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Semántica y Pragmática 2019-1

Junio 27 2019

Juan Esteban Gallego Cano Carolina Heredia Arias

SEMÁNTICA Y PRAGMÁTICA: DEFINICIONES Y PERSPECTIVAS PERSONALES

EN TORNO A LA ENSEÑANZA DE LENGUAS EN EL SIGLO 21.

La semántica y la pragmática son ramas de la lingüística moderna que cobran

especial importancia en el marco de la enseñanza de lenguas en el siglo 21. Con el fin

de aportar apreciaciones personales en torno al impacto de estas en el campo de la

lingüística aplicada, ellas serán definidas en base a distintas posturas teóricas que

intentan recoger sus implicaturas más eclécticas. En primer lugar, el término semántica

hace referencia al “estudio sistemático del significado” (Kreidler, 2002), esto en una

visión muy general, sin embargo podemos delimitar la definición al considerar la

semántica lingüística, la cual, según el mismo autor, se refiere al “estudio de cómo las

lenguas organizan y expresan los significados” (Kreidler, 2002). Dentro de esta

consideración, la semántica es pues, el estudio de los significados de las palabras,

signos lingüísticos, frases y oraciones (Riemer, 2010) dentro de un sistema lingüístico

dado. Así las cosas, la semántica se encarga de analizar el significado conceptual

entendido este último como la carga de conceptos de las palabras en modo general, es

decir, así como expone Yule (2010), lo que convencionalmente significan mas que

desde una posición particular. De este modo, se identifican sus roles dentro de las

oraciones y sus implicaciones en la mentes de los actores de la comunicación.


Por lo tanto, podemos afirmar que la semántica estudia de modo organizado las

palabras, es decir, la información contenida en ellas y su capacidad para expresar

significados, intenciones o emociones, lo que justamente le da sentido y orienta la

funcionalidad de las lenguas, esto es, transmitir información codificada.

Por otro lado, pero no ajena del todo a esta misión, la pragmática es, y en su

definición hemos de hallar también su fin ulterior, el estudio de las relaciones de las

palabras (y sus significados) con el contexto, el hablante y las situaciones concretas de

intercambio de información por medio del lenguaje en las que sucede el acto

comunicativo. Debido a que la comunicación no toma lugar de modo aislado a los

elementos extralingüísticos y que estos claramente intervienen en los actos

comunicativos que nos ocupan, la pragmática aborda esta problemática. Escandell

(1993) lo explica del modo siguiente:

Se entiende por pragmática el estudio de los principios que regulan el uso del lenguaje

en la comunicación, es decir las condiciones que determinan el empleo de los

enunciados concretos emitidos por hablantes concretos en situaciones comunicativas

concretas y su interpretación por parte de los destinatarios (p. 16).

Es así que la pragmática es entendida como el estudio de cómo los hablantes

utilizan las palabras no solamente reconociendo el significado de estas, sino

también, evidenciando lo que estos quieren expresar o referenciar en cada

situación particular. Tal como Yule (1996) lo expresa, la pragmática es el estudio

del significado para el hablante o lo que las palabras le indican a su psicología

respecto al contexto particular (entendido como la situación que envuelve el acto


comunicativo en cuestión: el cómo, cuándo, porqué, dónde etc.) y el modo en que

este afecta la expresión del hablante.

Sentadas las bases de lo que es la semántica y la pragmática, es justo tratar de

dilucidar la importancia que ambas tienen para la enseñanza lenguas. Para ello, es

importante resaltar qué es una lengua. Una lengua es un sistema de signos lingüísticos

que permite la comunicación entre sus miembros; además, toda lengua oral

indispensablemente de una estructura conectada con el mundo de los fonemas que los

hablantes emiten para comunicarse.

Una lengua cuenta pues con una estructura profunda que relaciona el componente

semántico a través de estructuras gramaticales ordenadas de forma jerárquica y la

estructura superficial, la cual conecta el componente fonológico por medio de

estructuras gramaticales ordenadas de forma lineal (Chomsky, 1965). Es claro que todo

profesor de bilingüismo debe encargarse de contrastar permanentemente, al menos,

dos lenguas y para esto es importante que el docente seleccione un modelo de

enseñanza de lengua que le permita dar cuenta del mayor número posible de

elementos lingüísticos a los qué someter bajo dicho proceso. Como docentes, el

desarrollo comunicativo verbal dentro del proceso de educación y niveles de instrucción

es muy relevante y sobretodo eficaz para la enseñanza de las lenguas, también porque

en los diferentes niveles educativos se debe evidenciar cambios significativos en los

procesos que preparan a los estudiantes para ingresar a una exigente sociedad

competitiva, lo cual se evidencia en la toma de la palabra, la escucha y el diálogo. Por

lo tanto, es importante tener en cuenta los constantes cambios que sufren las lenguas,

como la inserción de nuevas palabras y la transformación de otras, y también el


aprovechamiento de otras lenguas en contacto. Por otro lado, la semántica es

importante también para un manejo coherente de los significados con el fin de entender

y diferenciar aspectos entre diferentes idiomas y así crear en nuestra mente un bagaje

de vocabulario e información relevante que vamos a utilizar de manera exitosa al

momento de adaptar una nueva lengua a la labor educativa y cotidiana del estudiante.

También cabe resaltar que el aprendizaje de una nueva lengua conlleva un

intercambio cultural y es ahí donde el campo de la pragmática interviene positivamente,

ya que este sistema que es la lengua, conecta el universo del sonido con el universo

del significado, jugando con los diferentes aspectos con los que cada lengua cuenta. El

lenguaje es un medio que capacita al hablante para aplicar ideas en configuraciones de

sonidos, y que permite al oyente proceder a convertir en su mente estos sonidos en

una copia razonable de las ideas codificadas inicialmente por la persona que dio

comienzo a la situación comunicativa. Así, los estudiantes estarán más capacitados a

la par que son conscientes de la importancia de la significación de las palabras para

darse a entender en cualquier lengua y a nosotros como docentes, ser muy claros en

cuanto a la gama de significados que les ofrecemos, ya que estamos configurando en

ellos una imagen mental, es decir un significado que su cerebro guardará para

representar el mundo por medio del lenguaje. Cuando como docentes somos

conscientes de esto, el proceso de la enseñanza de un nuevo idioma será más eficaz

tanto para el profesor como para el estudiante.

Finalmente, como mencionamos antes, el aspecto cultural cumple un papel

importante en la enseñanza y aprendizaje de una nueva lengua. Esto se refiere al

hecho de que cada lengua es una cultura, cada cultura es un mundo, y ese mundo es
necesario conocerlo por medio de los significados que lo construyen. El enfoque de la

semántica una medida incipiente para tal fin, sin embargo la pragmática intenta

relacionar el pensamiento del ser humano y su interacción.

El conocimiento lexical, no nos hace competentes a la hora querer comunicarnos

(Escandell, 1993). En este aspecto es muy importante el hecho de transmitir de

manera eficaz un mensaje, para esto, contamos con un modelo de enseñanza de

lenguas denominado enfoque comunicativo que se convierte en un elemento de vital

importancia a la hora de ligar elementos semánticos y pragmáticos en la enseñanza de

estas, los cuales son la forma, que es la estructura gramatical, el significado de la

palabra dentro de una estructura y el uso, que es el propósito de una palabra u oración

en contexto.

Sabemos que la finalidad de una lengua es comunicar, dar a conocer una

información, y si esta no es comprendida tal como el emisor lo desea, el proceso de

comunicación no será efectivo (Escandell, 1993); por lo tanto, el conocimiento cultural,

de jergas, y demás aspectos que hacen parte de una lengua y su cultura, resultan

relevantes a la hora de enseñar cualquier idioma. Así mismo, Escandell (1993) afirma

que aunque tengamos un gran conocimiento de la gramática, esto no es suficiente para

desarollar un proceso comunicativo exitoso. Esto último hace deficiente el proceso de

aprendizaje de una segunda lengua que se enfoque restrictivamente en la gramática,

por lo cual se hace imperioso el hecho de considerar la inclusión de las habilidades

semánticas y pragmáticas dentro de los cursos de lenguas extranjeras.

Por esta razón, es importante dejar claro a los estudiantes que sin sobrepasar los

límites de la formalidad, es importante darse a entender, y para esto es importante


conocer el contexto de la comunicación para que se haga efectiva la comunicación y

aprendizaje de conocimientos a través de ella.

REFERENCIAS

Chomsky, Noam (1965). Aspects of the theory of Syntax. Cambridge: M.I.T Press.

Escandell, M.a Victoria (1993). Introducción a la pragmática. Madrid: Universidad

Nacional de Educación a Distancia.

Kreidler, Charles W. (2002). Introducing English semantics. London: Routledge.

Riemer, Nick (2010). Introducing Semantics. Cambridge: Cambridge University Press.

Yule, George (1996). Pragmatics. Oxford: Oxford University Press.

Yule, George (2010). The Study of Language. Cambridge: Cambridge University Press.

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