LA CONTABILIDAD NUEVOS HORIZONTES

Por: Hansel Stevenson Segura Cala

La contabilidad es el lenguaje de los negocios, permitiendo comunicar todas las operaciones

de una empresa a sus propietarios o inversionistas (Angel Maria Fierro, 2017), en la actualidad la
información precisa, la complejidad que tienen las operaciones financieras y los cambios surgidos
a través de las normas internacionales, han hecho del contador indispensable en las entidades ya
sean públicas o privadas, toda vez que debe ser una persona con cocimientos idóneos y acordes,
que le permitan generar un impacto en lo toma de decisiones al interior de las mismas.

Dicho lo anterior se entiende como contador público “la persona natural que, mediante la
inscripción que acredite su competencia profesional en los términos que determine la ley, está
facultada para dar fe pública de hechos relacionados con su profesión, dictaminar sobre estados
financieros y demás actividades afines a la ciencia contable”. (Républica, 1990).

Considerando así el asunto, la responsabilidad que se adquiere al momento de ejercer esa labor se
puede interpretar por muchos como una carga muy pesada que demanda alta exigencia y altos
niveles de estrés, si bien es cierto que a lo largo de los años se ha llegado a afirmar que es algo
cíclico y monótono, viéndola desde diferentes puntos de vista, también disfruta de ciertas ventajas
frente a otras carreras universitarias; me atrevo a aseverar que es posiblemente una de las
profesiones más completas y fundamento lo expuesto en que esta posee un amplio campo de acción
que abarca actividades financieras, administrativas, fiscales e incluso ambientales, por ello todo
aquel que desee embarcarse en esta aventura deberá contar con ciertas competencias genéricas
como base para su desarrollo como profesional.

Después de esta deliberación quiero hacer este interrogante ¿por qué estudiar Contaduría Pública?
se tiene presente el mito de que la Contabilidad son solo Matemáticas, a pesar que se deben utilizar
fundamentos de esta ciencia, son dos disciplinas diferentes que se complementan para
determinados fines, en la actualidad eso es un problema que ha ido desapareciendo, ya que se
cuentan con diversas herramientas tecnológicas que facilitan la actividad contable; por otra parte
la tendencia respecto al enfoque en el imaginario del común es visualizar al contador en una oficina
consumido por la repetición de procesos, sin embargo ese paradigma ya es historia, se debe tener
en cuenta que unos de los criterios que deben poseer los aspirantes, es la actitud emprendedora;
seguramente muchos empezaron de esa manera, por lo tanto la reflexión yace en que no todo el
tiempo estaremos condenados a un escritorio, pero eso depende en gran manera de la voluntad y
de la visión con se cuente.

En la actualidad con la revolución tecnológica, esta en auge la creación de empresas de marketing

digital y es allí donde radican inmensas oportunidades para poner en práctica lo aprendido; la
mayoría de empresarios que emprenden este tipo de negocios, no tienen una base solida en
conocimiento respecto a la constitución de empresa, a lo que un contador titulado podría de manera
oportuna dar respuesta, orientación y asesoría a los vacíos presentados en este nuevo mercado, solo
es cuestión de tener mente abierta, dispuesta al cambio, con un gran sentido de adaptabilidad al
medio y porque no con un enfoque internacional.

Como contadores desarrollamos la habilidad de identificar fallas en cualquier registro de

actividades económicas que una vez analizadas se transforman en información valiosa para la toma
de decisiones, lo que hace indispensable la profesión en cualquier corporación, sin embargo, es
prudente hacerse varias preguntas al respecto tales como ¿te gusta el mundo empresarial? ¿te
preocupas por el interés público? ¿sientes interés por temas administrativos y financieros?, son
preguntas que quizá en el momento no tengan respuesta, quizá a través de la experiencia el
panorama sea más claro y se hallen criterios más definidos para brindarla.

Así mismo cualquier enfoque que se quiera aplicar al ejercicio de la profesión debe estar enmarcado
en los principios éticos consagrados en la jurisprudencia tanto nacional como internacional, para
Colombia esta actividad está regulada por la ley 43 de 1990, y quiero hacer énfasis en un postulado
consagrado en el artículo 35 de esta norma “El Contador Público, sea en la actividad pública o
privada es un factor de activa y directa intervención en la vida de los organismos públicos y
privados. Su obligación es velar por los intereses económicos de la comunidad, entendiéndose por
ésta no solamente a las personas naturales o jurídicas vinculadas directamente a la empresa sino a
la sociedad en general, y naturalmente, el Estado” (Républica, 1990), apartes que soportan esta
actividad como algo consolidado en el ámbito académico, laboral y profesional, una labor que es
reconocida y que goza de prestigio en el sector financiero.
En definitiva, la Contaduría Pública es un camino arduo y de muchos contrastes, pero con
propósitos claros, una visión prospectiva y futurista a la par de la tecnología, es una profesión que
claramente es perdurable en el tiempo, que se transforma y se adapta a cualquier entorno financiero
para brindar las mejores respuestas con alto sentido de responsabilidad y sensibilidad social.

Referencias
Angel Maria Fierro, F. M. (2017). Contabilidad General y Análisis Financiero . Bogotá D.C.:
Innovate Publishing.
Républica, C. d. (13 de Diciembre de 1990). Ministerio de Educación. Obtenido de
https://www.mineducacion.gov.co/1621/articles-104547_archivo_pdf.pdf