La violencia intrafamiliar es un problema que afecta en menor o mayor medida a
gran parte de la población mundial y que sin duda alguna en un país tercermundista como lo es nuestra Colombia se ve aún mucho más, la violencia intrafamiliar se refiere a los actos violentos cometidos en un hogar entre miembros de la familia. Aunque esta problemática es considerada únicamente como un fenómeno exclusivamente masculino en contra de las mujeres, la violencia intrafamiliar también se presenta en los niños que son maltratados muchas veces por abuso sexual y con acciones verbales o psicológicas. Aunque estaría mal afirmar que toda la violencia intrafamiliar se da por el sexo masculino, ocurre así en la mayoría de los casos. En ocasiones son el padre y la madre juntos quienes cometen agresiones a sus hijos
Una de las principales causas asociadas a esta problemática son la problemática
económica por la que pasa el país, y es que no es un misterio que en Colombia se presentan índices muy altos de violencia intrafamiliar, índices los cuales pareciera hacer caso omiso el estado a la hora de tomar cartas en el asunto y para crear políticas que brinden mayor presencia del estado y de la autoridad que son el diario vivir de miles de familias en nuestro país. Otros de los factores que se relacionan con esta problemática son el desempleo y los niveles de estrés producidos por la creciente pobreza, la cual es uno de los indicadores de la violencia intrafamiliar. Las personas que ejercen la violencia intrafamiliar, por lo general presentan un común denominador, y es que este tipo de personas violentas coinciden en haber tenido una infancia difícil, y carente de cariño, atención y cuidado por parte de sus padres, además que casi siempre estos mismos eran víctimas de violencia intrafamiliar, y otra de las principales causas asociadas a esta problemática social es el abuso de sustancias como el alcohol y otro tipo de drogas.
La violencia intrafamiliar la podemos dividir en tres modalidades, maltrato
psicológico y maltrato físico y maltrato sexual, de estos tres el más difícil de identificar es el psicológico ya que no quedan huellas físicas visibles de violencia que hagan que este problema se pueda detectar a tiempo.
Por lo general una gran parte de la violencia permanece oculta. En muchas
ocasiones, los niños y niñas se sienten incapaces de denunciar los actos de violencia por miedo a las amenazas de las cuales también suelen ser víctimas y en el peor de los casos puede ocurrir que los niños vean nada malo en estas prácticas, en casos extremos, producto de la violencia se presentan lesiones graves o incluso muerte. No obstante, también puede afectar a la salud del niño, a su capacidad de aprendizaje o incluso a su voluntad de ir a la escuela. La violencia puede ser causa de que el niño huya de su hogar, exponiéndole así a más peligros. Así mismo la violencia destruye la autoestima de los niños y niñas y puede imposibilitarles para ser unos buenos padres en el futuro. Los niños y niñas que padecen violencia son más proclives de adultos a la depresión y al suicidio.
En cuento a estadísticas se refiere “La Organización Mundial de la Salud (OMS)
estima que 40 millones de niños y niñas menores de 15 años son víctimas de malos tratos y abandono y requieren atención sanitaria y social. Según un estudio realizado en Egipto, el 37% de los niños y niñas declararon haber sido golpeados o amordazados por sus padres, y el 26% declaró haber sufrido fracturas, pérdida de conocimiento o discapacidades permanentes como resultado de ello. Aproximadamente un 36% de las madres hindúes admitieron haber golpeado a sus hijos con algún objeto en los últimos seis meses. Un 10% afirmó haber propinado patadas a sus hijos; un 29% les había tirado del pelo; un 28% había propinado puñetazos a sus hijos; y un 3% afirmó haber castigado a sus hijos metiéndoles guindillas en la boca”.
A manera de conclusión se hace necesario decir que como ciudadanos no nos
podemos hacer los de la vista gorda con esta problemática social, tenemos que denunciar estos abusos a las autoridades pertinentes.