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02 ACTUALIZACION 2783 (574-586) 10/11/06 11:37 Página 574

El abuso verbal
Carmen Orte Socías
Departamento de Pedagogía y Didácticas Específicas. Universitat de les Illes Balears. Palma de Mallorca. España.

Puntos clave

A
● El abuso verbal es una forma distintiva de abuso emocional, ● El abuso verbal, en particular, y el abuso emocional, en
el núcleo de la conducta emocionalmente abusiva. general, son algunas de las formas de maltrato más
desconocidas en todos los grupos y contextos en que éstas
● El abuso verbal es una comunicación ofensiva que mina el se producen.
bienestar emocional y psicológico en las personas que lo
sufren. ● En el 85% de los casos de maltrato infantil se produce
PI abuso emocional.
● El abuso verbal repetido (acusar, ridiculizar, insultar, gritar,
● El abuso emocional es uno de los tipos más frecuentes de
humillar…) tiene efectos negativos a largo plazo en la
maltrato de género.
autoestima y contribuye a desarrollar sentimientos de
inutilidad, desvalorización y autoculpabilización. ● La agresión verbal crónica es la segunda forma de maltrato
hacia las personas mayores.
● El abuso verbal está basado en el poder y en el control.
Acompaña otras formas de abuso, pero también puede ● La mayor proporción de maltrato a las personas mayores se
producirse en sí mismo. produce en mujeres de 80 años o más. En el 90% de los
casos, quien agrede es un miembro de la familia.
● Rechazar, degradar, aterrorizar, aislar, explotar y ejercer
● El abuso verbal es el tipo de violencia más frecuente contra
CO

corrupción, y rechazar el intercambio emocional son formas


de abuso emocional ampliamente reconocidas, en las que el personal sanitario, principalmente en los servicios de
el abuso verbal ocupa un espacio muy importante. psiquiatría, de urgencias y unidades de alta dependencia.

Palabras clave: Abuso verbal • Abuso emocional • Abuso psicológico • Abuso familiar.

E l abuso verbal es un tipo de maltrato al que no se ha


prestado mucha atención, ni en el ámbito clínico ni en
los estudios de investigación. Ello puede deberse a muchas
cional, iba acompañado en muchos casos con un resultado
de muerte.
Una profundización en las diferentes tipologías del mal-
razones, entre las que se encuentran tanto las cuestiones trato indicaría que el abuso verbal es probablemente el nú-
culturales1 como las ligadas a la misma necesidad de dar cleo del comportamiento emocionalmente abusivo. Algunos
respuestas inmediatas a distintas acciones de maltrato –que trabajos de investigación2 han tratado de determinar qué tipo
han cursado con violencia física y/o sexual–, en el ámbito de verbalizaciones eran percibidas como dañinas –teniendo
familiar y en el de las instituciones. De esta manera, las ti- en cuenta que la agresión verbal espontánea es hasta cierto
pologías de maltrato en que se pueden observar lesiones fí- punto el reflejo de los valores de una determinada cultura3–,
sicas –que en muchos casos han causado la muerte de la en concreto, en una muestra de 151 profesionales de los ser-
víctima– han sido las que mayor interés han generado, tanto vicios de salud mental, y en un grupo de padres (120 muje-
en la respuesta clínica y legal como en la investigación. De res y 31 varones). Se utilizó para ello un cuestionario que re-
hecho, el mismo interés que se ha despertado en los últimos cogía distintas categorías de verbalizaciones parentales aso-
años por ciertos tipos de maltrato, como el bullying escolar, ciadas en la bibliografía con maltrato psicológico. El 80%
el mobbing laboral, o incluso más recientemente por el mal- de las personas de la muestra señaló como “no aceptables
trato en las parejas de jóvenes que mantienen una relación nunca” las verbalizaciones de rechazo o retirada del afecto,
íntima, o por el maltrato a los mayores en el ámbito institu- de descalificación, de perfeccionismo, de predicción negati-

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va, de comparación negativa, de chivo expiatorio, de humi- salud son los que concentran mayores porcentajes de violen-
llar, de maldecir, amenazar y culpabilizar. cia en general y de abuso verbal en particular, tanto por los
Una revisión de los 2 tipos de agresión grupal más graves pacientes12 como por los familiares y otros cuidadores.
contra los individuos, el bullying4-6 y el mobbing7,8, mues- Las primeras definiciones de abuso verbal infantil13 lo
tra la importancia del lenguaje y otras conductas comunicati- describieron como abuso emocional: un ataque al desarrollo
vas como medios para infligir daño de forma intencionada, del Yo y de la competencia social del niño, un patrón de
utilizando las verbalizaciones ofensivas más valoradas por conducta psíquicamente destructiva. Otras definiciones han
los grupos de referencia. Por tanto, en el caso del bullying, identificado el abuso verbal como una forma distintiva de
los chicos tratan de dañar a otros mediante las agresiones y abuso emocional, situándola en el núcleo de la conducta
las amenazas físicas, y las chicas en las relaciones e interac- emocionalmente abusiva14.
ciones sociales. Otros trabajos realizados en escolares vícti- Según la definición de O’Hagan15, el abuso emocional y
mas de bullying indican que la victimización verbal influye psicológico comparten características en común: ambos son
de forma negativa en el sentimiento de autovaloración de la sostenidos, repetitivos y provocan respuestas inapropiadas
víctima, y que la práctica de poner motes puede reducir sis- en los niños. Difieren en sus efectos: el abuso emocional in-

A
temáticamente la autoestima. De hecho, el abuso verbal pue- hibe la capacidad del niño para la expresión emocional es-
de tener más impacto en la percepción de autoconfianza de pontánea, positiva y apropiada, mientras que el abuso psico-
las víctimas que los ataques físicos, como golpes, ataques a lógico mina la capacidad de comprender y manejar su am-
la propiedad, robos o destrucción de las pertenencias. biente y su potencial de desarrollo creativo, creando
En esta misma línea, y de acuerdo con los resultados del confusión y miedo y, por tanto, haciendo al niño más vulne-
estudio de Follingstad et al9 sobre 234 mujeres maltratadas, rable y menos confiado. Aunque es difícil de definir y faltan
PI
muchas de ellas con relaciones físicamente abusivas, expre- medidas estandarizadas para medirlo, el abuso verbal es una
san que el abuso emocional debilita de forma más grave la comunicación parental ofensiva que mina el bienestar emo-
relación que el abuso físico. Así, el 72% de las mujeres indi- cional y psicológico del niño.
có que el hecho de haber sido ridiculizadas por su pareja era En el caso del abuso verbal en la pareja, Evans16 lo define
lo que más les había afectado, seguido por las amenazas de también como un acto de violencia psicológica que se mani-
abuso, los celos y la restricción (aislamiento). El impacto fiesta por medio de palabras que atacan o injurian, que lle-
negativo de estos comportamientos aumentaba con la fre- van a creer en algo falso o que hablan imaginariamente de
cuencia de abuso emocional. una persona. Siguiendo a esta autora, pues, el abuso verbal
El abuso verbal repetido, como acusar, ridiculizar, insul- puede ser abierto (mediante insultos y arranques de ira) o
CO

tar, gritar o humillar, tiene efectos negativos a largo plazo en encubierto (comentarios sutiles); es manipulador y controla-
la autoestima de las mujeres y contribuye a desarrollar senti- dor, insidioso e imprevisible, y suele aumentar en intensi-
mientos de inutilidad, desvalorización y autoculpabilización. dad, frecuencia y variedad.
Otros trabajos similares10 refieren que el abuso emocional De esta manera, aunque no hay una definición universal-
en las mujeres había afectado tanto o más que la violencia mente aceptada, el abuso verbal como núcleo más importan-
física, y consideraban este abuso como el responsable de sus te del abuso emocional, está basado en el poder y en el con-
problemas de salud, autoestima, depresión y ansiedad. La trol. Acompaña otras formas de abuso, pero también puede
presencia de abuso emocional, en concreto el abuso verbal, producirse en sí mismo. A continuación, describimos diver-
es el mayor factor de riesgo y predictor de la violencia físi- sas formas de abuso emocional ampliamente reconocidas, en
ca. Es una de las formas de maltrato emocional más preva- que el abuso verbal ocupa un espacio destacado17:
lente en la mayoría de los problemas relacionados con el
maltrato en niños y adultos en diferentes contextos y situa- – Rechazar. No darse cuenta de la presencia de una perso-
ciones y, según diferentes trabajos que comentaremos más na, su importancia, su valor; comunicar a una persona que
adelante, la que produce las consecuencias más destructivas no sirve para nada o es inferior; devaluar sus pensamientos y
en las víctimas. sentimientos.
– Degradar. Insultar, ridiculizar, poner apodos negativos,
imitar e infantilizar; conducta que disminuye la identidad,
¿Qué es el abuso verbal? dignidad y autovaloración de la persona.
– Aterrorizar. Inducir terror o miedo extremo en una per-
Los trabajos más importantes en relación con el abuso ver- sona; coaccionarla mediante la intimidación, colocar o ame-
bal se han llevado a cabo principalmente en el ámbito de la nazar con situarla en un lugar inadecuado o peligroso.
violencia de género, el maltrato infantil intrafamiliar y el – Aislar. Confinamiento físico, restringir el contacto nor-
bullying escolar. Por otra parte, los estudios sobre la violen- mal con los demás, limitar la libertad en el propio ambiente
cia en el lugar de trabajo11 señalan que los trabajadores de la de la persona.

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TABLA 1. Incidencia y prevalencia del maltrato infantil en España durante el período 1997-1998

Víctimas

Número de víctimas Tipo de maltrato

Total Negligencia Emocional Físico Abuso sexual

Incidencia Prevalencia Incidencia Prevalencia Incidencia Prevalencia Incidencia Prevalencia Incidencia Prevalencia

11.148 7,16 9.629 6,19 3.944 2,53 2.220 1,43 396 0,25
Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.

– Corrupción/explotación. Socializar a una persona en la Las tasas de prevalencia por cada 10.000 niños, según el
aceptación de ideas o conductas contrarias al estándar legal; tipo de maltrato, son de 6,2 en negligencia, 2,5 en maltrato

A
utilizar a una persona para obtener ventaja o provecho. emocional, 1,4 en maltrato físico y 0,3 en abuso sexual.
– Rechazar el intercambio emocional. No proporcionar Por su parte, el Centro Reina Sofía, a partir de los datos
cuidado en una forma adecuada y empática; ser desapegado del Ministerio del Interior (recogidos por la Policía Nacional
y no implicado; interactuar sólo cuando sea necesario; igno- y la Guardia Civil), en lo que se refiere a la prevalencia du-
rar las necesidades emocionales de una persona. rante un período de tiempo, y teniendo en cuenta que a partir
de 2002, además de lo contemplado en años anteriores, se
PI incluyen otros tipos de delitos y faltas (delitos contra la li-
Prevalencia bertad e indemnidad sexual, calumnias, amenazas y delitos
de homicidio y asesinato), informa que la incidencia de me-
Debido a sus características, el abuso verbal, en particular, y nores maltratados entre 2000 y 2004 ha aumentado de forma
el abuso emocional, en general, son algunas de las formas de notoria (tablas 2-5)21.
maltrato más desconocidas en todos los grupos y contextos Por otra parte, en la última década se han empezado a in-
en que éste se produce. Además, y en comparación con otras vestigar a los niños que son víctimas directas e indirectas de
formas de abuso, sus efectos han sido recientemente conoci- la violencia familiar. Cada vez hay mayor acuerdo en la re-
dos. El hecho de no dejar huellas físicas y producirse de for- lación entre violencia doméstica y abuso infantil, aunque no
se haya llevado a cabo ningún estudio de prevalencia22. Se
CO

ma continuada no posibilita ninguna crisis que pueda facili-


tar su identificación por parte de las instituciones18. Las va- considera que la violencia familiar, ya sea interparental o de
riaciones en la prevalencia se producen por no disponer de género, es un problema de mayor magnitud, que puede re-
definiciones operacionales comunes y consistentes, así como percutir de forma significativa a corto y a largo plazo en el
de medidas validadas del abuso emocional; es difícil de de- desarrollo de los niños expuestos a ella en su hogar23. Res-
tectar, evaluar y comprobar, por lo que muchos casos no se pecto a esta cuestión, algunos trabajos indican que alrededor
informan. de un 60% de los niños que viven con madres agredidas
Con todo, según los datos del Programa Nacional de Epi- también son o serán directamente víctimas de abusos por
demiología de la Violencia en el Ámbito Familiar19 (ta- parte del mismo agresor24. En casos más extremos, y como
bla 1), procedente de los expedientes de los Servicios de señala O’Hara25, un elevado número de niños que han muer-
Protección al Menor de cada comunidad autónoma publica- to a manos de sus padres fueron asesinados como resultado
dos por el Centro Reina Sofía, la prevalencia de maltrato en directo de los deseos del hombre de castigar a su pareja. Éste
el período anual 1997-1998 fue de 7,16 niños maltratados; es el caso de niños asesinados después de una separación
Melilla, con 15,19, y Cantabria, con 2,41, presentaron la má- traumática o durante una visita regular del padre.
xima y la mínima prevalencia de maltrato por 10.000 niños En cuanto a los datos sobre violencia indirecta, y de
menores de 18 años, respectivamente. acuerdo con los estudios de Fantuzzo et al26 –a partir de la
En cuanto a la tipología de maltrato infantil, el 86,4% del base de datos sobre violencia doméstica en Estados Uni-
total de los casos se produce por negligencia y el 85,4% por dos–, respecto a la población general, las familias que habían
abuso emocional, el 19,9% por maltrato físico y el 3,6% por padecido violencia doméstica era más probable que tuvieran
abuso sexual, siempre teniendo en cuenta que una víctima hijos de 5 o menos años de edad viviendo en el hogar. Como
puede sufrir más de un tipo de maltrato. De hecho, ello for- media, estos niños habían estado presentes como testigos en
ma parte del propio proceso de maltrato, como puede tam- el 48% de los casos de violencia doméstica y en el 21% de
bién observarse a partir de los trabajos recogidos por Soria- los casos en que había habido múltiples incidentes de vio-
no20. lencia doméstica. Un trabajo reciente de ámbito estatal27 in-

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Orte Socías C et al. El abuso verbal

dica la importancia de promover estudios en esta dirección,


TABLA 2. Menores maltratados por sus padres durante
profundizando en las secuelas28-31 de la violencia en los ni- el período 2000-2004 en España
ños –que en su estudio recogieron a partir de entrevistas rea-
Incremento
lizadas a profesionales del sistema de protección a la mujer 2000 2001 2002 2003 2004
2000-2004
y también a mujeres víctimas de violencia de género–. Éstas
fueron los siguientes: 1.731 1.494 2.454 2.526 3.179 83,65%
Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.

– Problemas de socialización, aislamiento, inseguridad,


agresividad.
– Problemas de integración en la escuela, problemas de TABLA 3. Evolución de la prevalencia por cada 1.000 menores
concentración, déficit atencional y disminución del rendi- en España
miento escolar.
Incremento
– Síntomas de estrés postraumático, como insomnio, pe- 2000 2001 2002 2003 2004
2000-2004
sadillas, fobias, ansiedad o trastornos disociativos.
0,24 0,21 0,33 0,34 0,42 75%

A
– Conductas regresivas: eneuresis, encopresis.
Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.
– Síntomas depresivos: llanto, tristeza, aislamiento.
– Alteraciones del desarrollo afectivo, dificultad de ex-
presión y de manejo emocional.
– Parentalización. TABLA 4. Menores muertos a manos de sus padres
– En algunos casos, la muerte.
Incremento
PI 2000 2001 2002 2003 2004
2000-2004
Respecto a la violencia de género, y utilizando los datos
aportados por el Centro Reina Sofía, a partir de los datos del 6 16 13 8 12 100%
Ministerio del Interior, la incidencia de mujeres maltratadas Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.

se ha incrementado entre los años 2000-2004 en un 156,74%


(tablas 6-9), más elevada en las comunidades autónomas de
Baleares, Comunidad Valenciana, Aragón, Castilla-La Man-
TABLA 5. Evolución de la prevalencia por millón
cha, Canarias y Navarra.
Aunque no se dispone de estudios exhaustivos sobre el Incremento
2000 2001 2002 2003 2004
2000-2004
CO

maltrato de género en la población general, algunos trabajos


recientes32, llevados a cabo mediante encuesta telefónica, in- 0,82 2,20 1,76 1,07 1,58 92,68%
dican que el abuso emocional es uno de los tipos de maltrato Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.
más frecuentes. Según sus resultados, el 20,2% de la pobla-
ción femenina ha sufrido maltratos a manos de su pareja, y
el 6,2% de las mujeres ha sufrido maltrato durante el último cuencia e intensidad de la violencia mientras estaban emba-
año (más de 20.000 mujeres mayores de edad de la pobla- razadas. En esta misma línea, otros trabajos35 señalan que el
ción asturiana). De ellas, el 5,5% convivía con la persona embarazo es un período de riesgo en el que el foco del mal-
agresora y el 0,7% mantenía una relación de noviazgo. De trato cambia de las extremidades, la cabeza o los pechos al
acuerdo con las autoras, y respecto a los tipos de agresiones abdomen, y se cita una prevalencia de maltrato en la pobla-
recibidas –según otros estudios epidemiológicos, fundamen- ción embarazada del 3,9-20,4%. Se han recogido variaciones
talmente canadienses y norteamericanos–, en la población en los porcentajes de violencia maternal en función de diver-
asturiana, cabe señalar que hubo más ataques hacia la inte- sos aspectos –entre otros, el estatus socioeconómico, el nivel
gridad física, menos contra la integridad sexual y más mal- educativo, la edad de la madre o los cuidados prenatales–,
trato emocional. observándose desde una prevalencia del 15% en mujeres
Según Pérez33, aunque todas las mujeres son susceptibles embarazadas atendidas en clínicas privadas hasta el 28% en
de sufrir violencia intrafamiliar, el hecho de quedarse emba- mujeres con un bajo nivel económico36. Algunos trabajos
razadas o tener hijos pequeños se considera un factor de más recientes, como el del Shumway et al37, realizado me-
riesgo especial. De acuerdo con los datos de un estudio rea- diante entrevistas sobre una muestra de 567 mujeres embara-
lizado sobre la violencia doméstica en mujeres embarazadas, zadas (media de edad gestacional de 14 semanas) de bajo ni-
la prevalencia de maltrato en la mujer embarazada es un 3,9- vel económico, refieren que sólo el 34% del total no padeció
8,3% mayor que en las mujeres no embarazadas34. Muchas abuso verbal o violencia física de su compañero durante el
mujeres refieren que el comienzo de la violencia coincidió embarazo. Del 66% de las mujeres restantes que sí la sufrie-
con un embarazo, o bien que hubo un aumento de la fre- ron, el 36% correspondió a abuso verbal, el 16% a violencia

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Orte Socías C et al. El abuso verbal

TABLA 6. Incidencia de mujeres maltratadas durante el período 2000-2004

2000 2001 2002 2003 2004 Incremento 2000-2004

Andalucía 4.894 5.143 8.848 10.503 12.421


Aragón 406 433 988 1.041 1.265
Asturias 569 586 1.000 1.248 1.354
Baleares 511 610 1.351 1.706 2.136
Comunidad de Madrid 4.030 4.506 6.776 7.914 8.869
Castilla-La Mancha 748 782 1.507 1.837 2.158
Castilla y León 998 1.105 2.045 2.167 2.367
Comunidad Valenciana 2.053 2.309 5.235 6.415 8.053
Canarias 1.877 1.988 3.981 4.630 5.377
Cantabria 272 282 496 608 651

A
Cataluña 2.593 2.530 5.113 5.187 5.611
Extremadura 528 531 809 965 1.100
Galicia 1.189 1.147 1.985 2.275 2.464
La Rioja 120 186 257 314 309
Murcia 1.111 1.384 2.076 2.460 2.516
Navarra 138 177 338 322 392
PI
País Vasco 10 5 22 21 14
Ceuta 137 181 212 234 240
Melilla 223 278 274 243 230
Total 22.407 24.163 43.313 50.090 57.527 156,74%
Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.

TABLA 7. Incidencia de mujeres maltratadas durante el período 2000-2004


CO

2000 2001 2002 2003 2004 Incremento 2000-2004

Delitos 6.231 5.987 11.047 15.464 40.518 550,26%


Faltas 16.176 18.176 32.266 34.626 17.009 5,15%
Total 22.407 24.163 43.313 50.090 57.527 156,74%
Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.

física y el 14% a actos graves de violencia más de 4 veces a un 4% en los mayores que residen en el hogar. En cuanto a
durante los 6 meses previos a la entrevista. los tipos de maltrato, tras el abuso material, la agresión ver-
Tomando como referencia los datos aportados por el Cen- bal crónica fue la segunda forma más prevalente. Estos da-
tro Reina Sofía, a partir de los datos del Ministerio del Inte- tos, aun siendo significativos, se consideran una subestima-
rior (tablas 10 y 11), la incidencia y la prevalencia de ancia- ción de la prevalencia del abuso y la negligencia sobre la po-
nos maltratados en el ámbito familiar durante el período blación de personas mayores en Canadá.
2000-2003 también se ha incrementado de forma notoria (el En una investigación realizada en nuestro país40, median-
82,27 y el 75,76%, respectivamente). Las mayores propor- te entrevista a los auxiliares domiciliarios que atienden a
ciones de maltrato a las personas mayores se producen en esta población, pueden observarse resultados similares so-
mujeres de 80 años o más. En el 90% de los casos, quien bre la negligencia y los malos tratos sufridos en el hogar. Se
agrede es un miembro de la familia38. Se desconoce la pre- trató de una muestra de personas ancianas que estaban reci-
valencia de maltrato hacia las personas ancianas en la pobla- biendo un servicio de ayuda en domicilio (2.351 personas
ción general, tanto en el contexto del hogar como en el con- ancianas en 5 municipios del País Vasco, Andalucía y Cana-
texto institucional; no obstante, a partir de algunos trabajos, rias). Se detectaron 111 casos, lo que según la autora supone
como el estudio del National Survey on Abuse of the El- el 4,7% del total (el 81%, mujeres y el 19%, varones), el
derly in Canada39, suele citarse una tasa de maltrato en torno 55% perpetrados por los hijos e hijas biológicos y políticos,

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Orte Socías C et al. El abuso verbal

TABLA 8. Prevalencia de mujeres maltratadas durante el período 2000-2004

2000 2001 2002 2003 2004 Incremento 2000-2004

Andalucía 1,59 1,66 2,82 3,33 3,84


Aragón 0,78 0,83 1,90 2 2,32
Asturias 1,15 1,19 2,03 2,53 2,66
Baleares 1,49 1,74 3,78 4,68 5,29
Comunidad de Madrid 1,73 1,91 2,85 3,30 3,44
Castilla-La Mancha 1,02 1,06 2,04 2,47 2,80
Castilla y León 0,90 1 1,85 1,96 2,11
Comunidad Valenciana 1,15 1,28 2,87 3,48 4,14
Canarias 2,61 2,69 5,26 5,99 6,74
Cantabria 1,14 1,17 2,06 2,51 2,61

A
Cataluña 0,94 0,91 1,84 1,86 1,90
Extremadura 1,15 1,15 1,75 2,08 2,40
Galicia 0,95 0,91 1,57 1,79 1,94
La Rioja 1,02 1,57 2,16 2,63 2,46
Murcia 2,34 2,88 4,27 5,01 4,80
Navarra 0,58 0,75 1,42 1,34 1,56
PI
País Vasco 0,01 0,01 0,02 0,02 0,01
Ceuta 4,67 6,13 7,14 7,84 8,21
Melilla 8,98 11,12 10,90 9,61 8,64
Total 1,27 1,36 2,42 2,78 3,07 141,73%
Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.

TABLA 9. Prevalencia por cada 1.000 mujeres durante el período 2000-2004


CO

2000 2001 2002 2003 2004 Incremento 2000-2004

Total 1,27 1,36 2,42 2,78 3,07 141,73%


Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.

en el 12% de los casos por el cónyuge, en el 7% por her-


TABLA 10. Incidencia de ancianos maltratados en el ámbito
manos o hermanas, y en el 25% por otras personas. Tanto familiar durante el período 2000-2003
para varones como para mujeres, la negligencia en el cui-
dado físico presentó el número de casos más elevado, segui- Incremento
2000 2001 2002 2003
2000-2003
da de la negligencia en el cuidado psicoafectivo y el maltra-
to psicológico y emocional, el abuso material y el maltrato Delitos 502 459 875 1.155 130,08%
físico. Faltas 1.749 1.744 2.890 2.948 68,55%
Respecto a la violencia dirigida hacia los trabajadores en Total 2.251 2.203 3.765 4.103 82,27%
el ámbito de la salud, el personal de enfermería es 3 veces Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.
más probable que la media de ser objeto de violencia en el
lugar de trabajo que otros grupos ocupacionales41,42, aunque
todos los trabajadores de la salud están en riesgo y los médi- TABLA 11. Prevalencia por cada 1.000 ancianos durante
cos no son una excepción43. Los psiquiatras y los médicos el período 2000-2004
de los servicios de urgencias son los que presentan mayor Incremento
2000 2001 2002 2003
riesgo de agresión y violencia44. Las explicaciones sobre es- 2000-2003
ta cuestión consideran una combinación de factores clínicos Total 0,33 0,32 0,54 0,58 75,76%
y ambientales: inexperiencia del médico45, localización ur-
Fuente: Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia.
bana y características del paciente, como intoxicación por

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consumo de alcohol y/o drogas, psicosis aguda o delirium y En lo que se refiere a las mujeres, según lo ya comentado,
conductas de búsqueda de drogas46. el abuso emocional en sus diferentes expresiones (abuso ver-
Diversas creencias personales, como considerar que se bal repetido, acusar, ridiculizar, insultar, gritar, humillar) tie-
trata de un accidente aislado, que uno ha provocado el ata- ne efectos negativos a largo plazo en la autoestima de las
que, que forma parte del trabajo o sentirse avergonzado, po- mujeres y contribuye a desarrollar sentimientos de inutili-
drían ser las razones que en muchos casos explican la infra- dad, desvalorización y autoculpabilización. Amenazar con
declaración de incidentes violentos47. Con todo, utilizando matar o dañar físicamente a la pareja, los hijos, otros miem-
un sistema de registro de incidentes en el sistema de salud, bros de la familia o mascotas, establece un poder dominante
se cita sólo el 9% de los episodios de violencia de todos los y coercitivo por parte del abusador. La pareja femenina sien-
informados. La proporción es más elevada en los servicios te terror, vulnerabilidad y falta de poder en la relación. Este
de urgencias (16%), y mucho mayor aún en los servicios de tipo de abuso emocional puede hacer que una mujer se sien-
salud mental (28%)48,49. El porcentaje de episodios de vio- ta desasistida y aislada. El abuso emocional puede tener se-
lencia es más habitual contra los médicos en formación50. rias consecuencias físicas y psicológicas para las mujeres
En cuanto a la frecuencia, según algunos trabajos realizados –depresión grave, ansiedad, dolor de cabeza persistente, pro-

A
en nuestro país, los abusos verbales y las amenazas son los blemas de espalda y de extremidades, problemas de estóma-
más frecuentes (un 44-54% y un 26-28%, respectivamente), go58– y es también más probable el abuso de alcohol como
seguidos de las agresiones físicas (28%)51. mecanismo de alivio59.
Respecto a las consecuencias del abuso emocional en los
ancianos, ya se ha comentado que se trata de un ámbito en el
Consecuencias del abuso que apenas se dispone de trabajos publicados. Con todo, y de
PI forma similar a lo comentado respecto a las mujeres, los ma-
Las consecuencias del abuso emocional infantil pueden ser yores que son emocionalmente abusados pueden experimentar
devastadoras a largo plazo. Muchos estudios de investiga- sentimientos de extrema inadecuación, culpa, baja autoestima,
ción concluyen que es más probable que los síntomas psico- síntomas de depresión, miedo al fracaso e indefensión60.
patológicos se desarrollen en niños que han recibido abusos El personal médico que ha sido objeto de comportamien-
emocionales. Estos niños pueden experimentar un patrón a tos violentos experimenta síntomas similares de cólera, mie-
largo plazo de depresión, enajenación, ansiedad, baja autoes- do, ansiedad culpabilización y pérdida de confianza61.
tima, relaciones sociales inapropiadas o turbulentas, o una
falta de empatía52.
Detección del abuso
CO

Durante su infancia las víctimas pueden presentar dificul-


tades en su desarrollo. Algunos niños pueden presentar un
ajuste psicológico y emocional deficiente. En la adolescen- El abuso emocional es el más difícil de definir y detectar.
cia tienen dificultades para confiar, participar y lograr una Las definiciones varían según los estudios, se dispone de po-
plena satisfacción en las relaciones interpersonales, así como cas medidas estandarizadas para medirlo y falta investiga-
para resolver los sentimientos complejos de su infancia. De ción empírica62; además, las perturbaciones en la conducta y
adultos pueden tener dificultades en reconocer y apreciar las el funcionamiento mental, producto de las situaciones de
necesidades y sentimientos de sus propios hijos y abusar de maltrato, pueden tener otra etiología diferente63. Con todo,
ellos emocionalmente53. Los niños pueden recuperarse del las definiciones tienden a centrarse en la conducta del abusa-
dolor y el daño físico, pero les puede resultar más difícil re- dor, los síntomas manifestados por la víctima o ambos. Co-
cuperarse de la degradación, la humillación o el abuso de mo indica Sorsoli64, en el caso del maltrato infantil, ello sig-
confianza sufridos54. Los niños que experimentan rechazo es nifica que el abuso puede identificarse o por la presencia de
más probable que muestren hostilidad, conducta agresiva o acciones específicas de los padres que han demostrado ser
pasivo-agresiva, dependencia extrema, opiniones negativas dañinas, o por la presencia específica de unos resultados en
de sí mismos y de sus habilidades, inestabilidad emocional, el niño que parecen ser la consecuencia del abuso emocio-
falta de empatía y percepción negativa del mundo que les ro- nal. Hay que tener en cuenta que las definiciones que permi-
dea55. ten a los clínicos una mejor comprensión de la naturaleza
Los niños que son testigos del abuso hacia sus madres son del abuso emocional, pueden no ser de utilidad desde el pun-
víctimas de abuso emocional. Crecer en tal ambiente es ate- to de vista de la intervención legal de los servicios de pro-
rrador y afecta gravemente al desarrollo psicológico y social tección infantil. De acuerdo con ello, es importante conside-
del niño. Los chicos varones pueden aprender modelos de rar ambos aspectos y sospechar abuso emocional cuando un
conducta violenta, y las chicas percibir el abuso como algo niño: a) muestra conductas extremas (abiertamente compla-
normal que forma parte de una relación. Ello contribuye a ciente o abiertamente demandante, extremadamente pasivo o
perpetuar el ciclo de la violencia intergeneracional56,57. inapropiadamente agresivo; b) inapropiadamente adulto (ha-

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ce de padre de otros niños) o inapropiadamente infantil – Introversión.


(problemas de enuresis, chuparse el pulgar, mecerse constan- – Conducta pasiva, de indefensión.
temente); c) retrasos manifiestos en el desarrollo físico o – Cambio de comportamiento llamativo reciente.
emocional, y d) intentos de suicidio y/o falta de vínculo con – Cambios en el patrón de alimentación habitual.
el padre65. La presencia de un único signo no prueba que el – Ansiedad, temblor, actitud temerosa de algo y/o al-
abuso infantil se esté produciendo en una familia; sin embar- guien.
go, cuando estos signos aparecen repetidamente o de forma – Autoinculpación acerca de su situación actual.
combinada, debe analizarse atentamente la situación y consi- – Pérdida de memoria llamativa no explicable por otra ra-
derar la posibilidad de abuso infantil. También debe tenerse zón.
en cuenta el comportamiento de abuso de los padres o tutores.
Se debe registrar la información del trato –generalmente frío En la detección del abuso emocional el profesional médico
y distante– y los comportamientos regulares de los padres –en tiene un papel muy determinante. En la mayoría de casos es
concreto, minusvalorar, denigrar, acusar de cualquier cosa, u el único profesional con posibilidad de acceder a las personas
otras formas de trato hostil o de rechazo–, así como amenazar víctimas de maltrato. Además, en la atención primaria se

A
con otras formas de maltrato (golpes, abandono, etc.)66. De puede recoger más información del caso, tanto en los segui-
acuerdo con lo comentado, es difícil establecer factores de mientos que llevan a cabo en las consultas, como los de otros
riesgo. Sin embargo, el conocimiento y la comprensión del profesionales y servicios dentro y fuera del sistema de salud.
tema es clave para reconocerlo. Los indicadores señalados Preguntar directamente es una buena forma de obtener in-
anteriormente y los recogidos en la tabla 12 pueden ayudar en formación. Los estudios llevados a cabo indican la importan-
la detección del abuso emocional infantil67. cia de acceder a esta información preguntándola, aunque no
PI
En el caso de los ancianos víctimas de maltrato emocio- haya consenso sobre la implantación del cribado poblacional.
nal, algunos trabajos68,69 señalan, además, los factores si- En general, el argumento más importante para estar en desa-
guientes: cuerdo70 se refiere a la necesidad de aplicar el cribado sólo
cuando el sistema de salud dispone de garantías para respon-
– Sensación de resignación y desesperación con referen- der de forma apropiada a las revelaciones sobre maltrato, en
cias vagas al maltrato. términos de seguridad, estigma, reducción de la violencia o

TABLA 12. Indicadores para la detección del abuso emocional


CO

Niños* Adultos

Depresión Depresión
Introversión Introversión
Baja autoestima Baja autoestima
Ansiedad grave Ansiedad grave
Temor Temor
Problemas de desarrollo en la infancia Sentimientos de vergüenza y culpa
Agresión Llorar con frecuencia
Inestabilidad emocional Autoculpabilización/autodesvalorización
Problemas de sueño Abiertamente pasivo/sumiso
Quejas somáticas Aislamiento social
Conducta inapropiada para la edad de desarrollo Retrasar o negarse al tratamiento médico
Abiertamente pasivo/sumiso Malestar o nerviosismo en presencia del cuidador o familiar
Intentos de suicidio o comentarios sobre ello Intentos de suicidio o comentarios sobre ello
Dependencia extrema Abuso de drogas
Ejecución por debajo de la norma Evitación del contacto ocular
Incapacidad para confiar Otras formas de abuso presentes o sospechadas
Robar
Otras formas de abuso presentes o sospechadas
*Estos indicadores pueden diferir según el desarrollo y la edad del niño.
Fuente: National Clearinghouse on Family Violence.

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sos protocolos y guías publicados74-76, algunas de las cuales


TABLA 13. Recomendaciones para el cribado de la violencia
en la mujer en la práctica clínica se recogen en la tabla 13. El médico debe comunicar la con-
fidencialidad de la información, informar sobre las conse-
Deben realizarlo fundamentalmente los médicos de familia por
razones del mayor acceso y conocimiento de los pacientes
cuencias del abuso en la salud de la mujer y la de sus hijos,
y, sobre todo, garantizar la seguridad ante la revelación y te-
En la consulta, sin ningún acompañante
ner en cuenta algunas normas en el momento de la entrevista
Preguntarlo verbalmente
(tabla 14).
A todas las mujeres a partir de los 16 años sin límite superior de
edad El cribado a las personas mayores se ha llevado a cabo
por parte de algunos grupos de estudio o asociaciones, como
Las preguntas tienen que abarcar los 3 tipos de violencia:
psíquica, sexual y física la American Medical Association (AMA), que recomienda
Antes de comenzar a indagar, se debe explicar a la mujer que el que los médicos pregunten de forma habitual y directa sobre
propósito es preguntar por la violencia de género y declarar que la existencia de maltrato, o la US Task Force (USTF)77 y la
las preguntas se realizan a todas las pacientes debido a la alta
prevalencia y al daño que este tipo de violencia puede ocasionar Canadian Task Force (CTF), que incluyen la detección del
Ser honestos y mantener una actitud empática y seria durante las
maltrato en sus programas de cribado. Algunas pautas se re-

A
preguntas cogen en la tabla 15.
Ejemplo de cribado: De forma muy similar a lo comentado para la violencia
¿Se siente en peligro con alguien que viva con usted? contra la mujer, la actuación debe enfocarse en 4 aspec-
En el último año ha habido alguien que:
tos78:
¿Le haya herido, empujado, abofeteado, dado patadas?
– Atención al daño: entrevista con el anciano, procurando
¿Le haya controlado lo que ha hecho: haber quedado o hablado
PI
con alguien, haber ido a algún sitio o haber vestido algún tipo crear un clima de confianza y respeto, siguiendo los princi-
de ropa en concreto? pios de honestidad, seriedad y confidencialidad que el pro-
¿Le haya forzado a hacer algo que usted no quería hacer? blema conlleva; utilizar la escucha activa (asentimientos
¿Le haya controlado los accesos a sus cuentas? gestuales y verbales); registrar la valoración de las lesiones
¿Le haya impedido tener acceso a sus documentos personales y la existencia de maltrato en la historia clínica.
y legales? – Valoración de la seguridad de la víctima, según los da-
¿Le haya amenazado? ños causados y la apreciación de inseguridad por su parte.
¿Le haya intimidado? – Comunicación del caso: realizar el parte de lesiones es
¿Le haya aislado de sus amigos o de su familia? una obligación legal ante la sospecha o información de ter-
CO

¿La haya criticado constantemente o llamado por nombres o ceros de maltrato físico o psíquico, incluso con oposición de
desvalorizado? la víctima.
Si es inmigrante, ¿alguien ha usado o amenazado con usar su – Informar al mayor de la situación, la evolución, las posi-
estatuto de inmigrante contra usted o sus hijos?
bilidades de actuación y los recursos; ofrecer también la infor-
Modificado de Nelson et al38.
mación necesaria para formular una denuncia si lo desea.

mejora de la calidad de vida de la mujer y/o de sus hijos por Abordaje del abuso verbal en
el hecho de hacerlo. Con todo, y teniendo en cuenta las cau- el entorno laboral y sanitario
telas necesarias en términos de la necesaria formación del
profesional, los protocolos y procesos de detección, el nivel En la determinación de la vulnerabilidad que se produce en
de coordinación intra/interinstitucional y el seguimiento ne- los recursos de salud respecto a los comportamientos de
cesario, los argumentos a favor del cribado universal71,72 re- agresión y violencia, tanto de los pacientes como de sus fa-
comiendan llevarlo a cabo para preservar la salud (en pacien- miliares y/o cuidadores, es importante partir del análisis de
tes sin historia de abuso), detectar el riesgo para reducir la los factores contribuyentes y precipitadores de éstos. Desde
prevalencia e identificar a las mujeres maltratadas en un am- este punto de partida se han generado diversas estrategias de
biente de seguridad, confidencialidad y apoyo que favorezca prevención e intervención en la agresión en contextos labo-
el proceso de intervención73. Los estudios llevados a cabo in- rales sanitarios. De acuerdo con ello, el tratamiento de la
dican que la mayoría de las mujeres aceptan ser preguntadas, violencia se lleva a cabo desde una perspectiva multidisci-
hayan sido o no maltratadas. Además, el hecho de haber sido plinaria. Se parte de políticas diseñadas para garantizar la sa-
preguntadas en algún momento les informa de que podrán lud y la seguridad en el trabajo, implicando a los diversos
hablar de ello en ese contexto, si decidieran hacerlo. departamentos, servicios y recursos humanos del sistema de
Para llevar a cabo el cribado en la práctica clínica, es im- salud. En general, las estrategias que se llevan a cabo suelen
portante atender a las cuestiones que se recogen en los diver- apoyarse en 3 pilares79,80: a) diseñar políticas antiviolencia;

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Orte Socías C et al. El abuso verbal

b) evaluar quién está en riesgo y de qué tipo, y c) desarro-


TABLA 14. Normas que hay que tener en cuenta en la entrevista
llar, implementar y evaluar el plan de gestión del riesgo.
En esta misma línea, algunas iniciativas de programas de Ver a la mujer a solas garantizando la confidencialidad
tolerancia cero, con mensajes claros de no tolerancia de la Utilizar el tiempo necesario para la entrevista
violencia y agresión contra el personal de salud81, han gene- Observar las actitudes y el estado emocional (a través del lenguaje
rado una variedad de iniciativas, desarrolladas para reducir verbal y no verbal)
los incidentes violentos e incluyen los siguientes82,83: Facilitar la expresión de sentimientos
Mantener una actitud empática, facilitadora de la comunicación,
con una escucha activa
– Tomar conciencia de la realidad de la violencia y dedi-
car recursos para el desarrollo de programas de formación Hacerle sentir que no es culpable de la violencia sufrida
en métodos de evaluación del riesgo de agresión. Para eva- Expresar claramente que nunca está justificada la violencia en las
relaciones humanas
luar el éxito de un programa y asegurar el seguimiento ade-
Abordar directamente el tema de la violencia, con intervenciones
cuado de la violencia de forma continuada, las personas im- facilitadoras
plicadas deben informar enseguida de todas las amenazas y
Creer a la mujer, tomarla en serio, sin poner en duda su

A
ataques recibidos. Algunas Administraciones, a partir de in- interpretación de los hechos, sin emitir juicios, intentando quitar
dicadores basados en información objetiva, han desarrollado miedo a la revelación del abuso
instrumentos de evaluación y gestión del riesgo de agresión. Alertar a la mujer sobre los peligros que corre
Estos instrumentos se utilizan en la evaluación inicial de pa- Respetar a la mujer y aceptar su ritmo de elección
cientes en diversos contextos de consultas externas84. Ayudarle a pensar, a ordenar sus ideas y a tomar decisiones
– Implementación de programas de formación dirigidos al Registrar estos hechos con precisión en la historia clínica
PI
conjunto de los trabajadores del sistema de salud: directivos, Modificado de Nelson et al38.
supervisores y personal de seguridad. Los programas para
médicos deben incluir habilidades para reconocer y respon-
der a la violencia (tanto en su escalada como en las estrate-
TABLA 15. Ejemplo de cribado en el maltrato a las personas
gias de apoyo y ayuda una vez que ésta se ha producido). mayores
Hay que prender a reconocer las señales de conducta y anti-
cipar la violencia. En una situación peligrosa, además de las ¿Alguna vez alguien en su casa le ha pegado o hecho daño?

habilidades de comunicación y de solución de conflictos pa- ¿Le han cogido cosas sin su consentimiento?
ra reducir la tensión y percibir que se tiene el control de la ¿Alguna vez le han regañado o amenazado?
CO

situación, hay otras precauciones que los médicos pueden ¿Tiene miedo de alguien en su casa?
llevar a cabo para garantizar su seguridad: mantener la dis- ¿Ha firmado alguna vez documentos que no comprendía?
tancia física, no dar la espalda a una persona potencialmente ¿Está solo a menudo?
violenta, saber dónde están las salidas de seguridad y elimi- ¿Alguna vez no le han ayudado en sus necesidades o cuidados
nar todo aquello que pueda ser usado como arma, ya sean personales cuando lo necesitaba?
objetos personales, como estetoscopios, corbatas o joyas, o ¿Alguna vez alguien le ha tocado sin su consentimiento?
material fungible y mobiliario. Es importante incluir estos Modificado de Nelson et al38.
contenidos en la formación inicial y/o permanente, así como
elaborar guías de buena práctica para los médicos en forma-
ción, adaptadas a los servicios, situaciones y pacientes85,86
relacionados con la propia especialidad. y adecuada a los problemas de salud mental y los servicios
– Realizar un trabajo continuado en la identificación de de urgencias.
personas, lugares y situaciones en que se puedan producir También se recomienda que las áreas de espera dispongan
episodios de agresión y violencia no controladas, y generar de entretenimientos, como materiales educativos para los pa-
estrategias de prevención y control de éstas. cientes, revistas, espacios abiertos y teléfonos. En contextos
La mejora del diseño de los edificios y el mobiliario para de alto riesgo también se utilizan otras medidas de seguri-
reforzar la seguridad del personal y de los pacientes, así co- dad, como timbres de alarma y sistemas de aviso de pacien-
mo la mejora de los métodos de trabajo, también influye en tes violentos87.
la creación de un entorno seguro, especialmente en los servi-
cios que atienden a pacientes de mayor riesgo, como los de
salud mental y los de urgencias. Conclusión y perspectivas
Debido a que los largos retrasos se han asociado con la
frustración y la violencia, es recomendable implementar ini- Según Garbarino88, las razones que explican las dificultades
ciativas de gestión y métodos de trabajo de respuesta rápida en relación con la definición operativa del abuso emocional

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Orte Socías C et al. El abuso verbal

se deben, en parte, a la falta de consenso sobre las formas de las unidades de salud mental y los equipos educativos espe-
trato personal que son inaceptables; definir el maltrato en cializados de ámbito escolar.
función de las características del maltratador, el comporta- – Si se ha detectado violencia en la mujer y ésta tiene hi-
miento, las consecuencias en la víctima y el contexto am- jos, hay que contactar con el pediatra e informarle de esta si-
biental, de forma aislada o en combinación, y si tales defini- tuación, para prevenir las repercusiones en los menores.
ciones pueden utilizarse para propósitos distintos en un con- – Registrar en la historia clínica del paciente la valoración
texto científico, legal o clínico. En las diferentes formas de médica del alcance de las lesiones y los daños. Elaboración
maltrato familiar a las que nos hemos referido aquí, las ac- del correspondiente Informe Médico por Malos Tratos, del
ciones identificables de comisión u omisión que producen que quedará constancia en la historia clínica.
consecuencias negativas observables son las que han susci- – Emitir un parte de lesiones y comunicarlo al juzgado de
tado mayor interés, respecto al abuso emocional, y ello a pe- guardia, guardando una copia en la historia clínica del pa-
sar de su frecuencia, continuidad y gravedad de su repercu- ciente.
sión física, cognitiva, emocional, comportamental y social – Poner el caso en conocimiento de los servicios sociales.
en los diferentes grupos considerados. – Informar al paciente o allegados sobre los pasos que

A
De acuerdo con ello, tanto en la prevención primaria co- hay que seguir para la formalización de la denuncia.
mo en la prevención secundaria se requiere un alto nivel de
formación y sensibilidad de los profesionales de la atención Respecto a la agresión y la violencia en el entorno laboral
primaria para favorecer la detección y la prevención del abu- sanitario, la incidencia de la violencia a la que se enfrentan
so emocional. La promoción del buen trato y de las relacio- los trabajadores en contacto con las personas que sufren es-
nes afectivas en la familia, la solidaridad intergeneracional y trés por razones de salud es tan común, que con frecuencia
PI
la no violencia son valores que se deben potenciar, llevando se considera una parte inevitable del trabajo y no se notifica.
a cabo programas y acciones conjuntas con otros profesiona- Por ello, en un porcentaje importante de casos ni siquiera se
les e instituciones de la comunidad, además de en la práctica toma en consideración, a pesar de las consecuencias en las
cotidiana. personas que la padecen. Tampoco se tiene en cuenta desde
Los indicadores señalados deben tenerse en cuenta en los la perspectiva en que estos comportamientos afectan a la re-
diferentes grupos y situaciones de riesgo de maltrato infan- lación y el trato del médico con los pacientes y/o sus fami-
til, violencia de género y maltrato a las personas mayores, liares. Tomar conciencia de la violencia que se produce en
además de potenciar las relaciones con otros recursos de sa- los servicios de salud es el principal argumento para imple-
lud, sociales y legales que permitan agilizar las derivaciones, mentar políticas de prevención e intervención de tipo multi-
CO

potenciar el trabajo conjunto y el seguimiento de los casos, disciplinario, cuyo objetivo sea la seguridad del personal sa-
tanto en las consultas externas como en el domicilio. nitario y de los pacientes. Tomar conciencia de la violencia
La detección del maltrato y del abuso es crucial, teniendo implica desarrollar métodos e instrumentos estandarizados
en cuenta que la violencia intrafamiliar tiende a perpetuarse para registrar los incidentes de agresión y violencia, así co-
y a formar parte de la organización y de las relaciones fami- mo estrategias de gestión de éstos. Tomar conciencia de la
liares, que se instala en los vínculos afectivos más íntimos, y violencia también significa que la institución explicita en di-
la dificultad de respuesta social en un entorno privado como versas formas y mediante diferentes estrategias que ésta es
es el familiar. Por tanto, se trata de hacer un esfuerzo impor- inaceptable y que no está tolerada.
tante en el comportamiento de las diferentes personas invo-
lucradas en la historia clínica, la historia social y el segui-
miento de los casos. Bibliografía
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