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ARTICULO 80: SANEAMIENTO, SALUBRIDAD Y SALUD

Las municipalidades, en materia de saneamiento, salubridad y salud, ejercen las siguientes funciones:

1. Funciones específicas exclusivas de las municipalidades provinciales:

1.1. Regular y controlar el proceso de disposición final de desechos sólidos, líquidos y vertimientos industriales en el
ámbito provincial.
1.2. Regular y controlar la emisión de humos, gases, ruidos y demás elementos contaminantes de la atmósfera y el
ambiente.

2. Funciones específicas compartidas de las municipalidades provinciales:

2.1. Administrar y reglamentar directamente o por concesión el servicio de agua potable, alcantarillado y desagüe,
limpieza pública y tratamiento de residuos sólidos, cuando por economías de escala resulte eficiente centralizar
provincialmente el servicio.
2.2. Los procesos de concesión son ejecutados por las municipalidades provinciales del cercado y son coordinados con
los órganos nacionales de promoción de la inversión, que ejercen labores de asesoramiento.
2.3. Proveer los servicios de saneamiento rural cuando éstos no puedan ser atendidos por las municipalidades distritales
o las de los centros poblados rurales, y coordinar con ellas para la realización de campañas de control de epidemias y
sanidad animal.
2.4. Difundir programas de saneamiento ambiental en coordinación con las municipalidades distritales y los organismos
regionales y nacionales pertinentes.
2.5. Gestionar la atención primaria de la salud, así como construir y equipar postas médicas, botiquines y puestos de
salud en los centros poblados que los necesiten, en coordinación con las municipalidades distritales, centros poblados y
los organismos regionales y nacionales pertinentes.
2.6. Realizar campañas de medicina preventiva, primeros auxilios, educación sanitaria y profilaxis local.

3. Funciones específicas exclusivas de las municipalidades distritales:

3.1. Proveer del servicio de limpieza pública determinando las áreas de acumulación de desechos, rellenos sanitarios y el
aprovechamiento industrial de desperdicios.
3.2. Regular y controlar el aseo, higiene y salubridad en los establecimientos comerciales, industriales, viviendas,
escuelas, piscinas, playas y otros lugares públicos locales.
3.3. Instalar y mantener servicios higiénicos y baños de uso público.
3.4. Fiscalizar y realizar labores de control respecto de la emisión de humos, gases, ruidos y demás elementos
contaminantes de la atmósfera y el ambiente.
3.5. Expedir carnés de sanidad.

4. Funciones específicas compartidas de las municipalidades distritales:

4.1 Administrar y reglamentar, directamente o por concesión el servicio de agua potable, alcantarillado y desagüe,
limpieza pública y tratamiento de residuos sólidos, cuando esté en capacidad de hacerlo.
4.2. Proveer los servicios de saneamiento rural y coordinar con las municipalidades de centros poblados para la
realización de campañas de control de epidemias y control de sanidad animal.
4.3. Difundir programas de saneamiento ambiental en coordinación con las municipalidades provinciales y los
organismos regionales y nacionales pertinentes.
4.4. Gestionar la atención primaria de salud, así como construir y equipar postas médicas, botiquines y puestos de salud
en los centros poblados que los necesiten, en coordinación con las municipalidades provinciales, los centros poblados y
los organismos regionales y nacionales pertinentes.
4.5. Realizar campañas locales sobre medicina preventiva, primeros auxilios, educación sanitaria y profilaxis.
Este artículo es concordante con el numeral 2.1 del art. 73 de la LOM, y desarrolla la competencia establecida en el art.
195, inc. 8 de la Constitución, que prescribe que los gobiernos locales son competentes para: “Desarrollar y regular
actividades y/o servicios en materia de educación, salud, vivienda, saneamiento, medio ambiente, sustentabilidad de los
recursos naturales, transporte colectivo, circulación y tránsito, turismo, conservación de monumentos arqueológicos e
históricos, cultura, recreación y de deporte, conforme a ley”.
Por su parte, la Ley de Bases de Descentralización, en su art. 43 señala que la salud pública, la atención y administración
de programas sociales y la gestión de residuos sólidos, son competencias compartidas, es decir, es aquella en la que
intervención dos o más niveles de gobierno.
Este artículo de la LOM establece las funciones específicas y responsabilidades de cada nivel provincial y distrital. Otros
dispositivos de la LOM que tienen que ver con este tema son: decomiso de productos que atentan contra la salud (art.
48); clausura de establecimiento o servicios que atentan contra la salud (arts. 49 y 78); funciones en materia de salud de
la Municipalidad Metropolitana de Lima como régimen especial (art. 161, inc. 5).

La competencia de los gobiernos locales en salud Según la Organización Mundial de la Salud, se entiende por salud al
estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de enfermedad o dolencia.
Para la ejecución de esta competencia por parte de los gobiernos locales, debe tenerse en cuenta la Ley Nº 26842 - Ley
General de Salud, cuyas líneas maestras en cuanto al manejo de la salud pública, son las siguientes:

- La autoridad de salud se organiza y se ejerce a nivel central, desconcentrado y descentralizado. La autoridad de


salud la ejercen los órganos del Poder Ejecutivo y los órganos descentralizados de gobierno, de conformidad con las
atribuciones que les confieren sus respectivas leyes de organización y funciones, leyes orgánicas o leyes especiales en el
campo de la salud.
- La autoridad de salud de nivel nacional es el órgano especializado del Poder Ejecutivo que tiene a su cargo la
dirección y gestión de la política nacional de salud y actúa como la máxima autoridad normativa en materia de salud.
- En aplicación y cumplimiento de las normas de salud que dicta la autoridad de salud de nivel nacional, los órganos
desconcentrados o descentralizados quedan facultados para disponer, dentro de su ámbito, medidas de prevención y
control de carácter general o particular en las materias de su competencia.
- El ejercicio descentralizado de competencias de control en materias de salud, no supone, en ningún caso, el ejercicio
de competencia normativa, salvo estipulación en contrario de la propia ley. La delegación de competencias de control en
materia de salud, no supone, en ningún caso, la delegación de facultades normativas.
- No se podrá dictar normas que reglamentan leyes o que tengan jerarquía equivalente, que incidan en materia de
salud, sin el refrendo de la autoridad de salud de nivel nacional.
- Quedan sujetas a supervigilancia de la autoridad de salud de nivel nacional, las entidades públicas que por sus leyes
de organización y funciones, leyes orgánicas o leyes especiales están facultadas para controlar aspectos sanitarios y
ambientales. Asimismo, quedan sujetos a supervigilancia de la autoridad de salud de nivel nacional los colegios
profesionales de las ciencias de la salud, únicamente en lo que se refiere a la vigilancia que estos realizan sobre las
actividades que sus asociados efectúan en el ejercicio su profesión.
- En el uso de las atribuciones que le confieren la Ley General de Salud, las leyes orgánicas, las leyes de organización y
funciones, otras leyes especiales y sus reglamentos, la autoridad de salud está facultada a disponer acciones de
orientación y educación, practicar inspecciones en cualquier bien mueble o inmueble, tomar muestras y proceder a las
pruebas correspondientes, recabar información y realizar las demás acciones que considere pertinentes para el
cumplimiento de sus funciones, así como, de ser el caso, aplicar medidas de seguridad y sanciones.
- La autoridad de salud podrá solicitar el auxilio de la fuerza pública para asegurar el cumplimiento de las disposiciones
y medidas que adopte en resguardo de la salud.

En consecuencia, en materia de salud, las municipalidades no ejercen competencia normativa, sus acciones se
enmarcan dentro de las normas nacionales y regionales sobre la materia, y están sujetas a la supervigilancia de la
autoridad nacional de salud. Por supuesto, que esta prohibición normativa, se refiere a que la municipalidad no puede
establecer política de salud o modificar las existentes, pero no le impide dictar normas para regular aquellas funciones
que le son propias, de acuerdo al presente artículo. Esta característica de la competencia en materia de salud, se percibe
claramente en la LOM cuando faculta a las municipalidades provinciales y distritales gestionar la atención primaria de
salud, así como construir y equipar postas médicas, botiquines y puestos de salud, en coordinación con los organismos
regionales y nacionales pertinentes.

Otra obligación especifica que la Ley General de Salud exige a los gobiernos locales, es la establecida en su art. 81,
que señala: “Las autoridades administrativas, municipales, militares y policiales, así como los particulares, están
obligados a prestar el apoyo requerido por la Autoridad de Salud para controlar la propagación de enfermedades
transmisibles en los lugares del territorio nacional en los que estas adquieran características epidémicas graves”.

Los tres ejes fundamentales, partiendo de las competencias y funciones establecidas en la LOM en materia de salud,
son:

1. Participación vecinal: por los arts. 10, 79 y 80 de la LOM, se reconoce la participación de los vecinos en el gobierno
local, a través de las Juntas de Vecinos como órganos de control y los Comités Comunales como órganos de consulta y
apoyo, siendo obligación del Municipio, promover la participación vecinal;

2. Salud: Los arts. 65, 66, 76 y 119 de la LOM establece que los gobiernos locales deben promover acciones de
saneamiento y medicina preventiva, construir postas médicas, botiquines y puestos de primeros auxilios, clausurar
locales que producen olores o humos perjudiciales para la salud;

3. Educación en salud: Los arts. 62 y 66 de la LOM demandan a los Municipios la obligación de planificar, ejecutar e
impulsar acciones para satisfacer las necesidades vitales de vivencia, salubridad y educación, encargándoles también
realizar programas de medicina preventiva, educación sanitaria y educación ambiental.

Servicios de saneamiento

Las municipalidades provinciales son responsables de la prestación de los servicios de saneamiento y en consecuencia,
les corresponde otorgar el derecho de explotación a las entidades prestadoras, de conformidad con las disposiciones
establecidas en la Ley General y su Reglamento; y los servicios de saneamiento deben ser prestados por entidades
públicas, privadas o mixtas, a quienes en adelante se les denominará “entidades prestadoras”, constituidas con el
exclusivo propósito de prestar los servicios de saneamiento, debiendo estas poseer patrimonio propio y gozar de
autonomía funcional y administrativa; señalan los arts. 5 y 6 de la Ley General. Por lo tanto, el ámbito geográfico mínimo
de una Entidad Prestadora de Servicios es el ámbito provincial, no pudiendo por tanto una municipalidad distrital crear
una Entidad Prestadora de Servicios u otorgar concesión en materia de prestación de servicios de saneamiento. Cuando
una o más municipalidades distritales deseen entregar en concesión los servicios de saneamiento a una EPS privada o
mixta, les corresponderá a aquellas otorgar el derecho de explotación, previa delegación de la municipalidad provincial
correspondiente.

Esta Ley establece también las competencias de cada uno de los niveles de gobierno, los cuales son:

1. Ente rector:

El Gobierno nacional, a través del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, es el ente rector del sector
saneamiento, correspondiéndole diseñar, normar y ejecutar la política nacional y las acciones del sector en materia de
servicios de saneamiento. Aprueba la regulación reglamentaria sectorial y el Plan Nacional de Saneamiento, asigna
recursos y los transfiere a las entidades prestadoras de servicios de saneamiento y, eventualmente, a los gobiernos
regionales y locales, a fin de que ejecuten proyectos de inversión en saneamiento. Está facultado para ejecutar
proyectos a través del Programa Nacional de Saneamiento Urbano y el Programa Nacional de Saneamiento Rural y para
promover asociaciones público-privadas en el sector, en el ámbito de su competencia.

2. Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (SUNASS):

Conforme a sus funciones propias como organismo regulador y a las competencias establecidas en el Texto Único
Ordenado del Reglamento de la Ley General de Servicios de Saneamiento, aprobado mediante Decreto Supremo Nº 023-
2005-VIVIENDA, la Sunass ejerce función normativa, reguladora, supervisora, fiscalizadora, sancionadora y de solución
de controversias respecto a la regulación tarifaria y calidad de la prestación de los servicios de saneamiento en el ámbito
de las entidades prestadoras de servicios de saneamiento.

3. Organismo Técnico de la Administración de los Servicios de Saneamiento (OTASS):

Es el encargado de cautelar la correcta ejecución de la política del Estado en materia de administración para la
prestación de los servicios de saneamiento de las entidades prestadoras de servicios de saneamiento.

4. Gobiernos regionales:

Apoyan técnica y financieramente a los gobiernos locales en la prestación de los servicios de saneamiento.

5. Gobiernos locales:

El proceso de planeación local es de competencia exclusiva de los gobiernos locales, de acuerdo con el artículo IX del
Título Preliminar de la LOM. En concordancia con ella, los gobiernos locales aprueban dentro de su jurisdicción los
planes de acondicionamiento territorial, planes de desarrollo urbano y rural y demás instrumentos referidos a la
organización del espacio físico y uso del suelo. Aprueban los planes de desarrollo municipal concertados y los
presupuestos participativos con carácter orientador de la inversión, para la adecuada asignación y ejecución de los
recursos municipales del desarrollo integral, sostenible y armónico de su circunscripción. Asimismo, los gobiernos
locales administran los bienes de dominio público adscritos a la prestación del servicio y son responsables por la
asignación de recursos para el financiamiento de inversiones en materia de infraestructura de saneamiento, a través de
su inclusión en los planes de desarrollo municipal concertados y el presupuesto participativo local, en concordancia con
las responsabilidades asignadas por la Ley Nº 26338 - Ley General de Servicios de Saneamiento, y la Ley Nº 27972 - Ley
Orgánica de Municipalidades.

Un caso específico resuelto por el TC

Con respecto a un relleno sanitario, el TC resolvió un conflicto surgido entre la Municipalidad Provincial de Arequipa y la
Municipalidad Distrital de Yura, donde se evidencia, en este tema, los límites del ejercicio de una competencia provincial
con respecto a la distrital. En la STC Exp. Nº 0027-2007-PI/TC, se dilucida el caso siguiente: el alcalde de la Municipalidad
Provincial de Arequipa plantea la demanda de inconstitucionalidad contra la Ordenanza Municipal Nº 005-2007-MDY
emitida por la Municipalidad Distrital de Yura, que prohíbe la instalación de un Relleno Sanitario en el sector
denominado Quebrada Honda de Pampa Ispampa, jurisdicción del distrito de Yura, manifestando que los Gobiernos
Locales gozan de autonomía administrativa, económica y política en los asuntos de su competencia y dentro del ámbito
de su territorio, y que la Ley Orgánica de Municipalidades otorga competencia exclusiva a las Municipalidades
Provinciales para aprobar el Plan de Acondicionamiento Territorial de nivel provincial que identifique las áreas urbanas y
de expansión urbana, así como las áreas de protección o de seguridad por riesgos naturales, las áreas agrícolas y las
áreas de conservación ambiental; igualmente la organización del espacio físico y determinar el uso de los suelos, por lo
que la norma cuestionada afecta dicha competencia exclusiva, debiendo tenerse presente, además, que dicho terreno
es de propiedad de la Municipalidad Provincial de Arequipa. El alcalde de la Municipalidad Distrital de Yura contesta la
demanda señalando que la referida ordenanza no pretende discutir la competencia de la municipalidad demandante,
sino únicamente proteger las condiciones del medio ambiente dentro de su jurisdicción, así como ejercer su facultad de
determinar, siempre dentro de su jurisdicción, las áreas de acumulación de desechos, rellenos sanitarios y el
aprovechamiento industrial de desperdicios, conforme lo establece la Ley Orgánica de Municipalidades en lo referido a
las funciones exclusivas de las municipalidades distritales en materia de saneamiento, salubridad y salud. De igual
manera, expresa que pese a sus requerimientos, la demandante no ha sido capaz de garantizar que el relleno sanitario
que se pretende instalar no deteriorará gravemente el medio ambiente, así como no ha cumplido con efectuar las
coordinaciones respectivas con el Consejo Nacional de Ambiente o el sector salud, tal como se encuentra establecido en
la Ley General de Residuos Sólidos.

El TC resuelve como sigue:


“15. Por lo tanto, si bien el artículo 80.3.3.1 de la Ley Orgánica de Municipalidades otorga facultad a las municipalidades
distritales para determinar las áreas que han de ser utilizadas como relleno sanitario, dicha atribución debe ejercerla de
conformidad con el artículo 79.1.1.1 de la mencionada ley, la cual otorga competencia exclusiva a las municipalidades
provinciales para aprobar el Plan de Acondicionamiento Territorial. Consecuentemente, queda claro que las
municipalidades distritales pueden determinar las áreas de relleno sanitario dentro de su jurisdicción, pero deben
hacerlo de acuerdo a lo aprobado en el Plan de Acondicionamiento Territorial que desarrollan las municipalidades
provinciales.

16. Si bien es cierto, a fojas 88 corre el Certificado de Zonificación y Vías Nº 049-2008-MPA/GDU/SGAHC, mediante el
cual el Subgerente de Asentamientos Humanos de la Municipalidad Provincial de Arequipa certifica que dicha área se
encuentra zonificada como Zona de Relleno Sanitario Sector Norte (UE-C) de acuerdo al Plan de Desarrollo Urbano de
Arequipa aprobado mediante Ordenanza Municipal Nº 160 del año 2002 y su adecuación al Reglamento de
Acondicionamiento Territorial y Desarrollo Urbano, aprobado por Ordenanza Municipal Nº 495-2007-MPA; sin embargo,
la Municipalidad Distrital de Yura ha incorporado a los autos una copia simple de la Resolución Municipal Nº 489-R, del
26 de mayo de 1989, expedida por la Municipalidad Provincial de Arequipa, cuyo artículo 1 declara la “Planificación
Municipal denominada ‘Pampa Islampa’, para el establecimiento de Asentamientos Poblacionales con fines de Vivienda
Taller y Zona Reglamentaria Especial”; mientras que su artículo 4 enumera los asentamientos humanos comprendidos
en dicha planificación municipal.

18. Siendo ello así, el Tribunal Constitucional estima que la norma objeto de control no trasgrede la autonomía de la
municipalidad provincial demandante por cuanto la prohibición de instalación de un Relleno Sanitario, en el sector
denominado Quebrada Honda de Pampa Ispampa, decretada por la ordenanza municipal impugnada, obedece a la
salvaguarda del derecho a un medio ambiente equilibrado de los moradores de los asentamientos humanos de los
alrededores, los que incluso han sido reconocidos como tales en la referida Resolución Municipal Nº 489-R expedida por
la propia comuna provincial”.

De lo que se desprende que el ejercicio de una competencia provincial no es absoluta sino que tiene que ejercerse con
sujeción a otros dispositivos, como en este caso la protección del medio ambiente, o con sujeción a sus propias normas,
caso de la resolución que reconocía a dicho sector como destinado para fines de vivienda.

ARTÍCULO 81.- TRÁNSITO, VIALIDAD Y TRANSPORTE PÚBLICO

Las municipalidades, en materia de tránsito, vialidad y transporte público, ejercen las siguientes funciones:

1. Funciones específicas exclusivas de las municipalidades provinciales:

1.1. Normar, regular y planificar el transporte terrestre, fluvial y lacustre a nivel provincial.
1.2. Normar y regular el servicio público de transporte terrestre urbano e interurbano de su jurisdicción, de conformidad
con las leyes y reglamentos nacionales sobre la materia.
1.3. Normar, regular, organizar y mantener los sistemas de señalización y semáforos y regular el tránsito urbano de
peatones y vehículos.
1.4. Normar y regular el transporte público y otorgar las correspondientes licencias o concesiones de rutas para el
transporte de pasajeros, así como regular el transporte de carga e identificar las vías y rutas establecidas para tal objeto.
1.5. Promover la construcción de terminales terrestres y regular su funcionamiento.
1.6. Normar, regular y controlar la circulación de vehículos menores motorizados o no motorizados, tales como taxis,
mototaxis, triciclos, y otros de similar naturaleza.
1.7. Otorgar autorizaciones y concesiones para la prestación del servicio público de transporte provincial de personas en
su jurisdicción.
1.8. Otorgar certificado de compatibilidad de uso, licencia de construcción, certificado de conformidad de obra, licencia
de funcionamiento y certificado de habilitación técnica a los terminales terrestres y estaciones de ruta del servicio de
transporte provincial de personas de su competencia, según corresponda.
1.9. Supervisar el servicio público de transporte urbano de su jurisdicción, mediante la supervisión, detección de
infracciones, imposición de sanciones y ejecución de ellas por incumplimiento de las normas o disposiciones que regulan
dicho servicio, con el apoyo de la Policía Nacional asignada al control de tránsito.
1.10. Instalar, mantener y renovar los sistemas de señalización de tránsito en su jurisdicción, de conformidad con el
reglamento nacional respectivo.

2. Funciones específicas compartidas de las municipalidades provinciales:

2.1. Controlar, con el apoyo de la Policía Nacional, el cumplimiento de las normas de tránsito y las de transporte
colectivo; sin perjuicio de las funciones sectoriales de nivel nacional que se deriven de esta competencia compartida,
conforme a la Ley de Bases de la Descentralización.
2.2. Organizar la señalización y nomenclatura de vías, en coordinación con las municipalidades distritales.
2.3. Ejercer la función de supervisión del servicio público de transporte provincial de su competencia, contando con el
apoyo de la Policía Nacional asignada al control del tránsito.
2.4. Instalar, mantener y renovar los sistemas de señalización de tránsito en su jurisdicción y establecer la nomenclatura
de vías, en coordinación con las municipalidades distritales.

3. Funciones específicas compartidas de las municipalidades distritales:

3.1. Establecer la nomenclatura y señalización de calles y vías de acuerdo con la regulación provincial y en coordinación
con la municipalidad provincial.
3.2. Otorgar licencias para la circulación de vehículos menores y demás, de acuerdo con lo establecido en la regulación
provincial.

Este artículo es concordante con el art. 73, numeral 2.2. y desarrolla la competencia municipal establecida en el art. 195,
inc. 8 de la Constitución Política del Estado, que señala que los gobiernos locales son competentes para desarrollar y
regular actividades y servicios en materia de transporte colectivo, circulación y tránsito. Competencia que la Ley de
Bases de la Descentralización, lo califica como compartida en su art. 43.
Otros artículos de la LOM sobre esta materia: ejecutar directamente o concesionar la ejecución de las obras de
infraestructura urbana o rural de carácter multidistrital que sean indispensables para el transporte (art. 79, numerales
2.1 y 4.1.); disponer la nomenclatura de avenidas, jirones, calles, pasajes, parques, plazas, y la numeración predial (art.
79, numeral 3.4); facultad del concejo metropolitano para planes y programas en transporte (art. 157, numeral 12);
regular el funcionamiento del transporte público, la circulación y el tránsito metropolitano (art. 157, numeral 21);
competencia de la Municipalidad Metropolitana de Lima en materia de transportes (art. 161, numeral 7); mantener el
sistema metropolitano de señalización del tránsito (art. 161, numeral 5).

Tránsito y vialidad

Se entiende por tránsito el conjunto de desplazamiento de personas, vehículos y animales por las vías terrestres de uso
público (circulación). Por vialidad, el conjunto de servicios pertenecientes a las vías. Vía, es la carretera, urbana o camino
rural abierto a la circulación pública de vehículos y/o peatones y también de animales. Vía de acceso restringido, donde
los vehículos y las personas solo tienen la oportunidad a ingresar o salir de ella, por los lugares y bajo las condiciones
estipuladas por la autoridad competente. Vía privada, es la destinada al uso particular. Vía pública, es la de uso público,
sobre la cual la autoridad competente impone restricciones y otorga concesiones, permisos y autorizaciones. Vía urbana,
aquella dentro del ámbito urbano, destinada a la circulación de vehículos y peatones y eventualmente de animales
(calles). Por transporte, actividad por la cual se realiza el traslado de personas o mercancías por vía terrestre, fluvial y
lacustre.
Para la ejecución de esta competencia debe tenerse en cuenta la Ley General de Transporte y Tránsito - Ley Nº 27181,
que establece como objetivo central en esta materia que la acción estatal se orienta a la satisfacción de las necesidades
de los usuarios y al resguardo de sus condiciones de seguridad y salud, así como a la protección del ambiente y la
comunidad en su conjunto.
Competencias de las municipalidades provinciales

Las municipalidades provinciales, en su respectiva jurisdicción y de conformidad con las leyes y los reglamentos
nacionales, tienen las siguientes competencias en materia de transporte y tránsito terrestre:

Competencias normativas

- Emitir normas y disposiciones, así como realizar los actos necesarios para la aplicación de los reglamentos nacionales
dentro de su respectivo ámbito territorial.
- Jerarquizar la red vial de su jurisdicción y administrar los procesos que de ellos deriven, en concordancia con los
reglamentos nacionales correspondientes.
- Declarar, en el ámbito de su jurisdicción, las áreas o vías saturadas por concepto de congestión vehicular o
contaminación, en el marco de los criterios que determine el reglamento nacional correspondiente. Competencias de
gestión
- Implementar y administrar los registros que los reglamentos nacionales establezcan.
- Dar en concesión, en el ámbito de su jurisdicción, los servicios de transporte terrestre en áreas o vías que declaren
saturadas; así como otorgar permisos o autorizaciones en áreas o vías no saturadas, de conformidad con los
reglamentos nacionales respectivos.
- Dar en concesión la infraestructura vial nueva y existente, dentro de su jurisdicción, en el marco de lo establecido por
la normativa sobre la materia.
- Regular las tasas por el otorgamiento de permisos o autorizaciones de uso de infraestructura en áreas o vías no
saturadas, de acuerdo a las normas previstas en el reglamento nacional respectivo.
- Cobrar a las personas naturales o jurídicas, públicas o privadas, que con motivo de la realización de obras interfieran la
normal operación del tránsito, según lo dispuesto en el correspondiente reglamento nacional.
- Recaudar y administrar los recursos provenientes del pago de multas por infracciones de tránsito.
- Instalar, mantener y renovar los sistemas de señalización de tránsito en su jurisdicción, conforme al reglamento
nacional respectivo.
- Construir, rehabilitar, mantener o mejorar la infraestructura vial que se encuentre bajo su jurisdicción.

Competencias de fiscalización

- Supervisar, detectar infracciones e imponer sanciones por incumplimiento de los dispositivos legales vinculados al
transporte y al tránsito terrestre.
- Fiscalizar las concesiones de infraestructura vial que otorgue la municipalidad provincial en su respectiva jurisdicción,
en concordancia con los reglamentos nacionales.

Competencias de las municipalidades distritales

Las Municipalidades Distritales ejercen las siguientes competencias:

- En materia de transporte: en general, las que los reglamentos nacionales y las normas emitidas por la Municipalidad
Provincial respectiva les señalen y en particular, la regulación del transporte menor (mototaxis y similares).
- En materia de tránsito: la gestión y fiscalización, dentro de su jurisdicción, en concordancia con las disposiciones que
emita la municipalidad provincial respectiva y los reglamentos nacionales pertinentes.
- En materia de vialidad: la instalación, mantenimiento y renovación de los sistemas de señalización de tránsito en su
jurisdicción, conforme al reglamento nacional respectivo. Asimismo, son competentes para construir, rehabilitar,
mantener o mejorar la infraestructura vial que se encuentre bajo su jurisdicción.
ARTÍCULO 82.- EDUCACIÓN, CULTURA, DEPORTES Y RECREACIÓN

Las municipalidades, en materia de educación, cultura, deportes y recreación, tienen como competencias y funciones
específicas compartidas con el gobierno nacional y el regional las siguientes:

1. Promover el desarrollo humano sostenible en el nivel local, propiciando el desarrollo de comunidades educadoras.
2. Diseñar, ejecutar y evaluar el proyecto educativo de su jurisdicción, en coordinación con la Dirección Regional de
Educación y las Unidades de Gestión Educativas, según corresponda, contribuyendo en la política educativa regional y
nacional con un enfoque y acción intersectorial.
3. Promover la diversificación curricular, incorporando contenidos significativos de su realidad sociocultural, económica,
productiva y ecológica.
4. Monitorear la gestión pedagógica y administrativa de las instituciones educativas bajo su jurisdicción, en coordinación
con la Dirección Regional de Educación y las Unidades de Gestión Educativas, según corresponda, fortaleciendo su
autonomía institucional.
5. Construir, equipar y mantener la infraestructura de los locales educativos de su jurisdicción de acuerdo al Plan de
Desarrollo Regional concertado y al presupuesto que se le asigne.
6. Apoyar la creación de redes educativas como expresión de participación y cooperación entre los centros y los
programas educativos de su jurisdicción. Para ello se harán alianzas estratégicas con instituciones especializadas de la
comunidad.
7. Impulsar y organizar el Consejo Participativo Local de Educación, a fin de generar acuerdos concertados y promover la
vigilancia y el control ciudadanos.
8. Apoyar la incorporación y el desarrollo de nuevas tecnologías para el mejoramiento del sistema educativo. Este
proceso se realiza para optimizar la relación con otros sectores.
9. Promover, coordinar, ejecutar y evaluar, con los gobiernos regionales, los programas de alfabetización en el marco de
las políticas y programas nacionales, de acuerdo con las características socioculturales y lingüísticas de cada localidad.
10. Fortalecer el espíritu solidario y el trabajo colectivo, orientado hacia el desarrollo de la convivencia social, armoniosa
y productiva, a la prevención de desastres naturales y a la seguridad ciudadana.

A diferencia de las demás competencias y funciones en el nivel municipal, la relativa a la educación, cultura, deportes y
recreación es una competencia compartida entre los distintos niveles de gobierno (nacional, regional y local) y por lo
mismo no existen funciones exclusivas de las municipalidades provinciales o distritales.
La Constitución Política del Estado, en su art. 13 centra la política educativa del Estado peruano, en los términos
siguientes: “La educación tiene como finalidad el desarrollo integral de la persona humana. El Estado reconoce y
garantiza la libertad de enseñanza. Los padres de familia tienen el deber de educar a sus hijos y el derecho de escoger
los centros de educación y de participar en el proceso educativo”. Este artículo ha sido criticado por Enrique Bernales,
por su sustancial diferencia con lo regulado en la Constitución de 1979 en materia educativa. “De inicio, se ha cercenado
la primera parte del art. 21 de la mencionada Carta, que decía: ‘El derecho a la educación y a la cultura es inherente a la
persona humana’. La educación como inherente a la persona humana e instrumento que sirve para el desarrollo integral
de la personalidad, es una conquista histórica de la humanidad que corresponde a la sustanciación de la libertad, la
igualdad y la racionalidad del ser humano. Este reconocimiento establece un principio que consagra en forma meridiana
lo que es debido al hombre por razón de su naturaleza libre, racional, espiritual y como todo ello se expresa tanto en lo
individual como en lo social. Además, el derecho a la educación es un principio reconocido por la legislación
internacional sobre la materia, de la que forma parte el Perú. Al parecer ninguno de estos argumentos fueron tomados
en cuenta por quienes redactaron la nueva Constitución”. Por lo tanto, este debería ser el espíritu con que se aborden
todas las políticas y acciones relacionadas a la educación en el país.

Otros artículos de la Constitución sobre la materia son: educación para la vida y el trabajo, fomento de la solidaridad,
promoción del desarrollo científico y tecnológico, formación ética y cívica, la enseñanza con sujeción a los principios
constitucionales, la educación religiosa y la colaboración de los medios de comunicación social (art. 14); derechos del
profesorado, derechos a conducir instituciones educativas por personas naturales o jurídicas (art. 15); naturaleza
descentralizada del sistema como régimen educativo, política educativa, supervisión del Estado de los planes de estudio
y la organización de los centros educativos, supervisión de la calidad de la educación, democratización de la educación
para que todos tengan acceso, prioridad presupuestal (art. 16); obligatoriedad de la educación inicial, primaria y
secundaria, gratuidad de la educación, subvención estatal a la educación privada, promoción de la creación de centros
educativos donde la población los requiera, erradicación del analfabetismo, educación bilingüe e intercultural (art. 17);
educación universitaria (art. 18); régimen tributario para la educación, donaciones y becas (art. 19); protección del
patrimonio cultural (art. 21); y en lo que respecta a las municipalidades, el art. 195, inc. 8 (modificado por la Ley Nº
26780) señala que les compete desarrollar y regular actividades y/o servicios en materia de educación, conservación de
monumentos arqueológicos e históricos, cultura, recreación y deporte, conforme a ley.
Por su parte, la Ley Nº 27783 - Ley de Bases de la Descentralización, precisa en su art. 43 que son competencias
compartidas de las municipalidades la educación, participación en la gestión educativa conforme lo determine la ley de
la materia y cultura, recreación y deportes.

En el marco del proceso de descentralización, iniciada por la Ley Nº 26780, modificatoria de la Constitución Política del
Estado, y la Ley Nº 27783 - Ley de Bases de la Descentralización, se plantea a la educación como un servicio público, que
debe ser gestionada con la participación de los distintos niveles de gobierno; y en esta óptica se inscriben las
disposiciones de este artículo en materia educativa en cuanto al rol que deben cumplir los gobiernos locales.

La Ley General de Educación

Las materias en educación, cultura y deportes, es eminentemente una competencia compartida entre los distintos
niveles de gobierno (nacional, regional y local). La Ley Nº 28044 - Ley General de Educación, establece algunas
disposiciones con respecto al rol de los gobiernos locales:

1) El Estado promueve la universalización, calidad y equidad de la educación. Sus funciones son: a) ejercer un rol
normativo, promotor, compensador, concertador, articulador, garante, planificador, regulador y financiador de la
educación nacional; b) proveer y administrar servicios educativos públicos gratuitos y de calidad para garantizar el
acceso universal a la educación básica y una oferta educativa equitativa en todo el sistema; c) promover el desarrollo
científico y tecnológico en las instituciones educativas de todo el país y la incorporación de nuevas tecnologías en el
proceso educativo; d) reconocer e incentivar la innovación e investigación que realizan las instituciones públicas y
privadas; e) garantizar iguales oportunidades de acceso y permanencia en el sistema educativo que favorezcan el
aprendizaje oportuno, efectivo y pertinente; f) orientar y articular los aprendizajes generados dentro y fuera de las
instituciones educativas, incluyendo la recreación, la educación física, el deporte y la prevención de situaciones de riesgo
de los estudiantes; g) valorar el aporte de las instituciones privadas que brindan servicios educativos de calidad; h)
ejercer y promover un proceso permanente de supervisión y evaluación de la calidad y equidad en la educación; i)
informar y rendir cuentas, ante los usuarios y la población, respecto a la situación y el cumplimiento de los objetivos y
metas de la educación; j) supervisar y evaluar las acciones de educación, cultura y recreación, a nivel nacional, regional y
local; k) garantizar el acceso de las personas con discapacidad a una educación inclusiva de calidad, en todas las etapas,
niveles y modalidades del sistema (art. 21).

2) La sociedad tiene el derecho y el deber de contribuir a la calidad y equidad de la educación. Ejerce plenamente este
derecho y se convierte en sociedad educadora al desarrollar la cultura y los valores democráticos. A la sociedad, le
corresponde: a) participar en la definición y desarrollo de políticas educativas en el ámbito nacional, regional y local; b)
colaborar en la prestación del servicio educativo y en el desarrollo de programas y proyectos que contribuyan al logro de
los fines de la educación peruana; c) promover la creación de un entorno social favorable al aprendizaje y cuidado de sus
miembros, desarrollando una cultura de responsabilidad y vigilancia ciudadana que garantice la calidad educativa y la
ética pública (art. 22).

3) En materia educativa, el Ministerio de Educación, la Dirección Regional de Educación y las Unidades de Gestión
Educativa Local, coordinan sus acciones con las municipalidades de acuerdo a lo establecido en su ley orgánica y en la
presente ley. En este marco, las municipalidades apoyan la prestación de servicios de las instituciones educativas y
contribuyen al desarrollo educativo en el ámbito de su jurisdicción (art. 82).

4) Son finalidades de la Unidad de Gestión Educativa Local:


a) fortalecer las capacidades de gestión pedagógica y administrativa de las instituciones educativas para lograr su
autonomía;
b) impulsar la cohesión social; articular acciones entre las instituciones públicas y las privadas alrededor del Proyecto
Educativo Local; contribuir a generar un ambiente favorable para la formación integral de las personas, el desarrollo de
capacidades locales y propiciar la organización de comunidades educadoras;
c) canalizar el aporte de los gobiernos municipales, las instituciones de educación superior, las universidades públicas y
privadas y otras entidades especializadas;
d) asumir y adecuar a su realidad las políticas educativas y pedagógicas establecidas por el Ministerio de Educación y por
la entidad correspondiente del gobierno regional (art. 73).

5) El Consejo Participativo Local de Educación es un órgano de participación, concertación y vigilancia educativa


durante la elaboración, seguimiento y evaluación del Proyecto Educativo Local en el ámbito de su jurisdicción. Está
integrado por el Director de la Unidad de Gestión Educativa Local y los representantes de los estamentos que conforman
la comunidad educativa, de los sectores económicos productivos, de las municipalidades y de las instituciones públicas y
privadas más significativas. Participa anualmente en la elaboración y rendición de cuentas del presupuesto de la Unidad
de Gestión Educativa Local (art. 75).

Todas estas funciones generales del Estado se recogen, en términos generales, entre las funciones de los gobiernos
locales en la LOM, lo que ha merecido la crítica por parte de especialista, en la medida que no están claramente
delimitadas las acciones de cada nivel de gobierno.

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