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Hace un tiempo escribí una entrada con consejos a la hora de escoger un violín. Como
parece que es un tema que inquieta, voy a ampliar los consejos transcribiendo un artículo de
la estupenda Guía Mundimúsica de Violín y Viola de Hugo Pinksterboer (Mundimúsica
ediciones), que espero me perdonen por la transcripción.
LLEVATELO
Si ya tienes un violín, llévalo contigo cuando vayas a comprar otro. Compararlo con otro
instrumento te facilitará juzgar lo que escuchas. Si tienes tu propio arco, llévalo también. Si
no, utiliza el mejor arco que tengan en la tienda. Un buen arco te dará mejor idea de las
posibilidades de los distintos violines.
ALGUIEN MAS
Si aún no sabes tocar o acabas de empezar, no podrás saber si un instrumento tiene mal
sonido o es que tú no puedes sacarlo. Así que pídele a alguien que sepa que pruebe los
diferentes violines para ti. Esa persona podría ser incluso el propio vendedor.
DE OIDO
Si le pides a otra persona que toque, puedes aprovechar para escuchar el violín desde lejos.
El sonido será muy distinto de cuando lo tienes pegado a la oreja. Otro truco es darte la
vuelta cuando está tocando otro. Así no sabrás qué violín está tocando y podrás elegir sólo
de oído, sin pensar en precio, color, acabado, o edad. Guiándose sólo por su oído un músico
elige a veces un instrumento mucho más barato de lo que pensaba. O al revés.
SUGERENCIA
En vez de probar muchos violines, puedes pedir al vendedor o alquilador del instrumento
que te sugiera diferentes violines dentro de la gama de precios que estás buscando.
Escuchar es comparar. Si pensabas que el primero era demasiado brillante, pide un violín
más apagado, o al revés. O pide primero dos violines que sean muy distintos, elige uno, y
continúa tu búsqueda a partir de ahí.
DOS O TRES
Haz primero una selección aproximada de los instrumentos que te interesan. Coge tres de
ellos y compáralos entre sí. Recuerda cuál es el que te gusta más y sustituye el que te gusta
menos por otro violín de los que habías seleccionado antes. Elige otra vez el mejor. Y
continúa de este modo.
Si tienes muchos violines entre los que elegir, a menudo es más sencillo tocar un poco cada
uno. Algo fácil, para que puedas prestar atención al sonido, en vez de a tocar bien. Una
simple escala puede valer.
Cuando ya te queden pocos violines elegidos y te tengas que decidir por alguno, puede
tocar piezas más largas, para conocer más a fondo los instrumentos.
CUERDA A CUERDA
Los violines que están comparando deben estar a la misma afinación. Si no es así, un violín
puede sonar más cálido que otro sólo porque está afinado un poco más bajo. Igualmente,
debes comparar instrumentos con el mismo tipo de cuerdas; si no, estarás comparando tipos
de cuerda, en vez de violines.
Por supuesto, es imposible describir con palabras el sonido de los diferentes violines, al
menos con palabras en las que todo el mundo esté de acuerdo. Pero los siguientes consejos
te ayudarán.
VOLUMEN Y PROYECCION
Hay violines que siempre suenan débiles, aunque los toques con mucha energía. Otros
violines pueden oírse desde muy lejos aunque toques muy suavemente. Uno de estos tiene
una buena proyección. Aunque, si se te oye tan claramente, también se notará cualquier
defecto…
HOMOGENEO
La cuerda de mi no sólo suena más alta que las otras cuerdas, también suena distinta. Si
tocas la misma nota mi, primero en su cuerda al aire, luego en la cuerda de La y después en
la cuerda de Re, notarás que la misma nota suena distinta cada vez. Esto es inevitable, pero
las diferencias no deben ser demasiado grandes.
RESPUESTA
Una buena respuesta significa que el violín debe sonar y responder inmediatamente aun
tocando muy suavemente. Si no, tocar y aprender será más difícil porque costará trabajar
cada nota. Una respuesta pobre hace que la nota tarde en aparecer con claridad. Una
respuesta también es más lenta cuanto más grave es la cuerda, a un arco mal tensado o a un
intérprete poco diestro.
DINAMICAS Y COLOR
Un violín debe sonar tan fuerte o tan suave como el intérprete desea. Si es así, tiene buenas
dinámicas.
Además, los instrumentos deben poder producir diferentes colores o timbres, según se
toque más cerca o más lejos del diapasón, sonando bien siempre en cualquier caso.
PREFERENCIAS
Pero al final lo que más importa es la preferencia personal. Un sonido que parece duro para
una persona puede parecer brillante para otra. Algo que se siente cálido a otra le parecerá
blando, etc.
UN VIOLIN EN LA BOCA
En vez de palabras hay personas que intentan explicar el sonido que buscan con sonidos.
Algunos violinistas hablan de violines con mucho “uuuuu” (sonido oscuro y cálido) o, al
contrario, mucho “iiii” (sonido brillante y claro). Si hay demasiado “uuuu”, el sonido es
aburrido.
Si hay demasiado “iiii” es demasiado punzante. Y por supuesto, hay muchas posibilidades
intermedias.
LO MISMO
Un violín también puede sonar nasal (como resfriado), vacío (como un cuarto de baño)
delgado (como una miniatura) o apagado (como con una manta encima). Todo el mundo
tiene más o menos la misma idea de lo que expresan esas palabras. Y son todas malas.
Si compras un violín de segunda mano, necesitarás comprobar las mismas cosas que en un
violín nuevo. Pero además, hay algunas cuestiones que requieren atención especial.
REPARACIONES
En primer lugar, no importa lo que se haya roto, un violín puede casi siempre ser reparado.
Por supuesto, si decides comprar un instrumento que necesita algún trabajo, te interesa
saber primero cuánto te va a costar. Algunos daños se ven fácilmente y otros sólo son
detestables por un experto. Y hay que ser un experto para juzgar reparaciones ya realizadas.
Si tienes dudas, necesitarás la opinión de un experto o una tasación.
COSAS A COMPROBAR
INVITADOS INDESEABLES
Es decir, la carcoma. Estos gusanillos viven en la madera haciendo pequeños túneles. Puede
ser un gran problema, y a veces son difíciles de detectar. No habrá carcoma en un violín
que ha estado sonando (a esos bichos no les gusta la música). Para saber si hay carcoma
deja el instrumento sobre un trozo de cartulina negra durante la noche. Si hay polvo de
madera al día siguiente es señal de que esa plaga está en tu violín.