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Valoración del tamaño del tiroides, bocio y atrofia tiroidea.

La forma y tamaño de los lóbulos tiroideos es variable. En adultos, el diámetro longitudinal es


de 40 a 60 mms, el anteroposterior de 13 a 18 mms, y el grosor del istmo de 4 a 6 mms. El
diámetro AP es el más preciso, ya que es relativamente independiente de la asimetría de los
lóbulos. Cuando supera los 2 cm, puede considerarse que la glándula está aumentada de
tamaño. La US permite calcular el volumen tiroideo (0,5 x diámetro L x diámetro transverso x
diámetro AP en cada lóbulo y sumados). Se considera normal un volumen de hasta 18-19 ml. Si
se supera, se diagnostica bocio, y si no alcanza 5ml, atrofia tiroidea. Las medidas del tiroides
son importantes en el diagnóstico y seguimiento de los bocios, en la evaluación de la respuesta
al tratamiento supresor con T4, en el cálculo de las dosis de I131 en los hipertiroidismos y en la
indicación de la cirugía mínimamente invasiva. Probablemente la medida de volumen por US
infraestima el volumen real de los bocios multinodulares.

Tiroiditis linfocítica crónica o autoinmune

Es una patología muy prevalente (5-10% de la población general). Se trata de una infiltración
linfocitaria crónica del tiroides. El tiroides puede tener un volumen normal o aumentado de
tamaño (enfermedad de Hashimoto). Si está disminuido se habla de tiroiditis atrófica; suele ser
de larga evolución y predomina la fibrosis. El parénquima presenta una estructura
heterogénea de modo difuso con áreas hipoecoicas celulares separadas por septos fibrosos
más ecogénicos. Se describen micronódulos, de entre 1-6mms, en relación con infiltración
linfocitaria. Pueden coexistir otros nódulos (benignos, papilar o linfoma, este último típico
aunque infrecuente), por lo que se recomienda seguimiento US y PAAF de los nódulos>1cm.
Probablemente la hipoecogenicidad del parénquima se correlaciona con el grado de
infiltración linfocítica, pudiendo contribuir la US al diagnóstico de la tiroiditis crónica en
aquellos pacientes eutiroideos con niveles de anticuerpos antimicrosomales no elevados. Se
describe el patrón US del linfoma como nódulos o áreas hipoecoicas mal definidas con un
característico refuerzo acústico posterior en cinturón.

Otras Tiroiditis

En ocasiones se solicita US a pacientes con dolor cervical y tumefacción de curso


agudo/subagudo. La US permite diferenciar la tiroiditis subaguda dolorosa, que muestra un
tiroides aumentado de tamaño con reducción de su flujo, del nódulo sangrado.

En la tiroiditis aguda, la US puede demostrar la presencia de colecciones y guiar su drenaje.


Puede subyacer un quiste del 4ºarco branquial.

En la tiroiditis por amiodarona, el doppler puede contribuir a diferenciar la tipo I de la tipo II.
Enfermedad de Graves

Se caracteriza por una hiperplasia de células foliculares y un marcado incremento de la


vascularización. Suele cursar con bocio con estructura heterogénea y con un patrón
hipervascular, identificándose vasos gruesos con aumento significativos de las velocidades del
flujo. La US diferencia la enfermedad de Graves que tiene carácter difuso, de la patología
nodular ya sea BMN o adenoma tóxico, otras dos causas frecuentes de hipertiroidismo. El
doppler puede contribuir al DD de la tirotoxicosis por enfermedad de Graves o por tiroiditis: en
el Graves encontraremos un patrón hipervascular mientras que las tiroiditis cursan con un flujo
normal o disminuido. Una excepción es el Hashimoto, que en ocasiones puede presentar
también un incremento significativo de la vascularización. Si en US se identifica un nódulo se
recomienda PAAF; algún estudio apunta la posibilidad de mayor riesgo de malignidad.

Patología del conducto tirogloso

En ocasiones se identifica un pequeño lóbulo piramidal que nace de la porción superior del
istmo, en la porción distal del conducto tirogloso. El conducto tirogloso puede permanecer
como un quiste, un conducto o incluso tejido tiroideo ectópico. Los quistes del conducto
tirogloso son frecuentes. En US se presentan como quistes complejos, a menudo asocian
hemorragia o infección, situados en la línea media o paramedianos. En el 1% de los casos
puede coexistir un carcinoma papilar, que aparece como una lesión mural sólida dentro del
quiste.

https://www.slideshare.net/magaibarra/birads-5-edicion

http://osteomuscular.com/MEDIDAS/escoliosis.html

https://www.slideshare.net/nadiarojasvalenzuela/ecografia-de-cuello-en-ecografia

https://www.efisioterapia.net/articulos/desviaciones-angulares-las-rodillas

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