1) Considerando las grandes etapas del desarrollo de las sociedades
presenta diferentes comprensiones del trabajo y construye tu propia definición
en las que consideres la dimensión objetiva y subjetiva del trabajo.
La sociedad contemporánea se caracteriza por una serie de transformaciones y
paradojas que se hacen sentir en el trabajo, siendo éste una de las principales categorías de análisis social. La globalización, el proceso de reestructuración en la producción, la competitividad entre los actores, los cambios en los acuerdos que se tienen sobre los trabajadores, entre otros fenómenos, se han reflejado en la categoría ‘’trabajo’’. Emergen estudios dirigidos a la observación de distintos fenómenos asociados a precarización de la relación trabajador - trabajo. En medio de esas temáticas, es relevante, social y científicamente, comprender cuáles son los significados del trabajo en esta sociedad marcada por la multidiversidad de sentidos y valorizaciones personales elaborados por quienes viven de él. El concepto de trabajo constantemente ha ido incluyendo diferentes significados de acuerdo al contexto histórico y social donde ha de ser empleado. Para Marx, el trabajo consiste en transformaciones sociales con el objetivo de atender necesidades humanas. Se trata de la relación dialéctica entre el hombre y la naturaleza, la transformación de uno afecta la del otro. Es mediante el trabajo que el ser humano ha buscado suplir sus propias necesidades, para alcanzar sus objetivos y realizarse. Sin embargo, por su amplia naturaleza, influenciada por la cultura y momento histórico, este concepto puede modificarse. El trabajo es una actividad humana social, compleja y dinámica, que puede ser llevada a cabo ya sea de forma individual o colectiva, que distingue de cualquier otro tipo de práctica animal por su naturaleza reflexiva, consciente, estratégica e instrumental. ‘’Con el capitalismo, el trabajo se asoció al sustento material y, en relación con el empleo, se caracterizó por relaciones contractuales asalariadas. Mientras el trabajo remite a la transformación de la naturaleza, el empleo está asociado, con mayor frecuencia, a relaciones contractuales, al vínculo formal con la organización, a las obligaciones y al salario’’. (Borges & Yamamoto, 2004). La emergencia de las relaciones de trabajo, llevan al individuo a no identificarse con las actividades que desempeña y su vez cuestionarse los significados que le otorga el ‘’trabajar’’ y los sentidos de este. También, cabe analizar las formas heterogéneas de como los cambios están establecidos en países económicamente más desarrollados y en aquellos considerados menos desarrollados (América Latina). Desglosando conceptos, el trabajo no sólo contribuye a la transformación de la naturaleza y del continuo progreso de las ciencias y de la técnica, sino también crea valores humanos, de cultura, de comunidad y contribuye, sobre todo, a la elevación cultural y moral de la sociedad La construcción de nuestro propio significado acerca del concepto trabajo, reside en los vínculos que podemos lograr racionalmente ‘’trabajando’’ como seres capaces de empatizar con el resto generando conciencia reciproca en los individuos, buscando de esta forma la toma de decisiones en conjunto, actuando de forma humana y saludable, fomentando así cambios sociales que deriven en un mayor bienestar para las personas y las interacciones de los individuos con el entorno. El trabajo va más allá de la fuerza productiva a cambio de un salario, es el proceso por el cual logramos nuestros objetivos, es una dimensión tan amplia que puede ser abordada desde diferentes puntos asociándole distintas significaciones. Es para nosotros el propio significado que otorgamos el que resalta el valor de una situación específica al momento de caracterizar un acto dado, tanto actos personales como intrapersonales. Lo asociamos a la satisfacción que nos produce realizar una acción a cambio de un sentido especial al que le otorgamos un alto valor simbólico (humanización de sí mismo y de la sociedad). Enfatizando sobre la mirada objetiva acerca del concepto ‘’Trabajo’’, señalamos la estructura del sistema capitalista neoliberal que no solamente ha impulsado una cultura del trabajo economicista y materialista, sino que también ha estimulado una cultura propietarita y consumista. El pensamiento predominante en la sociedad de hoy, es que el ‘’capital’’ es el fundamento de toda la vida económica y social, y el trabajo es solamente un instrumento al servicio de él. En otros términos, el fundamento para determinar el valor del trabajo humano no es el tipo de trabajo que se realiza, sino el hecho de que quien lo realiza es una persona humana que, necesita dicho trabajo para realizarse como tal dentro de la sociedad a la que está impuesta.