Rumiñahui, Calicuchima y Epiclachima y los tres niveles de la mente en El tesoro de los

Llanganatis de Paúl Puma

Autores: Huertas, L., Macías, G. y Párraga, K.

licethhuertast@gmail.com

gdmacias98@gmail.com

kennysheldon19952012@gmail.com

Resumen

El presente trabajo expone una relación entre la estructura del aparato psíquico y los

personajes principales de El tesoro de los Llanganatis de Paúl Puma. El objetivo principal es

comparar las características de estos personajes con las del consciente, subconsciente e

inconsciente. El ensayo se sustenta en el análisis de la obra literaria y en una revisión

bibliográfica. Se realiza una recopilación histórica de Rumiñahui, Calicuchima y

Epiclachima; a continuación, se presenta una explicación de los tres niveles de la mente de

Sigmund Freud y finalmente, se contrastan los conceptos de la Teoría de Psicoanálisis y el rol

de los personajes en la obra.

Palabras claves: Epiclachima, Calicuchima, Rumiñahui, consciente, subconsciente e

inconsciente.

Abstract

The present work exposes a relationship between the structure of the psychic apparatus and

the main characters of The Treasure of the Llanganates by Paúl Puma. The main purpose is

to compare the characteristics of these characters with those of the conscious, subconscious

and unconscious. The essay is based on the analysis of the literary work and a literature

review. The paper shows: a historical compilation of Rumiñahui, Calicuchima and

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Epiclachima, an explanation of the Sigmund Freud's structural model of the psyche. Finally,

the concepts of Psychoanalysis and the role of the characters in the play are contrasted.

Keywords: Epiclachima, Calicuchima, Rumiñahui, conscious, subconscious,

unconscious.

Introducción

En el presente ensayo trabajamos los personajes de Rumiñahui, Epiclachima y

Calicuchima con relación al papel que cumplen en la obra teatral El tesoro de los Llanganatis

de Paúl Puma a partir de los postulados de los niveles de la mente: consciente, subconsciente

e inconsciente planteados por Sigmund Freud. A lo largo de este trabajo, citamos estudios

tales como los realizados por Sigmund Freud en su Teoría Psicoanalítica de la personalidad,

diversas fuentes históricas bibliográficas como Rumiñahui del historiador Enrique Garcés y

los hechos narrados por César Vicente Velásquez en su libro El reino de Quito en Tiempo de

Atahualpa, en el que describe los hechos ocurridos en conquista incásica en Ecuador. Y, de

la misma manera, mencionaremos a autores tales como Alex Arroyo Carbonell, en su artículo

de internet Los tres niveles de la mente y a Guillermo Segarra Íñiguez con el libro Historia

del Ecuador.

Contexto histórico y social

La historia de la resistencia del Reino de Quito a la invasión incaica está llena de

advenimientos, de desgracias y acciones de valor, de sucesos atroces y terribles sacrificios.

En 1471, Tupac-Yupanqui inició la conquista de los señoríos de los Andes del norte, los

Andes del Ecuador actual. Las motivaciones principales para la conquista buscaban favorecer

la reproducción espiritual y material del imperio.

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 El Reino de Quito mostró una tenacidad que solo poseen los pueblos valerosos y

altivos. Tupac-Yupanqui enfrentó a Epiclachima, general quiteño, que organizó las defensas

de la patria. Diligente y heroico supo enfrentarse con el Inca, deteniéndole en cada fortaleza

que caía empapada con la sangre de miles de soldados, sacrificándose en la lucha por la

independencia. Su muerte en combate determinó el triunfo de los cuzqueños (Garcés, 1953).

En 1487, el inca Huayna-Cápac prosiguió la guerra de conquista iniciada por su padre Tupac-

Yupanqui y doblegó la resistencia del Reino de Quito.

Así, en el ejército de Atahualpa, en el momento de la guerra con Huáscar,

prevalecieron los jefes de origen quiteño. Calicuchima, Quisquis y Rumiñahui fueron

generales del Inca-shyri, cuyos nombres hacían temblar al enemigo. Diestros y con tácticas

eficaces tenían bajo su mando a un ejército de 50 000 hombres. Los combates fueron feroces,

logrando la victoria gracias a la audacia y optimismo intrépido de los soldados.

El general Calicuchima, hijo predilecto de Epiclachima, fue uno de los más dignos

Jefes de Atahualpa, con él avanzará a Cusco y luego tendrá que combatir a los españoles en

Jauja. Calicuchima, dueño de un triunfo significativo e informante honorable, se oponía a las

falaces de los blancos. Con brío y talento, mantuvo a sus soldados en tensa resistencia en

Mocha, Ambato, Latancunga y hasta muy cerca de Quito (Garcés, 1953).

Calicuchima era hosco y coercitivo, repugnaba feroz las voluntades decadentes, a los

tímidos que tenían minada su fe. Sostenía una tesis honorable, defender el derecho y el honor

y resistir hasta la muerte. Era temido en toda la tierra, por haber conquistado por mandato de

su señor más de seiscientas leguas de tierra, donde hubo enfrentamientos y de todos salió

vencedor. Calicuchima custodió a Huáscar y le dio muerte, fue quemado en Cajamarca antes

que Atahualpa.

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 Quisquis y Calicuchima desempeñaron con honor y sabia conducta sus delegaciones.

Tenía orden estrecha del Inca para que jamás usasen la compasión o gentileza con los que se

mostraban rebeldes; y para que así mismo recibiesen con paternal amor a los que

voluntariamente se sometiese a su autoridad. En 1532, frente a Huáscar, los dos generales

resolvieron tomar de lado al enemigo, desviándose de la vía real y dejando pasar delante al

ejército de Huáscar. Huáscar fue preso y conservado con vida según las estrechas órdenes que

tenían de Atahualpa (Velásquez, 1980).

Los tres niveles de la mente

El Aparato Psíquico.

Sigmund Freud acuña este término para enmarcar el funcionamiento de la mente.

Denomina aparato psíquico a la mente humana debido a que es la encargada de dirigir,

controlar y manejar la energía psíquica y todas las funciones de la mente y la memoria

(Echegoyen, 2002). Los tres niveles de la mente es el primer tópico planteado por Sigmund

Freud en donde divide el funcionamiento del aparato psíquico en tres puntos centrales:

consciente, subconsciente e inconsciente (Diaz, 2018).

El consciente.

En el caso del nivel consciente se plantea una parte de la mente que logramos

controlar y que se encuentra totalmente lúcida con respecto a lo que se sabe y lo que se

piensa. “A pesar de que creemos que algo que dominamos lo hacemos de forma muy

consciente, resulta paradójico que cuando más dominamos cualquier actividad ésta acaba

volviéndose subconsciente o incluso inconsciente” (Arroyo, 2014). De esta manera, se puede

evidenciar como cada uno de estos niveles se relaciona y permite una suerte de transición

hacia el nivel de la mente que sigue.

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 El subconsciente o preconsciente.

Arroyo (2014) expresa que el subconsciente o preconsciente es un punto de nuestra

mente que se relaciona de forma directa con los sentimientos, los deseos profundos, así como

las fobias y las filias que el ser humano posee. “Hoy día sabemos que la mente intelectual

puede perderse con el paso de los años, pero la mente subconsciente nunca olvida, ya que

nuestros recuerdos con carga emocional son grabados a fuego en esta parcela” (Arroyo,

2014). Es decir que cada evento, suceso o emoción que un individuo experimente en el día a

día es captada por el subconsciente y permanece archivado para siempre en la memoria.

El inconsciente.

El tercer nivel se denomina el inconsciente. Este nivel de la mente se relaciona con el

carácter instintivo, protección y defensa de la psicología humana; se lo considera la parte más

básica del aparato psíquico. No importa el coeficiente intelectual que tengamos, porque la

parte inconsciente nos devuelve a la época de las cavernas, ya que de forma inconsciente

realizamos un gran número de cosas que son absurdas para el sentido común.

También, se lo conoce como la mente reactiva, basada en comportamiento binario:

huir o pelear, afrontar o rechazar. (Arroyo, 2014). Y, se lo denomina mente reptiliana, ya que

es la parte de la mente que realiza la acción de los reflejos a la hora de sentir una amenaza

próxima.

Los niveles de la mente en El tesoro de los Llanganatis.

En el libro El tesoro de los Llanganatis de Paúl Puma, en el primer acto se presenta a

tres personajes: Rumiñahui, el general inca y, Epiclachima y Calicuchima, guerreros incas. Se

denota que el papel de los guerreros incas en relación con Rumiñahui es presentado como una

retrospección dentro de la mente del general inca. Esto se evidencia en el siguiente diálogo de

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Rumiñahui: “Malditas voces. Por qué no dejan de martirizarme. Si las tuviera en frente las

molería ahora mismo.” (Puma, 2017, p.16). Aquí, demuestra que aquellas voces de los

guerreros no se encuentran frente a él, por lo tanto, se infiere Epiclachima y Calicuchima se

originan en su mente.

Posteriormente, estos dos personajes se ven materializados: “Calicuchima y

Epiclachima siguen hablando de modo inaudible y quedan paralizados. Rumiñahui toca el

rostro de Calicuchima, se abraza a sí mismo y grita desgarradoramente, por unos segundos.

Calicuchima inhala profundamente hasta el bajo vientre y luego sopla sobre Rumiñahui.”

(Puma, 2017, p. 17). El narrador describe cómo interactúan Rumiñahui y Calicuchima en este

fragmento del primer acto, demostrando que ahora los guerreros incas se encuentran junto a

al general.

Después de estos acometimientos, se interpreta que, los tres personajes del primer

acto, es decir, Rumiñahui, Epiclachima, y Calicuchima forman parte de la mente de

Rumiñahui. El general inca cumple el rol del consciente y hasta este momento los

acontecimientos ocurren en un espacio onírico de la cabeza de Rumiñahui, es decir, en su

aparato psíquico.

Rumiñahui como el consciente.

Rumiñahui, dentro de la obra es relacionado como el consciente. Las características de

este nivel del aparato psíquico son similares a su personaje en la obra. Una de ellas es la

conexión con el mundo exterior e interior (Diaz, 2018). Esta postura se evidencia en: “Una

luz persigue a Rumiñahui que despierta de su sueño, se incorpora lentamente, encuentra su

postura cero con las rodillas ligeramente flexionadas.” (Puma, 2017, p. 21). Además otra

elemento que lo identifica como el consciente es la dirección de la motricidad que, en

comparación con el personaje, se demuestra al momento que adopta la postura descrita,

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demostrando que Rumiñahui en su contraparte material o corpórea posee pleno control de sus

movimientos.

Calicuchima como el subconsciente.

Cuando Rumiñahui aparece en escena, se interpreta al personaje de Calicuchima como

parte de la cabeza del general inca. En la página dieciocho Calicuchima empieza a discutir

con el general inca sobre quién es él en realidad. Después de hacer una descripción de

Rumiñahui en donde relata el significado de su nombre comparándolo sus ojos, su cara y su

perfil con una piedra, Calicuchima expresa: “Sí. Soy el personaje que tú mismo creaste

señor” (Puma, 2017, p. 18). Por consiguiente, en El tesoro de los Llanganatis, Calicuchima es

una creación de la mente de Rumiñahui.

Previo a los acontecimientos citados, en el instante en que Calicuchima relata lo que

hizo Rumiñahui después de huir, el general inca dice: “Es mentira, es mentira. Es mentira.”

(Puma, 2017, p. 17). De esta manera, deducimos que Calicuchima conoce más de los

recuerdos de Rumiñahui que él mismo. Por lo tanto, el personaje de Calicuchima simboliza el

subconsciente porque el subconsciente es la parte del aparato psíquico que mantiene

recuerdos ocultos del consciente, y dichos recuerdos, en algunas ocasiones, pueden

convertirse en recursos del nivel consciente (Diaz, 2018). En conclusión, la intervención de

Calicuchima en la trama cumple la función de subconsciente debido a la gran cantidad de

información que maneja en relación con lo que Rumiñahui sabe de él mismo y su situación.

Epiclachima como el inconsciente.

En el primer acto, Epiclachima hace su aparición recuperando la movilidad y

dirigiéndose a Rumiñahui que expresa: “Aaaaghhhhh, roca de nuestra roca, señor, debes estar

muy enfermo para no recordar a tu mano derecha, porque está más distante de tu corazón…,

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pero seguramente recordarás a tu mano izquierda, a mí…, a Epiclachima” (Puma, 2017, p.

20). Por lo cual se infiera que Epiclachima está más ligado a los sentimientos más profundos

del general inca, lo que relacionamos con un simbolismo referente al inconsciente.

El inconsciente se caracteriza por ser el encargado de realizar la acción de reflejo y

protección y contener los conocimientos fuera de la parte consciente para acudir a ellos

cuando estos son requeridos por el consciente o subconsciente (Diaz, 2018). Pese a que no

existe como tal una evidencia de estas características en el personaje Epiclachima en la obra,

es necesario citar el siguiente fragmento: “(Con melancolía.) ¿Tan mal te hizo morder el fruto

el árbol prohibido y absurdo de este laberinto?” (Puma, 2017, p. 21). “El fruto de un árbol

prohibido”, es una alusión a los deseos más primitivos de la mente humana y a su vez, un

origen de la existencia (Arroyo, 2014). Por lo cual, esta inferencia abre el punto de

comparación entre Epiclachima y el nivel inconsciente.

Conclusiones

El tesoro de los Llanganatis además de ser una obra de literatura, también expone

hechos y personajes históricos importantes dentro de nuestra identidad como Rumiñahui.

Cómo está representado en la obra, su personalidad y sus actos, son factores importantes que

nos identifican con nuestras raíces incas.

El aparato psíquico y los niveles de la mente: consciente, subconsciente e inconsciente

propuestos por Sigmund Freud son conceptos fundamentales dentro de la Teoría del

Psicoanálisis que trata de explicar cómo el funcionamiento y estructura de nuestra mente

influye en nuestra forma de actuar.

Los personajes de Rumiñahui, Calicuchima y Epiclachima en El tesoro de los

Llanganatis reflejan las características de cada uno de los tres niveles de la mente propuestos

8
por Sigmund Freud: consciente, subconsciente e inconsciente respectivamente. Razón por la

cual, la obra tiene un carácter psicológico ya que muestra una lucha interna que acontece en

la mente de Rumiñahui.

Recomendaciones

Como ecuatorianos es relevante conocer la historia de nuestros pueblos y ciudades por

lo cual, se recomienda informarse sobre estos hechos y apoyar obras tanto visuales,

audiovisuales o escritas que permitan rescatar y formar parte de nuestra cultura.

Los estudios sobre la estructura y funcionamiento de nuestra mente tratan de explicar

el porqué de nuestro comportamiento, se recomienda analizar más información al respecto

para comprender y cuidarnos psicológicamente.

Es necesario realizar un trabajo más profundo de investigación con los tres niveles de

la mente respecto a posturas de autores contemporáneos que nos permitan realizar un mayor

contraste entre las características de los personajes de la obra y el consciente, subconsciente e

inconsciente en el campo de la psicología.

Bibliografía

Arroyo, A. (2014). Los 3 niveles de la mente. Programa de Training para tu desarrollo

personal. Las leyes del éxito. Recuperado de: http://blog.lasleyesdelexito.com/3-

niveles-de-nuestra-mente/

Diaz, F. [Resumenes Entelekia]. (2018, enero, 17). Freud, Primera Tópica, Consciente

Preconsciente Inconsciente. [Archivo de video]. Recuperado de:

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Echegoyen, J. (2002). Diccionario de psicología científica y filosófica. Torre de Babel

Ediciones. Recuperado de: https://www.e-

torredebabel.com/Psicologia/Vocabulario/Aparato-Psiquico.htm

Garcés, E. (1953). Rumiñahui. Quito: Casa de la Cultura.

Puma, P. (2017). El tesoro de los Llanganatis. Quito: PUMAEDITORES.

Segarra Íñiguez, G. (1986). Historia del Ecuador. Quito: OFIMEX- Editor.

Thibaut, M., & Hidalgo, G. (1996). Trayecto del psicoanálisis: de Freud a Lacan. Eds. Univ.

Diego Portales.

Velásquez, C. (1980). El reino de Quito en Tiempo de Atahualpa. Quito: Editorial Casa de la

Cultura Ecuatoriana.

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