Blancanieves a través del tiempo

Introducción
Blancanieves es una historia de origen incierto, fosilizada en la versión recogida por los

Hermanos Grimm en 1857. Se trata de un cuento de hadas en el que se narra la historia

de una joven princesa y su desdichada suerte. Si bien se trata de un cuento que ha

sobrevivido los avatares del tiempo, primero pasando de boca en boca y luego por medio

de la tradición escrita, es con la adaptación cinematográfica de Disney que se instala

definitivamente en el imaginario colectivo del siglo XX y XXI. En 1937, la película de

Blancanieves cambia el rumbo de la empresa Disney y abre las puertas al mundo de la

animación. 75 años después, Blancanieves se hace carne en dos versiones

cinematográficas que tienen como protagonistas a actrices famosas que le dan rostro a la

princesa. En 2012, Blancanieves muestra su faceta más oscura en Blancanieves y el

cazador y su cara más risueña en Espejito espejito. En este trabajo analizaremos estos

films enfocándonos en la evolución del personaje a través del tiempo. Se intentará

responder a las preguntas ¿Ha evolucionado Blancanieves? ¿De qué manera? ¿Por qué?

Aventuramos una respuesta: el cambio de paradigma que se manifiesta en el siglo XXI

con el auge de la globalización y el movimiento feminista influyen en todos los productos

culturales de su tiempo. El cuento de hadas es un relato tradicional, pero en su

característica original de cuento oral está el gen del cambio y del aggiornamento a las

nuevas tradiciones. Nos enfocaremos especialmente en el componente narrativo de las

películas, tomando como base las versiones del cuento de los Hermanos Grimm y de

Perrault.
Adaptaciones

Los cuentos, desde tiempos remotos, han servido a la humanidad para explicarse a si

misma valores, formulas, orígenes, etc. Sin embargo, el imaginario actual encuentra

difícil la identificación con los protagonistas de los cuentos de los hermanos Grimm.

Estos personajes exhiben los valores y personalidades propios del siglo XIX y en la

actualidad la mirada sobre los productos culturales está teñida del lenguaje

cinematográfico que conoce cualquier espectador. Sin embargo, el cuento es una

herramienta que resulta necesaria para cualquier sociedad, y la sociedad actual no está

excluida. Dice Bruno Bettelheim:

En realidad, a nivel manifiesto, los cuentos de hadas enseñan bien poco sobre las
condiciones específicas de la vida en la moderna sociedad de masas; estos relatos fueron
creados mucho antes de que ésta empezara a existir. Sin embargo, de ellos se puede
aprender mucho más sobre los problemas internos de los seres humanos, y sobre las
soluciones correctas a sus dificultades en cualquier sociedad, que a partir de otro tipo de
historias al alcance de la comprensión del niño.

En definitiva, el cuento de Hadas apela a un nivel interno de comprensión. Se trata de una

enseñanza enfocada a una forma de afrontar la vida, y no tanto de una moraleja práctica

y concreta.

Blancanieves y los siete enanitos

Aunque el cuento de los hermanos Grimm (si viene al caso, tampoco el de Perrault) no

menciona rasgos de la vida cotidiana de Blancanieves, la adaptación de 1937 presenta a

la princesa en su vida diaria. En Blancanieves y los siete enanitos (1937) ya en el inicio

de la película se nos muestra a Blancanieves fregando las escaleras del palacio. Es allí

donde la encuentra el príncipe, que se ve atraído por el canto de la muchacha La

presentación del personaje de Blancanieves está fuertemente unida a la figura del príncipe
ya que comparten el protagonismo de la escena y son presentados al mismo tiempo. Por

su parte, la madrastra malvada es la antítesis exacta de Blancanieves y es quien abre la

película. Parada frente al espejo mágico, lo invoca para preguntarle quién es la más bella

y estalla en cólera cuando la respuesta señala a Blancanieves. La reina malvada es, en

definitiva, quien mueve la trama. Contrata a un cazador para que le traiga el corazón de

Blancanieves luego de matarla en el bosque. Luego, cuando se entera de que

Blancanieves está viva, va a buscarla para convidarle la manzana envenenada. Las

acciones de Blancanieves comprenden la huída hacia el bosque (ordenada por el cazador

piadoso), la limpieza de la casa de los enanos, la preparación de una tarta para los enanos

y la mordedura de la manzana envenenada. Los enanos del cuento cumplen la función de

destacar la soledad y aislamiento de Blancanieves. En la película, sirven como alivio

cómico y son el marco donde se destaca la extrema bondad de Blancanieves y su

capacidad de transformar todo lo que la rodea en algo bueno. El instinto maternal de

Blancanieves es su rasgo definitorio más importante, ya que al encontrarse con la pequeña

casa y ver las pequeñas camas, automáticamente piensa que han de ser niños huérfanos

los que viven allí. Es bajo este pensamiento que ordena el hogar y limpia la ropa de los

enanos.

Las películas del 2012 muestran un panorama diferente. En Blancanieves y el cazador el

tono del film es oscuro y gris. En el inicio se nos cuenta la historia de Blancanieves

mediante flashbacks que son narrados por una voz en off. Blancanieves nace del deseo de

su madre de tener una hija con la tez blanca como la nieve y los labios rojos como la

sangre. En esto concuerda con el cuento de los hermanos Grimm. Pero el flashback

continúa y añade matices a la historia. El padre se casa por segunda vez con una mujer
que había sido apresada por un grupo de bandidos. La mujer resulta ser una despiadada

bruja que mata a su esposo en la noche de bodas clavándole una daga en el corazón.

Mientras comete el asesinato declara que ella lo ha perdido todo por un hombre, y que no

volverá a pasarle lo mismo.

Con respecto al cuento tradicional y a la película de Disney, esta evolución del personaje

de la malvada bruja merece una mención especial. Hasta ahora, se nos ha mencionado la

belleza de la bruja como el atributo que hace que el padre de Blancanieves se case con

ella. Pero se añade un elemento que configura su personalidad: su sadismo y su deseo de

venganza tienen origen en una historia pasada que el propio personaje enuncia. “Los

hombres usan a las mujeres. Nos llevan a la ruina y cuando acaban con nosotras nos echan

como sobras a los perros”. El discurso de odio de la malvada bruja no está dirigido, en

primer lugar, hacia Blancanieves. Es puramente un odio hacia los hombres.

Bibliografía

- Blancanieves y los siete enanitos (1937): Una mirada crítica sobre el período de

entreguerras a través de sus fuentes iconográficas- Pablo Begué Hernández,

Universidad de Zaragoza 2017

- ¿Se ha vuelto Disney Feminista? Un nuevo modelo de princesas empoderadas.

Delicia Aguado Peláez y Patricia Martínez García Universidad del país vasco

2015