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HUMANISMO,

TRANSDISCIPLINARIEDAD Y
DERECHO

Factores que influyen para


que una mujer no denuncie
la violencia de género.
[Subtítulo del documento]

“No te rindas, por favor no cedas. Aunque el


frio queme aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda y se calle el viento,
aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en
tus sueños”

Bertha Alicia Flores Figueroa: Licenciada en Derecho


egresada de la Universidad de Guadalajara, campus Centro
Universitario de la Costa, Auxiliar en el Bufete Jurídico de
Asistencia Social Gratuita de la Universidad de Guadalajara,
Notaria numero 04 Nuevo Vallarta, Nayarit, área de
proyectos , actualmente docente y administrativo en el
Instituto Nueva Galicia.
 DESCRIPCIÓN DE LA PROBLEMÁTICA DE DERECHOS HUMANOS:

Intentamos no hacerlo cuando tenemos un poco más de conciencia sobre el tema,

pero cuando vemos algunos casos de asesinatos de mujeres a manos de sus

parejas o desconocidos, de violencia física o psicológica a veces es tan inevitable

que viene como vomito verbal, el preguntarse por qué no paró esos golpes, por qué

no pidió ayuda, por qué no denunció. Preguntas fáciles cuando la persona que las

realiza es una que se encuentra bien, que no tiene excesivos problemas, que se

siente querida por los suyos, apoyada y protegida. Pero de las más difíciles de

contestar si a quien se le inquiere es a una mujer maltratada, dominada,

atemorizada y cuya autoestima está literalmente en el suelo.

De manera personal hablando como mujer, o por anécdotas de aquellos que nos

rodean, por lo menos hemos escuchado de algún caso de violencia de género, pero

de muy pocos de ellos o casi de ninguno tenemos conocimiento de que se

denunciara ante las autoridades. Pareciera que la situación de violencia se ha

normalizado tanto y la denuncia irregularizado que creemos que esta última

representa algún tipo de hazaña o locura que se comete sin la certeza de que llegue

a resolverse algo o recibir algún tipo de ayuda.

Organizaciones de mujeres y de derechos humanos coinciden en que las razones

de impunidad se deben a problemas estructurales de los estados. Específicamente

se menciona la falta de acceso a la justicia, la exclusión social, y la corrupción en

los sistemas de justicia, como las causas por la inequidad e injusticia a que se

enfrentan las mujeres. Existe una cultura de abuso, donde formas de violencia y
misoginia clasista y racista quedan impunes detrás de los discursos denigrantes,

excluyentes, revictimizantes y que culpan hasta que llegan a ser normalizados.

La violencia de género es un tema que se encuentra presente y latente en México

puesto que el 66.1% de las mujeres han sufrido alguna vez en su vida agresiones

de tipo sexual, física, laboral y emocional, informó el Instituto Nacional de

Estadística y Geografía (INEGI).

Lo alarmante dentro de estas cifras es que sólo el 9.4% presentó una queja o

denunció ante alguna autoridad, el 2.2% sólo solicitó apoyo a alguna institución;

mientras que el 88.4% no solicitó apoyo ni presentó queja o denuncia ante alguna

autoridad. La falta de datos estadísticos que podrían revelar la verdadera magnitud

del fenómeno en México es un obstáculo que dificulta la mejor comprensión de la

problemática de la violencia de género por lo que las agresiones quedan impunes,

es decir, no podríamos estar hablando de que realmente tenemos algún parámetro

conciso de la situación grave que estamos padeciendo como sociedad, estamos a

ciegas.

Al dar a conocer Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los

Hogares (ENDIREH) 2016, la cual mide las experiencias de violencia que han

enfrentado las mujeres de 15 años y más que residen en el territorio nacional, el

INEGI revela el panorama al que se enfrentan las mujeres en México 2:

El 49% de las mujeres sufrió violencia emocional; el 41.3% ha sido víctima de

agresiones sexuales: el 29% violencia económica, patrimonial o discriminación; en

tanto que el 34%, manifestó haber experimentado agresiones físicas a lo largo de

su vida, en al menos un ámbito y ejercida por cualquier agresor.


Las entidades que presentan los niveles más altos son la Ciudad de México, Estado

de México, Jalisco, Aguascalientes y Querétaro. Por el contrario, las que tienen la

prevalencia más baja son San Luis Potosí, Tabasco, Baja California Sur, Campeche

y Chiapas.1

Necesitamos saber como sociedad en donde se encuentra la falla, si la información

actual no es suficiente o la existencia de situaciones de especial vulnerabilidad

social, económica, jurídica, psicológica, educativa o cultural les impide dar el paso.

Las cifras son alarmantes pero el nivel de desconocimiento que tenemos lo es aún

más. Después de realizar entrevistas a algunas mujeres que no han interpuesto

denuncia podemos decir que apuntan a un poco de todo. Pero principalmente

podemos observar que el principal motivo para no denunciar se encuentra

fundamentalmente en el interior de las propias mujeres, en el miedo latente en el

que subsisten.

 Pregunta(S) De Investigación Que Aborda El Ensayo


Ante esta situación podemos encontrar diferentes preguntas que se nos vienen a la

mente:¿En qué consisten estos factores sociales, económicos, jurídico-políticos,

educativos o culturales que les impide a las mujeres dar el paso para realizar una

denuncia, o una vez presentada no dar seguimiento con su caso? ¿Desde qué

ciencias además del derecho habría que abordarse este problema y por que?

¿Desde que perspectiva, además de la jurídica puede planearse una resolución a

este problema?

 Importancia De La Temática

Las razones por las que debemos conocer aquellos factores por los que no se

denuncia la violencia de género, las podemos analizar desde dos perspectivas: La


primera nos lleva a ese foco rojo del desconocimiento total de cifras de violencia

que se vive y por lo tanto a estadísticas incompletas o que nos muestran solo una

milésima parte de la realidad delictiva en la que nos encontramos.

Como bien sabemos las estadísticas de casos de violencia de género pueden

mostrar solo una visión limitada de problema real. Los registros administrativos solo

nos muestran aquellos que son denunciados y registrados o son descubiertos por

la policía o las autoridades del sistema de justicia por lo tanto existe un número

alarmante, posiblemente, que no han sido registrados ni tampoco aparecen

reflejados en las estadísticas oficiales.

Una tasa alta de la cifra oscura (llamada así en el campo de la criminología para

referirse a este tipo de escases de datos de los delitos) 3 impide a los investigadores

y autoridades claves comprender adecuadamente el problema, por ejemplo; porqué

se da la violencia de género, qué sectores de la población son los más propensos

a sufrirla, entre qué edades se tiene más probabilidades que se presente, cómo es

el perfil de las personas que la cometen, cómo puede combatirse, etcétera.

Las informaciones anteriores son importantes para el diseño de políticas públicas

para prevenir la violencia de género y la evaluación de esas. Las encuestas de

victimización delictiva por ejemplo del ENDIREH son una herramienta para iluminar

esta zona obscura en la que nos encontramos y expandir la información obtenida

en las estadísticas delictivas.

En particular, las encuestas son la primera fuente de información sobre los delitos

que las personas pocas veces denuncian tales como violencia intrafamiliar o de
género. Toda esta información nos ayuda a un mejor diseño de políticas públicas,

en materia de seguridad pública y prevención de violencia; sin duda por lo general

la mayoría de estas encuestas de victimización solamente representan lo que

sucede a nivel nacional o estatal y falta informaciones a nivel local además de que

por lo general se obtienen de fuentes no oficiales o gubernamentales.

Nuestra segunda perspectiva nos indicaría una vez que tengamos el dato y aquellos

planes de política pública y prevención de violencia de género, cambiar aquellos

que no nos están funcionando en el ámbito jurídico, cultural y social para

erradicarlos de raíz.

ANÁLISIS TRANSDISCIPLINARIO DE LA PROBLEMÁTICA.

-Niveles de realidad: Estado Mexicano

Realidad 2 Social

Instituciones de Ciudadanía
estadística y censos.

Fiscalía

Realidad 1 individualista

Dentro del primer nivel de realidad encontramos primeramente a las víctimas


Víctimas de violencia de de
Víctimas de violencia de
género que género que denuncia
violencia denogénero que no denuncian por diversos factores entre lo que se
pero no continúa el
denuncian.
proceso o se desiste.
encuentran: los económicos por casos como dependencia económica, sociales por

medio a la exclusión, políticos-jurídicos es decir existe desconocimiento de

instituciones donde solicitar apoyo, de derecho, falta de programas de atención a

víctimas; víctimas de violencia de género que denuncia pero no continua el

proceso o se desiste en la mayoría de los casos por presiones sociales, no

encuentra seguridad en las autoridades o el proceso es más doloroso que la misma

violencia; fiscalía el desconocimiento del debido proceso o atención a víctimas de

violencia de genero trae consigo falta de confianza de parte de estas últimas,

tenemos elementos que no saben llevar sus actividades de manera correcta o que

participan en actos de impunidad.

En el segundo nivel encontramos a la ciudadanía donde se relacionan las víctima

de violencia con el resto de la población y al observarse el camino tan difícil que se

recorre al acudir a denunciar se prefiere no hacerlo, o inclusive al ser una actividad

que se repite continuamente sin que existe algún tipo de consecuencia se va

cayendo entonces en la normalización de la violencia de género o a no saber

identificarla; Instituciones de estadísticas y censos no tienen un dato preciso de

las persona que sufren de violencia de genero puesto que solo es una parte de ellas

la que realmente denuncia y el estado mexicano que el al no tener un dato preciso

de los índices de violencia no lleva a cabo prácticas de política pública donde se

necesita y no percibe como se debería la realidad de sus instituciones de

procuración de justicia.

o Principio Sistémico
Político: La violencia de género queda
en segundo plano al desconocerse la
realidad del problema, se necesita
implementar campañas de
concientizaciones a la población, de
conocimiento de sus derechos, de
atención psicológica y jurídica gratuita
para la gente de bajos recursos
económicos y supervisar a los
organismos de impartición de justicia.
Económica: Las investigaciones
Jurídico: Escasa legislación o realizadas en la región coinciden
desconocimiento de derechos, en que muchas mujeres
nula aplicación de tratados soportan la violencia porque
internacionales. La legislación dependen económicamente del
permanece muerta si no se agresor.
aplica en los casos concretos.
NO SE DENUNCIA LA
VIOLENCIA DE GÉNERO

Cultural: Nos hemos puesto de acuerdo


Educativo: Cuanto menor es el nivel
cuando decimos que vivimos una cultura
social y educativo de la víctima, sus
de violencia, pero aún no sabemos cómo
dificultades para develar el
transformar esta en una cultura de paz.
problema son mayores.
Este es un punto que está exigiendo
atención de las actividades políticas de los
gobiernos y de todas las instancias de la
sociedad civil. Estereotipos, en el caso de
hombres y mujeres la división se traduce
en la interiorización de roles sexuales
estereotipados
Social: Al momento de realizar las
entrevistas a estas mujeres que
habían sido víctimas de violencia y
que no denunciaron, en su
mayoría manifestaban que
principalmente el factor se debía
al miedo, en todas sus
modalidades, a la exclusión social,
a la vergüenza, no ser creídas, a
perder a sus hijos, a ser tratadas
de modo prejuicioso por no haber
cortado esa relación tóxica...
miedo.
-Principio dialógico.

b) Víctima de
a) Víctima de violencia de género
que denuncia pero c) Persona que
violencia de género
no sigue con un comete el delito
que no denuncia
proceso penal y se
desiste

d) Personas o e) Autoridades ante f) Estado


familiares cercanos a quienes se presenta Mexicano
la victima la denuncia

a) Para esta persona o grupo de personas la denuncia no es una opción, tienen

muchos miedos que les impiden dar ese paso, cuestiones psicológicas de falta de

autoestima que el agresor ha preparado para ellas, económicas al ser dependientes

del agresor, o no tienen conocimiento que se encuentren dentro de un ambiente

violento puesto que sigue quizá patrones de conducta en donde la violencia es

normal dentro de su vida.

b) Por lo general las personas que no siguen con un proceso penal o de desisten

de él es porque han encontrado factores que los desaniman como falta de empatía

o tacto por parte de la autoridad, donde esta misma los juzga y señala cuando se

necesita ayuda o hacen de su proceso un verdadero viacrucis.

c) Normalmente los estándares sociales o de cultura machista han hecho que los

mismos agresores no encuentren que realmente están cayendo en la comisión de


un delito, desde siempre se les ha enseñado que su género está por encima y la

mujer u otras personas le deben sumisión, añadiendo a esto la impunidad y

corrupción que le dan la pauta para saber que sus acciones no tendrán

consecuencias de ningún tipo.

d) Existen ocasiones en que las personas cercanas a la víctima son participes en

que esta no denuncie, el miedo al rechazo social, la vergüenza o el saber que no

habrá una consecuencia para el agresor traen como consecuencia una comunidad

o sociedad familiarizada con la impunidad y violencia.

e) Las autoridades consideran que están realizando sus actividades de manera

correcta y que las personas no acuden a ellas por comodidad con su agresor, al no

ser capacitadas como se debe hacen mal manejo de sus funciones y re victimizan.

f) Al no tener un panorama claro de lo que está sucediendo con sus instituciones de

impartición de justicia sigue en un ambiente de impunidad, y al no tener claras

estadísticas o un panorama real de cómo se está viviendo la violencia de género,

no lleva a cabo programas de concientización, o ayuda a víctimas.

 Reintroducción Del Sujeto Cognoscente

Preguntas:

1.- ¿Qué tipo de violencia padeciste? 2.- ¿Hace cuánto tiempo ocurrió? 3.- ¿Cuál

fue el motivo o los motivos que originaron que no denunciaras? 4.- ¿Qué crees que

nos hace falta como sociedad para que las mujeres tengan la confianza de

denunciar? 5.- Del 1 al 10 ¿Que tan segura te sentirías después de realizar una

denuncia por violencia? 6.- ¿Qué crees que haga falta en nuestras autoridades para

que una mujer tenga la confianza de denunciar? 7.-¿Conoces algún programa de

gobierno o institución que apoye a las mujeres víctimas de violencia? 8.- ¿Por qué
medio te enteraste de ello? 9.- ¿Qué consejo darías a una mujer que sufre de

violencia?

E1: 1.- Psicológica y física. Cuando salí del closet, mi familia tomó decisiones sobre
ello. Me quitaron redes sociales y me colocaron en un instituto que trata la
homosexualidad como enfermedad. Ahí estuve 1 año, 4 meses y 6 días.

2.- 4 años

3.- Era mi propia familia y tenía miedo de que si decía algo nadie me creyera. (Mi
familia es bien conocida)

4.- Confianza, apoyo. Saber que la gente va a creer en ti y que te va a apoyar.

5.- 1 nada.

6.- Seguridad. Darnos la seguridad de que se van a tomar cartas en el asunto en


cada demanda y que se ayudará a la víctima.

7.- Realmente no.

8.- Nunca he buscado uno. No me dan confianza.

9.- Mantente fuerte, cree en ti, NO TE CALLES

E2 1.Pues creo que una persona que vive violencia vive los 5 tipos en cierta
medida. En mi caso así fue, pero más acentuada la emocional y la física.

2._ ocurrió desde 2016, hasta la actualidad.

3._ la primera vez denuncié y esta persona fue policía y siempre se jactó de que no
le hacían nada, cuando llamaba a las patrullas, pues lo conocían y no hacían nada.
La segunda vez que quise denunciar, la atención en fiscalía ante estos temas es
bastante burlesco, más cuando revisan que hubo una denuncia que se desistió
anteriormente. Y la razón de desistir en ambas denuncias es porque, de corazón te
digo, que nada pasa, las medidas de protección son una burla. Te piden mil
requisitos para retirar a la persona que te molesta, quedan en informarle que ya no
se puede acercar y eso nunca ocurre. Los viajes a fiscalía son interminables, las
citas a dictámenes médicos y psicológicos son muy alejadas (6 meses en mi caso).
Así que cuando llegaron, mi situación estaba más en calma, y preferí la calma que
seguir con esto que al parecer se encaminaba a la impunidad.

4._ dejar de culpar a la mujer que vive violencia, perdona las palabras, pero ninguna
mujer es una pendeja por "dejarse golpear" ni nadie esta ahí porque quiere, es un
hoyo terrible en el que caes casi sin darte cuenta. Se nos olvida que el violento es
una persona enferma, y un manipulador astuto

5._ me sentiría 3 de segura, porque aunque te platican las medidas de protección,


esta persona esta enferma, y en ese punto poco importa lo que les puedan hacer,
hay más coraje en tomar represalia contra quien lo denunció y esta la parte de
quienes denunciamos, porque el temor de "caer" y regresar con esa persona es algo
bastante tangible

6._ voto de confianza y credibilidad, las autoridades ya no nos toman en serio, y


quizá seamos responsables, pero se les olvida que cada llamada al 911 y cada
denuncia que se desiste es un grito de auxilio para una persona que está enferma,
está viviendo violencia y tiene miedo de salir de ahí.

7._ si, está la UAVI de DIF

8._ me enteré porque yo iba a terapia de pareja a DIF, y ahí me platicaron de esta
vía

9._ ufff, que difícil. Pues que el valiente vive hasta que el cobarde quiere, es un
proceso doloroso, sanar duele, hasta más que la herida, pero que puede ser peor
de lo que ya estás viviendo. Si decides denunciar, te apoyo, si decides continuar,
también te apoyo, haz lo que te haga feliz, pero deseo algún día tengas el valor de
decir Basta, él no te quiere.
 Conclusión: Respuesta A La(S) Pregunta(S) De Investigación

¿En qué consisten estos factores sociales, económicos, jurídico-políticos,

educativos o culturales que les impide a las mujeres dar el paso para realizar

una denuncia, o una vez presentada no dar seguimiento con su caso?

Sociales

Al momento de realizar las entrevistas a estas mujeres que habían sido víctimas de

violencia y que no denunciaron, en su mayoría manifestaban que principalmente el

factor se debía al miedo, en todas sus modalidades, a la exclusión social, a la

vergüenza, no ser creídas, a perder a sus hijos, a ser tratadas de modo prejuicioso

por no haber cortado esa relación tóxica... miedo.

” motivo el cual no seguí fue porque mis padres ya no dejaron que siguiera”

“Era mi propia familia y tenía miedo de que si decía algo nadie me creyera. (Mi

familia es bien conocida)”

“El miedo, miedo a ser juzgada, miedo a que dudaran de mí, aunado a eso tenía

muchos problemas en casa y mis padres jamás estaban ahí para escuchar” 6

Algunas tampoco denuncian por ‘vergüenza’ (pudor a reconocer las cosas que han

tolerado, y porque nunca contarían determinadas cosas ante un tribunal); por ‘no

perjudicar al agresor’ (quieren evitar las repercusiones negativa de una denuncia en

el estatus social y laboral del agresor. No le quieren hacer daño a él, solo quieren

vivir tranquilas); y por sentimiento de ‘culpa’ (se sienten culpables de la violencia

recibida).
Lo primero que hay que entender, es que una mujer que sufre malos tratos tarda

tiempo en decidir dejar esa relación tóxica, es un proceso largo en el que el agresor

intentará por todos los medios evitar que ella tenga una red social y familiar en la

que protegerse, mientras su estado mental se va deteriorando poco a poco. Tanto

que en muchos casos, esto las llega a imposibilitar para tomar decisiones y buscar

salidas a su situación.

Económicos:

La violencia familiar se produce en todas las clases sociales, sin distinción de

factores sociales, raciales, económicos, educativos o religiosos. Las mujeres

maltratadas de menores recursos económicos son más visibles debido a que

buscan ayuda en las entidades estatales y figuran en las estadísticas. Suelen tener

menores inhibiciones para hablar de este problema, al que consideran "normal".

Las mujeres con mayores recursos buscan apoyo en el ámbito privado y no figuran

en las estadísticas. Cuanto mayor es el nivel social y educativo de la víctima, sus

dificultades para develar el problema son mayores, por diversas razones. Sin

embargo, debemos tener en cuenta que la carencia de recursos económicos y

educativos puede ser un factor de riesgo, ya que implica un mayor aislamiento

social.

Las investigaciones realizadas en la región coinciden en que muchas mujeres

soportan la violencia porque dependen económicamente del agresor. La falta de

servicios, las dificultades para acceder a un empleo bien remunerado y la difícil

situación socioeconómica contribuyen a su indecisión ante la posibilidad de


presentar una denuncia; esto indica que se debe dar prioridad al empleo y

capacitación de las mujeres en campos más variados, dado que la autonomía

económica es un elemento protector ante los abusos. 5

Jurídico-político

Pocos casos llegan a la justicia, ya que un porcentaje reducido de las víctimas

denuncian la violencia que aguantan y las mujeres que lo hacen, habitualmente se

enfrentan con sospecha, indiferencia, y en muchos casos revictimización e

impunidad. Organizaciones de mujeres y de derechos humanos coinciden en que

las razones por la impunidad se deben a problemas estructurales de los estados.

Específicamente se menciona la falta de acceso a la justicia, la exclusión social, y

la corrupción en los sistemas de justicia, como las causas por la inequidad e

injusticia a que se enfrentan las mujeres.

“La ausencia de castigo para los victimarios de violencia sexual y tortura contra las

mujeres, el abandono a la construcción y cambio de la institucionalidad que permitió

la comisión de la violencia contra las mujeres, la falta de voluntad política del Estado

para proteger la vida de las mujeres, ha permitido las condiciones para que las

personas que aprendieron de la vivencia de la guerra, -sea esto porque fueron

victimarios o porque vieron de niños o jóvenes estos hechos como algo normal –

reproduzcan la violencia del pasado y la focalicen de nuevo en las mujeres” 7

Pese a que está más que demostrado que las denuncias falsas son mínimas, las

campañas que desde determinados sectores machistas (hombres y mujeres)


alertando de las mentiras de las maltratadas han calado y ellas tienen miedo a ser

consideradas unas farsantes, sobre todo, en el caso de que no haya violencia física.

“Lo hice, pero al momento de ir a poner la denuncia me dijeron que lo mejor que

podía hacer es protegerme y no salir, porque las personas tenían apellido "xxxxx" y

que era mejor guardar distancia antes de que de verdad me hicieran algo. Así que

no siguieron el proceso”

“La primera vez denuncié y esta persona fue policía y siempre se jactó de que no le

hacían nada, cuando llamaba a las patrullas, pues lo conocían y no hacían nada. La

segunda vez que quise denunciar, la atención en fiscalía ante estos temas es

bastante burlesco, más cuando revisan que hubo una denuncia que se desistió

anteriormente. Y la razón de desistir en ambas denuncias es porque, de corazón te

digo, que nada pasa, las medidas de protección son una burla. Te piden mil

requisitos para retirar a la persona que te molesta, quedan en informarle que ya no

se puede acercar y eso nunca ocurre. Los viajes a fiscalía son interminables, las

citas a dictámenes médicos y psicológicos son muy alejadas (6 meses en mi caso).

Así que cuando llegaron, mi situación estaba más en calma, y preferí la calma que

seguir con esto que al parecer se encaminaba a la impunidad”.

“me presente en la delegación por q esa vez me reventó la ceja me sangro la nariz

y tenía múltiples golpes en el resto del cuerpo, le expliqué el motivo y me dijeron tu

No eres de aquí vdd le dije q no y me contestó mira aquí así se vive si no te gusta

regrésate a tu pueblo o no hagas enojar a tu marido” 6


La apatía y poco tacto de nuestras autoridades ha desencadenado un ambiente de

desconfianza y poca seguridad para acudir a presentar una denuncia, pareciera ser

que se teme más del mal manejo de un proceso judicial que de la misma agresión.

Educativos/ Culturales.

Según los datos de un informe presentado en base a los resultados de la Encuesta

Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, 2016, casi la mitad

de las víctimas de la violencia machista (un 45%) no denuncian a sus agresores

porque no identifican el maltrato. Los expertos en violencia de género saben que la

cultura patriarcal construye un estado social que dificulta a la mujer el

reconocimiento de una actitud violenta como tal. Es decir, miles de mujeres no las

perciben como agresiones machistas a las que sí lo son. 8

La influencia cultural que tenemos sobre todo en un país históricamente machista

merece una atención profunda. Vivimos en un mundo donde es perfectamente

natural resolver las diferencias y los conflictos de manera violenta. Nos hemos

puesto de acuerdo cuando decimos que vivimos una cultura de violencia, pero aún

no sabemos cómo transformar esta en una cultura de paz. Este es un punto que

está exigiendo atención de las actividades políticas de los gobiernos y de todas las

instancias de la sociedad civil. Estereotipos, en el caso de hombres y mujeres la

división se traduce en la interiorización de roles sexuales estereotipados.

“Tratar de comprender como se instauran las relaciones violentas lleva a revisar los

procesos de socialización esto es comprender el proceso de internalización de

valores, modelos y papeles que en nuestra sociedad se desenvuelven de manera


rígida social e históricamente construidos. Imprime en los niños el desarrollo de la

capacidad de poder y apropiación, en tanto que las niñas se educan para la

obediencia y la sumisión a la autoridad masculina y responsabilidad de preservar la

unidad familiar.

La mayor parte de mujeres agredidas tienen parejas agresoras con nivel secundario

completo (45%). Esta es una característica compartida con las mujeres no

agredidas (42%). Sin embargo, entre las agredidas es más frecuente tener parejas

que tienen solo nivel primario y menos frecuente tener parejas con nivel superior. El

nivel de estudio de la pareja si es una variable que nos permite distinguir diferencias

importantes entre mujeres agredidas y no agredidas. Además en la mayoría de

estudios, los hombres tienen mayor grado de educación que las mujeres, sin

exceder el nivel secundaria.” 9

El desconocimiento sobre los derechos de la mujer, las instancias a las que pueden

acudir cuando son víctimas de violencia, la falta de empatía de la sociedad por

tratarse de un tema que desafortunadamente ha sido parte de la historia de nuestro

país y que parece ser cíclico solo que ahora se presenta en modalidades donde no

podemos reconocerla como tal, así como la normalización de la violencia, sumisión

e inclusive justificación de la misma, son un cáncer que nos está matando

lentamente como pueblo mexicano.

¿Desde qué ciencias además del derecho habría que abordarse este problema

y por que?
Desde el punto de vista económico realizando un estudio, tenemos presente que

regularmente las víctimas de violencia de género que no denuncian se encuentran

en un nivel económico bajo debido a que la carencia de recursos económicos y

educativos puede ser un factor de riesgo, que implica un mayor aislamiento social,

así como que la dependencia económica con el agresor que representa un factor

importante a la hora de tomar la decisión de si hacer algo al respecto o no.

Psicológico puesto que gran medida de este miedo que se tiene a la denuncia

implica una carente autoestima por parte de la víctima y que le ha dejado plantada

la idea de que quizá merece por todo lo que se encuentra pasando, el miedo en

toda su extensión de la palabra, no sólo miedo al maltratador, es miedo incluso a

los demás, al qué dirán, a perder a sus hijos, a no saber cómo sobrevivir cuando se

acabe la relación, lo que también nos indica un cierto nivel de codependencia

emocional.

Sociológico puesto que necesitamos darnos un vistazo como sociedad primero, por

supuesto que es difícil cambiar la perspectiva que tienen los demás sobre la

violencia al grado de que está normalizándose día con día, pero en la medida que

hagamos un estudio y sepamos identificar aquellos factores en los que estamos

fallando y nos hemos dejado de apoyar entre nosotros podemos encontrar

soluciones.

Político y jurídico, debemos revisar el papel que están haciendo nuestras

autoridades, en donde estamos fallando cuando se brinda un servicio a una víctima

de violencia de género, si hace falta mayor capacitación a nuestro personal, el tacto


con el que se están tratando, si estamos brindando suficiente seguridad y estamos

dando a conocer de manera correcta y que llegue a todos temas para que las

personas se mantengan informadas y sepan ante quienes acudir cuando pasen por

situaciones de este tipo, las leyes en ocasiones parecieran que están redactadas

para que la sociedad no las comprendiera.

¿Desde que perspectiva, además de la jurídica puede planearse una

resolución a este problema?

A lo largo de la investigación los factores que más me han llamado la atención son

en primera el desconocimiento total de encontrarse ante una situación de violencia

al estar tan normalizada, el desconocimiento y la falta de confianza por experiencias

pasadas o testimonios de terceros de nuestro sistema acusatorio y nuestras

autoridades. Partiendo desde estas dos vertientes podemos ver que nos hace falta

mucha divulgación de información, campañas de concientización sobre todo en

comunidades arraigadas o de pobreza extrema, hacerle ver a la mujer que no es

normal ser violentada, los tipos de violencia que existen, que no está sola pues así

como ella existen muchas mujeres pasando por su situación y que el apoyo se da

entre todos aun si su familia les da la espalda y sobre todo ante que dependencias

puede acudir por ayuda, brindándole a la par asesoría psicológica y jurídica gratuita

en caso de ser necesario.

Pero ¿qué pasa con las autoridades? No podemos informar a la ciudadanía sobre

todo lo anterior si una vez que tengan la confianza y el valor de acudir a realizar una

denuncia va a seguir existiendo esa falta de empatía, de tacto y de nula

profesionalidad. Se necesita capacitar al personal para que pueda brindar un


ambiente de confianza y de apoyo, dejar la impunidad de lado hacerles ver que son

parte fundamental si realmente queremos un cambio social. Estaríamos entonces

con el encargo de realizar revisiones y comenzar a ganar la atención de la comisión

de derechos humanos hacia este tema.

La legislación es muy clara, tenemos el apoyo y el complemento de tratados

internacionales como el caso la Convención Interamericana para Prevenir,

Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer también conocida como la

Convención de Belem do Parà, letras muertas si al final no las utilizamos para el

propósito con el que fueron creadas.

BIBLIOGRAFIA
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de la ENDIREH 2011 en comparación con las ENDIREH 2006 y 2003”, en:
Casique, I. y R. Castro (coords.). Expresiones y contextos de la violencia
contra las mujeres en México. Resultados de la ENDIREH 2011 en
comparación con sus versiones previas 2003 y 2006. México, DF, Instituto
Nacional de las Mujeres y Universidad Nacional Autónoma de México, 2014,
423 pp
 Boletín “Estadísticas a propósito del día internacional de la eliminación de la
violencia contra la mujer 2015” México, INEGI, 2015.
 ROJÓN GONZÁLEZ, Berenice, ‘‘La cifra negra de la delincuencia’’, ¿Cómo
Ves? Revista de Divulgación de la Ciencia de la UNAM, año 2, núm. 17.
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 Entrevistas
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Guatemala,” p. 27.
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2016. Base de datos. México, INEGI, 2016.
 Rina Zanabria Ojeda. La violencia contra la mujer. Revista de la facultad de
derecho. Universidad Nacional de San Agustín. Año 2005.

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