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EL MATERIALISMO FILOSÓFICO

1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

1.1. Problema general


 Valorización de la materia como principio del todo.

1.2. Problemas específicos


 Desvalorización de la persona humana.
 Malas relaciones interpersonales.
 Mala relación con Dios.
 La persona materialista no tiene remordimiento de pecado, ni
temor de Dios, lo cual al final, los lleva a tener un gran vacío
existencial en su vida.
 Consumismo.
 Personas que consideran que no hay otra realidad que la que
ellos conocen directamente en su quehacer diario.

2. OBJETIVOS

2.1. Objetivo general


 Implementación del idealismo en el materialismo

2.2. Objetivos específicos


 Encontrar relaciones entre el idealismo y materialismo para
encontrar un bien común entre ambos.
 Explicar que la razón de las cosas se dio por algo supremo.
 Explicación de que la materia no se creó por si sola.

3. HIPÓTESIS

3.1. Hipótesis general


 Dar a entender el origen de la materia.

3.2. Hipótesis específicas


 De acuerdo al idealismo queremos dar a conocer que la
materia fue creada por alguien supremo y que no contemplar
ideas del materialismo como diferentes teorías explicando
cómo se creó la materia.

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4. JUSTIFICACIÓN

Tradicionalmente se distinguen dos grandes corrientes filosóficas, de las


cuales se generan las demás:
El idealismo plantea la preeminencia de las ideas (el alma, Dios, el
pensamiento) sobre la realidad material. Es decir, antes que la materia
existió y existe el mundo de las ideas o una idea suprema que creó el
mundo material.
El materialismo, en cambio, plantea que las ideas son producto de la
materia más altamente evolucionada: el cerebro humano. Para el
materialismo, la materia no tiene principio ni tendrá fin, sin embargo, está
en constante evolución. Como producto de ello, de la existencia de seres
sin vida surgieron los seres vivos.
El materialismo, en oposición al idealismo, resuelve el problema cardinal
o fundamental de la filosofía acerca de la relación entre el pensar y el ser,
entre el espíritu y la naturaleza, postulando que, la materia es lo primario
y la conciencia y el pensamiento, son consecuencia de ésta, a partir de
un estado altamente organizado.
La materia es entendida como sustancia originaria, único fundamento
existencial del mundo. El materialismo "rechaza todo dualismo de materia
y espíritu y lleva a la negación de Dios". La materia no ha sido creada, es
eterna e infinita, su causa hay que buscarla en ella misma.

5. BASES TEÓRICAS

5.1. EL MATERIALISMO FILOSÓFICO


El materialismo filosófico es la ciencia que estudia las relaciones entre la
conciencia y el mundo material objetivo, las leyes más generales del
movimiento y desarrollo de la naturaleza, de la sociedad y del conocimiento.
La filosofía del marxismo se llama materialismo dialéctico porque constituye
la unidad orgánica del materialismo y la dialéctica. Es materialista porque
parte del reconocimiento de la materia como base única del mundo,
considerando la conciencia como una propiedad del material altamente
organizada, como una función del cerebro, como un reflejo del mundo
objetivo; es dialéctico porque reconoce la concatenación universal de los
objetos y fenómenos del mundo, el movimiento y desarrollo de éste como
resultado de contradicciones internas que actúan dentro de él.

El materialismo considera el ser social no sólo en forma de objeto que se


opone al hombre, sino también subjetivamente, en forma de la actividad
práctica histórico-concreta del hombre. Tal concepción de la práctica
proporcionaba base científica a la teoría del conocimiento, a la cual el
marxismo llegó desde el punto de vista histórico-social en vez del enfoque
abstracto del materialismo contemplativo, que consideraba los vínculos
entre los hombres como algo puramente natural.

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La diferencia sustancial de la filosofía del marxismo respecto de todos los
sistemas filosóficos anteriores consiste en que sus ideas penetran en la
masa del pueblo trabajador, que es quien las lleva a la práctica; en cuanto
a ella, se desarrolla justamente sobre la base de la práctica histórica de las
masas populares. El mundo es modificado por la actividad práctica
revolucionaria de las masas populares que han hecho suyas las ideas del
marxismo. “De la misma manera que la filosofía encuentra en el proletariado
su arma material, el proletariado encuentra en la filosofía su arma
espiritual…” (C. Marx y F. Engels)

Lenin profundizó la concepción de las categorías fundamentales de la


dialéctica materialista: materia y formas de su movimiento, espacio y
tiempo, causalidad, libertad y necesidad, posibilidad y realidad, forma y
contenido, etc. Lenin impulsó la concepción de la ley de la unidad y lucha
de los contrarios como ley fundamental el mundo objetivo y del
conocimiento, como esencia y núcleo de la dialéctica, formulando
proposiciones esenciales sobre las dos concepciones del desarrollo:
desarrollo como disminución y aumento, como repetición y desarrollo como
unidad de contrarios, de desdoblamiento de lo único en contrarios que se
excluyen recíprocamente y se hallan en interacción.

Señaló que el conocimiento va del contenido vivo al pensamiento abstracto


y de éste a la práctica; que la conciencia del hombre es activa, pues no se
limita a reflejar el mundo, sino dentro de la práctica humana participa en su
transformación revolucionaria. Formuló la teoría de la verdad objetiva,
relativa y absoluta, y señaló su Inter vinculación dialéctica. El punto central
en la doctrina de Lenin sobre la verdad lo ocupa el problema del carácter
concreto de la misma. Indicó que “la esencia misma, el alma viva del
marxismo es el análisis concreto de la situación concreta”.

5.2. HISTORIA

5.2.1. Doctrinas materialistas del Antiguo Oriente

Los primeros vestigios que se tienen de la doctrina materialista se remontan


a fines del tercer y principios del segundo milenio a. de n. e. en las culturas
egipcia y babilónica, donde se formaron las primeras concepciones
materialistas espontáneas. También y un poco más tarde, pero con mayor
integridad se la encuentra en la filosofía de la India y China Antigua.
En monumentos de la cultura egipcia antigua se menciona por ejemplo «el
agua fría creadora de todos los seres y de la que proceden todas las cosas,
así como el aire que llena el espacio y se halla en todas partes», lo cual
muestra que ya en ese entonces se planteaba en forma embrionaria la
cuestión del origen material de los fenómenos naturales. O puede que
hayan interpretado estos elementos desde un punto de vista netamente
simbólico.
En la China Antigua encontramos la doctrina materialista en la teoría del
conocimiento de Mozi (479-381 a. C.) en oposición a Confucio. Aportes
importantes también las dio el Taoísmo, cuyo creador Lao-Tse (siglos
VI a. C. a IV a. C.) sostenía que el mundo, que es eterno, se halla en

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movimiento y mutación continuos. El movimiento, según los taoístas, es
regido por el Tao (ley natural), que si bien es un concepto abstracto y
metafísico, es al mismo tiempo anti espiritista ya que al Tao se lo considera
inmaterial pero natural, y no de origen divino o sobrenatural, por lo que la
cosmovisión taoísta resulta en una dialéctica materialista-metafísica,
dualmente naturalista y no espiritista.

5.2.2. Materialismo de la Grecia Antigua

Desde el siglo VI a. C. la filosofía se desarrolla con mayor ímpetu en la


Grecia Antigua y post moderna. Allí la corriente materialista surge en
controversia con la religión principalmente en los filósofos representantes
de la llamada escuela de Mileto; Tales de Mileto (ca. 624-547 a. C.),
Anaximandro (ca. 610-546 a. C.) y Anaxímenes (ca. 585-525 a. C.).
Según la doctrina de Tales, el agua es el principio de todas las cosas; todo
procede del agua y todo se convierte en agua.
Anaximandro tomó como sustancia primaria de todo lo existente el apeiron,
principio indeterminado que engendra las cosas y los fenómenos mediante
el movimiento y la segregación de contrarios tales como «lo húmedo y lo
seco», «lo frío y lo cálido» «lo dulce y lo salado». Según esta doctrina todo
se encuentra en constante rotación, una cosa surge del apeiron y otra
desaparece y se descompone transformándose en apeiron, lo cual
siguiendo un curso materialista hace uno de los primeros intentos de
representar el mundo dialécticamente, en movimiento.
Anaxímenes tomó como sustancia primordial el aire, cuyo movimiento
condiciona el surgimiento y la desaparición de las cosas.
Otro filósofo griego que hizo grandes aportes a la doctrina materialista fue
Heráclito de Éfeso (ca. 530-470 a. C.) el cual tomó como sustancia primaria
el fuego. Sostenía la existencia en la eternidad del mundo,
independientemente de cualesquiera de las fuerzas sobrenaturales, como
un fuego eternamente vivo, que con orden regular se enciende y con orden
regular se apaga. Subrayaba la idea del movimiento y cambio constante del
mundo, de la contradicción como fuente de movimiento, de la posibilidad
de transformación recíproca de los contrapuestos. Expresó ideas sobre los
principios dialécticos, que reflejan de una u otra manera el estado
verdadero de las cosas, aunque no sostenidas por conocimientos
científicos.
El desarrollo más profundo de la corriente materialista en la Grecia Antigua
se ve en la doctrina de Demócrito de Abdera (460-370 a. C.), que promovió
la teoría atomista de la estructura de la materia. Según esta teoría, el
principio cardinal del mundo es la existencia del vacío y los átomos que se
mueven en el vacío, encontrándose y formando diferentes cuerpos e
incluso el alma del hombre, la cual muere al perecer el organismo.

5.2.3. Materialismo en la Edad Media

En la Edad Media domina la religión en todas las esferas de la vida espiritual


de la sociedad. La filosofía se convierte en ese periodo en sirvienta de la
teología, justificando y argumentando los dogmas religiosos y demostrando
su veracidad e inmutabilidad. En dicho periodo se presta especial atención

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al problema de la correlación de las ideas generales y de las cosas del
mundo sensible y la pugna entre el materialismo y el idealismo se centra en
resolver la cuestión de la correlación de lo singular y lo general, de las ideas
generales y las cosas particulares.
En ese sentido, los materialistas afirman que lo universal no puede existir
en la realidad y tanto menos antes de lo singular. En la realidad existen solo
las cosas singulares y lo general es solo denominación que no refleja nada
y por eso no existe en la realidad. A esta corriente materialista se le
denominó nominalismo.
Al mismo tiempo en los siglos III y IV en China perdió rápidamente el papel
la ideología confuciana, propagándose el misticismo religioso de la secta
taoísta y penetró cada vez más el budismo en la India.
Los pensadores materialistas de aquella época intervinieron contra ese
misticismo e idealismo.
Fan Zhen (siglo V a VI) propagaba la idea de que no existe el mundo del
más allá y que el alma del hombre es una forma de existencia del cuerpo y
desaparece al morir el hombre.
Los confucianos de los siglos VII a IX adelantaron algunas proposiciones
materialistas pero más tarde renunciar, culminando con una doctrina
idealista neoconfucionista.
El principal defensor de la orientación materialista dentro del
neoconfucianismo fue Zhang Zai (1020-1077) que refutó las
representaciones idealistas del que el cielo y la tierra son un conjunto de
aprehensiones subjetivas; promovió la idea de que el mundo de las cosas,
que existe realmente, descansa en la substancia materia, que adopta
diversas formas
En ese periodo y partiendo de la filosofía griega antigua y del pensamiento
filosófico en oriente, surge y alcanza un alto nivel la filosofía arabográfica.
De los siglos X a XIII estuvo representada por las corrientes: peripatetismo
(aristotelismo) oriental, la doctrina de los Hermanos de la Pureza, el sufismo
y la filosofía musulmana ortodoxa.

5.2.4. Materialismo de la época del Renacimiento

Italia fue el primer país en el que comenzaron a desarrollarse las relaciones


capitalistas. Desde el punto de vista económico, la región más desarrollada
era el norte, con sus repúblicas marítimas comerciales de Venecia y
Génova, y la industrial de Florencia. En el centro de la atención de los
pensadores avanzados de la época quedó la persona humana. Los
ideólogos de la burguesía ascensional que necesitaba la libertad de
desplazamiento, la libre empresa y la libertad de comercio, soñaban con
liberar al hombre del despotismo feudal.
Esta nueva dirección de la cultura fue denominada «humanismo» (del latín
humanus, ‘humano’). La vieja sentencia de «soy hombre y nada humano
me es ajeno» se convirtió en la divisa de los humanistas. La particularidad
del pensamiento filosófico del Renacimiento es su carácter antiescolástico.
Debe tenerse en cuenta que la escolástica, tanto por el lado de la Iglesia
como del Estado, fue durante toda la Edad Media la filosofía oficial y se
impartió en la mayoría de las universidades. A diferencia de la escolástica,
la filosofía de los humanistas dejó de ser sirvienta de la teología. En

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oposición a la escolástica y a la teología de la Edad Media comenzó a
desarrollarse en Italia la filosofía materialista.

5.2.5. Materialismo en la actualidad

El materialismo es una corriente de la filosofía que surge estricta y


exclusivamente como contrapartida de otra, denominada idealismo, para
responder a aquella cuestión fundamental de la filosofía sobre qué es
primero: el pensamiento o lo material. Entonces y como se desprende ya
desde el nombre que se le atribuyó, el materialismo le da absoluta
preeminencia al mundo material, siendo que siempre lo material precederá
al pensamiento.
El concepto no afecta sólo a la visión filosófica del mundo sino también a la
ciencia. Aunque en las ciencias naturales los enfoques no-materialistas
quedaron descartados hace mucho tiempo, en ciencias sociales ha existido
en los últimos siglos una polémica en torno al materialismo como enfoque
de investigación. Más recientemente Marvin Harris propuso un enfoque de
investigación materialista de las culturas y las sociedades llamado
materialismo cultural. E, incluso, Paul y Patricia Churchland han promovido
un nuevo enfoque no reduccionista de materialismo, conocido como
materialismo eliminativo que sostiene que algunos fenómenos mentales en
realidad no existen y que hablar de estos conceptos, como se hace en
psicología popular es algo así como dar crédito a las enfermedades
causadas por el diablo. En España, un representante actual del
materialismo con una línea de pensamiento similar es por ejemplo Martín
López Corredoira, al abogar por una visión del mundo en la que todo lo
existente es materia-energía física siguiendo sus correspondientes leyes
naturales y excluyendo la posibilidad de cualquier otro ente no-material
(mente, libre albedrío, persona en tanto que ser con identidad propia,
sentimientos,), o relegándolo a mera representación mental de algo
inexistente en sí.
El materialismo ha sido entendido frecuentemente como una forma
enteramente científica y racionalista de ver el mundo, particularmente por
pensadores religiosos que se le oponen y por marxistas. El materialismo
como principio filosófico o científico típicamente contrasta con el dualismo,
la fenomenología, el idealismo y el vitalismo.
La definición de «materia» en el materialismo filosófico moderno comprende
a todos los entes científicamente observables, como la energía, fuerzas y la
curvatura del espacio. Muchos autores del siglo XX, particularmente
epistemólogos y filósofos de la ciencia, prefieren la denominación de
fisicalismo porque carece tanto de las connotaciones emocionales de la
palabra «materialismo» como de las restricciones históricas asociadas a
éste. Enfatiza lo físico, sea materia o energía.

5.3. MATERIALISMO Y CONCIENCIA.

El materialismo dialéctico parte del reconocimiento de la prioridad de la


materia y del carácter secundario de la conciencia y considera que el mundo
es la materia en movimiento. La materia no puede ser creada ni destruida;

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es eterna e infinita. El mundo es la diversidad de formas de movimiento de
la materia, infinitas en el espacio y en el tiempo.

Los datos de la ciencia moderna señalan que los procesos físicos, químicos,
biológicos y sociales que tienen lugar en el mundo, no son algo encerrado
en sí y singularizado. Todos ellos pueden transformarse recíprocamente,
puesto que entre ellos existe una vinculación universal, concatenación e
interacción.

Según el materialismo dialéctico, la conciencia es una función del cerebro,


un reflejo del mundo objetivo. Eso significa que la conciencia viene
determinada fuera de la actividad natural y social existente y operante en el
cerebro. El proceso de toma de conciencia del mundo y la actividad psíquica
surgen y se desarrollan en el proceso de interacción real del hombre con el
mundo a través de sus relaciones sociales. Los objetos, sus propiedades y
relaciones, al ser reflejadas en el cerebro, existen en él en forma de
imágenes, idealmente. El cerebro no es el origen, sino el órgano de la
conciencia, es decir, la parte del cuerpo humano en la que el objeto que
actúa sobre ella se transforma y adquiere la forma ideal de su ser. Lo ideal
no es una substancia particular ni un acompañante secundario de los
procesos materiales que transcurren en la corteza del cerebro, sino un
producto de la actividad del cerebro, la imagen subjetiva del mundo objetivo.

5.4. DIALÉCTICA DEL PROCESO DEL CONOCIMIENTO.

El materialismo dialéctico parte del hecho de que el conocimiento es un


reflejo del mundo en la conciencia del hombre, inseparable del cambio del
objeto de conocimiento en el curso de la práctica social. La práctica es base
de la formación y desarrollo del conocimiento en todos sus grados, fuente
del saber, estímulo fundamental y meta del conocimiento, esfera de
aplicación del conocimiento, criterio de la verdad de los resultados del
proceso de conocimiento y “determinante de los vínculos del objeto con
aquello que el hombre necesita” (Lenin). La actividad práctica del hombre
se halla unida obligatoriamente a la actividad cognoscitiva.

El proceso de conocimiento comienza con la sensación y la percepción. El


paso del conocimiento sensorial al pensamiento lógico es un salto del
conocimiento de lo individual, casual y exterior, al conocimiento
generalizado de lo sustancial y sometido a leyes, de las formas tangibles
del reflejo a aquellas formas que se hallan desprovistas de la “sustancia
de sensoriedad”.

Lenin escribía que “cualquier verdad se la hace …, si se la exagera, si se le


aplica más allá de los límites que es dable hacerlo, puede ser llevada al
absurdo, y en las condiciones indicadas, se transforma inevitablemente en
absurdo”

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5.5. PROBLEMA FUNDAMENTAL DE LA FILOSOFÍA

Problema de las relaciones del pensamiento con la existencia, del espíritu


con la naturaleza. Engels anota que los filósofos se dividieron en dos
campos” idealistas” y “materialistas”– según que considerasen como
primario la existencia, o la conciencia. Todos los representantes de la
filosofía idealista toman como primario, la conciencia, la idea, el espíritu.
Los materialistas, por el contrario, consideran como primario la naturaleza,
la materia, y como secundario, la conciencia, propiedad de la naturaleza,
derivada de la materia.

El problema fundamental de la filosofía tiene además un segundo aspecto:


¿Estamos en condiciones de conocer el mundo que nos rodea? La mayoría
de los filósofos considera que es posible conocer el mundo que nos rodea;
pero hay filósofos agnósticos que niegan esa posibilidad. El materialismo
dialéctico impugna el agnosticismo. Nuestras sensaciones,
representaciones y conceptos solo son copias, reflejos del mundo objetivo.
La práctica sirve como criterio de la verdad o falsedad de nuestro
conocimiento. “En el momento en que, de acuerdo a las propiedades por
nosotros percibidas, de una cosa cualquiera, la utilizamos para nosotros
mismos, en ese mismo momento sometemos a inequívoca verificación la
verdad o falsedad de nuestras percepciones sensibles” (Engels).

5.6. DIFERENCIA ENTRE IDEALISMO Y MATERIALISMO

IDEALISMO MATERIALISMO

NO SE PUEDE MEDIR, TOCAR ES TODO LO QUE OCUPA UN


O PALPAR. LUGAR FÍSICAMENTE.

ES ABSTRACTO. ES CONCRETO
SE REFIERE AL ALMA, SE REFIERE NETAMENTE AL
ÁNGELES Y DIOS. SE HUMANO.

PARA LA TEORÍA LO PRIMERO LO PRIMERO PARA LA TEORÍA


ES LA IDEA O ESPÍRITU. ES LA MATERIA.

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6. METODOLOGÍA
6.1 SOLUCIONES:
EL MATERIALISTA SIEMPRE PENSARA QUE ES MATERIA NO CREERA EN
SERES DIVINOS NI EN DIOSES.
AL CONTRARIO QUE LOS IDEALISTAS QUE DICEN QUE EL ESPIRITU EL
PENSAMIENTO Y LAS IDEAS SON LO MAS IMPORTANE
DICIENDO QUE LA MATERIA EXISTE PORQUE EL ESPIRITU O LAS IDEAS
LO CREAN ASI LAS RELIGIONES SON UN EJEMPLO IDEALISTA PUES
AFIRMAN QUE LA EXISTENCIA Y TODO EL UNIVERSO ES CREACION DE
UN ESPIRITU AL CUAL LLAMAN DIOS.

7. BIBLIOGRAFÍA
 http://www.filosofia.org/filomat/df001.htm
 http://www.filosofia.org/mat/index.htm
 https://www.circulobellasartes.com/revistaminerva/articulo.php?id=703
 http://www.filosofia.org/enc/ros/cuesf.htm
 https://es.quora.com/Sin-salir-mucho-del-materialismo-en-general-
cu%C3%A1les-son-los-mayores-problemas-del-materialismo-filos%C3%B3fico
 https://es.wikipedia.org/wiki/Materialismo
 https://www.nodo50.org/ciencia_popular/articulos/Spirkin.htm

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