1) Un comentario hacia la obra la “obertura del festival académico” data en su

estilo jovial, me gusto la combinación de

los instrumentos de cuerda, viento, etc.
Que estaban al compás del director. Supe
después de mi informe que se trataba de la
unión de músicas clásicas de universidades
europeas del siglo XVIII, que en muchos
casos sirvieron de himnos y sus estrofas
reflejaban ideologías políticas y un tanto
religiosos. De esta forma el poder de la
música y sus tiempos son precisos a pesar
de la unión de 4 melodías de canciones
juveniles cantadas en tabernas por autores
desconocidos, que repercuten en la
historia. Me asombro de la capacidad de
Johannes Brahms para crear, unir
majestuosa obra, ejemplo claro de que él
no llevo estudios superiores, pero fue
superior en sus obras que muchos.
Reconocido por grandes universidades
como Cambridge, y Alemania. Así como su
gran sentido de gratitud hacia aquellos que dieron su doctorado muestra por
éstas grandes obras acompañada por la obertura Trágica. Dos obras
presentadas el mismo día.
Éstas tienden a durar 10 minutos, sin embargo, en el teatro Upao, duro un poco
más de 25 minutos, motivo por lo cual infiero que se han hecho arreglos a la
original, sin acentuarse el ritmo, nitidez y emoción caracterizada.

2) El Concierto para violín es uno de los pocos del siglo XVIII tan grandiosos como
el de Max Bruch. Junto con grandes autores alemanes como Beethoven,
Brahms, etc. Y da más realce porque Bruch era experto en violín y fue hecha
para violín, excluyendo piano u otros instrumentos. Pero, su obra tenía algo
más que ello, algunos críticos
consideran al concierto de
realce romántico,
auténticamente delicioso.
Algunos catalogan su preludio
formidable. El movimiento del
violín es bellísimo, seguramente
el más lírico y emociónate de
toda la producción romántica
nos comentan. Ni
Mendelssohn, ni Tchaikowsky
llegaron, en los movimientos
 lentos, a la calidez excepcional que alcanzó Bruch en el suyo, y éste es el motivo
principal de la justa fama de este concierto, son las posturas de muchos
directores.
Algo más es su allegro, y energético acompañado de grandes dosis de energía
en la suavidad y percusión de la llana melodía.
Es diferente, pues empieza de golpe y con energía, seguido de una suavidad
romántica.

3) La Rhapsody in blue es una obra de George Gershwin llamado el Beethoven del

jazz. Siendo una mezcla de música popular y clásica con carácter afro
americano y el jazz, repercutió toda américa. Ésta obra llevan los clarinetes, el
piano, al compás de la jazzística. Parece un tema de música clásica, pero sin un
ritmo uniforme como un poco variado de sentido alegre y lento. Es interesante
cómo se encontró el sonido. El autor comenta que “…fue dentro del tren, con
su ritmo de acero y su ruido estrepitoso, cuando de repente oí, y hasta vi sobre
el papel, la rapsodia completa de principio a fin”.
Su propio nombre caracteriza el eco de la obra. Para algunos autores su
significado representa peculiarmente a tres términos: “azul”, “triste,
melancólico, deprimido”, “miembro de un partido demócrata”.
Algunos compositores nos dicen que no hay un verdadero jazz en la partitura,
sino una especie de elegante y concisa yuxtaposición de fórmulas pianísticas
nacidas de música popular americana y de un tratamiento orquestal que
rehabilita las variedades. Sin embargo, el estilo artístico de la obra diferencia lo
planteado y afirma la melodía lenta y letra rustica de su ritmo.