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Curso:

EL SEGURO DE Formación y
Orientación

VIDA Docente:
Dra. De la cuba
Arestegui María
Elena

Los seguros no son obligatorios, pero siempre pueden suponer un alivio para aquellos Alumnos:
que los contraten, e incluso una ayuda importante ante cualquier imprevisto
Bernuy Estrada,
Selene
Flores Rojas, Aldair
Gonzales Taipe,
Madeleine
Montenegro
Vassallo, Alejandra
Rivera Pacaya,
Lizbeth

Ciclo:
VI – Mañana
C-103
El Seguro de Vida
El seguro de vida es una tipología de seguro personal que cubre el riesgo de muerte
del asegurado (en caso de fallecimiento), o su supervivencia al vencimiento del
mismo (vida).
Tiene como objetivo poder garantizar la seguridad monetaria de aquellas personas
que dependen directamente en la parcela económica del asegurado, en caso de que
el mismo fallezca.
En esta clase de seguros, es importante determinar quién será el asegurado (de
cuya vida depende el pago), el tomador (aquel que paga la prima y suscribe el
seguro), así como el beneficiario, que es la persona que recibe la indemnización
desembolsada por la compañía aseguradora.
El tomador de un seguro que tenga una duración mayor al medio año (seis meses),
podrá resolverlo en un plazo de quince días contados desde el momento en que el
asegurador deposite la póliza.
La pertinente resolución habrá de efectuarse por escrito, disminuyendo la cobertura
del riesgo desde esa fecha por parte del asegurador, y estando forzado a volver a
pagar las primas que se hubiesen satisfecho hasta tal momento.
Por su parte, el tomador está autorizado para designar los beneficiarios sin
necesidad de consentimiento alguno por parte del asegurador, teniendo la
oportunidad de revocarlos en cualquier instante. Si esta designación se ejecuta a
favor de varios, la prestación habrá de repartirse en partes equitativas, idénticas.
Un seguro de vida puede resultar una buena herramienta para añadir tranquilidad a
nuestra vida cotidiana. Este tipo de seguros no son obligatorios, pero siempre
pueden suponer un alivio para aquellos que los contraten, e incluso una ayuda
importante ante cualquier imprevisto.

Contar con un seguro de vida que mantenga protegidos a los nuestros ante nuestro
fallecimiento, o a nosotros mismos si tenemos algún accidente grave que nos
provoque invalidez o el diagnóstico de alguna enfermedad grave, en el caso de
algunos seguros, puede marcar la diferencia en un futuro.
Lo más recomendable es contratar un seguro de vida adecuado a nosotros y nuestro
presupuesto, pero sobre todo a nuestro estilo de vida y expectativas de futuro.

Existen seguros de vida económicos que pueden adaptarse a cada tipo de


economía. Por ejemplo, puede pagarse un seguro en forma de una única prima o
hacerlo de forma periódica y en menores cantidades. Un seguro más barato siempre
va a cubrir un menor número de supuestos, pero aun así podemos encontrar
seguros de vida que se ajusten a nuestro presupuesto y continúen ofreciendo unas
coberturas interesantes. De todas formas, también puede resultar interesante saber
que cuanto más joven sea el asegurado, mejores condiciones a un menor precio
podrá obtener (aunque el público joven sea por lo general el más reticente a
contratar un seguro de vida).
Algunos seguros cubren más allá del fallecimiento. Si contratamos un tipo de seguro
de vida de mayor cobertura, podremos beneficiarnos de él en caso de sufrir algún
accidente o enfermedad. Estos seguros se comprometen a cubrir económicamente
al asegurado en caso de que quedemos con invalidez absoluta o permanente o se
nos diagnostique alguna enfermedad grave. Dado que estas dos situaciones nos
impedirían continuar con nuestro trabajo, asegurar un tipo de ingreso extra siempre
va a aportar tranquilidad y sustento para nosotros y los nuestros.
Son una buena forma de asegurar el futuro de los hijos. Cuando uno de los
progenitores falta en la familia, los ingresos económicos de ésta pueden descender
mucho, sobre todo si los nuestros son los principales. En caso de fallecimiento, que
nuestros hijos puedan seguir teniendo una ayuda económica que garantice sus
estudios y futuro es una de las garantías más importantes con las que podemos
contar.
Las personas dependientes que estén a nuestro cargo también pueden beneficiarse
de ellos. Si vivimos con un familiar dependiente de nosotros, contratando un seguro
de vida estaremos garantizando también su seguridad y bienestar en el caso de que
nosotros faltemos. Es muy probable que un solo sueldo por ejemplo, el de nuestra
pareja, no sea suficiente para mantener el nivel de vida al que la familia está
acostumbrada, y con un seguro evitaremos que les falte de nada.
Suponen una garantía a la hora de acabar con deudas pendientes. Siendo el
caso más habitual el pago de la hipoteca, es posible que tras nuestro fallecimiento o
imposibilidad para continuar trabajando aún no hayamos acabado de saldar todas
nuestras deudas, siendo en este caso lo más habitual una hipoteca pendiente.
Continuar recibiendo ingresos por parte de la aseguradora permitirá a nuestros
familiares destinar el dinero a este tipo de pagos y olvidarse de ellos definitivamente.
De esta forma, podrán destinar sus propios sueldos de forma íntegra al bienestar de
la familia, sin que exista la posibilidad de que pagos como la hipoteca terminen por
asfixiarlos.
Para cualquiera que tenga una familia que dependa al menos en un pequeño
porcentaje de sus ingresos y por tanto, de su trabajo, contratar un seguro de vida
puede suponer una forma de estar tranquilo ante el futuro de su familia en caso de
fallecimiento o pérdida de la capacidad de trabajar por un accidente o enfermedad.
Nuestra vida y la de los nuestros vales mucho como para dejarla completamente al
azar.
¿Por qué contratar un seguro de vida?
Aunque es preferible no pensar en que algo malo pueda suceder, las desgracias
ocurren, y además en el momento menos pensado. Sin llegar a caer en el
pesimismo, siempre es conveniente estar prevenidos para lo que pueda ocurrir a lo
largo de la vida.
Sobre todo, es preciso contar con un respaldo económico que haga más llevaderos
los momentos más difíciles que se presenten, como puede ser la muerte de uno de
los miembros y con ella producirse una reducción significativa del nivel de ingresos
de la familia. Aunque el duelo por la pérdida de un ser querido no se puede pagar
con dinero, lo cierto es que los beneficios que ofrece un seguro de vida evitarán que
se añadan más problemas a esta situación tan dura.
Lejos de lo que pueda parecer, este tipo de pólizas no están pensadas únicamente
para las familias, sino que las personas que están solas también pueden
contratarlas, ya que un seguro de vida ofrece las garantías necesarias para cubrir
una situación de invalidez o dependencia como consecuencia de una enfermedad o
accidente. Cada persona o unidad familiar puede acceder a un tipo de póliza
diferente en función de sus necesidades y previsiones económicas.
Beneficios de un seguro de vida
Como hemos comentado, el beneficiario o beneficiarios de un seguro de vida, así
como el propio asegurado, reciben una indemnización por parte de la compañía
aseguradora según el caso.
El capital que perciben los beneficiarios en caso de muerte del asegurado está libre
de embargos. Esto significa que, aunque se rechacen las deudas que tuviera el
fallecido al recibir la herencia, la indemnización del seguro de vida se recibe
íntegra.
El capital que los familiares cobran por el fallecimiento del asegurado no está
sometido al Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones (ISD), así como tampoco al
IRPF.
Cuando se trata de un seguro de vida de amortización de hipoteca, a la hora de
presentar la declaración de la renta, es posible deducir el gasto de la póliza en el
Rendimiento del Capital Inmobiliario.
Los trabajadores autónomos se pueden beneficiar de una deducción de 500 euros
de las primas que hayan abonado por su seguro de vida.
Otra de las ventajas que ofrecen los seguros de vida es la posibilidad de
modificación de la póliza a lo largo del tiempo. De esta forma, podemos adaptar el
seguro a las situaciones que se vayan desarrollando, bien modificando sus
coberturas o el listado de beneficiarios.
Un seguro de vida no sólo protege al núcleo familiar, sino que también ampara al
tomador. El capital puede servir para cubrir los gastos necesarios para hacer frente a
cualquiera de las circunstancias que se contemplen en la póliza y que hayamos
sufrido. Aunque por parte del Estado se recibe una cuantía determinada en los casos
de dependencia e invalidez, por ejemplo, en la mayoría de los casos no es suficiente
para cubrir las consecuencias de la situación.
Los seguros de vida ofrecen tranquilidad a aquellas personas que los contratan,
sobre todo si tienen una hipoteca, niños pequeños a su cargo, un trabajo que
conlleve cierto peligro, etc. Pase lo que pase, el dinero no será una preocupación y
permitirá llevar una vida mucho más holgada.
Gracias a los diferentes tipos de pólizas que existen en el mercado, el asegurado
puede elegir la forma de pago que más le convenga (mensual, trimestral, semestral
o anual).
Aunque los seguros de vida no son obligatorios, gracias a todos los beneficios que
ofrecen, son una de las mejores opciones para aportar tranquilidad al día a día, ya
que sabemos que estaremos protegidos ante cualquier imprevisto que pueda ocurrir.
¿Qué es el Seguro de Vida Ley?
El Seguro de Vida Ley es un beneficio al trabajador que se otorga voluntariamente
por el empleador cuando el trabajador tiene tres meses de trabajo y obligatoriamente
cuando éste haya laborado cuatro años para el mismo empleador (continuos o
intermitentes).
Esta obligación está tipificada en el artículo 1 del Decreto Legislativo 688:
El trabajador empleado u obrero tiene derecho a un seguro de vida a cargo de su
empleador, una vez cumplidos cuatro años de trabajo al servicio del mismo. Sin
embargo, el empleador está facultado a tomar el seguro a partir de los tres meses
de servicios del trabajador.
Notamos que dicho seguro es opcional a partir de los 3 meses, pero obligatorio a
partir de los 4 años.

¿A quién va dirigido?
El seguro vida ley va dirigido a todos los Empleadores que buscan garantizar la
cobertura de los beneficios sociales del Seguro Vida Ley para sus trabajadores
empleados y obreros, de conformidad con la Ley de Consolidación de Beneficios
Sociales (Decreto Legislativo Nº 688) y la Ley Nº 29549.

¿Qué beneficios otorga el Seguro de Vida Ley?


El beneficio consiste en el pago de una indemnización económica a los beneficiarios
ante la invalidez absoluta (total y permanente) o muerte (accidental o natural) del
trabajador asegurado.
Los beneficiados pueden ser: la cónyuge o concubina e hijos; de no haber estos
últimos pueden ser hermanos menores (lo explican mejor en las pólizas).
Notificar al Ministerio de Trabajo
Las empresas que contraten dichos seguros, tienen la obligación de informar de
estos al ministerio de trabajo mediante su página web.
En el artículo 5 del Decreto Supremo 003-2011-TR:
Los Contratos de Seguro de Vida Ley se registran dentro de los treinta (30)
días calendario de suscrito el contrato, a través de la página web del Ministerio
de Trabajo y Promoción del Empleo.
El tiempo máximo de presentación son 30 días calendarios desde que suscribimos el
contrato de Seguro de Vida Ley, y el medio es por la página web.
De darse cualquier modificación en el seguro de vida ley, sea cambio de
trabajadores, porcentajes, cambios en los beneficiarios, tenemos que actualizar
dichos cambios en la página web.
En el artículo 8 del Decreto Supremo 003-2011-TR:
La actualización del Registro Obligatorio debe realizarse en el plazo máximo
de cinco (5) días hábiles de haberse producido cualquiera de los hechos
indicados.

¿Qué ocurre si no he notificado al ministerio de trabajo?


Si no has cumplido con la norma antes mencionada, estas cometiendo una
infracción “muy grave”, para ello revisemos el artículo 24.12 del Decreto Supremo
019-2006-TR:
No registrar el Contrato de Seguro de Vida Ley en el Registro Obligatorio de
Contratos creado por la Ley Nº 29549, no contratar la póliza de seguro de vida, no
mantenerla vigente o no pagar oportunamente la prima, a favor de los trabajadores
con derecho a éste, incurriéndose en una infracción por cada trabajador afectado.
¿Cuánto es la multa por no pagar?
En primer lugar, debes saber que las multas laborales se calculan en base a los
trabajadores afectados. De acuerdo a esa información lo podrás calcular con el
siguiente cuadro:

Envió de Póliza de Seguro de Vida Ley al MINTRA


Pasos para el ingreso en la página web
Ingresamos a la página del MINTRA con nuestro clave sol.
Luego debemos ingresar el contrato de Seguro Vida. Para esto solo hacemos clic
en: Gestionar Contratos Seguros Vida / Registrar Póliza (Contrato Seguro).

Ingresamos los trabajadores que se registraron en la Póliza de Seguro:


Trabajadores Asegurados
Beneficiarios de la Póliza
Para ingresar los beneficiarios, solo debes contar su DNI para hacerlo.

Finalmente, adjuntamos la póliza en formato PDF.

Para terminar, descargamos nuestra constancia.


Conclusiones
Si tienes trabajadores con más de 4 años de servicio, estas obligado a contratar el
Seguro de Vida Ley.
No olvides notificar al MINTRA del contrato de la Póliza de Seguro.
EL SEGURO
Es el mecanismo por el cual quienes soportan riesgos pueden transferirlos al
asegurador, quien se compromete a indemnizarlo total o parcialmente de las
pérdidas que los riesgos pueden ocasionar. Al realizar un contrato de seguro, se
intenta obtener una protección económica de bienes o personas que pudieran en un
futuro sufrir daños.
 Clasificación
Acotaremos la clasificación básica que se maneja internacionalmente.
Seguros de Intereses o Daños Patrimoniales.
 Objeto:
Cuando el siniestro recae sobre: Bienes, Derechos, o Patrimonio.
 Interés:
Cuando el siniestro materia del contrato afecta el Capital o la Ganancia.
 Seguros de Personas o de Vida.
 Estricto: Muerte, Supervivencia, Mixto.
 Amplio: Accidente, invalidez, o Enfermedad

CAPITULO II
Sus elementos
 Elementos reales
 El interés asegurable
En general, el objeto inmediato del contrato es la obligación que por él se constituye,
pero como ésta, a su vez, tiene por objeto una prestación de dar, hacer o no hacer,
se llama ordinariamente objeto del contrato a las cosas o servicios que son materia,
respectivamente, de las obligaciones de dar o de hacer.
La obligación principal del asegurador tiene por objeto la tutela del interés
amenazado por el riesgo asegurado, mientras no se haya producido el siniestro, y
esta obligación se convierte en la de indemnizar el daño causado, si el siniestro se
produce.
Por interés asegurable se entiende la relación lícita de valor económico sobre un
bien. Cuando esta relación se halla amenazada por un riesgo, es un interés
asegurable.
El interés asegurado tiene necesariamente un valor económico, que en unos
seguros (los de cosas) se determina a posteriori mediante la correspondiente
tasación pericial, y en otros (los de personas) se determina a priori, contractual o
legalmente. No obstante, en aquellos seguros, al tiempo de formalizarse el contrato
se fija unilateralmente por el asegurado la cantidad que él estima suficiente para
reparar el daño en caso de siniestro, esta cantidad llamada suma asegurada,
representa el valor aproximado del interés, sirve de base para calcular la prima (a
mayor suma mayor prima) y de límite contractual a la futura prestación del
asegurador. El ideal es que exista coincidencia entre el valor del interés y la suma
asegurada, pero la discordancia siempre es posible, pues, como hemos dicho, esta
última la fija libremente el asegurado y, deliberadamente o por error, puede fijarla en
cantidad distinta del valor del interés.
En principio se pueden asegurar todas las cosas corporales (coches,
viviendas, negocios, etc.) e incorporales (perjuicios económicos, paralización de
actividad, etc.), además se puede asegurar la vida y el patrimonio.
Para que la cosa sea susceptible de ser asegurada debe cumplir con los siguientes
requisitos:
 Debe tratarse de una cosa corporal o incorporal.
 La cosa debe existir al tiempo del contrato, o al menos al tiempo en que
empiecen a correr los riesgos o daños.
 La cosa debe ser tasable en dinero.
 La cosa debe ser objeto de una estipulación lícita.
 La cosa debe estar expuesta a perderse por el riesgo que corre el asegurado.
A contrario, no se pueden asegurar:
 Los riesgos especulativos (precepto básico: "La indemnización no constituye
ganancia").
 Los objetos del comercio ilícitos.
 Las cosas en donde no existe un interés asegurable.
 El riesgo
La finalidad del seguro consiste en proporcionar seguridad contra el riesgo. Esta
finalidad se consigue no por la supresión del acontecimiento temido (fuego, muerte,
enfermedad, etc.), sino por la certeza de tener una compensación económica
cuando se produzca el evento dañoso temido.
Desde el punto de vista jurídico, el riesgo viene a ser un elemento esencial del
contrato y consiste en un acontecimiento incierto en cuanto al hecho mismo o en
cuanto al momento de su realización, o respecto a la cuantía del efecto. El riesgo,
según expone JOAQUÍN GARRIGUES, es la posibilidad de que por azar ocurra un
hecho que produzca una necesidad patrimonial. Esta necesidad patrimonial puede
ser concreta, como ocurre en los seguros contra daños; o abstracta, como ocurre en
los seguros de personas, especialmente en el seguro sobre la vida.
Sin riesgo no puede haber seguro, porque si no existe la posibilidad de que se
produzca el evento dañoso, no podrá existir tampoco indemnización alguna. En este
sentido, el riesgo, para ser asegurable, debe tener las características siguientes:
 Incierto y Aleatorio. Es indeterminado en su forma y se desconoce el
momento de su concreción.
 Posible. Lo imposible no origina riesgo. Debe ser objetivamente probable,
porque si necesariamente va a ocurrir, nadie asumiría la obligación de
repararlo.
 Concreto. Se especifica una situación determinada (accidente, muerte,
enfermedad, etc.)
 Lícito. No se podría asegurar la vida de un narcotraficante bajo el supuesto de
ser asesinado por miembros de otra mafia.
 Fortuito. No puede ser producto de la voluntad humana (suicidio, manejar
en estado etílico, etc.)
 De contenido económico. Es apreciable en dinero.
Como se puede observar, en el Contrato de Seguro, el asegurador no puede asumir
el riesgo de una manera abstracta, sino que éste debe ser debidamente
individualizado, ya que no todos los riesgos son asegurables, es por ello que deben
limitarse e individualizarse dentro de la relación contractual.
 La Prima
Es uno de los elementos indispensables del contrato de seguro. Es el precio del
seguro o contraprestación, que establece una compañía de seguros calculada sobre
la base de cálculos actuariales y estadísticos teniendo en cuenta la frecuencia y
severidad en la ocurrencia de eventos similares, la historia misma de eventos
ocurridos al cliente, y excluyendo los gastos internos o externos que tenga dicha
aseguradora.
Salvo pacto contrario, si no se ha pagado la prima antes de producirse el desastre o
accidente, el asegurador se libera de la obligación contraída en el contrato. También,
salvo pacto en contrario, es pagada en dinero; su pago es de carácter obligatorio
para el tomador o contratante según las condiciones establecidas en la póliza de
seguros.
 La Obligación de Pagar la Suma Asegurada
Este elemento resulta trascendente porque representa la causa de la obligación que
asume el Tomador de pagar la prima correspondiente; o sea, éste se obliga a pagar
la prima porque aspira que el asegurador asuma el riesgo y cumpla con pagar la
indemnización en caso de que el siniestro ocurra.
Esta obligación depende de la realización del riesgo asegurado. Esto no es sino
consecuencia del deber del asegurador de asumir el riesgo asegurable. Y si bien
puede no producirse el siniestro, ello no significa la falta del elemento esencial del
seguro que ahora nos ocupa, por cuanto ésta se configura con la asunción del riesgo
que hace el asegurador al celebrar el contrato, siendo exigible la prestación
indemnizatoria sólo en caso de ocurrir el siniestro.
 ELEMENTOS PERSONALES
 El Asegurador
El ente asegurador puede ser definido como "la persona jurídica que constituida con
arreglo a lo dispuesto por la legislación correspondiente, se dedica a asumir riesgos
ajenos, cumpliendo lo que a este efecto establece aquella legislación, mediante
la percepción de un cierto precio llamado prima."
Debemos destacar en la figura del asegurador unos perfiles concretos, entre los que
podemos apreciar los siguientes:
 Por imperativo legal, ha de tratarse de una persona jurídica. No cabe la
posibilidad de alguien que, individualmente, realice operaciones de cobertura
de riesgos. Las condiciones de funcionamiento del seguro y su proyección en
el tiempo ya exigen, por si solas, que el asegurador sea una persona jurídica.
 Aquella persona debe revestir, precisamente, alguna de las formas que la ley
considera únicamente válidas para la práctica de la industria aseguradora.
 Ha de haber merecido previamente la aprobación de la Administración
Pública, para actuar como aseguradora;
 Debe dedicarse en forma exclusiva a la práctica del seguro o del reaseguro,
en su caso sin que sea admisible otro tipo de actividades, salvo las
operaciones de gestión de fondos colectivos de jubilación;
 Han de ajustar su situación a las normas de la legislación de seguros, que
regulan con detalle la práctica aseguradora, a la vez se hallan sometidas a la
inspección y control del Poder público.
Dentro del amplio espectro de las posibles personas jurídicas son supuestos
admitidos como válidos:
 Sociedad Anónima.
 Sociedad Mutua a prima fija.
 Mutuales de previsión social.
 Sociedad Cooperativa.
Siendo el seguro un asunto que afecta a toda la comunidad, y que está directamente
conectado con el bienestar de ésta; y cuya base indispensable es la confianza y
el crédito. A las entidades que deseen actuar como aseguradoras se le exigen una
doble serie de formalidades tanto como jurídicas como económicas.
 El Asegurado
El asegurado puede ser definido como el titular del área de interés que la cobertura
del seguro concierne, y del derecho a la indemnización que en su día se satisfaga
que, en ciertos casos, puede trasladarse al beneficiario. Es la persona natural o
jurídica a quien el acaecimiento del siniestro va a afectarle más directamente. En
definitiva, es aquel sobre cuya cabeza o bienes van a recaer las consecuencias del
siniestro. La figura del asegurado es esencial dentro del contrato de seguro, porque
así como no cabe concebir un contrato de esta naturaleza sin la existencia de un
riesgo que cubrir, tampoco resulta dable pensar que no haya una persona o
destinatario final de la garantía que se pacta, y cuyos intereses, protegidos de esta
suerte, son la causa eficiente del contrato.
 El Beneficiario
Es la persona que tiene derecho a recibir la prestación del asegurador. La figura del
beneficiario tiene especial relevancia en los seguros de personas, ya que con
frecuencia están destinados a aprovechar a un tercero, e incluso en ciertas
modalidades, es necesario, como ocurre en los seguros para caso de muerte.
El beneficiario es también la persona que, va a recibir la utilidad del seguro cuando
se produzca el hecho contemplado en el mismo (sin ser asegurado). Es aquel sobre
quien recaen los beneficios de la póliza pactada, por voluntad expresa del tomador.
La designación del beneficiario responde a unos planteamientos de previsión que
corresponden a los seguros de carácter personal, de manera especial a los seguros
de vida y accidentes, para el caso de muerte del asegurado.
El asegurado no posee ningún derecho o disposición sobre el particular, ni siquiera
de aprobar o rechazar el beneficiario que el tomador ha elegido.
Agente de Seguros
El agente de seguros es el intermediario entre la compañía y el cliente, para poder
intermediar deberá contar con una autorización, tanto de la compañía que
representa como de un órgano gubernamental que lo vigila. El agente de seguros
está autorizado para verificar que el riesgo existe y está en condiciones de ser
asegurado.
CAPITULO III
Sus características
El contrato de seguro presenta las siguientes características:

 ES UN ACTO DE COMERCIO
Efectivamente el contrato de seguro constituye un contrato mercantil, regulado en
superficialmente por el Código de Comercio y en otros aspectos supletoriamente por
la legislación civil.
 ES UN CONTRATO SOLEMNE
El contrato de seguro es solemne, ya que su perfeccionamiento se produce a partir
del momento en que el asegurador suscribe la Póliza. La firma del asegurador sirve
para solemnizar el acuerdo previo de voluntades entre las partes contratantes,
respecto a los elementos del seguro.
 ES UN CONTRATO BILATERAL
En razón de que genera derechos y obligaciones para cada uno de los sujetos
contratantes, JOAQUIN GARRIGUES al respecto señala: "el tomador de seguros se
obliga a pagar la prima y el asegurador se obliga a una prestación pecuniaria; si bien
esta prestación está subordinada a un evento incierto, cual es la realización del
siniestro".
 ES UN CONTRATO ONEROSO
Es oneroso, porque significa para las partes un enriquecimiento y empobrecimiento
correlativos. "Por cuanto al tomador del seguro se le impone la obligación de pagar
la prima y al asegurador la asunción del riesgo de la que deriva la prestación del
pago de la indemnización de la que queda liberado si no se ha pagado la prima
antes del siniestro"
 ES UN CONTRATO ALEATORIO
Es aleatorio porque tanto el asegurado como el asegurador están sometidos a una
contingencia que puede representar para uno una utilidad y para el otro una pérdida.
Tal contingencia consiste en la posibilidad de que se produzca el siniestro. Al
respecto el profesor MONTOYA MANFREDI dice: " El carácter aleatorio del contrato
no desaparece por el hecho de que las compañías aseguradoras dispongan de
tablas estadísticas que les permite determinar el costo de los riesgos, en función de
lo cual fijan el importe de las primas. O sea, si bien la actividad aseguradora en si es
cada vez menos riesgosa en la medida del perfeccionamiento de los medios para
determinar la frecuencia de los riesgos, el contrato sigue siendo aleatorio tratándose
de cada contrato aislado y respecto del asegurado".
 ES UN CONTRATO DE TRACTO SUCESIVO
Por cuanto los derechos de las partes o los deberes asignados a ellas se van
desarrollando en forma continua, a partir de la celebración del contrato hasta su
finalización por cualquier causa.

 ES UN CONTRATO DE ADHESIÓN
El Seguro no es un contrato de libre discusión sino de adhesión. Las cláusulas son
establecidas por el asegurador, no pudiendo el asegurado discutir su contenido, tan
sólo puede aceptar o rechazar el contrato impuesto por el asegurador. Sólo podrá
escoger las cláusulas adicionales ofrecidas por el asegurador, pero de ninguna
manera podrá variar el contenido del contrato. Pero todo esto dependerá de la
voluntad y de la flexibilidad que tenga cada empresa aseguradora.
CAPITULO IV
La póliza
 CONCEPTO
"Es el conjunto de documentos que acreditan la formalización del contrato de
seguro"
Materialmente, la Póliza es el documento principal del contrato de seguro, en donde
constan los derechos y obligaciones de las partes, es un documento privado
redactado en varios folios. Las condiciones generales están impresas, mientras las
condiciones particulares son personalizadas.
Subjetivamente, la Póliza es la promesa que hace una compañía aseguradora a la
persona (natural o jurídica) de resarcir la pérdida ocasionada por algún riesgo
amparado bajo el documento aceptado por ambas partes. La póliza de seguro es un
contrato de buena fe, donde la compañía cree lo que declara el proponente (cliente)
para apreciar el riesgo y así determinar el costo y alcance del seguro.
 FORMALIDADES
La póliza de seguro contiene, casi universalmente
 Los nombres, domicilios de los contratantes y firma de la
empresa aseguradora.
 La designación de la cosa o de la persona asegurada.
 La naturaleza de los riesgos garantizados.
 El momento a partir del cual se garantiza el riesgo y la duración de esta
garantía; El monto de la garantía.
 La cuota o prima del seguro.
 Las demás cláusulas que deban figurar en la póliza de acuerdo con las
disposiciones legales, así como las convenidas lícitamente por los
contratantes.
Tipos de seguros de vida
1. Seguro en caso de Sobrevivencia.- El beneficiario (que en este caso es
generalmente el propio Asegurado) percibirá la suma asegurada si vive hasta
la fecha predeterminada, éste garantiza el pago de un capital o una renta al
beneficiario.
Este tipo de seguro tiene las siguientes modalidades:
a) De capital diferido. - La compañía de seguros se compromete a entregar la
suma asegurada al vencimiento del plazo convenido en el contrato, si el asegurado
vive en esa fecha. Puede ser con reembolso o sin reembolso si el asegurado fallece
antes de la vigencia del seguro con reembolso opera la devolución de las primas al
fallecer el Asegurado antes del vencimiento del seguro.
b) De renta vitalicia inmediata. - La compañía de seguros a cambio de una prima
única, garantiza el pago inmediato de una renta a una o varias personas hasta la
muerte del asegurado, en cuyo caso cesa dicho pago.
c) De renta diferida. - La compañía de seguros se compromete, al finalizar el plazo
de diferimiento estipulado, a pagar al asegurado, mientras viva, una renta constante
y periódica. Puede ser sin reembolso de primas si el Asegurado fallece antes de
cobrar la renta o con reembolso de primas la compañía de seguros las devuelve a
los beneficiarios.
d) De capitalización. - La compañía de seguros se compromete a pagar al
asegurado un capital al vencimiento del contrato, a cambio de la obligación del
contratante o asegurado de realizar el pago de primas periódicas a la compañía de
seguros durante la vigencia del contrato.
e) Seguro de Jubilación.- Consiste en el pago de un capital o renta al asegurado
hasta que alcance la edad de su jubilación, la cual puede ser vitalicia, dentro de
estas existe el plan de pensiones el cual es un instrumento de previsión voluntaria
por el que las personas que lo constituyen tiene derecho, en las condiciones y
cuantías establecidas, a percibir rentas o capitales por jubilación, supervivencia,
viudez, orfandad o invalidez, a cambio de las contribuciones económicas que se
aporten a tales efectos.
2. Seguro en caso de Fallecimiento. - El Beneficiario (que puede ser una o varias
personas) recibirá la suma asegurada estipulada cuando se produzca el
fallecimiento del Asegurado, ya sea por causa natural o accidental. Es una clase de
seguro de vida, ya sea que se trate de un capital o de una renta, se pagará por la
compañía de seguros al beneficiario (que puede ser una o varias personas), si se
produce la muerte del asegurado.
Las modalidades de este seguro son:
a) Seguros de vida entera. - Se garantiza el pago de una suma asegurada
inmediatamente después del fallecimiento del asegurado, sea cual fuere la fecha en
que ocurra dicho fallecimiento, este a su vez tiene dos modalidades:
I. Con pago de primas vitalicias. - El pago de las primas se mantienen hasta el
fallecimiento del asegurado.
II. Con pago de primas limitado a un cierto número de años. - Las primas
correspondientes se pagan durante un período determinado de años.
b) Seguro sobre dos o más vidas. - Es un seguro de vida entera que se
caracteriza porque existen simultáneamente, dos o más personas aseguradas que
son a la vez beneficiarios recíprocos y en su virtud, cuando el fallecimiento de
cualquiera de ellas se produzca dentro del límite estipulado en el contrato, la
compañía de seguros pagará la indemnización prevista a el sobreviviente o a los
sobrevivientes, según sea el caso
c) Seguro temporal. - Se caracteriza porque la suma asegurada es pagadera
inmediatamente después de la muerte del asegurado, siempre que ocurra antes del
plazo de duración del seguro, si sobrevive el seguro se cancela y la aseguradora
retiene las primas y pueden ser temporal constante, decreciente, creciente, a un año
renovable, renovable.
d) Seguro de deudores. - En esta modalidad, al producirse el fallecimiento del
asegurado, la compañía de seguros se hace cargo automáticamente de la
liquidación de los créditos previstos en la póliza, no vencidos, que adeude el
Asegurado en el momento de su muerte.
e) De orfandad. - Tiene por objeto la concesión de una Pensión Temporal a favor de
los hijos menores de 18 años en caso de fallecimiento del padre o la madre
trabajadora con el que convivan y del cual dependan económicamente.
f) De capital de supervivencia.- El capital es pagadero inmediatamente después
del fallecimiento del asegurado, si ocurre antes que el de otra persona designada al
contratar el seguro, denominada beneficiario o sobreviviente. Si ésta fallece antes
que el asegurado, queda rescindido el seguro y las primas pagadas pueden quedar,
ya sea a favor de la compañía de seguros, o bien del sobreviviente, según haya sido
pactado al celebrarse el contrato de seguro, la prima anual deja de pagarse al morir
el asegurado.
3.Seguro Dotal Mixto.- Es un tipo especial que se integra por un seguro de riesgo y
un seguro de ahorro, en virtud de la cual, si el asegurado fallece antes del plazo
previsto, se entregará a sus beneficiarios la indemnización estipulada, y si sobrevive
a dicho plazo se entregará al propio asegurado la suma asegurada establecida por
el contrato, y tiene las siguientes modalidades:
a) Mixto completo.- Si el asegurado vive al vencimiento del plazo del seguro,
participará también en utilidades de la póliza con un determinado porcentaje sobre la
suma asegurada.
b) Mixto simple. - Garantiza el pago de la suma establecida, a los beneficiarios
designados, al producirse el fallecimiento del asegurado, siempre que ocurra antes
del vencimiento del contrato.
c) Mixto doble. - Son iguales al del seguro mixto simple, con la particularidad de
que el contrato no se extingue con el pago de la suma asegurada establecida al
asegurado si vive al vencimiento de la póliza.
d) Mixto Revalorizable. - La suma asegurada aumenta cada año, aunque sus
características son iguales al seguro mixto.
e) Mixto variable. - En caso de sobrevivencia el asegurado va percibiendo la suma
asegurada distribuida en determinados porcentajes y pagada en diferentes
momentos.
f) A plazo fijo. - En esta modalidad se garantiza el pago de la suma asegurada al
vencimiento de la póliza, sin importar si el asegurado vive o ya falleció.
g) Dotal. - El beneficiario será un menor de edad, sin importar si el asegurado vive o
no.
h) Seguro de Vida Universal.- Se combina el proceso de capitalización y el seguro
temporal renovable, siendo un plan de ahorro.
Seguros de riesgo o para casos de muerte
Los seguros de riesgo o para casos de muerte son un tipo de seguros de vida en
los cuales el capital contratado es pagado inmediatamente después del fallecimiento
del asegurado si éste ocurre antes de finalizar el plazo de duración del seguro. Si la
persona asegurada sobrevive a ese periodo el seguro queda cancelado, quedando
las primas satisfechas a favor de la compañía aseguradora.
Existen dos tipos de seguros de riesgo: los seguros temporales y los seguros de vida
entera.
Seguros temporales
El seguro temporal cubre el riesgo de fallecimiento prematuro antes de terminar el
contrato. En este tipo de seguro impera el componente riesgo por encima de otras
variables. Su duración es de un año renovable de forma tácita hasta un número
determinado de periodos. Su coste no suele ser muy alto y permite contratar
coberturas elevadas.
Los seguros temporales suelen contratarse para proteger obligaciones
hipotecarias, garantía de cancelación de deudas o como protección adicional para la
familia.
Seguros de vida entera
Por su parte, los seguros de vida entera extienden sus coberturas durante toda la
vida del asegurado de forma permanente, sin plazo. La indemnización se paga
inmediatamente después de la mearte del asegurado, cualquiera que sea el
momento en que esto ocurra.
En ocasiones se añade la opción de la restitución del capital asegurado si el se ha
sobrevivido a determinada edad, dando por finalizado el contrato. En este caso se
trataría de un seguro mixto, de vida y muerte.
En cuento a los seguros de vida entera, existen dos modalidades:
1. Seguros de vida entera a primas vitalicia, en los que las primas se pagan
durante toda la vida del asegurado, habiendo así una cobertura continua.
2. Seguros de vida entera a primas temporales, en los que el pago se realiza
solo durante unos años o hasta el fallecimiento del asegurado.

Seguros de ahorro
Los seguros de ahorro o para casos de superveniencia o de jubilación tienen
como objeto la obtención de un capital al final del plazo convenido. La finalidad de
estos seguros es la inversión a medio o largo plazo para complementar las
prestaciones de jubilación o para acumular un capital que permita hacer frente a
situaciones futuras.
Seguros mixtos
Los seguros mixtos aúnan en un mismo contrato un seguro de riesgo y un seguro
de ahorro, de modo que el asegurado queda cubierto en caso de fallecimiento (en
cuyo caso los beneficiarios recibirán una indemnización) y tiene asegurada una
prestación si sobrevive a la edad estipulada.
Seguro de rentas
En los seguros de rentas, mediante la aportación de un capital único o el pago de
una prima durante un tiempo determinado, el asegurado tiene garantizada una renta
vitalicia (pago de unas cantidades mientras viva, cuyo importe puede ser fijo o
variable) o una renta temporal (durante un tiempo determinado).

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