores protestantes respondieron a esta inquietud religiosa
donde la sociedad reclamaba una religiosidad más auténtica, es por ello que Lutero se adelantó a Roma a la hora de dar una
respuesta.
Intereses sociales y políticos: Las propuestas de Lutero tuvieron una gran aceptación ya que cuajaron con un medio social y
político que acepto sus aplicaciones prácticas, el desarrollo alcanzado en esta época por la nuevas fuerzas económicas
(capitalismo) y sociales (burguesía) determinarían el orden ideológico (religión). El luteranismo alimento de la resistencia
frente a la indignación por el despotismo que ejercía el papado en el terreno fiscal y en los beneficios, la implantación de la
Reforma en una ciudad o en un territorio conlleva a cambios de poder y de riqueza la supresión de las órdenes religiosas
supuso el trasvase de muchos bienes y rentas que pasaron a propiedad o gestión de otras manos. Es por ello que no es de
extrañar que príncipes y nobles pretendieron enriquecerse con estas nuevas medidas se puede atribuir que un factor
importante para el triunfo de la Reforma fue entonces el apoyo de las autoridades seculares, así el poder de la autoridad
secular creció sobre el poder de la iglesia.
Los conflictos sociales: el nuevo paradigma religioso estimulo el pensamiento de los sectores oprimidos de la sociedad y la
conciencia sobre su propia condición, desarrollando por esto diversos movimientos religiosos en el que una nueva
espiritualidad los llevo a concebir una mejora en su situación económica y social, intentando materializar este anhelo con
levantamientos contra la nobleza.
El fervor religioso: como señala Jean Delameau (basándose en observaciones de clérigos de la época) el pueblo alemán
seguía con gran fervor las diversas ceremonias religiosas y daba pruebas de una gran espiritualidad y deseos de un
conocimiento más profundo de Dios. En este contexto, el pensamiento religioso de Lutero respondió a la necesidad de los
fieles de poseer un mayor conocimiento de las Escrituras y despojarse del peso espiritual de una Iglesia romana que se veía
como corrompida.
Desde lo económico hay que tener en cuenta que la iglesia católica era propietaria de grandes extensiones de tierra, las
cuales en algunos casos no las trabajaban. Debido a esto los príncipes alemanes aprovechan la reforma a poder apropiarse
de estas tierras. También tenemos que tener en cuenta al campesinado, el cual estaba ahogado debido a la presión fiscal, vio
a la reforma como una vía para mejorar sus condiciones de vida.
Contexto de las 95 tesis de Lutero y a que hace referencia con respecto a la figura del papa, su autoridad y venta de
indulgencia: por aquel entonces de 1517 Lutero no se proponía en modo alguno crear una nueva iglesia, sino debatir sobre
estas cuestiones y reformar las prácticas que le parecían condenables y alejadas del mensaje del Evangelio.
En las “95 tesis” Lutero hace referencia a las indulgencias como meros instrumentos de la iglesia que en ningún modo
garantizan la salvación espiritual de un creyente y que solo son estímulos para la codicia y la corrupción. En cuanto al papa y
su autoridad, Lutero niega en parte la superioridad espiritual y la capacidad del Papado para asegurar a un alma el Cielo solo
por las indulgencias, advirtiendo además que estas tenían solo un interés puramente financiero del jefe de la Iglesia de
Roma. Los fragmentos donde podemos observar esto en los escritos de Lutero son, por ejemplo:
36. Cualquier cristiano verdaderamente arrepentido tiene derecho a la remisión plenaria de pena y culpa, aun sin carta de
indulgencias.
47. debe enseñarse a los cristianos que la compra de indulgencias que da librada a la propia voluntad y no constituye
obligación.
52. vana es la confianza en la salvación por medio de una carta de indulgencias.
86. ¿Por qué el Papa, cuya fortuna es hoy más abundante que la de los más opulentos ricos, no construye tan sólo una
basílica de San Pedro de su propio dinero, en lugar de hacerlo con el de los pobres creyentes?