El mito mexicano de Xólotl “el dios que quiso engañar a la muerte”

Xólotl Huetzi, señor de la estrella vespertina,Venus, dios de la luz, del fuego y del
relámpago para los aztecas y toltecas, también considerado el dios de los mellizos
y los monstruos, asociado con la enfermedad y las deformidades físicas, patrón
del juego ulama (juego de pelota que se practica en Mazatlán). Le entregó al
humano el fuego de la sabiduría y se representa en algunos códices con figura de
perro.

En la mitología azteca se le llama comúnmente Nahual, "protector" de

Quetzalcóatl (hermano gemelo), yendo con él al inframundo a reunir huesos para
crear a los humanos a principios del Quinto Sol. Dicen los ancianos, hombres
sabios, que cuatro veces el mundo fue creado y destruido por los dioses, pero el
actual tuvo la génesis más difícil.

Un día se encontraban reunidos todos los dioses, ellos y Quetzalcoatl estaban a

favor del sacrificio para que con la sangre de las deidades el nuevo sol pudiera
comenzar su ciclo. Pero Xólotl no compartía el mismo sentimiento y escapó, se
ocultó en una planta de maíz pero los dioses lo identificaron a pesar de la
metamorfosis. A punto de ser cortado, Xólotl volvió a escapar y confiado en
su capacidad para transformarse en cualquier cosa, se convirtió en una penca
doble de maguey (Mexólotl). Una vez más lo reconocieron pero Xolótl escapó.
Cuando estuvo delante de una laguna, pensó en que ese sería el escondite
definitivo, entró en el agua y se convirtió en Axólotl sin emabrgo, lo capturaron y
asesinaron. De este modo, la sangre de los dioses pudo ser utilizada para dar vida
al quinto sol.

Reflexión:

Nada ni nadie puede estar a salvo de perecer, porque la muerte es el medio

por el cual la naturaleza se regenera a sí misma.