ANTROPOLOGÍA FILOSÓFICO TEOLOGÍA

TEMA:
De dónde vengo?
Cuál es mi presente
A dónde voy?
ALUMNO:
MARIO CUSI
GRUPO:
26
PERIODO:
54

QUITO - ECUADOR
Introducción
Existen muchas cosas en el universo que nosotros los humanos, las personas aún no
logramos comprender, o explicar y buscamos de una o cualquier manera darle una
explicación, una respuesta con sentido, coherente y creíble a muchas preguntas sin
entender. Pero aun así, aun encontrando una explicación a esas cosas que sobrepasan
nuestros límites, solo son hipótesis, no sabemos si eso que intentamos explicar, así se
demuestre de alguna forma, talvez no sirva de otra forma y volvemos al inicio en un
círculo vicioso hasta el punto de posiblemente llegara la locura, tratando de resolver
preguntas que son de interés, pero no afectan en nada si las sabemos o no hasta que las
analizamos. Una de esas preguntas que el hombre ha querido responderse durante años,
y que aún no se sabe cuál será la. Respuesta correcta a tal pregunta tan universal.
Sócrates dijo de manera magistral que una vida sin búsqueda no es digna de ser vivida;
pero si uno no deja de analizar su vida, no vivirá en absoluto. El examen de conciencia
debe hacerse, por tanto, sólo en determinados momentos, reservándonos quizás un
último análisis general para el final demuestra vida. ¿Quién soy yo?... ¿quién eres tú?...
¿quiénes somos nosotros?...Una pregunta que sigo formulándome conforme pasan los
días, vivimos en un mismo mundo formado por países, estados, ciudades, pueblos,
calles, avenidas, colonias o barrios, casas, lotes; hacemos cosas parecidas, muchos de
nosotros tenemos las mismas características físicas, algunos altos, algunos bajos, otros
más sonrientes que otros, más gordos y otros no, diferentes miradas, sentimientos
similares.
(Torres, 2011)
Nuestra forma de pensar para no complicar tanto las cosas. ¿Quién soy? Una pregunta
tan profunda porque desde que recibimos el don de la conciencia, del sentido del yo, es
del mayor interés para nosotros. Desde el origen de pensar en el ser humano nos hemos
hecho esta pregunta y ha sido motivo de nuestras reflexiones. ¿Qué puede ser más
importante que entender la naturaleza del ser? Nada tiene mayor profundidad.
Conocer mejor nuestro ser, carácter, fortalezas, oportunidades, actitudes, valores, gustos
y disgustos, en pocas palabras, conocerse a sí mismo, significa construir sentidos acerca
de nosotros mismos, de las demás personas y del mundo en que vivimos.
Conocerse, tiene que ver con saber qué se quiere en la vida e identificar los recursos
personales con que se cuenta para lograrlo, es determinar cuáles son los aspectos que le
permiten a una persona tener claridad sobre el proyecto vital que quiere emprender y
desarrollar las competencias que necesita para lograrlo. Conocerse es el soporte y el
motor de la identidad y de la capacidad de comportarse con autonomía.
Conocerse no es sólo mirar hacia dentro de sí, también es saber con qué fuentes sociales
de afecto, ejemplo, apoyo o reconocimiento se cuenta tanto en los tiempos prósperos
como en los adversos. Del autoconocimiento parten los siguientes conceptos que van a
ir fortaleciendo el autoestima, estos son el auto concepto; lo que creemos de nosotros
mismos, la autoimagen cómo nos percibimos, nuestro espejo interno; la aceptación que
es el admitir y reconocer lo que somos y el auto respeto que es el atender y satisfacer
nuestras propias necesidades y valores.
De esto último es que cobra una gran importancia el conocerse, de tal manera que con
gozo y satisfacción obremos en nuestra vida, siempre dando de nosotros lo mejor y
esforzándonos por manejar adecuadamente aquellas características que no ponen a
nuestro favor el logro de nuestras metas
(Stoppa, 2010)
De dónde vengo?
Soy Mario Cusi un joven de 23 años con grandes aspiraciones metas deseos y anhelos
en la vida.
Vengo de un hogar de 4 integrantes incluyéndome, donde yo soy el hermano mayor,
poseo un padre y una madre maravillosos ambos grandes personas muy trabajadores y
sobre todo me han enseñado muchas cosas valiosas que no se pueden aprender en una
escuela, universidad o colegio, me han enseñado valores, disciplina y responsabilidad,
me han proporcionado respeto hacia la vida, los animales y amor hacia los deportes.
Por supuesto han sabido infundir en mí el amor hacia las artes fue ahí cuando desde la
edad de los 12 años comencé a tomar clases de violín y estuve introducido en el mundo
artístico pertenecí a varios grupos folkloricos como también de género rock fue una
gran etapa que me ayudo a vencer grandes miedos y por supuesto superarme a mí
mismo, de una u otro forma debido a que era una persona bastante insegura de mí no me
sentía merecedor de los logros o premios alcanzados, fue una terapia bastante buena.
Tuve la oportunidad de ir de misiones un par de veces , compartir tiempo momento y
conocimientos con las personas que más lo necesitan pude ayudarlos y servirlos en las
cosas que podía, fue una experiencia bastante amena de igual forma me hizo madurar en
ciertos aspectos de la vida para mi corta edad, había vivido cosas que otros jóvenes de
mi edad no la vivían, Pertenecí a los grupos juveniles aproximadamente unos 3 años de
los cuales igual soy muy agradecido , me ayudaron a crecer como persona y de igual
manera a relacionarme con la gente de todas las edades.

Vengo de un pasado generalmente feliz en el cual e tenido que superar momentos

difíciles que han supuesto grandes esfuerzos, pero también momentos maravillosos