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Proceso ritual,

símbolos y cambio
social: Juramento a
la bandera

Alumno: Diego Sarabia

Curso: Teorías y problemas antropológicos II

Profesor: Gonzalo Díaz Crovetto


Introducción

En el trascurso y desarrollo de este trabajo se analizará un ritual de carácter marcial

denominado como “Juramento a la bandera”, el cual, el indica que un conscripto (quien se

encuentra realizando su instrucción militar) puede ser reconocido como soldado, este

momento es marcado por el juramento que se realiza para con la “institución” y la “patria”.

El juramento se realiza literalmente hacia la bandera nacional como un símbolo que logra

representar un conjunto de ordenes morales y valóricas que construyen e identifican al

soldado mismo, es en este punto es donde surge la propuesta referente a la problemática de

estudio.

El juramento que realizan los conscriptos a hacia la bandera es breve, sin embargo, aúna

una cantidad de preceptos referentes a los deberes morales y valóricos que hacen del

conscripto un soldado frente a la bandera que se torna un símbolo que logra aunar todo

referente a los valores axiomáticos de la milicia. La propuesta de estudio, en este sentido,

gira en torno al proceso de adquisición y compresión del conocimiento sobre los valores

axiomáticos que permiten al soldado una determinada compresión sobre el significado

valórico y moral representados en la bandera nacional.

Se propone esta problemática teniendo en cuenta de que este ritual se trata de un proceso

largo, durante el cual quienes se encuentran en el adquieren conocimientos que les permite

hace inteligibles para sí mismo los valores que estructuran y organizan a determinadas

sociedades, es decir, el ciudadano o “civil” que inicia su instrucción militar adquiere

conocimientos que le permiten hacer inteligible su rol o nuevo rol en la estructura social, a

la par que comprender los nuevos derechos, obligaciones, comportamientos, normas y


patrones éticos que son adquiridos junto a su nuevo rol en la sociedad y dentro de la misma

institución militar, por lo tanto, este proceso ritual también le permite comprender los

significados de los símbolos que lo rodean, en este caso, la bandera y lo que estos mismo

símbolos representan y demandan de él (esto en el orden del juramento).

Este ritual se enmarca dentro de lo que Víctor Turner (1999), inspirado en Arnold Van

Gennep, identifica como “Rituales de paso”, el cual, a grandes rasgos se podría definir

como ritos que “… indican y establecen transiciones entre estados distintos. Y con

«estado» quiero aquí decir «situación relativamente estable y fija», incluyendo en ello

constantes sociales como puedan ser él status legal, la profesión, el oficio, el rango y el

grado.” (p.103). Referente a esta primera aproximación, interesa para el desarrollo de este

trabajo la transición de un estado de ciudadano o civil a conscripto y luego a soldado. La

transición de un “estado” a otro se trata de un proceso, en el cual, como se hace referencia

en la problemática de la investigación, se adquieren los conocimientos necesarios para

acceder al nuevo estado, siguiendo a Turner (1999) “Van Gennep ha mostrado que todos

los ritos de paso incluyen tres fases: separación, margen (o limen) y agregación.”, para

efectos de este trabajo interesa indagar sobre la adquisición progresiva del conocimiento

que se da a lo largo de estas tres fases, lo que concluye con el paso de conscripto a soldado

en el juramento a la bandera.

Debido a que este “ritual de paso” se realiza a mediados de año, este trabajo se

desarrollarla en torno a entrevistas y videos capturados durante el desarrollo del juramento

de la bandera. Las entrevistas se realizaran a personas que ya concluyeron su instrucción

militar básica y que por lo tanto ya vivenciaron el juramento a la bandera, a estas

entrevistas se suma una echa a un c…. de … quien forma parte fundamental de la


instrucción y se encuentra en contacto directo (instruyendo) a quienes pasan instrucción

básica en la milicia y que por lo tanto ya vivenciaron el juramento a la bandera.

El principal referente teórico para el desarrollo de este trabajo será Víctor Turner, mas

precisamente, “La selva de los símbolos” de 1999, se recurrirán a la introducción, al

capítulo I “Símbolo en el ritual Ndembu”, capitulo IV “Entre lo uno y lo otro: el periodo

liminar en <<Rites de passages>>.”

Para el desarrollo de este trabajo se estructurara la narrativa del ritual en relación a los

“Rituales de transición” y sus etapas como la separación, margen (limen) y agregación, a lo

largo de esta narrativa se idenfiacaran los símbolos que se ven envueltos en este proceso

ritual, esto servirá como una antesala para la consecución del ritual mismo, en este caso, el

juramento a la bandera.
Desarrollo

Antecedentes previos

Se puede identificar la bandera como un símbolo dominante en el contexto de este ritual,

en tanto que, se entienda este último, - según Turner (1999)- , como puntos relativamente

fijos tanto en la estructura cultural como en la social, y que constituyen puntos de unión

entre esos dos tipos de estructura. Tienen dos polos de sentido y tienen la propiedad de

unificar, es decir, poseen un significado constante y consistente dentro del sistema

simbólico, tienen autonomía respecto a los fines rituales y no cambian con el tiempo.

Constituyen fines en sí mismos, es decir, son valores axiomáticos. Para comprender como

es que la bandera toma esta posición en el ritual del juramento se puede recurrir a la

mitología que da fundamentado al ritual mismo y que sustenta de “significata” este

símbolo.

Los orígenes que alimentan los significaos de este ritual se remonta al contexto histórico de

la “guerra del pacifico” desde los año 1880, recurriendo a información que tiene el ejercito

de chile en su web, se puede precisar que sus origen mítico se encuentra en “La batalla de

la concepción” en 1982, según la historia, en esta batalla se sacrificaron 77 soldados por

defender la “patria”, ante un ataque de la conde federación Perú-boliviana en el lugar, de

esta batalla donde todos los soldados chilenos murieron sobrevivió una bandera, la que aun

hoy se conserva, además se conserva el corazón de 4 soldados como símbolo de su “Valor

y amor a la patria”. Este acto heroico por parte de este batallón constituye uno de los pilares

fundamentales que estructura los valores axiomáticos del juramento a la bandera como

ritual mismo.
“El 9 y 10 de julio de 1882, se gestó en el poblado de La Concepción, en la sierra peruana,

la hazaña más heroica de la historia militar de Chile. Es por ello que, en el año 1916, se

estableció esta fecha para el Juramento a la Bandera, donde los jóvenes soldados del

Ejército, en homenaje a nuestros héroes de La Concepción, reafirman su compromiso con la

seguridad y defensa del país.” (Ejercito, 2015)

En una infografía disponible en la misma página se ilustra de manera sintética, lo que

significa este acto para el ejército y para el ritual mismo.

“Luego de 20 horas de combate, ningún chileno sobrevivió, todos se inmolaron por chile y

su emblema patrio, dejando un legado de compromiso y amor a la patria que hoy cumple

133 años y es la razón por la cual en esta fecha se instauro el juramento a la bandera (…)

reafirman, ante Dios y la bandera, su compromiso de servir fielmente a la patria hasta rendir

la vida si fuese necesario, tal y como lo hicieron los 77 héroes inmortales de la concepción”

(Ejercito, 2017)

La bandera simboliza, siguiendo a Turner (1999), representa un valor axiomático dentro

del contexto militar, en tanto que, simboliza la patria que se defiende y sirve como

soldado, además del, deber y el amor que el soldado debe tener para con misma,

siguiendo a Turner (1999), estos valores son constantes y no sufren modificaciones a en

tanto a la consecución de los rituales referentes al juramento, es decir, según la información

disponible en la misma web del ejército y en la infografía, disponible en el mismo sitio, esta

ritual cumplió 133 años en el año 2017.

De esta forma se puede justificar porque la bandera puede ser considerada como un símbolo

dominante a lo largo del ritual, sin embargo, aún no se responde a lo que vertebra la

problemática de estudio. ¿Cuál es el proceso por el que las personas que realizan su
instrucción militar básica adquieren el conocimiento para dar sentido y compresión al ritual

y sus símbolos?

Para averiguar esto se recurrió a entrevistas y se pudieron identificar diversos factores.

Transición desde el Ciudadano al conscripto y al soldado.

Si se considera que el juramento de la bandera es un “ritual de paso”, se debe tener en

cuenta que, este no es un ritual espontaneo o que surja desde las circunstancias, sino más

bien, es el resultado de un proceso de transición que duran entre 12 a 14 (máximo) meses,

en los cuales, quienes se embarcan en este se ven obligados aprender el conocimiento sobre

su nuevo rol en el estructura social y cultural, rol por el cual, como se revisó anteriormente

en Turner (1999);

“… alcanza un nuevo estado a través del rito y, en virtud de esto, adquiere derechos y

obligaciones de tipo «estructural» y claramente definido, esperándose de él que se comporte

de acuerdo con ciertas normas de uso y patrones éticos.” (p.104)

Siguiendo las propuestas teorico-metodologicas propuestas por Víctor Turner (1999) se

planteara esta transición en 3 fases o etapas, tal y como propone este autor están son

Separación, Periodo liminar y re agregación.

Separación

Esta etapa refiere a “una conducta simbólica que signifique la separación del grupo o el

individuo de su anterior situación dentro de la estructura social o de un conjunto de

condiciones culturales (o «estado»)” (Turner, 1999:104). Con el fin de dar cuenta de esta

etapa es que s recurrieron a entrevistas.


Oswall Moena quien realizo su “Servicio militar” durante el 2013 recuerda que algunas

instancias durante esta etapa, la primera de estas es “Buta yo me acuerdo de algo que ya me

empezó a marcar, fue cortarme el pelo antes de entrar, quedar casi pelado para mí fue un

buen apronte de lo que se venía. Despedirse de la familia a la entrada del regimiento,

porque sabes que no los veras en arto tiempo, también fue algo que me marco en primer

instancia, lo otro es cambiar la ropa de calle por el uniforme, la primera vez que sales de

franco y puedes usar tu ropa normal se siente bien extraño. La instrucción igual es bien

complicada al principio, se basa básicamente en que si puede seguir órdenes y obedecer a

tus sargentos o capitanes, desde ahí en adelante te enseñan algunas cositas bien básicas para

sobrellevar el tema Obediencia, honor y unión”. (O. Moena, comunicación personal, 16 de

diciembre de 2018). La separación se efectúa y de ciudadano se transita hacia la categoría

de conscripto. Esta etapa de separación es bien delimitada en su actuar, y se caracteriza por

aislar a los individuos durante dos meses. En primera instancia se le quita al individuo lo

que afuera del ejército lo puede diferenciar de los demás, la ropa, el peinado e incluso la

actitud frente a la acción o a una autoridad. Desde este punto comienza un proceso

transicional o liminar, son denominados conscriptos y la reclusión que se hace de estos los

primeros dos meses de instrucción militar, puede ser ilustrada por Turner (1999) como

“las personas liminares son casi siempre y en todas partes consideradas como

contaminantes para aquellos que, por decirlo de alguna manera, no han sido «vacunados»

contra ellas, pasando por el mismo período iniciático que ellas.” (1998)

Durante este periodo el conscripto debe aprender y comprender los conocimientos y

secretos que lo llevaran a posicionarse como soldado al final de la transición, a la vez que

como expone Turner (1999) lleva adoptar la estructura organizacional y jerárquica liminar,
es decir, igualdad entre los seres liminales o neófitos y obediencia y respeto para con sus

intructores.

Periodo liminar

El conscripto constituye una etapa media, en donde según Turner (1999), puede ser tratado

como un neófito, en tanto, no adquirido los conocimientos necesarios aun para dar

comprensión al rol sobre en el cual el transito concluye, es decir el soldado. Edgar Sanzana

quien realizo su “servicio militar” en el año 2011 recuerda, “Cuando eres conscripto se te

deja bien en claro que de a poco tienes que ser apto para adquirir y comprender la

disciplina del militar, durante los dos primeros meses te lo hacen saber y te lo inculcan a la

mala, mi comandante de sección (escuadras de personas juntas) siempre nos recordaba que

aún no éramos útiles ni para el ejército ni para país” (E. Zanzana, comunicación personal,

17 de diciembre del 2018). Turner (1999) hace alusión a este periodo como “… el estado

del sujeto del rito (o «pasajero») es ambiguo, atravesando por un espacio en el que

encuentra muy pocos o ningún atributo, tanto del estado pasado como del venidero.”, por lo

tanto, ser conscripto y sobre todo en los primeros dos meses de reclusión, significa

identificarse como un ser que se encuentra en el “Limen”, es decir y siguiendo al mismo

autor, no se es ni lo uno ni otro, ni ciudadano, ni soldado.

Según Turner (1999) estos conscriptos se encuentran “Estructuralmente muertos”, en tanto

a la condición de neófitos se trata, además el simbolismo que se encuentra ligado a estos es

extraño y complicado (Tanto para ellos como para quien escribe), estos simbolismos se

puede ver reflejado en una determinada moral y valor axiomático que hacen de un militar

como tal, el primer símbolo que se puede identificar con el conscripto son un conjunto de
aspectos morales y valóricos que debe aprender sea esto por medio del castigo o la

recompensa, estos se tratan de la obediencia, el honor y la unión, este conjunto de normas

se simboliza, a la vez que sintetiza, como “Ley marcial”, este último constituye un símbolo

a comprender para quienes son conscriptos a lo largo de su transicion. Esto es algo que se

puede observar de forma transversal en las entrevistas.

Oswall moena recuerda que “Los primeros días los mas choritos eran los que más sufrían,

tenían que aprender a obedecer.” (O. Moena, comunicación personal, 16 de diciembre de

2018). Siendo la obediencia uno de los factores primordiales durante la formación.

La unión es otro factor importante según el entrevistado ambos entrevistados recuerda que

se estimulaba a base de castigos al igual que la obediencia, Edgar Sanzana recuerda “Si la

jodia uno, la jodiamos todos, si yo fallaba en algo condenaba a toda mi escuadra,

generalmente se le exigía mas en los ejercicios y en las campañas”. (E. Sanzana

Comunicación personal, 17 de diciembre de 2018)

El honor se imparte según el entrevistado a base de recompensas y castigos, en este

aspecto, se recompensaba con un trato más cercano a quien era capaz de sostener de mejor

honor y se castigaba a quien no era capaz de mantenerlo, es decir, instaurar un solo camino

hacia la moral. El castigo es uno de los caminos donde se puede observar de mejor forma

los conjuntos de valores que se espera inculcar, “Las raciones de comida esta contaditas

para la escuadra, ósea, si somos 30 en la escuadra, son 30 las raciones de comida, comer

una extra significa dejar al tu compañero sin comida. Sucede que se dio aquella situación

pillaron a unos locos comiendo una raciones extras, recuerdo que el capitán de la escuadra

se acerco a los tipos y le dijo en un tono bien exaltado… Donde mierda esta su honor, están
cagandose al compañero de al lado, su país no necesita huensitos como ustedes, el ejercito

menos” fue un reta bien larga pero es lo que mas recuerdo, después, mandaron a toda la

escuadra de esos locos a hacer ejercicio hasta vomitar la comida que se habían comido”. (O.

Moena, comunicación personal, 16 de diciembre de 2018). La obediencia, la unión y el

honor el cual que se exhibe exterior e interiormente van construyendo al conscripto

durante los primeros dos meses. El aprendizaje y la exacerbación de estos los valores

constituyen una línea que separa al civil del conscripto. Se puede rescatar esta percepción

desde una breve conversación sostenida con un comandante de escuadra Pablo Esquineta,

el cual, tiene directa relación en la instrucción militar de los conscriptos, en este caso, tuvo

relación con la instrucción militar de Oswall Moena. El comandante de escuadra Pablo

Esquineta comenta respecto a los primeros meses de instrucción.

“Durante los primeros meses la prioridad en la instrucción militar es que el conscripto

adquiera y entienda lo que es un militar, el honor, el compañerismo, la entrega, sobre todo

la obediencia a sus superiores, con la obediencia también hay un aprendizaje de los rangos y

las jerarquías, ósea, como nos organizamos dentro del regimiento y el mundo militar en

general. Incluso te diría que antes de entender cosas superiores como la patria, es necesario

que aprenda y entienda las cosas que dije primero, después podemos hablar de lo que se

jura delante la bandera, porque, un tipo desordenado no va a entender ni sentir el

juramento” (P. Esquineta, Comunicación personal 16 de diciembre del 2018)

Lo que expresa y la actitud que adopta el comandante de escuadra como un participante y

quien es guía de los individuos a lo largo de este ritual, hace sentido a una de las propuestas

de Turner (1999) “…es atribuible a con frecuencia los propios participantes en los ritos

creen que lo que éstos hacen es poner a los neófitos en conexión con una deidad o poder
sobrehumano…” (p118), si se habla en términos más cercanos al autor, este comandante de

escuadra seria el “Instructor” del neófito (conscripto) a lo largo de este ritual, es decir;

“La autoridad de los ancianos es absoluta, porque representa los valores absolutos y

axiomáticos de la sociedad, en los que se expresan el «bien común» y el interés general. La

esencia de la completa obediencia de los neófitos radica en su sometimiento a los ancianos,

pero sólo en cuanto que éstos, por así decir, representan el bien común y resumen en sus

personas al total de la comunidad.” (Turner, 1999:110-11).

Pablo Esquineta identifica como un proceso crítico y fundamental los dos primeros meses,

puesto que a lo largo de los 12 meses totales, se dan momentos en que los conscriptos van

abandonando progresivamente su condición de neófitos al interiorizar y comprender los

valores axiomáticos que representa la “Ley marcial” durante esta fase este será un símbolo

dominante que condensa los valores axiomáticos del soldado y el ejército en general. Es por

esto que se les puede soltar de su reclusión o “dar de franco”. Esta etapa marca un antes y

un después en la condición de liminaridad del conscripto.

“Existen distintos momentos dentro la formación, por ejemplo el primer franco que se da a

los conscriptos posterior a la primera campaña y a los cursos al manejo de las armas, en las

dos instancias el conscripto muestra que aprendió y entendió lo que se le quería transmitir,

es capaz de pasar la campaña en base al honor, la entrega, la obediencia, y la unión hacia

sus compañeros de (sección) y es capaz de sostener un arma con responsabilidad, posterior

a esto el conscripto se encuentra apto para aprender “el amor a la patria” y por su puesto

diversas técnica de combate y sobrevivencia y lo mas importante en su juramento, la

marcha” (P. Esquineta, Comunicación personal 16 de diciembre de 2018)


Siguiendo a Turner (1999) a lo largo de este periodo liminar se puede observar como el ser

“Transicional” va cambiando progresivamente su naturaleza contaminante al adquirir los

secretos y conocimientos sobre la milicia, sus valores axiomáticos y hasta su misma

organización.

“La pasividad de los neófitos para con sus instructores, su maleabilidad, que se ve

incrementada por el sometimiento a las pruebas y su reducción a una condición uniforme,

son signos del proceso mediante el cual se les tritura, para ser moldeados de nuevo y

dotados de nuevos poderes con lo que enfrentar su nueva situación en la vida.” (Turner,

1999: 112)

Es decir el conscripto en su situación transicional debe aprender a dejar ser civil, para

comenzar a aprender a soldado y aprender sobre su nueva posición en la estructura social y

cultural. Según Pablo Esquineta, “en el juramento a la bandera se espera que el conscripto

aprendió a ser soldado” es decir se espera que el conscripto exteriorice lo aprendido durante

su proceso de transición. Una vez adquiriros los conocimiento y los secretos, se puede

comenzar a dar fin este proceso transicional, es decir, se entra en los ritos de iniciación.

Rito de iniciación (tercera fase)

El rito de iniciación se compone de 2 regimientos el Tucapel de Temuco y la compañía

andina de Lonquimay, ambos parte marchando desde el regimiento Tucapel, profiriendo

canticos que relatan hazañas y que hacen referencia a los valores y a la moral misma del

soldado, los conscriptos marchan en el centro, los comandantes de escuadra y capitanes de

sección marchan junto a los conscriptos pero al margen de estos dirigiendo el son de la

marcha, dos capitanes de escuadra llevan la bandera, para el caso de este ritual se le
denomina “Estandarte de batalla”, la marcha es dirigida a su vez por los grupos

instrumentales de denominados “Bandas de guerra”, estos acompañan los canticos

anteriormente mencionados, y dan rito a la marcha. Si lo observamos desde las propuestas

de Turner (1999) en el “juramento a la bandera” el conscripto exhibe todos los “sacra”

aprendidos y transmitidos durante su proceso de transición.

Al llegar marchando hacia la plaza, se encuentran con sus familiares como espectadores del

ritual, al igual que, comandantes del regimiento Tucapel y Lonquimay, de, además del

intendente de Temuco y el alcalde, estos son identificados como autoridades, la marcha

frente a la autoridades y los espectadores según lo recabado en las entrevistas debe ser

firme y fuerte, provocar ruido al andar, las miradas avallasadoras, ambos entrevistados

Oswall y Edgar coinciden en un frase respecto a esto último “Mirada de perro, ojos locos”,

esto según me dicen demuestra a las autoridades el “Temple” del soldado.

Al formarse las autoridades hace un pequeña marcha frente a los regimientos formas, como

una forma de marca su presencia, posterior a esto se identifican, izan la bandera y se entona

himno nacional, posterior a esto el intendente realiza un discurso sobre la conmemoración

misma del juramento a la bandera, es decir, rememora el mito sobre el que se sustenta,

relata los hechos ocurridos en la batalla de concepción, haciendo a alusión al “sacrificio

patrio” de los 77 soldados y su legado en base a este sacrificio. Posterior a esto se presenta

a quienes ascienden se subteniente a oficial de escuadra y juran, estas están diferenciados

de los conscriptos, realizan su juramento, posteriormente, los regimientos formas en

compañías (divisiones del regimiento) proceden a jurar hacia la bandera.

“Yo, (grado y nombre del jurante) juro, por Dios y por esta bandera, servir fielmente a mi

patria, ya sea en mar, en tierra o en cualquier lugar, hasta rendir la vida si fuese necesario,
cumplir con mis deberes y obligaciones militares conforme a las leyes y reglamentos

vigentes, obedecer con prontitud y puntualidad las órdenes de mis superiores, y poner todo

empeño en ser un soldado valiente, honrado y amante de mi patria.” (Servicio militar, s.f).

Posterior a esto se realizan tres “Descargas de reglamento”, según el comandante de

escuadra Pablo Esquineta, este acto es una forma reglamentaria de rendir honores, a la vez

que hacer un saludo a las autoridades, posterior el intendente y el sargento realizan un

discurso para cerrar la ceremonia y dan la orden a las compañías para retirarse marchando

al son de las “Bandas de guerra”.

Podemos identificar, - Basado en los propuesta de Turner (1999) - como símbolo a la

bandera o estandarte de combate al que se jura, en este caso como un símbolo dominante, el

cual siguiendo a Turner (1999) conserva un significado constante y consistente dentro del

sistema simbólico, tiene autonomía respecto a los fines rituales y no cambian con el

tiempo, es decir este “estandarte de batalla” representa el “Sacrificio heroico” de los

soldados caídos en la batalla de concepción, además de valores axiomáticos que llevan a

estos soldados a dar su vida por “La patria” representada en la bandera y que finalmente

dejan como un axioma para las generaciones venideras, esto a la vez, representa al soldado

mismo quien al pasar por la transición liminal logra comprender el juramento y el símbolo

mismo de la bandera, puesto que comprende los conocimientos y secretos (Turner 1999)

que hacen del soldado alguien capaz de jurar en base a obligaciones, deberes y acciones

mismas como dar la vida por la patria hacia la bandera que simboliza la patria misma. Este

símbolo es capaz de condesar cosas como la obediencia, el honor, la unión, el deber y la

moral que constituyen al soldado, a la vez que es capaz de unificar las diferencias en torno

a misma mitología que en la que se erige, ese decir, la “capacidad de sacrificio” por un
“bien mayor”, también es capaz de polarizar los sentidos, en el polo sensorial la bandera

representa el sacrificio y el rojo puede ser asociado con la sangre derramada y en polo

ideológico representa los valores axiomáticos de entrega y moral que quede llevar el ahora

soldado antes conscripto. La bandera puede ser un dominante tanto en el ámbito público

como en el experto, sin embargo, la bandera para un soldado representa en aquel momento

“Es lo que hay que cuidar y proteger po, es la patria donde vivo y mis hijas” (E.Z

comunicación personal 17 de diciembre de 2018), “Para un soldado la bandera representa el

compromiso máximo.” (O. Moena, comunicación personas 16 de diciembre de 2018).

Otro símbolo dominante que se puede ver manifestado en ritual es el de la ley marcial, el

cual consiste en un conjunto de leyes y códigos que delimitan el comportamiento del

soldado y el regimiento, en este caso este símbolo se ve ilustrado en las “tres descargas

reglamentarias”, que representan un homenaje a los solados de la batalla de la concepción a

la vez que un saludo hacia la autoridades, esto según Pablo Esquineta el comandante de

escuadra. Un símbolo según Turner (1999) es capaz de generar acción.

El honor y la unidad que son representados en la marcha constituye otro tipo de símbolo,

Oswall Moena y Edgar Zanzana concuerda al referir a la marcha como una muestra de lo

aprendido, - en tanto a la unidad y honor -, es decir, mientras marchan deben demostrar que

son una solo Edgar Z. refiere a esto con el hablar al unísono de la compañía, por otro lado,

Oswall M refiere a la coordinación de pasos mientras se marcha, ambos coinciden en que

también es una muestra de actitud marcial. Pablo Esquineta agrega a esto “La marcha es

una demostración de destreza, unidad y carácter”.


Como investigador interpreto estos tres símbolos como parte de una estructura total,

considerando que esta posee sus propios valores axiomáticos que rigen, norman y

representan a los individuos, siguiendo a Turner (1999), estamos símbolos se pueden

conceptualizar como una fuerza de campo de acción social sus propiedades se hacen

inteligibles y explicables.

Por otro lado Alfredo Moena (Padre de Oswall Moena), al ser consultado respecto a su

interpretación de estos símbolos, en su posición de espectador, el refiere a lo siguiente,

“Para mi la bandera siempre ha remitido a mi tierra, pero no se si sea capaz de dar la vida la

vida por ella, así como prometió el oswall, la marcha me parece un forma en que los

conscriptos pueden demostrar su disciplina y orden, los disparos sinceramente nunca

completamente, supongo, que son una forma de homenajear a los caídos.” (A.M

Comunicación personas 16 de diciembre de 2018). Pese a que el conocimiento “publico”

de estos símbolos no sea muy dispar del conocimiento experto, el primero posee menos

profundidad y arraigo a los valores que vertebran al ejército.

El ritual de paso que supone la instrucción básica de un conscripto, supone un transito en el

cual este se reformara, en el sentido de la transición de categorizarse como ciudadano, hacia

la categoría de conscripto, periodo en el cual deberá adquirir y comprender los

conocimientos sobre los valores axiomáticos necesarios para hacer inteligible el juramento

hacia la bandera. El juramento a la bandera solo se puede hacer comprensible en polos

sensoriales e ideológicos, en la medida en que el conscripto logre entrar, - como lo ilustra

Turner (1999)-, en un proceso de “Trituración” y se pueda volver a “Moldear”,

reconociendo los nuevos valores, deberes, obligaciones, leyes y derechos que son

adquiridos al final de su transición como soldado.


Conclusiones

Me parece interesante como es que por medio de este autor se puede abstraer el cotidiano,

es decir, nunca pensé que “el juramento a la bandera” al que he asistido en reiteradas

ocasiones como espectador fuese un “ritual de paso” tal delimitado, a la vez que, solo por

medio de este trabajo me entere sobre la experiencia misma de mis cercanos a lo largo de

su transición, también es interesante reflexionar sobre el impacto de esta proceso transición

en el los sujetos, puesto que siguiendo la percepción de Turner (1999) sobre el ritual de

paso, el cual produce un cambio que es imposible de revertir , puesto que, para terminar de

transitar desde un estado a otro en la estructura social, se deben olvidar ciertas cosas y

aprender otras nuevas, para finalmente, tal y como refiere el mismo autor, formar parte del

parto de un nuevo ser, con nuevas obligaciones, nueva moral, nuevos derechos, que en el

caso de un soldad se rige por otro tipo de ley, en este punto, me parece relevante resaltar el

hecho de que nunca había reflexionado de esta forma respecto a con quienes he generado

lazos de amistad.

Con el desarrollo de este trabajo se fue haciendo cada vez más patente la propuesta de

Turner (1999) sobre el ritual y su función, es decir, este autor comprende que el ritual

cumple una función esencial en las distintas dinámicas que se dan a lo largo de la vida

human en la sociedad, es decir tal como menciona Turner, los rituales adaptan y readapta

periódicamente a los individuos biopsíquicos a las condiciones básicas y a los valores

axiomáticos de la vida humana social. Es decir los rituales no solo sirven para comprender

que un sujeto puede transitar desde un “estado” a otro en la estructura social, si no que

también, permiten comprender la dinámica misma del movimiento de un estado a otro, en

relación al sujeto, con esto me refiero a que deja de ser este último y lo que aspira ser.
Comprender los símbolos imbricados en los procesos rituales, permite la aprehensión de

una forma determinada de relación social y cultural entre personas y su medio, las cuales

estas cristalizadas en los símbolos que nos rodean, es decir, para civil la bandera puede ser

un símbolo que se identifique con una “nación unida”, para otro la bandera significa una

pertenencia a un determinado lugar, sin embargo, para alguien que se categoriza como

soldado, tal y como se percibe en la entrevista, la bandera simboliza valores y morales tan

dignos de devoción que instan a dar la vida por ellos, es decir, los símbolos que nos rodean

y que pueden ser percibidos por todos quienes se encuentren dentro de un estructura social

determinada, son percibidos de distinta forma, a la vez que, producen distintos sentimientos

y pueden llevar a distintos tipos de acciones tan dispares como la indiferencia o el

sacrificio, es por esta razón que la problemática de investigación propone que los símbolos,

en este caso la bandera como un simbolo dominante, solo pueden ser comprendidos , - para

efectos del juramento hacia esta misma -, a la luz de un ritual, más precisamente un ritual

de paso, el cual hace inteligible para el sujeto que se embarca en esta transición nuevos

símbolos o la reinterpretación se los mismos, los cuales se encontraban interpretados e

imbricados en otra posición de la estructura social.


Bibliografia

Turner V. (1999). “I. Símbolos en el Ritual nmbu”. En La selva de los símbolos, Siglo XXI.
Madrid.

Turner V. (1999). “Entre lo uno y lo otro: El periodo liminar en los <<Rites de


pasagge>>”. En La selva de los símbolos, Siglo XXI. Madrid.

Servicio Militar (s.f) Himnos y Juramentos., www.serviciomilitar.cl/?page_id=35.

Ejercito de chile (2015). Juramento a la bandera.


https://www.ejercito.cl/archivos/juramento_2015_mer.pdf

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