MATERIA: PENSAR EN LA CIUDAD: MANIZALES EN EL SIGLO XXI.
NOMBRE: Manuela Soto González.
CÓDIGO: 0318070.
ESCRITO SOBRE EL ESTADO DEL ARTE DEL ESPACIO PUBLICO.
El espacio público es el conjunto de lugares que entretejen la ciudad, de tal manera
que le dan una estructuración, significado y uso al suelo de esta; mediante este conjunto de espacios como lo son parques, plazas de mercado, centros culturales, espacios deportivos y demás, la ciudad y quienes la conforman pueden desarrollarse en ámbitos sociales, históricos, geográficos, culturales y económicos, puesto que en estos lugares se desarrollan actividades como la interacción, el comercio, la divulgación de la cultura, el esparcimiento, entre otros.
Por lo anterior se entiende que el espacio público es de gran valor para el
crecimiento de los municipios, y su buen empleo marca una pauta para un crecimiento sostenible, no obstante, a pesar de su importancia, este espacio ha presentado grandes problemáticas a medida del tiempo y los diferentes lugares en los que se ha ubicado, las problemáticas que ha presentado comienzan desde una mala interpretación del significado y la importancia de este a través de los planes, las normativas y las políticas que propone la urbe para su manejo, las cuales coaccionan su crecimiento y funcionamiento, y van hasta el mal uso o poco uso de estos lugares por parte de los ciudadanos, haciendo que esos espacios dejen de ser públicos y se conviertan en un espacio sin definición, ni utilidad.
Ejemplos de estas problemáticas se dan cuando en parques hay unos horarios de
apertura y un sistema de vigilancia, los cuales restringen el acceso a lo público, también cuando una zona verde en un barrio se convierte en un deposito de basura, lo cual limita el uso de esta a la comunidad, o cuando los entes que gobiernan no respetan las políticas que rigen el espacio y no dan garantías en su calidad, en otras palabras no administran correctamente lo público ocasionando así el deterioro de parques, plazas, escenarios culturales, así mismo al no administrar correctamente la distribución de estos lugares, puede desfavorecer a sectores olvidados de la ciudad.
Por esta razón es el mismo ciudadano quien debe empezar a empoderarse y
apropiarse de estos espacios, pues es en beneficio de él por lo cual se crearon, el utilizarlo y cuidarlo hace que estos espacios cumplan su función como lugares que estructuran la ciudad y sociedad, también el exigirle a los gobernantes la implementación de estos espacios y que las políticas y normas que los dirijan vayan acorde al beneficio que estos generan para la comunidad.