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OPERACIÓN, CONTROL Y MANTENIMIENTO DEL TANQUE SÉPTICO

El tanque séptico es un depósito en donde el material sedimentable que contienen


las aguas residuales se decantan produciendo un líquido libre de sedimentos que
puede infiltrarse con facilidad en el subsuelo. De esta manera, la función del tanque
séptico es la de proteger y conservar la capacidad de absorción el subsuelo por largo
tiempo facilitando la adecuada disposición de las aguas residuales domésticas.

El material sedimentable decantado se descompone bajo condiciones anaeróbicas


por acción de loa microorganismos presentes en las aguas residuales disminuyendo su
volumen original y la fracción orgánica, dando como resultado el aumento en el
contenido de sólidos totales. El proceso de descomposición de la materia
sedimentable y la presencia de aceites y grasas da origen a la formación de natas que
se ubican en la parte superior del tanque y a la producción de gases que deben ser
eliminados a través de las instalaciones sanitarias de la vivienda.

El tanque séptico cumple tres funciones:

a) eliminación y digestión de sólidos


b) tratamiento biológico
c) almacenamiento de natas y lodos.

Seguridad

El equipo de protección individual recomendable para el personal que labora en las


plantas de tratamiento es:

 Cascos de seguridad
 Botas de jebe
 Guantes de cuero
 Mascarillas antigas para los operadores de la cámara de rejas.
 Chalecos salvavidas cuando se ingrese en bote a los reactores o
sedimentadores, o se limpien las paredes o diques interiores de los mismos.

Inspección y evaluación

Tanque séptico

 El tanque séptico debe inspeccionarse cada seis meses en el caso de establecimiento


públicos como escuelas, industrias o comercios.
 Al abrir el registro del tanque séptico para efectuar la inspección o la limpieza, se debe
dejar transcurrir un tiempo hasta tener la seguridad que el tanque se haya ventilado lo
suficiente porque los gases que en ella se acumulan pueden causar asfixia o ser
explosivos al mezclarse con el aire.
 Nunca debe encenderse fósforo o cigarrillo cuando se apertura un tanque séptico.
 Se deben limpiar antes que se acumulen demasiada cantidad de lodos y natas, ya que
su presencia por encima de determinados niveles conduce a que puedan ser
arrastrados a través del dispositivo de salida obturando el campo de infiltración.
Cuando esto último sucede, el líquido aflora en la superficie del terreno y las aguas
residuales se represan y en casos extremos el agua residual puede inundarla vivienda o
a la edificación. Cuando se llega a estos extremos, no sólo es necesario limpiar el
tanque séptico, sino que además será necesario construir un nuevo campo de
infiltración.
 Se limpia cuando el fondo de la capa de nata se encuentre a unos 8cm por encima de
la parte más baja del deflector o prolongación del dispositivo de salida o cuando la
capa de lodos se encuentre a 0,30 m por debajo del dispositivo de salida. La presencia
de turbiedad en el líquido efluente con la presencia de pequeñas partículas de sólidos
sedimentables es un síntoma que la nata o los lodos han sobrepasado los límites
permisibles y se está afectando severamente el sistema de infiltración, por lo que
deberá programarse de inmediato su limpieza, ya que el volumen ocupado por la nata
y el lodo ha hecho disminuir el período de retención del agua dentro del tanque
séptico conduciendo a una menor eficiencia remocional del material sedimentable.
Por ello, es una buena práctica disponer de una caja intermedia entre el tanque
séptico y el campo de infiltración para observar la calidad de efluente drenado por el
tanque séptico.
 El espesor de la nata se puede medir con un listón de madera en cuyo extremo lleve
fijada una aleta articulada. El listón se fuerza a través de la capa de nata hasta llegarla
zona de sedimentación en donde la aleta se desplazará a la posición horizontal. Al
levantar el listón suavemente, se podrá determinar por la resistencia natural que
ofrece la nata, el espesor de la misma. Este mismo dispositivo puede ser empleado
para determinar el nivel bajo del deflector o de la prolongación del dispositivo de
salida.
 Para determinar el espesor de lodo y la profundidad del líquido, se emplea un listón de
madera en cuyo extremo tenga enrollado una tela tipo felpa (material del cual se
fabrican las toallas) en una longitud de aproximadamente un metro. Este dispositivo se
hace descender hasta el fondo del tanque a través del dispositivo de salida para evitar
la interferencia de la capa de nata. Luego de mantener el listón por un minuto, se le
retira cuidadosamente y las partículas de lodo quedarán adheridas sobre el enrollado
de felpa, permitiendo determinar el espesor de la capa de lodos.

Con estas tres determinaciones: a) espesor de la capa de nata; b) espesor de la capa de


lodo, y c) ubicación del nivel del deflector o prolongación del dispositivo de salida, se podrá
determinar el momento de la limpieza del tanque séptico.

Caja de distribución

La caja de distribución debe ser inspeccionada cada tres o seis meses para observar la
presencia de sedimentos que pudieran afectar la distribución del agua residual hacia los fosos
o zanjas de percolación. En caso de verificarse una mala distribución de agua por la presencia
de sólidos se deberá proceder a su limpieza.
Fosas o zanjas de percolación

Las fosas o zanjas de percolación deben ser inspeccionadas periódicamente en razón que
con el tiempo tiende a depositarse materias sólidas que tienden a obturar los poros del
material filtrante, afectando la capacidad de tratamiento del campo de tratamiento, así como
su capacidad de infiltración, lo que conduce indefectiblemente a cambiar el material filtrante o
en su defecto, a la construcción de un nuevo campo de infiltración.

Limpieza

Tanque séptico

 La limpieza inicial o el intervalo entre dos de limpieza consecutivas dependen de la


intensidad de uso del tanque séptico, por que cuanto mayor es el uso, menor será el
intervalo entre limpiezas. Normalmente, se recomienda limpiarlo una vez por año,
pero ello depende de su diseño.
 El dispositivo más empleado para la remoción del lodo del tanque séptico es el carro
cisterna equipado con bomba de vacío y manguera. El retiro de los lodos se realiza
hasta el momento en que se observe que el lodo se torna diluido.
 En pequeñas instalaciones, la limpieza se puede ejecutar con un recipiente dotado de
un mango largo para retirarlo del interior del tanque séptico o mediante una bomba
manual que descargue a un recipiente o a un camión tanque.
 Para facilitar el retiro de la nata, poco antes del retiro del lodo, se esparce en su
superficie cal hidratada o ceniza vegetal y luego, con la ayuda de un listón de madera
se procede a mezclarlo. Esto inducirá a que gran parte de la espuma se precipite e
integre al lodo facilitando de esta manera su retiro. La parte remanente podrá ser
retirada con la ayuda de un cucharón a través de la tapa de inspección.
 Durante la limpieza del tanque séptico, por ningún motivo se debe ingresar al tanque
hasta que se haya ventilado adecuadamente y eliminado todos los gases, a fin de
prevenirlos riesgos de explosiones o de asfixia de los trabajadores. Cualquier persona
que ingrese al interior de un tanque séptico debe llevar atada a la cintura una cuerda
cuyo extremo lo mantenga en el exterior del tanque una persona lo suficientemente
fuerte como para izarla en el caso de que los gases del tanque lo lleguen a afectar.
 Una vez retirado el lodo, el tanque séptico no debe ser lavado o desinfectado y más
bien se debe dejar una pequeña cantidad de lodo como inóculo para facilitar el
proceso de hidrólisis de las nuevas aguas residuales que han de ser tratadas.
 Los lodos extraídos deben ser dispuestos en una planta de tratamiento de aguas
residuales para su acondicionamiento final o enterrado convenientemente en zanjas
de unos 60 centímetros de profundidad.
 Las personas encargadas del mantenimiento y conservación de los tanques sépticos,
deberán emplear guantes y botas de hule.

Trampa de grasa

 La trampa de grasa debe ser limpiada cada quince días o mensualmente y consistirá en
el retiro del material flotante y del material sedimentable.
 La limpieza debe efectuarse durante las primeras horas de la mañana cuando la
temperatura del aire y del agua residual alcanza sus valores más bajos lo que facilita el
retiro del material graso al encontrarse solidificado. Por ningún motivo deberá
emplearse agua caliente para licuar la grasa y facilitar el drenaje hacia el tanque
séptico o sistema de alcantarillado.
 Esta operación conduce a que al enfriarse y solidificarse el material graso se adherirá a
las paredes de la tubería afectando su capacidad de conducción o incrementará la
capa de espuma al interior del tanque séptico.

Abandono de la obra

En el caso de abandono de un tanque séptico, es recomendable que se le rellene con tierra


o piedras para evitar que se convierta en un foco infeccioso o en madriguera de animales
indeseables.

Control de calidad

El control de la calidad de las aguas residuales efluentes se ejecuta mediante la


cuantificación de los lodos sedimentables ejecutado en cono Imhoff y de la carga orgánica o
demanda bioquímica de oxígeno (DBO).

Esta última prueba ayuda a determinar la eficiencia del proceso de tratamiento y que para
el caso de los tanques sépticos está comprendida entre el 30 al 40%.
PROCEDIMIENTO DE LIMPIEZA DE UNA FOSA SÉPTICA

Cómo se limpian las fosas sépticas

En primer lugar, hay que tener en cuenta que se debe conocer el uso que se le da al
pozo o fosa. Cuando el nivel de lodo esté más o menos a la mitad de la fosa, ésta debe vaciarse
para eliminar las capas de grasas y todos los elementos que se encuentren flotantes, además
de extraer todo el lodo que se va acumulando.

No obstante, siempre los trabajadores tienen en cuenta que no se extrae todo el lodo,
sino que se deja un 20 % para que los trabajos de depuración vuelvan a activarse en la fosa.
Siempre se debe dejar en manos de profesionales estas tareas, ya que pueden ser muy
peligrosas para personas sin conocimientos ni seguridad adecuada.

Así se realiza la limpieza de una fosa séptica:

- Las tapas se deben abrir siempre muy lentamente, poco a poco. Abriendo estas tapas así
se consigue evitar respirar los gases que se producen por la fermentación del lodo y de las
materias residuales. Este gas es el metano, que debe salir lentamente.
- Está prohibido fumar cerca del pozo y menos si se abre para realizar tareas de limpieza. El
gas producido, el metano, además de contar con una alta toxicidad, es inflamable, por lo
que se podría producir una explosión.
- Posteriormente, se debe colocar una bomba que aspire en el lago de las aguas. Debe ser al
nivel para aspirar la capa más cercana a la superficie, lugar donde se encuentran las grasas
y las materias flotantes.
- Poco a poco se debe ir sumergiendo la bomba. Así se irá aspirando toda la materia. Como
se comenta arriba, es recomendable dejar una capa en la capa inferior. Por lo tanto, no
hay que sumergirla del todo.

Más pasos a seguir para la limpieza de fosas sépticas

- Colocar la manguera de agua de manera que la fosa pueda irse llenando con agua clara,
eliminando a su vez los deshechos. Hay que controlar el flujo de agua para que no sea
superior la cantidad de lodo que se elimina.
- Se aprovechará para limpiar los filtros con agua a presión.
- Se deja de aspirar cuando el nivel del lodo sea al 80%, dejando el porcentaje restante para
que se reanude la depuración. Hay que rellenar la parte restante con agua limpia.
- En penúltimo lugar, se añade la dosis de indicador bacteriano. Los trabajadores saben la
dosis recomendada.
- Cerrando las tapas de la fosa los profesionales deben asegurar que quedan bien cerradas y
de que no se puedan abrir fácilmente. La apertura de la fosa de mala forma puede
ocasionar una muerte o asfixia.
EL MECANISMO DE LIMPIEZA DE LAS FOSAS SÉPTICAS

¿Cómo funcionan los pozos sépticos?

El principal mecanismo de este tipo de fosas es la decantación, a través de la cual se


paraliza y se contiene el agua residual. De esta forma, debido a la estancación, se hunden los
sedimentos más sólidos y flotan el resto de impurezas. No obstante, es necesario que el agua
negra permanezca en este tipo de situación durante al menos un día entero, ya que de lo
contrario es más difícil que los sólidos retenidos en el pozo séptico empiecen a
descomponerse.

Una de las principales características de este tipo de fosas es que no precisan de


elementos químicos ni biológicos añadidos para disolver los sólidos. De ahí que, durante al
menos tres años, esta clase de pozos residuales puedan contener en su interior y de forma
segura la acumulación de materia sobrante. Cuando la suciedad alcanza el límite del depósito
establecido para este tipo de residuos, es fundamental que se acuda a un servicio de limpieza
profesional que retire correctamente todo su contenido.

¿Qué proceso de vaciado es el más adecuado?

Las empresas de limpieza destinadas al mantenimiento de esta clase de fosas sépticas


llevan a cabo su higiene mediante el uso del bombeo. El procedimiento más habitual consiste
en la retirada de la parte líquida del tanque y su posterior reinyección desde la parte baja del
depósito. Suministrando la máxima presión posible a través del agua, se consigue un vaciado y
una limpieza completa de todo el tanque.

En la mayor parte de los casos, cuando los residuos sólidos superan el límite del pozo
establecido para su deposición, el agua no consigue descomponer con la misma velocidad y de
forma natural este tipo de residuos, por lo que acaban adentrándose en el sistema de filtrado.
Por este motivo es fundamental que el vaciado de la fosa séptica se lleve a cabo en los plazos
establecidos, que variarán en función del tamaño del pozo, de su capacidad o de la cantidad de
materia residual que generen los miembros de esa familia.
LIMPIEZA Y SUCCIÓN DE POZO SÉPTICO

Un pozo séptico es un depósito subterráneo que almacena residuos o


desechos sépticos. Los pozos sépticos reciben a diario diferentes clases de desperdicios
provenientes de inodoros, duchas, lavamanos, cocinas, albercas, lavadoras y pisos.
Estos desperdicios son ricos principalmente en materia orgánica y grasas. En los
sistemas de drenaje y dentro de los pozos sépticos habitan billones de bacterias que
en condiciones óptimas pueden degradar esos compuestos.
Los problemas se presentan cuando se acumulan capas de grasa y lodos que no
permiten que los procesos de descomposición ocurran de forma natural causando que
parte de esos materiales sean arrastrados hacia el campo de infiltración hasta llegar a
producir el colapso del pozo séptico.
Las señales que usualmente indican que el proceso de descomposición está
fallando son los malos olores, la excesiva acumulación de lodos, la necesidad de
mantenimientos frecuentes y el bloqueo de las líneas de desagüe y de las zonas
filtrantes.

Frecuencia de limpieza

 Se deben limpiar antes de que se acumulen en exceso los sólidos sedimentados


(lodos), y el material flotante (natas).
 Deben ser inspeccionados, cuando menos una vez al año, para medir el grado
de retención de sólidos flotantes y sedimentables.
 Se debe limpiar cuando el fondo de la capa de nata se halle, como máximo, a 8
cm. de la toma de salida del líquido efluente.

Procedimiento de limpieza

 Se retira la nata con lampa recta y una herramienta tipo espumadera.


 Se agitará la parte líquida y los lodos para introducir una manguera que se
encuentra conectada a la cisterna, para que junto con la nata sean succionadas
para que posteriormente sean dispuestas al relleno sanitario más cercano.
LIMPIEZA DEL TANQUE SÉPTICO

Limpieza
 Los tanques sépticos son limpiados cuando están sobrecargados; en este caso
el lodo pasa por las tuberías y colmata el suelo.
 La limpieza del tanque se realizara cada 6 meses.
 La inspección será cada 10 o 12 meses el tanque séptico.
 Para ejecutar la limpieza, previamente deben destaparse ambas tapas de
registro colocadas a cada extremo de modo que se permita la ventilación de la
unidad y se elimine parte de H2S que normalmente se encuentra cerrado en el
interior. Esto es muy importante porque H2S es un gas tóxico que bajo
condiciones extremas de concentración puede incluso causar la muerte.
 Presencia evidente de sólidos sedimentables, en el efluente del tanque es señal
de que su capacidad ya está sobrepasada.
 Una vez efectuada la inspección se debe dejar una pequeña cantidad de lodo
para el inicio de la digestión.

Frecuencia de limpieza.

 La inspección de la unidad deberá ser hecha una vez por año. Esta actividad
consiste en verificar el nivel que han alcanzado los lodos y la nata sobrenadante
en el deflector de salida.
 Se deberá proceder a hacer la limpieza del tanque cuando el nivel de los lodos
llegue a una altura promedio de 40% de la altura útil de diseño de la unidad o
cuando el nivel de las natas acumuladas se encuentre 7,5 cm del nivel superior
del deflector de salida.
 Las actividades de limpieza del tanque séptico debe realizarse en forma
periódica de acuerdo con las necesidades establecidas por su uso.

Método de limpieza.

 La limpieza del tanque debe efectuarse evacuando los lodos acumulados por
medio de un frotador de mango largo y un equipo de bombeo que succione
(bomba centrifuga) e impulse el fango hacia un vehículo cisterna o similar.
 El espesor de la nata se puede medir con una vara a la que se haya fijado a una
aleta con una bisagra; el bastón se fuerza a través de la capa de nata hasta que
la aleta se desplace a la posición horizontal con lo que al izar de nuevo el
bastón, se aprecia el fondo de la capa de nata. Con el mismo instrumento se
puede determinar la distancia al fondo de dispositivo de descarga.
 Para determinar el espesor de lodo y la profundidad del líquido, se usa una vara
que tenga en un extremo un isopo largo de trapos o toallas blancas que se hace
descender hasta el fondo del tanque, y para evitar las partículas de nata, el
lugar apropiado de introducción es a través del dispositivo de descarga.

Acumulación de lodo y disposición final.

 Se aconseja disponer de un área alejada de la localidad y de los cursos de agua


como riachuelo, canales de drenaje de lluvias, etc, que podrían arrastrar y diluir
el lodo llegando a zonas donde alguna población utilice el agua contaminada.
 En este sentido, puede ser importante ejecutar la limpieza en épocas en las que
la lluvia es escasa, lo cual permitiría disponer los lodos en zonas descampadas y
de poca pendiente (preferible zonas planas) que sirvan como lecho de secado.
 La exposición natural al sol y su deshidratación o en incineradores permiten
eliminar el peligro de contaminación de los lodos.
 Ese lodo seco y ya digerido puede servir como un acondicionador de suelos
aunque esta técnica requiere de asesoría especial para evitar resultados
negativos a su aplicación.

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