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oRTODONC
TEonínY clíucA
GonzaloAlonsoUribeRestrepo

coRpoRAcrónpARA|NVESTtcAc¡oNES
elolóc¡ces
La Ciencia at Serviciode ta Vida
Ortodon cia: teo úa y clín ica
Á-glVEg{il}r F{{,-t,,X.

Se debe -valorarla pertinencia de los conocimientos científicos publicados en cualquier li-


bro de medicina y odontología antes de aplicarlos en la práctica clínica. Quien use esta obra
debe consultar diferentes fuentes de informaciónpara tener la seguridad de que sus deci-
siones contengan actualizacionessobre cambios en técnicas ortodóncicas, procedimientos
contraindicaciones y supresiones o nuevas emisiones de fármacos, además de garantizar las
dosificaciones coffectas. Por tanto, es el lector (no el autor ni el editor) el responsable clel
uso de la información aquí publicada y de los resultados que obtenga con ella.
FUNDAMENTOS
DE ODONTOTOGÍA

Ortodon cia: teo úa y clín ica

Segunda edición 2010

Gonzalo Alonso IJribe Restrepo

coRpoRAclótrlpARArNVESTtcActoN
ESaloLóc lcns

Medellín, Colombia
20to

aRGENTINA-BoLrvIA-c¿N¡oÁ-coLoMBIA'cosrARrcA-cHrLE-cuBA-EcuADoR-ELSALvADoR-rsp¡ñn-EsrADos
uNIDoson¡uÉnrce-cuATEMAr¡.-HoNDURAS-NTcARAGUA-ufuoco-p¡¡em(-pARAGUAy-prnú-poRTucAL
REPUBLICA, DOMINICANA - IIRUGUAY - VENEZT]EI-A.
l-

Reservadostodos los derechos' Ni todo el li-


02010 por la Corporación para Investigaciones Biológicas, CIB'
en forma alguna o mediante algún sistema
bro, ni parte de é1,puede sJr.ep.oducido, archivado o transmitido
otro, sin permiso por escrito del editor'
electrónico, mecánico o de fotorreproducción, memoria o cualquier
Todos los conceptos aquí expuestos son responsabilidad del autor'

Primera edición 2OO4


Segunda edición ZO1O

rsBN 978-953-9076-33-O

Dirección General
Dr. Diego Miguel Sierra Botero' MBA.

Dirección del Fondo Editorial


Dra. Lina Maria González Dwque, MD., MSc'

Dirección de Edición
Dr. Juan Cados Gómez HoYos, MD.

Editor Gestor de ProYectos


Dr. Adolfo LeónGoruález Rodríguez, MD', MSc'

Revisión ortotipográfica y de estilo


Dr. Francisco Humberto Vélez Restrepo, OD'
Dr. Juan Cados Gómez HoYos, MD.

Diseño y diagrarnación
Martha Nelly Suárez MontoYa
Diana Cecilia Molina Molina

Índice analitico
Dr. Carlos Andrés Rodríguez Jaramillo, MD', MSc'

Fotografías y dibuios
Dr. Gonzalo Alonso Uribe Restrepo, OD.
Pamela Uribe TresPalacios
Estudiante de odontología universidad cES, Medellín, Colombia.
Coast, Australia' 2007'
Diplomada en Diseño Ciáfico. Australian International College of Arts. Gold

Diseño de Portada
Pamela Uribe TresPalacios
Estudiante de odontología universidad cES, Medellín, colombia.
Coast, Australia' 2007'
Diplomada en Diseño Ciafico. Aüstralian International College of Arts. Gold

Impresión y terminación
Legis S.A.

Hecho en Colombia,Manufactured in Colombia

Corporación para Investigaciones Biológicas


Teléfono: +57 (4) 44r 08 55. Fax +57 (4) 44L 55 14
P ágina en Internet: http ://wwwcib. org. co
Correo-e: cib@cib.org.co
Medellín, Colombia
DEDICATORIA

La segunda edición del libro Ortodoncia: teoría y clínica, 2010, que dedica el Dr. Gonzalo Alonso Uribe
Restrepo a su Universidad CES por sus 30 años de existencia, dirigida a la enseitarua de Ia ortodoncia, en
su parte teórica y clínica, es la materialización del compromiso con la educación odontológica de calidad de
eminentes profesionales y docentes de Colombia y eI exterior.

Este valioso texto científico, con más de 6.000 copias vendidas en Colombia y en el exterior en su anterior
edición, está dedicado a los estudiantes, generalistas de la odontología e iniciados en la ciencia y ane de
la ortodoncia. En él se plasma el mejor conocimiento científico y técnico, basado en evidencia científica y
avalado por la largay fecunda experiencia docente y clinica de sus autores. De manera didáctica y siguiendo
el proceso que día a día rcaIiza con sus estudiantes, el Dr. Uribe permite aI lector y estudiosos de los temas
de la ortodoncia, progresar en el conocimiento de su fundamentación científica y la aplicación clínica de los
conocimientos. Fieles alatradición que reconoce que "El conocimiento espatrimonio de la bumanidcld", el
editor y sus prestigiosos invitados entregan, sin egoísmos ni cortapisas, todo su conocimiento para estudio y
disfrute intelectual de los lectores.

ffi
r977 ffi 2007
3O años
El Dr. Uribe, en 2008, celebró veinticinco años de haber egresado del CES, su AIma Máter, en su segunda
promoción de odontólogos, y más de veinte años de docencia continua en nuestra institución, la que empezó
justo después de su regreso como especialista.Él fue, en L994, uno de los docentes fundadores del posgrado
de ortodoncia. Todos los grupos de egresados del posgrado de ortodoncia dan fe de su entrega y dedicación
a los estudiantes y a la academia. Por estos motivos, la universidad se siente orgullosa de presentar el libro
Ortodoncia: teoríay clinica en su segunda edición, de su egresado y profesor -al cual agradece su dedicación
y generosidad- e invita a los profesionales y estudiantes de la odontología a utilizailo intensivamente en su
proceso de capacitación y formación profesional.

José M. MayaMeiía, MD., MSc.


Rector, Universidad CES

Gabriel J. Cadavid Velásquez, OD.. MSc.


Decano Facultad de Odontología, Universidad CES

Esta segunda edición la dedico a mi Alma Máter; el CES,por sus treinta años de existencia (1977 - 2007),
para celebrar mis ueinticinco años de egresado (1983 - 2008) y más de ueinte años
, corr'ro docente (1988 - 2010) de esta institución que lleuo en el corazón
y de la cual me siento orgulloso.

Agradezco de corazón la paciencia y el soporte incondicional de Adriana. rni esposa


y el a¡>oyo constante de mis padres.

También celebro el ingreso de mi bija Pamela al programa de Odontología del CES


y próximamente el de rni otra bija Melissa, que también será mi colega.

Gotzalo Alonso Uritle Restrepo, OD.


gable@une.net.co
CREDITOS Y AGRADECIMIENTOS

En un proyecto que se demoró seis años en su segunda versión, el editor agradece, reconoce y da crédito a-
muchos odontólogos remitentes y amigos, todos de gran experiencia clínica y académica. a mis estudiantes
actuales y egresados de todos los tiempos del posgrado de ortodoncia de la Universidad CES,que participaron
y colaboraron activamente en la revisión de los contenidos, aportaron ideas para los dibujos, revisaron nuevas
bibliografías en cada uno de mis seminarios y sugirieron cambios y anexos oportunos en el texto para cada
capítulo. Para todos ellos, mil gracias.

A todos los odontólogos que me han confiiado sus pacientes por más de veinte años"

Al posgrado de ortodoncia del CES, del cual soy docente fundador


para celebrar sus quince años (1.994 - 2OO9).

A Oscar David Uribe Restrepo


Mi hermano, amigo y colega. De él muchas inquietudes, revisiones y recomendaciones, además de ser autor
y coautor de varios capítulos.

A los egresados del posgrado de ortodoncia. Universidad CES. Promoción 2OO4 - 2OO7
Joaquín Amado Montoya
John Camilo Palacio Zapata
Sandra Patricia G ar cía Fiar¡.irez
Martha Ealo Martínez
Ángela María Sierra Ángel
Liliana Camargo Cruz

A los estudiantes del posgrado de ortodoncia. Universidad CES. Promoción 2OO6 - 2OO9
Gloria Isabel Fernández Acosta
Luis Guillermo Restrepo Valderrama
Ana Milena LoperaPérez
Luz María Barrera Alviar
Clady Arboleda López
Juan Felipe Cawajal Monsalve

Al Dr. Francisco Humberto Vélez Restrepo


Por las recomendaciones en la redacción y la corrección total del texto en cuanto a estilo, ortografía y gramá-
tica. Sus cualidades de maestro me permiten seguir aprendiendo.

Al Dr. Juan Cados Górnez Hoyos


Por la dirección editorial de la obra y sus aportes a la redacción y corrección total del texto en cuanto a estilo,
ortografía y gramática.

A la Corporación para Investigaciones Biológicas (CIB)


Por su apoyo, colaboración y hacer de este segundo proyecto internacional 2010 una realidad.

A Martha Nelly Suárez Montoya


Por su amabilidad y colaboración durante todo el proceso de edición, también en esta segunda edición.

A Diana Cecilia Molina Molina


Por su amabilidad y colaboración durante todo el proceso de edición.

Al Dr. Ravindra Nanda


Autor de muchos libros, por las palabras tan generosas en el prólogo y la presentación de esta segunda edi-
ción.

A la Sociedad Colombiana de Ortodoncia (SCO)


Por la organizacióny el apoyo constante a la especialidad.

vl1
ACERCA DE IA. CIB

Cuando usted compra un libro del Fondo Editorial de la Corporación para Investigaciones Biológicas
(CIB), contribuye con la investigación científica en América Latina en las áreas médica y biotecnológica.
La CIB es una institución púvada, sin ánimo de lucro dedicada a:

InvestigaciÓn.La CIB trabaja en la búsqueda de mejores métodos de diagnóstico y tratamiento para


enfermedades producidas por hongos, bacterias, virus y parásitos en humanos y en el sector agrope-
cuario. Thmbién, adelanta investigaciones en enfermedades autoinmunes y en hipertensión, haciendo
uso de técnicas de biología molecular.

Formación de investigadores. En forma permanente, la CIB entrena un número importante de estu-


diantes de todas las universidades del país que quieren ser investigadores, especialmente en el campo
de las maestrías y los doctorados, y tiene acuerdos de sociedad con universidades como la Pontificia
Bolivariana, Universidad de Antioquia, Universidad del Rosario y Universidad Nacional de Colombia.
Con La Universidad Pontificia Bolivariana y con la Universidad CES se tiene un programa de doctorado
en Ciencias Médicas. Además, a nivel de pregrado, presta capacitación a médicos, biólogos, bacteriólo-
gos y auxiliares de laboratorio.

Difusión del conocimiento. Las investilaciones de la CIB producen artículos científicos para revistas
nacionales e internacionales indexadas, a¡rdando al progreso de la ciencia mundial desde el ámbito
latinoamericano.

Los investigadores de la CIB participan como autores y editores en varios de los libros del Fondo Edi-
torial que hoy cuenta con más de 40 títulos.

Servicios de diagnóstico. La CIB sirve de soporte a médicos y laboratorios en la ejecución y elabo-


ración de exámenes para diagnósticos especializados, en el campo de las enfermedades infecciosas y
autoinmunes. Además, se presta apoyo en el área de diagnóstico y control en el sector agropecuario.

Desarrollo en biotecnología. Igualmente, la Corporaciónttabaja en la evaluación de bacterias y hon-


gos que sirven parala producción de bioinsecticidas y en el desarrollo de plantas transgénicas resisten-
tes a plagas y enfermedades.
PRÓtOGO

Con gran honor quiero presentar está segunda edición del libro Ortodoncia: teoria y clínica, editado por
el Dr. Gonzalo Alonso Uribe Restrepo. Ét ha convocado un gran número de clínicos prolíficos y autoridades
académicas, en el campo de la ortodoncia, para escribir acerca de diferentes tópicos de actual interés.

En la primera edición (2OO4), el Dr. Uribe hizo especial énfasis en los principios básicos de la biomecinicay
sus aplicaciones clínicas. En esta edición, además de ampliar algunos conceptos en el campo de la biomecá-
nica, se exploran otros temas de manera detallada.

Conjuntamente con los tópicos tradicionalmente tatados en la mayoria de libros texto de ortodoncia; se
revisan otros temas de interés, los cuales representan una novedad paru la especialidad, entre los que se en-
cuentran, la ortodoncia basada en la euidencia., dolor y el anclaje esquelético temporal. Sin duda alguna, en
los 72 capítulos recopilados en el libro se examinan innumerables aspectos de crucial interés.

Este libro es una gran edición para la comunidad ortodóncica de habla hispana, donde la primera edición
ha servido como texto básico para muchos de los estudiantes de los diferentes programas de ortodoncia en
Colombia y Latinoamérica. Es con gran placer que presento al Dr. Uribe como uno de los eminentes clínicos
internacionales, que ha implementado y tomado elliderazgo de educar a los ortodoncistas del futuro en un
ireatan importante como la biomecánica.

La Universidad de Connecticut, como institución líder en esta área, siente orgullo de encontrar grandes clíni-
cos en el mundo que asumen el papel de difundir el conocimiento adquirido a lo largo de años de investiga-
ción.

La rcalización de un libro es turra tarea difícil, y el notable esfuerzo del Dr. Uribe nos presenta el producto
final. Las numerosas fotografías e ilustraciones ayudan avisualizar los conceptos presentados por los diferen-
tes autores. Yo creo.que esta edición será una valiosa herramienta, tanto para los estudiantes como para los
clínicos en eiercicio.

Estoy seguro que este libro tendrá una gran acogida por parte de la comunidad ortodóncica en general. Quie-
ro felicitar alDl Gonzalo Uribe por el excepcional trabaio que ha hecho.

Dr. Ravindra Nanda, BDS, MDS, PhD.


UConn OrthodonticAlumni Endowed Chair, Professor and Head, Department of Craniofacial Sciences, School
of Dental Medicine, Universify of Connecticut, Health Center, Farmington, Connecticut.
EDITOR

Gonzalo Alonso Uribe Restrepo


Odontólogo de la Universidad CES de Medellín,1983. Maestría en Ortodonciay Ortopedia Maxilofacial en
el Centro de Estudios Superiores de Ortodoncia, México, México DR 1988. Diplomado de la Ibero American
Board of Othodontits (IABO), 2008. Miembro consultor de la IABO desde el 2008. Especialistaen Dirección de
Marketing del CEIPA de Medellín y de la Escuela de Administraciín de Empresas, EAE de Barcelona, Espaia,
en el año 2000. Miembro del Comité de Recertificación de la Sociedad Colombiana de Ortodoncia. Revisor
externo de proyectos de investigación en ortodoncia, Univesidad de la Frontera, Chile. Profesor en el área
clínica y de física y biomecánica del posgrado de ortodoncia de la Universidad CES de Medellín. Profesor
visitante al posgrado de ortodoncia de la Universidad Santo Tomás, Bucaramanga. Presidente para Colombia de
la Asociación Iberoamericana de Ortodoncistas (AIO). Director del posgrado de Ortodoncia de la Universidad
de Antioquia, 1995 - 2OO2.Coautor permanente del articulo El rincón de la Biomecánica de la revista Punto
de Contacto de la Sociedad Colombiana de Ortodoncia (SCO). Coautor de la recopilación 2OO2- 2OO7de
la separafa El rincón de la biomecánica de la SCO, en 2OO7.Autor del capítulo Tratamiento ortopédico de
maloclusiones clasell enindiuíduos con crecimientoy desa.rrollo actiuo. SistemaTeuscher (fuerzaextraoral más
activador) de la serie dellbros Bases Diagnósticas, Tbrapéuticas y Posturales del Funcionalismo Craneofacial
(tomo III) del Dr. Eduardo Padrós Serrat, Barcelona, España. Fue profesor del posgrado de Odontopediatria
y Ortodoncia preventiva de la Universidad CES. Fue docente fundador del posgrado Od.ontología Integral del
Adolescente y Ortodoncia dela Universidad de Antioquia. Fue profesor del posgrado de Odontología Integral
del Niño de la Universidad de Antioquia. Fue profesor del posgrado de Odontología Integral del Adulto de
la Universidad de Antioquia. Hno el curso de Formación Auanzada. en Biomecánica de la Fundación Tweed,
en 1994 (Tucson, Estados Unidos). Hizo'el curso de formación avanzada Tipedge, en L995 (indiana, USA).
Fundador y ex-coordinador de la Comisión de Educación de la SociedadColombiana de Ortodoncia (CESCO).
Miembro de la junta directiva de la Sociedad Colombiana de Ortodoncia periodo 1,995 - 1997. Profesor e
investigador invitado a numerosas universidades. Conferencista en múltiples eventos académicos nacionales
e internacionales (Portugal, México, Ecuador, Republica Dominicana, Bolivia, Chile y Perú). Miembro activo
de la SCO, Federación Mundial de Ortodoncistas (\&{FO)yAsociación Iberoamericana de Ortodoncistas (AIO).
Práctica privada con dedicación exclusiva a la ortodoncia, Medellín, Colombia.

Cotreo aéreo 76364. Centro Comercial Oviedo. Medellín, Colombia.


correo-e : gable@une. net. co

COLABORADORES

Oscar David Uribe Restrepo


Odontólogo de la Universidad CES de Medellín, L993. Especialista en Ortodoncia de la Universidad Tecnológica
de México UNITEC, 1997. Profesor actual en el área de diagnóstico del posgrado de ortodoncia de la
Universidad Santo Tomás de Bucaramanga. Profesor en el área de diagnóstico del programa de especialización
en Odontologíet Integral del Af,olescente y Ortodoncia de la Universidad de Antioqu ia, 2OOl - 2OO5. Profesor
e¡ el área de Fotografía Clínica 2OOI - 2OO5de los posgrados de Cirugía. Maxilofacial, Odontología Integral
del Adulto, del Niño y del Adolescente y Ortodoncia de la Universidad de Antioquia. Profesor en eI área clínica
en el posgrado de Odontología Integral del Adolescente y Ortodoncia en la Universidad de Antioquia, 200L
- 2OO5.Ortodoncista del servicio de la Unidad de Estomatología del Hospital Universitario San Vicente de Paúl
-HUS\?- en al año 2000. Participación como conferencista en eventos locales y nacionales de la SCO. Autor
y colaborador de diferentes capítulos del libro Ortodoncia: teoria y clínica, Editorial ClB,2OO4 - 2OlO.
Coordinador de la SCO, seccional Antioquia 2OO5 - 2OO7. Miembro activo de la SCO y de la rü7FO.Práctica
privada con dedicación exclusiva a la ortodoncia, Medellín, Colombia.

Pamela Uribe Trespalacios


Estudiante de Odontología, Universidad CES, Medellín, Colombia.
Diploma en Diseño Gráfico. Australian International College of Arts, Gold Coast, Australia. 2007.
INDICE DE AUTORES

Ravindra Nanda
Odontólogo, Universidad de Lucknow, India. Ce¡tificado en Ortodoncia de las Universidades de Lucknow
(India), Nymegen (Holanda) y Connecticut (EUA). Diplomado de laAmerican Board de Ortodoncia. Profesor
asociado yJefe del Departamento de Ortodoncia de la Universidad de Connecticut, Farmington (Estados Uni-
dos de América).

Autor y coautor de varios libros de ortodoncia (Retention and Stability, Biomecbanics in Clinical Ortbo-
dontics y Biomecbanic a.nd Estbetic Strategies In Clinical Orthodontlcs) y más de 100 artículos científicos y
clínicos en los principales revistas de ortodoncia del mundo. Editor principal de varias revistas de ortodoncia.
Conferencista de primer nivel internacional en el área de fisica y biomecánica y sus aplicaciones en el movi-
miento dental en ortodonCia.

Peter H. Buschang
PhD en Antropología Física, con especialización en Crecimiento y Desarrollo Humano, Maestría en Anatomía
y Evolución de los Primates, Universidad de Texas, Austin, EE. UU. Profesor y Director de investigación en
ortodoncia del departamento de ortodoncia, Baylor College of Dentistry TexasA&M University System Health
Science Center. Profesor asociado en St. Louis University, St. Louis, Missouri y Universidad de Texas de Hous-
ton. Miembro honorario de la SociedadAmericana de Ortodoncia. Conferencista de primer nivel internacional
en todo 1o referente al área de crecimiento y desarrollo. Autor de numerosas investigaciones, artículos de
revistas indnadas y capítulos de libro.

Flavio Andrés Uribe Meiía


Odontólogo, Universidad CES, Medellín,.Colombia. Certificado en Ortodoncia, Universidad de Connecticut,
EUA. Residencia y seguimiento en odontologia general avanzada, Universidad de Connecticut. Certificado y
Maestría en Ciencias Dentales, Departamento de Ortodoncia, Universidad de Connecticut. Director y profesor
del posgrado de ortodoncia, Universidad de Connecticut. Investigador en las áreas de biomecánica y biología
ósea sutural. Miembro activo de la Asociación Dental Americana, la Sociedad Americana de Ortodoncia y es
elegible paralaAmerican Board de ortodoncia. Coautor de numerosos capítulos con el Dr. Ravindra Nanda
en el libro Biomecbanics and Esthetic Strategies in Clinical Ortbodontics.' Framington (Estados Unidos de
América).

Cados Flores Mir


Cirujano Odontólogo, Universidad Cayetano Heredia, Lima, Perú. Especialista en Ortodoncia, Maestría y Doc-
torado en Estomatología, Universidad Cayetano Heredia. Posdoctorado en ortodoncia, Universidad de Al-
berta, Canadá. Profesor asociado, Universidad de Alberta. Profesor visitante asociado, Universidad Cayetano
Heredia. Director del programa de ortodoncia en pregrado y encargado de las áreas de odontologíabasada
en evidencia y crecimiento y desarrollo craneofacial de pregrado y posgrado, Universidad de Alberta, Catadí.
Director del Craniofacial and Oral Health Evidence-Based Practice. Alrededor de 50 publicaciones indnadas
20 de ellas relacionadas con odontologia basada en evidencia y revisiones sistemáticas. Alberta (Canadá).

Lilnana Otero Mendoza


Odontóloga, Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá, Colombia. Especialista en Ortodoncia, UniversidadJa-
veiana. Doctorado en Ciencias Biológicas. Maestría en Microbiología, Universidad laveriana. Profesora de
posgrado de ortodoncia, Universidad Javeriana. Autora de varios artículos y materiales interactivos en multi-
media relacionados con la genética de las alteraciones dentomaxilofaciales y con la biología del movimiento
dental. Autora del libro digital Genoma en Ortodoncia. Práctica privada, Bogotá (Colombia).

JhonJairo Vargas Gómez


Médico, Universidad Pontificia Bolivariana, Medellín, Colombia. Especialista en el manejo del dolor y cuidado
paliativo. Profesor titular, Facultad de Medicina, Universidad Pontificia Bolivariana. Coordinador de la unidad
de soporte, Instituto de Cancerología, Clínica las Américas, Medellín. Práctica privada, Medellín (Colombia).

Isaac'Wasserman Milhem
Odontólogo, Universidad Nacional, Bogotá, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidad de NewYork,
EUA. Profesor del posgrado de ortodoncia, Universidad El Bosque. Coordinador posgrado de ortodoncia, Uni-
versidad El Bosque. Práctica privada, Bogotá y Neiva (Colombia).

x111
Juan Manuel Alfaro Velásquez
Médico, Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia. Especialista enPediatría, Universidad CES y Endocri-
nología Pediátrica, Universidad de Chile. Profesor asociado, Universidad de Antioquia y profesor asistente,
Universidad CES. Práctica privada, Medellín (Colombia).

Valentina Sierra Arlzate


Fonoaudióloga, Universidad Católica,Manizales, Colombia. CoordinadoraCientífica, Universidad CES, Mede-
11ín.Práctica privada Medellín (Colombia).

Eduardo Rodríguez Ataide


Odontólogo, Colegio Odontológico Colombiano, Bogotá, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Asociación
Odontológica Argentina y en Ortopedia Maxilar, Fundación Monti, Argentina. Profesor del posgrado de orto-
doncia Colegio Odontológico Colombiano y director de los programas de posgrado en ortodoncia del Colegio
Odontológico Colombia no. Práctica pivada, Bogotá (Colombia) .

Samuel Roldán Restrepo


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Pontificia UniversidadJaveia-
na, Bogotá. Director del grupo de investigación GIB, Universidad CES y EAFIT Medellín. Profesor de posgra-
do, Universidad CES. Prictica púvada, Medellín (Colombia).

Jaime Andrés Agudelo Berío


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidad de Antioquia,
Medellín. Ex-profesor de pregrado y posgrado, Universidad CES. Práctica pivada, Medellín (Colombia).

UnelZapata Múnera
Ingeniero Civil, Universidad EAFII Medellín. Máster en Estructuras, Universidad Nacional Autónoma de México
UNAM, México D.F. Candidato a Doctorado en Ciencias Biomédicas en Texas A&M University, Health Sciences
Centeq Baylor College of Dentistry Dallasllbxas. Investigador del Grupo de Investigaciones en Bioingeniería
(GIB), Medellín. Profesor de pregrado y posgrado en ingeniería, Universidad EAFIT, Medellín (Colombia).

Pedro María Jaranillo Valleio


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en Oftodoncia, Universidad de Antioquia, Me-
dellín, Colombia. Profesor del posgrado de ortodoncia, Universidad de Antioquia. Práctica privada, Medellín
(Colombia).

José FernandoJiménez Meiia


Ingeniero Civil, Universidad Nacional de Colombia. Profesor de mecánica de los medios continuos. Maestría
en aprovechamiento de recursos hidráulicos, Universidad Nacional, Medellín (Colombia).

Juan Fernando Aristizáb al Pétez


Odontólogo, Universidad del Valle, Cali, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidad CES, Medellín.
Director y profesor del posgrado de ortodoncia de la Universidad del Valle, Cali. Práctica privada, Cali (Co-
lombia).

Marco Aurélio Pardo Silva


Odontólogo, Universidad Nacional, Bogotí, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidad de Antioquia,
Medellín. Profesor del posgrado de ortodoncia, Universidades El Bosque, Jleriana y Nacional, en Bogotá, y
Santo Tomás, en Bucaramanga. Director del programa de especialización en ortodonciadela Universidad El
Bosque. Práctica privada, Bogotá y Bucaramanga (Colombia).

Nasib Balut Chahin


Odontólogo, Universidad Tecnológica de México, México D.F. Certificado en Ortodoncia, Universidad de Lo-
yola, Chicago, EUA. Ex-Director y profesor del posgrado de ortodoncia de la Universidad Tecnológica de Méxi-
co. Práctica privada, México D.F (Méico).

Diego Rey Mora


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidad de NewYork, EUA.
Director y profesor del posgrado de ortodoncia, Universidad CES. Prictica privada, Medellín (Colombia).

xiv
Jairne Silva Salgar
Odontólogo, Pontificia UniversidadJavetiana, Bogotá, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidad Mili-
tar Nueva Granada, Fundación CIEO, Bogotá. Profesor y Director del programa de especializaciín en ortodon-
cia, Universidad Militar Nueva Granada, Fundación CIEO. Práctica privada, Bogotá (Colombia).

Roberto Velásquez Torres


Odontólogo, Universidad de Cartagena, Colombia. Especialista en ortodoncia, Universidad Complutense, Ma-
drid, España. Profesor del posgrado, Colegio Odontológico Colombiano y Universidad de Cartagena. Práctica
privada, Bogotá y Cartagena (Colombia).

lv án D ar ío J i:rnénez Vargas
Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Certificado en Ortodoncia, Universidad de Manitoba, Ca-
nadá. Maestría en Ciencias, Universidad de Manitoba. Diplomado Board de Ortodoncia, EUA. Profesor Univer-
sidad CES, Medellín (Colombia).

Eduardo Padrós Serrat


Odontólogo, Universidad de Barcelona, España. Certificado en Ortodoncia, Universidad de Columbia, EUA.
Autor de la serie de libros, Bases Diagnósticas, Terapéuticas y Posturales del Funcionalismo Craneofacial . Prác-
tica privada, Barcelona (España).

Oscar Alfonso Jubiz Saba


Odontólogo, Colegio Odontológico Colombiano, Bogotá, Colombia. Especialistaen Rehabilitación Oral, Uni-
versidad del Sur de California, EUA. Profesor de pregrado y posgrado, Universidad Cooperativa de Colombia,
Medellín. Coordinador del programa de rehabilitación, Universidad Cooperativa de Colombia. Práctica piva-
da, Medellín (Colombia).

Jorge Andrés Valencia Arango


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en Odontologíalntegral del Adulto, Universi-
dad de Antioquia, Medellín. Ex-profesor del posgrado de prótesis, Universidad de Antioquia. Práctica pfivada,
Medellín (Colombia).

JuanJosé Alió Sanz


Odontólogo, Universidad Complutense, Madrid, España. Especialista en Ortodoncia y Ortopedia Maxilar, Uni-
versidad Complutense. Secretario general de la Asociación Iberoamericana de Ortodoncistas (AIO). Profesor
de pregrado y posgrado, Universidad Complutense. Autor del libro Ortodoncia y Ortopedia con Aparatos
Funciona Ies. Práctica privada, Madrid (España).

Gustavo Armando Ruiz Mora


Odontólogo, Universidad Nacional, Bogoti, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidad Nacional, Bo-
gotá, Colombia. Profesor del posgrado de ortodoncia, Universidad El Bosque y Universidad Nacional, Bogotá.
Práctica privada, Bogotá (Colombia).

Julia Harfin
Doctora en odontolo gía de la lJniversidad de Buenos Aires, Argentina. Directora y profesora titular del progra-
ma de especialnación en ortodoncia de la Universidad Maimónides, Buenos Aires, Argentina. Autora del libro
Ortodoncia en Adultos (primera y segunda edición). Práctica pfivada, Buenos Aires (Argentina).

Roberto Sánchez Woodworth


Odontólogo, Universidad Intercontinental, México D.F., México. Certificado en Ortodoncia, Universidad de
Rochester y en articulación temporomandibular, Eastman Dental Centeq Rochesteq NewYork, EUA. Ex-profe-
sor de posgrado, Universidad Intercontinental y el Centro de Estudios Superiores de Ortodoncia, México DF.
Práctica privada, México D.F (Méico).

Juan Cados Montoya Botero


Odontólogo, Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia. Especialista en Cirugía Maxilofacial, Universidad
CES, Medellín. Jefe de Trauma Maxilofacial del Hospital General de Medellín. Profesor, pregrado y posgrado,
Universidad CES. Práctica privada, Medellín (Colombia) .
Cados Mario Latorre Muñoz
Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en Cirugía Maxilofacial, Universidad de Chile.
Fundador, director y profesor del posgrado de Cirugía Maxilofacial de la Universidad CES, Medellín. Práctica
privada, Medellín (Colombia).

Cados Alt¡erto Villegas Bateman


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidad Militar Nueva Gra-
nada, Fundación CIEO, Bogotá. Especialista en Cimgía Maxilofacial, Universidad El Bosque, Bogotá. Profesor
del programa de Ortodoncia y Cirugía Maxilofacial, Universidad CES. Práctica privada, Medellín (Colombia).

Carolina Téllez Conti


Odontóloga, Pontificia Universidad laveriana,Bogotá, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidadlave-
riana. Especialista en Docencia Uniyersitaria, Universidad El Bosque. Profesora de malformaciones, Universidad
El Bosque y Hospital SanJosé, Bogotá. Docente programa de Cirugía Plástica,Hospital SanJosé; Bogotá. Prác-
tica privada, Bogotá (Colombia).

Gabriel Gallego Rarnírez


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Ex-profesor pregrado, Universidad CES. Práctica privada,
Medellín. Ex-director del grupo de investigación CES-LPH.Medellín (Colombia).

Diego Fernando Tatis Giraldo


Odontólogo, Universidad del Valle, Cali, Colombia. Especialista en Ortodoncia, Universidad Militar Nueva Gra-
nada, Fundación CIEO, Bogotá. Director y profesor posgrado de Ortodoncia y Ortopedia Maxilar del Colegio
Odontológico Colombiano, Cali. Autor de varios libros. Ptáctica ptivada, Cali (Colombia).

Cesar Augusto Munar Aguirre


Odontólogo, Universidad Autónoma, Manizales, Colombia. Especialista en Cirugía Maxilofacial, Universidad
CES, Medellín. Profesor del programa de Cirugía Maxilofacial, Universidad Autónoma, Manizales. Coordinador
del programa de cirugía maxilofacial, Hospital Santa Sofía, Hospital Infantil de Manizales. Práctica ptivada, Ma-
nizales y Medellín (Colombia).

Pablo Emilio Correa Echeveri


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en Cirugía Maxilofacial, Pontificia Universidad
Javeiana, Bogotá. Jefe de posgrados de odontología, Universidad CES. Maestría en administración (MBA), Uni-
versidad EA-FIT.Práctica púvada, Medellín (Colombia).

Gabriel Jaime Cadavid Velásquez


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Certificado en Periodoncia, Universidad de Illinois, Chica-
go (EUA). Maestría en Inmunología, Universidad de Ilinois, EUA. Decano de la Facultad de Odontología, Univer-
sidad CES. Profesor, posgrado y pregrado, Universidad CES. Práctica privada, Medellín (Colombia).

Aleiandro Jaramillo Rico


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en Endodoncia, Universidad CES, Medellín.
Profesor, posgrado y pregrado, Universidad CES. Práctica ptivada, Medellín (Colombia).

Aleiandro Mejía Madrid


Odontólogo, Universidad CES, Medellín, Colombia. Especialista en rehabilitación oral, Universidad CES Me-
dellín. Materiales dentales, Universidad de Texas, EUA. Profesor y director del programa de especialnaciÓ¡ en
rehabilitación oral de la Universidad CES. Prácticaprivada, Medellín (Colombia).

Natalia Escobar Mejía


Médica General, Universidad Pontificia Bolivariana, Medellín, Colombia. Residente de tercer año del programa
de especialización en dolor y cuidado paliativo, Universidad Pontificia Bolivariana, Medellín (Colombia).

Consuelo Valencia Ramírez


Odontóloga, Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia. Especialista en Odontologia Integral del Niño,
Universidad de Antioquia. Especialista en gestión de procesos curriculares, Fundación Luís Amigó, Medellín.
Profesora de pregrado y posgrado, Universidad de Antioquia. Práctica privada, Medellín (Colombia).

xvi
Pablo Echami Lobiondo
Doctor en Odontología, Universidad de Montevideo, Montevideo, Uruguay. Presidente de la Asociación Ibero-
ame¡icana de ortotodoncia Lingual. Vicepresidente del comité científico de la Asociación Iberoamericana de
Ortodoncistas (AIO). Autor de varios libros. Práctica privada, Barcelona (España).

Daniel Zu,lu:aga Sierra


Ingeniero Mecánico. Universidad EAFIT, Medellín (Colombia).

xv1l
TABIA. DE CONTENIDO

PRÓLOGO Rauindra Nand.a ...........ix

INTRODUCCIÓN Gonzalo Alonso Uribe Restrepo.......... ................)o(v

Unidad 1. Ortodoncia basada en la evidencia

CAPÍTULO 1 Ortodoncia basada en la evidencia............ ........3


Carlos Flores Mir
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

Unidad 2. Crecirniento v desarrollo

CAPÍTULO 2 Principios cfnicos del crecimiento y desarrollo craneofacial.................................15


Peter H. Buscbang

CAPÍTULO 3 Varlabiüdad en el crecimiento y desarrollo craneofacial ....................32


I uán D arí o Jimén ez Vargas

Anexo Tablas según edad y sexo del estudio longitudinal de crecimiento y desarrollo de
An n A rb o r - M i c h i g a n ... ............. . . . . . . . . . . . . . 37
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

Unidad 3. Biología celular y molecular

CAPÍTUIO 4 Ewerzay movimiento dental... ......49


Liliana Otero Mendozct
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTUIO 5 Ortodoncia y reabsorción radicular ................. ...................63


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Jaime Andrés Agudelo Bercío

CAPÍTULO 6 Control del dolor en ortodoncia............... ........81


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
JohnJairoVargas Gómez
Natalia Escobar Mejía

Unidad 4. Diagnóstico

CA P Í T ULO 7 D i a g n ó s ti c o y p l a n d e tratami ento ............. ................ . . . . . . . . . 93


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Oscar Dauid Uribe Restrepo

CAPÍTULO 8 Análisis de los arcos dentales .....105


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 9 Determturantes del perfil facial ......................146


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

xlx
CAPITULO L0 Evaluación de fotografías y radiografias .......154
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Oscar Dauid Uribe Restrepo

CAPÍTULO 11, Fotografía clínica digitat en ortodoncia .............. .............. 1S9


Oscar Dauid Uribe RestreDo

Unidad 5. Trataniento temprano

CAPÍTULO 12 Thatarniento temprano de la maloclusión........ .................2O9


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
IsaacWasserman Milbem

CAPÍTULO 13 Valoración de la edad esquelética y el crecimiento.- ......216


-Odontología y endocrinología pediátricct -
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Juan Manue I Alfaro Velásquez

CA P Í T ULO 14 R e l a c i ó n e n tre l a fo n o a u d i ol ogi ay l a ortodonci a............... ............... . 237


Valentina Sierca Alzate

CAPÍTUIO 15 Guía de erupción y extracción seriada... .......247


Gonzc¿loAlonso Uribe Restrepo

CAPÍTUIO 16 Problemas transversales del maxilar ............26L


-Expansión rápida p alatina-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Oscar Dauid Uribe Restrepo

CAPÍTULO 17 Thatamiento temprano de las maloclusiones de clase II, esqueléticas


c o mb i n a d a s ................. ............... . . . 283
-Aumento anteroposterior y aertical del ma.xilar y micrognasia ma.ndibular
(fuerza ertraoral más actiuador)-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 13 Tratamiento de la hipoplasia del tercio medio facial.......... ................29O


-Uso d.e Ia máscarafacial de protracción-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Pedro María Jarami I lo Val lej o

CAPÍTULO 19 Thatarniento de la micrognasia rnandibular ............... ......308


-Fundannentos de lct ortopedia funcional-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Ed u ardo Rodríguez At ai d e

CAPÍTULO 20 Tratamiento del prognatismo mandibu1ar.................. ......323


-aso de las mentoneras-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Samuel Roldán Restrepo
Uriel Zapata Munerct.

Unidad 6. física y biomecánica


CAPÍTULO 21 Principios de física que se aplican en ortodoncia.............. .................339
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
José Fernando Jiménez Mejía

ro(
CA P í T ULO 22 L a fi e tz a d e fri c c i ó n en ortodonci a.............. ............. . . . . . . . 384
Gonzalo Alonso Uribe RestrePo

CA P Í T UI O 23 Me ta l e s y a l a mb re s e n ortodonci a.............. ................ . . . . . . . 393


Gonzalo Alonso Uribe RestrePo
Juan Fernando Aristizábetl Pérez

CAPíTULO 24 Análisis del espacio intrabracket y la distancia interbracket en la


me c á n i c a o rto d ó n c i c ? ................. ............. . . . . . . . 1+I 4
Gonzalo Alonso Uribe Restreqo
Marco Aurélio Pardo Silaa

CAPÍTULO 25 Diseño, confección y uso de ansas ................426


Gonzalo Alonso Uribe RestreDo

CAPÍTULO 26 Implicaciones biomecánicas y clínicas de los dobleces de primer,


s e g u n d o y te rc e r o rd en ......... . . . . . . 138
Gonzqlo Alonso Uribe Restrepo

CAPíTULO 27 An¿áüsismecánico del anclaie .....456


Gonzalo Alonso Uribe Restrel¡o

CAPÍTULO 28 Anclafe con irnplantes de oseointegración en ortodoncia .................474


Nasib Balut Cbahin

CAPÍTULO 29 Parte I. Sistemas ternporales deanclaie óseo .......... .......489


Oscar Dauid Uribe Restrepo
Parte II. Aspectos de física y biología en el uso de los tornillos de
anclaie temporal... ....523
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Daniel Zuluaga Sierca

CAPÍTUIO 30 Aplicación en ortodoncia de los sistemas fisicos estáticamente determinados ... 544
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CA P Í T UI O 31 , C i n c h a r o a rrra rra rl o s a1ambres.................. ................ . . . . . . . 549


Gonzalo Alonso Uribe RestrePo

CA P Í T ULO 32 U s o d e e l á s ti c o s y e l a s tómeros.............. .... . . . . . 553


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 33 Mecánica delafuetza extraoral direccional .....................57o


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 34 Tracción cervical mandibular .....581


Diego Rqt Mora

Unidad 7. Técnicas, adhesión, posición y remoción de brackets

CA P Í T ULO 35 C ó mo a d h e ri r y p o n e r l os brackets................. ........... . . . . . . . 591.


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 36 Técnica de adhesión directa de los brackets.... ................600


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
CAPITULO 37 Técnica de adhesión indirecta de los brackets ................618
Nosib Balut Cbabin
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 38 Remoción de los brackets ...........633


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Oscar Alfonso Jubiz Saba
Jorge Andrés Valencia Arango

CAPÍTULO 39 Técnica estándar, modificada .....65t


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 40 Técnicas de arco recto.......... .......674


-Brackets pre aj ustado s-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Jaime Silua Salgar

CAPÍTULO 41 Retracción individual de los caninos maxilares y mandibulares.......... ................694


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPíTULO 42 Cierre de espacios, en masa, del segmento anterior maxilar y mandibulat........7O2


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CA P Í T ULO 43 O rro d o n c i a l i n g o a t....... .............. . . 723


Pablo Ecbarci Lobiondo
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPíTULO 44 Ortodoncia con placas de plástico ................742


-Placas d.e alineación y similares-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Eduardo Padrós Sercat

CAPíTULO 45 Reconstrucción oclusal con arcos multiansas edgewise ....................753


Roberto Velásquez Tbrces

Unidad 8. Tratarnientos específicos

CAPÍTULO 46 Thatamientos con extracciones y sin extracciones ................. .............769


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPíTULO 47 Thatamiento de las maloclusiones de clase I ....................784


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 48 Thatamiento de las maloclusiones de clase II....... ............807


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 49 Ttatamfento de las maloclusiones de clase III .................828


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 50 Uso del arco rectangulat atnartado hacia adelante.... .....847


-Mecánica efectiua de clase III-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CA P Í T ULO 51 El c a mu fl a i e d e ma l o c l u s i ones esquel éti cas ................. ..................... . . 850


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Oscar Dauid Uribe Restrepo

nii
CAPÍTUIO 52 Ortodoncia en adultos. ................876
Julia Harfin
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 53 Ortodoncia y los terceros molares ................396


Gonzalo Alonso Uribe Restrelto
Carlos ViI I egas B at eman

CA P Í T UI O 54 D e s g a s te i n te rp ro x i rn a l de esmal te............... .............. . . . . . . 923


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Oscar Dauid Uribe Restrepo

CAPÍTULO 55 Diagnóstico y tratamiento de las mordidas profundas. ......................934


-Mecánica de intrusión de anteriores-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 56 Diagnóstico y trartamiento de las mordidas abiertas..... ......................950


JuanJosé Alió Sanz
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTUIO 57 Nivelación del plano incisal con sistemas físicos estáticamente detenrrinados ....975
Flauio Uribe Mejía
Rauindra Nanda

CAPÍTULO 53 Manejo clínico y mecánico de los caninos retenidos... .......................984


-Problema de espacio o desorden genético-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Gustetuo Armando Ruiz Mora

CAPÍTULO 59 Distalivación de los molares maxilares.. ....7.OL7


-Mecánica de los sistemas pendulares-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 60 Yefticalización de molares en adolescentes y adultos con sistemas físicos


e s tá ti c a m e n te d e te rrn i nados.......... .......... . . . 1. 050
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

CAPÍTULO 61 Extrusión ortodóncica o erupciónfotzada... .................1.064


-Ortodonciq - periodoncia - endodoncia - rebabilitación oral-
Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Gabrie I Jaime Cadauid Velásquez
Alej andro Jaramil lo Rico
Alejandro Mejía Madrid

CAPÍTULO 62 Ortodoncia y blanquearniento dental................. ...........1.086


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Gabriel Gallego Ramírez

CAPÍTUIO 63 Orrodoncia y cirugía orrognática ................1.096


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Carlos Mario Latone Muñoz

CAPÍTULO 64 Distracción osteogénica ctaneofacial............... ..............7.L35


Cesar Augusto Munar Aguirce
Diego Fernando Tatis Giraldo
CAPÍTULO 65 Desórdenes de la articulación temporomandibular ....1.160
Roberto Sáncbez Wood¿aorth
Gonzalo Alonso Uribe RestrePo

CAPÍTULO 66 Thatamiento quirúrgico de los desarreglos internos de la articulación


te m p o ro m a n d i b u l a r.... ......' ....' ..
1.184
Juan Carlos MontoYa Botero

CAPÍTULO 67 Thatamiento de ortodoncia en pacientes con labio y paladar hendido .............1.2OI


Gonzalo Alonso Uribe Restrepo
Carolina. Téllez Conti
Consue lo Valencia Ramírez

Unidad 9. Retención mecánica y estabilidad biológica en ortodoncia

CAPÍTULO 68 Retención mecánicay estabilidad biológica en ortodoncia................................1.227


Gonzalo Alonso Uribe RestrePo

Unidad 10. Bioseguridad e instrumentos de ortodoncia

CAPÍTULO 69 Bioseguridad en ortodoncia ....1.241


Gonzalo Alonso Uribe RestrePo
Pablo Emilio Correa Ecbeuerri

CAPÍTULO 70 Instrumentos de uso común en ortodoncia.............. ....I.260


Gonzalo Alonso Uribe Restreqo

Unidad L1".Técnicas básicas de ortodoncia

CAPÍTULO 71 Prácticas de doblafe de alambre .................L.275


Gonzalo Alonso Uribe RestrePo

CAPÍTULO 72 Conceptos básicos y ptáctica de soldadura en ortodoncia .............7.277


Gonzalo Alonso Uribe RestrePo
Pamela Uribe Trespalacios

GL O S A RI O DE T É R MIN O S ...........,..... I , 287

ÍNorcn ANALÍTrco ........r.293

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Cnpíruuo

Ortodonciabasadaen la evidencia
Dr. Cados Flores Mir
Dr. Gonzalo Alonso Uribe Restrepo

ZQUées la ortodonciabasada en la evidencia (OBE)? es indispensable que el clínico cortozca las caracte-
De acuerdo con la definición propuesta por Sackett rísticas metodológicas de los diferentes diseños de
et a.1.,L996, es el uso juicioso, consciente y explí investigación.
cito de la mejor evidencia disponible para Ia toma Para practicar la OBE, el ortodoncista, luego de
de decisiones en ortodoncia, alintegtar la evidencia obtener los estudios científicos mediante una estra-
clínica con la mejor evidencia científica en beneficio tegia de búsqueda -de acuerdo con los criterios téc-
del cuidado del paciente. nicos y metodológicos previamente definidos- debe
La prictica de la OBE requiere, además, la rela- tener una actitud crítica con aquella información
ción equilibrada de la ecuación tientpo-costo-bene- relevante y válida; proceso que se debe acompañar
ficio o efectividad de los tratamientos e interven- de otros elementos propios de su experiencia. Es-
ciones mecánicas. La evaluaciÓn de los costos no se tos elementos se constituyen desde una excelente
debe limitar a considerar el precio de los a:paratos formación académica en ciencias básicas, una bue-
fijos y el tiempo de tratamiento, sino, también, el na historia clínica, un examen físico, un análisis de
costo de las complicaciones por falta de efectivi- radiografías, un análisis de modelos de esfudio, un
dad, idoneidad o, simplemente, por desconocer o análisis de fotografias, un diagnóstico muy poffne-
no considerar los efectos adversos de la mecánica nortzado y el diseño de un plan cle tratamiento ge-
escogida. neral y mecánico individual. Este contexto de accio-
nes constituye, en esencia, el marco de referencia
iPor qué se debe practicarla de las decisiones que habrán de tomarse paramejo-
ortodoncia basada en la evidencia? rar el estado de salud de los pacientes.
Porque es la manera de mu<imnar el beneficio para
los pacientes, al integrar la experiencia clínica e ido- iCómo se determina cuá,tres la meior
neidad del especialista en ortodoncia con la mejor evidencia disponible en ortodoncia?
evidencia científica disponible críticamente valo- Depende del tipo de pregunta que el clínico se
rada, con el fin de establecer sw aalidez, utilidad y quiera hacer y de las características que se espera
confiabitidad, para hacer tratamientos de ortodon- tengan los estudios definidos como adecuados para
cia altamente efectivos en el menor tiempo posible, respondeda. Se profundnafit en la evaluación de
sin yatrogenia, ni recidivas. la mejor evidencia para determinar la efectividad y
La práctica basada en la evidencia requiere la seguridad de los procedimientos o intervenciones
ejecución ordenada de una serie de pasos, que se mecánicas en los dientes.
inicia con la identificación objetiva del problema de Para establecer la calidad de la evidencia dispo-
interés clínico y su planteamiento en forma de pre- nible existen herramientas, que en forma de listas
gunta bajo una estructura cgnocida universalmente de chequeo, permiten al ortodoncista verificar o
con la sigla PICO (Patient Interuention Compare comprobar que los elementos esenciales del dise-
Outcome). ño de los estudios -la presentación, anfisis de los
La OBE exige la generación de preguntas por resultados y las conclusiones- estén ajustadas a los
parte de los ortodoncistas cuando cuestionan sus criterios de verdad, exactitud y precisión, que ga-
conocimientos o su prárctica; es el inicio de una ranticen la ausencia de sesgos e induzcan a tomar
esrategia inteligente pafa respondef a estos inte- decisiones correctas.
rrogantes y, en consecuencia, cambiar algunos as-
pectos puntuales. Este proceso, que es simplemen- Evaluación de la efectividad
te intelectual, no depende de técnicas o aparatos La mejor eyidencia para evzlwar la efectividad de
especiales (brackets y alambres) y permitg que la una intervención mecánica en ortodoncia se deri-
ortodoncia progfese como ciencia, pues el paso si- va de estudios aleatorios y doble ciego (escasos en
guiente requiere identi-ficar el tipo de estudios que la literatura ortodóncica). Aunque la experiencia
mejor pueden responder la pregunta, para 1o cual clínica proporciona información valiosa, apoyar-
se solamente en lo anecdótico tiene limitaciones En la práctica, los pacientes tienen condiciones
importantes; sin embargo, la experiencia cIínica asociadas (p. ej., biológicas) paralas cuales reciben
-adecuadamente recolectada y sistemáticamente otros tratamientos (p. ej., farmacológicos), en cir-
evaluada- puede ser más útil que el simple sentido cunstancias que no fueron bien evaluadas cuando
común. el tratamiento mecánico fue planeado. En este esce-
El juicio clínico no siempre lleva a la toma de nario, los estudios obseruacionales son de especial
las mismas decisiones; los ortodoncistas, con poca utilidad, considerando que en periodos muy col'tos
o mala formación, no siempre recuerdan con exac- se puede observar un mismo resultado en muchos
titud los resultados de una intervención mecánica pacientes. Como es obvio, esto depende del cono-
en los dientes y tienden a basarse, solamente, en cimiento, forrnación y habilidad del clínico para re-
hechos recientes, en muchas ocasiones por infor- conocer "qué va bien y qué va mal", con respecto a
mación recibida en cursos comerciales deficientes. lo convencional.
Además, en muchas ocasiones, depositan mayor
atención en la información que está de acuerdo con áQué hacer si no hay evidencia científica de
sus creencias o formación preceptorial. Como re- la efectividad o seguridad de un tratamiento?
sultado de ello, aunque estén equivocados, tienden Silas reuisiones sistemáticas muestran que no hay
a persistir a pesar de haber evidencia, disponible en estudios aleatorios doble ciego que evalúen el tra-
la literatura, que soporte y demuestre la existencia tamiento con la técnica X con brackets especiales
de procedimientos mejores o que indiquen lo con- en pacientes con apiñamiento seyero o con men-
trario a sus paradigmas. toneras en fase de crecimiento y desarrollo activo
con prognatismo mandibular, quiere decir que la
Escenario clínico patalapráctica de OBE evidencia, que soporta el uso de la técnica X con
brackets especiales y las mentoneras, proviene de
Primer eiemplo estudios observacionales sin un grupo control.
Paciente con apiñamiento mandibular y maxilar se- EI metanálisis sugiere que, en las mejores cir-
vero. ZSebeneficia el paciente con un tipo de técni- cunstancias, la técnica X con brackets especiales y
ca X con brackets especiales? iCuáI es la evidencia las mentoneras funcionan bien en un porcentaje
científica que soporta la efectividad de esta técnica dado de los pacientes. La falta de evidencia no ne-
y de estos brackets? ll,as investigaciones actuales cesariamente significa que la técnica X con brackets
son válidas, controladas, aleatorias y doble ciego? especiales y las mentoneras no sirvan, pero si indica
/Se pueden aplicar y replicar los resultados de estos la necesidad de hacer estudios aleatorios y doble
estudios, si los hay, en todos los pacientes y en igual ciego paru responder a la pregunta corr certeza.
forma?
ZSe pueden aplrcar estos resultados
Segundo eiemplo al paciente, aún sin evidencia?
Paciente en fase de crecimiento y desaffollo activo, Sí, se pueden aplicar, sin embargo, si el paciente
con prognatismo mandibular severo. lSe beneficia no responde al tratamiento con mentonera, en un
de un tratamiento temprano con mentonera? iCuáI tiempo determinado se debe suspender y buscar
es la evidencia científica que soporta la efectividad otra opción terapéutica para este individuo, en par-
de las mentoneras? iLas investigaciones que hay ticular (se mide la restricción del crecimiento de la
actualmente son válidas, controladas, aleatorias y mandíbula mediante una superposición de radio-
doble ciego? lSe pueden aplicar y replicar los re- grafías laterales del cráneo - cefalometría- tomadas
sultados de estos estudios, si los hay, en todos los cada seis meses).
pacientes y en forma igual? En el caso de la técnica X con brackets especiales,
si no se aprovechan las ventajas mecánicas expues-
Estudios de cohorte tas por el fabricante, por un vacío en la fundamen-
Los sistemas mecánicos en ortodoncia son apro- tación básica del clínico en áreas como la biología
bados ylanzados al mercado después de haber te- celular y molecular, la fisicay la mecánica, con todas
nido una exposición en un determinado número las variables que se pueden presentar durante un
de pacientes, usualmente por corto tiempo y en tratamiento activo de ortodoncia con a:parltos fijos,
condiciones muy específicas, ya que en estl etapa funcionará igual a cualquier otro sistema mecánico
sólo hay mercadeo. Por Io tanto, los efectos secun- similar; como la técnica Y con brackets especiales,
darios, poco frecuentes -pero en algunas ocasio- incluyendo el sistema estándar.
nes serios- no se detectan fácilmente. No es sor- En la actualidad, el arte de practicar la ortodon-
prendente que las técnicas en ortodoncia tengan cia signifrca combinar la experiencia e idoneidad
un perfil de seguridad diferente cuando se usan del clínico con la mejor evidencia disponible en la
en las condiciones clínicas reales, en pacientes y literatura. Lamentablemente, la meior evidencia
problemas diferentes. -en ocasiones- es muy escasa, en especial cuando

4
se ftata del tratamiento temprano de la maloclu-
sión, sobre todo de las clases III por prognatismo y
tr..-tdrdl
tuncional
tr.."d"d
sicosocial
| [ |
en el maneio comercial de la técnica X con brackets
especiales; las casas comerciales pretenden mos-
+ +
trar que estos aparatos hacen los tratamientos de
ortodoncia sin la intermediación idínea e intelec-
tual del ortodoncista.
[**1.-]-.*lryrrya)+
u.o-onidnd \"9919""/
I'-t::::::::::::: |ri
Algunas revisiones sistemáticas recientes mues-
tran que sólo el 2% de la literatura publicada so- + +
1
f---:--:--..-l t '-
bre el tratamiento temprano del prognatismo con l Lrprnl on I l Lvl dencl a
mentoneras son investigaciones aleatorias, que, con
mucha frecuencia, tienen una metodología muy po-
l*l:'*: lr g1y
- ' '',',':l-l'
--:l--"--:--:--'

bre que amenaza la validez de los resultados. De


ninguna técnica X con brackets especiales hay revi- Tomadoy modificadode; JADA2004;135:162-167.
siones serias.
Fi gura 1-1. Model oteóri code l a deci si ónclí nica.
Se puede concluir que la cantidad y calidad de
evidencia científica es muy desfavorable paru las
condiciones de alto impacto como el prognatismo comunes y significativos que surgen pata el profe-
mandibular temprano y que debe ser una prioridad sional con un interés en el área y que lo afectan en
apdar a cerrar esta brecha en la especialidad. el día a día:
En los casos con apiñamientos severos y la téc-
nica X con brackets especiales, sólo hay prácticas ' Cantidad creciente de literatura científica, po-
de mercadeo comercial, cursos indiscriminados tencialmente pertinente, que se publica cada
patrocinados por las casas comercialeq en muchas año.
ocasiones, sin un soporte científico serio. Se ve en ' El acceso a esta información no es simple, fácil,
forma continua, a través de las publicaciones en ni gratuito.
revistas especializadas en ortodoncia, que ortodon-
cistas idóneos, con buen entrenamiento y bien es- La solución al primer problema son las propues-
tructurados académicamente, aún con las técnicas tas de revisiones sistemáticas.Estas aparecen como
convencionales formuladas hace 70 años (Angle y uno de los vehículos más adecuados para acceder a
Tweed) consiguen resultados perfectos y compara- literatura de alta calidad científica.
bles con la técnica X con brackets especiales, sin
diferencia en el tiempo y enla calidad final del tra- Las revisiones sistemáticas
tamiento. Son revisiones de la literatura en las cuales se ha
La OBE es la integración -al momento de tomar hecho el mayor esfuerzo posible para minimizar los
decisiones clínicas- de tres factores: sesg'os/ enores aleatorios en la búsqueda y selec-
ción de los artículos científicos, antes de interpretar
. La experiencia clínica. los hallazgos y emitir las conclusiones.
. La mejor evidencia científica disponible. El concepto clave está dado por la transparen-
. El contexto social del paciente. cia y reproducibilidad del proceso mediante el cual
se obtuvieron las conclusiones. Si se encuentra una
Otros factores adicionales también han sido con- revisión sistemática que fue hecha siguiendo los
siderados como modelo teórico del proceso de la procedimientos adecuados y que responde directa
decisión clínica (figura 1-1). En otras palabras, la or- o indirectamente a la pregunta clínica, entonces re-
todoncia basada en la evidencia no es sencillamente presenta la primera y mejor opción, ya que alguien
la recolección de la mejor evidencia disponible y la ha hecho la búsqueda, selección e integración de la
aplicación directa de ella en los procedimientos clí- evidencia disponible.
nicos; es mucho más que eso, es el sentido de la ex- Lamentablemente, en el segundo problema es
periencia que el ortodoncista ha acumulado duran- poco lo que se ha hecho. Los artículos publicados
te los años de práctica clínica más el entendimiento en las revistas científicas en el mundo no son, en la
del contexto social del paciente y la comunidad en mayotía, de acceso gratuito. En este sentido, algu-
la que se practica, entendidos como variables de nas revistas ofrecen acceso gfatuito a los artículos
suma importancia en el momento de tomar las de- que publican, pero éste tiene un costo para los au-
cisiones clínicas. tores, ya que éstos tienen que pagar el derecho de
La aplicación de la ortodoncia basada en la evi- publicación para que otros terceros los lean. Una
dencia es un ambiente que requiere la integración opción buena, en el corto o mediano plazo, consiste
juiciosa de la información científica disponible en en que los colegios profesionales, las asociaciones
las decisiones clínicas diarias. Hay dos problemas o las sociedades científicas, negocien, a nombre de
cada uno de sus miembros y con los proveedores Lilacs merece una menciófl aparte, pues es la
de la información electrínica, un acceso ilimitado a única base de datos exclusiva, ya que prácticamen-
cambio de un pago adecuado. te ninguno de sus resúmenes aparece en otras
bases de datos. Aparecen publicaciones científi-
Procedimiento para encontrar cas, en idiomas español y portugués. En cualquier
la meior evidencia disponible caso, se recomienda que el lector analice las dife-
En una situación clínica determinada, el ortodon- rentes columnas de la figura para que entienda,
cista se hace una pregunta sobre cómo proceder. cabalmente, la diferencia en el comportamiento
En la OBE son cinco los pasos que hay que seguir de las bases de datos existentes, dependiendo del
paratratar de determinar cuá).es la meior evidencia tema que se busca.
disponible. Se recomienda iniciar la búsqueda en las siguien-
tes bases de datos electrónicos, por ser gratuitas e
1.. La formulación de la pregunta clínica inclusivas:
Puede ser tan específica como: ies la ttilización de
un alambre termoactivado rectangular de calibre Medline: es una base de datos de acceso gratuito
0,016 x 0,022, mejor que uno 0,017 x O,O25 para que permite, a cualquier persona, hacer una bús-
hacer la alineación inicial en un caso de ortodoncia queda, teóricamente extensa e inclusiva, de cual-
con apiñamiento leve? O en una forma más genéri- quier tópico relacionado con las ciencias de la sa-
ca como: Zson los alambres terrnoactivados rectan- lud. Una de las opciones de búsqueda secundaria
gulares de calibre 0,016 x O,O22,mejores que los que presenta es la posibilidad de circunscribir la
0,017 x O,O25paru hacer la alineación inicial en los búsqueda a revisiones sistemáticas.
casos de ortodoncia? Lamentablemente, en un ejercicio que se hizo
Cuando la pregunta es sobre terapia o ttata- con esta herramienta, L.TOOrevisiones sistemáticas
miento se aplica como a¡rda la sigla PICR (Pobla- estaban relacionadas con odontología, y cuando se
ción, Intervención, Control, Resultado). Lo.que se analizaron se concluyó que tan sólo 35O eran real-
busca es que estos cuatro criterios estén definidos mente revisiones sistemáticas. Búsquedas en otras
adecuadamente en la pregunta. Para preguntas so- bases de datos gratuitas produjeron aún un mayor
bre diagnóstico, pronóstico o daño se utilizan varia- número de falsos positivos.
ciones de la PICR.
En cualquier caso, el tiempo que el ortodoncista Cochrane Collaboration: representa la herramieirta
invierta en una formulación correcta de la pregun- de búsquedaliteraria del grupo de medicina basada
ta y hallar la respuesta, es bien empleado, ya que en evidencia más reconocida en el mundo. Da las he-
lo guiará efectivamente en la búsqueda y aytdará a ffamientas parala búsqueda específica de revisiones
identificar la literatura más útily, por ende, a:utilrzar sistemáticas o ensayos clínicos aleatorios publicados
en forma más eficiente el tiempo del profesional. o en proceso de publicación. El acceso es gratuito,
Deficiencias logísticas en este primer paso, implican dependiendo desde dónde se ingresa, de acuerdo
no encontrar exactamente lo que se busca. con la clasificación de ingresos por país de la Organi-
zación de las Naciones Unidas (ON[D.
2. La búsqueda de la literatura Fuera de estas bases de datos existen muchas
Si esta búsqueda no es eficiente, puede ser difícil otras que son muy útiles para encontrar literatura
y consumir bastante tiempo. Idealmente, y como peftinente como Embase o Scopus, pefo con un
ya se ha mencionado, esta búsqueda se simplifica- costo de acceso considerable.
rá si eiste, previamente, una revisión sistemática Lo importante es entender que cualquiera de es-
que responde a la misma pregunta de investigación. tas bases permitirá el acceso a los resúmenes o abs-
Sólo queda utilrr;ar los motores de búsqueda que tracts de los artículos, mas no a la versión completa
brindan información contenida en bases de datos de los mismos. Es aquí donde, nuevamente, se en-
electrónicas -por ejemplolarealización de una bús- cuentra una limitación importante debido al costo.
queda de evidencia científica en el motor de bús- Para otros, el idioma es un limitante adicional, ya que
queda PubMed que sirve a la base de datos electró- lamayoria de las publicaciones están en inglés.
nicos Medline- (tabla 1-1.¡.
La base de datos Medline, permitió identificar Conseios para hacer una
alrededor de dos tercios del total de los artículos búsqueda más eficiente
seleccionados. Hay que resaltar que el resto de las
bases de datos electrónicas aportan bajos porcenta- . Aunque buscar en todas las bases de datos exis-
jes. Esto no quiere decir que sólo se debe circuns- tentes es evidentemente lo ideal, hay limitacio-
cribir la búsqueda a través de PubMed, sino que la nes en tiempo y costo que hacen que sólo se
figura da una idea de la posibilidad de no identificar haga en un par de ellas. No existe aún evidencia
artículos si no se buscan en más bases de daros. de que algunas bases de datos sean mejor que

6
1. Barnett G, Higgins DVi Major P{ Flores-Mir C. Immediate Skeletal and Dentoalveolar Effects of the
HerbstAppliance on Class II division 1 Malocclusions: A Systematic Review. Angle Orthod (accepted
for publication May 2OO7).
2. Flores-Mir C, Ayeh A, Goswani A, Charkhandeh S. Skeletal and Dental Changes in Class II division 1
malocclusions treated with splint-type Herbst appliances: A Systematic Review. Angle Orthod2OOT;
77(2):376-38r.
3. Flores-Mir C, Major Mf; Mafor Plü Soft tissue changes with fixed functional appliances in Class II
division 1: A systematic review. Angle Orthod 2OO6;76(4, 712-720.
4. Flores-Mir C, Major P\({ A systematic review of cephalometric facial soft tissue changes with the Ac-
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population based samples: a systematic review. J Public Health Dent 2006; 66(2): 152-158.
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7. Lagravére MO, Flores-Mir C. The treatment effects of Invisalign orthodontic aligners: a systematic
review.J Am Dent Assoc2005r 136(12): 1724-1729.
8. NgJ, Major P$( Heo G, Flores-Mir C. True incisor intrusion attained during orthodontic treatment:
a systematic review and meta-analysis.Am J Orthod Dentofacial Orthop 2OO5;128(2):212-2L9.
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matic review. AmJ Orthod Dentofac Orthop 2OO6;13O(6):7O9-714.
10. Lagravére MO, Major PN( Flores-Mir C. Long-term dental arch changes after rapid maxillary expan-
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a systematic review Angle Orthod 2OO5;75(6): LO46-1O52.
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19. Rappoport K, Muller R, Flores-Mir C. Dental and skeletal changes during pressure garment use in
facial burns: A systematic review Burns (accepted for publicationJuly 2OO7).

otras, ni que la combinación de ellas sea la for- . Utilizar opciones que den las bases de datos
ma más eficiente. En todo caso, hay que acep- electrónicas. Para Medline, una realmente
tar el riesgo de no identificar un buen estudio útil, es lallamada preguntas clínicas (Clinical
cuanto menos inclusiva sea la búsqueda. Queries). Mediante esta última la búsqueda
Limitar las búsquedas a un periodo específico de será específica pata el tipo de pregunta esco-
tiempo, sólo si se tiene la seguridad de que fuera gida (terapia, pronóstico, diagnóstico, daño,
de ese periodo nada aplicable fue publicado. entre otros).
Limitar la búsqueda al tipo específico de publi-
cación que brinde la mayor calidad metodoló- 3. La evaltación de la evidencia
gica. Por ejemplo, para tratamientos, el ensayo Las diferencias metodológicas influencian la magni-
clínico aleatorio. tud y la dirección de los resultados. A mayor calidad
Tabla1-1. Muestraun ejemplodondese presentan losporcentajesde artículos
seleccionados,
finalmente, en seis
de las basesde datosque más se utilizanen el centrode evidenciade la Facultadde Odontologiade la Univer-
sidad de Alberta(Canadá);diecinueverevisiones la gran mayoríadirectamente
sistemáticas, relacionadas con
que
ortodoncia, están publicadaso aceptadas para su publicación.

1, 100 100 0 67 0 0 0
2 67 67 0 0 33 XX 0

3 56 )o 0 11 56 33 0

4 57 59 2 16 28 29 2

5 50 50 0 0 0 0 50
(- \'lz 62 8 0 31 0 39

7 100 50 0 100 0 0 0

8 93 6l 4 22 26 0 0

9 80 90 0 t3 33 0 0

10 49 46 0 2 12 20 15

11 33 79 5 10 5 21 0

12 /() 76 18 5 1B 5 0
13 75 75 0 50 63 0 t3

14 6B 74 0 22 4B 19 0

15 42 8 0 0 16 1,6 33
16 76 7I l1 4 71 XX 0

I1 23 32 L4 0 z) XX 0
18 100 100 0 29 57 0 0
19 100 100 100 0 50 0 0

Ptom. 69 66 9 18 27 9 8

metodológica, menor seú la magnitud de la dife- específico durante el proceso de la decisión cli
rencia entre los tratamientos o métodos. A pesar de nica. Hay guías que permiten evaluar la calidad
poder recomendarse el anáIisis de calidad metodoló- metodológica:
gica entre los estudios seleccionados, no existe evi-
dencia concluyente que sugiera que elanálisis cua- Ensayos clínicos aleatorios (CONSORT).
litatiuo de los artículos seleccionados sea vilido. Estudios no aleatorios (TREND).
En cualquier caso, un análisis individual de la Estudios de pruebas de diagnóstico (STARD).
influencia de componentes metodológicos claves Revisiones sistemáticas (QUORUM).
se hace necesario. Lo que se busca es, que en si- Para los demás tipos de artículos hay diferentes
tuaciones en donde los resultados de los artícu- guías, que están en proceso de validación.
los seleccionados sean contradictorios, se pueda
inclinar labalanza hacia un lado, iustificando una 4- La inltegtación de la evidencia
mejor calidad científica y, por ende, una menor en la práctica clinica
posibilidad de obtener resultados sesgados. En Como ya se discutió, la ortodoncia basada en la
los casos donde todos los artículos van en la mis- evidencia no sólo necesita identificar la meior evi-
ma dirección, la influencia metodológica no es de dencia disponible y entender sus limitaciones, sino
primordial importancia. Un entendimiento cabal utitnar la experiencia clínica del profesional y los
de las limitaciones de cada estudio le permite, al valores de los pacientes con respecto al tratamien-
clínico, asignar un peso adecuado a un artículo to, diagnóstico o evaluación. Hay que entender que

8
no hay un balance perfecto entre los tres compo- sistemática. Un punto importante para resaltar es
nentes, dado que diferentes pesos se aplican para que este tipo de estudio no es, simplemente, la
distintas situaciones clínicas. suma aritmética y división posterior de los prome-
Un claro entendimiento de cómo y dónde obte- dios indMduales, sino que toma en consideración
ner la meior evidencia es clave. Errvez de utilizar el otros criterios metodológicos diferentes con asigna-
tiempo en búsquedas, obtención y análisis de artí- ción de peso distinto a cada promedio, de tal mane-
culos específicos, la ufrJ;zación de las herramientas ra que los estudios con mejor calidad y metodología
y conceptos disponibles hacen este proceso más tienen mayor peso que los de menor calidad. Este
eficiente y, por ende, facllitan la incorporación de la último proceso no es automático y es de alta sub-
evidencia enla práctica clínica diaria. jetividad, ya que los autores deben determinar que
En este contexto queda claro que, como espe- valoración le dan a cada estudio.
cialistas en ortodoncia, se deben tener unos cono- Para que tenga sentido, un metanálisis debe es-
cimientos mínimos de metodología de la investiga- tar incluido en una revisión sistemática. Esta última
ción, para discernir entre lo que es simplemente selecciona los estudios considerados adecuados y
anecdótico, como el reporte de caso o la serie de el metanáIisis le da el promedio final concluyente.
casos, de lo que es científico y replicable, como los Si sencillamente se seleccionan aleatoriamente al-
estudios longitudinales, los casos controles y los en- gunos estudios específicos y se combinan a través
sayos clínicos aleatorios y no aleatorios. de un metanálisis, todo el procedimiento se sesgay
Aunque existe una pirámide de evidencia en pierde cualquier validezteórica; se volvería alavie-
donde las revisiones sistemáticas y los metanálisis ja escuela de las revisiones literarias tradicionales,
están en laparternás altayla opinión de un experto con sus limitaciones y problemas.
y los estudios de laboratorio en la base, el simple Adicionalmente, hay que tener mucho cuidado,
hecho de que un estudio se llame metanálisis no pues si se concentra en este "número mágico final"
implica, automáticamente, que sea perfecto o, lleva- producido por el metanálisis se puede perder de
do aI otro extremo, que todo lo que se ha publicado vista información útil. Muchas veces es el análisis de
antes no sirve, pues no proviene de ensayos clínicos estudios agrupados por características comunes, el
aleatorios. que da lamayor riqweza informativa sobre cómo un
Para algunas controversias clínicas en ortodon- factor determinado influencia una variable de inte-
cia, como son los tratamientos con extracciones aer- rés en una situación clínica particular.
szs sin extracciones, la cirugía ortognática uersus el Un punto importante es la diversidad entre los
camuflaje, entre otros, nunca se podrá reportar un estudios seleccionados. Es prácticamente imposible
ensayo clínico aleatorio debido a situaciones de tipo encontrar dos estudios idénticos o casi idénticos
ético; desde este punto de vista no se le puede ofre- que permitan combinados en un metanálisis sin
cer a un paciente que participe en un estudio en eI que generen dudas. En la práctica hay diferencias
cual se ha determinado que puede ser tratado de significativas entre los estudios seleccionados y,
igual forma y con resultados similares con cirugía por ende, se debe pensar hasta que punto es vali-
ortognática o camufl aje. Evidentemente, habiendo do o iuicioso combinar "naranias con mandarinas"
la posibilidad, el paciente y el ortodoncista se deben o "plátanos con bananos". Es en este punto donde
inclinar por el camuflaje, dado el alto riesgo y costo el metanálisis se debe analtzar con juicio y no se
asociado con la cirwgía, a no ser que el paciente ya debe aceptar la combinación ciega de resultados.
tenga una decisión personal hecha con base en cri- Para complementar la información anterior se debe
terios cosméticos importantes para su autoestima. explicar que el análisis de esta limitación es el que
Es en estos casosdonde los estudios retrospectivos, genera una discusión muy rica y productiva y que
bien hechos y planeados, ofrecerán una respuesta hace apreciar, de una forma más comprehensiva, la
al dilema (casos comenzados consecutivamente, aná- evidencia científica disponible.
lisis discriminante paraasegotar que los dos grupos Finalmente, tan o más importante que el núme-
eran similares a-lcomenzar. entre otros). ro promedio final, es la variabilidad asociada a é1.
Un promedio determinado de cambio en la longi-
5. Los metanálisis tud mandibular por año puede ser de 4 rrrtnr,:'.Se pre-
Un metanálisis no es más que un procedimiento es- sentan escenarios diferentes si en un primer caso la
tadístico desarrollado para combinar los resultados desaiación estándar es de 0,5 mm cuando se com-
de múltiples estudios en un sólo promedio, con su para con un segundo caso en el cual la desviación
respectiva desviación estándar; en otras palabras, es de 2 mm. En el primer caso, en un95''/", se puede
ante promedios múltiples y discrepantes, uno por esperar un aumento de la longitud mandibular en-
cada estudio incluido, los combina y produce un tre 3 y 5 mm, mientras que en el segundo, éste 95%o
promedio final. estaríaentre0y8mm.
Es importante entender qué es el metanálisis Para la primera situación se le puede ofrecer al
para ponedo dentro del contexto de una revisión paciente garantía de obtener por 1o menos 3 mm
de cambio si se usa el procedimiento clínico repor- tener criterios claros v tamizar lo bueno. lo medio-
tado, mientras que en el segundo escenario puede cre y lo malo que se publica cada añ.oen la literatu-
darse el caso de que no se produzca ninguno o, por ra mundial sobre ortodoncia.
el contrario, qwe crezca una cantidad muy significa- Es muy sencillo adicionar la palabra revisión sis-
tiva; hasta 8 mm. temática o metanálisis a cualquier documento pata
En otras palabras, para el ortodoncista, es este determinar que se está ante una información de
límite de confiabilidad inferior, el que sirve para primer nivel, ya que no todo 1o que se publica en
plantearle al paciente el peor resultado posible en nombre de la ortodoncia basada en la evidencia es
un tratamiento, y mejora la comunicación con él infalible. Lo mismo puede pasar con las presenta-
para evitar sorpresas desagradables posteriores. ciones y conferencias de los especialistas en eventos
académicos públicos, ya que al mencionar el térmi-
Sesgos y limitaciones en la no basado en euidencia, pata tratar de impactar,
ortodoncia basada en la evidencia pueden generar expectativas falsas en la presenta-
Consideraciones finales que se deben tener en ción; que no es otra cosa que la misma información
cu?nta aI analizar la información científica: de siempre, pero con un nombre nuevo.
En este capítulo se han tatado de presentar, de
Eaidencia disponible manera somera, algunas de las consideraciones cla-
Siempre hay que considerar que la calidad de la in- ves que todo clínico en ortodoncia debe compren-
formación que brinda una revisión sistemática no dery manejar para que, usando su conocimiento en
puede ser mejor que la calidad de la información el área, seleccione lo que sirve de la literatura en or-
de los estudios seleccionados. Ante la ausencia de todoncia y deseche lo demás. Hay que entender que
evidencia, una revisión sistemática que sea metodo- los resultados que son estadísticamente significati-
lógicamente perfecta es de poca utilidad. vos no necesariamente tienen que ser clínicamente
relevantes (en metodología de investigación).
Sesgo de publicación La ortodoncia basada en la evidencia no existe
Las revistas de mayor prestigio tienden a publicar para hacer la vida de los clínicos e investigadores
estudios que muestran resultados estadísticamente más simple, sino para hacer de la ortodoncia una
significativos, en comparación con aquellos que no ciencia y no una cantidad de técnicas comerciales,
Ios muestran. muchas de ellas deficientes y sin fundamentos cien-
tíficos, que se presentan y venden a profesionales
Sesgo de temporalidad ingenuos que no hacen otra cosa que replicar tra-
Se da por el tiempo que transcurre cuando finaliza
tamientos sin entender los procesos básicos que
la investigación y cuando se publican los resultados
soportan un diagnóstico y un plan de tratamiento
en una revista indizada. En algunas ocasiones pue-
general e individual, que, por responsabilidad mí
den pasar hasta dos años.
nima, debe tener cada paciente.
Finalmente, no queda más que resaltar que cada
Sesgo de idioma
uno debe set por si mismo, un experto "basado en
Estudios con resultados significativos tienden a ser
la euidencia". Se debe ser crítico con lo que se lee
publicados en revistas en inglés.
y se escucha y nunca se debe olvidar que no sólo
se f.rata de encontrar la mejor evidencia disponi-
Sesgo de duplicación
ble, sino que es clave combinada con la formación,
Son estudios que han sido publicados más de una
yez en revistas indizadas. Si se consideran pafa un experiencia e idoneidad del clínico y con los valo-
res propios de los pacientes y las comunidades en
metanálisis, automáticamente generan un sesgo al
donde labora. La ortodoncia esti en pañales en este
duplicar los resultados.
tema, pero el futuro es bastante prometedor.
Sesgo de resultados
Los autores que encuentran resultados no signifi- Aportes temáticos
cativos en sus investigaciones tienden a no inten- Dr. Rubén Darío Manrique Hernández. Jefe de in-
tar publicados. Esto genera, de manera artificial, uestigación, Uniuersidad CES. Profesor y director
que los que son significativos tengan un mayor del diplomado en odontología basada en la eui-
impacto. dencia., Uniuersidad CES.

Conclusiones LECTURAS RECOMENDADAS


El ortodoncista, especialista de escuela, necesaria-
mente debe tener una formación académicabásica 1.. Maior MP, Maior PS Flores Mir Cados.
que le permita conocery aplicar los procedimientos Benchmarking of Reported Search and Selec-
básicos sobre metodología de la investigación, pan tion Methods of Systematic Reviews by Dental

10
Specialty. Evidence-based Dentistry 2OO7; I 11. Sacket DL, Ha;mes RB, Guyat GH, Tugwe-
(3)t 66-70. ll P. Clinical Epidemiology. A Basic Science
2. Flores Mir Cados. Can we extract useful scienti- for Clinical medicine. Second Edition. Little,
fically sound information from retrospective non- Brown and Company, USA; 1991.
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evidence-based practice treatments? Am J Orthod cal Preventive Services. International Medical
Dentofac Orthop. 2OO7;L3l (6):7O7-7O9. Publishing, lnc. L996.
3. Mafor Ml Maior PS Flores Mir Carlos. Sear- 13. Sackett DL, Rosenberg \q Muir GrayJA, Ha-
ch and selection methodology of systematic re- ¡mes RB, RichardsonVS. Evidence Based Me-
.$íhat
views in orthodontics (2OOO-2OO4).AmJOrthod dicine: is and what isn't. British Medical
Dentofacial Orthop. 2O06; L3O(2):2L4-2L7. Journal. BMJ t996; 3L2: 7 1,-72.
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1.1-
:

y desarrollo
Crecimiento
2
Cnpírur-o

Principiosclínicosdel crecimiento
y desarrollocraneofacial
Dr. Peter H. Buscbotng

Los clínicos necesitan de un entendimiento básico cial que los clínicos entiendan que el maxllar y la
del crecimiento y desaffollo para elaborar el plan mandíbula, los dos determinantes esqueléticos más
de tratamiento y evaluar los resultados. Como lo importantes de la maloclusión, siguen patrones de
determinó la Organaación Mundial de la Salud crecimiento similares. Ambos se desplazan haciade-
(OMS); "El crecimiento y desarcollo proporcionan lante y especialmente hacia abajo; tienden a rotar
uno de los mejores medios disponibles para medir hacia adelante o anteriormente; rotan transversal-
la salud y el bienestar de las personas". mente y responden a desplazamientos y rotación
Los clínicos, con conocimiento del tema, entien- por patrones característicos de crecimiento sutural,
den que el crecimiento somático general brinda crecimiento condilar y migración cortical.
una información importante sobre el tamaño, el es- Es también útil entender que el paciente deberá
tado de maduración y los patrones de crecimiento adaptarse esqueléticamente al tratamiento ortopé-
de sus pacientes. Los eventos del tiempo de madu- dico, ortodóncico o a la intervención quirúrgica y
ración tales como la iniciación de la adolescencia o que estas adaptaciones simulan patrones de creci-
el alcanzar la velocidad en el pico de crecimiento, miento exhibidos por el no tratado. Tal vez lo más
son coordinados por el cuerpo. La información de- importante es que el clínico debe entender el gran
ivada de la estatura o peso se puede aplicar al com- potencial terapéutico que brindan la erupción y la
plejo craneofacial. En otras palabras, el momento migración dental. Los molares y los incisivos maxi-
de velocidad del pico de crecimiento, una medida lares, por ejemplo, tienen más erupción que el des-
no invasiva y fácll de obtener, se puede wtTlizarpara plazamiento inferior del maxilar y se convierten en
determinar el momento del pico del crecimiento las estructuras elegidas para controlar el crecimien-
mandibular. to anteroposterior y vertical.
El conocimiento del crecimiento somático gene- A menudo, los clínicos no aprecian que los adul-
ral es, también, útil cuando se evalúan las dimensio- tos muestran muchos de los mismos patrones de
nes craneofaciales del paciente. Los percentiles de crecimiento exhibidos por los niños y los adolescen-
peso y altura de un individuo proveen una medida tes, simplemente en formas menos exageradas. Ha
del tamaño corporal total contra la cual se pueden sido bien establecido que el crecimiento craneofa-
comparar las medidas craneofaciales. De individuos cial continúa después de los veinte y treinta años
excesivamente pequeños (p. er., por debajo del y, tal vez, rnás a]lá. El crecimiento esquelético del
quinto percentil en el tamaño del cuerpo) se podría adulto parece ser predominantemente de naturale-
esperar un complejo craneofacial pequeño. Final- zaverl.:ical, con una rotación de la mandíbula hacia
mente, los datos de referencia disponibles para el adelante en hombres y hacia atrás en las mujeres.
crecimiento somático y la maduración están basa- Los dientes continúan su erupción y compensan,
dos en muestras grandes y representativas, hacién- dependiendo del patrón de crecimiento individual.
dolos más aplicables y precisos en los extremos per- Los adultos también muestran importantes cambios
centiles que los datos de referencia craneofaciales. en los tejidos blandos; la nariz crece desproporcio-
El crecimiento craneofacial posnatal es un pro- nadamente y los labios se aplanan. Con el incre-
ceso complejo, pero coordinado y continuo. Las es- mento de la edad se debe esperar que cambie la
tructuras craneales son las más maduras y exhiben relación vertical entre los incisivos y los labios.
las menores tasas de crecimiento, seguidas por la Finalmente, la maloclusión debe ser considera-
base de cráneo y las estructuras maxilar y mandibu- da como un proceso de desarrollo multifactorial.
lar que son menos maduras, pero tienen un gran Mientras los genes han sido vinculados con el desa-
potencial de crecimiento. Saber acetca del creci- rrollo de las clases IIly talvezlas clases II división
miento relativo de una estructura es importante 2, las formas más prevalentes de maloclusión son
porque sirve, junto con la herencia, como un indi- ampliamente determinadas por el medio ambiente.
cador de su potencial de respuesta al tratamiento La teoría del equilibrio y el concepto de las com-
y a otras influencias del medio ambiente. Es esen- pensaciones dentoalveolares brindan las bases con-

L5
ceptuales para entender el vínculo tan cercano de caÍv?r el PFIV (peak beigbt uelocity). Las valoracio-
las posiciones dentales con los tejidos blandos cir- nes longitudinales proveen el mejor indicador de
cundantes. Thmbién hacen posible predecir el tipo cuándo se inicia la adolescencia y se alcanza el PFIV
de compensación que debería esperarse. Por ejem- Estudios longitudinales en niños norteamericanos
plo, explican porqué el desarrollo de la maloclusión y europeos muestran que las niñas están avanzadas
está asociado con varios hábitos, asumiendo que aproximadamente en dos años, cuando se compa-
ocurren con regularidad y son de larga duración. ran con los niños en la iniciación de la adolescencia
En efecto, cualquier cosa que altere la postura man- y en el PHV
dibular puede esperarse que produzca compensa- Con base en una muestra independiente de 26
ciones esqueléticas y dentoalveolares. niñas y 23 nifios, el promedio de edad del PFfV es
Esto explica porqué los indMduos con obstruc- de 11,9 y t4 aircs, respectivamente. Las niñas y los
ciones crónicas de las vías aéreas desarrollan ma- niños inician la adolescencia a los 9,4 años y a los
loclusiones esqueléticas y dentales, que son feno- L'1,,2años respectivamente. La velocidad máxima de
típicamente similares a las maloclusiones asociadas crecimiento en la adolescencia en el peso corporal
con musculaturas craneofaciales débiles; en ambos se presenta de tres a cinco años después del PHV
grupos de pacientes la postura de sus mandíbulas (figura 2-1).
es similar y sufren compensaciones esqueléticas y
dentoalveolares similares. Basados en estos hechos, Segundo principio
los siguientes principios intentan explicar y proveer La aceleración medio. de crecimiento ocurre entre
un entendimiento básico del crecimiento y el desa- los 6,5 y 8,5 años de edad y se aplica al crecimien-
rrollo y sus aplicaciones en la ptáctica clinica. to craneofacial y somático.
La aceleración media de crecimiento se refiere
Primer principio al incremento de la velocidad que se da en algunos,
El pico de uelocidad del crecimiento en la ado- pero no en todos los niños, varios años antes de la
lescencia se presenta alrededor de los doce y los iniciación de la aceleración del crecimiento en la
catorce años, en bombres y en mujeres respectiua- adolescencia. La aceleración media de crecimiento
mente. en estatura y peso se ha reportado que ocurre en-
Laaceleración del crecimiento en la adolescencia tre los 6,5 y 8,5 años de edady tiende a presentar-
empieza cuando la menguada tasa de crecimiento se con más frecuencia en hombres que en mujeres
enla niitez cambia y se acelera. Durante la primera 12,31. Con base en velocidades anuales en la acele-
parte de la aceleración la velocidad del crecimiento ración del crecimiento, se ha demostrado por una
en estatufa se incrementa constantemente hasta aI- variedad de dimensiones craneofaciales también

I Hombres
I Mujeres

Frecuencia

I t I I I
Lr.4 1L.7 12 73.4 1.3.7 T4 14.3

Edadcronológica(años)

Tomadoy modificado de: Malina et al [1]

Figura2-1.Distribución del PHVporedades,parahombres


de la frecuencia y mujeres.

16
entre los 6,5 y 8,5 años de edad, que se observan
simultáneamente o ligeramente más temprano en Hombres
niñas que en niños [4-7). Aplicando modelos ma-
temáticos a las muestras longitudinales, Buschang Mujeres
et al., reportaron que la aceleración media de cre-
cimiento mandibular para indMduos con clases I y
II molares ocurre alos 7,7 y 8,7 años de edad paru
niñas y niños, respectivamente.
),'
Tercer principio
El cubrimiento (ca.pping) de la falange media. del d

tercerdedo es el mejor indicador del pico de uelo- F


cidad de crecimiento.
Según Grave y Brown [9], el PFfV en hombres y
mujeres ocurre un poco después de la aparición del
sasamoideo ulnar y del gancho del ganchoso y lige-
ramente antes del cubrimiento de la tercera falange
media, de la primera falange proximal y del radio.
De acuerdo con los indicadores de maduración es-
quelética de Fishman [10], el cubrimiento delafa- 11
lange distal del tercer dedo se presenta menos de 10 11 12 13 14 1,5 t6 17 18
un año antes del PFIV; el cubrimiento de la falange
Edad
media del tercero ocurre justo después del PHV y
el cubrimiento de la filange media del quinto dedo 2: Falatge mesial 3 (MP3) ancho de la epífisis es igual al ancho
de la diáfisis.
en menos de la mitad del año después del PFIV (fi-
4: Aparición el sesamoideo ulnar.
gura 2-2). Con base en las vértebras cervicales, el 6: Cubrimiento (capping) de la MP3.
PFfV ocurre entre el desarrollo de la concavidad del 8: Fusión delafalange distal 3 (DP3).
borde inferior de la segundavértebra (C\MS II) y el 11: Fusión del radio.

desarrollo de la concavidad del borde inferior de la


terceravértebra (C\,"{S IID t111. Figura 2-2. Tiempo para los indicadoresde madura-
ci ón esquel éti ca(S Ml ) de Fi shmanrel aci on adoscon
l a vel oci daddel creci mi entodurantel a adol e scencia.
Cuarto principio
La teoría del equilibrio en la posición de los dien-
tes explica el cómo y el porqué ellos mantienen su
1. La presión en descanso de labios, carrillos y len-
posición espacia.l.
gua.
Brodie fue uno de los primeros investigadores 2. Las fiierza de erupción producida por la activi-
en identificar la relación entre los músculos y la po- dad metabólica en la membrana periodontal.
sición de los dientes [12], pero fueron Weinstein e/
al., quienes, experimentalmente, establecieron que Además, Proffit notó que las presiones extrínsecas,
los dientes mantienen un estado de equilibrio en- como las producidas por los hábitos y las F orto-
tre las foerzas (F) ejercidas por los tejidos blandos. dóncicas, pueden alterar este equilibrio, así sea ac-
Con base en una serie de experimentos, concluye- tuando algunas horas al día. Proffrt también identi-
r on que [ 1] l: ficó la postura de la cabeza y los desplazamientos
y rotaciones del crecimiento como factores secun-
1. Las F, producidas naturalmente o artificialmente darios, determinantes del equilibrio [141. A medida
por los aparatos de ortodoncia, ejercidas sobre que la mandíbula rota, los incisivos se mueven y el
las coronas de los dientes son suficientes para equilibrio dental se restablece. Bjórk y Skieller, por
movedos. ejemplo, han mostrado una asociación entre los
2. Cada diente puede tener más de un estado de cambios en la angulación de los incisivos inferiores
equilibrio estable. y la rotación mandibular verdadera [15].
3. Aún F pequeñas de tres a siete gramos, pueden
producir movimientos dentales, si se aplican du- Quinto principio
rante periodos largos. El apiñamiento en los incisiuos rnuestra. cambios
característicos con la edad, con un incremento
Proffit, quién revisó la teoría del equilibrio, notó dramático durante la adolescencia y otro nxenor,
que los principales factores inyolucrados fueron pero clínicamente signfficatiao, a mediados de los
[r4]: ueinte años de edad.

L7
Según los datos iniciales del Tbird National Mientras que los terceros molares se han rela-
Healtb and Nutrition Exq.minqtion Suruey (NHA- cionado siempre con el apiñamiento [21-23], los
NES IID [19],la irregularidad de los incisivos se in- estudios contemporáneos muestran poca o ningu-
crementa un promedio de 1,6 mm en los niños de 8 na relación. La conferencia del National Institute
a 11 años de edad a2,5 mm en adolescentesde 12 of Ilealtb (NIH) en 1979, ptodujo, como consenso
a 17 aios y a 2,8 mm en adultos de 18 a 50 años de general, que hay poca o ninguna justificación para
edad. Mientras que la incidencia es similar durante extraer los terceros molares solamente con el fin
la adolescencia, los ióvenes y adultos de taza negra de minimizar o evitar el apiñamiento futuro de los
muestran, significativamente, menos apiñamiento dientes anteriores inferiores. Ades ef al., al evaluar
que los blancos y los hispanos. registros posretención no encontraron diferencias
Con base en los datos completos NFIANES que en individuos con los terceros molares impactados,
incluyen a 9.044 indMduos, entre los L5 y los 50 en posición o función, en ausencias congénitas o
años de edad, se ha estimado que aproximadamen- que fueron extraídos por lo menos diez años antes
te el39,5o/" de los adultos en Estados Unidos tienen 124-261.
una irregularidad en los incisivos mandibulares ma- Sampson et al., no encontraron diferencias
yor o igual a 4 mm y el 16,8"/otienen irregularidad en cuanto al apiíamiento entre individuos cuyos
mayor o igual a7 nttrr l20l (frgu:a2-3). terceros molares habían hecho erupción parcial o
Los hombres adultos tienden a mostrar más api- completa, habían quedado impactados o estaban
ñamiento que las mujeres, los americanos descen- ausentes. Un estudio aleatorio controlado, con
dientes de mexicanos más que los caucásicos quie- una muestra de 77 pacientes y seguido durante 66
nes, a su vez, muestran rnis apiiamiento que los meses, mostró un milímetro de diferencia en cuan-
afroamericanos. Con base en los datos disponibles to al apiiamiento anterior entre pacientes con los
de estudios longitudinales en individuos no trata- terceros molares y otros en los que habían sido
dos, la taza de apiñamiento disminuye precipitada- removidos; los autores concluyen que la remoción
mente entre los 15 y los 50 años de edad, especial- de los terceros molares para prevenir o reducir el
mente durante la adolescenciatardíay los primeros apiñamiento anterior tardío no se justifica [271.
años de la segunda década de la vida. Con base en los datos del NHANES, los individuos
con los terceros molares que hicieron erupción
Sexto principio mostraron, de manera significativa, menos api-
Los terceros mola.res no juegan un papel deterrni- ñamiento que otros en los que no habían hecho
nante en el altiñamiento. erupción [20].

18

I6

r4
t2

10
Frecuencia (%)

6810
Irregularidad de los incisivos (mm)

Adaptadode:Buschangy Shulman[20].

Figura2-3.lrregularidadde losincisivos
mandibulares
en individuos
no tratados,
de los 15 a los50 añosde edaden losEstadosUnidosde América.

18
Séptimo principio Octavo principio
El apiña.miento está más cerca.na.lnente asociado Los molares e incisiuos mandibulares bacen erup-
con el crecimiento uertical que con el anteroposte- ción cerca de un milímetro por año durante la
rior de la rnandíbula. adolescencia.
El crecimiento vertical hace que mantener la Con base en superposiciones de estructuras
alineación de los incisivos inferiores después del mandibulares, hechas en individuos entre los 10 y
tratamiento activo de ortodoncia sea más difícil. 15 años de edad, McW.horter mostró que los inci-
Con base en el concepto de que los incisivos infe- sivos centrales y los primeros molares mandibula-
riores son llevados hacia el labio inferior cuando res erupcionan aproximadamente 4,3 y 2,5 mm en
la mandíbula crece en sentido anterior o rotahacia hombres y en mujeres, respectivamente [32] (figura
abajo, se ha sugerido que el crecimiento mandi- 2-5). También utilizando métodos de superposición
bular tardío es el factor que más contribuye con natural de estructuras. Watanabe et a.1..demostra-
el apiñamiento inferior en la fase de posretención ron que los molares y los incisivos mandibulares
[29]. Mientras que se ha demostrado la compen- hacen erupción a tasas que van de 0,4 a L,2 mm
sación de los incisivos por la rotación de la man- y O,3 a 0,9 mm por año, respectivamente [33]. Las
díbula hacia atrás [15], el apiñamiento debido al tasas de erupción fueron mayores en hombres que
desplazamiento por crecimiento anterior aún no en mujeres, alcanzando picos de velocidad a los 12
se ha comprobado. Sin embargo, se han mostrado y t4 aircs de edad para mujeres y hombres, respec-
cambios en el apiiamiento de los incisivos infe' tivamente.
riores que están relacionados con el crecimiento
vertical de la mandíbula. Noveno principio
Los individuos tratados y no tratados que tuvie- El perímetro del qrco se incrementa durante la
ron un gran desplazamiento inferior de la mandíbu- dentición mixta temprana. ? disrninuye durante la
la y una erupción mayor de los incisivos inferiores, transición q. dentición permanente.
mostraron un apiñamiento mayor que losque tuvie- Por datos computaúzados de una culva catena-
ron menos crecimiento vertical y menos erupción ria que se extiende desde mesial del primer molar
de los incisivos l3O-31,1,puesto que el crecimiento de un lado hasta mesial del otro [34], el perímetro
vertical de la mandíbula continúa más allá de la ado- del arco se incrementa durante la dentición mixta
lescencia se debe aconsejar a los pacientes utilizar temprana y disminuye durante y después de la tran-
los retenedores hasta mediados de la segunda déca- sición a dentición permanente. El perímetro del
da de la vida, aproximadamente (figura 2-4). maxilar se incrementa de 4 a 5 mm entre los seis

t
Apiñamiento
actual (mm)
tt'
I
I
/r
T I
I

tI
a
',)'7" I T

¡ t
,*4 I

Predicción del apiñamiento (mm)

Tomadoy modificadode: las ecuacionesde Driscoll- Gillilandet al [31].

Figura2-4.Predicción mandibular,
del apiñamiento con baseen losdesplazamientos
oorcrecimientomandibular
verticalv eruDCión
de losincisivos.

19
Molar inferior mm Incisivo inferior

I )

10
k*
Fem

t5

I
Mak
Crecimiente
Muleres
Dental
\

Crecimiente
Hombres
Dental
\
10 mm

Muieres lCrecimiento- 10
ti
l D e n ta l ii
it
it
s
Crecimiente
Hombres
Dental

5mm
Tomadoy modificado de: lVcWhorter [32]

Figura2-5.Desplazamientoporcrecimiento y erupcióndentalde incisivos


y molares entrelos 10 y 15 añosde edad.
inferiores,

y los once años de edad y disminuye de 3 a 4 mm 26 añosde edad, DeKockreportó que no había cam-
entre los 11y los 16 años. En contraste, el períme- bios significativos en las mujeres y sólo un ligero
tro del arco mandibular se incrementa inicialmente incremento en el ancho intermolar en hombres de
2,3 rmln, aproximadamente, y disminuye de 4 a 7 l,4y O,9 mm para el maxilar y la mandíbula, respec-
mm, siendo mayor la disminución en mujeres que tivamente [36].
en hombres (figura 2-6:1.
Décimo prirner principio
Décirno pdncipio La profundidad de los arcos rnaxilar y mand.ibu-
La distancia intermolar maxilar y mandibular se lar disminuye, sustAncia,lmente, durctnte Ia tra.n-
incrementa durante la niñez y la adolescencia. sición a la dentición perrnanente y luego un poco
Bishara et al, reportaron que los anchos in- más lentamente.
termolares se incrementan de 7 a 8 mm entre la La profundidad de los arcos maxilar y mandibu-
dentición decidua (cinco años) y la mixta tempra- lar es la distancia que se mide desde una línea tan-
na (ocho años) y, adicionalmente, 1 ó 2 mm en- gente a los incisivos hasta otra tangente a distal de
tre la dentición mixta tempfana y la permanente las coronas de los segundos molares deciduos o su
temprana (12,5 aios de edad). Entre los seis (con sucesofes pefmanentes; muestfa diferentes patfo-
el primer molar con erupción completa) y los 16 nes y cambios con el crecimiento. La profundidad
años de edad [35]. Moyers et al., encontraron un del arco maxilar se incrementa en t,4 y 0,! mm en
mayor incremento en el ancho intermolar en hom- hombres y en mujeres, respectivamente, durante la
bres que en mujeres de 4,7 aersus 3,7 mm en el erupción de los incisivos permanentes 1371.
maxilar y 2,6 uersus 1,5 mm en la mandíbula [341 La profundidad del arco mandibular muestra pe-
(figura 2-7'). queños cambios durante el mismo periodo de tiem-
Con base en una muestra de 26 individuos, se- po. Con la pérdida de los molares deciduos la pro-
guidos en un estudio longitudinal entre los 12 y los fundidad del arco maxilar disminuye de t,5 a L,9

20
Perímetro del arco maxilar Perímetro del arco mandibular

80
69

76
67
65
rft ---/=-=t==.=

é
E/+ 63
-7) 6r \
--_-
70 59
9 10111213 9 101112131415 L6

Edad cronológica Edad cronológica

Hombres + Mujeres

Adaptadode: Moyerset al. [34].

Figura 2-6. Cambios en el perímetrodel arco maxllary mandibular,entre los sels y 16 años de edad.

Ancho intermolar maxilar Ancho intermolar mandibular

48 46

46
tu
+4

++ 42
é
842 Á-ft;-"*^
ó----s'
E40
40 38
36
38 1011 t2131415 r6
9
910 1 1 1 2 B1 4 1 5 1.6
Edad cronológica
Edad cronológica

Hombres -+ Mujeres

Adaptadode: Moyerset al. [34]

maxilary mandibular,
Figura2-7.Cambiosen el anchointermolar entrelosseisy 16 añosde edad.

mm, mientras la profundidad del arco mandibular Hombre maxilar + Hombre mandibular +
disminuye de 1,8 a 1,7 nm e4 hombres y mujeres, Mujermaxilar + Muiermandibular .+
respectivam ente [37 l. DeKock reportó disminucio- )/
nes de 3 mm, aproximadamente, en la profundidad 35 .^.:;_F5"-
or

de arco entre los 12 y los 16 años de edad con dis-


minuciones cada vez menores durante este mismo 3r n

ó--*-o--
periodo de tiempo [36] (tigLna2-8). 29 - o- - ó:ü:::::::::::::_:::::::::::
Q
Con base en estudios de individuos con oclu- )'7

sión normal, Bishara et al., encontraron incremen- 11 13 15 77 rg 21 23 25 27


tos entre 1,1y 1,8 mm en la profundidad del arco Edad
entre las denticiones decidua y mixa temprana.
Adaptadode: Dekocket al. [36].
Entre la dentición mixta y la permanente tempra-
na la profundidad del arco maxilar se incrementó, Figura 2-8. Cambios en la profundidad de los arcos
ligeramente, entre O,5 a O,7 mm y la profundidad maxi l ary mandi bul ar(i nci si voa pri mer mol ar ) ,ent r e
mandibular disminuyó entre 2,6 a 3,3 mrn [351. l os 12 y 26 años de edad

2l
Décimo segundo principio Las diferencias en los grupos fueron aparentes
La distancia intercctnina maxilar y mandibular se a los siete años de edady persistieron hasta los 15.
incrementa con la erupción de los incisiuos permct- Bishara et aI., encontraron, haciendo una compara-
nentes; el ancbo intercanino maxilar se incremen- ción de corte transversal, que el ancho intermolar
ta. con la erupción de los caninos permanentes. maxilar y mandibular fue significantemente mayor
Durante la transición de los incisivos deciduos en hombres con oclusión normal que con maloclu-
a los permanentes la distancia intercanina se in- sión [35]. Comparando la forma de arco de indivi-
crementa, aproximadamente, 3 mm 1371.El ancho duos con maloclusiones de clasesI y II, Buschang et
intercanino maxilar muestra una segunda fase de al., encontraron que individuos con maloclusiones
incremento de aproximadamente 1,5 mm con la sa- de clases II división 2 terrían los arcos maxilares más
lida de los caninos permanentes; el ancho intercani- cortos y rnis amplios, mientras que los que tenían
no mandibular disminuye, ligeramente, después de clases II división 1 los tenían más largos y más es-
la apali.ción de los caninos permanentes [37]. trechos 1391.
Bishara et al, también reportaron un incremen-
to en las distancias intercaninas maxilar y mandi- Décimo cuarto principio
bular entre la dentición decidua y mixta temprana; Las estructuras craneofaciales siguen un gradiente
el ancho intercanino mandibular se incrementó o de maduración, siendo la altura de la bóueda cra-
disminuyó, ligeramente, entre la dentición mixta neana y la mandibulati la más y la menos madu-
temprana y la permanente temprana [351. El ancho ra, respectiuarnente.
intercanino en niños, seguidos por un estudio de Se han podido establecer diferencias en eI cre-
crecimiento y desarrollo de la Universidad de Michi- cimiento relativo de las estructuras craneofaciales.
gan, se incrementó en aproximadamente 3 mm entre Hellman fue uno de los primeros investigadores en
los seis y los nueve años de edad; la distancia maxilar cuantificar el crecimiento relativo, mostrando que,
se incrementó adicionalmente 2,5 mm con la erup- a cualquier edad, Ia dimensión transversal está más
ción de los caninos permanentes l34l (figury,2-9). madura que las profundidades craneanas, las que
a su vez, maduran antes que la altttra craneal [4O1.
Décimo tercer principio Hasta los años setenta el crecimiento del espleno-
Los a.rcos dentales de indiuiduos con maloclusio- craneoy delneurocráneo se categorizó con base en
nes clase II son más estrecbos que los arcos con la tipología de Scammon, mediante el seguimiento
oclusiones norntales. de los patrones somático y neural [41].
Lux et al., repofiaron que el ancho intemolar Baughan et al., introdujeron tres patrones de
en los arcos maxilar y mandibular era significativa- crecimiento diferentes, incluyendo uno craneal
mente menor en individuos con maloclusiones de para su base, un pafrón facial paru el maxilar y la
clase II dMsión 1 que en individuos con maloclu- mandíbula y un patrón general para los huesos lar-
siones de clase I y oclusiones normales; los arcos gos del cuerpo 1421.
de individuos con maloclusiones de clase II división Buschang et al., demostraron que el complejo
2 fueron más estrechos que los de individuos que craneofacial está integrado entre las curvas de cre-
tenían oclusión normal y muy cercanos a los indivi- cimiento general y neural de Scammon [43] (figu-
duos que tenían maloclusiones de clase I [38]. ra 2-LO). De acuerdo con esto, el crecimiento y Ia

Ancho intercanino maxilar Ancho intercanino mandibular


30
35
28
))
26
3r
E2 e .*ffi é
=24
)-7 á' )) á
)< 20
8910117213741516 8 9 10 11 1.2 13 L4 1.5 16
Edad cronológica Edad cronológica

Hombre * Mujer # Hombre + Muier -a_

Adaptado
de;Moyers
et al [34].

Figura2-9.Cambiosen la drstancia
intercanina y mandrbular,
maxilar entrelosseisy 16 añosde edad

)?
to entre la altwra facial anterior total y la altura facial
100 posterior total en hombres y mujeres permanece si-
milar durante la niíez y la adolescencia.
Durante Ia niíez los hombres presentan un ta-
maño mandibular total (Co-Pg) mayor que las mu-
90 90 jeres, debido, principalmente, al mayor crecimiento
de la longitud del cuerpo (Go-Pg). Las diferencias de
Y sexo en laaltwradelarama (Co-Go) son pequeñas y
E no llegan a ser estadísticamente significativas hasta
L
la adolescencia 144,451 (figura 2-L1). Las diferencias
,g 80 80
entre los sexos en el eje Y (N-S-Gn), el ángulo go-
F
níaco (Co-Go-Me) y el ángulo del plano mandibular
- (S-N/Go-Me) no son estadísticamente significativas
durante la niiez y la adolescencia.
70
Décimo sexto principio
Los pacientes biperdiuergentes (mordida abierta
esquelética) tienen los ángulos -mandibular, go-
níaco y del plano palatino- aumenta.dos, con unas
alturas dentoalueolares excesiuas.
5. 5 7 .5 9 .5 1 1 .5 1 3 .5 15.5 Al ser comparados individuos de clase I con
Edad cronológica oclusión normal, los hiperdivergentes muestran
una disminución de la altura facial posterior con
Tomadoy modificadode: Buschanget al, [43]. respecto a la anteior, la altwra facial superior me-
nor que la inferior y un incremento en los ángulos
F igur a 2- 10. l a m a ñ o s re l a ti v o s(p o rc e n ta j ede adul - mandibular, goníaco y del plano palatino [46-50].
tos) de siete medidas craneofacialesy estatura,para
Coniuntamente con el incremento en la altwrafacial
niñasde 4, 5 a 1 5 ,5a ñ o s d e e d a d .
anterior inferior y del ángulo del plano mandibu-
lar, los individuos con tendencias hiperdivergentes
mostraron tenef una altura dentoalveolar excesiva
maduración relativos, del cráneo, no se pueden
en el maxilar y la mandíbula [22,48,49,5L,52]. Ni-
cltegorizar claramente, estos siguen un gradiente
ños entre los 6 y 12 afios de edad con ángulos del
de desarrollo que se mueve desde medidas más
plano mandibular aumentados, tuvieron significan-
maduras tales como la altura de la cabeza, (B-Bq
Ia más madura) hasta la base cráneo anterior (S- temente una menor rotación haciaadelante que los
niños con ángulos mandibulares disminuidos MP-
N), base cranéana posterior (S-B), longitud maxilar
(ENA-ENP), altura facial superior (|{-ENA), longitud sN[53].
del cuerpo mandibular (Go-Gn) y altura de la rama
(Ar-Go). Después de 9 o 10 años de edad, la altu-
n de la rama es menos madura que la estatura del Co-Pg
indMduo, faltando, aproximadamente, el 10% del Go-Pg
crecimiento restante hasta los 15.5 años de edad en Co-Go
hombres.
10

Décirno quinto principio E8


é
Las diferencias entre género en las alturas fctciales i1 6

y el tamaño mandibular son lnenores durante la O4 ,'


é
niñez y se incrementa.n, sustancialmente, cuando 9. 't
,!J
.1--...--*'
los bombres inician Ia adolescencia. ,..:.----*----i-=_-^.... ..^-
Á0 .......
Y-.
Las alturas faciales de los hombres son entre el a
5 6 7 8 9rOrr],2 31415161618
Iy LO% más grandes que en las mujeres durante
la rriñLezy la adolescencia. Las diferencias entre gé- Edad (años)
neros durantelanifiez son pequeñas, pero estadís-
ticamente significativas. Las diferencias disminuyen
Tomadoy modificado de: Bhatia y Leighton [44]
ligeramente cuando las mujeres inician la fase de
crecimiento durante la adolescencia y luego se in-
crementan, sustancialmente, cuando los hombres Figura2-11. Diferencias
del tamaño
inician la adolescencia. La proporción de crecimien- mandibular entresexos.

23
Décimo séptirno principio años de edad [56]. Este hallazgo fue con-firmado
En promedio, el ángulo ANB disminuye sólo entre por Korn y Baumrind, quienes reportaron un incre-
0,2 y l,Jo de los 10 a los 15 años de edad. mento de O,4J mm/año en la región más posterior
Un estudio longitudinal de la Universidad de Mi- del maxilar en niños de 8,5 a t5,5 años de edad
chigan con 83 individuos no tratados, mostró entre [57]. Korn y Baumrind, fueron los primeros en do-
1-y 1,,1ode disminución del ángulo ANB y entre 3 cumentar laampliación transversal de la mandíbula
y 3,I" del N-A-Pg de los 10 a los 15 años de edad con base en marcas metálicas en el hueso (implan-
[451. Un estudio del Centro para la Investigación tes metálicos) y encontraron que la mandíbula se
del Crecimiento Infantil en Filadelfia, hecho en ado- amplió O,28 mm/aio; aproimadamente el 65"/" de
lescentes, demostró una disminución de t,3 y 3,6" laarnpliación maxilar [57] .
para los ángulos ANB y N-A-Pg, respectivamente, en Gandini y Buschang, evaluaron 25 individuos
hombres; esas dos medidas disminuyeron menos entre los 12 y los 18 años de edad con marcadores
de un grado en mujeres entre los 1O y 15 años de óseos en ambos maxilares encontrando incremen-
edad [54]. tos significativos en el ancho de Ia parte posterior
Un estudio de crecimiento hecho por el Colegio del maxilar de O,27 mm/aío y mandibular de O,l9
de los Reyes, Escuela de Medicina y Odontología, mm/aio. Por cada milímetro que se incremento el
en Londres, mostró una disminución entre 0,5 y ancho maxilar, el ancho mandibular se incrementó
0,8o del ángulo ANB y entre 2 y 3" de disminución 0,7 mm [58] (figura 2-13).
del ángulo N-A-Pg de los 10 a los 15 años de edad Iseri y Solow, hicieron un seguimiento anual de
[44] (figura 2'12). niños entre los 8 y los 16 años de edad y también
Hombres y mujeres francocanadienses, sin tra- reportaron un incremento bilateral en el ancho del
tamiento, entre los 10 y los L5 años de edad, mos- cuerpo mandibular en todos los indiüduos. La tasa
traron O,6 y O,2ode disminución en el ángulo ANB, anual disminuyó desde O,34 mm/aíro en las edades
respectivamente [55]. Mientras que los cambios en más tempranas a 0,11 mrn/afto a los 15 años, de-
promedio son pequeños, la variación individual es mostrando un efecto claro con la edad 1591.
grande, con aproimadamente el 30 y eL 26"/" de
los clasificados a los 10 años como prognáticos y Décirno noveno principio
retrognáticos, respectivamente; cambiando a or- Lafosa glenoidea se lnueue en dirección inferior y
tognáticos a los 15 años de edad. En forma similaq posterior durante el crecimiento posnatal.
aproximadamente el 3O"/"de quienes fueron ortog- El desplazamiento inferior y posterior de la fosa
náticos a los 10 años llegaron a ser prognáticos o glenoidea se podría esperar que ocurra junto con el
retrognáticos a los L5 1551. crecimiento de la sincondrosis esfeno-occipital, la
elongación de la base craneana posterior y el des-
Décirno octavo principio plazamierrto del hueso temporal [60]. Usando el
La rnandíbula muestra una rotctción transuersal punto articular (Ar), como una medida parala par-
similar, aunque meno4 al maxilar te inferior de la fosa glenoidea, Bjórk reportó que
Bjórk y Skielleq mostraron, .con implantes pos- la distancia entre la fosa y nasion se incrementa en
teriores maxilares, un incremento en el ancho de 7,5 mm entre los L2 y 2O años de edad [61]. Con
aproximadamente O,4 mm/aio entre los 4 y los 2O base en superposiciones hechas sobre referencias
en estructuras estables de la base de cráneo de 118
niños y 155 adolescentes, Buschang y Santos-Pin-
Hombres (Bhatia&Irighton) + Mujeres @hatiayleighton) * to demostraron que la fosa glenoidea se desplazo
Hombres (Riolo et aI.) + Mujeres (Riolo et al.) +ie
entre O,45 y O,53 mfi:'/añ'o posteriormente y entre
Hombres (Saksena et al.) + Mujeres Saksena et al.) +
O,25 y O,45 mm/aio hacia abajo, con mayores des-
5.5 plazamientos durante la adolescencia que durante
L
>+. la niñrez162l (figura 2-74).

€4 -:-E=\
i : J.) a -...._
Vigésirno principio
O3 -------{ El crecinciento superior del condileon (Co) es de
)a
ocbo a nueae ueces rnayor bacia arriba que bacia
2
10 11 12 13 I4 L5 atrás; por cada 3 mm que el cóndilo crece supe-
riormente, el gonion se rnueue bacia amiba I mm.
Edad (años)
El cóndilo crece hacia anlbay ligeramente hacia
Tomadoy modificadode: Bhatia& Leighton[44],Rioloet al atrás, mientras que el gonion se traslada en senti-
[45]y Saksena
et al. [54] do superior y posterior aproximadamente la misma
cantidad. Bjórk y Skielle¡ mostraron, en estudios
Figura 2-12. Cambioscon la edad del con implantes, que dependiendo del tipo de rota-
ánguloAN B e n tre l o s 1 0 y 1 5 a ñ o s . ción, el cóndilo puede crecer en ambas direccio-

24
Adaptado de. Gandiniy Buschang [58].

Figura2-'!3"Expansión
de losmarcadores
óseosen lasestructuras
básalesmaxilar
V mandibular
en adolescentes.

nes, anteriormente (en rotadores hacia adelante)


y posteriormente (en rotadores hacia atrás) 115).
Utilizando implantes metálicos en superposiciones,
Baumrind et al., demostraron que el cóndilo crece
predominantemente en sentido superior (2,5 ro;rni'/
año) y ligeramente en dirección posterior (0,3 mm/
año) entre los 8,5 y 15,5 años de edad; el gonion se
traslada hacia arriba (O,9 mmlairo) y hacia atrás (I
mm/año) en proporciones similares [63].
Usando referencias mandibulares estables para
hacer superposiciones, Buschang y Santos-Pinto,
reportaron un crecimiento condilar enfte 2,3 y
2,7 lnm/año en dirección superior y enfre O,2 y
0,3 mm/año en dirección posterior en muestras
grandes de niños entre los 6 y 1,5 años de edad
1 6 2 l.
Los picos de velocidad de crecimiento condilar
en la adolescenciason aproimadamente de 3,1 mm/
año a los L1,3 añ,osy de 2,3 m¡r./afio alos 12,2 airos
para hombres y mujeres, respectivamente [641.

Vigésineo pr:irner principio


Adaptado y Sanros-Pinto
de.Buschang Mientras el mentón óseo crece poco o nada duran-
162l
te la niñez y la a.clolescencict, los aspectos poste-
rior y superior de Ia sínfisis mandibular presentc¿n
Figuna2-14. Desplazamientode la fosaglenoidea
en cambios de crecimiento sustanciales.
hombresde losochoa los l5 añosde edady en mu- Con base en marcadores metálicos insertados en
icres r-leInq 6 : I ne 13 2¡ gg de edad. la mandíbula, cada uno de los 21 casos evaluados

25
por Bjórk y Skieller, demostraron estabilidad (fal- 16 años de edad en niñas y hasta los 18 en niños
ta de remodelación) de la región cortical locallzada [70] . Kokich, en un examen histológico y rudiográ-
ligeramente por encima de pogonion. La remodela- fico completo de 61 individuos, no encontró evi-
ción restante de la superficie externa de la mandí- dencia de unión ósea de la sutura fuonto-zigomática
bula, tanto el tipo, como la cantidad, dependen del antes de los 70 años de edad [71].
patrón rotacional individual. En promedio, hay un
crecimiento óseo vertical asociado con la erupción Vigésimo tercer principio
de los dientes [15]. Los la.bios incrementctn Ia longitud y grosor duran-
La región cortical anterioq limitada superior- te la niñez y la adolescencia.
mente por el punto infradental e inferiormente Subtelny, encontró que las longitudes del labio
por el ápice del incisivo presenta reabsorción (aun- superior e inferior se incrementan, en forma similar
que altamente variable) y se deposita hueso col'tical y progresiva, aproimadamente 4,5 mm entre los 6
por debajo de pogonion y de la sínfisis [63]. Los y los 15 años de edad. Después de la erupción com-
mismos patrones de remodelación son evidentes pleta de los incisivos centrales la relación verfical
cuando la mandíbula se superpone sobre estructu- del incisivo maxilar y el labio superior se mantiene
ras de referencia estables [65]. La superficie lingual hasta los L8 años de edad [721. Wg y Cohen, mi-
de la sínfisis mandibular presenta mayores cantida- dieron las alturas del labio superior e inferior con
relación a los planos palatino y mandibulat respec-
des de depósito óseo que las superficies anterior e
inferior. tivamente, y reportaron un incremento de, aproxi-
madamente, 5 mm paru el labio superior y 9 mm
paru el inferior entre los 5 y los 15 años de edad
Vigésimo segundo principio
La mayoría de lcts sutura.s no muestran signos de [73]. Subtelny, también reportó que el incremen-
to en el grosor de los labios fue considerablemente
cierre basta los 30 ó 40 años de edad.
mayor en la región del bermellón que en las zonas
La edad en la cual las suturas se comienzan a
que cubren estructuras esqueléticas [72].
cerrar depende, en gran parte, de cómo se mida el
Durante los primeros L8 años de vida, el grosor
cierre. Todd y Lyon, fueron de los primeros en eva-
del labio superior al punto A se incrementa en 7 ,8 y
luar el cierre de las suturas. Con base en una serie
6,5 mm en hombres y en mujeres, respectivamente.
de 5L4 cráneos de hombres, describieron el cierre
Nanda et al., mostraron que la longitud del labio
de las suturas de acuerdo con un examen completo
superior (Sn-Stoupper) se incrementó 2,7 mm en
de las superficies ectocfaneanas y endocraneanas.
hombres y 1,1 mm en mujeres entre los 7 y los 18
Ellos encontraron que el cierre comienza aproi-
años de edad;la longitud del labio inferior (ILS-Sto-
madamente al mismo tiempo en ambas superficies,
lower) se incrementó 4,3 mm en hombres y 1,5 mm
pero que el cierre del ectocráneo avanza más lenta-
en mujeres.
mente [66].
El examen total de cráneos de 538 hombres y Vigésimo cuarto principio
1.27 mujeres mostró que las suturas craneanas pue- El perfil facial de tejido blando, incluyendo Ia na-
den empezar a cefrarse tan temprano como aI final riz, disminuye d.urctnte Ia niñez y la adolescencia y
de la adolescencia o tan tarde como después de los éste, excluyend.o la. na.riz, sufre pocos cambios.
60 años de edad [67]. Durante la tercera o cuarta Los cambios que ocurren dependen de silanariz
década de la vida, se puede esperar que la mayoria es tenida en cuenta cuando se mide el perfil de te-
de las personas muestren signos de cierre de las su- jidos blandos. Subtelny, reportó que la convexidad
turas sagital, lamboidea y coronal. Behrents y Harris facialtotal (N'-Pr-Pog') disminuyó de 5 a 6" entre los
identificaron las suturas maxilares y premaxilares 6 ylos 15 años de edad; el perfil de tejidos blandos
remanentes en 50 cráneos de indMduos antes de (N'-Sn-Pog') no cambió o mostró muy pocos cam-
llegar ala edad adultay encontraron que el aspecto bios durante el mismo periodo de tiempo [72].
facial de las suturas estaba ya cerrado en niños en- Bishara et al., encontraron que el ángulo de
tre los tres y cinco años de edad [68]. la conveddad facial total (Gl'-Pr-Pog') disminuyó
Por medio de secciones pigmentadas de veinti- aproximadamente 70 entre los 6 y 15 años de edad.
cuatro individuos, Persson y Thilander repoltaron En contraste, el ángulo de la convexidad facial, sin
que el cierre de las suturas transversal y media pa- incluir la naú2, se mantiene o sufre un ligero incre-
latina puede errrpezlr tan temprano como a los 15 mento [75].
años de edad, pero se puede demorar en algunos
individuos hasta los 20 o los primeros años de la Vigésimo quinto principio
tercera década de la vida. Con base en evaluaciones Los cambios en laforma de la nariz durante la ni-
histológicas y micro-radiográficas de la actividad del ñez y la. a.dolescenciq. son susta.ncia.les y dependen
crecimiento, Melsen reportó que la sutura media de la dirección del crecimiento de la cara media
palatina mostró evidencia de crecimiento hasta los (tercio mediofacial).

26
Se reportó inicialmente que la "jiba o joroba" El ángulo del plano mandibular (S-N/Go-Gn)
sobre el dorso nasal se desarrollaba durante la ace- disminuye en los hombres y se incrementa en las
leración del crecimiento en la adolescencia [72] y mujeres. Behrents también reportó que había un
que los cambios en la forma se debieron ala eleva- mayor desarrollo vertical posterior de la mandíbula
ción del hueso nasal [761. Enla ¡iflez se presentan en hombres adultos que en mujeres. Bishara et al.,
tipos similares de cambios entre los 6 a los 10 años encontraron que hombres adultos entre los 25 y 46
y los 10 a14ai o s [7 7 1 . años de edad mostraron un incremento mayor del
La porción superior del dorso rota hacia arriba SNB y el S-N-Pg que las mujeres, las que mostraron
y adelante, en contra de las manecillas del reloj, un incremento significativo del ángulo N-S-Gn [80] .
aproimadamente 10o entre los 6 y los '14 años de Forsberg et al., reportaron un incremento de 0,3
edad. La parte inferior del dorso inferior presenta mm del ángulo del plano mandibular en hombres y
ambas rotaciones, una hacia abajo y atrás, a favor mujeres entre los 25 y 45 años de edad [81].
de las manecillas del reloj, y otrahacia arribay ade-
lante, en contra de las manecillas del reloj, depen- Vigésimo octavo principio
diendo de los cambios relativos del crecimiento ho- iCrece Ia nariz bacia adelctnte y bacia a.bajo d.u-
rlzontal y vertical del tercio medio facial [771. Los rante toda la uida adulta?
cambios en el dorso nasal están más estrechamente La naru se desarrolla sustancialmente durante
relacionados con los cambios angulares de la por- toda la vida adulta con la punta creciendo hacia
ción inferior que de la superior. adelante y abajo un promedio de 3 mm después de
los 17 años de edad [78]. Algunos adultos, en forma
Vigésimo sexto principio individual, pueden presentar un crecimiento ma-
EI crecirníento del esqueleto craneofacial continúr¡. yor y los hombres muestran un crecimiento nasal
durante la tercera década y probablemente basta mayor que las mujeres. Formby et al., encontraron
los 40 y 50 años de edad. un incremento en altura nasal de 0.6 mm. un incre-
Behrents, reportó cambios de tamaño y forma mento en la longitud de 1,7 mm y un incremento
en la profundidad de 2,3 mm entre los 18y 42 afios
en individuos adultos y con base en 70 medidas li-
de edad [82]. Entre los 2ty 26 años, Sarnasy Solow,
neales y 69 anglJares, mostró cambios con el creci-
demostraron un incremento de 0.8 a 1 mm en la
miento después de los 17 aíos de edad paru el)L"/"
longitud nasal [83].
de las medidas lineales y p^ra elTO% de las angula-
res evaluadas; el 80% de las lineales y el 4L% delas
Vigésimo noveno principio
angulares mostraron cambios con el crecimiento en
La longitud del labio superior se incrementa du-
individuos de 30 años, mientras que el 61"/" delasli-
ranle Ia edad adulta.
neales y el28% de las angulares mostraron cambios
La longitud del labio superior se incrementa en-
después de los 35 años [78].
tre 0,5 y 0,6 mm entre los 2Ly 26años de edad [83].
Lewis y Roche, evaluaron 20 indMduos adultos
En este mismo periodo, la exhibición de los incisivos
con un seguimiento entre los 17 y 5O años de edad,
superiores (Sto-OPmax) disminuye 0,3 mm en hom-
mostrando que las longitudes de la base de cráneo
bres y permanece estable en mujeres. Formby et al.,
(S-N, Ba-N, y Ba-S) y las longitudes mandibulares
encontraron que la longitud del labio superior se
(Ar-Go, Go-Gn, Ar-Gn), obtuvieron su longitud
incrementa entre 0,8 y 1,7 mm y que la exhibición
mÁxima entre los 29 y 39 años de edad, disminu-
de incisivos superiores (distancia del labio al borde
yendo ligeramente después [79].
incisal) disminuyó 1 mm entre los 18 y 42 airos de
edad [82]. Behrents demostró que la longitud del
Vigésimo séptimo principio labio superior (ENA-Sto) se incrementa de rrranera
La mandíbula rotq en contrg. de las manecillas significativa en hombres (2,8 mm) y mujeres (2,2
del reloj en bombres adultos y a faaor en mujeres mm), mientras que la distancia del incisivo maxilar
adultas, exbibiendo una diferencia de género en la al plano palatino se incrementa sólo entre 0,6 y 0,8
posición mandibular. mm después de los 17 aios de edad, soportando
Behrents, reportó que la mandíbula rota en con- una disminución en la cantidad de incisivos que se
tra de las manecillas del reloj en hombres adultos muestra [84] (figura 2-1.5).
y a favor en las mujeres adultas, con alteraciones
compensatorias asociadas con la dentición. Él tam- Trigésimo principio
bién encontró que el eje Y (N-S-Gn) disminuía li- El peffil de los tejidos blandos de los adultos se
geramente en los hombres y no cambiaba en las aplana con la. edad, ya que los labios también
mujeres. Con relación a la Iínea vertical tangente se uotn aplanando y llegan a. ser lTtenos pronun-
a la fisura pterigo-maxilar, la mandíbula se vahacia ciados.
adelante en los hombres adultos, 2 mm, aproíma- Sarnas y Solow encontrafon que el ángulo del
damente, pero no en mujeres [78]. perfil de los tejidos blandos (incluyendo la natiz)

)1
! Sonriendo I Descansando

E3

-1
30-39 40-49 50-59

Gruposde edad

Adaptadode: Donget al [84].

de losincisivos
Figura2-15.Exhibición maxilares y en posic¡ón
sonriendo de descanso.

se incrementaba O,3o en hombres y disminuía 0,4" 4. Nanda RS. The rates of growth of several fa-
en mujeres entre los 2l y 26 años de edad [83]. cial components measured from serial cepha-
Behrents, suministra datos del mejor estudio lon- lometric roentgenograms. Am J Orthod 1955;
gitudinal que demuestra el aplanamiento del per- 4r:658-673.
fillabial durante lavida adulta [78]. Los labios se ). BambhaJK. Longitudinal cephalometric roent-
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llege of Dentistry Dallas, Texas, 2006. thod 1976;69:4rr-43o.
56. Biórk A, Skieller V Growth of the maxilla in 1., Subtelny JD. A longitudinal study of soft tis-
three dimensions as revealed radiographica- sue facial structures and their profile characte-
lly by the implant method. Bt J Oft}rod 1977; ristics. AmJ Orthod t959; 45:481.-507.
4:53-64. /J. Vig PS, Cohen Am. Vertical growth of the lips
)/. Korn EL, Baumrind S. Transverse Develop- - a serial cephalometric study. Am J Orthod
ment of the human jaws between the ages of L979;75:4O5-4L5.
8.5 and I5.5 years, studied longitudinally with 74. Nanda RS, Meng H, KapiTa S, Goorhuis J.
the use of implants. J Dent Res 1990; 69:1298- Growth changes in the soft-tissue profile. An-
L306. gle Orthod t99t; 6O:L77 -189.

30
/). Bishara SE, Hession TJ, Peterson LC. Longitu- 80. Bishara SE, Theder JE, Jakobsen JR. Facial
dinal soft-tissue profile changes: a studyof three and dental changes in adulthood. AmJ Orthod
analyses.AmJ Orthod 1985; 88: 209-223. Dentofacial Orthop L994; 1-O6:L75-L86.
76. Posen JM. A longitudinal study of the growth 81.. Forsberg CM, Eliasson S, Westergren H. Face
of the noses. AmJ Orthod 1969;53:746-755. height and tooth eruption in adults - a 20 year
77. Buschang PH, De LaCtuz R, Viazis AD, De- follow-up investigation. Eur J Orthod 1991;
miriian A. Longitudinal shape changes of the L3:249-254.
nasal dorsum. Am J Orthod Dentofac Orthop 42. Formby WA, Nanda RS, Currier GF. Longi-
L993; 1O3:539-543. tudinal changes in the adult facial profile. Am
78. Behrents RG. Growth in the aging craniofa- J Orthod Dentofac Orthop t994; LO5:464-
cial skeleton. Monograph #17, Craniofacial 476.
Growth Series, Center for Human Growth and 83. Sarnás Kf, Solow B. Eady adult changes in the
Development, University of Michigan, Ann Ar- skeletal and soft-tissue profile. Eur J Orthod
bor, 1985. 198O;2:l -12.
79. Lewis AB, Roche AF. Late growth changes in 44. DongJIl Jin TH, Chow lilf/, Oh SC. The es-
the craniofacial skeleton. Angle Orthod 1988; thetics of the smile: a review of some recent
58:L27-1.35. studies. IntJ Prosthodont t999. 12:9-19.

37.
Cnpíruro3

Variabilidaden el crec¡mientoy
desarrollo craneofacial
Dr. Iuán DaríoJiménez Vctrgas

El complejo craneofacial es un sistema que apoya e En general, se puede observar, con respecto a la
interactúa con varias funciones vitales. Este alberga AIAI, que los promedios mayores son para el estu-
el obfeto directo de nuestra intervención en el área dio de Michigan, t^nto para los hombres como para
de la oftodoncia, los dientes y los maxilares. Las va- las mujeres. Entre el estudio de Michigan y el de
riaciones en el crecimiento craneofacial son muy im- Bolton, ambos en la población norteamericana,hay
portantes en la ortodoncia, puesto que pueden ser la diferencias marcadas en el tamaño absoluto -hasta
fuente de generación de maloclusiones severas. 9 mm- (tabl as3-Iy3-2).
A lo largo del tiempo se ha tratado de anahzar Los individuos colombianos tienden a compor-
y explicar el crecimiento y desaffollo craneofacial tarse más cerca al estándat de Michigan, pero las
normal de los individuos, por medio de estudios variaciones individuales son bastante notorias. Poco
descriptivos, dentro de los cuales los longitudinales se ha comentado en la literatura (basada en la evi-
son más apropiados. Hay varios estudios longitudi- dencia) de crecimiento craneofacial sobre la rele-
nales clásicos en el mundo. vancia de estas diferencias entre sujetos normales.
Para evaluar la magnitud de esta variación es bueno
1. El estudio de Michigan, hecho entre 1953 y recordar que encre una clase I y una II puede ha-
1974, en Ann Arbor, por la Universidad de Mi- ber hasta 5 mm de diferencia. Unavaiación normal
chigan, EUA. Éste tuvo algunas dificultades en el de 9 mm genera dudas sobre los parámetros tan
seguimiento de la muestra, ya que de un total de rígidos que se utilizan para clasificar un individuo
83 indiüduos (47 hombres y 36 mujeres), a los como norrnal o con maloclusión.
16 años, sólo 32 permanecían en el estudio. Aunque el uso de estándares de desarrollo cra-
2. El de Bolton, de la Universidad de Case Western neofacial es útil para dar una visión global del creci-
Reserve,en Clevelan, Ohio. Fue hecho en32 in-
miento, muchos indMduos no se comportan como
dividuos (16 hombres y 16 mujeres).
lo indica el estándar. Éstos "sobresimplifican" la di-
3. El de Budington hecho en Ontario, Canadá. nár¡rica del crecimiento.
4. El de IOSíA, hecho por Bishara con un seguimien-
Paraver las variaciones de cada individuo duran-
to desde los cuatro años hasta la edad adulta.
te su crecimiento desde los 7 hasta los 13 años, se
pueden a¡alizar los incrementos específicos de la
Estudio longitudinal colombiano
AFAI por edad en la medida Espina Nasal - Mentón
En Medellín, Colombia, la Universidad CES y el gru-
en tres sujetos del estudio de la Universidad CES
po de investigación LPH (labio paladar hendido) es-
(figura 3-1).
tán haciendo, desde hace 16 años, un estudio longi-
Mientras la niia número 2 mostró una dimen-
tudinal de crecimiento craneofacial en cincuenta
y cuq.tro indiuiduos de la población de Damasco, sión de 58 mm a los siete años, la número 1 mos-
Antioquia, con la idea de generar promedios de tró 67 mm. Una diferencia de 9 mm entre indivi-
crecimiento y desarrollo por sexo y edad, aplicables duos de una misma población y a la misma edad.
a la poblaciÓn. La muestra total comprende 424 n- Además, se observa cómo el crecimiento se expre-
diografías cefálicas tomadas entre 1992 y 2OO7, en sa de manera diferente en cada individuo, pues la
individuos que no han tenido tratamiento de orto- niña número 1 no aumentó su crecimiento entre
doncia. los 9 y los 13 años, a diferencia de la número 2
Para dar una idea de las diferencias presentes que entre los 7 y los 13 años tuvo un crecimiento
en dos poblaciones normales, se puede comparar progresivo. La niia número 3 permaneció igual
el cambio con la edad de la altura facial anterior entre los siete y los nueve años. Sólo a partir de
inferior (AFAI) (tablas 3-t a 3-3). Los valores fueron esta edad se dio un aumento de esta dimensión.
ajustados a Ia magnlficación del estudio cefalomé- Se ha dicho, tradicionalmente, que los picos de
trico colombiano (1,O,9%),el de Michigan (I2,7%) y crecimiento facial se logran durante la adolescen-
el de Bolton (entre 5,4%y 5,8%). cia, pero, como se puede observar en la figura 3-l

32
T abla 3- 1. E s tu d i od e Mi c h i q a n .

6 6 2 .7 3.9 )/ 60.6 3.8 )<


7 ( ]4.) 4.3 44 62.6 1.O 37
8 o ).) 4.3 44 62.5 1.r 36
9 6 6 .2 4 .2 46 63.r 4.5 37
10 67.8 4 .8 +) 64.3 4.8 35
11 69.2 4 .7 13 64.7 4.> 30
r6 ¿ ' 7 8 .2 6 .7 )1 68.2 5.r 9

Tabla3-2.Estudio
de Bolton.

6 54.3 2.9 r6 50.0 3.1 16


7 55.9 3.0 16 57.5 3.7 r6
8 58.0 3.8 r6 \)1 1) r6
9 5 8 .1 3.8 16 53.2 2.9 r6
10 59.O rc 55.O 3.9 r6
l1 60.7 3.1. rc 55.9 4.2 rc
76 'k 69.7 4 .2 16 6r.1 3.8 r6

Tabla3-3.EstudioUniversidad
CES.Colombia.

EI
6 6 3 .8 4.3 7 63.2 2.7
7 63.0 >.4 4 61.1 >. 4 3
8 66.O 4 .6 7 64.9 2.6 5
9 65.6 5.9 4 63.L 7.O J

10 o /.) 5) 7 66.O )1 5
11 o ).ó 5.6 4 65.0 6.0 :)

75
73
)
71.
,--""'
69
a
67 I --¡-
-
H

é 65
63 4
. 3n
6t
59 ----
,'--
)/
55
11 I3
Edad

Figura3-1. variaciones
individuales,
con la edad,en la AFAIy espinanasal-mentón
en cinconiñasdel estudiode la Universidad
CES Colombia.

JJ
48
46
44
a
-r
42
40
38
q 36
É 34
!
4)

30
28
26
24
22 rtl lll¡llll I I

6 7 8 9 1 0 L L 1 .2 1 3 1 4 L 5 16 17 18 19
Edad en años

--+-- Promedio Michigan A Mujer 1


---f- Mujer2 o Mujer 3
---?s- Mujer 4 Mujer 5

growth.
de:AnAtlasof craniofacial
Modificado Riolo,
Moyers, andHunter,
McNamara I974.

Figura3-2.Comparación entreel pro-


de loscambiosen el ángulode la basedel cráneoy el planomandibular
mediode lasmujeres y cincomujeres,
de Michigan
del estudiolongitudinal y
sintratamientonormalesdel estudio
CES- Colombia.
de la Universidad

48
46
44

42
40
38
a 36
34
L
ra 1)

30
28
26
24
22
1 0 1 1 12 1,3 14 75 t6 17 18 19 20 21 22

Edad en años
--i-- Promedio Michigan ---+- Mujer 6 r Mujer 7

qrowth.Riolo,Moyers,McNamara
de:An Atlasof craniofacial
Modificado and Hunter,1974

Figura3-3.Comparación entreel pro-


de loscambiosen el ángulode la basedel cráneoy el planomandibular
de
mediode lasmujeresdel estudiolongitudinal Michigany dos mujeres,sin y
tratamiento normales,
del estudio
CES
de la Universidad - Colombia.

34
4>

43
4t

39
-|r
r- J/

35

))

3I
29
10 12 t4 16 18 20

Edad en años

---a--- Promedio Michigan ___l_ Hombre 1 Hombre 2


iÉ Hombre 3 + Hombre 4 ñ Hombre 5

Modificado
de:AnAtlasof craniofacial
growth.
Riolo,
Moyers,
McNamara
andHunter,
i 974.
Figura3'4.Comparación de loscambiosen el ángulode la basedelcráneoy el planomandibular
entreel prome-
dio de loshombresdel estudiolongitudinal
de Michigan y cincohombres,sintratamientoy normales,
del estudio
CES- Colombia.
de la Universidad

42
40
38
36
34
1?
30
k
r'i 28
26
24
22
20
18
t6
74

Edad en años

---<¡'--- Promedio Michigan r Hombre 6 O Hombre 7

Modificado
de:AnAtlasofcraniofacial
growth.
Riolo,
lt/oyers,
McNamara
andHunter,
1974.

Figura3'5. Comparación
de loscambiosen el ángulode la basedel cráneoy el planomandibular
entreel pro-
mediode loshombresdelestudiolongitudinal
de Michigany doshombres, sintratamiento
V normales.
delestudio
de la Universidad
CES- Colombia.

35
hay individuos con incrementos notables alrededor cia normal en humanos y que está ya bien documen-
de los siete y los nueve años de edad. tado en el estudio de Michigan. Sin embargo, a los 17
años de edad había una diferencia de 9" entre las dos
Variación en la forma craneofacional niñas en condiciones de normalidad y sin tratamien-
La cara humana, desde el punto de vista geométri- to. Diferencias similares se observan en el desarrollo
co, es una combinación de ángulos, planos, trián- de los hombres (figuras 3-1y 3-5).
gulos y curyas cuya interrelación produce una com-
binación infinita de formas. La forma craneofacial Conclusión
parece dar una mejor idea de los cambios durante Cada indMduo es único en la manera como expresa
el crecimiento, un análisis simple de la forma cra- su crecimiento, pof este motivo es importante evaluaf
neofacial se hace con medidas angulares. a cada paciente en forma individual. El crecimiento
Las medidas lineales, en milímetros, involucran y el desarrollo es un fenómeno biológico complejo y
sólo la distancia entre dos puntos, mientras que es muy arriesgado agrupar a los individuos, aun de
las angulares toman como referencia tres o cuatro, una misma población y raza, en promedios matemá-
dando una idea de la forma de la estructura que ticos con desviaciones estándar que tratan de simpli-
se al:rlliza. La comparación de estudios, tomando ficar la dinámica real del crecimiento.
como referencia las medidas angulares, es más sim-
ple, pues no se afectan por la magnificación de la LECTURAS RECOMENDADAS
imagen radiográfica céfalométrica.
En las figuras 3-2 a 3-5 se puede observar la 1-. Lorena Botero e Iván Jinénez. Longitudinal
comparación de los cambios en el ángulo del pla' cephalometric changes of the lower anterior fa-
no silla-nasion con el plano mandibular, entre el cial height in Colombian subjects. Resumen de
promedio del estudio craneofacial de la Universi- investigación presentado en la 100 sesión anual
dad de Michigan en Los Estados Unidos y 14 suje- de la Asociación Americana de Ortodoncia. Chi-
tos normales del estudio de la Universidad CES, cago, USA, Abril de 2000.
en Colombia. 2. Riolo M, Moyers R, McNamaraJ, HunterWiAn
Se puede observar que la tendencia general en el atlas of craniofacial growth: cephalometric Stan-
crecimiento facial es haciala disminución del ángu- dards from the university school grofih study.
1o del plano mandibular con respecto a la base del The University of Michigan. Monograph number
cráneo. Sin embargo, las variaciones individuales son 2, craniofacial growth series. Center of human
notorias, confirmando laidea de que muchos indivi- growth and development. Ann Arbor, Michigan,
duos no se comportan como 1o indica el estándar. usa,.1974.
Como se puede observar en la figura 3-2, la niña 3. Broadbent BH Sr, Broadbent BH Jr' Golden
número 1 del estudio de la Universidad CES durante WH. Bolton Standards of dentofacial develop-
su desarrollo disminuyó el ángulo del plano mandi- mental growth. Case Western Reserve University.
bular, lo mismo que la número 2, como es la tenden- The C.V Mosby Company, USA. 1975.

36
ANEXO
Dr. Gonzqlo Alonso Uribe Restrepo

Tablas según edad y sexo del estudio longitudinal de crecimiento y desarrollo


de Ann Arbor - [írichigan 1974.
Riolo-McNamara-Hunter-Moyers

Hombre Muieres
Medidas
Medida D.E. Medida D.E.
Medidas esqueléticas
Ángulo facial (S-N-Pog) 76,1',) 2,7 76,8o 3,3
Angulo facial (N-PogAH) 82,7 3,3 83,8' 2, 8
Ángulo Landhe (N-A a FH) 86,10 1) 88,3" 3,4
SNA 810 3,4 86,5o 3,6
SNB 76,3" 2,8 76,7" 3,3
ANB 4,80 )') 4,6 2, 4
Ángulo de la convexidad (N A Pog) 9,3" 5,1 90 <)

Plano mandibular-FH 29,4 4,8 28,6" 3,8


Eje Y de crecimiento (S-GnAH) 60,9" 4c) 59,8" 3,7
Altura facial inferior (ENA-MN) 66,6 mm 4,4 63.5 mm 1, 2
Long. Mandibular (Co-Gn) 109,2mm 3,8 106,3mm 4,/

Long. Mandíbular (Go-Pog) 71,2 mm 2,9 7O.1mm 4,2


N-ENA 49,5 mm 2,8 48,6 mm )
Altura post. Inf. (Art-Go) 42,2mm 3,4 40,2 mm 1)

ENA-ENP 52,1mm 2c) 51,2 mm )5

N-Pog a punto A 4,4 mm )< 4.1mm 2,1


Base de cráneo lS-N) 75,2 mm ) 72,3 mm )c)

Medidas dentales
Angulo interincisal 128,10 11,,2 127,2 10,2
Central superior a plano palatal 108,8 o,/ 1 11 , 3 0 7,r
Central superior a FH 108,2 6.7 111,1 6
Central superior a S-N L02,9o o,/ 104,3" /,1

Central superior ^ A-Pog (mm) 5,9 mm )q 5,3mm 2, 7


Ce ntra l inl Plano m and. 940 5,7 93,1" 7
Central inf. ^ A-Pog (mm) 1,1 mm )< 0,9 mm 2,4
11^P P 27,5mm )1 25 mm 2, 8
16^P P 19,5mm 1,8 18,5mm 2, 1
41^P M 39.6rlrm 2.1 37,8 mm )')
46^P M 30,5mm 2,I 28,9 mm T,5

D.E.: desviaciónestándar.

Recopilaciónhecha por la Dra. Ana CristinaQuinteroC.

Tomadoy modificadode. Riolo M, Moyers R, lVcNamaraJ y HunterW. Michigan,USA 1974.

J/
Hombres Muieres
Medidas
Medida D.E. Medida D.E.
Medidas esqueléticas
Ángulo facial (S-N-Pog) 76,7" )< 76,7" 33

Angulo facial (N-Pog/FH) 81,9" 3,6 84,3 )


Angulo Landhe (N-A a FH) 85,7" 3,5 99,3" 3,1.
SNA 80,6" ) 90,5" 1)

SNB 76,4 2< 76,5" 3,4


ANB 4,2" r ,9 40 )\
Ángulo de la convexidad (N A Pog) 8o 4,5 7,60 5,6
Plano mandibular-FH 29,5" 5,5 28,40 4,9
Eje Y de crecimiento (S-GnAH) 6'1.,4" 4,3 60,4
Altura facial inferior IENA-MN) 67,3mm 4,3 64,L mm 4,6
Long. Mandibular (Co-Gn) 111,7mm 1g 108,3mm 5
Long. Mandíbular (Go-Pog) 73 mm 2,7 7L,7 mm +,>
N -ENA 51 mm 3 50,4 mm 3,1
Altura post. Inf. (Art-Go) 43,4 mm 33 1 r. 2 35

ENA-ENP 53,3mm 2,9 57,2 mm 17

N- Pog a punto A 3,8 mm 71 3,6 mm 2,7


Base de cráneo (S-N) 75,9mm 3,3 72,6 mm )a

Medidas dentales

Angulo interincisal L26,3 9,2 125,5 9,7


Central superior a plano palatal 110,7 5,0 r13 6,6
Central superior a FH 110 6,7 ttr,2 5,8
Central superior a S-N L04,3 5.r to5,3 6,4
Central superior ^ A-Pog (mm) 6,9 mm 2,5 o,/ mm 2,8
Central inf. Plano mand. 94,7 5.7 93,9 7)

Central inf. ^ A-Pog (mm) 1,8 mm 2,4 1,6 mm 2,7


11 ^ PP 28,6 mm 7a 26,1 mm 2,6
1 6 ^P P 2O,4l r.m )) 19,3mm 7,9
4 L^P M 4O,7 rnm 2,4 38,9mm )\
46^PM 30,9mm 2 29,4o:rm 2,1

D.E.: desviación
estándar

y modificado
Tomado J y HunterW. Michigan,USA.1974
de: RioloM, MoyersR, McNamara

38
Hombres Muieres
Medidas
Medída D.E. Medida D .E.
Medidas esqueléticas

Angulo facial 1S-N-Pog.¡ 76,7" )< 76,7" J,l

Angulo facial (N-Pog,lFH) 91,9. 3,6 94,3 J

Angulo Landhe (N-A a FH) 85,7" 99,3" 3 ,r


SNA 80,8" 3,1 80,7o 3,7
SNB 76,5" )s 76,7"
ANB 4,3' 2,O 4" 2,7
Angulo de la convexidad (N A Pog) 7,9" 4,9 a)" 6,7
Plano mandibular-FH 29,6 5 28.9" 4,2
Eie Y de crecimiento (S-GnAH) 61,8' 3,9 60,8' 4,2
Altura facial inferior (ENA-MN) 68,9 mm 4,9 65,3mm 4,9
Long. Mandibular (Co-Gn) L-1.4,5mm 3,9 111,3mm 4,9
Long. Mandíbular (Go-Pog) 75.1ml r. 2,8 74 mm 4,2
N-ENA 52,3mm 3,\ 52,1 mm
Altura post. Inf. (Art-Go) 44,2 mm 3,4 11,,6mm 1)

ENA-ENP 51,1 mm 2,6 53.1mm 3,1


N-Pog a punto A 3,9mm )s 3,5mm 2, 8
Base de cráneo (S-N) 76,8 mm 12 73,9mm 2,8
Medidas dentales
Angulo interincisal r24,6" 8,6 r25,1' 8,9
Central superior a plano palatal 111,10 \) 173"
Central superior a FH llo,40 6,7 r.r.1,6" 7,1
Central superior a S-N 105" 51 105,5' 7,1
Central superior ^ A-Pog (mm) 7,7 mm 2,6 6,7 mm 2,4
Central inf. Plano mand. 95,80 5,1 93,8" 6, 8
Central inf. ^ A-Pog (mm) 2,2 mm 211 1,6 mm 1,8
11^P P 29,7mm 2) 27 mm 2,8
16^P P 21,1mm 2,4 20 mm 2,1
41^P M 4r,9 mm 2.4 40 mm 2,6
46^PM 31,7mm 1,9 29,9 mm ))

D.E.: de sviaciónes landal

Tomadoy modificadode: RiololV, Moyers R, McNamaraJ y HunterW. Michigan,USA. 1974

39
Hornbres Muieres
Medidas
Medlda D.E. Medida D.E.

Medidas esqueléticas

Ángulo facial (S-N-Pog) 77,1o )< 77,9" 3,9


Ángulo facial (N-Pog / FH) 82,60 3,5 84,60 2,7

Angulo Landhe (N-A a FH) 96" 3,4 88(,

SNA 80,8. ) 81,10 3,9

SNB 76,5" 2,6 77,3" 3,9


ANB 4.3" r ,g 3,8" )')

Angulo de la conveidad (N A Pog) 7,5" +,> 6,60 4,>

Plano mandibular-FH 29,1" + ,/ 28,80 414

Eie Y de crecimiento (S-Gn /FH) 6 r, 6 " 3,9 60,6"


Altura facial inferior (ENA-MN) 7O,3mm 1,8 65,8 mm 4,6
Long. Mandibular (Co-Gn) 117,6mm 4,3 113,4mm 4r /

Long. Mandíbular (Go-Pog) 71,1mm 1) 75,7mm 4,2

N-ENA 53,8mm 3,1 52,7mm f3

Altura post. Inf. (Art-Go) 45 mm 3,9 42,3mm 3,1


ENA-ENP 56 mm 2,1 53,9mm 4
N-Pog a punto A 3,8mm 2,4 3,2mm ))

Base de cráneo (S-N) 78,2 mm 2,9 74,3mm 3


Medidas dentales

Angulo interincisal 121,9o 9,7 726,9" 9.1


Central superior a plano palatal 111,10 5,1 I1.2,80 7
Central superior a FH 110,3" 7,5 r12,50 6,9
Central superior a S-N ro4,6" 105,10 6,9
Central superior plano A-Pog (mm) 8mm ?1 6,5 mm 2,7
Central inf. Plano mand. 95,8" 5,4 93,3" 6

Central inf. al plano A-Pog (mm) 2,2 mm )? 1,6 mm ). 1

11 ^ P P 30,5mm 2 27,6 mm 2,7


16^P P 22,I mm )4 2O,9mm 1,9
4 1^P M 42,9mm 217 40,5mm 2,6
46^PM 32,3mm )) 30,3mm T,9

D.E.: desviación
estándar.

y modificado
Tomado J y HunterW, Michigan,USA.1974
de: RioloM, MoyersR, McNamara

40
Hombres Mujeres
Medldas
Medida D.E. Medida D.E.
Medidas esqueléticas

Angulo facial (S-N-Pog) 77,9" 2,6 a8,40 3,1

Angulo facial (N-Pog/FH) 82,60 3,8 95" 1

Ángulo Landhe (N'A a FH) 85,8" 4,2 88.70 2,4

SNA 8r,20 3.3 81,4 3,6


SNB 77,3" 2.7 77,7" 3,4

ANB 3,9" 2,1 3,70 2,1


Ángulo de la convexidad(N A Pog) 6,70 4,8 6,40 5,5
Plano mandibular-FH 29,4 28,1o <)

Eje Y de crecimiento (S-Gn / FH) 62,2" +,> 60,50 3,8


Altura facial inf-erior IENA-MN') 71,1mm 5,L 56,5 mm 3,8
Long. Mandibular (Co-Gn) 119.7 mm 4,5 1" 1.5,7
mm 4,6
Long. Mandíbular (Go-Pog) 78,5 mm 3,4 16,6 mm 3,8
N-ENA 54,6mm 3,6 54 mm
Altura post. Inf. (Art-Go) 46,7mm 3,8 44,9 mm 3,9
ENA.ENP )o, / mm 3,r 54,1,mm 1)

N-Pog a punto A 3,4mm 2,6 3,1mm 2,7


Base de cráneo lS-N) 78,3mm 33 71,9mm )
Medidas dentales

Angulo interincisal t27,l o 9,7 r2 5 , 5 " t0


Central superior a plano palatal 110,5" r' t 3 , 9 " 5,9
Central superior a FH 109,10 7,9 11.2,60 6,9
Central superior a S-N 1040 105,6" 6,3
Central superior ^ A-Pog (mm) 7,2 mrr 2,6 6,9 mm )
Central inf. Plano mand. 95,r" 5q 94,7" o,)

Central inf. ^ A-Pog (mm) 2,2mm 2,6 2,7 mm )\


1L ^ P P 30,9mm 2,2 27,8 mm 2,7

16 PP 23 mm 2.1 21.,5mm 1, 8

11 PM 43,3mm 2,7 41,1 mm 22

16^PM 32,8mm )< 31 mm ))

D. E . des
: v iaci oens rá n d a r

y modtficado:
Tomado J y HunterW. Michigan,USA.1974
de RioloM, MoyersR, McNamara

4r
Hombres Muieres
Medidas
Medida D .E . Medida D .E .

Medidas esqueléticas

Angulo facial (S-N-Pog) 78,2o 2,8 78,4 4

Ángulo facial (N-Pog/FH) 92,3n 3,4 96,1" 1,9

Angulo Landhe (N-A a FH) 95,, 3,8 89,3" 1,8

SNA 81,2o 3,1 8Lo 3,8

SNB 77,5" 77,5" 3,9


ANB 3,70 2 3,5" 2,4
Angulo de la convexidad (N A Pog) 6,r " 4,8 > ,4" 5.3
Plano mandibular -FH 29" 5.7 260 4,3
Eie Y de crecimiento (S-GnAH) 62,6 3,9 59,5" 2,7

Altura facial inferior (ENA-MN) 72 mm ),o 68,1mm +.>


Long. Mandibular (Co-Gn) 123,1mm 5,5 117,8 mm 4,3
Long. Mandíbular (Go-Pog) 80,4 mm 3,7 78,4 mm 4
N-ENA 56,8 mm >+,/ mm 3,3
Altura post. Inf. (Art-Go) 48 mm 4,6 44,7 mm 3,8
ENA-ENP 57,8 mm 3,r 55,3mm )
N-Pog a punto A 3 , 2mm 2,6 2,7 mm 2,6
Base de cráneo (S-N) 79,5mm 3,8 75,5mm 3.7
Medidas dentales

Angulo interincisal t27,6" to,9 r28,6" 8,1


Central superior a plano palatal r70,40 5,7 tt2.t,
Central superior a FH 108, L0 7,9 r1 2 , 9 " 4,3
Central superior a S-N 103,3" 5,9 103,9" 5,6
Central superior ^ A-Pog (mm) 7mm ) 6,4 mm 2,6

Central inf. Plano mand. 96,7" 7,7 93,2" 6


Central inf. ^ A-Pog (mm) 2,2mm 2,6 1,7 mm 2,3
11 PP 30,9mm 2.1 28,4 mm 2,6
r6 PP 23,8mm 2,4 22,9 mm ?1

4 1 ^P M 11,2 mm 3,7 12 mm 2,6


46^PM 33,8mm f 3r,4mm ))

D.E.: desviación
estándar,

y modificado
Tomado J y HunterW. lVichigan,
de: RioloM, MoyersR, lVlcNamara USA 1974

42
Hombres Muieres
Medidas
Medida D.E. Medida D.E.

Medidas esqueléticas

Angulo facial 1S-N-Pog) 78,20 ) 78,80 4,1

Angulo facial (N-Pog / FH) R 3 30 96,7"

Angulo Landhe (N-A a FH) 86,10 35 89,8"

SNA 80,70 3,1 91,3" 35

SNB 77,3. 3.1 77,9" 3,8


ANB 3,4" 2 3,10 )\
Angulo de la convexidad (lN A Pog) <)o 4,8 5,3" 5,9
Plano mandibular-FH 27,7" 5,8 21,9o 5,8
Eje Y de crecimiento (S-GnAH) 61,80 +,> 58,9" 3,8
Altura facial inferior IENA-MN') 74,3mm 5,8 69,1mm 5
Long. Mandibular (Co-Gn) 726,5 mm 5.7 1.I9,9mm 4
Long. Mandíbular (Go-Pog) 82,8 mm J 79,4mm
N-ENA 58,2 mm 4,r 55,3mm 2,7
Altura post. Inf. (Art-Go) 49,8mm 4,6 46,4mm +,6
ENA-ENP 58,7 mm 3,6 )O, u ¡¡1¡ 2.9
N-Pog a punto A 2,8 mm 2,6 2,7mm )
Base de cráneo (S-N) 80,5 mm 4,1 76 mm 2,9
Medidas dentales

Angulo interincisal 1'29,60 10,8 1280 9. 5


Central superior a plano palatal 109,9" ) ,4 tt2,Lo 6,1

Central superior a FH 108,6" 7 l13" 4,2


Central superior a S-N 1O2,60 6 104" 6,2
Central superior ^ A-Pog (mm) 6,6mm 2,8 6,3mm 2,4

Central inf. Plano mand. 94,8" 7,2 94,3" 6,8


Central inf. ^ A-Pog (mm) 1,8 mm 2,5 1,8 mm 2,1
1L ^ P P 31,5mm )4 29,1 mm )
r6 PP 24.8 mm 2,6 23,3mm 2
41^P M 45,6mm 3,6 42,1.mm 2,6
46^PM 35,4mm ) 32,3mm 2,4

D.E.:d esvia ció nes t andar

Tomadoy modificadode RioloM, Moyers R, McNamaraJ y HunterW. Michigan,USA. 1974

43
Hombres Muieres
Medidas
Medida D,E. Medida D.E.
Medidas esqueléticas
Angulo facial (S-N-Pog) 78,5" 3,7 79,8" 4,7

Angulo facial (N-PogAH) 82,90 +,> 87,20 )

Angulo Landhe (N-A a FH) 84,9" + ,/ 89,9" 3.6

SNA 80,9" 17 81,80 3.5


SNB 77,60 ) 78.9" 3,9
ANB 3,J" 2,1 ?go 2,7
Ángulo de la convexidad (N A Pog) 4,9" 5,7 4,r " 5,9
Plano mandibular-FH 29,5o 6,2 24,6" 4,t
Eie Y de crecimiento (S-GnAH) 63,1" 5 58" 3,1
Altura facial inferior (ENA-MN) /o, / mm 6,4 69,5mm 5,3
Long. mandibular (Co-Gn) L28,7mm ) I22 mm 4,9
Long. mandibular (Go-Pog) 84,3mm 4,\ 80,6 mm 3,9
N-ENA 59 mm 4 55,3mm 1)

Altura post. Inf. (Art-Go) 57,4 mm 4,6 48,1mm 1,r


ENA.ENP 59,6mm 3,6 57,1mm 2,7
N-Pog a punto A 2,8 mm 2,8 2,1 mm )
Base de cráneo (S-N) 81,3 mm 4 76,9 mm 2,8
Medidas dentales

Ángulo interincisal Í29,2" 10,1 -J.3t,9" lo,3


Central superior a plano palatal LOg,g" 5,8 111,50 6,7
Central superior a FH 10go 7,6 7'J.,3" 4,3
Central superior a S-N 103" 5.9 1o3,70 7,7
Central superior ^ A-Pog (mm) 6,4 mm )g 5.7mm )
Central inf. Plano mand. 94,9" 7,7 920 6,4
Central inf. ^ A-Pog (mm) 1,9 mm 2,6 1,2 mm 75

11 ^ PP 32,2mm 2,8 29,1 mm 3,3


1 6^P P 26,3mm 5 23,9mm ))
4 1^P M 46,6mm 3,4 42 mm 17

46^PM 36,4mm ) 32,7mm 79

D . E.:d esvia ció ne stándar

J y H unterW . Mi chi gan,


Tomadoy modificado de: Riolo M, Moyers R, M c N a m ara U S A .1974

++
Hombres Mujeres
Medidas
Medida D.E. Medida D.E.
Medidas esqueléticas
Ángulo facial (S-N-Pog) 79,3" 35 80,2 )<

Ángulo facial (N-Pog/FH) 82,50 3,9 8óo 2,5


Angulo Landhe (N-A a FH) 81,7o 3,8 g7,9" 3,6
SNA 81,4o * 14 8r.,80

SNB 78,2o 3,9 79,2" )1

ANB 4)o ?1 2,60 2,4


Ángulo cle la convexiclad (N A Pog) 4,4n ó A) o 5,6
Plano mandibular-FH 29,7n \? 25.8 )
Eje Y de crecimiento (S-Gn/FH) 63,5" 3,8 59,6 2,6
Altura facial inferior (ENA-MN) 79,5mm 6,2 69.3mm <)

Long. mandibular (Co-Gn) 133,6mm >,+ 123,6mm 1


Long. mandíbular (Go-Pog) 86,5 mm 81,5 mm 3,8
N-ENA 59,7mm 2,9 55,7 mm 2,L
Altura post. inf. (tut-Go) 54,3mm 1 +, 1 49,6mm 3,9
ENA-ENP 61,5 mm 2,7 57 mm 1,4
N-Pog a punto A 2,6mm 3,4 1,7 mm 2,9
Base de cráneo (S-N) 83,3mm iR 76,9mm 3,9
Medidas dentales

Angulo interincisal 126,6" 10 133,6" T3


Central superior a plano palatal 1.12,10 11,10 6,2
Central superior a FH 108,10 7,5 111,1. 6,3
Central superior a S-N 1.O5,2u 6,4 103,1, 6,5
Central superior ^ A-Pog (mm) 7,4 mm 2,7 5,2 mm 1)

Central inf. Plano mand. 95,3" 6,6 92,1" 9


Central inf. ^ A-Pog (mm) 2,8 mm 2,9 0,8 mm 2,8
11^P P 33,2mm 7,2 30 mm )g

16^P P 27,9mm 3.7 24,8 mm ))


41^P M 48,9 mm ) 41,5 mm 3,L
46^PM 38 mm 2,8 32,6mm 2,9

D.E,: desviación
estándar.

y modificado
Tomado J y HunterW. Michigan,USA.1974
de; RroloM, MoyersR, McNamara

+>
LECTURAS RECOMENDADAS

1. Riolo M, Moyers R, McNarnara J, Hunter W An atlas of craniofacial growth: cephalometric Standards


from the university school growth study. The University of Michigan. Monograph number 2, ctaniofacial
growth series. Center of human growth and development. Ann Arbor, Michigan, USA. 1974.

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