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En el proceso educativo, se le toma más importancia a los procesos cognitivos que los

emocionales. Para muchos estos dos aspectos son procesos independientes, que no
tienen ninguna relación, no obstante esto no es conveniente si se quiere lograr el
desarrollo integral del educando. Es por eso que se debe incorporar los aspectos
emocionales en el proceso educativo, partiendo de qué son las emociones, cómo a
partir de estas surge la educación emocional y cuál es su papel e importancia en el
proceso cognitivo. También se debe de tomar en cuenta el papel de los docentes que
influyen en nuestras emociones en relación con nuestro aprendizaje.
Se manifiesta entonces que "los seres humanos vivimos en un continuo fluir emocional
consensual en el cual aprendemos en nuestra coexistencia en comunidad”.(1)
Es así que

(2)
A partir de Salovey y Mayer (1990), Gardner (1995) y Goleman (1996), la educación
no solo debe basarse en lo académico, al desarrollo cognitivo, o a las interacciones
sociales, por el contrario debe abarcar todas las dimensiones de la existencia humana.
Ya en 1960, Bruner determinó que el aprendizaje consta de tres procesos, que se dan
simultáneamente: la adquisición (que implica información nueva o un refinamiento de
la información ya existente), la transformación (que implica el manipular el
conocimiento para ajustarlo a las nuevas tareas) y la evaluación (para comprobar si la
manera en que manipulamos la información es la adecuada).
Es por eso que más adelante se considera al aprendizaje como el producto de dos
vertientes que se relacionan entre sí, la racional, enlazado a lo cognitivo y la
emocional, enlazado a los sentimientos.
Los alumnos aprenden mejor y más cuando están motivados, cuando sienten interés
en algo o les gusta, y por lo tanto, ´´estimular emociones positivas o desarrollar
habilidades emocionales implica mejores resultados cognitivos´´.(3)
No basta solo tener un alto coeficiente intelectual para tener éxito. Por ejemplo, el
hecho de aquellos alumnos con un buen desempeño académico pero que carecen de
la seguridad emocional para hablar en público, que carecen de habilidades de
comunicación asertivas y cuyo temor a ser criticados o equivocarse dificulta su
desarrollo cognitivo.

CONCLUSIONES:
La educación emocional hoy en día es muy importancia para un óptimo aprendizaje,
siempre ligado al aspecto cognitivo, ya que los dos interactúan conjuntamente.
Tanto emoción como cognición constituyen un todo dialéctico, en el cual si hay una
modificación en uno afecta de igual forma al otro.
El profesorado no constituye un elemento neutro en su acto pedagógico tanto en razón
de la transmisión de contenidos de dominio culturalmente especificados (currículo),
como por la manifestación de sus emociones y del impacto de éstas en los educandos.
Es por eso que el proceso de enseñanza-aprendizaje está influenciado por cómo el
profesor logra manejar sus propias emociones y cómo influyen estas en los
estudiantes. Ellos deben motivar a sus estudiantes, dándole mensajes y alentándolos
con frases inspiradoras.
Esto nos conduce a señalar que si se gana el corazón del alumno o de la alumna, el
aprendizaje está totalmente asegurado.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:
1. BERROCAL PF, PACHECO NE. La educación de las emociones desde el
Modelo de Mayer y Salovey_2005. 2005; 32.
2. García Retana JÁ. La educación emocional, su importancia en el proceso de
aprendizaje. 29 de junio de 2012; 36(1).
3. Divulgación dinámica. El papel de la Educación Emocional en el Proceso
Educativo Divulgación Dinámica | Cursos Online y Formación a distancia. 2017

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