2. Tratan a los alumnos, por su nombre o apellido, jamás con sobrenombres, evitando hacer comentarios humillantes, el uso de ironías y las comparaciones entre compañeros. 3. Escuchan con atención, a los alumnos. 4. Son justos y comprometidos en su trabajo diario. 5. Empatizan con los alumnos, contestan sus preguntas. 6. Valoran los aportes de los alumnos, resaltando las características positivas del curso, sus logros, avances y reconocen esfuerzos. 7. Destacan y exponen los trabajos de los estudiantes, comunicando a los padres los motivos por los cuales deben sentirse orgullosos de ellos, incentivándolos a emprender actividades constructivas como curso. 8. Promueven el buen trato entre los estudiantes, corrigendo las faltas de respeto, indicándoles por qué está mal efectuarlas. 9. Asignan actividades exigentes pero alcanzables, animan a los alumnos a perseverar ante las dificultades, hacen participar a todos por igual y no solo a aquellos alumnos más avanzados o extrovertidos. 10. Utilizan estrategias didácticas que favorecen que los estudiantes se involucren con el aprendizaje.