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ESCUELA DE INGENIERIA
MATERIA: HIDROLOGIA
CODIGO: 102HID1
GRUPO: N°1
TEMA:
IMPORTANCIA DE LA EVALUACION DE LA ESCORRENTIA SUPERFICIAL Y AGUAS
SUBTERRANEAS EN LOS ESTUDIOS HIDROLOGICOS.
INTEGRANTES
CONTENIDO PAG.
1.0 INTRODUCCION----------------------------------------------------------------------------------------------------------- 3
2.0 OBJETIVOS---------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 4
o OBJETIVO GENERAL------------------------------------------------------------------------------- 4
o OBJETIVOS ESPECIFICOS------------------------------------------------------------------------ 4
3.0 JUSTIFICACION------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 5
5.0 CONCLUSIONES----------------------------------------------------------------------------------------------------------- 18
6.0 ANEXOS---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 19
En el presente documento hacemos referencia sobre el recurso hídrico tomando en cuenta la escorrentía y las
aguas subterráneas de manera importante con sus factores de presión que son principalmente la
sobreexplotación de los acuíferos, el vertimiento de sustancias contaminantes a los cuerpos de agua, los
cambios en el uso de suelos tales como la deforestación, las prácticas agrícolas inadecuadas, el incremento de
urbanizaciones en zonas de producción hídrica, entre otros. Este decrecimiento en la disponibilidad hídrica que
va a un alto índice de crecimiento poblacional, genera conflictos que han comenzado a sentirse y que tienden
a agravarse sino se toman las medidas necesarias, como la regulación del uso del agua a través de mecanismos
de planificación, normativas y leyes que permitan su protección. El Balance Hídrico que se desarrolla
actualmente presenta un carácter Integrado y Dinámico: Integrado porque involucra aspectos tanto de cantidad
y calidad de aguas superficiales y subterráneas, así como de la demanda por parte de los sectores de usuarios
del recurso, involucrando las restricciones por calidad para establecer la condición actual de disponibilidad de
agua. Es Dinámico porque se actualizará periódicamente de forma automatizada, para lo cual se han
desarrollado diversas aplicaciones como la alta importancia de estos temas que permitirán calcular anualmente
el balance hídrico. De esta manera podrá determinarse la influencia de fenómenos relacionados con la
variabilidad climática. Esto permitirá que la información resultante en mapas, tablas y gráficos, pueda ser
dinámica y actualizada reflejando las condiciones del recurso hídrico a través de índices de escasez y presión
del recurso que nos haga saber su importancia de la escorrentía y aguas subterráneas.
Encontrar el balance hídrico en situación actual y futura para cada unidad hidrográfica de la cuenca y
a nivel de los distintos cálculos para determinar eficazmente, prebendo el uso y demanda total del uso
del agua mediante diferentes gráficos.
Estimar los caudales máximos y mínimos en los puntos de interés del río principal o afluente mediante
cálculos.
La intensidad de la precipitación.
La capacidad de infiltración de una superficie particular.
La condición hidráulica a la que se encuentra el suelo o la roca.
Las características hidráulicas del suelo o roca.
La comparación entre estas variables permite obtener información sobre los procesos que se pueden presentar
bajo diferentes situaciones. Las condiciones en las que se encuentra el suelo en el momento en que se produce
la precipitación, afectará de forma sustancial el escurrimiento o escorrentía. Se pueden distinguir los siguientes
casos:
La escorrentía está constituida por la sumatoria de tres componentes principales: escurrimiento, flujo sub-
superficial y agua subterránea:
El escurrimiento:
El escurrimiento es el agua que fluye por sobre la superficie del terreno hasta el cauce más cercano y sólo se
produce en los eventos de lluvia. En un evento de lluvia, cuando la intensidad de la misma es superior a la tasa
de infiltración, se produce un almacenamiento superficial que primero llena las depresiones del terreno,
conformando el almacenamiento de retención. Luego que las depresiones se han llenado se inicia el
almacenamiento detención, el cual genera el escurrimiento. Lo anterior es importante conocerlo ya que indica
que la escorrentía no sólo depende de la infiltración sino del microrelieve. La tasa de escurrimiento dependerá
del volumen del almacenamiento de detención y de la pendiente y rugosidad del terreno. En cuencas de suelos
muy permeables, de cobertura densa y de poca pendiente, el escurrimiento es muy pequeño, por el contrario,
en suelos arcillosos y con poca cobertura el escurrimiento es mayor; lo anterior es de suma importancia
conocerlo ya que la escorrentía es el principal factor en la erosión de los suelos.
El flujo sub-superficial:
Está constituido por el flujo lateral desde la zona de humedad del suelo. Luego de la infiltración el agua en el
suelo continúa moviéndose en función de los gradientes hídricos, especialmente el gradiente vertical y si se
encuentra con una capa relativamente impermeable, se produce un flujo lateral el cual culmina con su
intercepción por los cauces. El flujo sub-superficial es muy importante en cuencas con suelos permeables y
estratificados. Junto con el escurrimiento conforma el llamado flujo rápido (“quick flow” en inglés) y que
generalmente se considera como escorrentía directa.
Flujo subterráneo:
El flujo subterráneo está conformado por el agua que fluye desde el almacenamiento del agua subterránea
hacia los cauces. Este ocurre cuando los cauces interceptan el agua subterránea, ya sea desde el nivel freático
como de acuíferos más profundos. Este flujo es llamado flujo base o caudal base. El flujo base ocurre siempre
que exista un almacenamiento subterráneo. El caudal mínimo de un cauce es llamado caudal de estiaje.
Existen una gran cantidad de métodos de cálculo de la escorrentía siendo todos ellos empíricos y cada uno
adaptado a una zona y unas características concretas, por tanto, los resultados pueden variar mucho y no todos
serán de aplicación a este ámbito de estudio.
En concreto, vamos a tener en cuenta el método racional, el método de Cook o del sumatorio y el método del
número de curva.
Fórmula racional
Es un método muy utilizado, aunque solo se recomienda su uso para cuencas de menos de 1000 Ha. Está
basado en la siguiendo fórmula:
𝑪𝑰𝑨
𝑸=
𝟑𝟔𝟎
Siendo:
(𝑰 − 𝟎. 𝟐𝑺)𝟐
𝑸=
𝑰 + 𝟎. 𝟖𝑺
Siendo:
Q= Escorrentía (mm)
I=Cantidad de lluvia (mm)
S= Diferencia máxima potencial entre la lluvia caída y la escorrentía generada.
𝟐𝟓. 𝟒𝟎𝟎
𝑺= − 𝟐𝟓𝟒
𝑵
Dónde: N= Numero de curva
Grupo A: Suelos con gran permeabilidad incluso estando saturados. Suelos profundos, sueltos, con
poca arcilla o limo y gran porcentaje de arena y/o grava.
Grupo B: Permeabilidad moderada. Son los terrenos arenosos menos profundos, los franco-arenosos
de profundidad media y los francos profundos.
Grupo C: Suelos poco permeables al tener algún estrato impermeable o una textura arcillosa o franco-
arcillosa.
Grupo D: Muy impermeables, gran cantidad de arcillas.
La profundidad a la que los espacios de los poros del suelo o las fracturas y los vacíos en la roca a ser
completamente saturados de agua se llaman Capa freática. El agua subterránea es recargada y eventualmente
fluye hacia la superficie natural, la descarga natural a menudo se filtra, y se pueden formar los oasis o los
humedales. Las aguas subterráneas también son a menudo extraídas para usos agrícolas, municipales e
industriales mediante la construcción y operación de pozos de extracción.
El estudio de la distribución y el movimiento de las aguas subterráneas es la hidrogeología.
En los últimos años se han podido presenciar ciertas evidencias del cambio climático y de sus impactos en los
recursos hídricos. Estos impactos modifican la tasa de escorrentía superficial y la recarga de los acuíferos. Las
aguas subterráneas son una fuente crítica de agua potable para casi la mitad de la población mundial, además
de suplir necesidades de irrigación en la agricultura. Por otro lado, éstas son también importantes para el
sostenimiento de corrientes, lagos, humedales y otros ecosistemas asociados.
El flujo subterráneo en acuíferos poco profundos forma parte del ciclo hidrológico, y resulta afectado por la
variabilidad y el cambio climático por efecto de procesos de recarga y por la intervención humana en numerosos
lugares. Los niveles subterráneos de numerosos acuíferos del mundo han experimentado una tendencia
decreciente durante los últimos años, aunque ello se debe, por lo general, al bombeo de agua subterránea a
un mayor ritmo que la recarga, y no a una disminución freática relacionada con el clima.
Los impactos directos del cambio climático sobre los procesos naturales pueden ser exacerbados por las
actividades humanas. La extracción en exceso de aguas subterráneas, por ejemplo, podrían ser necesitadas
en áreas donde haya recursos hídricos contaminados o insostenibles causado por sequías o inundaciones. Los
efectos del cambio climático sobre los recursos hídricos subterráneos están, por lo tanto, vinculados a otros
cambios globales que incluyen el crecimiento poblacional, la urbanización, el cambio en el uso de la tierra, que
se juntan a otras tendencias socio-económicas y políticas. La respuesta de estas aguas subterráneas a los
mencionados cambios globales es una compleja función que depende de la variabilidad del cambio climático,
la topografía, las características propias de los acuíferos, la dinámica de la vegetación, y de la actividad humana.
Los efectos del cambio climático a nivel regional, dados por los cambios observados en la temperatura y
precipitación en los Andes, han provocado un rápido y acelerado retroceso de los glaciares tropicales en toda
la región. A la larga, estos cambios en el volumen de los glaciares provocarán cambios considerables en la
hidrología estacional de las glaciares aguas abajo.
En un caso hipotético futuro en que los glaciares sigan retrocediendo y lleguen a desaparecer por completo, al
menos de las cuencas de captación de menor elevación, resulta lógico suponer que la escorrentía pasará
gradualmente de suministrar agua en forma continua a una situación en la que en su mayor parte se concentrará
en la estación lluviosa y, por tanto, se disminuiría el volumen de agua que podría infiltrarse en el acuífero, con
un caudal base escaso o nulo en la estación seca.
Una disminución generalizada de la entrada y almacenamiento de las aguas subterráneas, llevaría consigo una
disminución de las descargas naturales de éstas, afectando, por tanto, a los ecosistemas que dependen de las
aguas subterráneas. Las salidas del agua subterránea pueden producirse por la acción del hombre mediante
bombeos fundamentalmente, y de modo natural a través de manantiales, ríos, humedales y directamente al
mar.
Es por eso que los problemas actuales en torno a la disponibilidad del agua en los Andes, sumados a las
proyecciones de retroceso de los glaciares en el futuro, las posibles reducciones en las precipitaciones y el
crecimiento demográfico continuo, los cuales tienen afectación directa sobre los acuíferos, requieren que
rápidamente se formulen y apliquen estrategias de adaptación y mitigación, que podrían ayudar a aliviar, tanto
a corto como a mediano plazo, los conflictos relativos al acceso a agua salubre.
En algunos casos, las soluciones técnicas podrían aliviar una parte de la escasez de agua, ya sea mediante la
construcción de pequeños embalses, la reducción del volumen de agua contaminada que no se utiliza
instalando plantas de tratamiento, el aprovechamiento de nuevos recursos de aguas subterráneas o la simple
instalación de sistemas privados de almacenamiento de agua. Sin embargo, con frecuencia la aplicación de
este tipo de medidas se ve obstaculizada por la falta de conocimientos sobre la disponibilidad, calidad y
dinámica del agua. La comprensión de procesos físicos fundamentales de flujo, almacenamiento y calidad del
agua en muchas cuencas de captación es deficiente.
Por último, es muy importante fortalecer la posición institucional de las autoridades que realizan investigaciones
sobre los glaciares, la ordenación del agua y sobre el recurso hídrico mismo. En algunos casos podría ser
Importancia:
Para ello, se realizan periódicamente mediciones de los parámetros físico-químicos y niveles estáticos en los
acuíferos someros, ya que estos son los que presentan mayor vulnerabilidad intrínseca a la contaminación por
su grado de exposición a las cargas potencialmente contaminantes.
Además, se cuenta con la red de monitoreo automática en los acuíferos del Área Metropolitana de San Salvador
(AMSS) y Zapotitán, en los cuales se cuenta con 14 pozos distribuidos en ambos acuíferos, con los que se
monitorea el acuífero profundo. Los equipos instalados en esta red registran datos de profundidad de nivel
estático cada ocho horas, lo cual permite tener un registro continuo del comportamiento de estos sistemas.
Sirve para la evaluación de la vulnerabilidad de la contaminación de los acuíferos, básicamente sirve para
determinar los siguientes factores:
Para obtener el diagrama unitario se deben cumplir una serie de postulados o condiciones de borde, que se
describen a continuación:
Se comienza separando el escurrimiento directo del de base. Luego se calcula el volumen de escorrentía y se
dividen las ordenadas del diagrama o hidrograma diferencia por la altura de precipitación efectiva, para
obtener el HU proporcional a la altura de precipitación efectiva unitaria elegida, todo ello para una duración de
tormenta adoptada compatible con la duración unitaria. Debe tratarse de obtener 2 o 3 hidrogramas HU para
iguales duraciones, promediándolos posteriormente, con caudales picos promedios y tiempos al pico
promedio.
APLICACIÓN E IMPORTANCIA.
Cada ordenada del HU se multiplica por la relación de proporcionalidad (15/10 en el ejemplo), para obtener
las ordenadas del hidrograma resultante HR (15 mm, ) con = tu.