FACULTAD DE INGENIERÍA EN MECÁNICA Y CIENCIAS DE LA PRODUCCIÓN

(FIMCP)
MECÁNICA DE SOLIDOS
Flujo cortante
Marmolejo Minga Gabriel Antonio - gmarmole@espol.edu.ec

Los esfuerzos cortantes son importantes en el análisis de vigas para estructuras, ya que las
cargas a las que puedan estar sometidos los elementos produzcan esfuerzos que provoque que
la viga se falle por cortante. Cuando se diseña una viga compuesta con conexiones como
soldadura, remaches, clavos o pernos, se debe asegurar que las conexiones actúen como una
unidad con las partes, es decir, que sean capaces de transmitir las fuerzas cortantes entre los
componentes de la viga.
Para determinar el valor de estar fuerzas en conexiones se utiliza el concepto de flujo cortante.
Cuando una viga de paredes delgadas era sometida a torsión, se había usado este concepto para
calcular el esfuerzo cortante, sin embargo, a pesar de que el concepto es el mismo, el origen
del flujo de cortante puede variar y en este caso se va a considerar el origen de la fuerza cortante
producto de cargas axiales sobre la viga.
El flujo cortante se define como la fuerza cortante por unidad de longitud del ancho de la viga.
Este flujo es calculado a partir de la fuerza cortante que se producen en un elemento diferencial
de la viga:
dM
F3 =
I  y dA
Se sustituye la fuerza por la definición de flujo: 𝐹3 = 𝑓 𝑑𝑧 y se despeja el flujo cortante,
obteniendo:
𝑑𝑀 1 𝑉𝑄
𝑓= ∫ 𝑦 𝑑𝐴 =
𝑑𝑧 𝐼 𝐼
La ecuación de flujo cortante depende del cortante, el momento de área y de la inercia respecto
al eje neutro de la viga y el cálculo de estas variable es igual que en el caso del esfuerzo cortante.
Por otro lado, cuando se considera una viga de paredes delgadas, es decir el espesor es pequeño
en comparación con el ancho, el flujo cortante es igual al esfuerzo cortante por el espesor de la
viga, además, la dirección del flujo cortante será la misma del esfuerzo cortante y solo se
considera a la componente de flujo que actúa de forma paralela al área transversal de la viga.

Figura 1: Dirección del flujo cortante en una viga de sección I

Aplicaciones
Como se mencionó al principio, en vigas compuestas conocer el flujo del cortante, en la zona
donde existe los acoples entre los componentes, es de gran utilidad al momento de diseñarlas.
Un ejemplo de esto es una viga de acero I de base soldada, a la cual se quiere saber la cantidad
de soldadura necesaria para que puede transmitir el esfuerzo cortante desde el alma hasta el
patín de la viga.
Se determina el momento de área respecto al eje neutro, tomando como área el patín de la viga,
la inercia respecto al eje neutro y el cortante. Con estos valores se puede conocer el flujo de
cortante y como la resistencia de la soldadura se encuentra en fuerza por longitud unitaria es
fácil conocer la cantidad de soldadura requerida.
Por otra parte, tenemos lo remaches o pernos que se usan para unir refuerzos de una viga. En
este caso los pernos deben soportar y transmitir la fuerza cortante entre los elementos. Para
determinar el flujo cortante depende la posición de los remaches o pernos ya que de esto
depende el momento de área. Una vez calculado el flujo cortante, se puede determinar la
resistencia. Un caso común es el de una viga de cajón de madera con dos almas y patines unidos
por tornillos donde la fuerza cortante actúa a lo largo de cada componente y el flujo total se
puede calcular como la suma del flujo en cada elemento. Cada par de clavos en esta
configuración soporta el flujo cortante total.
Se debe tener en cuenta los esfuerzos que soporta el perno y la longitud adecuada para que no
falle el perno por cortante o se produzcan deformación por esfuerzos de aplastamiento en la
viga.