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Escena I
Lisa: De acuerdo…
Andrea: ¡Hola!, *Desesperada* Bien, ¿Tú cómo estás?, ¿cómo te encuentras?, ¿en
qué andas?
Tiffany: *Fastidiada* Ehm, okay, suficiente. ¡Lisa!, Hola…, ¿Cómo estás? *arro-
gante* te queda como apretada la ropa ¿no?, y hoy no te arreglaste mucho ¿cierto?
Tiffany: *Interrumpiendo y fastidiada* ¡Da igual!, tengo cosas que hacer… Byee
*Les manda un pico con la mano*
Escena II
Dr. Sánchez: De acuerdo, ¿entonces esta niña Tiffany te trataba mal?, ¿te sentías
acosada por ella?
Lisa: Puees… No es tanto que me tratara mal… Más bien quería ser como ella, para
mí era el prototipo de mujer perfecta, y yo me sentía… Pues, basura en comparación
a ella… Pero bueno, continuaré, esa tarde llegué a mi casa…
(Vuelve al consultorio)
Dr: ¿Así de mal te sentías?, probablemente bajo autoestima. *Anota algo en la li-
breta* ¿Que sucedió?
(Vuelve al comedor)
(Vuelve al consultorio)
Dr: Ya veo, así comenzaste con la bulimia, ¿en el momento sabías la gravedad de la
situación?
Escena IV
(Empieza en la casa, Lisa en su cuarto acostada en la cama durmiendo, se escuchan
ruidos y sale a ver quién es)
Lisa: ¿Mamá? ¿Eres tú?
Margarita: *Ebria* JAJAJA, ¿Me hablas?, ¡Hip!, Holaaaaa, tengo sed, hambre,
sueño, Jajajaja ¡Hip!
Margarita: *Ebria* son cosas que una niña ¡Hip! Como tú no entendería, una niña
tontica como tú ¡Hip! No conoce lo bueno de la vidaaa ¡Wooo!
(Vuelve al consultorio)
Lisa: Probablemente sí, me sentía muy sola, desesperada, lo mínimo que esperaba
era una madre que me apoyara, aconsejara y ayudara, cosa que al no tenerla, me sentí
aún peor…
Escena V
Tiffany: *Interrumpiendo* de mí, ahora es mi amiga, creo que a nadie le hace bien
estar con alguien como tú… Creo que es mejor que te vayas a mirar a un espejo. Por
cierto, obtuviste F en tu examen de matemáticas… Al parecer tontica también nos
salió.
…
¡Vamos Andrea!
*Lisa se queda observando con tristeza*
(Vuelve al consultorio)
Dr: Estas sesiones creo que han servido, hoy puedo decirte que has finalizado tus
terapias, has aprendido a valorarte, y debes hacerlo todo el tiempo, ¿quieres decir
algo más?
Narrador: Michelle… Hmm, se ve como exitosa, seguro hizo algo malo para lo-
grarlo (se ríe), y tiene un amigo… Antonio…, se ve que se la llevan bien, miremos
más:
(En un restaurante)
Michelle: Fue agradable escuchar de ti, no había hablado contigo desde que volví a
Colombia.
(Llega mesero)
Mesero: ¿Se les ofrece alguna bebida?
Novia: Entonces ¿él puede gritarme y yo no a él?, ¿por qué?, ¡es injusto!
Michelle: Pues sí, en un mundo tan sexista como en el que vivimos, muchas personas
debemos defendernos. Déjame te doy un ejemplo
Ejemplo 1
(Un hombre y una mujer vestidos de manera elegante se acercan, cada uno lleva un
aviso con la palabra político escrita en ellos).
Michelle: Si te soy sincera me parece una falta de respeto, es injusto pensar que las
mujeres tienen una menor posibilidad de triunfar en el mundo de la política.
Antonio: Está bien, te entiendo sin embargo ¿no crees que muchas veces puede
estar ocurriendo lo contrario?
Antonio: Que las mujeres pueden ser la beneficiadas en ciertos casos, de hecho te
puedo hablar de algo que me pasó hace unos años.
Ejemplo 2
Antonio: Siempre he sentido un amor especial hacia los niños, hacia lo humano,
hacia lo abstracto… Cuando era más joven y mis oportunidades de trabajo eran po-
cas por mi edad, decidí que quería cuidar niños… Sí, ser niñero. ¿suena raro no?
Antonio: Bueno, la verdad estaba desesperado por cuidar niños, son almas inocentes
de Dios… Algunos jaja
…
Y por más que intentaba, no me llamaban, aunque, hubo una pareja que me dio la
oportunidad. Se trataba de una mujer muy bella, su pareja y una bebé, ambos nece-
sitaban trabajar sin preocuparse por la niña.
Antonio: Sí, amo los niños. Podría estar con ella 7am a 5pm, cantaríamos, leeríamos,
y demás, aparte tengo tres hermanos y ayudé a criarlos *Llorosea*.
Esposo: ¿qué?…
(días después)
Antonio: ¿En serio?… Pues… Bueno, denle mucho amor a Emma (la bebé) por mí
*Sale llorando*
Antonio: Y me di cuenta de que hay cosas que no son para los hombres, también me
parece injusto… No solo ustedes son discriminadas en la sociedad.
Michelle: Te entiendo… Pero eso de los trabajos no solo le pasa a los hombres
Antonio: No, pero sí recuerdo que cambiaste mucho tu percepción sobre el tema
de la noche a la mañana.
Michelle: La verdad nunca te conté a pesar de ser tan cercanos porque realmente
me frustra pensar en ello.
Michelle: Obviamente fue antes de irme del país, como sabrás mi carrera es muy
solicitada, sin embargo las personas que aplican también son muchas, por lo que es
muy difícil conseguir empleo.
Antonio: Cuéntame.
Michelle: Bueno, mi rutina en la mañana fue la misma, llegué a la hora que me di-
jeron, ni un minuto antes ni uno después. Como te mencioné, esto era muy impor-
tante para mí, quería que todo saliera perfecto, así que entré al edificio, me anuncié
en la recepción y subí por el ascensor al piso 24, claramente había una gran canti-
dad de personas aplicando, en su mayoría hombres, recuerda que mi área laboral
tiende a ser vista más que todo para hombres.
Antonio: Sí…
Michelle: Las personas pasaban uno por uno, las caras de tristeza de las personas
al momento de salir eran innegables, y sinceramente me parecía excelente.
Michelle: Siento que este empleo es para lo que estudié, y para lo que pagué millo-
nes en una universidad.
Empleador: Ya veo, de acuerdo a sus documentos se nota que está más que prepa-
rada, sin embargo amorcito la carga laboral es muy fuerte.
Michelle: Soy consciente de ello.
Empleador: Sí, siento que situaciones como lo puede ser quedar embarazada no
favorecerían a la empresa.
Empleador: A pesar de que sé que está muy preparada no creo que éste sea el tra-
bajo ideal para una mujer, realmente las jornadas de estrés serán muy largas. Y está
comprobado que las mujeres se estresan más que lo hombres, además…
Michelle: (Lo interrumpe) Perdón señor pero lo que está diciendo es un poco ofen-
sivo.
Empleador: Ve señorita, a eso es a lo que me refiero, las mujeres son muy sensi-
bles.
Michelle: (Llorando) Puede que sí, ¿Pero sabe por qué?, porque esto me apasiona,
mi carrera me apasiona y me frustra pensar que gente como usted…
Empleador: (La interrumpe) Señorita, el tono que está usando lo encuentro como
incomodo, por favor retírese, si queremos escuchar más de usted, la llamaremos.
Michelle: (Respira profundo) Este trabajo en serio me gusta, no lo hago por el di-
nero como la mayoría de personas en este negocio, lo hago porque lo amo, ¿Usted
no lo hace?
Empleador: (Tono fuerte): ¿Qué clase de tonterías está diciendo? Por supuesto
que lo hago.
Michelle: ¿Enserio?, porque según lo que dicen de usted en las revistas de nego-
cios, su padre lo obligó a estudiar está carrera.
Michelle: Usted es la prueba de que en este país falta mucho para que la igualdad
realmente exista, y debido a esto le agradezco que me haya dejado entender, lu-
charé para que gente como usted se trague sus palabras.
Empleador: (ríe) Princesa, por favor retírate.
Antonio: Ya veo.
Michelle: Sí (suspira).
Michelle: Hace dos semanas organizó una reunión para hablar de negocios, como
sabes mi empresa fue capaz de lograr un repentino éxito, tanto así que me contactó,
debe estar preocupado por su porción de la participación del mercado, no creo que
me recuerde.
Michelle: Gracias.
Michelle: En ese caso también te agradezco porque me ayudaste a ver que la de-
sigualdad puede llegar de ambas partes y sin importar aquello, que simplemente no
debería existir.
(Llega el mesero)
Escena I
Narrador: Mucho drama en estas fotos… Esta niña Lina se ve como rara, miremos
más a fondo su historia…
Carlos: Prácticamente que mi jefe tenía la cara de una caricatura, cómico ¿no?
Lina: Jaja sí papi. Miren que hoy me felicitaron en el colegio por ser la mejor en mi
clase
(Cambia a Monologo)
Lina: Bueno, así fue hace un buen tiempo, reíamos, confiábamos, básicamente éra-
mos felices, yo no podía pedir a una mejor familia.
(Cambia al colegio)
Isabel: Linaaaa, ¡por fin llegas!, ¿hiciste la tarea de matemáticas?
Lina: Jaja las amo amigas, miren que tengo mención de honor, me estoy volviendo
como nerdita jajaja
Isabel: ¡Felicitaciones!
(Cambia al monologo)
Lina: Mis amigas eran una parte esencial de mí, siempre me apoyaron, más que todo
Isabel, ella es una muy buena persona, sé que era una verdadera amistad.
Escena II
(Monologo)
Lina: Los días pasaban y todo seguía igual, hasta que mi papá empezó a llegar tarde,
muchas veces ebrio, mi mamá se deprimía al ver esto, y por supuesto… Me afectaba
a mí *Con voz de llorar*
(Vuelve a su casa)
(Colegio)
Lina: Pues mi papá llega un poco tarde a la casa, mi mamá me dice que es el trabajo,
pero es todos los días, y creo que le molesta.
Claudia: Todo se arregla con el dialogo, así que trata de hablar con tus papás, y que
de buena manera resuelvan esto, nada que el amor no arregle.
Lina: Sí amigas *achantada* todos los días discuten, tal vez no se quieren, me da
miedo que quieran separarse
Isabel: Es cierto, todas las parejas pelean, tienen que hablar, y dejar que el amor
gane.
(Monologo)
Lina: En ese momento yo no lo entendí, pensé que era una simple pelea de espo-
sos… No me daba cuenta de la gravedad de la situación…
Empecé a notarlo cuando ya las cosas se fueron a un extremo.
(Vuelve a la casa)
*Carlos le da un puño*
Escena III
(en el colegio)
Lina: Les seré honesta, mi papá me golpeó ayer, creo que también a mi mamá…
Estoy asustada, y muy preocupada
Isabel: Lina… Lo siento mucho, en verdad que ya no me parece normal, debes ha-
blar con alguien, y tengo a la persona
…
Sofi, vamos
Sofía: Sí sí, lo siento *las sigue*
(Monologo)
Lina: Ellas tres fueron mis salvadoras, hicieron lo que yo no me atreví a hacer… Mi
profesora llamó a mi madre y los directivos, los cuales le ofrecieron a mi madre un
grupo de apoyo para ambas y uno de los mejores abogados para hacer los papeles
del divorcio, era lo correcto…
Escena Final
Juanes: Jaja, no se preocupe, para eso estoy, me retiro, saludos a su hija, que esté
muy bien
María: Lina, me alegra mucho la noticia, entonces ¿ya no vivirán más con él?
María: Me imagino, es más, creo que eres una de las personas más fuertes que co-
nozco, no es una situación fácil, pero con alguien tan madura como tú es posible
conseguirlo.
María: Es verdad, tú no eres menos ni más que nadie, y mereces el mismo trato,
respeto, y cariño que todos en este mundo
Karen: Estuvo bien haber hablado, nunca te calles lo que sientes o lo que suceda
María: Siempre recuerda que tienes apoyo, en este caso nos tienes a nosotras, a tus
amigas y más gente.
FIN.