Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
El medioevo está marcado por tres formas de organización política: el feudalismo, la iglesia
y el imperio. La desintegración del sistema feudal se produjo en un contexto que permitía la
instauración de un nuevo orden, pero éste no cayó del cielo. Las guerras, alianzas y el
comercio se convirtieron en elementos desintegradores del medioevo. Estos elementos
ayudaron a configurar la nueva lógica del ensamblaje
Actores políticos y sociales controlaban espacios territoriales (feudos) lo que significa que el
paisaje medieval estaba marcado por la dispersión de pequeñas soberanías de facto en un
amplio sistema de jurisdicciones inconexas y muchas veces superpuestas2 No obstante ,
aunque los señores feudales tenían jurisdicción sobre las fincas y las tierras que se le
otorgaban, carecían de autoridad territorial exclusiva.
1
1er Cita que mandaron al grupo
2
2da cita
forma a partir de dos conjuntos de obligaciones, por un lado, estaban las obligaciones
militares reciprocas y por el otro el sistema de posesión de tierras3
3
3era cita
el sistema de operaciones en especie vital para la organización feudal vigente. Los señores
feudales comienzan a solicitar dinero en lugar de servicios militares, y el pago de rentas en
lugar de especie... (faltan págs.)
Entre los siglos XI y XII la iglesia adquiere por primera vez una autoridad jurídica,
independiente de monarcas y señores feudales (el papado). Duarante la conformación de los
estados las diferentes dinastías concebirán de manera distinta el poder de la iglesia. Existieron
conflictos de intereses entre la propiedad colectiva y la propiedad privada, la soberanía
popular y la autoridad pública, el derecho divino y el derecho secular. Nuevamente se utilizó
el derecho romano para legitimar autoridad. Los capetos implementaron, además, una
burocracia estatal orientada a la recaudación de impuestos, que resultó ser un mecanismo
clave para el desarrollo de una administración centralizada.
Según Tilly, las ciudades se ubicaban en al menos tres formas de territorialidad: primero,
como el espacio central de una economía local; segundo, como nodos en una red traslocal de
ciudades y circulación de capitales; tercero, como formaciones potencialmente sometidas a
un poder estatal de carácter territorial. En la última se fija el rumbo de la formación de un
estado a futuro, pues el poder relativo de las ciudades y estados determinara que combinación
de capital y coerción entrara en juego para la formación del estado (según TILLY). Saskia
destaca la importancia de las dos primeras como bases para fundamentar el territorio y la
autoridad territorial. La mayor parte de Europa occidental estaba ubicada por fuera de esas
territorialidades dispersas y no se adaptaba a ellas.
Sin embargo, los ensamblajes que promueven la autoridad exclusiva sobre un territorio no se
limitan al estado soberano.
Sin embargo, la idea de un enfrentamiento claro entre las nuevas formaciones y la nobleza
no da cuenta del carácter múltiple, heterogéneo e irregular que presenta la economía política-
Por un lado, las formaciones contienen una variabilidad importante en términos de situación
económica (se refiere a que, en cada lugar, Francia, Alemania, etc. existen cantidades
diferentes de riquezas, por las maneras de obtenerlo y demás). Por otro lado, la economía
política de territorialidad urbana contiene diversas alianzas y formas de organización. Fue
una etapa de construcción de capacidades que funcionarían luego a modo de aportes para la
formación de estados territoriales. Este régimen territorial complejo, implementado mediante
la proliferación de las configuraciones urbanas, constituye un elemento activo en el
nacimiento del estado nacional moderno.
Las formaciones urbanas medievales fueron el emplazamiento de nuevas culturas políticas y
específicamente jurídicas que complejizaron e institucionalizaron el régimen territorial
urbano (pag,94)
Las formaciones urbanas medievales, sobre todo en los siglos XI y XII, pueden
concebirse como espacios de comercio y producción que promueven una cultura
político-económica peculiar. En ellas se da lugar a ciertas prácticas económicas que
permiten a los burgueses instaurar sistemas de dominio y protección de propiedad, a la vez
que resguardaban a los déspotas de todo tipo, Comienzan a construirse fuentes incipientes de
ciudadanía,
Tres aspectos que contribuyen a ejemplificar el carácter peculiar de esta economía política
de territorialidad urbana:
Conclusión
Se identifican cuatro capacidades fundamentales del medioevo para el desarrollo del Estado
territorial:
1- El estado territorial emergente se fortalece en un contexto donde la unidad nacional
está lejos de alcanzarse y su propia autoridad es débil. Al ubicar el origen del estado
en ese contexto podemos observar la labor en el ensamblaje de territorios, autoridad
y derechos que a la larga se fusionarían en unidades nacionales bajo el control de un
soberano o en proceso de ser gobernadas por un soberano con autoridad absoluta (pag
109)
2- Dicho proceso se centró en la formación de una burocracia estatal orientada a obtener
ingresos, sobretodo mediante un sistema tributario estandarizado. La labor de
organizar un sistema tecnocrático supone en este caso el desarrollo de capacidades
que colocan al estado en el primer lugar como agente económico de la época
3- La tercera capacidad concierne a las formas abstractas de autoridad, que deben
distinguirse de las formas concretas del poder material. El concepto de soberanía que
resultaría fundamental para la existencia del estado Nacional se vio posibilitado por
el presunto carácter divino del monarca, otra forma difusa de la autoridad. La
autoridad debe distinguirse del poder, el concepto de autoridad soberana introduce
cierto grado de abstracción a la mentalidad del poder soberano. En este sentido es
interesante el surgimiento de las ciudades medievales como economías políticas
complejas dispuestas a desafiar a los gobernantes más poderosos y a desarrollar sus
propias fuentes de autoridad política, sobre todo si se tiene en cuenta que la mayoría
de esas formaciones urbanas carecía de fuerzas militares
4- La cuarta capacidad surge de la economía política específica de la territorialidad
urbana: la posibilidad de que exista un sistema unitario con una ciudadanía exige y
elabora libertades civiles, a la vez que desarrolla formas de gobierno seculares}
Todo el analisis afirma que el complejo régimen territorial del medioevo implementado
mediante la proliferación de formaciones urbanas fue un elemento activo en la construcción
del estado territorial urbano. No únicamente un periodo que antecede el desarrollo de los
regímenes territoriales.