Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Tan solo unas cuantas empresas de este tipo han logrado permanecer en este difícil
panorama, y esto se debe en mayor medida al interés que le han prestado en la
implementación de un Sistema de Gestión de Calidad (SGC). Si bien el implementar
un SGC genera ciertos costos, que para las pequeñas empresas son altos; los
beneficios que les han traído ya superan estos costos; puesto que su filosofía
corporativa pasó a enfocarse en los procesos y en la satisfacción de las
necesidades del cliente.
Con la certificación en la familia de las normas ISO, han logrado impregnar en sus
compañías la filosofía de la calidad; buscando cada día mejorar aquello que antes
lo veían como “bueno”, cambiando aquellos paradigmas obsoletos por nuevas
formas de hacer las cosas; y encaminando sus actividades en otorgarle a sus
productos un componente diferenciador que los ayude a crecer en el mercado de la
alta competencia.
El camino del SGC no es algo temporal, es un trabajo continuo y permanente, y por
ende requiere de constantes revisiones y evaluaciones de la eficacia de los
procesos en todos los niveles: gerencial, estratégico, operativo y funcional; y
precisamente las encargadas de esto son las auditorías internas de calidad.
Dado el tamaño que poseen las PYMES, se requiere un mayor compromiso no solo
de la lata gerencia sino de todo el personal en sí, donde el trabajo coordinado y bien
planificado ayude a cumplir con todos los requisitos que implica una auditoria de
calidad. No solo se deberá implementar en los procesos productivos, sino que
también se debe abarcar los procesos gerenciales, de tal forma que todos se
concienticen de la importancia de la evaluación y mejora de sus actividades.