*¿quién de acá tiene un plan? *¿cómo es?

*(preguntas abiertas)
*¿quién lleva a cabo ese plan? *¿otras personas pueden meterse y cambiar el plan?
¿centrado en mí? ¿cerrado o abierto?
Una especie de chiste que se hace en este momento es este: el plan de Dios es que no hay plan.
esto, a mí, me hizo mucho ruido cuando me puse a masticar esta charla.
veamos porqué.
el hecho de que no haya plan *¿qué significa?
puede ser: ya está todo dado... no necesito nada... estoy perdido...
que no haya plan, de alguna manera, deja todo librado a la suerte. si hay algo que no se parece a
dios, es la suerte.
en la jerga cristiana, hablamos de el plan (o historia) de salvación. describe paso a paso como Dios
se fue revelando, desde el relato de la creación hasta la concresión de la revelación en Jesús de
Nazaret.
hay numerosos relatos que hablan de un plan, según lo va entendiendo el pueblo. quisiera centrarme
en tres.
en dos de ellos, los invito a buscar similitudes con la vida real que, por supuesto, son mera
coincidencia.

abraham. es un hombre absolutamente inquieto. sale de la tierra de su padre. recorre kilómetros (gn
11) Su anhelo: tierra y descendencia. llega a egipto. se hace pasar por hermano de su mujer para
salvarse y se llenó de guita (gn 12). cuando Dios le prometió un hijo (cosa que anhelaba desde que
dejó su tierra natal), el tipo, de puro ansioso, va y se acuesta con una criada porque Sara era muy
vieja y no iba a poder concebir(gn 16).
¿qué pasó? Sara concibió.
Había un plan... abraham también tenía su plan o, más bien, su manera de llevar a cabo el plan.
quizas porque no supo estar atento, porque le ganó la ansiedad, se encontró en una disyuntiva:
seguir su propio plan o seguir el plan de Dios...

moises. fue criado en la casa del faraón por su propia madre después de salvarse de la gran masacre
(ex 2). él sabía que era hebreo y, ya grande, se conmovió con los sufrimientos de su pueblo (ex 2)
su anhelo: la justicia, la liberación. Dios también se conmueve (ex 3). cuando Dios lo llama, pone
mil excusas... pero... pero... pero... y Dios se las rebate una a una. al parecer era tartamudo o tenía
alguna dificultad para hablar (ex 4). acá, Dios se la rebate, pero moises insiste. Dios se hincha los
huevos y le dice que llame a su hermano. a partir de acá, el relato del plan es tremendo... dios dice
que vaya, pero que el faraón no va a escuchar porque él mismo va a endurecer su corazón... una
locura... como diez plagas... se va todo a la mierda.
Se escapan y tienen que pasar por el desierto, símbolo importantísimo para nosotros hoy, como para
Jesús.
El pueblo judío es un desastre, no para de mandarse cagadas. Y dios vuelve, y vuelve, y vuelve.
Moisés los caga a pedos, les pone leyes para ver si se calman un poco.
la cuestión es, hay plan, salir de la opresión, llegar a la tierra prometida atravesando un desierto.
Moisés y sus peros... llevan a cabo el plan.

Todo muy lindo, pero el cuentito de la Tierra y la descendencia no va más. OK. Así lo entendió el
pueblo judío hasta ese momento.

Jesús. Ahora tenemos que entrar en un camino complicado. Ya no hablamos de descendencia. Ya no

hablamos de tierra prometida.
El pueblo, la descendencia, está, en su tierra, oprimido. Su anhelo: la liberación, establecer un
nuevo reino de Israel, poderoso, con la Ley de Dios a la cabeza. Con todo esto, viene un tipo y
empieza a predicar: el reino de los cielos está cerca. Empieza a contarle al pueblo que Dios se hace
presente y que lo salva, lo libera de la opresión ¿de qué opresión?¿de los romanos?
Alguien que habla de Dios como un Padre. ¿qué significa esto?
Francisco hablará, más bien, de un Dios Madre (tal vez por su mala experiencia con su propio
padre)

¿cuál es el mensaje?
(Mt 19, 16 y ss) ¿A qué hacen referencia los mandamientos? Al otro, al prójimo. retoma la Ley, la
resignifica. La perfección es llevar al extremo la ley.
(Jn 6, 27) podemos leer también un poco más arriba, desde el v. 20...
Amen a sus enemigos.
(Mt 25, 35-40) Este Jesús, que predica el Reino, la liberación, se identifica con “el más pequeño”
cuando lo ponen en el lugar de Rey, de Mesías. ¿qué clase de mesías esperaba el pueblo? ¿qué clase
de salvación?
(Jn 13, 34-35) mandamiento ¿nuevo? Sin duda, para el pueblo, es algo nuevo.
Ámense. Así van a reconocerlos. Ese es el plan. Así vamos a liberar al pueblo de la opresión,
finalmente.

El mensaje es claro, pero parece que no conviene. Entonces, eliminemos al mensajero.

No nos gusta el plan de Dios. Nos saca de nosotros mismos, de nuestra comodidad. El plan es la
salvación por la entrega de mi vida al prójimo, al hermano, al pequeño, al enemigo. Es un desierto
enorme pero que promete la liberación.