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Mercedes Prieto
Directora General de Apoyo Jurídico
Joel Espinoza
Director General de Actuación Procesal
Alejandro Castillo
Director General Contra la Delincuencia Organizada
Arbitraje: Los artículos publicados en la Revista del Ministerio Público son arbitrados mediante
el Sistema Doble Ciego.
El Ministerio Público agradece a los autores de los trabajos publicados su colaboración; sin
embargo, las opiniones y conclusiones expuestas no constituyen doctrina oficial de la Institución.
Contenido
EDITORIAL 5
PRESENTACIÓN 9
EL ÓRGANO DE INVESTIGACIONES 39
CRIMINALÍSTICAS EN EL CONTEXTO DE LAS
CAMPAÑAS SECURITARIAS
Keymer Ávila
Apéndice 205
Normas apa para referencias
y citas bibliográficas
Editorial
La edición de esta nueva Revista del Ministerio Público, como órgano
de difusión del conocimiento también abarca en esta oportunidad temas de
contenido de gran importancia en el ámbito de la investigación penal. Delitos a
los cuales el Ministerio Público al tener conocimiento de su ocurrencia intenta
las acciones pertinentes, al ordenar y dirigir la investigación penal respectiva
en todo el territorio nacional, atendiendo al mandato de la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela y la propia Ley Orgánica del Ministerio
Público, como integrante del Sistema de Justicia y siempre ceñido a sus
principios rectores como lo son: Legalidad, Independencia y Autonomía, Deber
de Colaboración, Unidad de Criterio y de Actuación, Representación Judicial,
Órgano Jerarquizado, Control de Gestión, Objetividad, Transparencia,
Probidad, Responsabilidad, Formalidades Esenciales, Celeridad y Gratuidad.
Reviste especial significación los delitos que se analizan en esta edición, que
algunos de ellos han venido incrementándose de la mano de la modernidad y de
la expansión de las tecnologías, como por ejemplo los delitos informáticos, los
cuales están establecidos en la Ley Contra los Delitos Informáticos y Análisis
del Delito de Acceso Indebido; la cual vino a llenar un vacío con respecto a
dicho tipo de transgresiones caracterizadas por la violación y acceso indebido
de instrumentos bancarios y de otros medios utilizados por las personas y cuya
sustracción se había convertido en un azote para la colectividad.
Otro de esos delitos que recientemente fue noticia en todos los medios de
comunicación nacionales radica en la estafa inmobiliaria, flagelo perpetrado
por empresas constructoras, reales algunas y otras de maletín que ofrecían
apartamentos y casas al público, que cobraban dinero en exceso y exigían
pagos indebidos, con la consecuencia de dejar a miles de personas al borde de
la miseria y sin que se les cumplirá el cometido de entregarles el inmueble de
referencia.
Los documentos falsos portados por algunas personas también son
analizados en estas páginas, que son aquellas falsificaciones que pretenden
presentar como documentos de identidad, que muchas veces y con la ayuda
de la tecnología, logran presentar una apariencia casi idéntica a los expedidos
por las instituciones competentes; obviamente son delitos que también son
penados por la ley.
This paper deals with the study of the content and extent of control of the
constitutionality of criminal laws. Here, we analyze the concept, budgeting
and control classes constitutional laws. They also set out what the public bodies
to be exercised, the method by which such control is implemented, as well as
some criteria to be taken into account when analyzing the constitutionality of
a law, which in this article are represented by criminal principles.
2 Igualmente, ver numerales 1, 2 y 3 del artículo 25 de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo
de Justicia.
5 En este mismo sentido, véase Humberto Briceño León: “La acción de inconstitucionalidad en
Venezuela”. Caracas. Editorial Jurídica Venezolana. 1989, p. 127.
1. El principio de legalidad
Un primer principio penal útil al momento del control de la
constitucionalidad de la ley, es el de legalidad. En líneas generales, el principio
de legalidad funge como uno de los pilares fundamentales para el efectivo
mantenimiento del Estado de Derecho6. A mayor abundamiento, esta
institución constituye la concreción de varios aspectos del Estado de Derecho
en el ámbito del Derecho Penal, y el cual se vincula con el imperio de la ley
como presupuesto de la actuación del Estado sobre los bienes jurídicos de los
ciudadanos, y con el derecho de éstos a la seguridad jurídica y a la interdicción
de la arbitrariedad7. Su configuración formal básica se traduce en el aforismo
nullum crimen, nulla poena, nulla mensura sine lege praevia, scripta, stricta et
certa.
En el ámbito penal, este principio general se cristaliza en el numeral 6
del artículo 49 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela,
el cual dispone que “ninguna persona podrá ser sancionada por actos u
omisiones que no fueren previstos como delitos, faltas o infracciones en leyes
preexistentes”.
Del principio de legalidad se derivan, a su vez, varias garantías, que son las
siguientes: a) Reserva legal; b) Irretroactividad; y c) Taxatividad.
A) Reserva legal
Esta primera garantía se traduce en que todo el régimen de los delitos y
las penas, debe estar regulado necesaria y únicamente en los actos que por
excelencia son dictados por el órgano legislativo nacional, a saber, en las
leyes. Así, de conformidad con este principio, el Poder Legislativo (Asamblea
Nacional) es el único órgano del Poder Público que se encuentra facultado y
autorizado para legislar en materia penal (Párraga et al., 2008: 141).
Tal como lo ha señalado la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de
Justicia en su sentencia N° 2.338, del 21 de noviembre de 2001, con ponencia
del Magistrado Antonio García García, el principio de reserva legal viene
dado por la consagración a nivel constitucional de determinadas materias que,
debido a la importancia jurídica y política que tienen asignadas, sólo pueden
B) Irretroactividad
Esta segunda garantía implica, en líneas generales, que la ley penal no
puede ser aplicada a hechos anteriores a su promulgación, todo lo cual se
concreta en la máxima tempus regit actum. En este orden de ideas, la creación
de una nueva figura delictiva por la ley penal exterioriza un desvalor sobre
los hechos que se definen, pero tal desvalor no puede recaer sobre conductas
8 Criterio reiterado, entre otras, en las sentencias 537, del 15 de abril de 2005; 1.676, del 3 de
agosto de 2007; 1.744, del 9 de agosto de 2007; 1.120, del 10 de julio de 2008; y 490, del 12
de abril de 2011, todas de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia.
1. Principio de culpabilidad
El principio de culpabilidad (nullum crimen sine culpa) exige que a la
persona pasible de sanción se le pueda reprochar personalmente la realización
del injusto (Rodríguez, 2002: 83).
En otras palabras, este principio, entendido como un límite al poder
punitivo, exige, como presupuesto de la pena, que pueda culparse a quien
la sufra del hecho que la motiva, lo cual se traduce en la necesidad de que el
delito pertenezca a su autor no sólo material y subjetivamente, sino también
como producto de una racionalidad normal que permita verlo como obra de
un ser suficientemente responsable.
Del contenido del principio de culpabilidad se derivan las siguientes
garantías: a) La intrascendencia de la pena; b) La responsabilidad por el hecho;
2. Principio de humanidad
Este principio tiene como basamento la dignidad del individuo, y
constituye un escudo contra las penas crueles, brutales e inhumanas (pena de
muerte, lapidación, amputación de miembros, marcas en el cuerpo, torturas,
penas perpetuas, etc.). Su materialización en la actualidad puede palparse en
la sustitución de penas privativas de libertad por otras penas menos lesivas,
como la multa o el trabajo en beneficio de la comunidad. De igual forma,
este principio se aprecia en la tendencia internacional a la despenalización, así
como también en la atenuación paulatina de las penas asignadas a los delitos.
La base constitucional de este principio se encuentra en el artículo 43 de
la Constitución, en el cual se prohíbe expresamente el establecimiento legal
y la aplicación pena de muerte. Asimismo, este principio también encuentra
reconocido en el numeral 3 del artículo 44 eiusdem, según el cual están
prohibidas las penas perpetuas y las superiores a treinta años; igualmente,
13 En este sentido, ver la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes.
14 Tribunal Supremo de Justicia. Sala Constitucional. Sentencia N°1.744, del 9 de agosto de
2007. Expediente N°04-2149.
Conclusiones
Mir Puig, Santiago (1998). Derecho Penal. Parte General. 5ª edición. Barce-
lona. Editorial Reppertor.
Jurisprudenciales
Tribunal Supremo de Justicia. Sala Constitucional. Sentencia N° 2.338, del
21 de noviembre de 2001. Expediente N° 00-1455.
3 http://www.eluniversal.com/sucesos/120622/funcionarios-del-cicpc-mataron-a-un-
companero-en-una-alcabala-ilegal.
4 Sobre el concepto de crimen organizado ver el interesante trabajo de Zaffaroni (1995),
intitulado de “El crimen organizado: una categoría frustrada”. Facultad de Derecho, Universidad
Nacional de Colombia.
5 En este sentido Recasens afirma que: “el enfoque policial resulta incompleto en la actualidad
para comprender la temática de la seguridad. Es preciso «descentrar» a la policía, para reubicarla
como uno más de los actores que giran alrededor del verdadero problema, que es el de la
seguridad y su evolución en el contexto de un mundo supuestamente globalizado” (2003:289).
6 Sobre cómo interpretar lo “urgente y necesario” ver las consideraciones sobre la decisión de
la Sala Constitucional 11-08-2011. Exp. 10-0028. “Facultades excepcionales de investigación
por necesidad y urgencia” de Borrego y Rosales (2012).
Los homicidios realizados por policías en ejercicio de sus funciones son ajus-
ticiamientos y no enfrentamientos (como suelen llamárseles), ya numerosa inves-
tigación empírica ha demostrado que la relación entre civiles y policías muertos
es bastante desigual (según Provea, la probabilidad de que muera un civil en un
choque armado es de 97,5, mientras que para los policías es de apenas 2,5; es de-
cir por cada policía muerto fallecen 39 civiles), lo que hace suponer que más que
enfrentamientos entre fuerzas equivalentes, se trata de un ejercicio asimétrico de la
fuerza, frecuentemente intencional por parte de la policía (Antillano,2007:36-37).
Esto no es un fenómeno reciente, data de al menos más de tres décadas, tal como
lo han demostrado trabajos realizados por Santos (1998:200-206), en los que el
aproximado de
aproximado de
funcionarios
funcionario
de casos por
víctimas por
Porcentaje
Porcentaje
Número de
funcionario
Promedio
Promedio
Casos de
víctimas
Número
9 No se incluyeron los casos de la DISIP (hoy SEBIN), cuerpo que cuenta con el menor número
de casos registrados, por no contar en el momento con el número de funcionarios que posee dicha
institución. En este sentido es necesario resaltar que el total definitivo de casos sería de 6.140.
[62] Revista del Ministerio Público// Revista Científica Arbitrada// V Etapa Nº 12
Para 2007, el CICPC tenía 5458 funcionarios policiales, y posee un
record de 1.315 casos de ajusticiamientos en los 7 años en estudio (21,4%
del total de casos). Al establecer la relación entre número de funcionarios y
número de casos de homicidio por organismo, el CICPC se ubica como el
cuerpo armado más letal del país, ya que teniendo el porcentaje más bajo de
funcionarios (5,1%), respecto a los demás cuerpos policiales del Estado, posee
el segundo lugar en cantidad de casos de ajusticiamientos (el primer lugar
lo tienen las policías estadales que los superan más de diez veces en número
de funcionarios). Presentando los índices más altos de casos y víctimas de
ajusticiamientos por funcionario policial, no sólo respecto a cada uno de los
otros cuerpos policiales, sino del promedio general de todas las instituciones
policiales.
Es importante señalar que esto no es algo nuevo o un fenómeno de “los
últimos años”, ya Rosa del Olmo (1990) en un estudio pionero realizado en
la década de los 80, colocaba entre los primeros lugares de los cuerpos que
provocaban la mayor cantidad de víctimas civiles a la –para ese entonces- PTJ
con un 23,8% de las víctimas, superada sólo por la Policía Metropolitana con
un 53% (Antillano, 2007)
• La integridad de la información
• La confidencialidad de la información
• La disponibilidad de la información
1 Vid. Algunas Consideraciones sobre la Ley Sobre los Delitos Informáticos. Pérez Dupuy,
María, 2005.
2 Vid. Derecho Informático. Téllez Valdez, Julio. México 2003.
Este delito que está en el Capítulo de los denominados “De los Delitos
Contra los Sistemas que utilizan Tecnologías de información”, no parece a
simple lectura tener ninguna dificultad en ser entendido, no obstante, sin
embargo, es un delito altamente punitivo, por cuando desde el punto de
vista de la Teoría del Delito puede ser clasificado como un delito de “mera
actividad”, que en sentido general no necesitan un resultado natural o afección
al bien jurídico tutelado ya que se castiga la sola puesta en peligro o la supuesta
puesta en peligro.
Es por ello, que quien accede indebidamente (sin estar autorizado) a
un sistema que utilice tecnologías de información, comete un acto típico,
antijurídico, culpable y punible penalmente por nuestra legislación, con penas
corporales y pecuniarias, que dependerá de las circunstancias agravantes y
atenuantes que estén involucradas, cuya motivación del sujeto activo pueda
ser para “espiar” o para cualquier otra conducta dolosa, sin dar cabida a
delitos culposos que pueden configurarse por desconocimiento o curiosidad
del sujeto activo. Pero esta situación no fue prevista en esta Ley, siendo que el
artículo 6 establece entre otros verbos rectores que se castigará igual al que solo
acceda o use sistemas de información sin la debida autorización o excediendo
la que tiene.
Este tipo penal se encuentra en la categoría de las conductas criminales que
se vale de las computadoras como método, medio o instrumento para cometer
el ilícito penal.
Asimismo es importante destacar que aún cuando se ha definido al
delincuente informático o como se denominaría bajo la perspectiva de la Teoría
del Delito el sujeto activo cuenta con una serie de características especiales que
no presentan el denominador común de los delincuentes, esto es, los sujetos
activos tienen habilidades para el manejo de los sistemas de informáticos y
generalmente por su situación laboral se encuentran en lugares estratégicos
Conclusiones
Es necesaria la revisión de la ley a los fines de adecuarla a los nuevos
adelantos en cuanto a la tecnología que se ha experimentado en la última
década después de su promulgación.
Asimismo, los verbos rectores del tipo descritos en el artículo 6 de la Ley
Especial Contra Delitos Informáticos, por cuanto no todos ellos revisten el
Téllez Valdez, Julio (2003) Derecho Informático. Editorial McGraw Hill, Mé-
xico.
Pérez Dupuy, María Inmaculada (2005) en Artículo titulado “Algunas consi-
deraciones sobre la parte especial del anteproyecto de Código Penal presen-
tado por el Tribunal Supremo de Justicia.
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (2000). Gaceta Ofi-
cial de la República Bolivariana de Venezuela N° 5.453, Extraordinario,
del 24 de marzo.
Ley Especial Contra los Delitos Informáticos (2001). Gaceta Oficial de la
República Bolivariana de Venezuela N° 37.313, del 30 de octubre.
Conclusiones
El delito consiste en el engaño o sorpresa de una persona, para su propio
perjuicio, realizado por el sujeto activo utilizando artificios u otros medios
capaces de abusar de la buena fe del sujeto pasivo. No se especifican los medios
por los cuales se realiza el engaño, la inducción al error o el negocio, así podrá
ser por vía telefónica, vía fax, a nivel personal, por medio de apoderado, entre
otras.
La estafa es la conducta engañosa, con ánimo de lucro injusto, propio o
ajeno, que habiendo determinado un error en una o varias personas, les induce
a realizar un acto de disposición; consecuencia del cual existe un perjuicio en
su patrimonio o en el de un tercero.
La estafa lesiona, al mismo tiempo; la buena fe o las relaciones fiduciarias
que surgen en el tráfico jurídico. Normalmente se espera que se cumplan las
obligaciones contraídas, pero si la sustancia o cantidad del objeto comprado
no corresponde a lo pactado, se frustra una legítima expectativa que tiene que
ser protegida de algún modo; para asegurar y garantizar un normal tráfico
económico.
Aunque la finalidad político-criminal perseguida con la tipificación del
delito de estafa sea ésta, el delito como tal se castiga en tanto lesiona un derecho
patrimonial individual. Este contenido patrimonial de la estafa no debe ser
olvidado, para no castigar indebidamente hechos que frustran expectativas
de comportamiento en el tráfico jurídico económico; pero que no producen
perjuicios económicos para nadie en concreto.
Para que haya estafa es necesario que se obtenga un beneficio de algún
bien mueble o de dinero en perjuicio ajeno, es decir, un perjuicio en contra
del patrimonio económico. La estafa se realiza en contra de un particular
cualquiera. La estafa enumera limitativamente las maniobras fraudulentas que
“Los delitos de peligro son los que sin ocasionar lesiones materiales, crean
una situación de peligro, una probabilidad – no simplemente posibilidad- de
que se produzca un daño”.
(Arteaga Sánchez, 2009:201) los puntualiza diciendo: “…que
esta clasificación hace referencia a la esencia misma del delito, cuyo
perfeccionamiento puede significar, o bien un daño o una lesión efectiva al
bien jurídico protegido, o solamente un peligro o un daño potencial para
dicho bien”.
Sujeto activo
La consideración del sujeto activo de las falsedades documentales tiene
relevancia bajo dos aspectos que denominaremos capacidad y legitimación. La
capacidad no representa ninguna singularidad con respecto a las falsedades;
pero en cambio tiene especial relieve la legitimación, ya que la posición del
autor de la falsedad, respecto del objeto, pudiera asumir el carácter de requisito
constitutivo, o bien modificatorio de la pena (en el caso de presentarse una
condición activa modificatoria). Pero en el tipo penal en análisis; el sujeto activo
puede ser cualquier persona, artículo 45 de la Ley Orgánica de Identificación:
El dolo
Para una noción cabal y posterior examen del tipo en estudio, veamos lo
que dice al respecto Roxin:
Verbo rector
Al examinar el verbo rector del tipo penal o conducta que se prohíbe en el
delito “Documento Falso” nos encontramos con:
…haga uso de… Omissis, es decir que el “USO” es lo que nos ocupa, es
importante resaltar varias acepciones del verbo uso: Según Guillermo
Cabanellas: “acción o efecto de servirse de una cosa; de emplearla o
utilizarla, las principales acepciones del uso en lo jurídico se consideran
con separación dada la diversidad de los conceptos; por ejemplo; como
fuente del derecho: Constituye la práctica, estilo o modo de obrar
colectivo o generalizado que se ha introducido imperceptiblemente y
ha adquirido fuerza de ley”1313.
Conclusión
Las figuras típicas son delimitantes de los hechos punibles, razón por
la que en las descripciones del injusto que acotan y recogen, el legislador
19 Ibídem
Grisanti, A., H., (2005) Lecciones de Derecho Penal Parte General, Venezue-
la: Venezuela: Editorial Melvin
Muñoz C., F., (2007) Derecho Penal Parte Especial: Valencia: Editorial Tirant
lo Blanch
This paper aims to highlight one of its causes, specifically the prescription
of prosecution, through termination of the prosecution of a particular person
for criminal liability that may be, one of the limits on the right to punish
State, guaranteeing the principle of innocence and the right to defense.
Added to this, it is important to know your concept, legal nature,
characteristics, classification, effects, for the purposes of a better understanding
of this legal institution, and on the eve of a more optimal application of this
procedural remedy by judicial officers.
Conceptos
Específicamente la alocución Sobreseimiento, haciendo alusión a la
referida fuente, se refiere a la “Acción y efecto de sobreseer libre. El que por ser
evidente la inexistencia del delito o la irresponsabilidad del inculpado, pone
término al proceso con efectos análogos a los de la sentencia absolutoria. /
provisional. Der. El que por deficiencias de pruebas paraliza la causa”1.
Se puede decir entonces, que según su etimología, y citando al autor
Humberto Becerra en su obra El Sobreseimiento en el Proceso Penal
Venezolano, sobreseer es “sentarse sobre”. Es decir, sentarse sobre lo hecho,
no continuar, desistir, sin absolver ni juzgar, mientras que desde la perspectiva
jurisdiccional, Sobreseimiento, significado: acción y efecto de sobreseer2.
Entre otras definiciones contenidas en el texto de consulta tenemos que,
“sobreseimiento” en el Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales
1 Diccionario de la Lengua Española, Tomo II, vigésima edición, Madrid, 1984, p. 1.253.
2 Becerra, Humberto. El Sobreseimiento en el Proceso Penal Venezolano. Segunda Edición.
Vadell Hermanos Editores. Caracas-Valencia-Venezuela, 2010.
9 ibídem
10 Ley de Extinción de la Acción Penal y Resolución de las Causas para los Casos del Régimen
Procesal Penal Transitorio. Gaceta Oficial N° 39.236, de fecha 06 de agosto de 2009.
19 Rionero & Bustillos. Maximario Penal, Segundo Semestre de 2008. Vadell Hermanos
Editores. 2009. p. 215.
20 Ob. cit. p. 331.
Conclusión
Una vez concluido el presente trabajo, he podido llegar a diversas
conclusiones, entre ellas se encuentran que la prescripción de acción penal
cumple varias funciones en el sistema de administración de justicia y
específicamente en el proceso penal venezolano; una de ellas, es que ésta se
establece como límite al ejercicio de la actividad punitiva que tiene el Estado,
la cual le permite atribuirle el castigo de una pena o sanción a todo aquel
que transgreda la normativa penal mediante la comisión de delitos o faltas
y que, sea susceptible de seguirle un juicio de reproche para determinar su
culpabilidad o no.
Además, la prescripción de la acción penal funge como sanción a la demora
jurisdiccional en dictar sentencia definitiva y llevar un proceso expedito, libre
de dilaciones indebidas, por el transcurrir del tiempo, que a la postre conlleven
violaciones de derechos fundamentales del encausado, sobre todo si éste se
encuentra sujeto a alguna medida de coerción personal, más aún cuando
se trata de la medida cautelar de privación judicial preventiva de libertad;
así como también acarrean un alto costo para el Estado, contraviniendo los
principios de celeridad y economía procesal.
De igual forma, es preciso acotar que, una vez verificada la prescripción de
la acción penal opera la extinción de la misma, trayendo como consecuencia
la necesidad de dictar el sobreseimiento definitivo de la causa, lo que pone
término anticipado del proceso, el cual a su vez conlleva la prohibición de
This research will attempt to approach the notion of felony murder, and
then jump to the study of its elements, characteristics, speaking different
theories regarding its legal nature and classifications of this type of crime
enshrined in criminal law Venezuelan substantive, based on the writings
of authors specializing in Criminal Law. Having proved their existence,
they will proceed with a brief survey of the crime of manslaughter, in
which the agent lacks the malice and harmful passed in Criminal Law.
The research will be a documentary type descriptive and conceptual level,
in order to make easier the understanding and / or understanding of this
type of behavior sanctioned as punishable in our current legal system.
Conclusión
Como podemos apreciar, el homicidio preterintencional no sólo refleja
una realidad jurídica sino que trata de atender a referencias que se escapan
completamente de la comprensión jurídica como es la intencionalidad, dado
bibliográficas:
Álamo Alonso, Mercedes (1983) El Nuevo Tratamiento de la
Preterintencionalidad. Consecuencias de la Derogación del artículo 50 del
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Jurisprudencia y Bibliografía La Ley.
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Donna, Edgardo Alberto. Derecho Penal Parte Especial Tomo 1. Buenos Aires
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Grisanti Aveledo, Hernando (2010) Lecciones de Derecho Penal, Parte Gen-
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Vadell.
Grisanti Aveledo, Hernando y Franceschi Andrés (2010) Manual de Derecho
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Irureta Goyena, José, (1928) El Delito de Homicidio. Montevideo Uruguay.
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Palacios, José Hijas (Semana 12 al 18 de octubre de 1987). Reflexiones Juris-
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Rodríguez Morales, Alejandro J., (2009) Síntesis de Derecho Penal. Segunda
Edición. Caracas Venezuela. Ediciones Paredes.
Soler, Sebastián (1953) Derecho Penal Argentino Tomo III. Buenos Aires Ar-
gentina. Ediciones Tea.
Documentales:
Código Penal (2005) Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela
Nº 5.768 (Extraordinario), de fecha 13 de abril del año 2005.
El derecho a la libertad
Como se habrá escuchado en tantas oportunidades, el bien más importante
después de la vida, es la libertad, por ende, el cautiverio es el mayor mal que
puede manifestarse a los hombres.
Sin lugar a dudas, el cautiverio afecta la libertad del ser humano, y a la par,
Conclusiones
a. La privación de la libertad personal debe ser escrupulosamente
respetuosa de la normativa que la autoriza y jamás puede quedar a la discreción
de cualquier funcionario, por muy superior que sea, por cuanto son los
administradores de justicia los funcionarios que deben presentarse ante toda
la colectividad como los funcionarios más respetuosos y garantes de la libertad
personal consagrada en la Carta Magna, y que efectivamente, los arrestos y
cualquier sanción disciplinaria que restrinja o limite la libertad ambulatoria
de cualquier funcionario policial o militar violan las normas constitucionales
sobre la libertad personal, la defensa y el debido proceso. Por último, si
bien las medidas correctivas impuestas a los subalternos son de importancia
secundaria, no es menos cierto que jamás puede ser considerada la libertad
personal como de «importancia secundaria».
b. La aplicación de una sanción administrativa constituye la manifestación
del ejercicio de la potestad sancionatoria de la Administración. Como toda
potestad, en el contexto de un Estado de Derecho, está condicionada, en
cuanto a su propia validez, al respeto de la Constitución, de los principios
constitucionales y, en particular, a la observancia de los derechos fundamentales.
c. Las sanciones graves y muy graves deben ser consecuencia de previo
procedimiento administrativo disciplinario. El reglamento debe garantizar
que las sanciones a que haya lugar, sean la consecuencia de un previo
procedimiento administrativo disciplinario, en el cual se respeten las garantías
mínimas que integran el derecho al debido proceso y que amparan en igual
modo a todos los funcionarios que integran los órganos de seguridad del
Estado, en particular, el derecho a la libertad ambulatoria, ser informado de
los cargos que se imputan y de ejercer la defensa.
d. El arresto simple o severo de los miembros de los órganos de seguridad
del Estado que constituyen sanciones disciplinarias con restricción de la
libertad personal es inconstitucional.
e. El mantenimiento de la disciplina en las relaciones internas de subordinación
y supraordenación, que se encuentra estructurado jerárquicamente, exige que
medidas de esta naturaleza (suspensión, amonestación verbal, amonestación
escrita, entre otras), en cuanto no impliquen privación de la libertad personal
al subalterno, deban ser entendidas como consustanciales con la naturaleza de
la institución a la que pertenecen.
Bibliográficas
Asencio, José (1987) La Prisión Provisional. Editorial Civitas. Madrid.
Bacigalupo, Enrique (2004) Derecho Penal. Parte General. Ara Editores, ima.
Legislativas
Código Orgánico Procesal Penal. Gaceta Oficial No. 5.930, Extraordinario,
del 4 de septiembre de 2009.
Electrónicas
Constitución Nacional del Perú. Asamblea Nacional promulgada el
18/01/1920
En:www.congreso.gob.pe/ntley/Imagenes/Constitu/Cons1920.pdfSimilares.
[Consultada el 04/02/2012]
1. Antecedentes
La globalización es un proceso económico, tecnológico, social y cultural
que implica una creciente comunicación entre los distintos países del mundo
2. Reseña Histórica
En Venezuela, con la Ley Orgánica sobre Sustancias Estupefacientes
y Psicotrópicas (LOSEP) dictada en 1984, se incorpora por primera vez el
delito de lavado y blanqueo de dinero; no obstante este tipo penal adolecía
de serios defectos técnicos, y consagraba un tipo abierto que daría lugar a
la criminalización de personas que no tenían nada que ver con los delitos
reprimidos en esta ley, tal y como comenta Rosales (1995).
Posteriormente, de la necesidad de regulación observada por las
organizaciones oficiales internacionales destinadas al control antidrogas, tuvo
lugar la suscripción de la Convención de las Naciones Unidas contra el Tráfico
Ilícito de Estupefacientes y Sustancias Psicotrópicas (Convención de Viena
del año 1988), en la cual se recomendó a los Estados Partes la adopción de las
medidas necesarias para tipificar como delito a la Legitimación de Capitales.
Dentro de este contexto internacional, la Superintendencia de las Instituciones
del Sector Bancario (anteriormente Sudeban) creó en el año 1993 , la Oficina de
Prevención de Legitimación de Capitales, para luego llamarla Unidad Contra la
Legitimación de Capitales, esta sirvió como órgano de apoyo en las investigaciones
realizadas por las autoridades nacionales e internacionales y desarrolló una
estructura de información que incluía los sistemas de reportes de transacciones
financieras y operaciones sospechosas, los cuales estaban ajustados a los requisitos
exigidos por el Grupo Egmont (EG). Posteriormente, mediante el Decreto con
Fuerza de la Ley General de Bancos y Otras Instituciones Financieras N°1.526
se creó la UNIF4, adscrita a la referida Superintendencia, como una unidad
administrativa de carácter nacional, concebida como un órgano desconcentrado
con capacidad de gestión presupuestaria, administrativa y financiera, dependiente
jerárquicamente del Ministerio del Poder Popular con competencia en materia de
Planificación y Finanzas.
Normas Prudenciales
Según la tesis sostenida por Jakobs (1996:48) los delitos de infracción
de deber (en el caso de los delitos de tipo culposo, de acción y omisión),
se caracterizan porque “el autor no determina mediante una organización
libre la extensión de sus deberes, sino que estos les son adjudicados como
consecuencia del status que ostenta dentro de la institución de que se trate”;
es así como la mencionada Superintendencia, a los fines de garantizar la
documentales
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Gaceta Oficial N°
5.453, Extraordinario, de fecha 24 de marzo de 2000.
Código Penal. Gaceta Oficial N°5.768 Extraordinario, de fecha 13 de abril
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Ley Orgánica de Drogas. Gaceta Oficial N° 39.510 de fecha 15 de septiembre
de 2010.
Ley Orgánica contra la Delincuencia Organizada. Gaceta Oficial N° 5.789,
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ma Bancario. Ediciones Universidad Salamanca. Volumen II “El blanqueo
de dinero desde la perspectiva del investigador policial”
Sánchez U., E. y otros (2002) Blanqueo de Dinero y Corrupción en el Sistema
Folio 2 en adelante:
a) Título del trabajo, en español y traducido al inglés
b) Síntesis de máximo 10 líneas que describa el aporte científico académico
del trabajo
c) Resumen con una extensión de 200 a 250 palabras, en español y una
traducción al inglés (se recomienda consultar traductores especialistas)
d) Máximo cinco palabras claves o descriptores, igualmente traducidos a
inglés
e) En la versión digital este folio corresponderá a un archivo aparte con el
nombre RESUMEN.
2.3. Cuerpo del trabajo: Debe estar engrapado o encuadernado,
identificado sólo con el título. En la versión digital el nombre del archivo debe
ser el título del trabajo o una parte de él que permita diferenciarlo fácilmente.
2.4. Imágenes y gráficos: Si el trabajo incluye imágenes, gráficas y/o tablas,
además de estar insertadas dentro del trabajo en el lugar que les corresponde,
deben entregarse en archivos aparte con extensión .jpg y en alta resolución. De
existir dudas, consultar con el Comité Editorial para la asesoría al respecto. El
autor podrá ser contactado para solventar cualquier eventualidad que se presente.
2.5. Solicitud de publicación: Se debe anexar una carta dirigida al Comité
Editorial de la Escuela Nacional de Fiscales, firmada por el o los autores, en
la que se exprese la solicitud de publicación del artículo, la aceptación de las
normas editoriales y la cesión de los derechos de publicación.
4. Normas metodológicas
4.1. Extensión y formato: Serán de acuerdo a lo mencionado anteriormente
en el punto 1.2.
4.2. Estructura: Título, Introducción, cuerpo del trabajo separado
en secciones, capítulos o similares, dependiendo de la naturaleza de la
investigación, Conclusiones, Recomendaciones (si existieran), Anexos (de ser
el caso), Referencias Bibliográficas.
4.3. Imágenes: Las imágenes, tablas y/o gráficas deben estar debidamente
numeradas e identificadas con un titular descriptivo de su contenido.
Igualmente, las abreviaturas y símbolos que se utilicen dentro de ellas deben
ser explicadas.
4.4. Siglas y abreviaturas: La primera vez que se mencione instituciones,
leyes y similares que aparezcan recurrentemente en el texto, se debe escribir su
nombre completo y a continuación las siglas entre paréntesis. En adelante se
utilizarán únicamente las siglas para referirse a dichas instituciones o leyes. Las
abreviaturas diferentes a las de uso común (como etc., i.e., cfr., ibíd.) deben
ser explicadas, bien sea al inicio del texto o en pie de página.
4.5. Citas y referencias bibliográficas: Se realizarán según las normas del
Manual de Estilo APA (consultar Apéndice).
4.6. Notas al pie: Se utilizarán únicamente para incorporar información
adicional a la exposición (no para colocar los datos de las obras citadas en el
texto).
4.7. Recomendaciones a los autores y autoras:
Mantener la claridad, sencillez y concisión en la exposición escrita.
Procurar la exactitud en el uso del idioma y en el lenguaje especializado.
Utilizar fuentes confiables, de autores reconocidos o de revistas
especializadas, tener en cuenta que este es uno de los criterios para el arbitraje
del artículo.
5. Contactos
Información de contacto con la Escuela Nacional de Fiscales del Ministerio
Público:
Ejemplo 1:
También, si revisamos los manuales sobre metodología cualitativa en
nuestra lengua, podremos constatar que el término estrategia no es el único
que se utiliza para hacer referencia, por ejemplo, a la entrevista, el grupo de
discusión o las historias de vida, sino que también se habla de técnicas (Valles,
1997), prácticas de investigación (Delgado y Gutiérrez, 1995), e incluso de
métodos de investigación, en algunos casos.
Ejemplo 2:
Así, Tesch (1990) señala que es imposible construir una tipología clara
y excluyente de categorías que permitan clasificar los diferentes tipos de
investigación cualitativa (la autora identifica más de cuarenta tipos de
investigación cualitativa) y nos propone dos formas posibles de organización:
una, en función de la raíz disciplinar fundamental que orienta los métodos y
procedimientos de investigación, y una segunda, en función de los objetivos
de investigación, tal y como hemos visto en el capítulo anterior.
Ejemplo 3:
Asimismo, esta autora señala que las historias profesionales constituyen
narraciones en torno a acontecimientos profesionales que más tarde se utilizan
para formular preguntas o establecer inferencias sobre el grupo al que se hace
Ejemplo 4:
Asimismo, esta autora señala que las historias profesionales constituyen
narraciones en torno a acontecimientos profesionales que más tarde se utilizan
para formular preguntas o establecer inferencias sobre el grupo al que se hace
referencia. Son útiles también para valorar la repercusión de las experiencias
vitales y de formación en las prácticas profesionales. Como señala Colás (1997),
“También posibilita poner de relieve las diferencias de estructuras que utilizan
los profesores con distinto grado de experiencia en torno a determinadas
cuestiones educativas, o resolución de problemas en el aula” (283).
Ejemplo 5:
Como afirman Velasco y Díaz de Rada (1997) en relación a la investigación
etnográfica:
Ejemplo 6:
Blanco et al (2002) señalan la importancia…