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Edición del 22 de Julio de 2008

UN CURSO DE AJEDREZ. DE PRINCIPIANTE A MAESTRO: EL JAQUE-MATE

El mate “del loco”


El lector que haya seguido las entregas anteriores de este curso, conoce
ya las reglas del juego.

LINCOLN MAIZTEGUI CASAS

Aún deberá familiarizarse con los


aspectos más complejos de ellos;
pero con lo que sabe, ya estará en
condiciones de jugar una partida de
ajedrez. Es el momento, entonces, de
abordar el objetivo de este juego, que
es la captura del rey adversario, lo
que en lenguaje técnico se llama
“jaque-mate”, o más simplemente,
“mate”.
El rey nunca puede desaparecer del tablero; cuando se encuentra bajo amenaza y
no puede retirarse de la misma, se dice que ha recibido “jaque-mate” y la partida
se declara finalizada con la derrota de ese bando, sin que sea necesario esperar al
movimiento siguiente. A diferencia de otros juegos de similar carácter (como las
damas o el ludo), no se busca eliminar la totalidad del ejército adversario, objetivo
materialista si los hay, sino la consecución de una idea abstracta: el mate. a
próxima tarea del aprendiz será, entonces, familiarizarse con las posiciones de
mate; visualizarlas adecuadamente y poder preverlas es el primero e inevitable
camino hacia la maestría.
Una partida de ajedrez comienza, por convención reglamentaria, con un
movimiento del conductor de las piezas blancas. Sin embargo, son las negras las
que pueden dar mate en el menor número de movimientos. Dicho mate se
produce después de las siguientes dos jugadas (una jugada consta de dos
movimientos, el de las blancas y el subsiguiente de las negras): 1.f3,e5 2.g4?? (los
signos de interrogación indican un juicio negativo sobre el movimiento; los de
admiración, en cambio, señalan que dicho movimiento es bueno) 2. ...Dh4++.
Jaque mate (Diagrama 1). La dama negra amenaza al rey blanco, y esa amenaza
no puede neutralizarse; no se puede capturar la pieza que está dando jaque, el rey
blanco no puede moverse de su actual emplazamiento y ningún trebejo blanco
puede interponerse; la partida ha finalizado con la victoria de las negras.
A este mate relámpago se lo conoce como “el mate del loco”, porque sólo estando
loco se entiende que el blanco efectúe las jugadas que lo permiten. Sin embargo,
conocer el tema es de fundamental importancia. La siguiente partida la
disputaron, a principios del siglo XX, dos maestros franceses, Lazard, que

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conducía las blancas (y que no estaba loco), y Gibaud: 1.d4,Cf6 2.Cd2,e5


3.dxe5,Cg4 4.h3?? (Lazard consideró solamente la posibilidad de 4. ...Cxe5, pero
se encontró con una sorpresa muy desagradable) 4. ...Ce3! (Diagrama 2) y se vio
forzado a abandonar el juego, porque pierde su dama. La única forma de salvarla
es capturando el “heroico” caballo negro, a lo que seguiría una versión del “mate
del loco”: 5.fxe3 Dh4j 6.g3,Dxg3 mate.

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