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Resumen
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Introducción
Chia ( Salvia hispanica L.) se originó en México y Guatemala; Ha sido parte de la
alimentación humana durante unos 5500 años. Tradicionalmente, los aztecas y los
mayas utilizaban las semillas en la preparación de medicinas populares, alimentos y
lienzos. En tiempos prehistóricos en las sociedades colombianas, fue el segundo cultivo
principal después de los frijoles (Armstrong 2004 ). Las versiones enteras y molidas de
chia junto con su aceite fueron la parte de los alimentos, los cosméticos antiguos y la
parte de los rituales religiosos en tiempos prehistóricos en las comunidades aztecas
(Beltran-Orozco y Romero, 2003).). La palabra chia se deriva de una palabra española
chian que significa aceitosa, es semilla oleaginosa, con una casa de poder de ácidos
grasos omega-3, proteína de calidad superior, mayor cantidad de fibra dietética,
vitaminas, minerales y una amplia gama de antioxidantes polifenólicos que actúan como
antioxidante y salvaguarda las semillas de la descomposición química y microbiana
(Cahill 2003 ). La existencia de chia como parte integral de la dieta precolombina había
hecho que sus dietas fueran incluso superiores a la dieta actual (Hentry et al. 1990) .) lo
cual también es admitido por la ciencia moderna. El enorme potencial nutricional y
terapéutico de la chia es poco conocido, ya que ofrece una gran perspectiva de futuro
para los sectores de alimentos, alimentos, médicos, farmacéuticos y neutracéuticos. La
información contenida en esta revisión puede ser útil para personas conscientes de la
salud que desean estar saludables a través de alimentos naturales. Este artículo describe
el enorme potencial nutricional y terapéutico de la semilla de chia para convertirla en
parte de una dieta promedio para una mejor salud y longevidad.
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Descripcion botanica
Chia pertenecen a la familia Lamiaceae; Genera Salvia Specie; hispanica, comúnmente
conocida como chia, sabio español, chia mexicana y chia negra (Hentry et al. 1990 ). La
planta es una hierba anual que florece en verano, con una altura de aproximadamente un
metro con hojas pecioladas inversas y hojas dentadas (4–8 cm de largo; 3–5 cm de
ancho) con flores hermafroditas (USDA 2011 ). La planta puede crecer en una amplia
gama de suelos arcillosos y arenosos bien drenados con una tolerancia razonable a la sal
y al ácido. Puede producir 500–600 kg de semilla / acre, pero bajo condiciones
agronómicas apropiadas, también se ha informado el rendimiento de 2500 kg / acre
(Cahill 2003 ).
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Base de datos nacional de nutrientes del USDA para referencia estándar, versión 24 (2011)
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Contenido de proteínas
Con un contenido de proteínas del 20%, la chía posee un potencial masivo para corregir
y prevenir la desnutrición energética de las proteínas. El contenido de proteínas de la
semilla depende en gran medida de los factores ambientales y agronómicos. El
contenido de proteínas de la semilla de chía es mayor que el contenido de proteínas de
todos los cereales. La ausencia de gluten en la chía es otra característica única de la chia
que puede ser digerida por los pacientes que padecen la enfermedad celíaca. La
literatura reveló la presencia de 9 aminoácidos esenciales en chia en una cantidad
apreciable. Los alimentos ricos en proteínas tuvieron un gran efecto en la pérdida de
peso debido a la pérdida de grasas en el cuerpo. Los resultados de un estudio revelaron
que la ingesta de proteínas del 25% de la energía total, consecuencia de una pérdida de
grasa significativa (Skov et al. 1999). El consumo de una dieta alta en proteínas también
puede ayudar a mantener el peso corporal. El efecto de la proteína alta (18% de la
ingesta de energía total) y la dieta baja en proteínas (5% de la ingesta de energía total)
en 113 hombres y mujeres con sobrepeso se investigó durante 4 semanas. Se concluyó
que el grupo que se alimentó con una dieta alta en proteínas perdió más peso que el otro
grupo que se mantuvo con una dieta baja en proteínas (Lejeune et al. 2005a). La ingesta
regular de chia puede ayudar a los hombres y mujeres con sobrepeso a perder peso; Sin
embargo, este aspecto necesita una investigación detallada. La proteína principal en la
semilla de chia es la globulina, que constituye aproximadamente el 52% de la proteína
total, en su mayoría con proteínas 11S y 7S, y el tamaño molecular osciló entre 15 y 50
kDa. Las albúminas y globulinas revelaron una mejor estabilidad térmica, albúminas,
globulinas, prolaminas y gluteninas desnaturalizadas a 103, 105, 85.6 y 91 ° C. La
semilla reveló un buen equilibrio de aminoácidos esenciales y no esenciales (Sandoval-
Oliveros y Paredes-Lopez 2013 ).
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Contenido de fibra
La fibra dietética contenida en los alimentos y especialmente en los cereales integrales
es un importante biocomponente debido a su potencial beneficio para la salud. Un gran
número de estudios de investigación han demostrado el efecto del consumo de fibra,
como la disminución del riesgo de enfermedad coronaria, el riesgo de diabetes mellitus
tipo 2 y varios tipos de cáncer (Reyes-Caudillo et al. 2008 ). Por otra parte, El consumo
de fibra dietética se ha asociado con los aumentos de la saciedad después de las comidas
y disminuye el hambre subsiguiente. Según la Asociación Dietética Americana, la fibra
dietética ha demostrado beneficios para el mantenimiento de la salud y la prevención de
enfermedades (USDA 2000). La semilla de chía contiene entre 34 y 40 g de fibra
dietética por 100 g, equivalente al 100% de las recomendaciones diarias para la
población adulta; La harina desgrasada posee 40% de fibra, 5-10% de la cual es soluble
y forma parte del mucílago. (Mohd et al. 2012 ) El contenido de fibra es mayor que la
quinoa, la linaza, y el amaranto, incluso rallador en comparación con otros productos
secos (Tabla (Tabla2).2 ). Por lo tanto, la semilla de chía se puede utilizar en la
prevención de muchas enfermedades cardiovasculares y la diabetes, entre otros, como
se demuestra por una serie de estudios epidemiológicos (Tablas (Tables33 y AND44 ).
Tabla 2
Contenido de fibra de algunos alimentos.
Tabla 3
Contenido de proteínas
Chía 20.70
Avena 16.89
Cebada 12.48
Maíz 9.42
Cereal Contenido de proteínas%
Arroz 6.50
Tabla 4
Perfil de aminoácidos del chia
Minerales
El enorme potencial nutricional es evidente por el hecho de que contiene 6, 11 y 4 veces
más calcio, fósforo y magnesio. El contenido de calcio, fósforo y potasio de la chía es
mucho mayor que el trigo, el arroz, la avena y el maíz, con 6 y 2,4 veces más de
espinacas e hígado de hierro (Beltran-Orozco y Romero 2003 ). La concentración de
macronutrientes en chia es como; calcio 631, potasio 407, magnesio 335, fósforo 860
mg / 100 g. Microelementos; Selenio 55.2, cobre 0.924, hierro 7.72, manganeso 2.72,
molibdeno 0.2, sodio 16 y zinc 4.58 μg / 100 g.
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Efectos cardio-protectores.
El ácido alfa-linolénico, los ácidos eicosapentaenoicos desempeñan un papel vital en la
formación de compuestos bioquímicos vitales como las prostaglandinas, leucotrienos y
tromboxanos, que se encuentran en numerosas funciones fisiológicas (Pawlosky et
al. 2003 ). La grasa omega-3 tiene la capacidad de bloquear las disfunciones de los
canales de calcio y sodio, que de otra manera pueden tener consecuencias en la
hipertensión (Leaf y Kang 1998 ). Los ácidos grasos omega-3 mejoran el tono
parasimpático, la variabilidad de la frecuencia cardíaca y protegen la arritmia
ventricular. Composición de ácidos grasos de chia ha sido reportado en la literatura
(Ricardo Ayerza; R Ayerza y W Coates), la concentración de ácidos grasos omega-3 y
omega-6 en todos los estudios fueron consistentes con variaciones menores
(Tabla (Tabla2).2). El contenido de ácido alfa-linolénico de la semilla depende en gran
medida de la etapa de desarrollo, se ha informado de una tendencia a la baja (23%) en la
concentración de ácido alfa-linoénico en la semilla completamente madura, y también
se ha informado de una forma similar de disminución en Contenido de lignina (Norlaily
Mohd Ali,). Ingeborg et al. ( 2004) realizó un metanálisis para determinar la correlación
cuantitativa entre la ingesta de ácido alfa-linoénico y la mortalidad por insuficiencia
cardíaca, el aumento de la ingesta de ácido alfa-linoénico redujo el riesgo de
insuficiencia cardíaca (riesgo relativo combinado de 0,79). Los resultados de una
investigación científica realizada en el Hospital St. Michael en Toronto, Canadá,
revelaron algunos beneficios clave de la chía, que son (1) la mejor fuente de ácidos
grasos omega-3, (2) mayor contenido de hierro y fibra sin gluten, más calcio y
magnesio en lugar de leche, (3) 37 g de semilla a nivel diario estabilizó el nivel de
glucosa en la sangre en pacientes diabéticos, (4) previene infracciones de miocardio y
accidentes cerebrovasculares mediante la inhibición de la agregación de plaquetas, (5)
presión arterial sistólica inferior hasta 6 mmHg (Vuksan et al. 2007 ; Vuksan et
al. 2010). Fernández et al. El año 2008 también ha informado sobre algunas propiedades
medicinales de la chía que incluyen la reducción del colesterol, la inhibición de la
coagulación sanguínea, prevenir el estrés y la epilepsia, la mejora del sistema
inmunológico, el consumo de chía en el embarazo ayuda al desarrollo de la retina y el
cerebro del feto. Los hallazgos de un estudio realizado en ratas Wistar macho revelaron
que la alimentación de semilla de chia tenía un gran efecto de disminución de los
triglicéridos y aumentaba el colesterol HDL beneficioso. El otro beneficio de alimentar
la semilla de chía fue la reducción de omega-6 en plasma, consecuencias en una
proporción más baja de omega-6: omega-3 que tiene un efecto de protección cardio
(Ayerza y Coates 2007).). En otra investigación, el impacto de alimentar la semilla de
chía a un grupo de ratas en las que se introdujo dislipidemia. Los resultados de este
estudio revelaron que la alimentación de semilla de chía disminuyó en gran medida la
adiposidad visceral, disminuyó los triglicéridos y disminuyó el colesterol LDL. Se
investigó el efecto de la alimentación de semilla de chía (50 g / día) a 12 individuos
sanos durante 30 días. La presión arterial diastólica se redujo de 66,1 a 61,5 mmHg con
disminución significativa de triglicéridos en suero y se informó de ningún efecto
secundario (Vertommen et al. 2005 ) (Tablas (Tables66 y and77 ).
Tabla 6
Fitosterol en el aceite de semilla de chía en comparación con otros aceites
Tabla 7
Valor terapéutico de la chía.
Fuente potencial de varios péptidos bioactivos, reparación de tejido Segura-Campos et al. (2013 )
dañado y bienestar general
Valor terapeutico Referencia
Potencial para reducir el colesterol malo LDL y aumentar el colesterol Ayerza, y Coates ( 2005)
HDL beneficioso
Antiinflamatorio
Control de insectos
Las hojas de chia contienen un aceite esencial que contiene β-cariofileno, globulol, γ-
muroleno, β-pineno, α-humoleno, germacren-B y widdrol. Se cree que estos compuestos
tienen fuertes características repelentes para una amplia gama de insectos (Ahmed et
al. 2006 ).
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Expresiones de gratitud
Los autores están muy agradecidos con todos los científicos, investigadores y
colaboradores cuyo trabajo se ha incluido en esta revisión. La asistencia financiera para
este estudio fue proporcionada por la Comisión de Educación Superior de Pakistán.
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Referencias
Los artículos de Journal of Food Science and Technology se proporcionan aquí por cortesía
de Springer
PMCID: PMC3518271
PMID: 23251075
Resumen
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1. Introducción
Salvia hispanica L. ( Figura 1 ), una planta bianualmente cultivada, se clasifica bajo la
familia de la menta ( Labiatae) , la superdivisión de Spermatophyta y el reino
de Plantae. Cultivada de manera prominente por sus semillas, Salvia hispanica también
produce flores blancas o púrpuras. La semilla ( Figura 2 ) contiene de 25% a 40% de
aceite con 60% de la misma que comprende (omega) ω -3 ácido alfa-linolénico y 20%
de (omega) ω-6 ácido linoleico. El cuerpo humano requiere ambos ácidos grasos
esenciales para una buena salud, y no se pueden sintetizar artificialmente. Chia puede
crecer hasta 1 m de altura y tiene hojas dispuestas opuestas. Las flores de chía son flores
pequeñas (3-4 mm) con pequeñas corolas y partes de flores fusionadas que contribuyen
a una alta tasa de autopolinización. El color de la semilla varía de negro, gris y negro
manchado a blanco, y la forma es ovalada con un tamaño que varía de 1 a 2 mm
[ 1 - 4 ]. La chia salvaje y domesticada difiere poco. Actualmente, solo Salvia
hispanica, pero no otras especies del género Salvia, se pueden cultivar en el país. Para
prevenir la identificación errónea de Salvia hispanica y otras especies de SalviaSe
propuso como soluciones [ 4 , 5 ] una clara comprensión de las diferencias morfológicas
y genotípicas entre ellas . Localmente conocida por sus usos medicinales, Salvia
hispanica L. adquirió el nombre común chia de parte de los indígenas de América del
Sur de las eras precolombinas y aztecas [ 6 ]. Debido al hecho de que puede crecer en
ambientes áridos, ha sido altamente recomendado como un cultivo alternativo para la
industria de cultivos de campo [ 7 ].
Figura 2
Salvia hispanica L. Semillas con rayas pardas de color [ 10 ]. También se pueden encontrar con
colores de capa de semilla blancos y oscuros [ 8 ].
La semilla de chia está compuesta de proteínas (15–25%), grasas (30–33%),
carbohidratos (26–41%), fibra dietética alta (18–30%), ceniza (4-5%), minerales,
vitaminas , y materia seca (90–93%). También contiene una gran cantidad de
antioxidantes [ 8 ]. El análisis de metales pesados mostró que la semilla de chía los
contiene a niveles seguros, sin exceder los niveles máximos de metales para la
seguridad alimentaria, y la semilla también está libre de micotoxinas [ 1 ]. Otra
característica clave de la semilla de chia es que no contiene gluten [ 9 ]. Estudios
recientes sobre las semillas de chia se han centrado en los fitoquímicos y sus
extracciones de la semilla. Sólo muy pocos estudios se han centrado en in vivo.o
bioactividades clínicas y los aspectos de seguridad de la semilla de chía. El objetivo de
este artículo es evaluar críticamente los beneficios para la salud, los contenidos
fitoquímicos, los métodos de extracción de petróleo y el potencial de mercado actual de
la semilla de chía como un suplemento de alimentos saludables.
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tabla 1
Compuestos activos identificados en Salvia hispanica L. y su estructura química.
Abrir en una ventana separada
Hay muchos factores que pueden causar variaciones en las concentraciones de los
compuestos activos en la semilla de chia. Uno de ellos es el área de cultivo de la propia
planta. Las diferencias en el medio ambiente, los cambios climáticos, las
disponibilidades de nutrientes, el año de cultivo o las condiciones del suelo desempeñan
un papel crucial en las variaciones [ 17 , 22 ]. Por ejemplo, el contenido de proteínas
tiende a disminuir a medida que aumenta la temperatura [ 23 ]. Además, se observó una
relación inversa entre la altitud y el contenido de ácidos grasos saturados (AGS), por lo
que, a baja elevación, se observó un aumento en la saturación de ácidos grasos en áreas
donde la temperatura era alta [ 7 , 24 ]. En Argentina, Ayerza [ 25] demostró que la
temperatura contribuyó en gran medida al tipo de ácido graso encontrado en el
aceite. Encontraron que, durante el desarrollo de la semilla de abril a mayo, un aumento
en la temperatura del ambiente provocó una disminución en el contenido de ácidos
grasos poliinsaturados (PUFA).
Otro factor que puede contribuir a las diferencias en las composiciones químicas de la
semilla de chia es la etapa de desarrollo de la planta. Se demostró que el contenido de
ALA ( ácido α- linolénico) disminuyó en un 23% desde la etapa inicial hasta la etapa de
maduración de la semilla. Esto resultó simultáneamente en el aumento del contenido de
ácido linolénico (LA) y lignina [ 7 ].
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Tabla 2
Ensayos clínicos en humanos de semilla de chía.
Duración Modo de prueba Formulación Resultados Árbitro.
Tabla 3
Extracción de aceite de semilla de chía.
Metodos de Detalles
extraccion
Solvente (i) Método Soxhlet que usa n-hexano (menos preferible que otros métodos).
(1) Pro: favorece las características funcionales del aceite, como la capacidad de
retención y absorción de agua, la absorción de moléculas orgánicas y la estabilidad
emulsionante.
(2) Contras: causa una ligera pérdida de contenido de antioxidantes [ 37 ] y
problemas de seguridad para la salud y el medio ambiente del uso del hexano
[ 38 ].
Fluidos (i) Uso de dióxido de carbono a una presión óptima P = 408 y 80 ° C (método más
supercríticos preferible).
(1) Ventajas: mejor pureza y mayor contenido de ALA / LA de los productos
finales [ 39 , 40 ]. El rendimiento del aceite se puede aumentar con la mejora de la
presión, pero la temperatura alta lo afectará ligeramente [ 40 ].
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6. Potencial de mercado y aplicación comercial de la semilla de chía.
Los alimentos funcionales han ganado una gran atención en todo el mundo en los
últimos años debido a la ola de cambios en el estilo de vida saludable. Una de las
razones por las que el interés en cambiar a un estilo de vida más saludable es el
creciente número de personas que padecen enfermedades cardiovasculares (ECV),
presión arterial alta, obesidad, diabetes y otras enfermedades relacionadas. Estas
condiciones suelen deberse a un estilo de vida inactivo y una dieta deficiente en la que
los alimentos que se consumen diariamente contienen altas cantidades de ácidos grasos
saturados (AGS). Existen numerosos estudios que informaron sobre la correlación entre
un alto SFA, particularmente el ácido palmítico, y un bajo consumo de AGPI con ECV
[ 34]. Tradicionalmente, los ahora llamados alimentos funcionales se han consumido en
función de sus disponibilidades como alimentos básicos diarios. En la actualidad, se han
realizado muchos estudios para aumentar su funcionalidad como suplementos
alimenticios con alto contenido de nutrientes. Los beneficios de los alimentos
funcionales provienen principalmente de la presencia de ingredientes activos y
bioactividades de compuestos originalmente presentes en la planta que aún están
presentes en los productos alimenticios después de que se hayan procesado para
hacerlos adecuados para el consumo humano.
Recientemente, la chía ha recuperado su popularidad al convertirse en una de las
principales fuentes de petróleo que contiene altos niveles de PUFA. La chía, que solía
ser el principal cultivo alimenticio de los pueblos indígenas de México y Guatemala,
ahora se cultiva y comercializa ampliamente por su contenido de ácido (alfa-linolénico
(ALA) om -3) y sus propiedades antioxidantes. Hoy en día, su cultivo no solo se limita a
América, sino que también se extiende a otras áreas como Australia y el sudeste asiático
[ 6 ].
En la actualidad, la semilla de chía se utiliza como un suplemento de aceite saludable
para humanos y animales. La Tabla 4 presentó un resumen de los usos comerciales
actuales de la semilla de chía. El consumo humano de chia en la dieta proviene
principalmente del aceite extraído a través de su incorporación en el aceite de cocina,
confecciones o suplementos. En el año 2000, las Guías Alimentarias de los EE. UU.
Recomiendan que la semilla de chía se pueda usar como un alimento primario que no
exceda los 48 g / día. La chia se consume comúnmente como ensalada de brotes de chia,
en bebidas, cereales y aderezos para ensaladas de la semilla, o se come cruda
[ 41 , 42]. La Comisión Europea aprobó el uso de semilla de chía en productos de pan
con un límite de no más del 5%. Además del pan, la industria alimentaria de varios
países del mundo, incluidos los EE. UU., Canadá, Chile, Australia, Nueva Zelanda y
México, ha utilizado ampliamente las semillas de chía o su aceite para diferentes
aplicaciones como cereales para el desayuno, barras, bocadillos para galletas, jugos de
frutas , pastel, y yogur [ 43 , 44 ].
Tabla 4
Uso comercial de la semilla de chía.
Uso de semilla Productos Observaciones
de chía
7. Resumen
Según los resultados de la investigación actual, la semilla de chía es una buena opción
de aceite saludable para mantener un perfil de lípidos séricos equilibrado. Sin embargo,
a diferencia de la vitamina E y la coenzima Q 10 , la bioactividad clínica in vivo y la
evaluación de seguridad de las semillas de chia aún son limitadas. Además, los detalles
sobre los mecanismos de los efectos hipolipidémicos de la semilla de chia deben
estudiarse y compararse con los de los ácidos grasos omega 3 y omega 6 aislados.
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Referencias
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