Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
AÑO
I. ESPAÑA
El fin de Las Guerras Napoleónicas permitió la Restauración Borbónica en Fernando VII (Tratado de Valencay –
1813). Este Monarca, con el apoyo de la Santa Alianza (intervención en 1823), gobernó sin respetar a la
Constitución de Cádiz de 1813 y murió en 1833. Dejó como única heredera a su hija Isabel, contra la cual se
levantó Carlos, hermano de Fernando (y Partidario del Absolutismo). Esta “1ra Guerra Carlista” culminó con la
victoria del Bando de Isabel II, apoyada por Los Liberales. Desde 1833 hasta 1843 el poder residió en la Reina
Madre María Cristina (1833 – 40) y luego en el General Espartero (1840 – 43) hasta que Isabel fue declarada
mayor de edad.
Durante una década (1844 – 1854) gobernaron Los Liberales moderados, luego sustituidos por Los Liberales
Progresistas (1854 – 1856), tras un Pronunciamiento Militar. Los últimos años de este reinado se vieron
dominados por inestabilidad y crisis, hasta que en 1868 la reina tuvo que abandonar el trono.
Pese a esto, su régimen tuvo destacadas iniciativas: introducción de los ferrocarriles, una tímida redistribución
de tierras, política hidráulica, desaparición del Bandolerismo e inicios del maquinismo. Sin embargo, uno se logró
dominar al ejército, de Gran influencia, y prosiguieron los “Pronunciamientos” (1848, 1854, 1860).
En Política Exterior, España se mantuvo al margen de las luchas entre Los Estados Europeos. Destacaron, sin
embargo, sus participaciones en la expedición contra México (al lado de Francia y Gran Bretaña) y en la fallida
Rusia había sido el Bastión del Absolutismo durante la época de los Zares Alejandro I (el vencedor de Napoleón)
y Nicolás I (quien aplastó la Revolución de Polonia en 1830). Pero la derrota ante Francia e Inglaterra en la
Guerra de Crimea convenció al Nuevo Emperador, Alejandro II (1855 – 1881), de la necesidad de realizar algunas
reformas. En 1861 se decretó la abolición de la servidumbre, liberándose a 50 millones de siervos, entre los que
provinciales elegidas por el pueblo. En política exterior, Rusia prosiguió su avance en Asia, alcanzando el Puerto
Estas Reformas, sin embargo, no alcanzaron grandes resultados y el descontento creció. De otro lado, los grupos
Anarquistas y socialistas recrudecieron sus campañas y sus acciones terroristas (El propio Zar fue asesinado en 1881).
Los sucesores del Emperador, Alejandro III y Nicolás II, reanudaron la política autocrática y prepararon el camino
TAREA
TAREA DOMICILIARIA
DOMICILIARIA
Nº
Nº 2
2