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Brasil:
Síntesis:
Se denota que la tasa de crecimiento del PIB de Brasil en los años del presidente
Lula (2005 – 2010), fue creciente, exceptuando el año 2009. Sin embargo, para los
años finales e inicios de la presidencia de Rouseff (2010 – 2015). Brasil empieza a
decaer en su crecimiento, teniendo tasas de crecimiento débiles comparadas a
sus anteriores años.
Presidencia de Lula:
Presidencia de Rouseff:
Valoración personal:
Después de conocer cada uno de los eventos de las presidencias, pareciera que
en el caso de Rouseff debió cumplir con la promesa de continuidad del presidente
Lula, al menos en cuanto economía, porque en los últimos años el crecimiento del
PIB se estancó en 2011. Ya que parecía que el gobierno ya no podía depender
del incremento del consumo para impulsar la economía. Mientras la economía
parecía depender cada vez más del gobierno para crecer.
Teniendo en cuenta que el PIB es uno de los principales indicadores que miden el
crecimiento económico de un país. Y que la interpretación de este valor es
fundamental para conocer el grado de desarrollo económico y sus tendencias.
Se evidencia que del 2000 al 2011 la tasa de crecimiento del PIB para esta
década, no cambió, fue de 9,4% en ambos casos y que en promedio los datos no
tienen mayor fluctuación, exceptuando los picos que surgieron en el 2006 y 2007.
Después de esa desviación, la economía china continua con en promedio con un
PIB constante. Recordando que el PIB está constituido por las variables de
consumo, inversión, gasto, importaciones y exportaciones, se muestra en el
siguiente grafico si estas tuvieron cambios bruscos:
Otro de los motivos el cual China pudo crecer a pasos agigantados, es que
profundizó una reasignación de la fuerza trabajadora de la agricultura, a la
industria, asimismo, desde el sector público.
Valoración personal:
Como se evidencia en los datos del anexo 2, China tuvo 2 años de altos
crecimientos pero después si se analizan las variables se evidencia que los
valores de estas decrecen en cuanto a las de exportaciones, e importaciones, sin
embargo, el consumo se mantiene. Lo que explica la medida que tomaron las
autoridades Chinas como decisión estratégica el generar un crecimiento más
estable, volcando el modelo a una economía sustentada en el consumo interno
más que el de las inversiones y las exportaciones. Lógicamente, el cambio de un
modelo a otro genera un crecimiento más lento. Pero no necesariamente
desacelerado.