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CLASE NRO 8: FE PARA VIVIR TU MISION

“Toda obra del Señor tiene un propósito” Prov. 16:4

Un reloj que ya no da la hora no sirve, esta averiado

…Tal vez sea igual con las personas. Si perdemos


nuestro propósito, no servimos, estamos
“averiados”…

Las maquinas jamás vienen con piezas extras, así


que, si todo el mundo es una enorme maquina, no
puedo ser una pieza extra, debo estar aquí por una
razón.

¿Cual será tu propósito? ¿Ya lo descubriste? Si no.


Estas “averiado” y al mundo le falta una pieza
importantísima para que pueda funcionar
adecuadamente.

¿COMO SE DESCUBRE EL PROPOSITO?

“TAL VEZ SI HUBIERA CONOCIDO A MI PADRE LO TENDRIA”….

¿Haz conocido ya al PADRE? ¿Has tenido un encuentro PERSONAL e INTIMO


con tu PAPA DIOS? ¿Has conocido ya el ABRAZO DEL PADRE? Hasta que no
tengas ese encuentro personal con el Abrazo del Padre y El con ese abrazo te
restaure, sane tus heridas internas, no podrás conocer ni cumplir el GRAN
propósito que El tiene para TI en tu vida.

REQUISITO PREVIO: SANAR TU CORAZON: SER LIBRE DE LA CAUTIVIDAD

“Cuando Yavéh hiciere volver de la cautividad a Sión, (sepulcro) seremos como


los que sueñan. Entonces nuestra boca se llenara de risa y nuestra lengua de
alabanza. Entonces dirán entre las naciones: grandes cosas ha hecho Yaveh con
estos. Grandes cosas ha hecho Yaveh con nosotros. Estaremos alegres.
Haznos volver de la cautividad Yaveh. Los que sembraron con lagrimas con
regocijo segarán” Salmo 126: 1 (RV 60)

No podemos cumplir con los sueños de Dios si somos cautivos,


prisioneros.
Primero Dios tiene que librarnos de la cautividad y hará grandes cosas con
nosotros y entonces estaremos alegres, conoceremos el gozo de Dios.

SANIDAD INTERIOR

Génesis 27: Esaú era el primogénito y preferido de Isaac, estando ya viejo y casi
ciego llamo a su Esaú (velludo, el que actúa o termina) para darle la bendición,

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pero Jacob (suplantador) se puso sus ropas se forro los brazos con piel y le robó
la bendición, cuando Esaú se enteró quiso matarlo y Jacob tuvo que huir
A veces algunos padres
“abandonan” a sus hijos, por que
prefieren a uno mas que a otros.
Isaac prefería a Esaú porque era
velludo, cazador. Jacob era
lampiño, tal vez no tan “macho”
como Esaú. Algunos padres o
madres prefieren a una hija por ser
mas bonita que la otra, o a un hijo
por ser mas “inteligente” que el otro.
A veces algunos hermanos odian a
sus propios hermanos porque no
son los preferidos de sus padres.
Como le paso a Jacob que era
odiado por Esaú. O a José que era odiado por sus hermanos. (Gen. 37)

Esto ocasiona heridas en los hijos y heridas en nuestra relación con Dios porque
si no tenemos una imagen SANA de un Padre, tendremos la misma imagen
malsana de Dios. Si hemos tenido un Padre muy critico pensaremos que Dios es
muy critico, si hemos tenido un padre “abandónico” pensaremos que Dios
también nos abandona y las personas también.

Dios quiere restaurar nuestra relación con El y al restaurar nuestra relación con
EL, restaura las heridas que nos ocasionaron las malas relaciones de nuestra
vida. Y también así restaura nuestras relaciones actuales. Solo entonces podrás
vivir con GOZO, ANIMO Y ESPERANZA.

Las heridas se ocasionan por:

a) Abandono físico:
Nadie estuvo ahí para satisfacer nuestras necesidades físicas (alimento,
comida, abrigo, etc.), por causa de ausencia, (mucho trabajo) abuso,
adicciones. Padres que nos descuidan físicamente, no nos alimentan o visten
bien, no sanan nuestras enfermedades, nos hacen trabajar de niños,
agresiones físicas, violaciones.

Esto origina HERIDAS FISICAS: enfermedades, descuido de la salud, de la


limpieza, de la imagen, miedo y problemas de tipo sexual, etc.

b) Abandono mental:
Nadie estuvo ahí para satisfacer nuestras necesidades mentales. Para
responder nuestras preguntas, dudas, inquietudes, equivocaciones. Nuestros

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padres descuidan nuestra educación mental, nos lastiman con palabras
hirientes.

Esto origina HERIDAS MENTALES: Baja autoestima, miedos, temores,


autoconceptos negativos, represiones, problemas mentales, “no puedos”
“soy” negativos, (tonto, inútil, etc.)

c) Abandono Social:
Nadie estuvo ahí para satisfacer nuestras
necesidades sociales. Para enseñarnos
como desarrollar buenas relaciones con
otros. Sobreprotección.

Esto origina Heridas Sociales: malas


relaciones con los demás, abusar o ser
víctima de abuso de los demás. Timidez,
miedo social. Agresividad.

d) Abandono Emocional:
Nadie estuvo ahí para satisfacer nuestras
necesidades emocionales. Escucharnos,
entendernos, darnos afecto, cariño, amor, aceptación, caricias. Nos hieren
emocionalmente, nos rompen el corazón. Traiciones, Infidelidades,
Preferencias, comparaciones.

Esto origina Heridas Emocionales: Ansiedad, angustia, miedo, depresión,


resentimiento, debilidad o dureza de corazón.

e) Abandono Espiritual:
Nadie estuvo ahí para satisfacer nuestras necesidades espirituales. Nos dan
una religión de miedo, obediencia, temor, ritos, pero no conocemos a Dios, no
tenemos una RELACION INTIMA con El.

Esto origina heridas espirituales: Pecado, resentimiento con Dios, vicios,


muerte espiritual, vacío, sensación de “Falta de algo”, infelicidad.

¿QUE HACER?

Salmo 157: 3 “El sana los corazones destrozados y venda sus heridas”

1. CREER QUE JESÚS VINO A SANARTE Y PUEDE SANARTE: Isaias 61:

1.El Espíritu del Señor está sobre mí! sepan que Yavé me ha ungido. Me ha
enviado con un buen mensaje para los humildes, para sanar los corazones
heridos, para anunciar a los desterrados su liberación, y a los presos su

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vuelta a la luz. 2.Para publicar un año feliz lleno de los favores de Yavé, y el
día del desquite de nuestro Dios. Me envió para consolar a los que lloran
3.y darles a todos los afligidos de Sión (sepulcro) una corona en vez de
ceniza, el aceite de los días alegres, en lugar de ropa de luto, cantos de
felicidad, en vez de pesimismo. Les pondrán el sobrenombre de «Encinas
de Justicia», «los que Yavé plantó para su gloria.» 4.Reconstruirán las viejas
ruinas, levantarán de nuevo los edificios caídos del pasado, restaurarán las
ciudades en ruinas, las construcciones que permanecen por siglos
destruidas.

2. CONFRONTARTE CON LA REALIDAD: (“La VERDAD os hará libres” Jn.


8:32)

Nadie puede ser sanado de una enfermedad de la cual no es consciente que


tiene. Nadie puede anhelar medicina cuando no sabe que esta enfermo. Nadie
va a anhelar libertad a menos que sepa reconocer que esta esclavo. (De algún
vicio, pecado, miedo, relación, mal habito, etc.) ¡RECONOCE TU DEBILIDAD!

Dios usa dos medios para confrontarte con tu realidad o PROCESARTE:

a) Circunstancias:

Cuando tu matrimonio esta


pasando por una crisis.
Cuando las cosas te salen
mal, cuando tienes una
enfermedad NO te enojes con
el Padre ni con las
circunstancias comienza a
preguntar al Señor ¿Que
quieres enseñarme? Si
maldices la circunstancia te
quedas atascado en el lodo, si aprovechas tu circunstancia para
preguntarle a Dios saldrás delante y bendecido porque no importa la
circunstancia si Ud. aprende A SACAR UNA LECCION DE ALLI Dios lo
saca adelante a un mejor momento en su vida. Las circunstancias te
pueden aplastar (volverte amargado o deprimido) o te pueden levantar a un
Mejor nivel de madurez, optimismo y servicio a los demás. La diferencia es
la ACTITUD con la que enfrentas las circunstancias

No digas “Por que a mi” sino ¿Para que?

b) Personas:

1. Enemigos:

Por ejemplo un hijo rebelde te enseña paciencia. Un jefe gritón te enseña


tolerancia. Un padre “abandónico” te enseña a depender de Dios.
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2. Amigos:
Que te dicen la verdad dura aunque te duela. Cada uno cosecha lo que
siembra. La cosecha que recoges es la forma como Dios te confronta
para que te des cuenta donde estas fallando y la necesidad tan grande
que tienes de cambiar tu, en vez de andar queriendo cambiar a los
demás. Jacob engaño a su Padre y después el fue engañado por su
suegro Labán, que le hizo casarse con Lea y no con Raquel a quien el
amaba. (Génesis 29)

Tu no puedes esperar cambios en


tu vida haciendo lo mismo. Eso es
lo que enseña la confrontación de
Dios. Es cuando sientes tanto dolor
que se repite en tu vida que dices “YO
estoy mal”, necesito cambiar de
dirección. Si quieres que haya
cambios en tu vida, toma decisiones y
haz algo distinto. Debes cambiar,
debes dejar de hacer ciertas cosas,
debes cambiar ciertos defectos, malos
hábitos, pecados, fallas de carácter,
formas de reaccionar, etc.

El objetivo de la confrontación de Dios es que TE ARREPIENTAS. Arrepentirse no


es solo llorar y golpearse el pecho, NO. Arrepentirse viene de la palabra
“metanoia” que significa “cambio de idea que lleva a un cambio en la conducta”.
Es un CAMBIO EN TU MODO DE PENSAR y por ello, empezar a cambiar tu
forma de actuar. El dolor provoca un cambio de dirección en algunos, los que se
arrepienten. En otros dureza de corazón y depresión.

David había caído en adulterio y había mandado matar al esposo de la mujer. Era
adúltero y asesino (2 Sam. 11) y el pecado “secaba sus huesos” (Salmo 32:3)

2 Sam 12:

Natán confronta a David de su pecado (El no se daba cuenta). Natán le cuenta a


David la historia de un rico que tenia muchas ovejas y recibe una visita entonces
roba la oveja de un hombre pobre y la prepara. David se enojo ¿Quién es ese
desgraciado? ¡Merece la muerte!... ¡TU!. le dice Natán. ¡Le robaste la mujer a tu
soldado y lo mataste!! Hasta que no te des cuenta como VE DIOS tu pecado no
cambiaras, Dios se DUELE de tu pecado, porque TE NECESITA.

Que fácil es ver los defectos y errores de los demás y que difícil es ver nuestros
propios defectos. Hasta que no veas tus defectos y pecados y te arrepientas

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habrá dolor, sufrimiento en tu vida y Dios no podrá usarte para su GRAN
PROPOSITO.

Dios necesita que confieses tu pecado, que lo reconozcas, que dejes de echar la
culpa o encallecer tu conciencia para cambiar tu vida. “Te confesé mi pecado, no
escondí mi culpa. Yo dije: Ante el Señor confesaré mi falta” Y TU perdonaste mi
pecado, condonaste mi deuda” (Salmo 32: 5)
El objetivo de la confrontación es que te
canses de tu confianza en tu carne y sepas
que solo en Dios puedes encontrar la salida.
Es para que aprendas a NECESITAR y
depender de Dios, no en tus fuerzas. Los
seres humanos cambiamos a fuerza de
incomodidad.

Tu no estas dispuesto a cambiar a menos


que estés dispuesto a admitir tu pecado, tus
errores. Las ataduras con las que tu peleas
no se van a menos que tu traigas a la luz, lo
que el enemigo forjó en secreto.

Dios le pregunta a Jacob ¿Cómo te llamas?


(Gen 32: 28) Y hasta que no tengas las
agallas de decir quien eres, no vas a salir de
ahí y Jacob dice “suplantador”.

En la intimidad con Dios debes reconocer tu pecado, tus hipocresías, tus “echar
la culpa”. Este soy yo “un pecador, un débil, un hipócrita”, y odio esto, y entonces
Dios le dice “Te llamabas Jacob” pero ahora te llamas Israel, (Quien reina con
Dios) te cambia de nombre.

La transparencia de la confesión tiene el poder de levantarte de donde estas a un


nuevo lugar en Dios. Ya no es el hipócrita, el que finge, el que peca, ahora REINA
sobre el pecado, reina sobre sus debilidades, sobre sus vicios, sobre sus malos
hábitos, sobre el temor, porque ahora ya no confía en sus fuerzas sino en las
fuerzas de Dios.

3. DESATARNOS DEL PASADO:

Juan 11: 23. Jesús le dijo: «Tu hermano resucitará.» 24. Marta respondió:
«Ya sé que será resucitado en la resurrección de los muertos, en el último
día.» 25. Le dijo Jesús: «Yo soy la resurrección (y la vida). El que cree en
mí, aunque muera, vivirá. 26. ¿Crees esto?»…38. Jesús, se acercó al
sepulcro. Era una cueva cerrada con una piedra. 39. Jesús ordenó:
«Quiten la piedra.» Marta, le dijo: «Señor, ya tiene mal olor, pues lleva cuatro
días.» 40. Jesús le respondió: «¿No te he dicho que si crees verás la gloria
de Dios?» 41. Y quitaron la piedra. Jesús levantó los ojos al cielo y
exclamó: «Te doy gracias, Padre, porque me has escuchado. 43. Al decir
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esto, gritó con fuerte voz: «¡Lázaro, sal fuera!» 44. Y salió el muerto.
Tenía las manos y los pies atados con vendas y la cabeza cubierta con un
velo. Jesús les dijo: «Desátenlo y déjenlo caminar.»

Cuando Jesús nos resucita a una vida nueva tenemos que DESATAR las
cosas que nos atan al pasado sino NUNCA podremos cumplir el propósito
grande y hermoso que Dios tiene para nuestras vidas.
EL PERDON: Gen 32 y 33

“Jacob regresa a su patria (de la que


había huido porque su hermano quería
matarlo) después de muchos años y
manda a avisar a su hermano que
regresaba,

Entonces Esaú va a su encuentro con


400 hombres ¡Para matarlo!. Es
entonces que Jacob tiene ese
encuentro con Dios, le revela su
pecado, “Soy suplantador” Dios le
cambia el nombre y Jacob le pide a
Dios “Yo no soy digno de todos los favores que me has hecho, porque al
partir solo tenia mi bastón y ahora tengo mas que suficiente, líbrame de las
manos de mi hermano” Fue enviando a su hermano muchos regalos mientras
el iba a su encuentro, entonces cuando se encontraron …”Esaú corrió al
encuentro de su hermano y lo abrazo, echándose sobre su cuello lo beso y
los dos rompieron a llorar”.

Nadie puede recibir lo nuevo que Dios tiene a menos que suelte el pasado.
Necesitamos resolver las cosas del pasado que no queremos resolver porque
es mas fácil obviarlas. Para Jacob eso significaba el perdón de su hermano.

El que no perdona es como una barco atado al muelle, no puede avanzar. Si


sientes que en tu vida, por mas que te esfuerzas, no avanzas, es porque algo
te ata al pasado, necesitas desatarte, necesitas perdonar.

Algunos hemos vivido cosas tan dolorosas en la niñez que hasta las
olvidamos a propósito. Dios no quiere que vuelvas a esas cosas, pero Dios si
quiere que arregles lo que esta de tu parte arreglar.

Tu parte es per-donar así como Dios te perdonó. Nunca será justo que
perdones. Así como no fue justo que Dios te perdone a ti.

¿POR QUE SE NOS HACE DIFÍCIL PER-DONAR?

Por falsas ideas de lo que es el per-don. El prefijo “per” significa grande y


“don” es un regalo. El per-don es el regalo mas grande que podemos dar NO

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al otro sino a mi mismo porque cuando guardo rencor me hago daño a mi
mismo y cuando perdono el mayor beneficiado soy YO mismo.

El perdonar NO es darle permiso al otro para que me vuelva a hacer daño y


no necesariamente implica regresar con la persona que me daño. Si el
perdón fuera un regalo al otro si sería así, pero si es un regalo a mi, no es
necesario.

El que no perdona sigue atado al pasado. No puede disfrutar plenamente el


presente. Es necesario desatarnos del pasado para poder cumplir el
propósito de Dios para nosotros.

Para perdonar tenemos que


CURAR LA HERIDA
EMOCIONAL. Los pasos
son:

1. Abrir la herida: recordar


lo que nos hicieron (eso
duele)

2. Sacar la “pus emocional”


(sacar afuera las
emociones reprimidas de
dolor, cólera, amargura,
lagrimas, gritos, reclamos nunca dichos)

3. Desinfectar la herida: perdonar de corazón (no se puede si no se ha


hecho el paso anterior)

4. Reconocer que a pesar de todo apreciamos, amamos o sentimos


compasión por esa persona (solo las personas que amamos mucho
pueden herirnos mucho).

5. Pídele a Jesús que te ayude a perdonar como EL te perdonó a ti y que


limpie y sane tus heridas para vivir la VIDA PLENA que El quiere para ti.

Isaías 43:18 : “No te acuerdes mas de las cosas pasadas, ni traigas a tu


memoria las cosas antiguas. PUES YO VOY A REALIZAR una cosa nueva
que ya aparece ¿No la notan? Si trazare una ruta en las soledades y pondré
praderas en el desierto” Cuando no perdonas te sientes muy solo a pesar de
estar con otros. Dios quiere restaurarte, quiere sanar tus heridas.

Fil 3: 12. : “No creo haber conseguido ya la meta ni me considero un


«perfecto», sino que prosigo mi carrera hasta conquistar, puesto que ya he
sido conquistado por Cristo. 13.No, hermanos, yo no me creo todavía
calificado, pero para mí ahora sólo vale lo que está adelante, y olvidando lo
que dejé atrás, 14.corro hacia la meta, con los ojos puestos en el premio

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de la vocación celestial, quiero decir, de la llamada de Dios en Cristo
Jesús”.

Cuando perdonas de corazón. Ya no piensas en el pasado, estas “desatado”,


ahora puedes mirar adelante y cumplir con la GRAN vocación y el GRAN
llamado de Dios para TI, Porque Dios tiene GRANDES PLANES para tu vida.
(Circulo de Estudios Bíblicos Parroquia “Sagrado Corazón” / Miguel Saravia)

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