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Adopción de niños y niñas por parte de parejas del mismo sexo en Colombia.

Enfoque Lacaniano…

Hablar de este tema es complicado y más cuando en lo personal mi posición es neutral,


pero a la vez tengo respeto por las decisiones que favorecen a otros y estos ‘‘otros’’, hago
referencia a la cantidad de niños que hoy por hoy buscan ser parte de una familia; creo
que sobre esa premisa moral con respecto a lo que pienso, tras una década de conquistas
jurídicas entre estas la de constituir familia y uniones legales con los mismos derechos y
deberes del matrimonio heterosexual, las parejas homosexuales en Colombia obtuvieron
su derecho más disputado: el de adoptar a menores de edad sin ningún tipo de limitante
(Justicia., 2015); es que de cierta manera hay que entender que el concepto de familia ha
evolucionado de tal manera que las costumbres en los últimos años como lo son las;
(familias recompuestas, monoparentales, madres portadoras etc.) nos obligan a definir la
parte en juego de Real, de Simbólico y de Imaginario (Lacan explica la constitución
subjetiva como una estructura dinámica organizada en tres registros, formulando estos
conceptos de lo Real, lo Imaginario y lo Simbólico para describir estos tres nudos de la
constitución del sujeto); en estas nuevas configuraciones; si bien el psicoanálisis desde el
punto de vista de algunos psicoanalistas ha sido un fuerte opositor optando por una
ideología edípica que condena el casamiento de personas del mismo sexo y por lo tanto
su derecho a la adopción, deduciendo siempre que el niño necesita a un hombre y a una
mujer como padre y madre para poder acceder a la diferencia sexual (identificación)
(Fajnwaks., 2013).

Al hablar en un discurso psicoanalítico con un enfoque Lacaniano, acerca del concepto


de familia y más en el desarrollo del niño dentro de esta, son muchos los conceptos que
encontramos; para empezar Jaques Lacan parte de la premisa freudiana que consideraba
a la homosexualidad como resultado de una fijación temprana. La elección homosexual
para él es entonces una resolución edípica fallida, (Según Lacan (2012); el complejo de
Edipo se trata de una transposición simbólica, en la cual el niño pasa de estar inmerso en una
relación imaginaria a la introducción en lo simbólico, momento que experimenta con angustia
y en que el participan diversos actores). y dentro de esta perspectiva es considerable pensar
que los roles materno y paterno son significaciones, posiciones o funciones
independientes del sexo real del referente; el papel del padre simbólico no es un ser real
sino que está en función que se encuentra en el centro de la articulación edípica, por lo
tanto padre en tanto significante es quien nombra y da nombre por lo que podemos decir
que es quien encarna la ley, por lo que el padre imaginario es un imago que se erige en
torno al fantasma de un ser omnipotente ideal o cruel; (ejerce la función de regular la
relación dual imaginaria entre la madre y el niño, mediante la instancia imperativa de la
ley), por lo que el padre real es quien ejerce la castración en el niño, aunque cabe
mencionar que en algunas ocasiones estas funciones de castración por parte del padre real
suelen cumplirse de forma independiente en ausencia de este, en la realidad siendo
encarnadas por otros sujetos del entorno del niño (Evans., D. 1997).

De igual manera dentro de este marco psicoanalítico, al entender la madre real, este se
deduce a aquella que atiende afectivamente al infante, aquella que posee la encarnadura
de todo lo significante; la madre completa, todos los objetos que la madre le brinda al
niño son objetos de don, es por lo tanto que estos objetos son simbólicos, por lo que el
niño se introduce en el orden simbólico a la hora de interpretar los gestos de la criatura y
la madre imaginaria, donde esta se encuentra ligada a la fantasía, en relación a ser
devorado por esa madre insaciable poseedora de un falo imaginario, entonces está claro
que cualquiera de estas funciones pueden ser encarnadas por personas
independientemente del sexo real o vinculo biológico (Raíces. J., Torres. E., Gómez. P.,
Engelman. M., & Zucca. S. 2004).

Desde mi posición neutral con respecto a este tema, considero que la adopción requiere de
personas adultas sanas que deseen dar amor, cuidado, respeto, proyectos positivos de vida a
niños que de otro modo quedarían subsumidos en la muerte psíquica y social (sea cual sea la
persona sin importar su género ni su orientación sexual); por lo que hay que tener en claro el
pensamiento que no todas las personas heterosexuales ni homosexuales están emocionalmente
preparadas para la difícil tarea de criar sanamente a un niño, entonces es por esto que es
necesario que quienes se ocupan de diagnosticar a los posibles padres adoptivos lo hagan desde
el conocimiento científico y profesional y no desde sus prejuicios y valores discriminatorios.

http://www.aperturas.org/articulos.php?id=0000621
http://angheloarmijoscienciaspenales.blogspot.com.co/2011/01/la-homosexualidad-y-
adopcion-por.html

http://www.eltiempo.com/politica/justicia/adopcion-gay-aprobada-en-colombia-derecho-del-
menor-a-una-familia-clave-en-fallo/16421897

http://www.nel-mexico.org/articulos/seccion/radar/edicion/61/284/Entrevista-a-Sergio-Laia

http://virtualia.eol.org.ar/026/template.asp?Debates/Real-Simbolico-e-Imaginario-de-la-
familia.html

http://23118.psi.uba.ar/academica/carrerasdegrado/psicologia/informacion_adicional/obligat
orias/053_ninez1/files/familia_y_desarrollo_infantil.pdf

http://documents.mx/documents/el-nino-en-la-familia-homoparentalppttp-compatible.html

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