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Federico D Kovac
17 de agosto de 2008
2
Índice general
2. Mapeos en C 29
2.1. El plano complejo extendido . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 29
2.2. Representación geométrica de funciones complejas . . . . . . . . . . . . . . . . . 30
2.3. Mapeo conforme, curvas en C . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 35
2.4. Transformaciones biunívocas de C∞ . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41
2.5. Transformaciones fraccionarias lineales o de Möbius . . . . . . . . . . . . . . . . 43
2.6. Círculos generalizados en C∞ . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 47
2.7. Puntos fijos de una transformación de Möbius . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 52
2.8. Orientación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 55
2.9. Distribución estacionaria de temperatura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 58
3. Integrales en C 63
3.1. Integrales en el campo complejo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 63
3.2. Teoremas de Cauchy . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67
3.3. Primitivas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 71
3.4. Fórmula integral de Cauchy . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 73
3.5. Módulo Máximo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 77
4. Sucesiones y series en C 81
4.1. Sucesiones complejas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 81
4.2. Series complejas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 84
4.3. Criterios de convergencia para series de términos positivos . . . . . . . . . . . . . 87
4.4. Convergencia absoluta . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 88
3
4 ÍNDICE GENERAL
Este protolibro tiene sus origenes, como tantos, en las notas de clase de la asignatura Análi-
sis Matemático III. Si bien no contiene absolutamente nada nuevo, tiene lo necesario para la
asignatura en cuestión, de manera autocontenido, y sobre todo, con los temas tratados como a
mi me gusta, teniendo en cuenta las circunstancias y la audiencia. Como regla general, se ha
evitado llamar “demostración” a una cosa que no lo es, es decir, cuando un resultado no se puede
demostrar rigurosamente, sencillamente se pone una idea que lo hace creible, o sencillamente
se lo enuncia sin demostración. A diferencia de muchos libros de variable compleja, los temas
fueron tratados haciendo uso de los resultados de calculo vectorial, lo que propende al uso de
conocimientos previamente adquiridos.
7
8 ÍNDICE GENERAL
Capítulo 1
Vamos a trabajar con los ya conocidos números complejos C. Mucho del material de esta
primera parte (secciones 1.1 a 1.4) se verá muy rápido y sin mucho cuidado, por ser solo un
repaso de conocimientos adquiridos en materias anteriores
Lo nuevo acá con respecto a R2 es el producto, que transforma la modesta estructura de espacio
vectorial de R2 en estructura de cuerpo, es decir:
La suma es asociativa
La suma es conmutativa.
(0, 0) el único número complejo tal que (a, b) + (0, 0) = (a, b) para todo número complejo
(a, b) (neutro aditivo).
Para todo complejo (a, b) , (−a, −b) el único número complejo tal que (a, b) + (−a, −b) =
(0, 0) (inverso aditivo).
El producto es asociativo.
El producto es conmutativo.
9
10 Funciones de variable compleja
(1, 0) el único número complejo tal que (a, b) (1, 0) = (a, b) para todo número complejo
(a, b) (neutro multiplicativo).
³ ´
Si (a, b) 6= (0, 0) , entonces (a, b)−1 = a2 +ba −b
2 , a2 +b2 es el único número complejo tal que
³ ´
a −b
(a, b) . a2 +b2 , a2 +b2 = (1, 0) (inverso multiplicativo).
Se denota (a, 0) = a; esta notación es buena porque respeta la suma y el producto: (a, 0) +
(b, 0) = (a + b, 0) , y (a, 0) (b, 0) = (ab, 0) , es decir, cuando opero con pares que tienen cero en
la 2da coordenada puedo hacer las operaciones como si fueran números reales (no es lo mismo si
intercabiamos las coordenadas en el razonamiento anterior: (0, 1) (0, 1) = (−1, 0)). Esto permite
ver a los números reales “metidos” en los complejos, pensando cada a real como (a, 0) . También
se denota i = (0, 1) , de modo que (a, b) = (a, 0) + (b, 0) (0, 1) = a + ib, y así no se usa más la
notación de par ordenado. Notar que ii = i2 = −1.
Si z = a + ib, entonces:
z̄ = a − ib, el conjugado de z
√
|z| = a2 + b2 , el módulo de z (el mismo módulo de Análisis II, o sea |(a, b)|, o sea es un
número real que mide distancias).
1 1
Re (z) = 2 (z + z̄) , Im (z) = 2i (z − z̄)
(z + w) = z̄ + w̄, zw = z̄ w̄
Esto es darle al plano complejo las coordenadas polares conocidas de Análisis II, es decir
(x, y) = (r cos θ, r sin θ) = r (cos θ + i sin θ) , con la notación compleja. Claramente, |z| = r, y θ
se llama el argumento de z y se denota arg (z) . Si cambio θ por θ + 2kπ, con k un entero,
me sigue dando el mismo número complejo, o sea el argumento de un número complejo no esta
univocamente determinado, lo que si es cierto es que para todo número complejo z 6= 0 hay un
único θ con −π < θ ≤ π tal que z = r (cos θ + i sin θ) , y ese de llama el argumento principal
de z.
Para escribir menos, se denota
Si z1 = r1 cis (θ1 ) y z2 = r2 cis (θ2 ) , usando la regla de la suma del coseno y del seno se ve
que z1 z2 = r1 r2 cis (θ1 + θ2 ) , es decir, arg (z1 z2 ) = arg (z1 ) + arg (z2 ) (ejercicio: ¿que función
real f (x) tiene la propiedad de que f (xy) = f (x) f (y)?). Multiplicando muchos z 0 s, tenemos
z1 ...zn = r1 ...rn cis (θ1 + ... + θn ) , en particular z...z n n
|{z} = z = r cis (nθ) . Esto es muy útil
n
para encontrar raíces n-esimas: si n es un natural y a un complejo, una raíz n-esima de a es un
número complejo z tal que z n = a. Si z = rcis (θ) y a = |a| cis (α) , igualando las expresiones
queda
½ n ½ p
n r r = |a| r = n |a|
z = r cis (nθ) = |a| cis (α) , ⇒ , ⇒ ,
nθ = α + 2kπ, k ∈ Z θ = αn + 2k
n π, k ∈ Z
1.3. Topología en C
Esa palabra se refiere a la calificación de los subconjuntos del plano en abiertos, cerrados,
conexos, etc, que son cosas estudiadas y usadas en Análisis II, lo único que cambia ligeramente
es la notación, porque ahora en lugar de usar pares ordenados (a, b) , usamos a + ib. Para hacer
una refrescada de memoria, vamos a hacer una lista de las mas importantes. Con z0 vamos a
denotar un número complejo, y con S un subconjunto de C.
S se dice abierto si todos sus puntos son interiores, y cerrado si contiene todos sus
puntos frontera.
S se dice conexo si todo par de puntos en S se pueden unir con una poligonal en S.
S se dice acotado si existe algún número M > 0 tal que S ⊆ {z ∈ C tq: |z| ≤ M }.
Asi se llama a las funciones con dominio e imagen en C. De nuevo, como C = R2 , tenemos
de Análisis II muchas funciones f : D ⊆ R2 → R2 , como por ejemplo
¡ ¢
f (x, y) = x2 − y2 , 2xy ,
nada mas que ahora vamos a usar la notación compleja. Así, si z = x + iy, la función de arriba
queda
f (z) = f (x, y) = x2 − y 2 + i2xy = (x + iy)2 = z 2 .
Es decir, una función compleja es una regla que asigna a cada número complejo z de un conjunto
D, otro número complejo que se denota f (z) . Notar que dice regla y no fórmula: la
½
z si |z| ≤ 1
f (z) =
z 2 si |z| > 1
z
Ejemplo 2 f (z) = z+1 , es una función compleja cuyo dominio es C− {±1}. Para encontrar
la parte real e imaginaria de f la escribimos en coordenadas:
z z(z + 1) (x + iy) (x − iy + 1)
f (z) = = = =
z+1 (z + 1) (z + 1) (x + iy + 1) (x − iy + 1)
x (x + 1) + y 2 + iy (x + 1) − xy x2 + x + y 2 + iy
= = ,
(x + 1)2 + y 2 (x + 1)2 + y 2
o sea
x2 + x + y2 y
f (x, y) = 2 +i .
(x + 1) + y 2 (x + 1)2 + y2
Todas las nociones de continuidad, derivadas parciales, etc. de Análisis II se pueden aplicar
acá, pues si tenemos una función de variable compleja f (z) , entonces tenemos una función
f (x, y) = (u (x, y) , v (x, y)) , y tiene perfecto sentido hablar de ux , por ejemplo.
Veamos como quedan las nociones de límite y continuidad con esta nueva notación: si f (z)
es una función compleja definida en un conjunto abierto D ⊆ C, z0 ∈ D, y w0 ∈ C, entonces
diremos que
Dicho en criollo, si para cada bolita (de radio ε) centrada en w0 que yo ponga, hay una bolita (de
radio δ) centrada en z0 que f “lleva” adentro de la primer bolita. Dicho mas en criollo, cuando
la variable z está cerca de z0 , la imagen f (z) está cerca de w0 . De nuevo, todas las nociones de
límite de Análisis II se aplican.
¡ ¢
Ejemplo 3 Sea f (x + iy) = x2 sin (y) + i x2 − y 2 e−y , entonces lı́m f (z) = sin (1) .
z→1+i
5. Si K ⊆ D es un conjunto compacto entonces existe m > 0 tal que |f (z)| ≤ m para todo
z ∈ K, esto es, f es acotada en K.
Demostración. para 1 y 2 ver la carpeta de Análisis I, para los demás puntos la de Análisis
II.
14 Funciones de variable compleja
La novedad en C (con respecto al R2 de Análisis II) es que acá podemos dividir. En Análi-
sis II, si teníamos una f (x, y) entonces calculábamos sus derivadas parciales, derivadas direc-
cionales, diferenciales, etc., pero nunca derivada porque la expresión
Notar que el límite de la expresión de arriba es un límite del tipo de los de Análisis II, es decir
∆z = (∆x, ∆y) ∈ R2 , y hacemos (∆x, ∆y) → (0, 0) ; lo que es nuevo es que estamos dividiendo
por ∆z (y se pide D abierto para poder tomar dicho límite). Otra expresión para la derivada de
f en z0 es
f (z) − f (z0 )
lı́m ,
z→z0 z − z0
que se obtiene de la anterior cambiando ∆z por z − z0 .
Ejemplo 7 f (z) = z 2 ,
Demostración. ejercicio, ver la carpeta de Análisis I y copiar, todas las demostraciones hechas
ahí deberían funcionar por tener C las mismas propiedades de cuerpo que R.
Demostración. Que f sea continua es que lı́m f (z) = f (z0 ) , que se lo mismo que
z→z0
Pero ∙ ¸
f (z) − f (z0 )
lı́m (f (z) − f (z0 )) = lı́m (z − z0 ) = f 0 (z0 )0 = 0, listo.
z→z0 z→z0 z − z0
No todas las funciones continuas son derivables, por ejemplo la función f (z) = z̄ es continua
en todo C y no es derivable en ningún punto.
El hecho de que una función compleja sea derivable es muy fuerte, es decir, le estamos
pidiendo a la función que cumpla algo medio dificil de cumplir porque el límite de la definición
de derivada debe existir (como todo límite) haciendo ∆z → 0 por todos los caminos, vamos a
usar esto para encontrar condiciones para que una función sea derivable.
Para esto, tomamos una función f = u + iv que sea derivable en z = x + iy, entonces
Ahora, haciendo ∆z real, o sea haciendo ∆y = 0 (o sea haciendo que ∆z tienda a cero por el
eje x del plano), queda
Es decir, hemos obtenido dos expresiones para f 0 (z), que obviamente deben ser iguales. esto
lleva a concluir que
ux (x, y) + ivx (x, y) = vy (x, y) − iuy (x, y)
o lo que es lo mismo,
ux = vy
uy = −vx
Estas son ecuaciones muy famosas e importantes, y se llamas las ecuaciones de Cauchy-
Riemann (C-R para nosotros, de ahora en más). Con las cuentas de arriba hemos probado el
siguiente teorema:
Haber obtenido semejante condición con solo usar dos caminos diferentes para hacer ∆z → 0
hace pensar que usando mas caminos vamos a obtener condiciones adicionales que una función
debe cumplir si es derivable, pero no pasa eso, las ecuaciones de C-R son también condición
suficiente:
Teorema 12 Si u (x, y) , v (x, y) son funciones con derivadas parciales continuas que satis-
facen las ecuaciones de C-R en un conjunto abierto D, entonces la función compleja f = u + iv
es derivable en D.
Demostración. Sea (x, y) un punto fijo en D y (∆x, ∆y) chico pero no nulo de modo que
(x + ∆x, y + ∆y) esté en D. Por el teorema del valor medio de Análisis II (o por el teorema de
Taylor) sabemos que existen puntos P1 , P2 en el segmento que va de (x, y) a (x + ∆x, y + ∆y)
tal que
Ejemplo 13 1. f (z) = f (x + iy) = ex cos y + iex sin y = u (x, y) + iv (x, y) es una función
compleja definida en todo el plano complejo, las funciones coordenadas tienen derivadas
parciales continuas en todo el plano, y
ux (x, y) = ex cos y, vy (x, y) = ex cos y,
uy (x, y) = −ex sin y, vx (x, y) = ex sin y,
es decir se cumplen las ecuaciones de C-R, o sea f es una función derivable en todo el
plano.
2. f (z) = f (x + iy) = x + ia, con a un número real fijo, no es derivable en ningún punto,
ejercicio.
Hemos llegado a un punto muy interesante de la materia, donde vamos a formular la definición
mas importante y que nos va a acompañar por el resto del cuatrimestre:
Definición 14 Si f (z) es una función compleja derivable en un conjunto abierto D diremos
que f es analítica en D (o sea las funciones son analíticas en conjuntos abiertos). La expresión
“f es analítica en z0 ” significará que f está definida y es derivable en todo un entorno de z0 .
En variable compleja no nos interesan las funciones que sean derivables en un punto, sino las
que son derivables en conjuntos abiertos. Un poco mas adelante veremos que si f es derivable en
D entonces f 0 también es derivable en D, etc, es decir, una función compleja que tiene derivada
tiene necesariamente derivadas de todos los ordenes, y entonces sus funciones coordenadas tienen
derivadas parciales continuas. Esto nos permite unir los dos teoremas anteriores en el siguiente:
18 Funciones de variable compleja
Teorema 15 Si u (x, y), v (x, y) son funciones reales con primeras derivadas parciales con-
tinuas en un abierto D, entonces las ecuaciones de Cauchy-Riemann
∂u ∂v ∂u ∂v
= y =−
∂x ∂y ∂y ∂x
son condición necesaria y suficiente para que la función compleja f = u + iv sea analítica en D.
Además bajo esas condiciones vale que
∂u ∂v ∂v ∂u
f0 = +i = −i .
∂x ∂x ∂y ∂y
∂2ϕ ∂2ϕ
+ 2 = 0.
∂x2 ∂ y
ux = vy
uy = −vx
uxx = vxy
uyy = −vyx
Pero como las derivadas parciales segundas son continuas, entonces vxy = vyx , y entonces uxx =
−uyy . De manera análoga se ve que v es armónica.
Una pregunta que uno se hace inmediatamente es: si u y v son funciones armónicas, ¿es
f = u + iv analítica?. La respuesta de esta es bien fácil, y es no, por ejemplo tomar u (x, y) = x,
Funciones de variable compleja 19
v (x, y) = 3. La segunda pregunta es: si tengo una función u (x, y) armónica en un abierto D,
¿existe alguna función armónica v en D tal que³la función´f = u + iv sea analítica en D?.
p
En algunos casos no (por ejemplo u (x, y) = ln x2 + y2 en C− {0} , como veremos mas
adelante), pero en otros casos si. Cuando tal v existe se llama una armónica conjugada de
u. Notar que no hay una única armónica conjugada: si v es armónica conjugada de u entonces
v + c también lo es, donde c es un número complejo cualquiera. Para demostrar la existencia de
armónicas conjugadas en algunos casos, necesitamos la siguiente regla:
Idea de la Demostración.
Rd Rd
0 g (x + h) − g (x) c φ (x + h, y) dy − c φ (x, y) dy
g (x) = lı́m = lı́m =
h→0 h h→0 h
Rd Z d
c [φ (x + h, y) − φ (x, y)] dy [φ (x + h, y) − φ (x, y)]
= lı́m = lı́m dy,
h→0 h h→0 c h
lo único que me hace falta saber es que puedo meter el lı́m dentro de la integral, y por eso esto
es una “idea de la demo” en lugar de una demo. Pero se puede, y metiendo el límite dentro de
la integral queda
Z d Z d
0 [φ (x + h, y) − φ (x, y)]
g (x) = lı́m dy = φx (x, y) dy, listo.
c h→0 h c
donde ϕ es una función real de variable real desconocida, que vamos a elegir para que u y v
cumplan las ecuaciones de C-R. Calculamos vx usando la regla de Leibnitz, y usamos que u es
armónica:
Z y Z y
vx (x, y) = uxx (x, t) dt + ϕ0 (x) = −uyy (x, t) dt + ϕ0 (x) =
0 0
= −uy (x, t) |t=y 0 0
t=0 + ϕ (x) = −uy (x, y) + uy (x, 0) + ϕ (x) ,
20 Funciones de variable compleja
Muchas funciones complejas quedan mas lindas cuando se expresa la variable en coordenadas
polares. Por ejemplo, vimos que todo número complejo z = rcis (θ) tiene n raíces n-esimas. Si
fijamos el argumento principal, entonces una de esas raíces es la función
µ ¶
√
n θ
f (z) = rcis ,
n
pero no sabemos si es analítica o no. Para contestar este tipo de preguntas vamos a ver como
quedan las ecuaciones de C-R expresadas en coordenadas polares. Si f (x + iy) = u (x, y) +
iv (x, y) es analítica, x = r cos θ, y = r sin θ, entonces por la regla de la cadena de Análisis II
tenemos
ur = ux xr + uy yr = ux cos θ + uy sin θ
uθ = ux xθ + uy yθ = −ux r sin θ + uy r cos θ.
o sea µ ¶ µ ¶µ ¶
ur uθ ux uy cos θ −r sin θ
= ,
vr vθ vx vy sin θ r cos θ
y lo que hicimos fue despejar ur , uθ , vr , vθ . Análogamente (invirtiendo la matriz de dT ) se ve
que si fp cumple las ecuaciones de C-R en coordenadas polares entonces ux , uy , vx , vy (existen,
son continuas y ) cumplen las ecuaciones de C-R “usuales”. Todo lo hecho nos permite expresar
cierto teorema anterior en coordenadas polares:
Teorema 20 Sean u (r, θ) , v (r, θ) son funciones reales con ur , uθ , vr , vθ definidas y continuas
en un entorno de z0 = r0 cis (θ0 ) , con r0 > 0. Entonces las ecuaciones de C-R en coordenadas
polares
1 1
ur = vθ y uθ = −vr
r r
(evaluadas en z0 ) son condición necesaria y suficiente para que la función compleja f (z) =
f (rcis (θ)) = u (r, θ) + iv (r, θ) sea derivable en z0 .
Nota importante 21 hay que tener mucho cuidado con el teorema anterior. Por ejemplo,
si fijamos el argumento principal, y definimos f (rcis (θ)) = ln (r) + iθ = u (r, θ) + iv (r, θ) ,
entonces la función v NO es continua en ningún punto de la forma rcis (π) (π es un argumento
permitido cuando trabajamos con el argumento principal), pues como v debe asignar el argumento
principal a cada número complejo, al movernos ligeramente hacia abajo desde un punto de la
forma rcis (π), los valores de v “saltan” violentamente de π a −π. Si es cierto que la función
de arriba satisface las hipótesis del teorema anterior en todo punto de C− {x ∈ R tq: x ≤ 0} (es
decir si 0 < r < ∞, −π < θ < π), y entonces es analítica en dicho conjunto (ejercicio).
√ ¡ ¢
Ejemplo 22 consideremos la función f (z) = n rcis nθ , de la cual estuvimos hablando al
comienzo de esta sección (estamos con el argumento principal). Expresada como suma de parte
real e imaginaria queda
µ ¶ µ ¶
√
n θ n√ θ
f (z) = r cos + i r sin = u (r, θ) + iv (r, θ) .
n n
que claramente son continuas y satisfacen las ecuaciones de C-R en coordenadas polares en
C− {x ∈ R tq: x ≤ 0} , es decir nuestra función es analítica en dicho conjunto (todavía no sabe-
mos cual es su derivada).
22 Funciones de variable compleja
Una de las virtudes de las pocas funciones analíticas que conocemos es que siguen teniendo
muchas propiedades que tienen sus equivalentes reales. Por ejemplo, la función
f (z) = z 2
ux = u, (1.1)
y
vx = v (1.2)
La ecuación (1) implica que u (x, y) = φ (y) ex (resolviendo para cada y fijo), donde φ tiene
derivada de todos los ordenes (esto pues queremos ez analítica y ya hemos anticipado que las
funciones analiticas tienen infinitas derivadas). Usando (2) y que u y v deben satisfacer C-R,
concluimos que
uy (x, y) = −v (x, y) , (1.3)
y derivando respecto de y obtenemos
C -R p o r (1)
↓ ↓
uyy (x, y) = −vy (x, y) = −ux (x, y) = −u (x, y) = −φ (y) ex .
o sea
ez = ex (A cos y + B sin y) + iex (A sin y − B cos y) .
Por último, haciendo y = 0, y usando la condición (b) llegamos a
ex = ex (A − iB) , ⇒ (A − iB) = 1, ⇒ A = 1, B = 0,
o sea,
ez = ex (cos y + i sin y) = ex cis (y) (!!) .
Definición 23 para todo número complejo z = x + iy, se define la exponencial compleja como
Queda como ejercicio verificar que esta función, asi definida, cumple las condiciones (a) y (b)
(Notar que no sabemos eso, que supusimos que cumpliar eso para ver como debia ser).
1. |ez | = |ex cis (y)| = ex = eRe(z) ; esto implica que ez 6= 0 para todo z ∈ C.
4. Como eiθ = cis (θ) , todo número complejo z = rcis (θ) es z = reiθ , y esa es la notación
que vamos a usar de ahora en más.
Ahora que tenemos ez queremos una función que invierta su acción, o sea que si
z = ew , (1.4)
el logaritmo de z debería ser w (eso equivale a “despejar” la w de la ecuación (4)). Notar que
necesariamente z debe ser distinto de cero.
Pongamos w = x + iy y z = reiθ , y busquemos w: la ecuación (4) queda
r = ex y θ = y + 2kπ, con k ∈ Z,
24 Funciones de variable compleja
y entonces
o sea
w = ln |z| + i arg (z)
(con arg (z) estamos denotando todos los argumentos de z). Es decir, hay infinitos w que
cumplen la ecuación (4), o sea todo número complejo no nulo tiene infinitos logaritmos. Si
fijamos un argumento, o sea si fijamos una banda de ancho 2π, todo complejo no nulo tiene
un único logaritmo cuya parte imaginaria está en esa banda. Cuando el argumento fijado es el
principal, la función que se obtiene se denota log (z) = ln |z|+iθ (z) y se llama la rama principal
del logaritmo (θ (z) acá esta denotando el argumento principal de z). Otra función logaritmo
L (z) se obtiene fijando el argumento en el intervalo [0, 2π), y es una función definitivamente
distinta de log pues log (−2i) = ln (2) − i 12 π y L (−2i) = ln (2) + i 32 π, y ambas son funciones
logaritmo en el sentido de que elog(−2i) = eL(−2i) = −2i.
Teorema 25 las ramas del logaritmo son analíticas, mas aún, si f : D → C es una rama del
logaritmo, entonces f 0 (z) = z1 para todo z en D.
tenemos que f (z0 + ∆z) 6= f (z0 ) (¿por que?), y entonces se puede dividir por f (z0 + ∆z) −
f (z0 ) . Entonces
Como f es continua,
lı́m f (z0 + ∆z) = f (z0 ) ,
∆z→0
y entonces
¯
ef (z0 +∆z) − ef (z0 ) ew − ef (z0 ) dez ¯¯
lı́m = lı́m = = ef (z0 ) = z0 .
∆z→0 f (z0 + ∆z) − f (z0 ) w→f (z0 ) w − f (z0 ) dz ¯ f (z0 )
Funciones de variable compleja 25
Como además lı́m 1 = 1, tenemos que dos de los factores de (5) tiene límite y tal límite es no
∆z→0
/ D), por lo tanto tomando lı́m∆z→0 en (5) queda
nulo (recordar que dijimos que 0 ∈
f (z0 + ∆z) − f (z0 )
1 = z0 lı́m = z0 f 0 (z0 ),
∆z→0 ∆z
es decir f 0 (z0 ) = 1/z0 , listo.
Ahora que tenemos exponencial y ramas del logaritmo, podemos definir potencias complejas
en general. Si z 6= 0 y c es un número complejo, definimos
z c = ecLn(z) ,
donde Ln es alguna rama del logaritmo en algún abierto D. O sea que en general parece que va
a haber muchas z c (como por ejemplo había muchas raíces n-esimas). Cuando tomamos la rama
principal del logaritmo, nos queda la función f (z) = ec log(z) , que se llama la rama principal
de z c .
Esta nueva definición nos trae algunos problemas, por ejemplo nosotros ya teníamos definido
z n cuando n era un número natural, y había un solo z n , veamos que pasa con esta nueva
definición: pongamos z = reiθ con θ el argumento principal, entonces
1
nueva def z }| { vieja def
n ↓ nLn(z) n(ln(r)+i arg(z)) n(ln(r)+iθ+i2kπ) n ln(r) inθ i2nkπ ↓
z = e =e =e =e e e = rn einθ = zn,
es decir, por mas que usemos cualquier rama del logaritmo siempre nos da nuestro viejo z n (a
lo largo del razonamiento anterior y de los siguientes, k denotará un entero que depende de la
rama del logaritmo que tomemos).
Una situación análoga se da cuando c = −n con n ∈ N: la misma cuenta de arriba muestra
que
z −n = r−n e−inθ
cualquiera sea la rama del logaritmo que usemos. Como z n = rn eiθ se tiene que z n z −n =
rn eiθ r−n e−inθ = 1, es decir que z −n debe ser el único inverso multiplicativo de z n , es decir
z −n = 1/z n (ojo, no teníamos definido de ninguna manera la cantidad z −n ).
Por último, veamos que pasa cuando c = n1 con n ∈ N: nos gustaría que z 1/n sea una raíz
n-esima de z, o sea en este caso la nueva definición debería darnos n valores distintos. La cuenta
de arriba con 1/n en lugar de n es
nueva def µ ¶
1/n ↓ 1
Ln(z) 1
(ln(r)+i arg(z)) 1
(ln(r)+iθ+i2kπ) ln(r)/n i(θ+2kπ)/n √
n θ + 2kπ
z = e n =e n =e n =e e = rcis ,
n
es decir, nos da las n raíces n-esimas de z.
26 Funciones de variable compleja
Todavía no hemos dicho nada sobre la derivabilidad de las ramas de z c (en realidad ya
habíamos visto que las funciones “raíces n-esimas” son analíticas con C-R en polares): sea Ln
una rama del logaritmo en D, entonces sabemos que dLn 1
dz (z) = z , así que usando la regla de la
cadena tenemos
d ³ cLn(z) ´ c
e = ecLn(z) = ecLn(z) cz −1 = ecLn(z) ce−Ln(z) = ce(c−1)Ln(z)
dz z
pues vimos que para calcular z −1 se puede usar cualquier rama del logaritmo. Entonces quedo
que si tenemos una rama de z c , su derivada es cz c−1 , donde la potencia z c−1 es la misma rama
de la potencia de z c .
se despeja
eiy + e−iy
cos (y) = , y
2
eiy − e−iy
sin (y) = .
2i
Teniendo en cuenta que las expresiones de la derecha tienen sentido si cambio y por un número
complejo z, y las ganas de extender funciones que tenemos, vamos a definir
sin (z) 1
tan (z) = , sec (z) =
cos (z) cos (z)
ez + e−z ez − e−z
cosh (z) = , sinh (z) = .
2 s
Todas estas funciones complejas extienden a sus contrapartes reales conocidas (extiene en
el sentido de que si pongo un complejo z con parte imaginaria nula en las expreciones, el resul-
tado es el mismo que se obtiene al usar las funciones de variable real). Tenemos las siguientes
propiedades:
Funciones de variable compleja 27
1. Como ez es analítica en todo C, sin, cos, sinh, y cosh tambien lo son, y tan y sec son
analíticas donde cos (z) 6= 0. Encontremos esos puntos: cos (z) = 0 ⇐⇒ eiz + e−iz =
0 ⇐⇒ eiz = −e−iz , multiplicando ambos lados de esta última igualdad por eiz obtenemos
cos (z) = 0 ⇐⇒ e2iz = −1. Si z = x + iy, esto es
2y = 0 y 2x = π + 2kπ,
o sea
π
y=0 y x= + kπ,
2
es decir que los ceros de cos son los puntos de la forma z = π2 + kπ + 0i, donde k es un
número entero, es decir que los ceros de la función compleja cos (z) son los mismos números
reales que anulan la función real coseno.
2. cos0 (z) = − sin (z) y sin0 (z) = cos (z) , estas dos fórmulas se obtienen sencillamente
derivando la definición (ejercicio).
3. cos (z) es una función par (cos (z) = cos (−z) ∀ z) y sin (z) es impar, y ambas son periódicas
de período 2π (ejercicio).
5. sin2 (z) + cos2 (z) = 1 ∀ z ∈ C, pero sin (z) y cos (z) NO son funciones acotadas en C, es
decir, no existe ningún número M tal que |cos (z)| ≤ M : ∀ z ∈ C y lo mismo con sin (z),
pues por ejemplo si y es un número real entonces
A esta altura de la materia, todos han agarrado un libro de variable compleja y han visto
la expresión “si z = x + iy entonces arg (z) = arctan (y/x) , pero nadie explica que es arctan,
así que pongámonos de acuerdo: la tangente de un ángulo θ con -π/2 < θ < π/2 se define
como tan (θ) = xy (ver dibujo), resultando tan (θ) > 0 si (x, y) esta en el primer cuadrante, y
28 Funciones de variable compleja
0 x
y z
θ
θ y 1
− π
1
π
0 x z 2 2
Después se extiende a todo R por periodicidad, o sea como una función periódica de período
π. Por lo tanto, si (x, y) esta en el segundo cuadrante (o sea si x < 0, y > 0), o sea si π/2 < θ < π,
tan (θ) = tan (θ − π) = y/x (!), y símil para el tercer cuadrante, resultando tan (θ) = y/x para
todo θ donde esta definida, o sea para todo x = 0 (todo esto se podría hacer con mas cuidado
diciendo que tan esta definida si x > 0, y luego hacer el cambio de cuadrante de forma de que
x quede positivo, pero no es el punto).
θ
3 −π 1 0 1π π 3 2π 5π
− π
x θ−π −x − π
2 2 2 2
π
2
− y
Entonces, el problema no esta en el y/x que aparece en todas las explicaciones dibujado
invariablemente en el primer cuadrante, sino en lo ambiguo de la expresión arctan (¿es una
inversa de tan?, ¿es la inversa de la rama central de tan?), que cambia según donde este el punto
(x, y) y según que argumento estemos usando. Por ejemplo, si (x, y) está en el segundo cuadrante
y estamos usando el argumento principal entonces arctan será una inversa de tan en el intervalo
(0, π) (y entonces nuestra calculadora no nos servirá para calcular el argumento de z = x + iy).
0
Capítulo 2
Mapeos en C
En este capítulo vamos a pensar a las funciones de variable compleja como transformaciones
o mapeos de C en C, y vamos a estudiar sus propiedades de esta manera.
Cuando trabajamos con números reales, usamos el símbolo ∞ para indicar un objeto (no
un número) que es mas grande que cualquier número real, y análogamente el símbolo −∞
para indicar un objeto que es mas chico que cualquier número. Así, la expresión lı́mx→∞ f (x)
significa (informalmente) ver como se comporta f cuando x se hace mas y mas grande, la
expresión lı́mx→a f (x) = −∞ significa que f (x) se hace mas chico que cualquier número real
cuando x se acerca a a, etc, y uno podía imaginarse a ∞ al fondo a la derecha de la recta real,
y −∞ al fondo a la izquierda. El problema en C es que tenemos muchas direcciones a partir
del origen (no dos como en R), por lo cual no tiene sentido hablar de ∞ o −∞, pero aún así
necesitamos algún objeto para estudiar “agrandamientos”. Por ejemplo, si z = reiθ entonces
1/z = z −1 = 1r e−iθ , entonces uno ve que cuando z → 0 (esto es, cuando r → 0 variando θ de
cualquier manera) 1/z se aleja del origen (tiene módulo 1/r) pero en cualquier dirección. La
solución de este problema es dictatorial, y consiste en poner un solo objeto que llamaremos ∞,
y que servirá para medir alejamientos ilimitados desde el origen. Al agregarle al plano C este
nuevo objeto obtenemos lo que se llama el plano complejo extendido que se denota a veces
por C∞ . Valen, por definición, las siguientes reglas algebraicas: para todo z ∈ C,
z + ∞ = ∞ + z = ∞.
z · ∞ = ∞ · z = ∞, si z 6= 0.
29
30 Mapeos en C
z/0 = ∞, si z 6= 0.
Además (dibujarlo) a cualquier recta por el origen en C le toca un meridiano. Esta identi-
ficación nos permite pensar que N = ∞, pues las cosas lejanas al origen en C están cerca de
N en la esfera. Así, los entornos de ∞ serán “círculos” abiertos centrados en N en la esfera, es
decir conjuntos de la forma {z ∈ C : |z| > M } vistos en C, y con esto la expresión
lı́m f (z) =
z→∞
significará que
∀ ε > 0 ∃ M > 0 tal que |f (z) − | < ε si |z| > M,
y la expresión
lı́m f (z) = ∞
z→z0
significará que
∀ M > 0 ∃ δ > 0 tal que |f (z)| > M si |z − z0 | < δ
Ejercicio: comparar con las definiciones de límite anteriores y escribir en criollo que significa
cada una. 2- ver que lı́mz→z0 f (z) = ∞ si y solo si lı́mz→z0 1/f (z) = 0.
Puesto que las funciones complejas son f : R2 → R2 , para poder hacer su gráfica necesi-
taríamos 4 coordenadas y solamente tenemos 3 (pues vivimos en un mundo tridimensional).Por
Mapeos en C 31
esta razón (y por otras) se acostumbra a pensar a las funciones complejas como transformaciones
o mapeos de un plano complejo en otro, y se estudia como las diferentes funciones “‘transforma”
diferentes conjuntos del plano. Una notación que se usa mucho es la siguiente: si tenemos una
función f : C → C, se pone w = f (z) y se piensa el dominio de f en un plano que se llama
“plano z” (pues la variable de f es z) y a la imagen en otro plano que se llama “plano w” (esto
es absolutamente análogo a lo que se hace en variable real cuando se llama “eje x” y “eje y”
a los ejes coordenados del plano). Esta notación facilita muchas explicaciones, por ejemplo la
afirmación “f lleva rectas del plano z en círculos del plano w” significa que la imagen por f de
cualquier recta es un círculo. Veamos algunos casos para ejemplificar:
Si f (z) = z + z0 , con z0 = a + ib, entonces f traslada los puntos según el vector (a, b) ∈
R2 , pues la suma en C corresponde a la suma usual de R2 : si z = x + iy entonces
z + z0 = (x + a, y + b) . Así que la transformación z → z + z0 lo único que hace es trasladar
conjuntos.
A0
C0
C D0 B0
D A w = z + z0
B
z0
0 0
plano z plano w
Esta transformación es inyectiva (es decir, dos puntos distintos tienen imágenes distintas)
y sobre (es decir, todo punto del plano w es imagen de un punto del plano z).
f (z) = z 2 es mas dificil que la anterior. Para comenzar a estudiarla vamos a expresarla
en coordenadas polares: si z = reiθ entonces z 2 = r2 ei2θ , entonces el módulo queda al
cuadrado y el ángulo
© iθ se multiplica
ª por 2. Así, esta transformación© lleva la semirrecta
ª
desde el origen re : r > 0 sobre otra semirrecta desde el origen rei2θ0 : r > 0
0
2
w=z
z
2θ
z 2θ
θ θ
0 0 0
plano z plano w
(cuando decimos sobre queremos enfatizar que la imagen no solo © cae sobreª la semi-
rrecta sino que la cubre© totalmente,ªo sea que todo punto de rei2θ0 : r > 0 es ima-
gen iθ0 2
© iθde algún punto de re ª: r > 0 por la transformación© iθ 2w = z ),2 el sector angularª
re : a < r < b, θ 0 ©< θ < θ1 sobre el ªsector angular re : a < ©r < b , 2θ0 < θ < 2θ1ª ,
y el arco de círculo reiθ : θ0 < θ < θ1 sobre el arco de círculo r2 eiθ : 2θ0 < θ < 2θ1 .
32 Mapeos en C
2
w=z
2θ2
θ2
r 2
r 2θ1
θ1
0 0
plano z plano w
2
w=z
k2
k1 0 c21 c22
k22 k12
plano w
0 c1 c2
plano z
f (z) = r0 z, con r0 > 0. Esta transformación “agranda” los conjuntos cuando r > 1 y los
“encoge” cuando r < 1, pues si z = reiθ entonces f (z) = ro reiθ , es decir no se modifica el
argumento y se multiplica el módulo. Es una transformación inyectiva y sobre.
r0 z
z z
r0 z
0 0
caso r0 < 1 caso r0 > 1
f (z) = 1/z. Escribiendo z = reiθ se tiene que 1z = 1r e−iθ , es decir, el módulo me queda 1r y
el argumento −θ. Asi, f lleva un círculo de radio R centrado en el origen en un circulo de
radio 1/R centrado en el origen, los puntos del 1er cuadrante caen siempre en el 4to (simil
los del 2do en el 3ro ), los puntos de {z : |z| < 1} en {z : |z| > 1} , etc. Es una transformación
inyectiva pero no sobre, pues ningún número complejo satisface 1z = 0.
plano w
w = 1 /z
0 1
z - θ1
1
z r2 θ2 1/ r1
θ
-1
r1
0 1/ z θ1 - θ2
−θ 1/r2
1/z
0 1
plano z
34 Mapeos en C
√ √
f (z) = z, donde · denota la rama principal de la raiz cuadrada. Si z = reiθ entonces
√ √ iθ/2
z = re , es decir, se divide el argumento por 2 y se radica el módulo. El problema
con esta función es que hay que tener un ojo barbaro con el argumento: como tomamos
el argumento principal (−π < θ ≤ π), una pequeña región angular que incluya puntos
del eje real negativo será transformada en dos pequeñas regiones, una en el 1er cuadrante
e incluyendo un pequeño segmento del eje y, y otra en el 4to cuadrante, que no incluye
ningún punto del eje y. Esta transformación no es sobre (trasnforma todo el plano en un
semiplano mas un semieje) y es inyectiva.
w=√
z
z
θ
√z
0 0
θ/2
plano z
0 plano w
A z
w=e k2
k2
ec2 k1
k1 B
ec1 0
A0
0 c1 c2 plano w
B0
plano z
f (z) = log (z) (la rama principal del logaritmo). En este caso es mas facil expresar
el dominio en coordenadas polares y la imagen en coordenadas cartecianas, ya que si
z = reiθ entonces log (z) = ln (r) + iθ. Asi, el círculo {z : |z| = R} se mapea sobre
{z : z = ln (R) + iθ, −π < θ ≤ π} , es decir un segmento vertical de longitud 2π y parte real
constante igual a ln (R) , y la semirecta {z : arg (z) = θ0 } sobre {z : z = ln (r) + iθ0 , 0 < r} ,
Mapeos en C 35
o sea la recta {z : Im (z) = θ0 } . Una propiedad muy util es que log mapea el semi-
plano {z : Im (z) ≥ 0} en la franja {z : 0 ≤ Im (z) ≤ π} . Con esta transformación tam-
√
bién tenemos que tener cuidado con los argumentos (como con ·): log lleva el eje re-
al
© negativo en la recta
ª ©{z : Im (z) = π} , y elªsemiplano {z : Re (z) < 0} en las franjas
z : π2 ≤ Im (z) ≤ π ∪ z : −π ≤ Im (z) ≤ − π2
A
log(z) π
r1 θ0 θ0 A0
θ1
θ1
0 r0 0 r0 ln(r1)
B plano w
plano z
B0
−π
En los ejemplos anteriores no hemos usado ningún conocimiento sobre analiticidad para
estudiar las funciones analíticas como mapeos, solo usamos su definición y hicimos cuentas.
Ahora bien, el estudio detallado de los ejemplos muestra lo siguiente: en algunos casos, las
funciones llevan curvas que se cortan en cierto ángulo en curvas que se cortan en el mismo
ángulo (f (z) = z + b, f (z) = ez ) y en otros casos no (f (z) = z 2 , tomando dos rectas por el
origen). Vamos a ver bajo que condiciones podemos asegurar que los ángulos se preservan, y
para eso hace falta otro repasín de Análisis II:
Definición 27 una función γ : [a, b] → R2 (= C), γ (t) = (x (t) , y (t)) = x (t) + iy (t) es un
camino en C. La imagen C de γ se llama una curva en C, y decimos que γ parametriza la curva
C.
1. γ es continua sii sus funciones coordenadas Re (γ) = x (t) , Im (γ) = y (t) lo son.
2. γ es derivable sii sus funciones coordenadas lo son, y en tal caso γ 0 (t) = (x0 (t), y 0 (t)) =
x0 (t) + iy 0 (t).
3. γ es continua por tramos sii existe una partición a = t0 < t1 < ... < tn = b tal que γ es
continua en cada intervalo [tj , tj+1 ] (límites laterales en los bordes).
En condiciones generales, todas las cuentas que haremos con curvas no dependen de la
parametrización, por lo cual muchas veces nos referiremos de manera indistinta a la curva o a
su parametrización, por ejemplo hablaremos del tangente a γ (en lugar de el tangente a C).
Ejemplo 28
1. γ (t) = eit , t ∈ [0, 2π] en un camino que parametriza el círculo unitario centrado en el
origen.
Lo que tenemos de nuevo acá es que podemos multiplicar y dividir curvas, y componer con
funciones analíticas.
Lema 29 Si γ (t) y β (t) son caminos suaves a trozos definidos en [a, b] , y z0 ∈ C, entonces:
1. d
dt (γ + β) = γ 0 + β 0 .
2. d
dt (γβ) = γ 0 β + γβ 0 .
d γ 0 β−γβ 0
3. dt (γ/β) = β2
, para todo t donde β (t) 6= 0.
5. Si ϕ (t) es una función derivable, ϕ : [c, d] → [a, b] , entonces (γ ◦ ϕ) (t) es un camino con
la misma imagen que γ, y (γ ◦ ϕ)0 (t) = γ 0 (ϕ (t))ϕ0 (t) (lo interesante de esto es que ϕ (t)
es un número real y ϕ0 (t) es una derivada real).
Demostración.
1. Análisis II.
2. Descomponemos en parte real e imaginaria: si γ (t) = x (t) + iy (t) y β (t) = a (t) + ib (t)
entonces γβ = xa − yb + i [xb + ya], y
¡ ¢ £ ¤
(γβ)0 = x0 a + xa0 − y 0 b + yb0 + i x0 b + xb0 + y0 a + ya0
£ ¤ £ ¤
= x0 a − y 0 b + i x0 b + y 0 a + xa0 − yb0 + i xb0 + ya0
¡ ¢ ¡ ¢
= x0 + iy 0 (a + ib) + (x + iy) a0 + ib0
= γ 0 β + γβ 0
4. Si f (z) = u (x, y)+iv (x, y) y γ (t) = x (t)+iy (t) , entonces η (t) = f (γ (t)) = u (x (t) , y (t))+
iv (x (t) , y (t)) . Para derivar, usamos la regla de la cadena de Análisis II (escribiendo como
par ordenado en lugar de notación compleja, de ser necesario para refrescar la memoria):
£ ¤
η 0 = ux x0 + uy y 0 + i vx x0 + vy y0
= (ux + ivx ) x0 + (uy + ivy )y0
= (ux + ivx ) x0 + (−vx + iux )y0
= (ux + ivx ) x0 + (ivx + ux )iy 0
= (ux + ivx ) (x0 + iy0 ) = f 0 (γ)γ 0 ,
donde hemos usado C-R en la tercer igualdad, sacado factor común i en la cuarta, y
usado que f es analítica en la quinta (y por lo tanto su derivada se puede calcular como
f 0 = ux + ivx ).
5. Esta también es de Análisis II, lo que estamos haciendo es multiplicar el número real ϕ0
por el número complejo γ 0 (en Análisis II era el producto de un escalar por un vector): si
γ (t) = x (t) + iy (t) entonces γ (ϕ (t)) = x (ϕ (t)) + iy (ϕ (t)) , y
d
γ (ϕ (t)) = x0 (ϕ (t)) ϕ0 (t) + iy0 (ϕ (t))ϕ0 (t)
dt
= γ 0 (t)ϕ0 (t).
Supongamos que C es una curva parametrizada por un camino suave γ : [a, b] → C, con
γ 0 (t0 ) 6= 0 para algún t0 ∈ (a, b) , entonces C tiene vector tangente γ 0 (t0 ) en z0 = γ (t0 ) ,
y el ángulo que forma dicho vector con la horizontal es θ0 = arg (γ 0 (t0 )) (con arg estamos
suponiendo que hemos fijado algún intervalo de la forma (ω0 , ω 0 + 2π], por ejemplo puede ser la
rama principal). Supongamos que f (z) es una función analítica en C (o sea en un abierto que
contiene a C) y que f 0 (z0 ) 6= 0, entonces f transforma C en otra curva Γ parametrizada por el
camino suave β (t) = f (γ (t)) , y por el lema de recién tenemos que el vector tangente a β en t0
es
β 0 (t0 ) = f 0 (z0 ) γ 0 (t0 )
C
β 0(t0)
0
γ (t0)
w = f(z) Γ
z0 θ0 φ0
f(z0)
0 0
plano z plano w
φ1 = θ1 + ψ 0 y φ2 = θ2 + ψ 0
y entonces
φ2 − φ1 = θ2 − θ1
es decir, el ángulo que forman las curvas C1 y C2 en z0 es el mismo (en magnitud y sentido) que
el ángulo en que se cortan Γ1 y Γ2 en f (z0 )
C2 w = f(z) Γ2
θ 2 − θ1
φ2− φ1
z0 C1
f(z0) Γ1
0 0
plano z plano w
C1 z
w=e π/2 Γ1
Γ2
π/2
π/4
π/4
C2
0 e
0 1
plano z
plano w
z
θ θ
f(z)
z0
f(z0)
y el determinante jacobiano es, entonces, (ux )2 + (vx )2 . Como f 0 = ux + vx entonces |f 0 (z0 )|2 =
ux (z0 )2 + vx (z0 )2 6= 0, entonces la matriz Mf (z0 ) es invertible, y entonces el teorema de la
función inversa dice que f es invertible en un entorno de z0 . Esta situación es local, considerar
por ejemplo f (z) = ez , que es conforme en todo C y no tiene una inversa global.
40 Mapeos en C
Dada la importancia que tiene determinar si f 0 (z) = 0 o f 0 (z) 6= 0, vale la pena el siguiente
teorema (además es una belleza de teorema):
1. f 0 (z) = 0 ∀ z ∈ D.
2. Re (f (z)) es constante en D.
3. Im (f (z)) es constante en D.
4. |f (z)| es constante en D.
Tomo z0 fijo, voy a probar que f (z) = f (z0 ) para todo z en D. Tomo un z cualquiera en
D, entonces hay una curva suave por trozos (mas aun, una poligonal) que une z con z0 , es
decir, γ : [a, b] → D suave por tramos con γ (a) = z y γ (b) = z0 . Vamos a suponer que γ
es suave. Llamo ϕ1 (t) = u (γ (t)) , ϕ2 (t) = v (γ (t)) , entonces si γ = x + iy, tenemos que
dϕ1
(t) = ux (γ (t)) x0 (t) + uy (γ (t)) y0 (t) = 0 ∀ t, y
dt
dϕ2
(t) = vx (γ (t)) x0 (t) + vy (γ (t)) y0 (t) = 0 ∀ t
dt
Es decir, ϕ1 y ϕ2 son funciones de una variable con derivada cero, y entonces son ambas
constantes, por lo tanto f (z) = f (γ (a)) = f (γ (b)) = f (z0 ) .
Finalmente, si γ no es suave, se parte [a, b] en intervalos donde γ es suave y se repite el
razonamiento, probando que γ es constante en cada intervalito. Se termina usando que
γ es continua en [a, b] (ejercicio, escribir bien esto fijándose en la definición de suave por
trozos).
2uux + 2vvx = 0
2uuy + 2vvy = −2uvx + 2vux = 0
es decir µ ¶µ ¶ µ ¶
u v ux 0
=
v −u vx 0
5. Si arg (f (z)) = θ0 ∀ z ∈ D, entonces f (z) = |f (z)| eiθ0 ∀ z ∈ D (lo que estamos haciendo
es poner f (z) en coordenadas polares). Llamemos g (z) = e−iθ0 f (z) , entonces g es analítica
en D (es una constante por f ), y Im (g (z)) = 0 ∀ z ∈ D (pues g = |f |), entonces g es
constante en D (por (3)), o sea f es constante en D.
Vamos a ver algunas propiedades geométricas de C∞ que son intuitivas pero difíciles de
formalizar.
Teorema 37 (de la curva de Jordan) toda curva cerrada simple divide el plano complejo
extendido en dos regiones abiertas, una es acotada y simplemente conexa y la otra contiene a
∞, siendo la curva la frontera de ambas regiones.
La región que contiene a ∞ se llama exterior de la curva, y la otra se llama interior. Otro
teorema de similares característica es el siguiente:
Exterior de C
β(b)
β(c)
Interior β(a)
de C C
C
Dicho en criollo, T lleva puntos distintos en puntos distintos y T lleva todo C∞ sobre todo C∞ .
A este tipo de mapeo se lo llama transformaciones biunívocas de C∞ .
C Γ
T(z)
Γ w1 = T(z1)
C
T(z)
z1
z0 w0 = T(z0)
az + b
T (z) = ,
cz + d
© ª
donde a, b, c, d son números complejos con ad − bc 6= 0. T esta definida en C− − dc , y es
analítica en dicho conjunto, con
az + b
w=
cz + d
entonces se puede despejar w:
w (cz + d) = az + b
wcz + wd = az + b
wcz − az = b − wd
(cw − a) z = b − wd
b − wd
z =
cw − a
44 Mapeos en C
b−wd
(o sea si w = T (z) , necesariamente z = cw−a ). Teniendo en cuenta que
b − wd d b − wd
lı́m =− , y lı́m =∞
w→∞ cw − a c w→ ac cw − a
Notar que toda transformación de Möbius puede escribirse como composición de traslaciones,
dilataciones e inversiones; para ver esto supongamos que T (z) = az+b
cz+d y dividamos en dos casos:
Si c = 0 (entonces d 6= 0 y),
a b
T (z) = z + ,
d d
entonces T es la composición de la dilatación D (z) = ad z y la traslación M (z) = z + db , o sea
T (z) = M (D (z)) .
az + b | cz + d
ad a
−az − c c
ad
b− c
revela que µ ¶
a ad
az + d = (cz + d) + b − ,
c c
es decir µ ¶
az + d a bc − ad 1
= +
cz + d c c (cz + d)
o sea que si
T1 (z) = cz = dilatación,
T2 (z) = z + d = traslación,
T3 (z) = 1/z = inversión,
µ ¶
bc − ad
T4 (z) = z = dilatación,
c
a
T5 (z) = z + = translación,
c
entonces
T (z) = T1 (T2 (T3 (T4 (T5 (z)))))
Dicho de otra forma, si w = T (z) , entonces w es el resultado de¢ la siguiente cadena de trans-
¡ bc−ad
formaciones: w1 = cz, w2 = w1 + d, w3 = 1/w2 , w4 = c w3 , w = w4 + ac . Pongamos
todo lo hecho en un teorema:
Ejemplo 42 si T (z) = z−1z+1 , entonces T (1) = 0, T (−1) = ∞, y T (∞) = 1 (ojo con estas dos
∞−1 z−1
últimas, no poner ∞+1 , calcular lı́mz→∞ z+1 , pues la expresión ∞−1
∞+1 no tiene ningún sentido).
La inversa de T se calcula así: si
z−1
w=
z+1
entonces
w (z + 1) = z − 1,
wz + w = z − 1,
w + 1 = z − wz
w+1
= z.
1−w
Notar que la elección w = ∞ lleva a z = −1. Por último, descompongamos T como composición
de transformaciones simples:
z−1 z+1−2 2
= =1− ,
z+1 z+1 z+1
w1 = z + 1
w2 = 1/w1
w3 = −2w2
w = w3 + 1.
Este tipo de descomposición suele ser útil para ver como transforma T algunos conjuntos del
plano z, por ejemplo si C es el círculo de radio 1 centrado en −1, entonces aplicarle la transfor-
mación T a C es lo mismo que aplicarle la transformación w1 a C, al resultado aplicarle w2 , al
resultado w3, y por último a ese resultado aplicarle w; en este caso queda así: w1 transforma C
en el círculo de radio 1 centrado en 0, w2 transforma dicho círculo en él mismo, w3 transforma
el resultado en el círculo de radio 2 centrado en 0, y w transforma ese resultado en el círculo de
radio 2 centrado en 1. Puesto que T (−1) = ∞, tenemos que T lleva todo el interior de C sobre
todo el exterior de la curva T (C) , por ser T una transformación biunívoca de C∞ .
w=
2w
2
w3
w2
-
w3 =
+1
+1
=
=z
1/
1 -2 -1 0 1 2
w
w1
-2 -1 0 1 2
-2 -1 0 1 2 -2 -1 0 1 2 -2 -1 0 1 2 3
Mapeos en C 47
Ahora queremos estudiar como mapea una transformación de Möbius círculos y rectas, y
para eso nos hace falta encontrar una buena forma de expresar círculos y rectas en C:
La ecuación
¡ ¢
a x2 + y 2 + bx + cy + d = 0, con (2.1)
2 2
a, b, c, d ∈ R, b + c > 4ad (2.2)
describe la totalidad de círculos y rectas de R2 (eso es, dado un círculo o una recta Γ en
R2 , existen constantes a, b, c, d en las condiciones de (7) tal que Γ tiene ecuación (6)) pues:
que cero por (7)). Notar que además vimos que una curva de ecuación (6) con condiciones
(7) es un círculo sii a 6= 0, y pasa por (0, 0) sii d = 0.
¡ ¢
tomar α = a, δ = d, y β = 2b + i 2c . Recíprocamente, toda ecuación de la forma (8) queda de
la forma (6) con condición (7) cuando se cambia z por x + iy (ejercicio), es decir que:
Nota 44 se suele pensar a las rectas en C como círculos de radio ∞, esto es coherente ³ 2 pues ´la
ecuación (8) es la de una recta si y solo si α = 0, y es la de un círculo de radio |β| α2 − α
δ
,
que tiende a ∞ cuando α tiende a cero. Además si uno sube a la esfera de Riemann, una recta
en C da un círculo que pasa por el polo norte, y por eso se dice que las rectas son los únicos
círculos que pasan por ∞. Es por todo esto que a los círculos y rectas en C se los llama círculos
generalizados (cg) en C∞ .
Demostración. vamos a ver que el teorema es cierto para las transformaciones elementales; el
caso general se sigue inmediatamente del hecho de que toda transformación de Möbius se escribe
como composición de transformaciones elementales. Tomo Γ un cg; por el lemita anterior se que
existen α, δ ∈ R, β ∈ C con |β|2 > αδ tal que Γ tiene ecuación αz z̄ + β z̄ + β̄z + δ = 0
donde α1 = α
b2 , β 1 = βb , y δ 1 = δ, y
2
)
|β 1 |2 = |β|
b2 ⇒ |β 1 |2 > α1 δ 1
α1 δ 1 = αδ
b2
z ∈ Γ ⇐⇒ w ∈ Γ1 ,
Mapeos en C 49
donde Γ1 es el cg de ecuación (10). Con respecto al punto ∞, solo está en Γ si es una recta,
o sea si α = 0, y en tal caso está en Γ1 pues α1 = 0, y T (∞) = ∞.
Pero T : C∞ → C∞ es sobre, es decir debe alcanzar todos los puntos del plano (extendido)
w, y como los únicos puntos del plano (extendido) z que pueden caer en Γ1 son los de Γ,
entonces T debe llevar todo Γ en todo Γ1 .
donde α1 = δ, β 1 = β̄, y δ 1 = α, y
¾
|β 1 |2 = |β|2
⇒ |β 1 |2 > α1 δ 1
α1 δ 1 = αδ
o sea que z cumple (9) si y solo si w = 1/z cumple (11), es decir que
si z 6= 0, z ∈ Γ ⇐⇒ w ∈ Γ1 , (2.6)
∀ z, w ∈ C∞ , z ∈ Γ ⇐⇒ w ∈ Γ1 .
Pero T : C∞ → C∞ es sobre, es decir debe alcanzar todos los puntos del plano (extendido)
w, y como los únicos puntos del plano (extendido) z que pueden caer en Γ1 son los de Γ,
entonces T debe llevar todo Γ en todo Γ1 .
1
Notar que de la ecuación (11) que cumple w = z suponiendo que z cumpla (9), se deduce
que la inversión lleva:
Rectas que pasan por el origen sobre rectas que pasan por el origen.
50 Mapeos en C
Rectas que no pasan por el origen en círculos que pasan por el origen.
Círculos que pasan por el origen sobre rectas que no pasan por el origen.
Círculos que no pasan por el origen sobre círculos que no pasan por el origen.
Ejemplo 46 tomemos T (z) = 1/z, y C1 = {z : Im (z) = 0} . Como C1 es una recta que pasa
por el origen, T la lleva a una recta que pasa por el origen, y como T (1) = 1, T (−1) = −1,
debe llevarla en la misma recta pues C1 es la única recta que pasa por el origen y contiene los
puntos 1 y −1.
w = 1/z
C1 T(C1)
0 1 0 1
plano z plano w
1 1−i 1 1 1 −1 − i 1 1
T (1 + i) = = = −i , y T (−1 + i) = = =− −i ,
1+i 2 2 2 −1 + i 2 2 2
© ª ¡ ¢
concluimos
¡1 ¢ que T (C2 ) = w : Im (w) = − 12 , pues esa es la única recta que contiene a 12 − i 12
y 2 − i 12 .
w = 1/z
2i T(C1)
C2
0
i
T(C2)
C1
-i/2
0
plano z plano w
Por último, si C3 = {z : Im (z) = 1} , como C3 es una recta que no pasa por el origen, T lo lleva
sobre un círculo
© ¯ que ipasa
¯ 1por
ª el origen, puesto que ya conocemos T (1 + i) y T (−1 ¡ 1+ i) ,1 ¢resulta
T ¯ ¯
¢ w : w − 2 = 2 pues este es el único círculo que contiene los puntos 2 − i 2 , 0, y
¡ 1(C3 )1=
2 − i 2 (Notar los ángulos en que se cortan C2 y C3 y el ángulo en que se cortan sus respectivas
imágenes por T ). Además, puesto que T es una transformación biunívoca de C∞ , podemos decir
Mapeos en C 51
© ª
que T lleva el disco {z : |z − i| ≤ 1} sobre el semiplano w : Im (w) ≤ 12 .
w = 1/z
T(C1)
2i C2
0
i C3
T(C2)
C1 -i/2
0 T(C3) plano w
plano z
-i
az+b
Ejemplo 47 Queremos encontrar una transformación de Möbius T (z) = cz+d que lleve el disco
{z : |z| ≤ 1} sobre el semiplano {w : Re (w) ≥ 0} .
T(z)
-1 0 1
0 1 2
-i plano z plano w
Lo que vamos a hacer es tratar de llevar el círculo {z : |z| = 1} sobre la recta {w : Re (w) ≥ 0}
(sabemos que siempre la imagen de un círculo será un cg, pero no sabemos si podemos elegir
a, b, c y d para que sea justo la recta que querremos). Como tres puntos determinan todo cg de
C∞ , elijo tres puntos del círculo y los mando sobre la recta: quiero
o sea
−a + b −ai + b a+b
= 0, = 1, y = 2,
−c + d −ci + d c+d
que es lo mismo que
(1 + i)
c= a,
2
52 Mapeos en C
y entonces
(1 + i) (1 − i)
d = a − c = a(1 − )=a .
2 2
Puesto que ya tengo b, c y d en función de a, ponemos a = 1 y queda
z+1 2z + 2
T (z) = (1+i) (1−i)
= .
(1 + i) z + (1 − i)
2 z + 2
Se puede verificar fácilmente que dicha T satisface (13), y por lo tanto debe llevar todo el círculo
{z : |z| = 1} sobre toda la recta {w : Re (w) = 0} , pero además
2
T (0) = = 1 + i,
1−i
T(z)
i
i
-1 0 1
0 1
plano z plano w
El último ejemplo resulta inspirador, y nos preguntamos cuando podemos hacer esto, es
decir, elegir dos regiones del plano y encontrar una transformación de Möbius que lleve una en
la otra.
Lema 49 Si T es una transformación de Möbius entonces T tiene a los mas dos puntos fijos
en C, salvo que sea T (z) = z (en ese caso T se llama identidad). Dicho de otra forma, si una
transformación de Möbius tiene tres puntos fijos entonces debe ser la identidad.
Ahora veremos que dados z1 , z2 , z3 tres puntos distintos de C∞ , y w1 , w2 , w3 otros tres puntos
distintos de C∞ , existe una única transformación de Möbius M (z) tal que
Pongamos
⎧ z−z1 z2 −z3
⎪
⎪ z−z3 z2 −z1 si z1 , z2 , z3 ∈ C
⎪
⎪
⎪
⎪
⎪
⎪ z2 −z3
⎪
⎨ z−z3 si z1 = ∞
T (z) =
⎪
⎪ z−z1
⎪
⎪ z−z3 si z2 = ∞
⎪
⎪
⎪
⎪
⎪
⎩ z−z1
z2 −z1 si z3 = ∞
Definamos de manera análoga S (w) cambiando las z’s por w’s en la definición anterior, de forma
tal que S satisfaga
S (w1 ) = 0, S (w2 ) = 1, y S (w3 ) = ∞
(usamos la letra w porque queremos pensar T como una transformación del plano z en el plano w
y S una transformación del plano w en el plano z). Pero S es de Möbius y entonces es invertible,
es decir existe la transformación S −1 , que es de Möbius, y S −1 (S (w)) = w ∀ w ∈ C∞ , en
particular
S −1 (0) = w1 , S −1 (1) = w2 , y S −1 (∞) = w3 .
Pero entonces la composición S −1 (T (z)) es de Möbius y
o sea que tiene tres puntos fijos, y entonces H −1 (M (z)) = z, o sea M (z) = H (z) ∀ z. Hemos
probado el siguiente:
Nota 52 Lo bueno es que en la demostración del lema tenemos un método para encontrar a
w = M (z): hallar T (z) , luego S (w) y resulta w = S −1 (T (z)) ; tomando S en la igualdad
anterior, resulta S (w) = T (z) , y entonces podemos encontrar w despejando de esa igualdad,
por ejemplo si z1 , z2 , z3 , w1 , w2 , w3 son todos puntos de C (o sea ninguno es ∞) w sale de despejar
w − w1 w2 − w3 z − z1 z2 − z3
=
w − w3 w2 − w1 z − z3 z2 − z1
Nota 53 untando todo lo que hemos hecho hasta ahora, podemos concluir que dado un cg C en
el plano (extendido) z y otro Γ en el plano (extendido) w„ existe siempre una transformación
de Möbius que lleva C sobre Γ.
0, −i, ∞,
−1, −i, 1,
az+b
Si T (z) = cz+d , entonces
b
T (0) = = −1 ⇒ b = −d,
d
a
T (∞) = = 1 ⇒ a = c,
c
ai + b
T (i) = = i ⇒ ai + b = −c + id.
ci + d
ai − d = −a + id ⇐⇒ a (1 + i) = d (1 + i) ⇐⇒ a = d;
b = −a, c = a, y d = a,
Es inmediato que esta T satisface (14), entonces debe llevar la recta {z : Re (z) = 0} sobre el
círculo {w : |w| = 1} , y como además T (1) = 0, debe llevar todo {z : Re (z) ≥ 0} sobre todo el
disco {w : |w| ≤ 1} , o sea listo. Notar que nosotros no hicimos ningún esfuerzo en particular
para que T (1) = 0, y si T (1) hubiera caído fuera de {w : |w| ≤ 1} entonces T no nos hubiera
servido. En este caso se hubiera podido arreglar fácil, tomado 1/T (z) (why??), pero tenemos
que hacer algo para dejar de depender de nuestra suerte.
2.8. Orientación
En los últimos ejemplos hemos estado llevando “un lado” de una curva sobre otro de la curva
imagen, (los lados son el exterior y el interior si nuestras curvas son cg en C∞ ), basados en el
hecho de que las transformaciones de Möbius son biunívocas de C∞ . El método era llevar la
curva sobre la curva, y el resto venia solo, salvo que no podíamos asegurar de antemano que
lado iba a caer sobre que lado. Vamos a ver (de manera un poco informal) como hacer para
asegurarnos antes de encontrar T, qué lado caerá sobre qué lado.
Supongamos que T : C → C es conforme y biunívoca, y tomemos una curva suave cerrada
simple C. Parametricemos C por γ : [a, b] → C con γ 0 (t) 6= 0 ∀ t, de forma tal de recorrerla en
sentido antihorario (esta expresión es fácil de entender siendo C una curva cerrada simple), así el
interior de C queda “a la izquierda” de C, y tomemos un punto z0 = γ (t0 ) en C. Llamemos Γ a la
imagen de C por T, entonces Γ es una curva cerrada simple parametrizada por T (γ) . Si γ 0 (t0 ) =
x0 + iy0 = (x0 , y0 ) (vector tangente a C en z0 ), entonces el vector iγ 0 (t0 ) = ix0 − y0 = (−y0 , x0 )
es una rotación de π/2 en sentido antihorario del vector γ 0 (t0 ), y entonces es perpendicular a
56 Mapeos en C
C
Γ
T(z)
π/2
z0 γ 0(t0)
Sea r (t) = (t − t0 ) (−y0 + ix0 ) + z0 = recta perpendicular a γ 0 (t0 ), con r (t0 ) = z0 y r0 (t0 ) =
(−y0 + ix0 ) = (−y0 , x0 ) ; r (t) corta C en un ángulo de π/2, entonces T (r (t)) parametriza una
curva que debe cortar Γ en un ángulo rotado en π/2 en sentido horario de el tangente a Γ en
T (z0 ) (por ser T conforme en z0 )
C T(r(t))
T(z0)
r(t) T(z)
Γ
π/2
z0 γ 0(t0)
Así, si T (γ (t)) recorre Γ en sentido antihorario luego T (r (t)) va del exterior al interior de
Γ. Para valores de t próximos a t0 pero mayores que t0 , r (t) está en el interior de C, y T (r (t))
está en el interior de Γ, y entonces T debe llevar todo el interior de C sobre todo el interior de
Γ (por ser T biunívoca)
C T(r(t))
T(z0)
r(t) T(z)
Γ
π/2
π/2
z0 γ 0(t0)
w0 , w1 , y w2 en ∂∆,
w3
w2
T(z) ∆
w1
D 0 α
a ∂D ∂∆
z1
z2 0
z3
a2 (Txx + Tyy ) = Tt ,
donde a es una constante no nula que depende de la conductividad del material del cuerpo.
Para determinar la temperatura necesitamos mas datos, como la temperatura inicial y/o la
temperatura del borde del objeto en cuestión.
Cuando, por circunstancias físicas específicas, la temperatura no depende del tiempo (de ahí
el nombre estacionaria), la ecuación queda
Txx + Tyy = 0,
o sea T debe cumplir la ecuación de Laplace (que es la que cumplen las funciones armónicas), y
habrá que poner condiciones iniciales o de borde.
Nos proponemos revolver, a modo de ejemplo, el siguiente problema de distribución esta-
cionaria de temperatura: consideremos una placa semifinita, que para nosotros será el semiplano
{z : Im (z) ≥ 0} , de la cual sabemos que tiene distribución estacionaria, y que la temperatu-
ra en el borde entre −1 y 1 vale 10o , y la temperatura en el resto del borde vale 0o . Bus-
camos una T (x, y) definida y continua en {z : Im (z) ≥ 0} , con derivadas segundas continuas en
{z : Im (z) > 0} , (que tome valores reales, pues representa la temperatura), tal que
-1 0 1
Notar que necesariamente en los puntos (−1, 0) y (1, 0) nuestra función T no va a estar
definida; además la primer condición junto con la continuidad de las derivadas segundas pedidas,
dice que T es armónica. Como no tenemos idea de como encontrar T, comenzamos con un
problema parecido: encontrar F (x, y) armónica en la franja {z : 0 ≤ Im (z) ≤ π} , acotada y tal
que
F (x, 0) = 0, F (x, π) = 1 ∀ x ∈ R,
Mapeos en C 59
Encontrar F es muy fácil, basta con tomar F (z) = π1 Im (z) (ejercicio: verificar que sirve). Ahora,
si M (z) es una función analítica en el semiplano{z : Im (z) > 0} y continua en {z : Im (z) ≥ 0} ,
que lleva dicho semiplano en la franja {z : 0 ≤ Im (z) ≤ π} de forma tal que el segmento
{z : −1 < Re (z) < 1, Im (z) = 0} caiga en la recta {z : Im (z) = π} y las dos semirectas
{z : Re (z) < −1, Im (z) = 0}∪{z : Re (z) > 1, Im (z) = 0} caigan sobre la recta {z : Im (z) = 0} ,
o sea, que
½
π si − 1 < x < 1
Im (M (x, 0)) = .
0 si x < −1 ó x > 1
M(z)
π B0
A
B -1 0 1 B
0 A0
Entonces
10
T (z) = Im (M (z))
π
es la función que buscamos, pues:
T es armónica en {z : Im (z) > 0} pues es la parte real de una función analítica (!).
½
10 π si − 1 < x < 1
T (x, 0) = π Im (M (x, 0)) =
0 si x < −1 ó x > 1
log(z)
-1 0 1
π
y entonces µ ¶
10 2y
T (x, y) = arctan ,
π x + y2 − 1
2
donde arctan (·) es la rama de la arcotangente que toma valores en© [0, π] (ver sección ª1.11).
La función obtenida parece no definida en el arco de círculo x + y 2 = 1, y > 0 , pero si
2
µ ¶
10 2y 10 10 π
lı́m arctan 2 2
= lı́m arctan (t) = =5
(x,y)→(xo ,yo ) π x +y −1 t→±∞ π π 2
(esto por la rama de la tangente que estamos usando). Además, si −1 < xo < 1 y hacemos
(x, y) → (xo , 0+ ) (o sea que (x, y) tienda a (xo , 0) desde el semiplano superior) tenemos que
2y
→ 0−
x2 + y2 − 1
(es decir se acerca a 0 por valores negativos), pues cuando y esta suficientemente cerca de 0 y x
de xo se tiene que x2 + y2 < 1 (y y > 0). Entonces,
10 10
lı́m T (x, y) = lı́m arctan (t) = π = 10,
(x,y)→(xo ,0+ ) t→0− π π
Mapeos en C 61
π
π/2 arctan(t)
(x,y)
-1 0 x0 1 t
Veamos como son las isotermas, o sea las líneas que tienen igual temperatura:
µ ¶ ³ πc ´
10 2y 2y
T (x, y) = c ⇐⇒ arctan = c ⇐⇒ = tan
π x2 + y 2 − 1 x2 + y 2 − 1 10
³ πc ´ ¡ ¢ 2y
⇐⇒ 2y = tan x2 + y 2 − 1 ⇐⇒ x2 + y2 − 1 − =0
10 tan (πc/10)
µ ¶2 µ ¶2
2 1 1
⇐⇒ x + y − −1− = 0,
tan (πc/10) tan (πc/10)
³ ´ r ³ ´ 2
1 1
es decir las isotermas son círculos de centro 0, tan(πc/10) y radio 1+ tan(πc/10) . Notar que
por la rama de la tangente que estamos usando, necesitamos 0 ≤ πc 10 ≤ π, es decir que los únicos
valores que puede tomar c son
³ 0 ≤ c ≤ 10.
´ Además los círculos siempre pasan por (±1, 0) , y si
1
0 < c < 5 entonces el centro 0, tan(πc/10) está en el semiplano superior, y si no en el inferior.
c<5
1
c=5
c>5
-2 -1 0 1 2
62 Mapeos en C
Capítulo 3
Integrales en C
En este capítulo estudiaremos la clase de integral compleja mas usual, que es la integral
de línea. Mas que usarla directamente en aplicaciones, lo que nosotros vamos a hacer es usarla
como herramienta teórica para demostrar importantes hechos sobre las funciones de variable
compleja.
Comenzaremos definiendo la integral de una función de variable real pero imagen compleja
de la manera obvia (que es, integrando su parte real e imaginaria) para luego definir las integrales
de líneas. Teniendo en cuenta que este capítulo contiene muchos resultados teoricos que no son
sencillos para interpretar intuitivamente, trataremos de pasarlo de la forma mas clara y concisa,
ejemplificando en cada casa para que se entienda que estamos haciendo.
Definición 56 si γ (t) = x (t) + iy (t) es un camino continuo a trozos definido en [a, b] , pon-
dremos Z b Z b Z b
γ (t) dt = x (t) dt + i y (t) dt,
a a a
Rb
es decir que a γ (t) dt es un número complejo con
µZ b ¶ Z b µZ b ¶ Z b
Re γ (t) dt = x (t) dt y Im γ (t) dt = y (t) dt.
a a a a
Proposición 57 Si γ (t) , β (t) son caminos continuos a trozos en [a, b] , z0 es un número com-
plejo y c es tal que a < c < b, entonces
63
64 Integrales en C
Rb Rc Rb
1. a γ (t) dt = a γ (t) dt + c γ (t) dt.
Rb Rb Rb
2. a(z0 γ (t) + β (t)) dt = z0 a γ (t) dt + a β (t) dt.
Rb Ra
3. a γ (t) dt = − b γ (t) dt.
Rd
4. Si X 0 (t) = x (t) y Y 0 (t) = y (t) en (c, d) ⊆ [a, b] , entonces c γ (t) dt = X (d) − X (c) +
i [Y (d) − Y (c)] , es decir, si Γ0 (t) = γ (t) ∀ t ∈ (c, d) (con (c, d) ⊆ [a, b]), entonces
Rd
c γ (t) dt = Γ (d) − Γ (c) .
Rπ ³ it ´
d e
Ejemplo 58 queremos calcular 0 eit dt. Como sabemos que dt i = eit , la cuarta propiedad
anterior nos dice que Z π µ iπ ¶ µ i0 ¶
it e e −2
e dt = − = = 2i.
0 i i i
Proposición 59 si γ : [a, b] → C es continua a trozos, entonces
¯Z b ¯ Z b
¯ ¯
¯ γ (t) dt ¯≤ |γ (t)| dt.
¯ ¯
a a
Rb
Demostración. escribimos el número complejo a γ (t) dt en coordenadas polares:
Z b
γ (t) dt = r0 eiθ0 ,
a
¯R ¯ Rb
¯ b ¯
donde r0 = ¯ a γ (t) dt¯ , así que tenemos que demostrar que r0 ≤ a |γ (t)| dt. Pero
Z b Z b
−iθ0
r0 = e γ (t) dt = e−iθ0 γ (t) dt;
a a
listo.
que es la integral de línea de f sobre γ (tiene muchos nombres: integral de camino de f sobre γ,
integral de f a lo largo de C, integral de f sobre C, etc.).
Integrales en C 65
Ejemplo 61 : Si γ (t) = eit , t ∈ [0, 2π]R, entonces C es el círculo unitario centrado en 0 recorrido
en sentido antihorario y para calcular γ 1z dz hacemos
Z Z 2π
1 1 it
dz = ie dt = 2πi.
γ z 0 eit
Una notación que se usa mucho en matemática aplicada, y que es la que seguiremos nosotros,
es la siguiente: si γ : [a, b] → C ⊆ C es un camino suave a trozos, y f (z) es continua en C, se
pone Z Z
f (z) dz = f (z) dz,
γ C
es decir, se piensa la integral sobre la imagen y no sobre la curva. Esto trae el problema de que
la misma curva C puede tener mas de una parametrización, y en tal caso la notación
Z
f (z) dz
C
podría significar muchos valores distintos (de hecho, la dirección en que recorremos la curva
es fundamental). Como para nosotros una curva C es la imagen de un camino γ, cada ves que
trabajemos con una curva se entenderá que tenemos una parametrización dada (que nos indicará,
por ejemplo, los puntos inicial y final de C, y el sentido en el que se recorre. Las integrales de
línea son, en cierta medida, independientes de la parametrización que usemos: si γ : [a, b] → C
es un camino suave por tramos que parametriza C y τ : [c, d] → [a, b] es biyección creciente con
derivada continua, entonces la función β (t) = γ (τ (t)) parametriza C en [c, d], y se puede ver
fácilmente que Z Z
f (z) dz = f (z) dz,
γ β
es decir, este tipo de cambio de parametrización no afecta el valor de la integral. Por lo expuesto
al comienzo de este capítulo, no profundizaremos mas sobre esta cuestión.
R
Ejemplo 62 Si C es el segmento de recta que va desde z0 hasta z1 y queremos calcular C dz,
entonces parametrizamos C por medio de γ (t) = z0 + t (z1 − z0 ) , t ∈ [0, 1] , y
Z Z 1
dz = (z1 − z0 ) dt = (z1 − z0 ) .
C 0
Proposición 63 Si f (z) , g (z) son funciones continuas y C, C1 y C2 son curvas suaves por
tramos, entonces
R R R
1. C (z0 f (z) + g (z)) dz = z0 C f (z) dz + C g (z) dz.
R R
2. Si −C es la curva C recorrida en sentido inverso, entonces −C f (z) dz = − C f (z) dz.
66 Integrales en C
3. Si C = C1 ⊕ C2 , es Rdecir si la curva
R C consiste Ren recorrer primero la curva C1 y luego la
curva C2 , entonces C f (z) dz = C1 f (z) dz + C2 f (z) dz.
¯R ¯
4. Si |f (z)| ≤ M ∀ z ∈ C, entonces ¯ C f (z) dz ¯ ≤ M (C) , donde (C) = largo de la curva
C.(1)
Demostración. las tres primeras son inmediatas de las definiciones y propiedades anteriores
y quedan como ejercicio. Para la cuarta, tomamos una parametrización γ : [a, b] → C de C,
entonces
¯Z ¯ ¯Z b ¯
¯ ¯ ¯ ¯
¯ f (z) dz ¯ = ¯ f (γ (t)) γ 0
(t)dt ¯,
¯ ¯ ¯ ¯
C a
teniendo en cuenta que esta es una integral del tipo de la proposición anterior, resulta
¯Z ¯ Z b Z b
¯ ¯ ¯ ¯ ¯ 0 ¯
¯ f (z) dz ¯ ≤ ¯f (γ (t)) γ 0 (t)¯ dt ≤ M ¯γ (t)¯ dt = M (C) .
¯ ¯
C a a
Definition 64 Si f es una función de variable compleja, entonces diremos que F (z) es una
primitiva de f si ocurre que F es derivable y F 0 (z) = f (z) .
Teorema 65 Si f (z) es una función continua en un abierto D y tiene una primitiva F (z)
en D (o sea si F 0 (z) = f (z) ∀ z ∈ D), entonces para todo camino suave γ : [a, b] → D se tiene
que
Z
f (z) dz = F (γ (b)) − F (γ (a)) ,
γ
d
(F ◦ γ) (t) = F 0 (γ (t)) γ 0 (t) = f (γ (t)) γ 0 (t),
dt
y entonces
Z Z b
f (z) dz = f (γ (t)) γ 0 (t)dt = F (γ (b)) − F (γ (a)) .
γ a
1
Ub
Si C está parametrizada por el camino suave por trozos γ : [a, b] → C, entonces (C) = a
|γ 0 (t)| dt
Integrales en C 67
En esta sección veremos un montón de resultados, que en el fondo son todo equivalentes.
Todas las curvas que aparecen se suponen suaves por trozos, salvo especificación contraria.
y entonces
Z Z b Z b
0
¡ ¢
f (z) dz = f (γ (t)) γ (t)dt = [u (γ (t)) + iv (γ (t))] x0 (t) + iy0 (t) dt
C a a
Z b£ ¤
= u (x (t) , y (t)) x0 (t) − v (x (t) , y (t)) y0 (t) +
a
Z b£ ¤
+i u (x (t) , y (t)) y 0 (t) + v (x (t) , y (t)) x0 (t) dt
a
Z Z
= udx − vdy + i udy + vdx,
C C
donde la últma igualdad viene de la definición de Análisis II. Sea R la región interior a la curva
C, entonces usando Green y C-R tenemos que
Z Z ZZ
udx − vdy = udx + (−v) dy = (−vx − uy ) dxdy = 0,
C C R
y Z Z ZZ
udy + vdx = vdx + udy = (ux − vy ) dxdy = 0,
C C R
R
y entonces C f (z) dz = 0.
2
Teorema de Green: si P (x, y) y Q (x, y) tienen derivadas
U parciales continuas
UU en un abierto D, y R es una
región simplemente conexa tal que R ∪ ∂R ⊆ D, entonces ∂R P dx + Qdy = R (Qx − Py ) dxdy, donde ∂R se
recorre en sentido antihorario.
68 Integrales en C
C C1
C2
D C3
C1
z1
z0 C2
D
Integrales en C 69
Rz
Nota(ción) 70 en las condiciones del corolario anterior, se suele denotar z01 f (z) dz a la
R z1 por trozos que va desde z0 hasta z1 . Notar que fuera
integral de f sobre cualquier camino suave
de este contexto específico, la expresión z0 f (z) dz no tiene ningún sentido en variable compleja.
Corolario 71 (otro) si R es una región cuya frontera ∂R consta de dos curvas cerradas simples
(∂R)1 y (∂R)2 , la segunda en el interior de la primera y recorridas en sentido inverso, y f (z)
es una función analítica en un abierto D que contiene a R ∪ ∂R, entonces
Z Z
f (z) dz = − f (z) dz.
(∂R)1 (∂R)2
Como consecuencia, Z
f (z) dz = 0.
∂R
D
T1
R
T3
T2
T4
S3
S4
S2
S1
resulta que Z Z Z Z
0= f (z) dz + f (z) dz + f (z) dz + f (z) dz,
T1 T3 S1 S3
o sea Z
0= f (z) dz.
∂R
70 Integrales en C
C1 C
C2
Cn
C3
Demostración.
C2 C2 C2
C1 C1 C1
para curvas que se cortan una cantidad finita de veces, la región en cuestión es la que determinan
las dos curvas, y es el caso interesante. Si las curvas no se cortan entonces este resultado es como
“otro corolario” si una esta en el interior de la otra, o las integrales son cero si no se cortan, por
el teorema de Cauchy. La demostración del caso interesante es igual que el corolario anterior,
usando la nota siguiente al teorema de Cauchy.
eit + z0 , con t ∈ [0, 2π] (o sea γ parametriza un círculo de radio 1 centrado en z0 ), entonces
usando el principio de deformación de la trayectoria, tenemos que
Z Z def. Z 2π Z 2π
↓ ¡ it ¢m ¡ ¢m+1
(z − z0 )m dz = (z − z0 )m dz = e + z0 − z0 ieit dt = i eit dt =
C γ 0 0
⎧
Z 2π ⎨ 2πi si m = −1
= ieit(m+1) dt = ¯2π .
1 ¯
0 ⎩ m+1 eit(m+1) ¯ = 0 si m 6= −1
0
z0
3.3. Primitivas
Ya definimos lo que es una primitiva de una función compleja, ahora veremos una forma de
encontrar primitivas de funciones dadas.
Teorema 74 (de existencia de primitivas) Sea f (z) una función analítica en un abierto
D simplemente conexo y z0 un punto de D. Entonces la función
Z z
F (z) = f (w) dw
z0
Demostración. antes que todo, notar que F esta bien definida pues según uno de nuestros
corolarios, en estas condiciones la integral (que define F ) no depende del camino. Tomamos un
z ∈ D fijo, quiero ver que F 0 (z) = f (z), o sea que
F (z + ∆z) − F (z)
lı́m = f (z) ,
∆z→0 ∆z
F (z+∆z)−F (z)
y para poder ver que este límite vale cero vamos a escribir ∆z y f (z) de otra manera.
72 Integrales en C
D
z + ∆z
z0
donde
M (∆z) = máx {|f (z) − f (w)| con w en el segmento que va de z a z + ∆z} .
Ahora, esta claro que M (∆z) −→ 0 pues f es continua (por ser analítica) (si ∆z → 0 y w está
∆z→0
en el segmento que va de z a z + ∆z entonces necesariamente f (w) → f (z)), es decir que
¯ ¯
¯ F (z + ∆z) − F (z) ¯
¯
lı́m ¯ − f (z)¯¯ = 0,
∆z→0 ∆z
listo.
Como corolario de este teorema podemos mejorar la versión que tenemos del teorema para
encontrar armónicas conjugadas:
Integrales en C 73
Demostración. llamemos g (z) = ux (z) − iuy (z) , entonces g está definida en D y es analítica
en D, pues si ponemos g = U + iV queda U = ux , V = −uy , y entonces U y V tienen derivadas
parciales continuas (pues u es armónica) y
Como G es una función analítica (es derivable y su derivada es g) entonces G (z) − u (z0 ) es
analítica en D, y su parte imaginaria es v (z).
R 1
y como C (z−z0 ) dz = 2πi (lo vimos en un ejemplo), el teorema quedará demostrado si probamos
que Z
f (z) − f (z0 )
dz = 0.
C (z − z0 )
Tomemos r0 lo suficientemente pequeño como para que el entorno {z : |z − z0 | < r0 } este incluido
en el interior de C (existe pues Jordan dice que el interior de C es abierto), entonces si Cr es un
círculo de radio r centrado en z0 con r < r0 , un corolario del teorema de Cauchy nos dice que
Z Z
f (z) − f (z0 ) f (z) − f (z0 )
dz = dz, (3.1)
C (z − z0 ) Cr (z − z0 )
r0
z0
C
Llamemos
M (r) = máx |f (z) − fz0 |
z∈Cr
(o sea M (r) es el máximo valor que toma la función |f (z) − fz0 | cuando z se mueve por Cr ),
entonces ¯ ¯
¯ f (z) − f (z0 ) ¯ M (r)
¯ ¯
¯ (z − z0 ) ¯ ≤ r ∀ z ∈ Cr .
Combinado esto con (15), y usando las propiedades de acotación y que (Cr ) = 2πr, queda
¯Z ¯ ¯Z ¯
¯ f (z) − f (z0 ) ¯ ¯ f (z) − f (z0 ) ¯¯ M (r)
¯ ¯ ¯
dz ¯ = ¯ dz ¯ ≤ 2πr = 2πM (r) ,
¯ (z − z0 ) (z − z0 ) r | {z }
| C {z } Cr
depende de r
número fijo
es decir, el número que queremos probar es cero, es mas chico que M (r) cualquiera sea r < r0 .
Por último, notar que haciendo r → 0 puedo hacer M (r) tan próximo a 0 como quiera, pues f
es analítica en (un entorno de) z0 y por lo tanto continua en z0 .
Este teorema es muy importante porque dice que si uno tiene una función f : D → C
derivable (con D abierto simplemente conexo), entonces la puedo derivar tantas veces como
quiera, lo cual es bastante distinto a lo que pasaba en R.
Idea de la demostración. nada nuevo, con la fórmula integral de Cauchy y un poco de álgebra
se llega a
µ Z Z ¶
f (z0 + ∆z) − f (z0 ) i 1 f (z) 1 f (z)
= dz − dz ,
∆z ∆z 2πi C (z − z0 − ∆z) 2πi C (z − z0 )
y luego con argumentos algebraicos y Rdel tipo usados en la demostración de la fórmula integral
1 f (z)
de Cauchy, se ve que eso tiende a 2πi C (z−z0 )2 dz (lo cual da el caso n = 1); el caso general se
sigue por inducción en n.
Demostración. sabemos que hay un número positivo M tal que |f (z)| ≤ M ∀ z ∈ C. Tomemos
z0 ∈ C, entonces como {z : |z − z0 | ≤ r} ⊆ C ∀ r > 0, el corolario anterior dice que
¯ 0 ¯
¯f (z0 )¯ ≤ M ∀ r > 0,
r
y por lo tanto f 0 (z0 ) = 0, como esto vale ∀ z0 ∈ C, tenemos que f es constante.
Para terminar, comentamos que también es cierta la recíproca de Cauchy, mas explícita-
mente:
Teorema 80 (de Morera) si f (z) es una función compleja continua en un abierto conexo
Dy Z
f (z) dz = 0
T
para todo camino triangular T incluido en D, entonces f es analítica en D.
76 Integrales en C
R
Ejemplo 81 1. Queremos acotar C sin(z)z dz, donde C es el círculo {z : |z| = 2} . Como la
cota depende del largo de C y no de la dirección
¡ iz en−iz
que¢ C se recorre, no hace falta especificar
1
la orientación de C. Ahora, sin (z) = 2i e −e , entonces
1¡ y ¢
|sin (z)| ≤ e + e−y = cosh (y) .
2
Si z ∈ C entonces y ∈ [−2, 2] , tenemos que
por lo tanto ¯Z ¯
¯ sin (z) ¯ cosh (2)
¯ dz ¯¯ ≤ 2π2 = 2π cosh (2) .
¯ z 2
C
R iπ
2. Queremos calcular 0 ez dz. Notar que esa expresión tiene sentido pues ez es analítica
en todo el plano complejo, y por lo tanto la integral no depende del camino sino de los
extremos. Puesto que (ez )0 = ez , resulta
Z iπ
ez dz = eiπ − e0 = −2.
0
R
3. Para calcular C z 2z+2 dz, donde C es el círculo {z : |z| = 1} recorrido en sentido antiho-
rario, no hay que hacer ninguna cuenta: puesto que la función
z
f (z) =
z2 +2
es analítica en D = {z : |z| < 2} , que es un abierto simplemente conexo que contiene C,
Cauchy dice que tal integral vale 0.
R
4. Para calcular C cos(z)
z dz, donde C es el círculo {z : |z| = 1} recorrido en sentido antiho-
rario, se puede usar la fórmula integral de Cauchy: tomando f (z) = cos (z) y revisando el
teorema, concluimos que
Z Z
1 cos (z) cos (z)
cos (0) = dz, o sea dz = 2πi.
2πi C z C z
Integrales en C 77
Otra importante consecuencia de la fórmula integral de Cauchy es que nos permite ver que
una función analítica no puede tener máximo, en módulo, en ningún abierto. Para ver esto,
comenzamos con un lema:
y entonces
¯ Z ¯ Z 2π Z 2π
¯ 1 2π ¡ ¢ ¯ 1 ¯ ¡ ¢¯ 1
|f (z0 )| = ¯¯ it ¯
f z0 + ρe dt¯ ≤ ¯f z0 + ρeit ¯
dt ≤ |f (z0 )| dt = |f (z0 )| ,
2π0 2π 0 2π 0
donde hemos usado propiedades de las integrales de funciones complejas de variable real en la
primer desigualdad y que |f (z0 )| ≥ |f (z)| para todo z ∈ Cρ en la segunda. Esta última cadena
de desigualdades nos permite deducir que
Z 2π Z 2π
1 ¯ ¡ ¢¯
¯f z0 + ρeit ¯ dt = 1 |f (z0 )| dt,
2π 0 2π 0
y entonces Z
1 2π ¡ ¯ ¡ ¢¯¢
|f (z0 )| − ¯f z0 + ρeit ¯ dt = 0.
2π 0
Pero el integrando de esa integral es una función continua (de t) y positiva, por lo tanto debe
ser ¯ ¡ ¢¯
|f (z0 )| − ¯f z0 + ρeit ¯ = 0 ∀ t ∈ [0, 2π] ,
en particular, |f (w)| = |f (z0 )| . Como este razonamiento vale para cualquier w de B, concluimos
que
|f (w)| = |f (z0 )| ∀ w ∈ B,
78 Integrales en C
es decir que f tiene módulo constante en B, y por lo tanto debe ser constante en B según cierto
teorema que vimos.
D
B1
B2
z0
z1 B3 Bn
z2 zn
z3
z4
Notar que de esta forma el centro de la bola Bj pertenece también a la bola Bj−1 .
La demostración termina aplicando el lema anterior a cada bola: como |f (z0 )| ≥ |f (z)| ∀ z ∈
B0 el lema anterior nos dice que f es constante en dicha bola, en particular f (z1 ) = f (z0 ) . Pero
entonces |f (z1 )| ≥ |f (z)| ∀ z ∈ D, en particular |f (z1 )| ≥ |f (z)| ∀ z ∈ B1 , y de nuevo el
lema anterior nos dice que f debe ser constante en B1 , en particular f (z2 ) = f (z0 ) . Repitiendo
este razonamiento n-veces concluimos que f (zn ) = f (z0 ) , o sea f (w) = f (z0 ) . Como esto vale
para todo w de D, listo.
|f (z)| ≤ |f (z0 )| ∀ z ∈ R.
Para terminar, un teorema muy útil que se llama principio del máximo para funciones
armónicas, que es el que permite asegurar la unicidad de solución en los problemas de tipo
Dirichlet(3) :
Demostración. Supongamos primero que D es simplemente conexo, entonces existe una ar-
mónica conjugada de u, que llamamos v. Así, la función g (z) = u (x, y) + iv (x, y) en analítica
en D, y por lo tanto también lo es
f (z) = eg(z) .
Pero |f (z)| = eu(z) , por lo tanto si u (z0 ) es máximo en D tendremos que |f (z0 )| es máximo en
D, y por lo tanto f es constante en D, segun el teorema anterior. Entonces eu(z) es constante
en D, lo que nos dice que u (z) es constante en D.
Si D no es simplemente conexo, se sigue un razonamiento similar al utilizado para Módulo
Máximo (ejercicio).
Corolario 86 Si u (x, y) es una función real continua en un conjunto conexo, cerrado y acotado
R, y armónica en el interior R, entonces el máximo de u (x, y) se alcanza siempre en un punto
de la frontera de R y nunca en un punto del interior.
3
Con problema tipo Dirichlet nos referimos al siguiente: dado un abierto D de C, y una función real f definida
en ∂D, hay que encontrar una función armónica T en D, continua en D ∪ ∂D y con T (z) = f (z) ∀ z ∈ D.
80 Integrales en C
Capítulo 4
Sucesiones y series en C
Todo el trabajo de este capítulo esta destinada a mostrar que tiene sentido sumar infinitas
funciones. Dichas sumas infinitas de funciones se llamas series de funciones, y son fundamentales
tanto en la teoría de variable compleja como en la resolución de ecuaciones diferenciales, y para
muchas cosas mas.
Definición 87 Si a cada número natural n se le asigna un número complejo zn , decimos que es-
tos números z1 , z2 , z3 , ..., zn , ... forman una sucesión infinita que se denota {zn }∞ n=1 ó {zn }n∈N ó
{z1 , z2 , z3 , ...} . A los números z1 , z2 , z3 , ... se los llama términos de la sucesión.
Diremos que la sucesión {zn }n∈N converge a un número c ∈ C si para todo ε > 0 existe
N > 0 tal que |zn − c| < ε si n > N. Dicho en
lenguaje llano, la sucesión converge a c si para todo entorno de c hay un N (que depende del
81
82 Sucesiones y series en C
entorno que elija) tal que todos los zn con subíndice mayor que N están el entorno.
z1
z2 zn
z3 ε
c
z4 B
lı́m zn = c ó zn −→ c.
n→∞ n→∞
Notar que lı́mn→∞ zn = c si y solo si lı́mn→∞ |zn − c| = 0 (ejercicio), y por lo tanto para estu-
diar sucesiones complejas basta estudiar las reales. Además notar que si una sucesión converge
entonces el límite es único, es decir, no pueden existir dos valores distintos c1 y c2 tales que
zn −→ c1 y zn −→ c2 (ejercicio).
n→∞ n→∞
Proposición 89 Si {zn }n∈N y {wn }n∈N son sucesiones complejas tales que lı́mn→∞ zn = c y
lı́mn→∞ wn = d, entonces:
1. lı́mn→∞ (αzn + wn ) = αc + d.
2. lı́mn→∞ (zn wn ) = cd
zn
3. Si d 6= 0 entonces wn 6= 0 para n suficientemente grande, y lı́mn→∞ wn = dc .
5. lı́mn→∞ zn+1 = c, en general, para cualquier número natural k se tiene que lı́mn→∞ zn+k =
c.
Demostración.
1. Doy ε > 0; notar que el único caso interesante es α 6= 0. Por definición de límite se que
ε ε
∃ N1 tal que |zn − c| < si n > N1 , y ∃ N2 tal que |wn − c| < si n > N2 .
2α 2
Tomemos N = máx (N1 , N2 ) , entonces si n > N valen las dos desigualdades de arriba, y
ε
|(αzn + wn ) − (αc + d)| = |(αzn − αc) + (wn − d)| ≤ |(αzn − αc)|+|(wn − d)| < α 2α + 2ε =
ε.
2. Exactamente como (1), usando los trucos algebraicos que se usan siempre para ver que el
límite del producto es el producto de los límites y lo mismo del cociente, ver la carpeta de
Análisis I, ejercicio.
3. Simil al anterior.
Sucesiones y series en C 83
4. Usando que
|xn − a| = |Re (zn − c)| ≤ |(zn − c)| , y |yn − b| = |Im (zn − c)| ≤ |(zn − c)| ,
|(zn − c)| = |xn + iyn − a − ib| ≤ |xn − a| + |iyn − ib| = |xn − a| + |yn − b| ,
5. Ejercicio de notación.
© ª
Ejemplo 90 La sucesión 1 + i, 1 + 2i , 1 + 3i , 1 + 4i , 1 + 5i , ... , o sea la sucesión {zn }n∈N con
zn = 1 + ni , converge a 1 pues
¯ ¯
¯ i ¯ 1
|zn − 1| = ¯1 + − 1¯¯ =
¯ −→ 0.
n n n→∞
Re (zn ) −→ 1 y Im (zn ) −→ 0.
n→∞ n→∞
Nota 91 Comenzar desde n = 1 es por costumbre, se puede comenzar desde cualquier natural,
o incluso desde un entero negativo. En muchos casos usaremos sucesiones así: {z0 , z1 , z2 , ...} .
A continuación vamos a ver un teorema que marca la diferencia entre R y Q (el conjunto
de los números racionales). Para hacernos una idea podemos pensar en el siguiente problema:
considerar la sucesión de números racionales
Esta es una sucesión creciente (es decir, todo término es mas grande que su antecesor) y acotada
(es decir, todos los términos están en un intervalo, por ejemplo√en el [1, 2]), pero la sucesión no
converge a ningún número racional (está claro que converge a 2, y como el límite es único no
puede converger a un racional). Es decir, si no pensamos en los números reales tendríamos una
sucesión acotada y creciente que no converge. En R no puede pasar eso, de hecho, esa es la
diferencia entre R y Q.
Idea gráfica que lo hace creíble. primero notar que el enunciado dice que hay un intervalo
cerrado I0 tal que {xn }n∈N ⊆ I0 , y que xm ≤ xm+1 ∀ m ∈ N. Dividamos I0 en dos intervalos
cerrados, entonces uno de estos dos intervalos debe contener infinitos términos de la sucesión,
lo llamo I1 . Ahora repito el razonamiento anterior: divido I1 en dos intervalos cerrados iguales
y llamo I2 al que contenga infinitos términos de la sucesión. Repitiendo este razonamiento,
construyo una cadena infinita de intervalos cerrados I0 ⊃ I1 ⊃ I2 ⊃ I3 ⊃ I4 ⊃ I5 ⊃ .....
I2
I3
I1
pues dado ε > 0 existe xN tal que |xN − c| < ε (en realidad existen infinitos términos que
cumplen eso, tomo uno), y si n ≥ N se tiene
|xn − c| = c − xn ≤ c − xN = |xN − c| < ε.
Definición 93 una sucesión {zn }n∈N se dice sumable si la sucesión {sn }n∈N , (con sn = z1 +
z2 + z3 + ... + zn ), es convergente. En tal caso se denota
∞
X n
X
lı́m sn = zj = lı́m zj .
n→∞ n→∞
j=1 j=1
La definición
P anterior es para hechar un poco de luz a la terminología popular: una suma
infinita ∞ j=1 zj se llama en general serie infinita, destacando la conexión de la palabra serie con
la sucesión {zn }n∈N . La afirmación de que la sucesión
P∞ {zn }n∈N es sumable (o no) se sustituye
usualmente por la afirmación de que la serie P∞ j=1 zj converge (o no). Esa terminología es
confusa, porque en el mejor de los casos, j=1 zj es un número complejo (y entonces no
puede “converger”), o es nada si la sucesión {zn }n∈N no es sumable. De todos modos, como es
buena costumbre hablar el mismo lenguaje que habla la gente del lugar donde uno vive, vamos
a adoptar la terminología popular. Otro complemento de esta terminología es la divergencia:
cuando una serie no converge se dice que diverge.
P∞Otra cosa: la suma puede comenzar desde cualquier número, o sea tiene perfecto sentido
j=8 zj y significa lı́mn→∞ sn donde sn = z8 + z9 + z10 + ... + zn (obviamente debemos tomar
n ≥ 8 en este caso). Usualmente comenzaremos nuestras sumas con 0 ó 1, pero no hay ninguna
restricción al respecto.
1 − won+1
sn =
1 − wo
(esta operación es legitima pues pedimos wo 6= 1). Si |wo | < 1, entonces won −→ 0, por lo tanto
n→∞
1
lı́m sn = ,
n→∞ 1 − wo
y si |wo | > 1 entonces la sucesión {sn }n∈N no converge, por lo tanto tenemos que la sucesión
{zn }n∈N∪{0} es sumable si |wo | < 1 y no es sumable si . Dicho de otra forma, la serie
∞
X
won
n=0
1
converge a 1−wo si |wo | < 1 y no converge si |wo | > 1. Por ejemplo,
∞ µ ¶n
X 1 1
= 1 = 2,
n=0
2 1− 2
86 Sucesiones y series en C
y
∞
X
(3i)n
n=0
no converge.
1. P
si {zn }n∈N y {wn }n∈N son sumables
P∞ P∞ entonces {czn + wn }n∈N es una sucesión sumable y
∞
n=1 (cz n + wn ) = c z
n=1 n + n=1 wn .
2. si zn = xn + iyn , entonces
P {zn }n∈NP∞es sumable
P∞si y solo si {xn }n∈N y {yn }n∈N son
sumables, y en tal caso ∞ z
n=1 n = x
n=1 n + i n=1 yn .
sn = z1 + ... + zn y rn = w1 + ... + wn .
sn −→ s ⇐⇒ rn −→ 0,
n→∞ n→∞
y en tal caso
∞
X
rn = zj ,
j=n+1
pues
⎛ ⎞ ⎛ ⎞ ⎛ ⎞
N
X n
X XN n
X N
X ∞
X
s − sn = ⎝ lı́m zj ⎠ − zj = lı́m ⎝ zj − ⎠
zj = lı́m ⎝ ⎠
zj = zj ,
N→∞ N→∞ N→∞
j=1 j=1 j=1 j=1 j=n+1 j=n+1
donde todas las operaciones hechas son lícitas pues sabemos que la serie converge. A rn se lo
llama el resto de la serie o la cola de la serie, y la afirmación anterior dice que si la serie
converge a s entonces el resto debe tender a cero.
lı́m zn = 0,
n→∞
P∞
es decir, para que la serie n=1 zn converja es indispensable que los términos tiendan a cero.
Sucesiones y series en C 87
Demostración. si
sn = z1 + ... + zn
entonces
lı́m sn = c, y también lı́m sn+1 = c,
n→∞ n→∞
de donde se concluye que
Ejemplo 98 el lema anterior nos permite terminar nuestros conocimientos sobre series ge-
ométricas (no sabíamos que pasaba si |wo | = 1): la serie
∞
X
won
n=0
Demostración. simplemente notar que {sn }n∈N es una sucesión de números reales positivos, y
creciente. Si existe M tal que {sn }n∈N ⊆ [0, M ] , entonces la sucesión converge por completitud.
Si tal M no existe entonces las sumas parciales se hacen arbitrariamente grandes.
Corolario 100 (criterio de comparación) Si {an }n∈N y {bn }n∈N son sucesiones de números
reales positivos tal que an ≤ bn ∀ n ∈ N, entonces
P∞ P
1. Si la serie converge entonces la serie ∞
n=1 bn n=1 an converge.
P P∞
2. Si la serie ∞
n=1 an diverge entonces la serie n=1 bn diverge.
Demostración.
88 Sucesiones y series en C
P
1. Si sn = a1 + ... + an y c = ∞ n=1 bn entonces {sn }n∈N es una sucesión creciente de números
reales y {sn }n∈N ⊆ [0, c] , listo.
Existe otro criterio muy útil, que proviene de pensar a la suma de términos positivos como
sumas de Riemann de una función positiva:
Proposición 101 (Criterio de la integral) Sea ϕ (x) una función real positiva definida para
números reales x ≥ 0. Para n ∈ N pongamos
n
X Z n
sn = f (k) y tn = f (x) dx.
k=1 1
Entonces las sucesiones {sn }n∈N y {tn }n∈N son ambas convergentes o ambas divergentes.
Rn
Demostración. comparando 1 f (x) dx con las sumas de Riemann sugeridas en el dibujo,
obtenemos las desigualdades
n
X Z n n−1
X
f (k) ≤ f (x) dx ≤ f (k) ,
k=2 1 k=1
es decir, sn − f (1) ≤ tn ≤ sn−1 . Como las sucesiones {sn }n∈N y {tn }n∈N son ambas crecientes,
esta desigualdad muestra que ambas son acotadas o ambas son no acotadas, o sea listo.
Definición 102 Una sucesión {zn }n∈N se Pllama absolutamente sumable si la sucesión {|zn |}n∈N
∞
es
P∞ sumable. Dicho de otra forma, la serie n=1 zn se llama absolutamente P convergente si la serie
∞
n=1 |zn | es convergente (notar que nada se dice de la convergencia de n=1 zn propiamente
dicha).
n o
(−1)n+1
Ejemplo 103 según lo visto en Análisis I, la sucesión n es sumable pero no abso-
n∈N
lutamente sumable, o sea la serie
1 1 1
1− + − + ...
2 3 4
converge, pero la serie
1 1 1
1+ + + + ...
2 3 4
no converge.
Sucesiones y series en C 89
El ejemplo anterior es el de un caso muy indeseable, donde la primer serie converge por una
cuestión de cancelación: notar que el hecho de que la segunda serie no converja significa que
las sumas parciales se hacen arbitrariamente grandes (pues estamos intentando sumar muchos
números positivos), fenómeno que desaparece con los signos menos de la primer serie. Nosotros
vamos a trabajar con series absolutamente convergentes, cuyo comportamiento es mucho mas
benigno, según el siguiente:
y hacer N → ∞.
∞
X ∞
X
zn = wn
n=1 n=1
90 Sucesiones y series en C
P
(es decir que en este caso la suma infinita es conmutativa). Por otro lado, si ∞ n=1 rn es una
serie de términos reales que converge pero no converge absolutamente, entonces para todo a real
existe una reordenación de {rn }n∈N cuya serie converge a a (hay extensiones parciales de este
hecho a series complejas convergentes pero no absolutamente convegentes, pensar alguna).
Existen montones de criterios para decidir si una serie es convergente o no, nosotros nos
vamos a concentrar en los mas usados, que son básicamente tres: comparación, cociente y raíz.
Proposición 105 (Criterio de comparación) Si {zn }n∈N es una sucesión compleja, y {bn }n∈N
es una sucesión de números reales positivos tal que:
La |zn | ≤ bn ∀ n ∈ N, y
P
la serie ∞ n=1 bn converge.
P∞
Entonces la serie n=1 zn es absolutamente convergente.
Demostración. es una aplicación directa del criterio de comparación para series de términos
positivos.
Proposición 106 (Criterio del cociente) Supongamos que {zn }n∈N es una sucesión con zn 6=
0 ∀ n ≥ N (donde N es algún natural). Si existe q < 1 tal que
¯ ¯
¯ zn+1 ¯
¯ ¯
¯ zn ¯ ≤ q ∀ n ≥ N,
P
entonces la serie ∞
n=1 zn converge absolutamente. Si, en cambio,
¯ ¯
¯ zn+1 ¯
¯ ¯
¯ zn ¯ ≥ 1 ∀ n ≥ N,
|zN+m | ≤ q m |zN | .
Pero la serie
∞
X
q m |zN |
m=1
converge (pues es una serie geométrica de razón q por una constante), y entonces comparación
nos dice que la serie
X∞
|zN+m |
m=1
P
converge, y entonces ¯ ∞ n=1¯ |zn | converge pues es sumarle N términos a la anterior.
¯ zn+1 ¯
Por otro lado, si ¯ zn ¯ ≥ 1 ∀ n ≥ N , entonces los términos individuales no tienden a cero
pues |zn+1 | ≥ |zn | P
∀ n ≥ N y |zN | 6= 0 (o sea la sucesión crece en lugar de tender a cero), y
por lo tanto la serie ∞ n=1 zn no puede converger.
Demostración. Supongamos primero que < 1 y tomemos ε > 0 chico, de forma tal que
+ ε < 1 (por ejemplo, ε = 12 ( − 1) sirve). Por definición de límite, existe N > 0 tal que
¯¯ ¯ ¯
¯¯ zn+1 ¯ ¯
¯¯ ¯ − ¯ < ε ∀ n ≥ N,
¯¯ zn ¯ ¯
en particular, ¯ ¯
¯ zn+1 ¯
¯ ¯
¯ zn ¯ < ε + < 1 ∀ n ≥ N,
y entonces puedo aplicar el criterio del cociente. De manera análoga se razona para concluir que
la serie es divergente cuando > 1, ejercicio.
Proposición 108 (Criterio de la Raíz) Tomemos {zn }n∈N una sucesión. Si existen N y q <
1 tal que p
n
|zn | ≤ q ∀ n ≥ N,
P∞
entonces la serie n=1 zn converge absolutamente. Si, en cambio existe N tal que
p
n
|zn | ≤ q ≥ 1 ∀ n ≥ N,
p
n
Demostración. ejercicio, ver la demo anterior y notar que |zn | ≤ q ⇒ |zn | ≤ q n .
Demostración. ejercicio.
Ejemplo 110
1. La serie
X∞
1
np
n=1
2. La serie
∞
X n2n
n=1
n!
3. La serie
∞
X n+i
2n n
n=1
converge pues
s¯ ¯ s¯ ¯ s¯ ¯ n√ √
¯ n + i ¯ 1 n ¯n + i¯ 1 n ¯ n + in ¯
n ¯ ¯= ¯ ¯≤ ¯ ¯ = 2 ≤ 2 < 1,
¯ 2n n ¯ 2 ¯ n ¯ 2 ¯ n ¯ 2 2
4. La serie
∞ µ
X ¶
n−i
n=1
n+i
no converge pues ¯ ¯ ¯ ¯
¯n − i¯ ¯n + i¯
¯ ¯=¯ ¯
¯ n + i ¯ ¯ n + i ¯ = 1,
De la misma forma que pensamos en sucesiones de números complejos {zn }n∈N , donde
teníamos un número complejo para cada natural n, podemos pensar en una sucesión de funciones
{fn }n∈N , donde cada fn (z) es una función compleja definida en cierto dominio (o sea, tenemos
una función compleja para cada número natural n). Por ejemplo si llamamos
fn (z) = nz,
entonces {fn }n∈N es una sucesión de funciones complejas, cada una de las funciones de la sucesión
esta definida en todo C, y la n-ésima función de la sucesión es nz.
Supongamos que tenemos una sucesión de funciones {fn }n∈N , y tomemos un número z
fijo que esté en el dominio de todas las funciones fn , entonces {fn (z)}n∈N es una sucesión de
números complejos, así que tiene sentido plantear la serie
∞
X
f1 (z) + f2 (z) + f3 (z) + ... = fn (z) .
n=1
Para decidir si una serie de este tipo converge, se puede aplicar cualquiera de los criterios
vistos, pues se trata de una serie normal de números complejos. Pero estamos interesados en
ver el problema desde otro punto de vista: dada una sucesión de funciones
P {fn }n∈N , queremos
la serie numérica ∞
encontrar los números complejos z para los cuales P n=1 n (z) es convergente
f
∞
(si es que hay alguno). Suponiendo que la serie n=1 fn (z) converge para todo z de cierto
conjunto D, llamamos
N
X X∞
S (z) = lı́m fn (z) = fn (z) ,
N →∞
n=1 n=1
N
X ∞
X
S = lı́m fn = fn ,
N→∞
n=1 n=1
P
y se dice que la serie de funcionesP ∞
n=1 fn converge a la función S. La definición de convergencia
queda así: la serie de funciones ∞ n=1 fn converge a la función S en D si para todo z en D es
94 Sucesiones y series en C
cierto que,
¯ ¯
¯X n ¯
¯ ¯
dado ε > 0 existe N > 0 tal que ¯ fj (z) − S (z)¯¯ < ε si n ≥ N
¯
¯ j=1 ¯
Ejemplo 111 tomar fn (z) = z n , con n ∈ N (es decir, f1 (z) = z, f2 (z) = z 2 , f3 (z) = z 3 ,
etc.), y queremos ver para que valores de z podemos calcular
(notar que cada función fn está definida en todo C). Llamando Sn (z) = f1 (z) + f2 (z) + f3 (z) +
...fn (z) y haciendo la misma cuenta que para la serie geométrica, concluimos que para z 6= 1
vale
z − z n+1
Sn (z) = .
1−z
Entonces, para z con |z| < 1 tenemos que
∞
X z
fn (z) = lı́m Sn (z) = ,
n=1
n→∞ 1−z
yPpara z con |z| ≥ 1 la serie no converge pues los términos no tienden a cero. Es decir, la serie
∞
n=1 fn converge en la región D = {z : |z| < 1} .
DefiniciónP112 dada una sucesión de funciones {fn }n∈N , definimos la región de convergencia
de la serie ∞
n=1 fn como el conjunto
( ∞
)
X
z: fn (z) converge ,
n=1
P P
y se dice que ∞ n=1 fn converge enP un conjunto D si ∞ n=1 fn (z) converge para todoP∞ z ∈ D.
Análogamente, diremos que la serie ∞ f
n=1 Pn converge absolutamente en D si la serie n=1 |fn (z)|
converge para todo z ∈ D (o sea si la serie ∞ f
n=1 n (z) converge absolutamente para todo z ∈ D).
Sn −→ S en D ⇐⇒ Rn −→ 0 en D
n→∞ n→∞
y en tal caso
∞
X
Rn = fj en D.
j=n+1
P∞
Si n=1 fn converge en D ⊆ C entonces
lı́m fn (z) = 0 ∀ z ∈ D.
n→∞
P∞
Si
P∞ n=1 fn converge absolutamente en D ⊆ C entonces P∞ converge en D (es decir, si
n=1 |fn (z)| converge para todo z en D entonces n=1 fn (z) converge para todo z en
D).
P P∞
Si |hn (z)| ≤ |fnP(z)| ∀ z ∈ D y ∞ n=1 |fn | converge en D, entonces n=1 |hn | converge en
D (y entonces ∞ n=1 h n converge en D).
Si {fn }n∈N es una sucesión con fn (z) 6= 0 ∀ z ∈ D y ∀ n ≥ N (donde N es algún natural)
y para todo z ∈ D existe qz < 1 tal que
¯ ¯
¯ fn+1 (z) ¯
¯ ¯
¯ fn (z) ¯ ≤ qz ∀ n ≥ N,
P
entonces la serie ∞n=1 fn converge absolutamente en D. Si, en cambio,
¯ ¯
¯ fn+1 (z) ¯
¯ ¯
¯ fn (z) ¯ ≥ 1 ∀ z ∈ D y ∀ n ≥ N,
Definición 114 Tomemos una P sucesión de funciones {fn }n∈N definidas todas en un conjunto
D ⊂ C. Diremos que la serie ∞n=1 fn converge uniformemente a la función S (z) en D si
¯ ¯
¯X n ¯
¯ ¯
dado ε > 0 existe N > 0 tal que ¯ ¯ fj (z) − S (z)¯¯ < ε ∀ z ∈ D, si n ≥ N.
¯ j=1 ¯
Es decir, en el primer caso la cantidad mínima de términos que necesitamos sumar para hacer
el error mas chico que cierto valor ε dado depende de z, y en el segundo no. Saber que una serie
converge uniformemente en D es tener mas información que saber simplemente que converge en
D.
En términos del resto (definido
P∞ en la lista de propiedades de convergencia se series de fun-
ciones), tenemos que la serie n=1 fn converge uniformemente en D si
que no es menor que 0,02 (o sea para z1 , N = 6 no sirve). Para z1 necesitamos tomar N = 26.
La siguiente pregunta es:¿converge la serie uniformemente a S en D? Y la respuesta es NO,
pues la misma desigualdad que nos permitió encontrar N (para un z fijo) nos esta mostrando
que la cantidad de términos que tengo que sumar para hacer el resto chico depende de z. Dado
un ε > 0 no existe un N > 0 tal que
Teorema 116 (Test M de Weierstrass) Si {fn }n∈N es una sucesión de funciones definidas
en un conjunto D, y {Mn }n∈N es una sucesión de números reales positivos tales que
1. Para cada n ∈ N, vale que |fn (z)| ≤ Mn ∀ z ∈ D, y
P
2. la serie ∞n=1 Mn converge.
P
Entonces la serie ∞ n=1 fn converge absoluta y uniformemente en D.
P
Demostración. Para cada z ∈ D, la serie ∞
P n=1 |fn (z)| converge por comparación, es decir,
∞
n=1 fn converge absolutamente en D, y como convergencia absoluta implica convergencia,
tenemos que la serie converge en D. Pongamos
∞
X ∞
X
Rn (z) = fj (z) y rn = Mj .
j=n+1 j=n+1
Ambos restos existen pues ambas series convergen, (y la serie que define Rn converge absoluta-
mente en D) Puesto que
|fn+1 (z) + fn+2 (z) + ... + fn+m (z)| ≤ |fn+1 (z)| + |fn+2 (z)| + ... + |fn+m (z)|
≤ Mn+1 + Mn+2 + ... + Mn+m ≤ rn ,
tomando lı́mm→∞ concluimos que
|Rn (z)| ≤ rn ∀ z ∈ D.
Por último, usar que rn −→ 0 (y la versión de convergencia absoluta usando el resto, ejercicio).
n→∞
A continuación un teorema, que nos dice como afecta cuando multiplicamos una serie de
funciones por una función acotada:
Sucesiones y series en C 99
P
Teorema 117 Supongamos que la serie de funciones ∞ n=1Pfn converge uniformemente en D,
y que g (z) es una función acotada en D. Entonces la serie ∞ n=1 gfn converge uniformemente
en D.
P
Demostración. que la serie ∞ n=1 gfn converge en D es inmediato pues para cada z en D
tenemos que
X∞ ∞
X
(gfn ) (z) = g (z) fn (z) .
n=1 n=1
P∞
Llamemos Rn (z) = j=n+1 fj (z) , y tomemos ε > 0. Como g es acotada en D, se que existe M
tal que
|g (z)| ≤ M ∀ z ∈ D,
y como la serie converge uniformemente en D se que existe N > 0 tal que
ε
|Rn (z)| < si n ≥ N, ∀ z ∈ D.
M
Entonces
¯ ¯ ¯ ¯
¯ X ¯ ¯ X ¯
¯ ∞ ¯ ¯ ∞ ¯ ε
¯ (gf ) (z)¯ ¯
= |g (z)| ¯ fj (z)¯¯ = |g (z)| |Rn (z)| < M = ε si n ≥ N, ∀ z ∈ D,
¯ j ¯ M
¯j=n+1 ¯ ¯j=n+1 ¯
| {z S }
∞
resto de la serie n=1 (gfn )
o sea listo.
Hasta ahora hemos aprendido a definir funciones nuevas “sumando” una sucesión de fun-
ciones complejas, pero no hemos estudiado en que condiciones las propiedades de las funciones
de la sucesiónPpasan a la serie. Es decir: si {fn }n∈N es una sucesión
P∞ de funciones continuas en
∞
D y la serie n=1 fn converge en D, será cierto que la función n=1 fn (z) es continua en D?.
¿y si las fn son analíticas?. Ahora comenzamos a contestar esas preguntas con tres teoremas:
Teorema 118 Si {fn }n∈N es una sucesión de funciones continuas en un abierto D y la serie
P∞
n=1 fn converge uniformemente en D a S (z), entonces S es una función continua en D.
Demostración. doy un z0 fijo en D, quiero ver que puedo hacer |S (z) − S (z0 )| chico tomando
z suficientemente próximo a z0 , es decir, doy ε > 0 y quiero ver que hay un δ > 0 tal que
|S (z) − S (z0 )| < ε si |z − z0 | < δ.
Pn
Llamemos Sn (z) = j=1 fj (z) , entonces
Teorema 119 Si {fn }n∈N es una sucesión de funciones continuas en un abierto D y la serie
P∞
n=1 fn converge uniformemente en D a S (z) , y C es una curva suave en D, entonces
Z ∞ Z
X
S (z) dz = fn (z) dz.
C n=1 C
R
Demostración. Antes de comenzar la demostración, notar que el enunciado dice que C S (z) dz
existe (o sea es un número complejo), que la serie numérica
X∞ Z
fn (z) dz
n=1 C
R
converge, y que converge a C S (z) dz.
Primero notar que el teorema
R anterior dice que S (z) es continua en D, por lo cual no ten-
emos problemas para calcular C S (z) dz. Por definición de convergencia de una serie numérica,
queremos ver que dado ε > 0 existe N > 0 tal que
¯ ¯
¯Z X n Z ¯
¯ ¯
¯ S (z) dz − fj (z) dz ¯¯ < ε si n ≥ N.
¯
¯ C j=1 C ¯
P
Como la suma de las integrales es la integral de la suma, si ponemos Rn (z) = ∞ j=n+1 fj (z)
queda
¯ ¯ ¯ ⎛ ⎞ ¯
¯Z Xn Z ¯ ¯Z Z Xn ¯
¯ ¯ ¯ ¯
¯ S (z) dz − ¯ ¯
fj (z) dz ¯ = ¯ S (z) dz − ⎝ fj (z) dz ¯¯ =
⎠
¯
¯ C j=1 C ¯ ¯ C C j=1 ¯
¯ ⎛ ⎞ ¯
¯Z Xn ¯ ¯Z ¯
¯ ¯ ¯ ¯
= ¯ ¯ ⎝S (z) − ⎠ ¯ ¯
fj (z) dz ¯ = ¯ Rn (z) dz ¯¯ . (4.5)
¯ C j=1 ¯ C
y entonces, ¯Z ¯
¯ ¯
¯ Rn (z) dz ¯ ≤ ε = ε.
¯ ¯
C
Combinando esto con (20) concluimos que
¯ ¯
¯Z Xn Z ¯
¯ ¯
¯ S (z) dz − f (z) dz ¯ < ε,
¯ j ¯
¯ C j=1 C ¯
Corolario 120 Si a las hipótesis del teorema anterior le agregamos que cada fn sea analítica
en D, entonces S (z) es analítica en D.
Demostración. para demostrar este coro vamos a usar Morera. Supongamos primero que D es
simplemente conexo, entonces como cada fn es analítica en D, Cauchy dice que
Z
fn (z) dz = 0 ∀ n ∈ N
T
para todo camino triangular T. y entonces Morera nos dice que S (z) es analítica. Si D no es
simplemente conexo, dividirlo en regiones simplemente conexas (ejercicio).
Nota importante 121 Este corolario marca una diferencia importante entre la teoría de vari-
able compleja y la teoría de variable real: si se observa con cuidado todo lo hecho con sucesiones y
series complejas hasta antes del corolario, se ve que todo lo hecho puede ser traducido a variable
real, cambiando los z’s por x’s, los conjuntos de C por conjuntos de R, las funciones complejas
por funciones reales,etc. Todo se traduce y se obtienen resultados equivalentes (por ejemplo, si
uno tiene una sucesión de funciones reales continuas en un intervalo y su serie converge uni-
formemente en dicho intervalo, la serie es entonces una función continua en el intervalo). El
corolario anterior no tiene equivalente (es mas, no es cierto en variable real, salvo que uno tome
como función analítica real a funciones con derivadas de todos los ordenes y no como funciones
derivables), y en el fondo de todo esto está el hecho de que pedirle a las funciones fn que sean
analíticas es pedirles mucho: le estamos pidiendo que tengan derivadas de todos los ordenes. Hay
funciones de variable real que tiene derivada continua pero no tienen derivada segunda.
Teorema 122 Si {fn }n∈N es una sucesión de funciones analiticas en un abierto D y la serie
P∞
n=1 fn converge uniformemente en D a S (z) , entonces S (z) es analítica en D y
∞
X
0
S (z) = fn0 (z) ∀ z ∈ D.
n=1
102 Sucesiones y series en C
Demostración. tomo z0 en D, voy a calcular S 0 (z0 ), que se que existe por el coro anterior.
Tomo r > 0 tal que el círculo Cr = {z : |z − z0 | = r} este en D (que existe pues D es abierto),
y tomo un número positivo ε < r, y llamo Dε = D − {z : |z − z0 | ≤ ε} .
D
Cr
ε r
z0
Definamos
1
g (z) = ,
2πi (z − z0 )
entonces g es analítica y acotada en Dε (ejercicio), y entonces la serie
∞
X
(gfn ) (z)
n=1
pero S (z) y todas las fn (z) son analíticas en D, por lo tanto la fórmula integral de Cauchy se
puede aplicar, y la igualdad anterior queda
∞
X
0
S (z0 ) = fn0 (z0 ) ,
n=1
En esta sección vamos a estudiar un caso particular de series de funciones, que es cuando
la sucesión de funciones a sumar es particularmente sencilla, mas concretamente, sumaremos
sucesiones {fn }n∈N∪{0} donde fn (z) = cn (z − a)n (un monomio de grado n, creo que le dicen).
Sucesiones y series en C 103
donde a y c0 , c1 , ... son números complejos, se llama una serie de potencias centrada
P en a (o una
serie de potencias “en a”). Es decir, una serie de potencias en a es una serie ∞ n=0 fn , donde
n
fn (z) = cn (z − a) .
P
Ejemplo 124 la serie geométrica ∞ n
n=0 z es una serie de potencias centrada en 0, donde todos
los coeficientes cn valen 1. Notar que vimos que le región de convergencia de dicha serie era el
disco {z : |z| < 1} .
La región de convergencia de una serie de funciones puede tener muchas formas, pero la
región de convergencia de una serie de potencias es siempre un disco, según puede deducirse del
siguiente teorema:
converge para z = z0 entonces converge para todo z con |z − a| < |z0 − a| . Mas aún, converge
absoluta y uniformemente en cualquier disco de la forma {z : |z − a| ≤ r} con r < |z0 − a|.
converge, sabemos que lı́mn→∞ cn (z0 − a)n = 0, y entonces existe M tal que
(o sea como la sucesión tiene a cero seguro que está metida en alguna bola centrada en 0). Tomo
r < |z0 − a| y llamo Dr = {z : |z − a| ≤ r} , entonces para todo z en Dr vale que
¯ n ¯¯ ¯ n ¯¯
¯ n (z0 − a) ¯
¯ n (z − a) ¯
n ¯
|cn (z − a) | ≤ ¯cn (z − a) ¯
= cn (z0 − a)
(z0 − a)n ¯ ¯ (z0 − a)n ¯
¯ n ¯
¯ (z − a) ¯ rn
= |cn (z0 − a)n | ¯¯ ¯
n¯ ≤ M .
(z0 − a) |(z0 − a)n |
converge (pues es geométrica de razón |(z0r−a)| ), el test M de Weierstrass me dice que la serie
P∞ n
n=0 cn (z − a) converge absoluta y uniformemente en Dr , o sea listo.
P∞ n
El teorema anterior me dice que las series de potencias n=0 cn (z − a) convergen en
discos abiertos, pues cada ves que la serie converge en un punto z0 , converge en el disco
{z : |z − a| < |z0 − a|} . El mayor disco abierto donde una serie de potencias converge (cuya
existencia aceptamos) se llama el disco de convergencia de la serie, y el radio de tal disco se
llama
P∞ el radio den convergencia de la serie. Entonces si R es el radio de convergencia de la serie
n=0 cn (z − a) tenemos que:
la serie diverge en cualquier z0 con |z0 − a| > R, pues de converger para un tal z0 entonces
convergería en el disco {z : |z − a| < |z0 − a|}, y entonces el disco {z : |z − a| < R} no sería
el mayor disco donde la serie converge.
Nota 126 El radio de convergencia puede ser infinito (cuando la serie converge en todo el plano
complejo), y puede ser cero (cuando la serie converge solo en un punto).
Veremos ahora un par de métodos para P∞encontrar eln radio de convergencia a partir de los
coeficientes cn de una serie de potencias n=0 cn (z − a) .
P
Proposición 127 Considerar la serie de potencias ∞ n
n=0 cn (z − a) . Si el límite
¯ ¯
¯ cn+1 ¯
lı́m ¯ ¯
n→∞ ¯ cn ¯
Demostración. tomemos z fijo y distinto de a, entonces con nuestras hipótesis tenemos que
¯ ¯ ¯ ¯
¯c n+1 ¯ ¯ cn+1 ¯
¯ n+1 (z − a) ¯ ¯ ¯ |(z − a)| = L |(z − a)| ,
lı́m ¯ ¯ = lı́m ¯
n→∞ ¯ cn (z − a)
n
¯ n→∞ cn ¯
por lo cual el corolario del criterio del cociente nos dice que la serie va a converger si L |(z − a)| <
1, es decir si |(z − a)| < 1/L, y va a diverger si L |(z − a)| > 1, o sea si |(z − a)| > 1/L, es decir
que el mayor disco abierto donde la serie converge es
{z : |z − a| < 1/L} ,
P
Proposición 128 Considerar la serie de potencias ∞ n
n=0 cn (z − a) . Si el límite
p
lı́m n |cn |
n→∞
Demostración. tomemos z fijo y distinto de a, entonces con nuestras hipótesis tenemos que
q p
lı́m n
|cn (z − a)n | = lı́m |(z − a)| n |cn | = |(z − a)| L,
n→∞ n→∞
por lo cual el corolario del criterio de la raíz nos dice que la serie va a converger si L |(z − a)| < 1,
es decir si |(z − a)| < 1/L, y va a diverger si L |(z − a)| > 1, o sea si |(z − a)| > 1/L, es decir
que el mayor disco abierto donde la serie converge es
{z : |z − a| < 1/L} ,
y puedo encontrar una primitiva de S (z) en D integrando (como en el teorema de las primitivas)
término a término pues tenemos convergencia uniforme e independencia de camino, es decir, una
primitiva de S (z) en D es
Z z Z z ÃX∞
! ∞ µZ z
X ¶ X ∞
n n cn
S (z) dz = cn (w − a) dw = cn (w − a) dw = (z − a)n+1
a a n=0 n=0 a n=0
n+1
X∞
cn
(z − a)n+1 . (4.7)
n=0
n + 1
Esto implica que el radio de convergencia de la serie (21) debe ser exactamente R, pues si
fuera mayor que R, integrando concluiríamos que la serie
∞
X
cn (z − a)n
n=0
tiene radio de convergencia mayor que R. Un razonamiento análogo se aplica para concluir que
la serie (22) debe tener radio de convergencia R, o sea tenemos el siguiente teorema:
P∞
Teorema 129 Si la serie de potencias n=0 cn (z − a)n tiene radio de convergencia R, en-
tonces la función
∞
X
S (z) = cn (z − a)n
n=0
que define en el disco abierto D = {z : |z − a| < R} es analítica en D, y las derivadas (resp. inte-
grales) de S se obtienen derivando (resp. integrando) término a término, y las series resultantes
tienen el mismo radio de convergencia R.
Para terminar, un teoremita que caracterizaP∞ a las series dePpotencias en términos de sus
n
coeficientes: si tengo dos series de potencias n=0 cn (z − a) y ∞ n
n=0 dn (z − a) que convergen
ambas en cierto disco D = {z : |z − a| < r} (no estoy pidiendo que tengan el mismo radio de
convergencia), y se que cn = dn para todo n, entonces está claro que las dos series son iguales.
La pregunta obvia es si la recíproca es cierta: supongamos que
∞
X ∞
X
cn (z − a)n = dn (z − a)n ∀ z ∈ D,
n=0 n=0
¿será cierto que cn = dn ∀ n?, ¿o se podrán elegir los coeficientes cn y dn distintos pero de forma
tal que cuando uno hace la suma infinita de igual? La respuesta es:
P∞ P∞
Teorema 130 Si dos series de potencias n=0 cn (z − a)n y n=0 dn (z − a)n convergen am-
bas en D = {z : |z − a| < r} y
∞
X ∞
X
n
cn (z − a) = dn (z − a)n ∀ z ∈ D,
n=0 n=0
entonces cn = dn ∀ n.
Sucesiones y series en C 107
P P∞
Demostración. Llamemos f (z) = ∞ n
n=0 cn (z − a) y g (z) =
n
n=0 dn (z − a) , ambas fun-
ciones analíticas en D. Puesto que f (a) = g (a) , tenemos que c0 = d0 . Derivando tenemos
que
∞
X X∞
n−1
0
f (z) = cn (z − a) 0
y g (z) = dn (z − a)n−1 ,
n=1 n=1
p (z) = c0 + c1 z + ... + cn z n ,
109
110 Desarrollos en series, residuos
C D
w
z
R
a
y como la serie ¯µ
∞
X ¶ ¯
M ¯¯ z − a n ¯¯
2πR ¯ R ¯
n=0
converge, el test M de Weierstrass nos dice que la serie (23) converge uniformemente en C, y por
lo tanto si integramos sobre C respecto de w, la integral se hace término a término, quedando
Z X∞ Z X∞ µ Z ¶
f (w) f (w) n 1 f (w) n
dw = n+1 (z − a) dw = n+1 dw (z − a) .
C 2πi (w − z) n=0 C 2πi (w − a) n=0
2πi C (w − a)
Desarrollos en series, residuos 111
o sea listo. La convergencia uniforme y absoluta se sigue del teorema de convergencia de series
de potencias, y la unicidad del teorema de unicidad de coeficientes de series de potencias.
Nota 132 el teorema anterior nos dice que toda función analítica en una bola de centro a
puede expresarse como una serie de potencias centrada en a. Esta serie se llama el desarrollo
de Taylor de f en a, o desarrollo de f en serie de potencias centrada en a. Cuando a = 0 se
suele llamar desarrollo de McLaurin.
Ejemplo 133
1. Tomemos f (z) = ez , como f es analítica en todo C, el teorema anterior nos dice que la
serie de Taylor de f centrada en cualquier punto va a converger en todo C. Como
tenemos que
f (n) (0) = 1 ∀ n,
y entonces queda
∞
X
z zn
e = ∀ z ∈ C.
n=0
n!
De manera análoga al punto anterior, se obtiene
∞
X z 2n+1
sin (z) = (−1)n ∀ z ∈ C,
n=0
(2n + 1)!
y derivando,
∞
X z 2n
cos (z) = (−1)n ∀ z ∈ C.
n=0
2n!
(ejercicio, dar los detalles).
1
2. Si f (z) = 1+z 2 , y queremos encontrar la serie de f centrada en a = 0, primero notamos
que f deja de ser analítica en ±i, por lo tanto dicha serie va a tener radio de convergencia
1. Pero si |z| < 1, entonces usando la serie geométrica concluimos que
X¡ ∞ ∞
1 1 ¢n X
2
= 2
= −z 2 = (−1)n z 2n
1+z 1 − (−z ) n=0 n=0
112 Desarrollos en series, residuos
¯ ¯
(pues |z| < 1 ⇐⇒ ¯z 2 ¯ < 1), es decir que para todo z con |z| < 1 vale
∞
X
f (z) = (−1)n z 2n ,
n=0
entonces por unicidad esa debe ser la serie de Taylor de f centrada en 0. Además como el
coeficiente de la potencia n-ésima de la serie de Taylor es
f (n) (0)
cn = ,
n!
el desarrollo anterior nos permite concluir que f (n) (0) = 0 para todo n impar (ejercicio).
Ahora que tenemos sabemos el teorema de Taylor, podemos demostrar la regla de L’Hospital
sin mucho esfuerzo:
Teorema 134 (Regla de L’Hopital) Si f, g son funciones analíticas en (un entorno de)
z0 , f (z0 ) = g (z0 ) = 0, y g 0 (z0 ) 6= 0, entonces
f (z) f 0 (z)
lı́m = lı́m 0 .
z→z0 g (z) z→z0 g (z)
y entonces
P f (n) (z0 ) P∞ f (n) (z0 )
f (z) (z − z0 ) ∞
n=1 n! (z − z0 )n−1 n=1 n! (z − z0 )n−1
= P = P∞ g(n) (z0 ) .
g (z) g (n) (z0 )
(z − z0 ) ∞n=1 n! (z − z 0 )n−1
n=1 n! (z − z 0 )n−1
donde el último igual vale pues la función f 0 (z) /g 0 (z) es continua en z0 (ejercicio).
Desarrollos en series, residuos 113
En muchas ocasiones ocurre que en lugar de tener una sucesión de funciones {fn }n∈N ,
tenemos una sucesión de la forma {fn }n∈Z , es decir
..., f−3 (z) , f−2 (z) , f−1 (z) , f0 (z) , f1 (z) , f2 (z) , f3 (z) , ...
P
y queremos darle sentido a la expresión ∞ n=−∞ fn (es decir, queremos “sumar” todas esas fun-
ciones). Un solución seria plantear sumas parciales del tipo
N
X
TN (z) = fn (z)
n=−N
y llamar
∞
X
fn (z) = lı́m TN (z) ,
N →∞
n=−∞
a pesar de que los términos no convergen a cero. Además deberíamos hacer toda la teoría de
nuevo, y no queremos eso, así que©vamosª a hacer lo siguiente: transformar la sucesión {fn }n∈Z
en dos sucesiones, {fn }n∈N∪{0} y f(−n) n∈N , y sumar ambas.
P
Definición 135 diremos que la serie (doble) ∞ n=−∞ fn converge [absolutamente, uniformemente]
en D si las series
X∞ ∞
X
f(−n) (z) y fn (z)
n=1 n=0
El ejemplo típico de estas series dobles se da cuando fn (z) = an (z − a)n , y la región típica
de convergencia de estas series es un anillo, según veremos en la siguiente sección.
Teorema 136 (Laurent) Si f (z) es una función analítica en un abierto D que contiene el
anillo A = {z : r ≤ |z − a| ≤ R}, entonces para todo z en con r < |z − a| < R vale que
∞
X
f (z) = an (z − a)n ,
n=−∞
donde Z
1 f (w)
an = n+1 dw
2πi C (w − a)
con C cualquier curva cerrada simple en A que encierre a a recorrida en sentido antihorario,
y la serie converge absoluta y uniformemente a f en cualquier anillo centrado en a de radio
interior mayor que r y radio exterior menor que R. P
Además el desarrollo es único en el siguiente sentido: si f (z) = ∞ n
n=−∞ cn (z − a) para
todo z en un anillo que contiene A, entonces
Z
1 f (w)
cn = dw ∀ n ∈ Z.
2πi C (w − a)n+1
Demostración. tomemos z con r < |z − a| < R fijo, y llamemos Cr = {z : |z − a| = r} recorrido
en sentido antihorario, y símil CR . Dividiendo A (con una recta que pase por a pero no por z)
como muestra el dibujo, obtenemos dos curvas cerradas simples que llamamos T1 ⊕ S1 ⊕ T2 ⊕ S2
y T3 ⊕ S3 ⊕ T4 ⊕ S4 .
CR D T1
z
T2 a S4
Cr S3
a a S2 T4
S1
T3
Necesariamente una de estas dos curvas encierra z, supongamos que la primera, y en tal caso la
fórmula integral de Cauchy nos dice que
Z
1 f (w)
f (z) = dw
2πi T1 ⊕S1 ⊕T2 ⊕S2 (w − z)
(pues f (w) es analítica en una región simplemente conexa que contiene T1 ⊕ S1 ⊕ T2 ⊕ S2 ), y el
teorema de Cauchy dice que
Z
1 f (w)
0= dw
2πi T3 ⊕S3 ⊕T4 ⊕S4 (w − z)
f (w)
(pues la función g (w) = (w−z) es analítica en una región simplemente conexa que contiene
T3 ⊕ S3 ⊕T4 ⊕S4 ). Sumando estas dos igualdades y teniendo en cuenta que S1 = −S3 , S2 = −S4 ,
CR = T1 ⊕ T3 , y −Cr = T2 ⊕ T4 , resulta
Z Z
1 f (w) 1 f (w)
f (z) = dw − dw. (5.2)
2πi CR (w − z) 2πi Cr (w − z)
Desarrollos en series, residuos 115
Desde acá la demostración sigue como en el teorema de Taylor. La primera integral de (24) se
trata exactamente igual: si w ∈ CR entonces |w − a| = R, y como |z − a| < R tenemos
∞ µ ¶n
1 1 1 1 X z−a
= ³ ´= ,
w−z w − a 1 − z−a w−a w−a
w−a n=0
entonces
∞
X 1
f (w) f (w)
= (z − a)n
2πi (w − z) n=0 2πi (w − a)n+1
e integrando queda
Z Z
X∞
1 f (w) 1 f (w) n
dw = n+1 (z − a) dw =
2πi CR (w − z) CR n=0 2πi (w − a)
X∙ 1 Z
∞
f (w)
¸
n
= n+1 dw (z − a) ,
n=0
2πi CR (w − a)
donde el último paso es lícito porque la serie converge uniformemente en CR , ya que si tomamos
M tal que
|f (w)| ≤ M ∀ w ∈ CR
resulta ¯ ¯ µ ¶
¯ 1
¯ f (w) ¯
n¯ M |z − a| n
¯ 2πi (w − a)n+1 (z − a) ≤
¯ 2πR .
R
Por último, si C es una curva como pide el enunciado, el principio de deformación de la trayectoria
nos dice que
Z Z
f (w) f (w)
n+1 dw = n+1 dw n = 0, 1, 2, ...,
CR (w − a) C (w − a)
¯ ¯
¯ ¯
pues ¯ w−a
z−a ¯ < 1. Multiplicando por f (w) /2πi queda
X 1∞
−f (w) 1
= f (w) (w − a)n ,
2πi (w − z) n=0 2πi (z − a)n+1
116 Desarrollos en series, residuos
con convergencia uniforme en (un anillo que contiene a) A, entonces tomamos una curva C como
la del enunciado y un k ∈ Z fijo, entonces la serie converge uniformemente en C, y
Z Z " ∞ #
1 f (w) 1 1 X
dw = cn (w − a)n dw
2πi C (w − a)k+1 2πi C (w − a)k+1 n=−∞
Z X ∞
1
= cn (w − a)n (w − a)−k−1 dw
2πi C n=−∞
X∞ Z
1
= cn (w − a)n−k−1 dw,
n=−∞
2πi C
Desarrollos en series, residuos 117
es decir, la serie de arriba tiene un único término distinto de cero, y es cuando n = k, y queda
Z
1 f (w)
dw = ck ,
2πi C (w − a)k+1
es decir, listo.
Nota 137 El teorema anterior nos dice que toda función analítica en un anillo
A = {z : r < |z − a| < R}
puede expresarse como una serie de potencias (negativas y positivas) de (z − a) . Esta serie se
llama el desarrollo de Laurent de f en A. Revisando la demostración anterior, se deduce
que la mayor región de convergencia del desarrollo de Laurent de f en A es el mayor anillo
que contiene a A donde f es analítica. Además, esta mal reemplazar las integrales que dan los
coeficientes de la serie por f (n) (a) /n! pues esto no tiene sentido si n < 0, y puede no tenerlo
aunque n sea positivo, pues no sabemos que f sea derivable en a
Nota 138 (Otra) Los desarrollos de Laurent incluyen a los de Taylor, es decir, si f es analítica
en un abierto que contiene el disco {z : |z − a| ≤ R} entonces en particular f es analítica en un
abierto que contiene al anillo {z : r < |z − a| < R} (para cualquier r < R), y el desarrollo de
Laurent de f en dicho anillo, será necesariamente el desarrollo de Taylor de f en a. Esto se
deduce por la unicidad del desarrollo de Laurent (pues todo desarrollo de Taylor es un desarrollo
de Laurent), pero además notar que en estas hipótesis (f analítica en un entorno de a) se tiene
Z ½
1 f (w) 0 si n < 0
n+1 dw = (n)
2πi C (w − a) f (a) /n! si n ≥ 0
1
Ejemplo 139 1. Si tomamos f (z) = z(z+2) y queremos hallar su desarrollo de Laurent en
el anillo A = {z : 2 < |z|} , hacemos lo siguiente: como 2/ |z| < 1, tenemos
∞ µ ¶ ∞ µ ¶
1 1 1 1 1 1 X −2 n X n 1
f (z) = = = 2 = 2 = (−2) ,
z (z + 2) z z (1 + 2/z) z (1 − (−2/z)) z n=0 z n=0
z n+2
2. Tenemos
ez
f (z) =
z (z + i) (z − 1)
y queremos saber cuantos desarrollos de Laurent centrados en 1 tiene f. Primero notar
que f es analítica en todo el plano salvo en los puntos 0, 1, y −i, y si llamamos
n √ o n √ o
A1 = {z : 0 < |z − 1| < 1} , A2 = z : 1 < |z − 1| < 2 , A3 = z : 2 < |z − 1| ,
entonces cualquier anillo centrado en 1 donde f sea analítica estará contenido en alguno
de estos. Por lo tanto, f tiene tres desarrollos de Laurent distintos centrados en 1.
Ejemplo 140 1. Puesto que para todo número complejo w vale que
w2 w3 w4
ew = 1 + w + + + + .....,
2! 3! 4!
Desarrollos en series, residuos 119
sin (z) z2 z4 z6
=1− + − + .....
z 3! 5! 7!
(ejercicio), entonces la función f (z) = sin (z) /z tiene una singularidad evitable en 0, pues
0 es singularidad aislada de f y el desarrollo de Laurent válido en cualquier anillo de la
forma {z : 0 < |z| < ε} no tiene potencias negativas de z.
cos (z) 1 z z3 z5
= − + − + .....
z z 2! 4! 6!
(ejercicio), entonces la función f (z) = cos (z) /z tiene un polo de orden 1 en 0, pues 0 es
singularidad aislada de f y el desarrollo de Laurent válido en cualquier anillo de la forma
{z : 0 < |z| < ε} tiene una potencias negativas de z.
desarrollo de Laurent de f válido para todo z con 0 < |z − a| < r, entonces el miembro de la
derecha es una función analítica en toda la bola {z : |z − a| < r} (pues es una serie de potencias
que converge en dicha bola), y es igual a f en toda la bola menos (posiblemente) en a. Ahora,
el miembro de la derecha vale a0 cuando z = a, así que si definimos f (a) = a0 nos queda que f
es analítica en toda la bola. Esto se puede hacer en el ejemplo anterior, definiendo
½ sin(z)
z si z 6= 0
f (z) = .
1 si z = 0
5.5. Residuos
120 Desarrollos en series, residuos
P
Definición 142 Si a es una singularidad aislada de f (z) y ∞ n
n=−∞ an (z − a) es el desarrollo
de Laurent de f válido en {z : 0 < |z − a| < r} , entonces el número complejo a−1 se llama el
residuo de f en a y se denota Res (f, a) .
¡ 1/z ¢
Según
³ las series
´ de Laurent³ calculadas
´ en los ejemplos anteriores, tenemos que Res e , 0 =
1, Res sin(z)
z , 0 = 0, y Res
cos(z)
z , 0 = 1.
Una de las cosas que decía el teorema de Laurent, es que si f es analítica en una región que
contiene el anillo A = {z : 0 < |z − a| ≤ r} , y C es una curva cerrada simple en A que encierra
a recorrida en sentido antihorario, entonces para todo z con 0 < |z − a| < r vale que
X∞ Z
n 1 f (w)
f (z) = an (z − a) , con an = dw,
n=−∞
2πi C (w − a)n+1
en particular, Z
1
a−1 = f (w) dw,
2πi C
y por lo tanto puedo usar esto al revés: en lugar de usar la fórmula de los coeficientes para
encontrar la serie de Laurent de f (cosa que, de hecho, nunca se hace), voy a usar la serie de
Laurent (particularmente el coeficiente a−1 para calcular integrales), pues tenemos
Z
f (w) dw = 2πiRes (f, a) .
C
Este resultado sencillo (para curvas simples que encierran una singularidad de f ), se extiende
de la siguiente manera:
Teorema 143 (de los residuos) Si f (z) es una función analítica en un abierto D salvo en
singularidades aisladas z1 , z2 , ..., zp , y C es una curva cerrada simple en D que encierra a tales
singularidades recorrida en sentido antihorario, entonces
Z
f (z) dz = 2πi [Res (f, z1 ) + ... + Res (f, zp )]
C
Demostración. Como tenemos finitas singularidades (p en total) podemos centrar en c/u de
ellas círculos C1 , ..., Cp de diámetro lo suficientemente chico para que no se corten mutuamente,
que Cj encierre solo a la singularidad zj , (j = 1, ..., p), y que la curva C1 ⊕ ... ⊕ Cp esté en el
interior de C (ver dibujo).
zp
D z1
z2 z3
Desarrollos en series, residuos 121
pues f es analítica en un abierto que contiene la región interior a C y exterior a todas las curvas
C1 , ..., Cp . Entonces
Z Z Z
1 1 1
f (z) dz = f (z) dz + ... + f (z) dz,
2πi C 2πi −C1 2πi −Cp
o sea listo.
−3z+4
Ejemplo 144 Tomemos f (z) = z(z−1)(z−2) y C el círculo {z : |z| = 3/2} recorrido en sentido
antihorario. f tiene tres singularidades aisladas, 0, 1 y 2, pero solo 0 y 1 están en el interior de
C. Escribiendo f como fracciones simples queda
2 1 1
f (z) = − − ,
z z−1 z−2
y eso implica que
Res (f, 0) = 2 y Res (f, 1) = −1,
pues por ejemplo, µ ¶
2 −1 −1 2
f (z) = + + = + g (z) ,
z z−1 z−2 z
con g (z) analítica en (el entorno de 0) {z : |z| < 1} . Por lo tanto, para todo z ∈ {z : |z| < 1}
vale que
X ∞
g (z) = an z n ,
n=0
y ese debe ser entonces el desarrollo de Laurent de f en el anillo {z : 0 < |z| < 1} , de donde
se ve claramente que Res (f, 0) = 2. De manera análoga se ve que Res (f, 1) = −1, ejercicio, y
entonces el teorema de los residuos me dice que
Z
f (z) dz = 2πi [2 − 1] = 2πi.
C
122 Desarrollos en series, residuos
Nos hace falta un buen método para calcular residuos, y eso vamos a buscar ahora. Notar
que si f (z) tiene un polo de orden uno en a, entonces para todo z 6= a en un entorno de a vale
que
a−1
f (z) = + a0 + a1 (z − a) + a2 (z − a)2 + a3 (z − a)3 + ...,
(z − a)
y entonces
de donde resulta
Res (f, a) = lı́m (z − a) f (z)
z→a
y entonces
d h i
(z − a)2 f (z) = a−1 + 2a0 (z − a) + 3a1 (z − a)2 + 4a2 (z − a)34 + 5a3 (z − a)4 + ...,
dz
pues la convergencia uniforme de la serie permite derivar término a término. Tomado límite
queda
d h i
Res (f, a) = lı́m (z − a)2 f (z) .
z→a dz
Además, notar que
lı́m (z − a) f (z) = ∞.
z→a
Aplicando el mismo razonamiento al caso genérico de un polo de orden m, se obtiene el siguiente
teorema:
1 dm−1
Res (f, a) = lı́m m−1 [(z − a)m f (z)] ,
(m − 1)! z→a dz
y para todo n < m se tiene que
dn−1
lı́m [(z − a)n f (z)] = ∞.
z→a dz n−1
Desarrollos en series, residuos 123
1+z
Ejemplo 146 Tomemos f (z) = 1−cos(z) . Puesto que cos (0) = 1 y cos (z) 6= 1 para todo z 6= 0
en un entorno de 0, tenemos que f tiene una singularidad aislada en 0. Para tratar de encontrar
que tipo de singularidad es, procedemos de la siguiente manera: como
z2 z4 z6
cos (z) = 1 − + − + ...,
2 24 720
entonces
∙ ¸
z2 z4 z6 2 1 z2 z4
1 − cos (z) = − + − ... = z − + − ... = z 2 g (z) ,
2 24 720 2 24 720
| {z }
g(z)
donde g (z) es una función analítica en un entorno de 0 con g (0) = 1/2 (¿por que?). Entonces
1 1+z 1
f (z) = 2
= 2 h (z) ,
z g (z) z
con h (z) analítica en un entorno de 0 y h (0) 6= 0 (mas precisamente, h (0) = 2), de donde se
deduce que f tiene un polo de orden 2 en 0. Para calcular Res (f, 0) , derivamos
∙ ¸
d 2 1+z 2z (1 + z) + z 2 z 2 (1 + z) 2z + 3z 2 z2 + z3
z = − sin z = − sin z
dz 1 − cos (z) 1 − cos z (1 − cos z)2 1 − cos z (1 − cos z)2
Definición 147 Si f (z) es una función analítica en un entorno de a, entonces diremos que f
tiene un cero de multiplicidad m en a si su desarrollo de Taylor centrado en a es
∞
X
an (z − a)n
n=m
En principio, no esta claro que en cada punto donde una función analítica se anule tenemos
un cero de cierta multiplicidad. Para comenzar a avanzar en esa dirección, tenemos el siguiente
lema.
124 Desarrollos en series, residuos
Lema 148 Si f es analítica en un entorno de a, entonces las siguientes afirmaciones son equiv-
alentes:
3. Hay una función analítica g (z) definida en un entorno de a tal que g (a) 6= 0 y f (z) =
(z − a)m g (z) para todo z en dicho entorno.
para todo z en un entorno de a. Así, que la primer afirmación implica la segunda es inmediato de
la definición de cero de multiplicidad m. Para ver que la segunda afirmación implica la tercera,
notar que en tal caso queda
∞
à ∞ !
X f (n) (a) n m
X f (n) (a) n−m
f (z) = (z − a) = (z − a) (z − a) .
n=m
n! n=m
n!
Definamos
X∞
f (n) (a)
g (z) = (z − a)n−m ,
n=m
n!
entonces el radio de convergencia de la serie de potencias que define g es igual al de la serie de
(m)
f, por lo tanto g es analítica en un entorno de a, y g (a) = f m!(a) 6= 0.
Por último, para ver que la tercer afirmación implica la primera, desarrollamos g con Taylor
en un entorno de a:
∞
X
g (z) = bn (z − a)n ,
n=0
Corolario 149 Si f tiene un cero de multiplicidad m en a, entonces existe r > 0 tal que
f (z) 6= 0 para todo z con 0 < |z − a| < r.
Demostración. Según el lema anterior, f (z) = (z − a)m g (z) con g (a) 6= 0. Como g es analítica
en un entorno de a, entonces es continua en un entorno de a, y entonces es no nula en un entorno
de a. En dicho entorno, f es el producto de dos factores no nulos, y entonces es distinto de cero.
Desarrollos en series, residuos 125
El corolario anterior nos permite demostrar un resultado que también divide la teoría de
funciones de variable real de la teoría de funciones de variable compleja: los puntos donde una
función analítica se anula son aislados:
Si f (z) = 0 ∀ z ∈ B, no hay nada que probar. Si no, alguno de los coeficientes an debe ser
distinto de cero. Si an0 es el primer coeficiente distinto de cero, entonces f tiene un cero de
orden n0 en a, y entonces el corolario anterior nos dice que existe el r que busco.
Como postre, esta proposición nos permite demostrar un resultado que nos será muy útil
para estudiar transformada de Laplace compleja:
Demostración. Tomo w ∈ P fijo, voy a probar que f (w) = 0. Para eso, tomo a ∈ R, a > α,
tal que la bola B = {z : |z − a| < a − α} contenga a w (se puede, ejercicio). Como f (a) = 0, y
como no existe ningún r > 0 tal que f (z) 6= 0 para todo z con 0 < |z − a| < r, la proposición
anterior nos dice que f (z) = 0 para todo z ∈ B, en particular f (w) = 0.
α 0 a
A continuación veremos como calculando ciertas integrales podemos contar los ceros y los
polos de una función analítica.
126 Desarrollos en series, residuos
Si f tiene un cero de multiplicidad m en a, entonces sabemos que hay una función analítica
g (z) con g (a) 6= 0 tal que
f (z) = (z − a)m g (z) .
Derivando esa expresión obtenemos
y entonces
f 0 (z) m (z − a)m−1 g (z) + (z − a)m g 0 (z) m g 0 (z)
= = + .
f (z) (z − a)m g (z) (z − a) g (z)
Además, la función g 0 (z) /g (z) es analítica en un entorno de a (why?), por lo que la igualdad
de arriba nos dice que la función f 0 (z)/f (z) tiene un polo simple en a, y que
¡ ¢
Res f 0 /f, a = m.
Teorema 153 Si f es una función analítica en D salvo por polos p1 , ..., pk de orden n1 , ..., nk
respectivamente, todos los ceros de f en D son z1 , ..., zj de multiplicidad m1 , ..., mj respectiva-
mente, y C es una curva cerrada simple en D que contiene en su interior a p1 , ..., pk , z1 , ..., zj ,
entonces
Z
1 f 0 (z)
dz = (m1 + · · +mj )−(n1 + · · · + nk ) ,
2πi C f (z)
donde C se recorre en sentido antihorario.
Desarrollos en series, residuos 127
C
z3 zk
D z1 z2
pn
p2
p3
p1
En esta sección veremos de manera algo informal e intuitiva, como ciertas integrales de línea
“cuentan” las vueltas que dan alrededor de un punto.
Imaginemos que tenemos una curva C como muestra el siguiente dibujo, parametrizada por
γ : [a, b] → C:
γ (a)
γ (b)
γ (t3)
γ (t1)
γ (t2)
Pensemos γ (t) en coordenadas polares con el argumento variando continuamente (notar que
γ (t) 6= 0 ∀ t), es decir,
γ (t) = ρ (t) eiφ(t)
con φ (t) continua en [a, b] (es decir, no fijamos una rama del argumento, lo dejamos crecer y
decrecer continuamente a medida que t se mueve). Puede verse que φ (b) − φ (a) nos dará la
variación total del argumento (seguir el dibujo!). En la curva graficada, φ (t1 ) = φ (a) + 2π, y el
argumento sigue variando continuamente hasta φ (b) . Además φ (t2 ) + 2π = φ (t3 ) = φ (b) .
128 Desarrollos en series, residuos
Esto se puede usar para contar las vueltas que da cualquier curva cerrada alrededor de
cualquier punto z0 (no necesariamente cero). Si tengo una curva cualquiera C parametrizada
por γ (t) que no pase por z0 (para que tenga sentido contar vueltas alrededor de z0 ), basta con
aplicar lo hecho a β (t) = γ (t) − z0 (hacer un dibujo, β parametriza la curva C − z0 ), y en tal
caso el número de vueltas lo cuenta Z
1 dz
,
2πi β z
que es exactamente igual a Z
1 dz
2πi C z − z0
(ejercicio).
Teorema 154 Si f es una función analítica en D salvo por polos p1 , ..., pk de orden n1 , ..., nk
respectivamente, todos los ceros de f en D son z1 , ..., zj de multiplicidad m1 , ..., mj respectiva-
mente, y C es una curva cerrada simple en D que contiene en su interior a p1 , ..., pk , z1 , ..., zj ,
entonces el número de vueltas que da la curva f (C) alrededor de 0 es
El teorema anterior es particularmente útil cuando uno sabe que la función en cuestión no
tiene (por ejemplo) polos, pues nos da un procedimiento gráfico para encontrar los ceros de la
función en cierta región cuyo borde es una curva C: basta con graficar f (C) y contar!. Esto se
usa particularmente en un criterio conocido como “criterio de estabilidad de Nyquist”.
Ejemplo 156 (otro) en la gráfica siguiente se muestran cuatro curvas rectangulares y sus re-
spectivas imágenes por la función
6
f (z) = 1 + ,
(z + 1) (z + 2)
incluyendo la orientación (la flecha que indica la orientación además indica la concordancia
entre segmento de dominio y de imagen). Las gráficas fueron generadas por computadora. Notar √
= −2, y dos ceros de multiplicidad uno en − 32 ±i 223 .
que f tiene dos polos simples en©z = −1 y z ª
Además f es conforme en C− −1, −2, − 32 , lo cual permite apreciar la imagen de los vértices
de los rectángulos.
130 Desarrollos en series, residuos
Hay muchas variantes y situaciones en las que se usa el teorema anterior. A continuación
vamos a exponer dos, sin poner demasiado énfasis en los detalles formales, y teniendo bien
presente que se trata de un método gráfico.
iR
ΓR
0 R
−iR
Para saber cuantas hay, tengo que graficar la curva p (ΓR ) y contar cuantas vueltas da alrededor
del origen. El trabajo se reduce considerablemente si pensamos en R → ∞ : la imagen de la
Desarrollos en series, residuos 131
y como multiplicar por Rn no cambia el argumento, basta con saber la variación total del
argumento de
a0 a1 eiθ an−1 ei(n−1)θ
+ + · · · + + an einθ
R R2 R
cuando θ se mueve de − π2 hasta π
2. Al hacer R → ∞, los términos
se hacen arbitrariamente chicos, por lo cual, en el límite, la variación total es igual a la de an einθ ,
que claramente es
π ³ π´
n − −n = nπ.
2 2
Consecuentemente, basta con graficar p (z) con z moviéndose hacia abajo por el eje imaginario
(situación que llamaremos “desde i∞ hasta −i∞”), medir la variación total de argumento en la
imagen, y a eso sumarle nπ. Dividiendo esto por 2π obtenemos el número de vueltas alrededor
del origen.
El trabajo se simplifica mas aún cuando p (z) tiene coeficientes reales, pues en tal caso
p (z̄) = p (z), es decir, la gráfica es simétrica respecto el eje x.
El método explicado no funciona si p tiene ceros sobre el eje imaginario, situación que se
evidencia cuando la gráfica de p (it) , t ∈ R, pasa por el origen.
u = 1 − t2 , v = 4t − t3 .
3π 3π
− − = −3π.
2 2
132 Desarrollos en series, residuos
p(−i∞)
p(1)
p(0)
p(−1)
p(i∞)
p(−i∞)
p(−i2)
p(0)
p(i2)
p(i∞)
6
Ejemplo 158 Tomemos f (z) = 1+ (z+1)(z+2) (esta función la usamos en un ejemplo anterior).
La gráfica de f (z) con z variando desde i∞ hasta −i∞ revela que f tiene la misma cantidad
de ceros que de polos en el semiplano derecho. Como evidentemente f no tiene polos en dicho
semiplano, tampoco puede tener ceros.
6
Si g (z) = 1 + (z−1)(z+2) , entonces la gráfica de g (z) con z variando de i∞ hasta −i∞ da una
vuelta alrededor de cero en sentido antihorario. Eso revela que g tiene en el semiplano derecho
un polo mas que ceros. Como g tiene claramente un polo en dicho semiplano, se desprende que
g no tiene√ceros en el. Se puede calcular directamente y verificar que los ceros de g son están
en − 12 ± i 215 .
1
Capítulo 6
Series de Fourier
En esta sección vamos a trabajar con funciones de variable real, e imagen real o compleja,
o sea f (t) , con f : R → R ó f : R → C (en realidad vamos a estar pensando todo el tiempo
en funciones de imagen real, pero conviene tener bien claro que esta no es ninguna limitación)
Si tenemos una función así, que sea lo suficientemente derivable, se sabe de Análisis I que
podemos aproximar f localmente usando polinomios de Taylor, pero dicha aproximación tiene
muchas limitaciones: necesita que la función tenga derivadas (mientras mas derivadas tenga,
mas posibilidad de que la aproximación sea buena), y da una aproximación local, o sea buena
cerca de un punto prefijado. Vamos a ver acá otra forma de hacer esto.
Vamos a escribir como quedan los teoremas de convergencia de series de funciones de variable
compleja, con funciones de variable real (e imagen real o compleja).
135
136 Series de Fourier
P
donde las funciones estén definidas, ∞ n=1 fn (x) es una serie numérica y por lo tanto todos los
criterios, propiedades y definiciones vistas para series numéricas son aplicables (def. de conver-
gencia y convergencia absoluta, que convergencia absoluta implica convergencia, que una serie
converge si y solo si es de Cauchy, etc), pues todas estas propiedades dependen del conjunto
al que pertenecen los valores P{f n (x)}n∈N , que es C. Por otro lado, si queremos estudiar la
∞
función de variable real f = n=1 fn , la cosa cambia. Las propiedades vistas no son las mismas
pues no es lo mismo derivar una función de variable real que una de variable compleja, de la
misma forma que no es lo mismo pedirle a una función de variable real que sea derivable (que es
pedir poco) que pedirle a una función de variable compleja que sea derivable. Estas propiedades
dependen estrechamente del conjunto donde se elige la variable (C ó R), y por lo tanto deben
ser redefinidas y estudiadas
Para detectar convergencia uniforme tenemos el test M de Weierstrass para variable real:
Teorema 159 (test M de Weierstrass) Si {fn }n∈N es una sucesión de funciones definidas
en un intervalo [a, b], y {Mn }n∈N es una sucesión de números reales positivos tales que
En el siguiente teorema veremos lo que realmente nos importa, que es cuando la serie hereda
las propiedades de sus términos, y como derivar e integrar series:
Teorema 160 Si {fn }n∈N es una sucesión de funciones definidas en un intervalo [a, b] , en-
tonces:
P∞
1. Si cada función fn es continua en [a, b] y la serie n=1 fn converge uniformemente a f
en [a, b] , entonces f es continua, y
Z b ∞ Z
X b
f (t) dt = fn (t) dt.
a n=1 a
Demostración.
Series de Fourier 137
Aplicando eso, y que la serie que define a g converge en [a, b], nos queda que
Z t ∞ ∙Z
X t ¸ ∞
X ∞
X ∞
X
g (x) dx = fn0 (x) dx = [fn (t) − fn (a)] = fn (t)− fn (a) = f (t)−f (a) ,
a n=1 a n=1 n=1 n=1
Pero sabemos del punto anterior que g es continua, por lo que el teorema fundamental del
cálculo nos dice que ∙Z t ¸
d
g (x) dx = g (t) ,
dt a
que comparando con la igualdad anterior nos permite deducir que f es derivable y f 0 (t) =
g (t) , listo.
Necesitamos además una herramienta que nos permita derivar funciones definidas como
integrales de funciones de varias variables. Nosotros vamos a usar esta versión de la regla de
Leibnitz:
Teorema 161 (Regla de Leibnitz, (2da versión)) si φ (x1 , ..., xn , y) es una función de n+
∂φ
1 variables, φ : [a1 , b1 ] × [a2 , b2 ] × ... × [an , bn ] × [c, d] → R (ó C) es continua con ∂xk
continua,
y
Z d
g (x1 , ..., xn ) = φ (x1 , ..., xn , y) dy,
c
entonces g tiene derivada parcial respecto de xk , y
Z d
∂g ∂φ
(x1 , ..., xn ) = (x1 , ..., xn , y) dy.
∂xk c ∂xk
Idea de la demostración.
∂g g (x1 , ..., xk + h, ..., xn ) − g (x1 , ..., xn )
(x1 , ..., xn ) = lı́m =
∂xk h→0 h
Rd Rd
c φ (x1 , ..., xk + h, ..., xn , y) dy − c φ (x1 , ..., xn , y) dy
= lı́m
h→0 h
Rd
[φ (x1 , ..., xk + h, ..., xn , y) − φ (x1 , ..., xn , y)] dy
= lı́m c
h→0 h
Z d
[φ (x1 , ..., xk + h, ..., xn , y) − φ (x1 , ..., xn , y)]
= lı́m dy,
h→0 c h
138 Series de Fourier
lo único que me hace falta saber es que puedo meter el lı́m dentro de la integral, y por eso esto
es una “idea de la demo” en lugar de una demo. Pero se puede, y metiendo el límite dentro de
la integral queda
Z d Z d
0 [φ (x1 , ..., xk + h, ..., xn , y) − φ (x1 , ..., xn , y)] ∂φ
g (x) = lı́m dy = (x1 , ..., xn , y) dy,
c h→0 h c ∂xk
listo.
Si bien ya hemos usados funciones (de variable compleja) periódicas, haremos acá un reconto
de las propiedades que necesitamos de las funciones de variable real periódicas.
Por ejemplo, la función cos (t) es periódica de período 2kπ, k ∈ N, y su período fundamental
es 2π; por lo tanto si n ∈ N y p > 0, la función
µ ¶
nπt
f (t) = cos
p
a−2T
a− a−T 0 a b
Series de Fourier 139
Si sumamos funciones de período T obtenemos una nueva función que también tiene período
T (ojo, no estamos hablando del período fundamental, solo de algún período),
P∞ y también si
tenemos una sucesión de funciones {fn }n∈N todas de período T y la serie n=1 fn converge,
entonces converge a una función de período T. Así, la función
N µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt
SN (t) = + an cos + bn sin
2 n=1
p p
es decir que cada vez que integro sobre un intervalo de longitud T obtengo el mismo resultado.
Esto puede verse fácilmente de manera gráfica, “recortando” el área bajo f en [a, a + T ) y
reacomodandola para que quede como el área bajo f en [0.T )
0 T a a+T
Sabemos que podemos aproximar ciertas funciones f (t) con polinomios p (t) usando Taylor
(Análisis I). Lo que se le pide a la función es que tenga suficientes derivadas en un entorno de un
punto t0 , y el criterio de aproximación que se toma es hacer la desviación máxima |f (t) − p (t)| lo
mas chica posible en cierto intervalo [a, b] que contiene t0 (es decir, p (t) aproxima “bien” a f (t)
en [a, b] si la diferencia máxima entre sus gráficas es “pequeña”). Al usar Taylor, construimos
un polinomio de grado n,
Xn
f (j) (t0 )
pn (t) = (t − t0 )j ,
j!
j=0
140 Series de Fourier
y para mejorar la aproximación debíamos aumentar n, y para que la aproximación sea tan buena
como queramos necesitamos que f tenga derivadas de todos los ordenes en t0 y además que el
resto ⎡ ⎤
n
X (j)
⎣f (t) − f (t0 )
(t − t0 )j ⎦
j!
j=0
tienda a cero cuando n tiende a infinito para todo t de [a, b] , lo cual no ocurre siempre.
p(t)
f(t)
t0
donde p es un número real fijo y a0 , a1 , ..., aN , b1 , ..., bN son números (reales o complejos, dependi-
endo de que f ser real o compleja) que elegiremos para satisfacer cierto criterio de aproximación.
Notar que cada término de SN (t) es una función periódica de periodo 2p, por lo tanto SN (t) es
una función periódica de periodo 2p. Entonces SN va a ser bueno para aproximar funciones de
periodo 2p, o lo que es lo mismo, funciones definidas en algún intervalo de longitud 2p (pues si
tengo una función definida en un intervalo de longitud 2p puedo construir una función periódica
de periodo 2p definiendo f (t) = f (t + 2p) para todo t real, y viceversa). De acá en adelante
asumimos eso: vamos a trabajar con funciones definidas en un intervalo de longitud 2p y
extendidas periódicamente a todo R.
En cuanto al criterio para aproximar, vamos a usar el que se llama de la media cuadrática
mínima, y para motivar este criterio vamos a suponer que f : R → R. Si, con la notación que
traemos, llamamos δ N (t) = f (t) − SN (t) , entonces el criterio usado con polinomios de Taylor
era hacer chico |δ N (t)| , y si miramos las gráficas abajo, con ese criterio, 1 es mejor aproximación
de f que 2
1 f(t)
f(t)
2
-p 0 p -p 0 p
Series de Fourier 141
Pero el área que queda entre f y 1 en el intervalo [−p, p] es mas grande que la que queda
entre 2 y f, y ese es otro criterio que podríamos usar para decir que una función aproxima a f.
Como dicha área es Z p
|δ N (t)| dt,
−p
Rdeberíamos
p
elegir los coeficientes (reales, pues f lo es) a0 , a1 , ..., aN , b1 , ..., bN de SN para hacer
−p |δ N (t)| dt lo mas chico posible. Pero esto presenta complicaciones teóricas y tiene algunos
resultados indeseables, así que vamos a tomar como criterio de elección de los coeficientes de
SN , minimizar
Z p
|δ N (t)|2 dt
−p
con la esperanza de que sea mas o menos lo mismo (notar que en este caso δ N (t)2 = |δ N (t)|2
pues todas las cantidades involucradas son reales).
Definición 163 si f (x) , g1 (x) y g2 (x) son funciones (de imagen real o compleja) integrables
en [a, b] , diremos que g1 aproxima mejor a f que g2 en [a, b] en el sentido de la media cuadrática
si
Z b Z b
|f (x) − g1 (x)|2 dx ≤ |f (x) − g2 (x)|2 dx.
a a
Z Z Ã " N µ ¶ µ ¶#!2
p
2
p
a0 X nπt nπt
IN = δ N (t) dt = f (t) − + an cos + bn sin dt
−p −p 2 n=1
p p
sea lo mas chico posible, es decir, podemos pensar IN (a0 , a1 , ..., aN , b1 , ..., bN ) como una función
de 2N + 1 variables, y tenemos que minimizarla. Pero la 2da versión de Leibnitz nos dice que si
k ≥ 1 entonces
Z Ã N
" µ ¶ µ ¶#! µ ¶
∂IN p
a0 X nπt nπt 1
= 2 f (t) − + an cos + bn sin − dt,
∂a0 −p 2 n=1
p p 2
Z p à " N µ ¶ µ ¶#! µ µ ¶¶
∂IN a0 X nπt nπt kπt
= 2 f (t) − + an cos + bn sin − cos dt (6.1)
∂ak −p 2 n=1
p p p
Z p à " N µ ¶ µ ¶#! µ µ ¶¶
∂IN a0 X nπt nπt kπt
= 2 f (t) − + an cos + bn sin − sin dt,
∂bk −p 2 p p p
n=1
Pero además,
Z p µ ¶ µ ¶ ½
nπt kπt p si n = k
cos cos dt = ,
−p p p 0 si n 6= k
Z p µ ¶ µ ¶ ½
nπt kπt p si n = k
sin sin dt = , (6.2)
−p p p 0 si n 6= k
Z p µ ¶ µ ¶
nπt kπt
cos sin dt = 0 ∀ k, n,
−p p p
y Z µ ¶ Z µ ¶
p p
nπt nπt
cos dt = sin dt = 0, (6.3)
−p p −p p
(ejercicio) así que al hacer las integrales en (28) queda
Z p
∂IN
= − f (t) dt + pa0
∂a0 −p
Z p µ ¶
∂IN kπt
= −2 f (t) cos dt + 2ak p para k ≥ 1
∂ak −p p
Z p µ ¶
∂IN kπt
= −2 f (t) sin dt + 2bk p para k ≥ 1,
∂bk −p p
∂ 2 IN ∂ 2 IN ∂ 2 IN
= p, = = 2p para k ≥ 1,
∂a20 ∂ak 2 ∂b2k
y como todas las derivadas cruzadas dan cero, resulta que la matriz Hessiana de IN es la matriz
diagonal ⎛ ⎞
p 0 ··· ··· 0
⎜ 0 2p 0 0 ⎟
⎜ ⎟
⎜ .. . . .
. ⎟
⎜ . . . ⎟
⎜ ⎟,
⎜ .. . . . .. ⎟
.
⎝ . ⎠
0 · · · · · · 0 2p
de donde concluimos que efectivamente obtenemos un mínimo eligiendo los coeficientes de esa
forma.
El trabajo hecho hasta ahora nos permite decir como debemos elegir los coeficientes de SN
para obtener la mejor aproximación de f en el sentido de la media cuadrática., pero todavía no
Series de Fourier 143
sabemos como de buena es esa aproximación (aunque sea la mejor puede ser malísima), así que
por ahora no tenemos teoremas pero si una definición:
Definición 164 Si f es una función (con imagen real o compleja) periódica de período 2p e
integrable en el intervalo [−p, p] , definimos sus coeficientes de Fourier por
Z µ ¶ Z µ ¶
1 p nπt 1 p nπt
an = f (t) cos dt y bn = f (t) sin dt,
p −p p p −p p
y el polinomio trigonométrico
N µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt
SN (t) = + an cos + bn sin
2 n=1
p p
Seguimos la cuenta: una ves elegidos los coeficientes de SN (tomando los coeficientes de
Fourier de f ), estudiamos la integral que define IN : por un lado
Z p " N µ ¶ µ ¶#
a0 X nπt nπt
2f (t) + an cos + bn sin dt =
−p 2 p p
n=1
⎡ ⎤
Z p XN ⎢ Z p µ ¶ Z p µ ¶ ⎥
⎢ nπt nπt ⎥
= a0 f (t) dt + ⎢2an f (t) cos dt + 2bn f (t) sin dt⎥
−p ⎣ −p p −p p ⎦
n=1 | {z } | {z }
pan pbn
N
X N
X
£ ¤ £ 2 ¤
= pa20 + 2pa2n + 2pb2n = pa20 + 2p an + b2n , (6.4)
n=1 n=1
así que cuando integramos (usando las relaciones (29)) son distinto de cero únicamente los
términos con solo cosenos o solo senos y con m = k, y en tal caso la integral vale p.
En fin, combinando (31) y (32) concluimos que
Z Ã " N µ ¶ µ ¶#!2
p
a0 X nπt nπt
IN = f (t) − + an cos + bn sin dt
−p 2 n=1
p p
Z p XN XN
2 £ 2 ¤ a20 £ 2 ¤
= f (t) dt − pa20
+ 2p 2
an + bn + p + p an + b2n
−p n=1
2 n=1
Z p à N
!
2
a0 X £ 2 ¤
= f (t)2 dt − p + an + b2n ,
−p 2 n=1
2. La serie
∞
a20 X £ 2 ¤
+ an + b2n
2 n=1
converge pues es creciente (es decir, mientras mas grande N mas grande es la suma) y
para todo N vale que
N Z
a20 X £ 2 ¤ 1 p
+ an + b2n ≤ f (t)2 dt
2 n=1
p −p
£ 2 ¤
es decir, es acotada. Esto dice que an + b2n −→ 0, y entonces a2n −→ 0 y b2n −→ 0,
n→∞ n→∞ n→∞
y entonces an −→ 0 y bn −→ 0.
n→∞ n→∞
Todo lo hecho hasta acá cierra mas o menos el problema cuando tenemos f : [−p, p] → R.
Cuando tenemos una función no necesariamente real, o sea si f : [−p, p] → C, descomponemos
Series de Fourier 145
o sea que para minimizar IN debemos minimizar IN,1 y IN,2 , y eso fue la cuenta que hicimos
recién pues todas las funciones involucradas son reales, así que debemos tomar como coeficientes
de SN,j a
Z µ ¶
1 p nπt
an,j = fj (t) cos dt, n = 0, 1, 2, 3, ...
p −p p
Z µ ¶
1 p nπt
bn,j = fj (t) sin dt, n = 1, 2, 3, ...
p −p p
y
donde
Z µ ¶ Z µ ¶
1 p nπt 1 p nπt
an = an,1 + ian,2 = f1 (t) cos dt + i f2 (t) cos dt
p −p p p −p p
Z µ ¶ Z µ ¶
1 p nπt 1 p nπt
= [f1 (t) + if2 (t)] cos dt = f (t) cos dt,
p −p p p −p p
y análogamente Z µ ¶
p
1 nπt
bn = f (t) sin dt.
p −p p
Además, una ves elegidos los coeficientes como los coeficientes de Fourier de f, queda
Z Ã N
!
p
2 a20,1 X £ 2 2
¤
IN,1 = f1 (t) dt − p + an,1 + bn,1 ,
−p 2 n=1
146 Series de Fourier
y à !
Z N
p
2 a20,2 X £ 2 2
¤
IN,2 = f2 (t) dt − p + an,2 + bn,2 ,
−p 2 n=1
así que sumando queda
IN = IN,1 + IN,2
Z p à N
! Z Ã N
!
a 2
0,1
X £ ¤ p a2
0,2
X £ ¤
= f1 (t)2 dt − p + a2n,1 + b2n,1 + f2 (t)2 dt − p + a2n,2 + b2n,2
−p 2 −p 2
n=1 n=1
Z p Z p à N
!
2 2 a0,1 a0,2 X £ 2
2 2
2 2 2
¤
= f1 (t) dt + f2 (t) dt − p + + an,1 + bn,1 + an,2 + bn,2
−p −p 2 2 n=1
Z p à N h
!
|a |2 X i
0
= |f (t)|2 dt − p + |an |2 + |bn |2 ,
−p 2 n=1
de donde se pueden sacar las mismas conclusiones que sacamos cuando f tenía imagen real.
Después de todo este trabajo hemos demostrado el siguiente teorema:
Teorema 165 Sea f (t) una función (con imagen real o compleja) periódica de período 2p e
integrable en el intervalo [−p, p], y llamemos
N µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt
SN (t) = + an cos + bn sin .
2 n=1
p p
Z p
1
≤ |f (t)|2 dt.
p −p
Además, Z µ ¶ Z µ ¶
p p
nπt nπt
lı́m f (t) cos dt = lı́m f (t) sin dt = 0.
n→∞ −p p n→∞ −p p
Se puede ver que mas que lo que dice el teorema es cierto: en 1896 el matemáticoh Liapunoffi
|a0 |2 P∞
demostró que lı́mN→∞ IN = 0, de donde se deduce que vale la igualdad 2 + n=1 |an |2 + |bn |2 =
R
1 p 2 Rp 2
p −p |f (t)| dt para cualquier función integrable (incluyendo el caso en que −p |f (t)| dt = ∞).
Esta igualdad se llama igualdad de Parceval y la desigualdad del teorema se llama desigualdad
de Bessel.
Series de Fourier 147
Nota importante 166 Cuando uno examina con cuidado lo hecho, se da cuenta de que los
coeficientes de Fourier no dependen del grado de la aproximación N . Esto es muy importante
porque significa que si uno no está conforme con la aproximación lograda con cierta cantidad de
términos, entonces puedo agregar términos sin tener que recalcular los primeros coeficientes. Es
decir, si para cierto problema usamos la 3ra aporximación de Fourier y no estamos conformes
con los resultados, para usar la 4ta sólo necesitamos calcular dos nuevos coeficientes: a4 y b4 .
Ejemplo 167
1. Tomemos f (t) = |t| en el intervalo [−π, π] (es decir, estamos pensando en la función
periódica de período 2π que coincide con |t| en el intervalo [−π, π]). Los coeficientes de
Fourier son
Z Z
1 π 1 π
an = |t| cos (nt) dt y bn = |t| sin (nt) dt,
π −π π −π
y como la función |t| sin (nt) es impar, resulta que todas las integrales que definen bn son
cero, es decir, bn = 0 ∀ n, y si n 6= 0 queda
Z Z ∙ ¸ Z
1 π
2 π 2 t sin (nt) t=π 2 π sin (nt)
an = |t| cos (nt) dt = t cos (nt) dt = − dt =
π
−π π 0 π n t=0 π 0 n
∙ ¸ ½
2 cos (nt) t=π 2 0 si n es par
= − − 2
= 2
[cos (nπ) − 1] = −4 .
π n t=0 πn πn2
si n es impar
π 4 4 4
SN (t) = − cos (t) − cos (3t) − ... − cos (N t) ,
2 π π9 πN 2
Rπ
y si N es par queda SN (t) = SN−1 (t) . La energía total de esta función es |t| dt =
³ 2 P ´ −π
π 2 = π π2 + ∞ 16
n=1 π (2n−1)
2 4 , donde el último igual vale por Parseval.
3 3 S1 3 S2
2 2 2
S0
1 1 1
-3 -2 -1 0 1 2 3 -3 -2 -1 0 1 2 3 -3 -2 -1 0 1 2 3
1 1 1
Puede verse claramente, además, que la función anterior era mas fácil de aproximar, ya que
sumando menos términos conseguíamos algo mas parecido a f .
Hasta ahora no hemos dicho nada cuanto se parece puntualmente f a su N -ésima aproxi-
mación de Fourier, es decir no sabemos que relación hay, para cada t, entre f (t) y SN (t) , y
Series de Fourier 149
tampoco sabemos que pasa con SN (t) cuando N tiende a infinito. Para estudiar eso, introduci-
mos la siguiente definición:
Definición 168 Si f (t) es una función (con imagen real o compleja) periódica de período 2p e
integrable en el intervalo [−p, p], la serie de Fourier de f es
∞ µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt
+ an cos + bn sin
2 p p
n=1
donde los coeficientes {an }n∈N∪{0} y {bn }n∈N son los coeficientes de Fourier de f . A veces
denotaremos µ ¶ µ ¶
∞
a0 X nπt nπt
f∼ + an cos + bn sin
2 n=1
p p
para indicar cual es la serie de Fourier de f . Notar que no sabemos si dicha serie converge para
algún valor de t, pero si tenemos f en las condiciones de la definición podemos construirla.
Por supuesto que nos gustaría mucho que la serie de Fourier de f converga a f, lo cual
lamentablemente no ocurre. Pero tenemos el siguiente teorema, que demostró Dirichlet en 1829
(este es el primer resultado de convergencia puntual de series de Fourier).
Teorema 169 (Dirichlet) Si f (t) es una función real de período 2p (definida en todo R),
acotada en [−p, p] , con un número finito de discontinuidades en [−p, p] y con un número finito
de máximos y mínimos en [−p, p] , entonces la serie de Fourier de f converge para todo t al
valor 12 [f (t+ ) + f (t− )] , es decir,
∞ µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt 1 £ ¡ +¢ ¡ ¢¤
+ an cos + bn sin = f t + f t− .
2 n=1
p p 2
Si f : R → C es tal que su parte real e imaginaria cumplen las hipótesis anteriores, entonces se
obtiene la misma conclusión.
Entendamos que pide el teorema y que da: las condiciones pedidas a f (además de ser
periódica de período 2p) se llaman las condiciones de Dirichlet en [−p, p] . Nosotros vamos
a hacer el análisis pensando en f de imagen real, pero esto no saca generalidad, todo se puede
pensar para f con imagen compleja, como hicimos en el teorema anterior. Seguimos: que tenga
un número finito de máximos y mínimos en [−p, p] nos asegura que f no oscila demasiado, por
ejemplos la función periódica de período 2 tal que
½
t sin (1/t) si 0 < |t| < 1
f (t) =
0 si t = 0
no cumple con esa condición (graficar f y ver!). Que tenga un número finito de discontinuidades
en [−p, p] está claro que significa, y por ejemplo la función de período 2
½
0 si t ∈ Q
f (t) =
1 si t ∈ R − Q
150 Series de Fourier
no cumple con esa condición. Las tres condiciones juntas (que pide Dirichlet) dicen algo muy
importante: que el intervalo [−p, p] se puede dividir de forma tal que la gráfica de f en cada
subintervalo es la de una función creciente o decreciente, y además, por ser acotada, los límites
¡ ¢ ¡ ¢
f t+
o = lı́m f (t) y f t−
o = lı́m f (t)
t→t+
o t→t−
o
existen para todo to en [−p, p] . Para convercerse de eso, marcar en [−p, p] primero todos los
máximos y mínimos de f , deducir que f debe crecer o decrecer entre puntos, y ahora agregar las
discontinuidades (y a la hora de graficar recordar que f es acotada). Notar que si f es continua
en t entonces f (t) = f (t+ ) = f (t− ) , y si f es discontinua en t entonces debe tener un salto en t
(por las características de f, pues sabemos que existen límites laterales en las discontinuidades),
y entonces 12 [f (t+ ) + f (t− )] es el promedio del valor de f en el salto; es decir
½
1 £ ¡ +¢ ¡ ¢¤ f (t) si f es continua en t
f t + f t− = .
2 promedio del salto si f no es continua en t
Notar, por ultimo, que en estas condiciones sabemos que f es integrable en [−p, p] .
En cuanto a lo que el teorema da, nos asegura que la serie de Fourier de f converge para
todo t, pero no necesariamente a f, pues tenemos que
∞ µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt 1 £ ¡ +¢ ¡ ¢¤
+ an cos + bn sin = f t + f t− ,
2 n=1
p p 2
es decir que la serie de Fourier de f converge a f (t) en los t’s donde f es continua, y al promedio
del salto en los t’s donde f es discontinua. O sea, para insistir y que quede bien claro, la igualdad
∞ µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt
f (t) = + an cos + bn sin
2 n=1
p p
vale solo para los valores de t donde f es continua. El hecho de que la serie de Fourier de f no
converge a f en las discontinuidades de f es absolutamente razonable: notar que si tomamos
to ∈ [−p, p] y fabricamos una nueva función
½
f (t) si t 6= t0
g (t) = ,
f (to ) − 7 si t = to
entonces f y g tienen la misma serie de Fourier (y dicha serie no puede converger en to a f (to )
y a g (to )).
En cuanto a la demostración del teorema, la omitimos porque es bastante dificil y no muy
constructiva, en el sentido de que no se ve mucho por que la serie converge al valor dicho.
(del ejemplo anterior), entonces el teorema nos dice que su serie de Fourier converge a la función
g (t) de período 2 tal que ⎧
⎨ 1/2 t = −1
g (t) = 0 si − 1 < t < 0 ,
⎩ 2
t si 0 ≤ t < 1
Nota 171 (comparativa) Con Fourier, si tenemos una función Dirichlet en [−p, p] y continua
(y periódica de período 2p), entonces usando aproximaciones N -ésimas de Fourier podemos,
valga la redundancia, aproximar f tanto como queramos, a diferencia de lo que ocurría con
polinomios de Taylor que pedía que f tenga derivadas de todos los ordenes. De todos modos,
volvemos a recalcar que las series y polinomios de Fourier solo sirven para funciones periódicas,
por ejemplo no sirven para la función f (x) = ex , y Taylor con esta hace un trabajo maravilloso.
1. Si f y g son periódicas de período 2p e integrables en [−p, p], y sus series de Fourier son
∞ µ ¶ µ ¶
a0,f X nπt nπt
f ∼ + an,f cos + bn,f sin y
2 n=1
p p
∞ µ ¶ µ ¶
a0,g X nπt nπt
g∼ + an,g cos + bn,g sin ,
2 n=1
p p
P∞ ³ ´
a nπt
2. Si f es periódica de período 2p e integrable en [−p, p] , y f ∼ 0,f2 + a
n=1 n,f cos p +
³ ´
bn,f sin nπt
p (o sea el miembro de la derecha es la serie de Fourier de f ), y α ∈ R,
entonces la función g (t) = f (αt) es periódica de período 2p/α e integrable en [−p/α, p/α] ,
y
∞ µ ¶ µ ¶
a0,f X nπαt nπαt
g∼ + an,f cos + bn,f sin
2 p p
n=1
P∞ ³ ´
a nπt
3. Si f es periódica de período 2p e integrable en [−p, p] , y f ∼ 0,f 2 + a
n=1 n,f cos p +
³ ´
bn,f sin nπt
p , y α ∈ R, entonces la función g (t) = f (t − α) es periódica de período 2p e
integrable en [−p, p] , y sus coeficientes de Fourier son
µ ¶ µ ¶
nπα nπα
an,g = an,f cos − bn,f sin , y
p p
µ ¶ µ ¶
nπα nπα
bn,g = an,f sin + bn,f cos .
p p
Esto es muy importante porque nos dice que una función (periódica de período 2p y Dirichlet
en [−p, p]) está univocamente determinada por sus coeficientes de Fourier (salvo en las discon-
tinuidades), es decir, si quiero transportar información puedo calcular los coeficientes de Fourier
de f, tirar f y quedarme con los coeficientes, tranquilo de que f es la única función con dichos
coeficientes y de que puedo recuperarla cuando quiera (de nuevo, salvo por las discontinuidades).
Por razones físicas
³ al conjuntohde todos los i´
coeficientes de Fourier se llaman el espectro de f , y
|a0 |2 P∞ Rp
a la cantidad p 2 + n=1 |an | + |bn | (que es igual a −p |f (t)|2 dt) la energía (espectral)
2 2
total.
Sabemos que los coeficientes de Fourier {an , bn } de una función (razonable) satisfacen an −→
n→∞
0 y bn −→ 0, pero no sabemos cuan rápido lo hacen. Para poder medir “velocidad” de conver-
n→∞
gencia tenemos que fijar parámetros,© y lo ªhacemos © de ª la siguiente manera: vamos a usar para
comparar las sucesiones {1/n}n∈N , 1/n2 n∈N , 1/n3 n∈N , etc., teniendo en cuenta que, por
ejemplo, la segunda converge mas rápido a cero que la primera, en el sentido de que
1/n2
−→ 0.
1/n n→∞
Series de Fourier 153
© ª
En general, si tenemos {1/nm }n∈N y 1/nk n∈N entonces la primera decrece mas rápido que la
segunda si m > k.
Nota(ción) 173 Si f (t) es periódica de período 2p y continua, puede pasar que f 0 (t) exista en
todo (−p, p) salvo en finitos puntos {t1 , ..., tn }. En este caso, denotaremos por f 0 a tal función
(periódica de período 2p), dejándola sin definir en los puntos que no exista (que serán infinitos
en R). Esto no tendrá importancia pues estamos interesados en los coeficientes de Fourier de
f 0 , y las integrales no se dan cuenta si f 0 no está definida en una cantidad finita de puntos.
En algunos casos, cuando queramos remarcar esta situación, diremos que f 0 existe en casi todo
punto. Así, por ejemplo, la función de período 2 tal que f (t) = |t| si t ∈ [−1, 1) tiene derivada
periódica de período 2 y ½
0 −1 si − 1 < t < 0
f (t) = ,
1 si 0 < t < 1
y f 0 no está definida en los t ∈ Z.
f(t) f 0(t)
1 1
-3 -2 -1 0 1 2 3 -3 -2 -1 0 1 2 3
Se suele poner f (p− ) − f (−p+ ) en lugar de f (p) − f (−p) cuando no se sabe que f sea continua
en p y/o −p.
Vamos a ver un lema técnico para calcular integrales:
Lema 174 (teorema del valor medio para integrales) Si f es monótona en [a, b] (es de-
cir, creciente o decreciente) y g es integrable en [a, b] , entonces existe ξ ∈ (a, b) tal que
Z b Z ξ Z b
f (t) g (t) dt = f (a) g (t) dt + f (b) g (t) dt.
a a ξ
Demostración. de Análisis I, típico ejercicio resultado del teorema de los valores intermedios,
o algo así.
Tomemos ahora una función 2p-periódica y Dirichlet en [−p, p] . Como f tiene una cantidad
finita de máximos y mínimos en [−p, p] podemos dividir dicho intervalo en una cantidad finita
de subintervalos de forma tal que f sea monótona en cada uno de ellos. Consecuentemente,
Z µ ¶
1 p nπt
an = f (t) cos dt
p −p p
154 Series de Fourier
con f monótona en (a, b) . Aplicándole el lema anterior a esta integral tenemos que
Z b µ ¶ Z ξ µ ¶ Z b µ ¶
nπt nπt nπt
f (t) cos dt = f (a) cos dt + f (b) cos dt =
a p a p ξ p
∙ µ ¶ µ ¶¸ ∙ µ ¶ µ ¶¸
pf (a) nπξ nπa pf (b) nπb nπξ
= sin − sin + sin − sin .
nπ p p nπ p p
Ahora, como f es acotada existe M tal que |f (t)| ≤ M para todo t, y entonces acotando la
suma anterior queda ¯Z b µ ¶ ¯
¯ nπt ¯ 4pM
¯ f (t) cos dt¯¯ ≤ .
¯ p nπ
a
Por último, como el coeficiente era una suma finita de integrales de este tipo, concluimos que
existe una constante c (que no depende de n) tal que
c
|an | ≤ ∀ n ∈ N.
n
Análogamente, se prueba que en estas condiciones existe una constante c tal que
c
|bn | ≤ ∀ n ∈ N.
n
Análogamente, usando que f es continua y que f (p) = f (−p), se ve que existe una constante c̃
tal que
c̃
|bn | ≤ 2 ∀ n ∈ N.
n
Definición 175 Si {cn }n∈N es una sucesión que converge a cero, diremos que es de orden 1/nk
si existe una constante M tal que
1
|cn | ≤ M k
n
para
© todo
ª n. Otra forma de decir esto es que {cn }n∈N decrece al menos como (la sucesión)
1/nk n∈N .
Ejemplo 176 si ½ 4
πn2
si n es par
cn = ,
0 si n es impar
entonces {cn }n∈N es de orden 1/n2 pero no de orden 1/n3 .
Para seguir con el razonamiento que traíamos, vamos a poner todo en un teorema:
Demostración.
1. Que los coeficientes de Fourier de f decrecen al menos como 1/n ya lo probamos, veamos
que no pueden decrecer mas rápido ambos: para eso, supongamos que si, o sea que existe
M y α > 0 tal que
M M
|an | ≤ 1+α y |bn | ≤ 1+α ∀ n ∈ N.
n n
Llamo µ ¶ µ ¶
∞
a0 X nπt nπt
g (t) = + an cos + bn sin
2 p p
n=1
(el miembro de la derecha es la serie de Fourier de f, que converge para todo t pero no
necesariamente a f ), entonces
¯ µ ¶ µ ¶¯
¯ ¯
¯an cos nπt + bn sin nπt ¯ ≤ 2M ∀ t ∈ R,
¯ p p ¯ n1+α
y como la serie
X∞ X∞
2M 1
1+α
= 2M 1+α
n=1
n n=1
n
R∞¡ ¢
converge (pues 1 1/t1+α dt = 1/α, es decir, la integral converge), Weierstrass me dice
que la serie que define g converge uniformemente en R, y como es una serie de funciones
continuas, resulta que g es continua en R. Pero f (t) = g (t) en todos los t0 s donde f es
continua, y esto quiere decir que f es continua o tiene discontinuidades evitables (pensar),
lo cual contradice nuestras hipótesis.
2. que los coeficientes de Fourier de f decrecen al menos como 1/n2 ya lo probamos, veamos
que no pueden decrecer mas rápido ambos: para eso, supongamos que si, o sea que existe
M y α > 0 tal que
M M
|an | ≤ 2+α y |bn | ≤ 2+α ∀ n ∈ N.
n n
Como f es continua, tenemos que
∞ µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt
f (t) = + an cos + bn sin ,
2 n=1
p p
X∞ µ µ ¶ µ ¶¶0 X ∞ µ ¶ µ ¶
nπt nπt −nπan nπt nπan nπt
an cos + bn sin = sin + cos , (6.6)
n=1
p p n=1
p p p p
y ¯ µ ¶ µ ¶¯
¯ −nπan nπt nπan nπt ¯¯ 2nπ M 2πM 1
¯ sin + cos ≤ = ∀ t ∈ R,
¯ p p p p ¯ p n2+α p n1+α
y como la serie
∞
X ∞
2πM 1 2πM X 1
=
n=1
p n1+α p n=1 n1+α
Series de Fourier 157
Nota 178 (sutil) fijarse que en el enunciado de (1) dice “Si f tiene discontinuidades no evita-
bles”, en cambio en (2) dice “Si f 0 tiene discontinuidades”, esto es porque hay un teorema que
dice que las funciones derivadas no pueden tener discontinuidades evitables, ver Spivak pag. 262.
Ejemplo 179
1. Si f (t) es la función de período 2π tal que f (t) = |t| si t ∈ [−π.π), ya calculamos sus
coeficientes de Fourier y nos dio bn = 0 ∀ n, a0 = π, y
½ −4
πn2 si n es impar
an = ,
0 si n es par
es decir que son de orden 1/n2 pero no mas, y eso es porque f es continua pero f 0 es
discontinua.
entonces |an | = πn7 3 , y √n 10 ≤ |bn | ≤ √ n10 , de donde se deduce que ambos son de orden
2 n n
1/n3 y no mas, es decir que f tiene derivada continua y derivada segunda discontinua.
Toda la sección anterior, además de ser útil para “saber” cuantos términos debemos usar para
obtener una “buena” aproximación, nos permite sospechar que va a pasar cuando integremos y/o
derivemos una serie de Fourier. De Análisis I, uno sabe que en general al integrar una función
obtenemos una función “mejor”, y que al derivarla obtenemos una función “peor” (por ejemplo,
en cuanto a cuantas derivadas tiene). Esta situación también se observa en las series de Fourier:
158 Series de Fourier
supongamos que tenemos una función 2p-periódica y Dirichlet en [−p, p] , y construimos su serie
de Fourier µ ¶ µ ¶
∞
a0 X nπt nπt
f∼ + an cos + bn sin .
2 n=1
p p
cuyos coeficientes decrecen mas lentamente, y por lo tanto la serie converge “peor” (si es que
converge). Por otro lado, si integramos término a término obtenemos
Z t X∞ Z t µ ¶ Z t µ ¶
a0 nπx nπx
dx + an cos dx + bn sin dx =
0 2 n=1 0 p 0 p
X∞ µ ¶ µ ¶
a0 an p nπt bn p t
= t+ sin − cos nπ − 1
2 n=1
nπ p nπ p
∞ ∞ µ ¶ µ ¶
a0 p X bn X an p nπt bn p nπt
= t+ + sin − cos ,
2 π n nπ p nπ p
n=1 n=1
que es una serie (no trigonometrica, salvo que a0 = 0) que converge “mejor” (y efectivamente,
converge). Mas aún, con f como tomamos, nosotros, se puede ver que esta serie converge uni-
formemente en R, pues los coeficientes {an , bn }n∈N , son de orden 1/n. Todo esto hace creíble
el siguiente teorema:
Teorema 180 Sea f (t) una función periódica de período 2p, y {a0 , an , bn }n∈N sus coeficientes
de Fourier, entonces:
X∞ ∙ µ ¶ µ ¶¸
d nπt nπt
f0 ∼ an cos + bn sin .
n=1
dt p p
Demostración. dificil con estas hipótesis, pero queda como ejercicio demostrar que (1) es cierto
si f es además continua, y (2) es cierto si además f 0 es continua.
Series de Fourier 159
Ejemplo 181 tomemos la función de período 2π tal que f (t) = t si t ∈ [−π, π),
f(t)
π
-3π -2π -π 0 π 2π 3π
-π
lo cual es coherente con nuestros conocimientos, pues esa es la serie de Fourier de una función
par, continua y con derivada discontinua.
Finalmente, si derivamos término a término la serie de f, obtenemos
que diverge para todo t (notar, sin embargo, que f 0 es periódica (de período 2π, pues es cierto
que f 0 (t) = f 0 (t + 2π)), es decir este es un caso donde la serie de Fourier de la derivada no
puede calcularse derivando la serie de f, y esto no contradice el teorema, porque el problema
está en que f no es continua.
Hemos visto en algunos ejemplos, que cuando una función es par su serie de Fourier no tiene
senos, y cuando es impar no tiene cosenos; en está sección vamos a ver que efectos tienen algunas
simetrías en los coeficientes de Fourier.
Lema 182 si f es una función integrable de período 2p entonces sus coeficientes de Fourier
quedan determinados de la siguiente manera:
La principal utilidad del lema anterior no es solo ahorrarse calcular algunos coeficientes que
obviamente eran cero (y cuyo calculo innecesario es una frecuente fuente de errores), sino que
nos permite, en algunas circunstancias, encontrar desarrollos de Fourier que contengas solo senos
o solo cosenos. El caso típico es el siguiente: supongamos que tenemos una función f definida
solo en el intervalo [0, p), y queremos lograr la igualdad
X∞ µ ¶
nπt
f (t) = bn sin
n=1
p
para todo t ∈ [0, p), o para la mayor cantidad de t0 s posibles (por ejemplo difícilmente logremos
igualdad en los t0 s donde f es discontinua). Entonces hacemos lo siguiente: definimos f (t) =
−f (−t) para t ∈ (−p, 0) (recordar que comenzamos con f solamente definida en [0, p)), y así
extendida, f es impar en [−p, p), y ahora definimos f en todo R para que sea periódica de
período 2p, es decir ponemos f (t) = f (t + 2p) ∀ t ∈ R.
−3p −2p −p 0 p 2p 3p
0 p
Así, hemos construido una función periódica de período 2p e impar, que coincide con mi función
original en el intervalo [0, p), por lo tanto su serie de Fourier tendrá solo senos, y si por ejemplo,
tenemos f continua en (0, p) , habremos conseguido
X∞ µ ¶
nπt
f (t) = bn sin ∀ t ∈ (0, p) .
n=1
p
Ejemplo 183 queremos encontrar una serie de Fourier que converge a la función f (t) = t2
en el intervalo (0, 1) y que contenga solo senos, entonces el razonamiento anterior nos dice que
debemos tomar Z 1
2 (−1)n (−1)n 4
bn = 2 t sin (nπt) dt = −2 + 4 3 3 − 3 3,
0 nπ n π n π
y con eso nomás estamos seguros de que
X∞ ∙ ¸
2 (−1)n (−1)n 4
t = −2 + 4 3 3 − 3 3 sin (nπt) ∀ t ∈ (0, 1) .
n=1
nπ n π n π
162 Series de Fourier
1
1
0.5
-1 -0.5 0.5 1
-1
0.5 1
Exactamente de la misma manera procedemos si tenemos una función solo definida en [0, p)
y queremos encontrar una serie de Fourier que contenga solo cosenos y que converge a f (para
la mayor cantidad posible de t0 s): en este caso deberíamos definir f (t) = f (−t) para t ∈ [−p, 0)
(de forma que quede par en el intervalo [−p, p] , y después extender f de período 2p a todo R.
0 p −3p −2p −p 0 p 2p 3p
De nuevo, esta función será periódica de período 2p y par, por lo que su serie de Fourier tendrá
solo cosenos, en particular si f es continua en (0, p) entonces tendremos
∞ µ ¶
a0 X nπt
f (t) = + an cos ∀ t ∈ (0, p)
2 n=1
p
con Z µ ¶
2 p nπt
an = f (t) cos dt,
p 0 p
es decir que no necesitamos calcular explícitamente la extensión de f, pues para calcular los
coeficientes solo necesito saber como es f en el intervalo [0, p)
Ejemplo 184 si, como en el ejemplo anterior, queremos encontrar una serie de Fourier que
converge a f (t) = t2 para todo t ∈ (0, 1) pero que contenga solo cosenos, tenemos que tomar
Z 1 Z 1
(−1)n 2
an = 2 t2 cos (nπt) dt = 4 2 2 para n ≥ 1, y a0 = 2 t2 dt = ,
0 n π 0 3
Series de Fourier 163
1 1
0.5 0.5
0.5 1 -1 1
Notar, que a diferencia del ejemplo anterior, acá nos quedaron coeficientes de orden 1/n2 , y esto
se debe a que la función extendida de forma par resulta continua con derivada discontinua en
R.
Una simetría muy usada es la “impar de media onda” o simetría T, que se define así:
Definición 185 Si f es una función de período 2p, diremos que f tiene simetría impar de media
onda (o simetría T) si
f (t) = −f (t + p) ∀ t ∈ R.
Una forma de ver que significa gráficamente esto es la siguiente: si en la definición no estuviera
el signo −, estaríamos pidiendo que f tenga período p, por lo tanto una forma de detectar este
tipo de simetría es graficar la función en el intervalo [−p, p), y luego reflejar con respecto al eje
t en el intervalo (0, p) . Si el resultado obtenido es la misma gráfica que en el intervalo (−p, 0)
tendremos simetría T
−p p 3p
0 −3p −2p 0 2p
−p
Se puede ver que (en cierta medida) la recíproca del lema anterior es verdad: si los coeficientes
de subíndice par son nulos, entonces f tiene simetría T pues (si por ejemplo, f es continua)
X∞ µ ¶ µ ¶
(2n − 1) π (t + p) (2n − 1) π (t + p)
f (t + p) = a2n−1 cos + b2n−1 sin =
n=1
p p
X∞ µ ¶ µ ¶
(2n − 1) πt (2n − 1) πt
= a2n−1 cos + 2nπ − π + b2n−1 sin + 2nπ − π =
n=1
p p
X∞ µ ¶ µ ¶
(2n − 1) πt (2n − 1) πt
= a2n−1 (−1) cos + b2n−1 (−1) sin = −f (t) .
n=1
p p
Para convertir esto en una demostración rigurosa habría que ver si toleramos en la definición de
simetría T que la igualdad valga en “casi todo punto” (expresión cuyo significado se explica en
6,5).
Combinando esta simetría con paridad e imparidad, podemos en algunas ocasiones, ahor-
rarnos el cálculo de muchos coeficientes de Fourier. Considerar por ejemplo la función de período
2π tal que f (t) = |t| − π2 en el intervalo [−π, π]: esta función es impar y tiene simetría T, por lo
cual sabemos que sus coeficientes de Fourier serán
a2n = 0 ∀ n ∈ N ∪ {0} , y bn = 0 ∀ n.
Cuando tenemos una función real f , se suele escribir su serie de Fourier de otra manera, que
clarifica la forma en que se usan las funciones trigonométricas para reconstruir f a partir de
coeficientes. Esto no es mas que aplicar un poco de álgebra: si f es periódica de período 2p y
Dirichlet en [−p, p] , construimos su serie de Fourier
∞ µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt
f∼ + an cos + bn sin .
2 n=1
p p
Series de Fourier 165
p
Llamemos An = a2n + b2n , entonces como para cada n, An = 0 si y solo si an y bn son ambos
cero, podemos sacar de la serie los términos para los cuales An = 0, y queda
X∞ µ ¶ µ ¶
a0 nπt nπt
f ∼ + an cos + bn sin =
2 p p
n tq An 6=0
X∞ ∙ µ ¶ µ ¶¸
a0 an nπt bn nπt
= + An cos + sin .
2 An p An p
n tq An 6=0
an
Puesto que el número complejo An + i Abnn tiene módulo 1, existe un único θn ∈ [−π, π) tal que
an bn
+i = cos (θn ) + i sin (θn )
An An
(es, casualmente, el argumento principal del número), y entonces la serie de Fourier de f queda
∞
X ∙ µ ¶ µ ¶¸
a0 nπt nπt
f ∼ + An cos (θn ) cos + sin (θn ) sin =
2 p p
n tq An 6=0
X∞ µ ¶
a0 nπt
= + An cos − θn
2 p
n tq An 6=0
X∞ µ ¶
a0 nπt
= + An cos − θn ,
2 n=1
p
este último igual vale pues si agregamos los términos donde An = 0 en realidad no agregamos
nada (los ponemos para que la serie quede expresada mas linda). Esa ³ última serie
´ se llama la
nπt
serie armónica de cosenos de f, el n-ésimo armónico de f es cos p − θn , la amplitud
de tal armónico es An , y θn es el ángulo de fase.
Esta forma de escribir la serie de Fourier de una función es muy usada porque permite “leer”
datos de la función directamente: nos dice que f “se puede expresar” superponiendo onditas:
la de menor frecuencia se llama el armónico fundamental, y todas las siguientes tienen por
frecuencia un múltiplo entero de la frecuencia fundamental, An nos dice “cuanto” hay del n-
ésimo armónico, y el ángulo θn nos indica cuando el n-ésimo armónico alcanza su máximo: si es
positivo el armónico está en retraso, y si es negativo esta en adelanto.
Nota 187 por supuesto que la forma en que escribamos la serie de Fourier no va a cam-
biar los hechos: los teoremas de convergencia siguen siendo los mismos (hay que leerlos con
cuidado),
³ 2 Ppero todo ´ tiene traducción obvia. Además notar que la energía espectral pasa a ser
a0 ∞
p 2 + n=1 An , y {An }n∈N es de orden 1/nk si y solo si ambos coeficientes {an }n∈N y
2
{bn }n∈N son de orden 1/nk . Por último, notar que si conocemos la serie armónica de cosenos
de una función, entonces procediendo al revés de como hicimos recién podemos construir la serie
de Fourier de f .
Nota 188 (otra) podemos usar senos en lugar de cosenos y construir la serie armónica de
senos. Nosotros que ya tenemos construida la de cosenos seguimos desde esa: con la misma
166 Series de Fourier
Vamos a seguir haciendo cuentas para escribir la serie de Fourier que conocemos de otra
forma: si f es periódica de período 2p y Dirichlet en [−p, p] , construimos su serie de Fourier
∞ µ ¶ µ ¶
a0 X nπt nπt
f∼ + an cos + bn sin .
2 n=1
p p
Como
1 ¡ iy ¢ 1 ¡ iy ¢
cos (y) = e + e−iy y sin (y) = e − e−iy ,
2 2i
reemplazando queda
a0 X an ³ i nπt ´ b ³ nπt ´
∞
nπt n nπt
f ∼ + e p + e−i p + ei p − e−i p =
2 n=1
2 2i
∞ µ ¶ µ ¶
a0 X an bn i nπt a n bn nπt
= + + e p + − e−i p =
2 n=1
2 2i 2 2i
∞ µ ¶ µ ¶
a0 X an − ibn i nπt a n + ibn nπt
= + e p + e−i p .
2 n=1
2 2
Si llamamos
a0
c0 =
µ2 ¶
an − ibn
cn = para n ≥ 1
2
µ ¶
an + ibn
c−n = para n ≥ 1,
2
Series de Fourier 167
es decir, creamos una sucesión doble {cn }n∈Z , entonces la serie de arriba queda
∞
X ∞
X ∞
X ∞
X ∞
X
nπt nπt nπt −nπt nπt
f ∼ c0 + cn ei p + c−n e−i p = c0 + cn ei p + c−n ei p = cn ei p ,
n=1 n=1 n=1 n=1 n=−∞
donde la serie doble converge pues ambas series convergen. Esta última serie se llama la serie
compleja de Fourier de f. Veamos como se calculan los coeficientes cn : para n ≥ 1 es
µ ¶ ∙ Z µ ¶ Z µ ¶ ¸
an − ibn 1 1 p nπt 1 p nπt
cn = = f (t) cos dt − i f (t) sin dt =
2 2 p −p p p −p p
Z p ∙ µ ¶ µ ¶¸ Z p
1 nπt nπt 1 nπt
= f (t) cos − i sin dt = f (t) e−i p dt,
2p −p p p 2p −p
y para n ≤ −1 queda
µ ¶ ∙ Z µ ¶ Z µ ¶ ¸
a−n + ib−n 1 1 p −nπt 1 p −nπt
cn = = f (t) cos dt + i f (t) sin dt =
2 2 p −p p p −p p
Z p ∙ µ ¶ µ ¶¸ Z p
1 nπt nπt 1 nπt
= f (t) cos − i sin dt = f (t) e−i p dt,
2p −p p p 2p −p
y para n = 0, Z p
a0 1
c0 = = f (t) dt,
2 2p −p
De nuevo, notar que la forma de escribir la serie no cambia sus propiedades: los coeficientes
{cn }n∈Z son de orden 1/nk si y solo si ambos coeficientes {an }n∈N y {bn }n∈N son de orden 1/nk ,
P
la amplitud del n-ésimo armónico es |cn | + |c−n | , la energía (espectral) es 2p ∞ 2
n=−∞ |cn | , etc.
∂2 ∂
i) a2 u (x, t) = u (x, t)
∂x2 ∂t
ii) u (0, t) = u (p, t) = 0 (6.7)
iii) u (x, 0) = h (x) ∀ x ∈ [0, p]
La ecuación (34i) se llama ecuación del calor, y el sistema (34) es un modelo matemático de la
siguiente situación: imaginemos que tenemos un alambre delgado de longitud p con los extremos
a cero grado, y además que el único traspaso de calor es a lo largo del alambre, de forma tal
168 Series de Fourier
que los extremos están siempre a cero grado. Podemos imaginar el alambre como el segmento
de recta [0, p] . Supongamos además que la temperatura en el instante t = 0 en el punto x es
h (x) , entonces la función u (x, t) que da la temperatura en cada punto x del alambre en cada
instante t ≥ 0 debe satisfacer (34), donde a2 es una constante que depende de la conductividad
del alambre.
es decir, nos preguntamos como será una función que sea un producto como arriba y que
además cumpla (34i). Derivando obtenemos
∂ ∂ ∂2
u (x, t) = H (x) G (t) = H 0 (x) G (t) , H (x) G (t) = H 00 (x) G (t) ,
∂x ∂x ∂x2
y
∂
H (x) G (t) = H (x) G0 (t) ,
∂t
por lo que la ecuación (34i) queda
o lo que es lo mismo,
H 00 (x) G0 (t)
a2 = ∀ (x, t) ∈ (0, p) × (0, ∞) (6.8)
H (x) G (t)
H 00 (x) G0 (t)
a2 = = λ ∀ (x, t) ∈ (0, p) × (0, ∞) ,
H (x) G (t)
es decir,
a2 H 00 (x) = λH (x) ∀ x ∈ (0, p) , (6.9)
y
G0 (t) = λG (t) ∀ t ∈ (0, ∞) , (6.10)
que son ecuaciones que sabemos resolver. Las condiciones (34ii) y (34iii) se transforman en
respectivamente. Comencemos con (36): puesto que el polinomio P (x) = x2 − aλ2 tiene raíces
√
± λ/a (pensamos a > 0, esto no saca generalidad pues hemos puesto a2 porque la constate de
conductividad es positiva), (36) tiene solución
⎧ √ √
⎨ αex λ/a + βe−x λ/a si λ > 0
H (x) = α¢+ xβ ¡ √ si λ = 0
⎩ ¡ √ ¢
α cos x −λ/a + β sin x −λ/a si λ < 0
(es decir, esos son los únicos valores de λ que pueden llegar a ser útiles), y
µ ¶
nπx
H (x) = β sin .
p
Recapitulemos lo hecho hasta ahora: proponemos un producto H (x) G (t) como solución de (34i)
y vemos que entonces que se deben cumplir las ecuaciones (36) y (37), donde λ es un valor real
desconocido. Al resolver (36) y teniendo en cuenta que H debe cumplir (39i), concluimos que los
³ ´2
únicos valores que puede tomar λ son −λn = anπ p , n ∈ N, y para cada uno de esos valores
tenemos una solución de (36), que es
µ ¶
nπx
Hn (x) = β n sin ,
p
donde γ n es una constante real, así que terminando, concluimos que si tenemos una solución de
(34i) y (34ii) de la forma H (x) G (t) , entonces u (x, t) debe ser alguna de
µ ¶ 2 µ ¶ 2
nπx − anπ t nπx − anπ t
un (x, t) = Hn (x) Gn (t) = β n sin γne p
= cn sin e p
,
p p
170 Series de Fourier
u (x, t) + v (x, t)
también es solución de (34i) y (34ii) (ejercicio, verificarlo, esto es gracias a que en (34ii) se pide
que sea igual a cero y no otra constante), por lo tanto podemos construir soluciones de (34i) y
(34ii) sumado las soluciones un que construimos hace un rato. Y así, si nos dan
µ ¶ µ ¶ µ ¶
9πx 34πx 934πx
h (x) = 34 sin + 9 sin + 349 sin ,
p p p
entonces la función
µ ¶ 2 µ ¶ 2 µ ¶ 2
9πx − a9π t 34πx − a34π t 934πx − a934π t
34 sin e p
+ 9 sin e p
+ 349 sin e p
p p p
es solución de (34) (pues sabemos que es solución de (34i) y (34ii), y justo al poner t = 0 nos
queda h (x)). Pero entonces a esta altura nos damos cuenta de lo siguiente: si h (x) es de la forma
N
X µ ¶
nπx
h (x) = cn sin , (6.12)
n=1
p
entonces la función
N
X µ ¶ 2
nπx − anπ t
cn sin e p
(6.13)
p
n=1
es solución de (34).
Pero al ver esto nos damos cuenta del siguiente hecho: h (0) = h (p) = 0, así que si extiendo
h al intervalo [−p, p] de forma que sea impar y luego periódica de período 2p, entonces la serie
de Fourier de h converge a h, es decir, podemos poner
X∞ µ ¶
nπx
h (x) = an sin ∀ x ∈ [0, p]
n=1
p
Series de Fourier 171
si {an }n∈N son los coeficientes del desarrollo de senos de Fourier de h (comparar con (40)). Así,
si en lugar de considerar una suma finita como en (41) consideramos la serie de las un y elegimos
cn = an , entonces la función
X∞ µ ¶ 2
nπx − anπ t
an sin e p
p
n=1
satisface (34iii), y es obvio que satisface (34ii), pero el problema es que no sabemos que cumpla
(34) porque no es una suma finita. Pero para terminar, si supiéramos que podemos derivar dentro
de la serie (respecto de x dos veces y respecto de t una ves) listo, porque quedaría
∞ ∞ c/un cumple (34) ∞
2u X ∂ 2 un X 2u X
2∂ 2 2∂ n ↓ ∂un ∂u
a =a = a = = .
∂x2 n=1
∂x2 n=1
∂x2 n=1
∂t ∂t
Se ve en el práctico que si existe M tal que |an | ≤ M ∀ n, entonces se puede, por lo tanto
hemos probado el siguiente teorema:
Teorema 189 Si h (x) es una función Dirichlet en [0, p] con h (0) = h (p) = 0 y {an }n∈N son
los coeficientes de Fourier de la serie de senos de h (i.e. extender h impar al [−p, p]), entonces
la función
X∞ µ ¶ 2
nπx − anπ t
an sin e p
n=1
p
está definida en [0, p] × [0, ∞) y es solución de (34).
Ejemplo 190 Queremos encontrar una función u (x, t) definida en [0, 2] × [0, ∞) y que cumpla
∂2 ∂
i) 4 2
u (x, t) = u (x, t)
∂x ∂t
ii) u (0, t) = u (2, t) = 0
iii) u (x, 0) = h (x) ∀ x ∈ [0, 2]
½
x si 0 ≤ x < 1
donde h (x) = . Para eso, lo primero que tenemos que hacer, según el
2 − x si 1 ≤ x ≤ 2
teorema anterior, es encontrar la serie de Fourier de senos de h. Tenemos
Z 2 ³ nπx ´ Z 1 ³ nπx ´ Z 2 ³ nπx ´
an = h (x) sin dx = x sin dx + (2 − x) sin dx =
0 2 0 2 1 2
−2 h ³ nπ ´ ³ nπ ´i 2 h ³ nπ ´ ³ nπ ´i
= −2 sin + nπ cos + nπ cos + 2 sin =
n2 π 2 2 2 n2 π 2 2 2
8 ³ nπ ´
= sin .
n2 π 2 2
Entonces, inmediatamente y sin mas trámites, el teorema anterior nos dice que
X∞
8 ³ nπ ´ ³ nπx ´ 2
u (x, t) = 2 2
sin sin e−(nπ) t
n=1
n π 2 2
∞ µ ¶
8 X (−1)n+1 (2n − 1) πx −(2n−1)2 π2 t
= sin e .
π 2 n=1 (2n − 1)2 2
172 Series de Fourier
z
1
0.5
1
2
3
1
2
y
x
Una ves entendido por completo el razonamiento hecho para resolver la ecuación del calor,
nos metemos con la de ondas, pero mas rápido.
El problema es mas o menos así: si fijamos los extremos de una cuerda de longitud p, y le
damos posición inicial y velocidad inicial a cada punto de la cuerda, entonces la función y (x, t)
que da la posición de cada punto x de la cuerda en el instante t > 0 debe cumplir la ecuación
∂ 2y ∂2y
a2 = ,
∂x2 ∂t2
donde estamos pensando a la cuerda como el segmento [0, p]. Entonces, el problema de condi-
ciones iniciales queda así: encontrar una función y (x, t) que satisfaga
∂2 ∂2
i) a2 y (x, t) = y (x, t) (6.14)
∂x2 ∂t2
ii) y (0, t) = y (p, t) = 0 (cuerda fija en los extremos)
iii) y (x, 0) = f (x) ∀ x ∈ [0, p] (posición inicial de cada punto)
∂y
iv) (x, 0) = g (x) ∀ x ∈ [0, p] (velocidad inicial de cada punto)
∂t
Proponemos y (x, t) = H (x) G (t) , y derivando comprobamos que (41i) se transforman en
Entonces, existe algún valor λ (del cual no conocemos nada) tal que
es decir,
H 00 (x) = λH (x) ∀ x ∈ (0, p) , (6.15)
Series de Fourier 173
y
00
G (t) = a2 λG (t) ∀ t ∈ (0, ∞) , (6.16)
que son ecuaciones que sabemos resolver. Además la condicione (41ii) se transforma en
donde α y β son constantes reales, y cuando le imponemos (44) resulta que debe ser
µ ¶2
nπ
λ=− , n ∈ N,
p
(es decir, λ < 0) y α = 0, y entonces para cada natural n tengo una solución
µ ¶
nπx
Hn (x) = β n sin .
p
³ ´2
La correspondiente Gn (t) se obtiene resolviendo (43) para cada λn = − nπ p , y queda
µ ¶ µ ¶
anπt anπt
Gn (t) = cn cos + dn sin ,
p p
y multiplicando y unificando las constantes nos queda, en fin, que para cada natural n tenemos
una solución de (41i y ii)
µ ¶∙ µ ¶ µ ¶¸
nπx anπt anπt
yn (x, t) = sin αn cos + β n sin ,
p p p
donde αn y β n son constantes reales.
De nuevo, observamos que si u y v son solución de (41i y ii) entonces u + v también lo es, lo
cual nos lleva a suponer que, bajo condiciones adecuadas de convergencia, la función
∞
X µ ¶∙ µ ¶ µ ¶¸
nπx anπt anπt
y (x, t) = sin αn cos + β n sin
p p p
n=1
será solución de (41i y ii) ((41ii) es inmediato, y para (41i) lo que necesitamos es poder derivar
término a término dos veces respecto de x y dos veces respecto de t).
La condición (41iii) en esta función queda
X∞ µ ¶
nπx
y (x, 0) = αn sin = f (x) ∀ x ∈ [0, p] ,
n=1
p
o sea escribiendo f como un desarrollo de senos (y suponiendo que la extensión impar de f sea
continua). Por último, (suponiendo que pueda derivar término a término)
∞ µ ¶∙ µ ¶ µ ¶¸
∂y ∂y X nπx anπt anπt
y (x, t) = sin αn cos + β n sin =
∂t ∂t n=1 p p p
∞
X µ ¶∙ µ ¶ µ ¶¸
nπx −anπ anπt anπ anπt
sin αn sin + βn cos ,
p p p p p
n=1
o sea escribiendo g como un desarrollo de senos (y suponiendo que la extensión impar de f sea
continua), es decir, debemos poner
Z p µ ¶
2 nπt
βn = g (t) sin dt.
anπ 0 p
Completando los detalles técnicos (que está en el práctico), queda probado el siguiente:
Teorema 191 si f (x) y g (x) son dos funciones definidas en [0, p] tales que: f (0) = f (p) =
g (0) = g (p) , la extención impar de f tiene derivada segunda continua, y la extención impar de
g tiene derivada continua. Entonces definiendo
Z µ ¶ Z p µ ¶
2 p nπt 2 nπt
αn = f (t) sin dt y βn = g (t) sin dt,
p 0 p anπ 0 p
Integrales de Fourier
Vamos a repasar las cosas aprendidas en Análisis I sobre integrales impropias. Por ahora
pensaremos en una función de variable e imagen real, es decir, f : [a, b] → R, y al final diremos
que pasa con funciones de imagen compleja.
Cuando se define
Z b
f (t) dt
a
se asume que f es acotada en el intervalo (a, b) y que tanto a como b son finitos. Si alguno
de estos requisitos (o ambos) fallan, tenemos que darle una nueva interpretación al símbolo
Rb
a f (t) dt, y en tal caso se lo llama integral impropia.
Veamos primero el caso en que uno de los límites es infinito: si b = ∞, entonces se define
Z ∞ Z b
f (t) dt = lı́m f (t) dt
a b→∞ a
R∞
cuando tal límite existe. En este caso, se suele decir que la integral impropia a f (t) dt con-
verge, mientras que si el límite no existe se dice que la integral diverge. Acá se hace el mismo
abuso del castellanoR que cuando hablamos de convergencia y divergencia de series, ya que en el
∞
mejor de los casos a f (t) dt es un número, y por lo tanto no puede “converger” o “diverger”.
Lo correcto sería decir “la función f en integrable en (a, ∞)”, de la misma manera que decíamos
“la sucesión {zn }∞
n=1 es sumable”.
175
176 Integrales de Fourier
R∞
Ejemplo 192 1. La integral impropia 1 t−p dt converge si p > 1 y diverge si p ≤ 1 pues
Z b ½ 1
¡ 1−p ¢
−p 1−p b −1 si p 6= 1
t dt = ,
1 ln (b) si p = 1
½ −1
Rb si p > 1
de donde concluimos que lı́mb→∞ 1 t−p dt = 1−p .
no existe si p ≤ 1
R∞
2. La integral impropia 0 cos (t) dt diverge pues
Z b
cos (t) dt = sin (b) ,
0
Rb
De manera análoga se define integrales impropias de la forma −∞ f (t) dt, y si tenemos una
R∞ Rc
función definida en todo R y las integrales c f (t) dt y −∞ f (t) dt convergen ambas para algún
c, entonces se define Z Z Z
∞ ∞ c
f (t) dt = f (t) dt + f (t) dt.
−∞ c −∞
R∞ −a|t| dt
Ejemplo 193 la integral −∞ e converge solo si a > 0 pues en tal caso si b > 0 entonces
Z Z
b
−a|t|
b
−1 ³ −ab ´ 1
e dt = e−at dt = e − 1 −→ ,
0 0 a b→∞ a
y si c < 0 entonces Z Z
0 0
1 1
e−a|t| dt = eat dt = (1 − eac ) −→ ,
c c a c→−∞ a
R∞
Al igual
R∞ que para series, diremos que la integral a f (t)
R ∞dt converge absolutamente si la
integral a |f (t)| dt converge (y la misma definición para −∞ f (t) dt). Tenemos las siguientes
propiedades:
R∞ R∞
1. RSi c es un número y las integrales a f (t) dt y a g (t) dt convergen ambas, entonces
∞
a (cf (t) + g (t)) dt converge y
Z ∞ Z ∞ Z ∞
cf (t) + g (t) dt = c f (t) dt + g (t) dt.
a a a
Integrales de Fourier 177
R∞
2. Si f (t) ≥ 0 para todo t ≥ a, entonces la integral a f (t) dt converge o el conjunto
Rb R∞
{ a f (t) dt : b > a} no es acotado, y en tal caso se pone a f (t) dt = ∞.
R∞
3. Si 0 ≤ g (t) ≤ f (t) para
R ∞ todo t ≥ a, entoncesR si la integral a f (t) dt convergeR podemos
∞ ∞
decir que la integral a g (t) dt converge, y si a g (t) dt diverge podemos decir a f (t) dt
diverge.
R∞
4. Si la integral a f (t) dt converge absolutamente, entonces converge.
Estas propiedades se demuestran mas o menos así: la primera es porque el límite de la suma
es la suma de los límites y la propiedad vale si en lugar de ∞ ponemos un número b. La segunda
es un poco mas complicada pero en realidad debería ser intuitivamente comprensible: si una
función (real) F (t) es creciente en (a, ∞) entonces si es acotada el lı́mt→∞ F (t)
R t existe, y si no es
acotada lı́mt→∞ F (t) = ∞. Aplicar eso a la función (real creciente) F (t) = a f (x) dx. Para la
Rt Rt
tercera, aplicar el mismo hecho a las funciones crecientes G (t) = a g (x) dx y F (t) = a f (x) dx
y compararlas. Por último, (4) es una aplicación de (3) a las funciones g (t) = f (t) + |f (t)| y
2 |f (t)| , y un poco de álgebra. Notar la absoluta analogía con las propiedades de series.
Veamos ahora un poco las integrales impropias con intervalo finito pero función no acotada:
si f no es acotada en a, se define
Z b Z b
f (t) dt = lı́m f (t) dt
a ε→0+ a+ε
cuando tal límite existe (notar que lo que hacemos es integrar f en intevalitos mas chicos que
[a, b] , y por eso necesitamos que ε tienda a cero por valores positivos). En tal caso, diremos
que la integral impropia converge, mientras que si el límite no existe diremos que la integral
impropia diverge.
Rb
Ejemplo 194 la integral impropia 0 t−p dt converge si p < 1 y diverge si p ≥ 1 pues
Z b ½ 1 ¡ 1−p ¢
−p 1−p b − ε1−p si p =
6 1
t dt = ,
ε ln (b) − ln (ε) si p = 1
de donde concluimos que
Z (
b b1−p
−p 1−p si p < 1
lı́m t dt = .
ε→0+ ε no existe si p ≥ 1
La definición en este tipo de integrales impropias se extiende a todo los casos de manera
obvia. Por ejemplo, si f no es acotada en b entonces
Z b Z b−ε
f (t) dt = lı́m f (t) dt
a ε→0+ a
cuando ambos límites existen. Tenemos propiedades análogas a las anteriores, las enunciamos
para el caso en que f no es acotada en a:
Rb Rb
1. Diremos que la integral a f (t) dt converge absolutamente si la integral a |f (t)| dt con-
verge.
Rb Rb
2. Si c es un número y las integrales a f (t) dt y a g (t) dt convergen ambas, entonces
Rb
a (cf (t) + g (t)) dt converge y
Z b Z b Z b
cf (t) + g (t) dt = c f (t) dt + g (t) dt.
a a a
Rb
3. Si 0 ≤ g (t) ≤ f (t) para todo t ≥ a, entonces si la integral a f (t) dt converge podemos
Rb Rb Rb
decir que la integral a g (t) dt converge, y si a g (t) dt diverge podemos decir a f (t) dt
diverge.
Rb
4. Si la integral a f (t) dt converge absolutamente, entonces converge.
Por último, nos quedan las integrales impropias donde tenemos ambos problemas juntos: ni
la función a integrar es acotada ni el intervalo es finito. Un ejemplo típico de esto es tomar una
función que no es acotada en a y plantear
Z ∞
f (t) dt.
a
Vamos a decir que esta integral impropia converge cuando para algún c > a las integrales
Z c Z ∞
f (t) dt y f (t) dt
a c
R∞ Rc R∞
convergen ambas, y en tal caso a f (t) dt = a f (t) dt+ c f (t) dt (es decir, la dividimos en dos
integrales, y nos queda cada una con un problema). De nuevo, tenemos las mismas propiedades
que ya no vamos a enunciar.
Para terminar, un examen sobre las funciones f : [a, b] → C (variable real e imagen compleja):
en tal caso, descomponemos f = f1 + if2 en su parte real R b e imaginaria,
R b y aplicamos
R b todo lo
anterior a c/u de ellas (recordar que hace mucho definimos a f (t) dt = a f1 (t) dt+i a f2 (t) dt),
y sigue valiendo todo lo mismo. Como ejercicio se podría escribir el caso complejo de integral
con b = ∞.
Integrales de Fourier 179
Cuando comenzamos con Fourier, vimos la idea de definir funciones usando integrales (fun-
ciones de muchas variables, integrando respecto de algunas), y Leibnitz nos enseño a derivarlas.
Ahora vamos a definir funciones usando integrales impropias: por ejemplo si g (x, t) es una
función definida en [a, b] × [c, ∞) tal que para cada x fijo la integral impropia
Z ∞
g (x, t) dt
c
Rconverge,
∞
entonces eso define en [a, b] una nueva función, que le asigna a cada x el valor
c g (x, t) dt.
Las dificultades que se encuentran en este tipo de operaciones son similares a lasRencontradas
∞
en series (notar la similitud de todo lo hecho hasta ahora). De hecho, si la integral c g (x, t) dt
converge, entonces puede ser estudiada como una serie, de la siguiente manera: tomamos una
sucesión de números reales {an }n∈N tales que c = a0 < a1 < a2 < ... y con lı́mn→∞ an = ∞, y
entonces
Z ∞ Z an
g (x, t) dt = lı́m g (x, t) dt
c n→∞ c
"Z Z Z #
a1 a2 an
= lı́m g (x, t) dt + g (x, t) dt + ... + g (x, t) dt
n→∞ c a1 an−1
⎡ ⎤
Xn Z aj ∞ Z
X aj
= lı́m ⎣ g (x, t) dt⎦ = g (x, t) dt.
n→∞ aj−1 aj−1
j=1 j=1
Si llamamos Z an
un (x) = g (x, t) dt,
an−1
180 Integrales de Fourier
queda
Z ∞ ∞
X
g (x, t) dt = un (x) ,
c n=1
∞
X
u0n (x)
n=1
P
converge uniformemente en [a, b] entonces cierto teorema nos dice que ∞ n=1 un (x) es derivable
y Ã∞ ! ÃZ ! Z
∞ ∞
d X X X an
∂ ∞
∂
un (x) = u0n (x) = g (x, t) dt = g (x, t) dt,
dx n=1 n=1 n=1 an−1 ∂x c ∂x
siempre que esta última integral sea convergente, es decir que en tal caso nos quedaría
Z ∞ Z ∞
d ∂
g (x, t) dt = g (x, t) dt.
dx c c ∂x
R∞
Definición 196 diremos que la integral c g (x, t) dt converge uniformemente a F (x) en [a, b]
si
¯ Z r ¯
¯ ¯
dado ε > 0 existe R > 0 tal que ¯¯F (x) − g (x, t) dt¯¯ < ε para todo x ∈ [a, b] , si r ≥ R.
c
Necesitamos un teorema que nos permita derivar e integrar funciones definidas como inte-
grales impropias, y para ello nos hará falta una nueva versión de la regla de Leibnitz. Puesto
que nuestro interés (como se verá mas adelante) está en estudiar
Z ∞ Z ∞
fˆ (ω) = f (t) e−iωt dt y L (f ) (s) = f (t) e−st dt
−∞ 0
donde f será una función que no es necesariamente continua, nuestras versiones anteriores de
Leibnitz, que caracterizan la suavidad de la función definida con una integral en términos de la
suavidad de la función integrada, no nos sirven (como función de t, f (t) e−iωt y f (t) e−st serán
casi siempre discontinuas. Por eso seguimos así:
Nota 197 una función f definida en un intervalo [a, b] se dice continua por tramos en [a, b]
si puedo dividir [a, b] en subintervalos de forma tal que f sea continua en cada uno de ellos, y
con límites laterales en los extremos. Es decir, f es continua por tramos en [a, b] si tiene solo
discontinuidades que son saltos. Si I es un intervalo no acotado, diremos que f es continua por
tramos en I si lo es en todo intervalo [a, b] incluido en I.
Integrales de Fourier 181
Teorema 198 (Regla de Leibnitz, 3ra versión) si f (t) es una función continua por tramos
en [c, d] y h (x, t) es una función definida e integrable en [a, b] × [c, d] , definimos
Z d
F (x) = f (t) h (x, t) dt.
c
Entonces
Ejercicio 199 Idea de la demostración. la misma idea que en las dos versiones anteriores.
Ahora vamos a seguir con el estudio de funciones definidas por integrales impropias, rescatan-
do la idea de convertirlas en series, y utilizando como función a integrar un producto de funciones,
como recién.
Teorema 200 Supongamos que f (t) es una función definida en [c, ∞) y continua por tramos
en [c, ∞).
es derivable en [a, b] , y Z ∞
dF ∂h
(x) = f (t) (x, t) dt.
dx c ∂x
Demostración. vamos a usar el razonamiento de hace un rato para probar las dos afirmaciones.
Tomemos una sucesión de números reales {an }n∈N tales que c = a0 < a1 < a2 < ... y con
lı́mn→∞ an = ∞, y llamemos
Z an
un (x) = f (t) h (x, t) dt,
an−1
entonces
¯Z β Z ∙Z ¸ ¯ ¯Z β Z rZ β ¯
¯ r β ¯ ¯ ¯
¯ F (x) dx − f (t) h (x, t) dx dt¯¯ = ¯ F (x) dx − f (t) h (x, t) dxdt¯¯
¯ ¯
α c α α c α
¯Z β Z βZ r ¯
¯ ¯
= ¯¯ F (x) dx − f (t) h (x, t) dtdx¯¯
α α c
¯Z β µ Z r ¶ ¯
¯ ¯
= ¯¯ F (x) − f (t) h (x, t) dt dx¯¯
α c
Z β ¯µ Z r ¶¯
¯ ¯
≤ ¯ F (x) − f (t) h (x, t) dt ¯¯ dx
¯
α c
ε
< (β − α) < ε,
(b − a)
listo.
Integrales de Fourier 183
∂
2. Si h (x, t) y ∂x h (x, t) son ambas continuas en [a, b] × [c, ∞) entonces Leibnitz nos dice que
R an ∂
R∞
cada un es derivable y u0n (x) = an−1 f (t) ∂x h (x, t) dt , y como la integral c f (t) ∂h
∂x (x, t) dt
converge uniformemente en [a, b] resulta que la serie
∞
X
u0n (x)
n=1
converge uniformemente
P en [a, b] (como el ejercicio del punto (1)). Entonces cierto teorema
nos dice que ∞ u
n=1 n (x) es derivable y
Ã∞ ! ∞ ∞
ÃZ ! Z
d X X
0
X an
∂ ∞
∂
un (x) = un (x) = f (t) h (x, t) dt = f (t) h (x, t) dt,
dx n=1 n=1 n=1 an−1 ∂x c ∂x
donde el último igual vale pues sabemos que la última integral converge.
Nota 201 en el teorema anterior lo que estamos haciendo es trabajar con un caso especial
de función de dos variables: las funciones g (x, t) = f (t) h (x, t) , es decir, lo podríamos haber
enunciado colocando una sola g (x, t) en lugar de f (t) h (x, t) , pero lo hicimos de esta manera
por dos razones: es mas sencillo especificar las hipótesis, y nos va a ser mas útiles cuando
estudiemos Fourier y Laplace.
Es interesante notar, a esta altura, la completa analogía que hay entre los resultados para
funciones definidas por series y funciones definidas por integrales. Y por supuesto que tenemos
también una herramienta para detectar convergencia uniforme de integrales:
Teorema 202 (Test M de Weierstrass para integrales) si g (x, t) es una función defini-
da en [a, b] × [c, ∞), y ϕ (t) es una función continua y positiva en [c, ∞) tal que:
Entonces la integral Z ∞
g (x, t) dt
c
converge absoluta y uniformemente en [a, b].
R∞
Idea de la demostración. que la integral c g (x, t) dt converge absolutamente para todo
x ∈ [a, b] sale de forma inmediata por (1). Para verR r la convergencia uniforme, vamos a suponer
primero que g (x, t) es positiva (así, el número c g (x, t) dt crecerá si r crece). Tomemos una
sucesión de números reales {an }n∈N tales que c = a0 < a1 < a2 < ... y con lı́mn→∞ an = ∞, y
entonces Z ∞ ∞
X
g (x, t) dt = un (x) ,
c n=1
184 Integrales de Fourier
con Z an
un (x) = g (x, t) dt.
an−1
R an R∞
Llamemos Mn = an−1 ϕ (t) dt, entonces (como la integral c ϕ (t) dt converge) tenemos que la
P
serie ∞ n=1 M
Pn∞converge, y además |un (x)| ≤ Mn ∀ x ∈ [a, b] , por lo que Weierstrass me dice
que la serie n=1 un (x) converge uniformemente a F (x) en [a, b] . Ahora, si r > aN entonces
¯ Z ¯ g≥0 Z g≥0 N
X
¯ r ¯ ↓ r ↓
unif.
¯F (x) − ¯
g (x, t) dt¯ = F (x) − g (x, t) dt ≤ F (x) − un (x) −→ 0.
¯ N→∞
c c n=1
Nota 203 todo el material visto para integrales impropias con un extremo infinito se adapta
para todos los otros tipos de integrales impropias, en caso de usar algo distinto lo aclararemos.
Una de las funciones mas célebres definidas usando integrales impropias es sin duda la función
Γ. Para x > 0 se pone Z ∞
Γ (x) = tx−1 e−t dt.
0
Veamos primero que, efectivamente, esa integral impropia converge para todo x > 0: escribimos
Z ∞ Z 1 Z ∞
Γ (x) = tx−1 e−t dt = tx−1 e−t dt + tx−1 e−t dt = I1 (x) + I2 (x) .
0 0 1
I1 (x) es integral impropia solo si 0 < x < 1, pero tomemos un x así fijo, entonces
¯ x−1 −t ¯
¯t e ¯ ≤ tx−1 ∀ t > 0,
y como
Z 1 ∙ ¸t=1
x−1 tx 1
t dt = = ,
0 x t=o x
concluimos por comparación que I1 (x) converge. Veamos ahora I2 (x): como (para cada x > 0
fijo) ¯ ¯
lı́m ¯t2 tx−1 e−t ¯ = lı́m tx+1 e−t = 0
t→∞ t→∞
¯ 2 x−1 −t ¯
(?‘por que?) tenemos que existe N > 0 tal que t t e ¯ ≤ 1 ∀ t ≥ N, y entonces
¯
¯ x−1 −t ¯
¯t e ¯ ≤ 1 ∀ t ≥ N,
t2
Integrales de Fourier 185
Nota 204 Nota: si [a, b] ⊆ (0, ∞) entonces la integral que define Γ converge uniformemente
en [a, b]. Con esto se concluye que Γ es continua en [a, b] , y por lo tanto es continua en (0, ∞)
(ejercicio).
Nota 205 (otra mas) la integral que define Γ diverge para todo x ≤ 0, por lo tanto no se puede
usar para definir Γ en dichos valores.
es decir
Γ (x + 1) = xΓ (x) ∀ x > 0.
R∞ £ ¤t=∞
Además Γ (1) = 0 e−t dt = −e−t t=0 = 1, y entonces
Γ (1) = 1
Γ (2) = 1Γ (1) = 1
Γ (3) = 2Γ (2) = 2
Γ (4) = 3Γ (3) = 6, etc.
En general, queda
Γ (n + 1) = n! ∀ n ∈ N,
es decir, la función Γ es una función continua que interpola los valores de n! pues cada ves que
x ∈ N se tiene que Γ (x + 1) = x!.
Otra cosa interesante es la siguiente: la relación
Γ (x + 1)
Γ (x) =
x
vale para todo x > 0, pero en el miembro de la derecha puedo poner x0 s del intervalo (−1, 0) , así
que defino de esa forma Γ en tal intervalo. Y ahora sigo, y puedo definir Γ en R− {0, −1, −2, −3, ...} .
Por último, calculemos Γ (1/2): haciendo el cambio de variables
1 1 −1
t = y 1/x , dt = y x dy,
x
186 Integrales de Fourier
queda
Z ∞ Z ∞ Z ∞
(x−1)/x −(y 1/x ) 1 1 1 1/x
Γ (x) = x−1 −t
t e dt = y e y x
−1
dy = e−(y ) dy,
0 0 x x 0
y por lo tanto µ ¶ Z ∞ √
1 2 π √
Γ =2 e−y dy = 2 = π.
2 0 2
Γ(x)
5
4
3
2
1
x
-5 -4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4 5
-1
-2
-3
-4
-5
Las series de Fourier resultan muy buenas cuando trabajamos con funciones periódicas, pero
son absolutamente inútiles en otro caso. Como existen funciones no periódicas, vamos a tratar
de acomodar lo que sabemos de series de Fourier para este caso.
Tomemos una función f : R → R (la pensamos con imagen real para fijar ideas, en realidad
todo lo que vamos a hacer sirve para f : R → C) tal que
n=−∞
con
Z p Z p µ Z p ¶
1 −i nπ x 1 −i nπ x 1 −i nπ x π
cn = fp (x) e p dx = f (x) e p dx = f (x) e p dx
2p −p 2p −p 2π −p p
(usamos la variable x pues en los siguientes pasos aparece t como variable independiente).
Denotemos
nπ
wn = = frecuencia del n-ésimo armónico,
p
entonces la diferencia de frecuencia entre dos armónicos consecutivos es
(n + 1) π nπ π
wn+1 − wn = − = = ∆w,
p p p
que no depende de n, y la serie de fp queda
X∞ µ Z p ¶
1 −iwn x
fp (t) ∼ f (x) e dx eiwn t ∆w.
n=−∞
2π −p
donde wn es el extremo derecho del intervalo [wn−1 , wn ] . Notar que dichos intervalos cubren
todo R, y que ∆w → 0 cuando p → ∞, y que la suma anterior es una suma de Riemman de la
integral de Fp en todo R. ¯ ¯
Por otro lado, notar que ¯f (t) e−iwt ¯ = |f (t)| y por lo tanto la integral impropia
Z p Z ∞
1 1
lı́m f (x) e−iwx dx = f (x) e−iwx dx = C (w)
p→∞ 2π −p 2π −∞
(el problema que tenemos con la suma de Riemman es que la función sobre la cual calculo la
suma cambia cuando p → ∞). Para finalizar, si tomamos un t donde f sea continua y luego un
p > t, tenemos que
∞
X
fp (t) = Fp (wn ) ∆w
n=−∞
Teorema 206 R ∞Si f es una función real definida en R, Dirichlet en todo intervalo [a, b] y tal
que la integral −∞ |f (t)| dt converge, entonces la integral
Z ∞ ∙ Z ∞ ¸
1 −iwt
f (t) e dt eiwt dw
−∞ 2π −∞
1
vale exactamente f (t) en los t0 s donde f es continua, y 2 [f (t+ ) + f (t− )] en los t0 s donde f es
discontinua.
Si f es (de imagen) compleja y sus partes real e imaginaria cumplen ambas con las hipótesis
anteriores, entonces se obtiene la misma conclusión sobre f . La integral anterior suele llamarse
la integral compleja de Fourier de f .
De la misma forma que podemos expresar una serie de Fourier usando exponenciales com-
plejas o senos y cosenos, podemos expresar la integral de Fourier. Nosotros comenzamos con la
integral de Fourier usando exponencial, ahora pasaremos esta a una forma con senos y cosenos.
Para mayor claridad, vamos a suponer que f : R → R, es decir que f es real (este es en realidad
el único caso de interés, aunque en realidad yo no vi nunca usado esto para nada).
Entonces, cuando tomamos f en las hipótesis del teorema anterior, resulta que en todos los
t0 s donde f es continua
Z ∞∙ Z ∞ ¸ Z ∞Z ∞
1 −iwx iwt 1
f (t) = f (x) e dx e dw = f (x) e−iwx eiwt dxdw
−∞ 2π −∞ 2π −∞ −∞
Z ∞Z ∞
1
= f (x) eiw(t−x) dxdw
2π −∞ −∞
Z ∞Z ∞
1
= f (x) [cos (w (t − x)) + i sin (w (t − x))] dxdw
2π −∞ −∞
Z ∞Z ∞ Z ∞Z ∞
1 i
= f (x) cos (w (t − x)) dxdw + f (x) sin (w (t − x)) dxdw.
2π −∞ −∞ 2π −∞ −∞
Puesto que f es real, concluimos que necesariamente
Z ∞Z ∞
1
f (x) i sin (w (t − x)) dxdw = 0,
2π −∞ −∞
de donde queda
Z ∞Z ∞ Z Z
1 1 ∞ ∞
f (t) = f (x) cos (w (t − x)) dxdw = f (x) cos (w (t − x)) dxdw =
2π −∞ −∞ π 0 −∞
| {z }
función par de w
Z ∞Z ∞
1
= f (x) [cos (wt) cos (−wx) − sin (wt) sin (−wx)] dxdw =
π 0
Z ∞ Z−∞∞
1
= f (x) [cos (wt) cos (wx) + sin (wt) sin (wx)] dxdw =
π 0 −∞
Z Z Z Z
1 ∞ ∞ 1 ∞ ∞
= f (x) cos (wt) cos (wx) dxdw + f (x) sin (wt) sin (wx) dxdw =
π 0 −∞ π 0 −∞
Z ∙Z ∞ ¸ Z ∙Z ∞ ¸
1 ∞ 1 ∞
= f (x) cos (wx) dx cos (wt) dw + f (x) sin (wx) dx sin (wt) dw.
π 0 −∞ π 0 −∞
Si llamamos
∙Z ∞ ¸ ∙Z ∞ ¸
A (w) = f (x) cos (wx) dx y B (w) = f (x) sin (wx) dx
−∞ −∞
queda Z Z
1 ∞ 1 ∞
f (t) = A (w) cos (wt) dw + B (w) sin (wt) dw,
π 0 π 0
que es la forma trigonométrica de la integral de Fourier. Notar las absolutas analogías con la serie
de Fourier (como se transforma la integral doble en una integral con un solo extremo infinito,
como se construyen A (w) y B (w) y como se reconstruye f a partir de ellos, etc.
190 Integrales de Fourier
Un análisis cuidadoso de lo hecho revela que tomamos una función f (t) , con ella construimos
una nueva función que llamamos C (w) , y con esta función podíamos recuperar f a través
de cierta integral. La constante 1/2π que aparecía en C (w) quedó ahí de manera natural,
al introducir las integrales de Fourier a partir de las series de Fourier. De aquí en adelante
usaremos
R∞ la siguiente notación: si f (t) es una función absolutamente integrable en R (es decir,
−∞ |f (t)| dt converge), la transformada de Fourier de f es
Z ∞
fˆ (w) = f (t) e−iwt dt = F (f ) (w)
−∞
Ejemplo 208
es fˆ (w) = 1
a+iw .
2. Si ½
1 si |t| ≤ a
f (t) = , (a > 0)
0 si |t| > a
entonces
Z ∞ Z a ∙ ¸t=a
e−iwt eiwa − e−iwa sin (wa)
fˆ (w) = −iwt
f (t) e dt = −iwt
e dt = − =− =2 .
−∞ −a iw t=−a iw w
Integrales de Fourier 191
A continuación vamos a dar una lista con las propiedades mas usadas de la transformada de
Fourier. Para todas ellas asumimos que las funciones involucradas son absolutamente integrales
en R y Dirichlet en todo intervalo de R.
1. F es un operador lineal, es decir, F (af + g) = aF (f ) + F (g) para f, g funciones y a un
número real:
Z ∞ Z ∞
F (af + g) (w) = a (f + g) (t) e−iwt dt = (af (t) + g (t)) e−iwt dt =
Z ∞ −∞ Z ∞ −∞
¡ ¢
6. Corrimiento en frecuencia. Si w0 ∈ R entonces F eiw0 t f (t) (w) = F (f ) (w − w0 ):
Z ∞ Z ∞
¡ iw0 t
¢ iw0 t −iwt
F e f (t) (w) = e f (t) e dt = f (t) e−i(w−w0 )t dt = F (f ) (w − w0 ) .
−∞ −∞
1
7. Modulación. F (f (t) cos (w0 t)) (w) = 2 [F (f ) (w − w0 ) + F (f ) (w + w0 )]:
Z ∞ Z ∞¶ µ
−iwteiw0 t + e−iw0 t
F (f (t) cos (w0 t)) (w) = f (t) cos (w0 t) e dt = f (t) e−iwt dt
−∞ −∞ 2
Z Z
1 ∞ 1 ∞
= f (t) eiw0 t e−iwt dt + f (t) e−iw0 t e−iwt dt.
2 −∞ 2 −∞
Las siguientes dos propiedades requieren hipótesis adicionales a las que hemos supuesto,
de entrada, que teníamos:
¯∂ ¯
Como ∂w∂
(fR(t) h (w, t)) = −itf (t) e−iwt , entonces ¯ ∂w f (t) h (w, t)¯ ≤ |tf (t)| ∀ t ∈ R y
∞
∀ w ∈ R, y −∞ |tf (t)| dt converge, por lo que Weierstrass dice que la integral
Z ∞
∂
(f (t) h (w, t)) dt
−∞ ∂w
converge uniformemente en R, y por lo tanto (por el teo sobre funciones definidas con
integrales impropias) fˆ es derivable en R y
Z ∞ Z ∞
d ˆ ∂
f (w) = (f (t) h (w, t)) dt = −itf (t) e−iwt dt = F (−itf (t)) (w) .
dw −∞ ∂w −∞
Los residuos son muy útiles para calcular cierto tipo de integrales impropias. Veamos el
siguiente ejemplo: supongamos que f (z) es analítica en el semiplano {z : Im (z) ≥ 0} salvo
por singularidades aisladas z1 , ..., zn en dicho semiplano, ninguna con parte imaginaria nula. Sea
R tal que |zj | ≤ R ∀ j = 1, ..., n y consideremos la curva cerrada simple CR formada por el
segmento de recta real [−R, R] y la mitad superior ΓR del círculo |z| = R, recorrida en sentido
antihorario.
ΓR
z4
z3
z1
z2 zn
-R R
es decir,
Z Z n
X
f (z) dz + f (z) dz = 2πi Res (f, zj ) ∀ R ≥ R0 .
[−R,R] ΓR j=1
y la igualdad anterior nos sugiere que si pedimos condiciones sobre f como para que
Z
lı́m f (z) dz = 0,
R→∞ ΓR
Teorema 210 si f (z) es una función analítica en el semiplano {z : Im (z) ≥ 0} salvo por
singularidades aisladas z1 , ..., zn (en dicho semiplano), ninguna con parte imaginaria nula, y tal
que lı́mR→∞ RMf (R) = 0. Entonces
Z ∞ n
X
f (t) dt = 2πi Res (f, zj ) .
−∞ j=1
Notar que la condición “lı́mR→∞ RMf (R) = 0” nos dice, grosso modo, que f debe decrecer
en infinito mas rápido que la función 1/R.
¯ 2 ¯
Ejemplo 211 tomemos f (z) = 1+z 1 ¯ ¯
2 , entonces f tiene polos simples en ±i, y como z + 1 ≥
¯ 2¯
¯z ¯ − 1 (al menos para z : |z| ≥ 2), entonces Mf (R) ≤ 21 y
R −1
R
0 ≤ lı́m RMf (R) ≤ lı́m = 0.
R→∞ R→∞ R2 − 1
Además
1 1 1
Res (f, i) = lı́m (z − i) = lı́m = ,
z→i 1 + z 2 z→i z + i 2i
y el teorema anterior dice que
Z ∞
1 1
2
dt = 2πi = π.
−∞ 1+t 2i
Este ejemplo no es interesante por si, solo ilustra la forma en que se usa el teorema.
Integrales de Fourier 195
Si denotamos Γ̃R = {z : |z| = R, Im (z) ≤ 0} y M̃f (R) = máx{|f (z)| : z ∈ Γ̃R }, de manera
análoga se prueba (ejercicio) el siguiente:
Teorema 212 si f (z) es una función analítica en el semiplano {z : Im (z) ≤ 0} salvo por
singularidades aisladas z̃1 , ..., z̃m (en dicho semiplano), ninguna con parte imaginaria nula, y tal
que lı́mR→∞ RM̃f (R) = 0. Entonces
Z ∞ m
X
f (t) dt = −2πi Res (f, z̃j ) .
−∞ j=1
El signo menos que lo diferencia del teorema anterior viene de que, al considerar la curva
adecuada (el segmento [−R, R] seguida del semicírculo Γ̃R en sentido antihorario), la integral
sobre el eje real queda con los extremos invertidos.
Nuestro interés esta en usar esta técnica para calcular transformadas de Fourier, es decir,
aplicarla a las funciones del tipo f (z) e−iωz . Supongamos que quiero calcular fˆ (ω) donde f (t)
es una función que es la restricción a R de una función analítica en el semiplano {z : Im (z) ≥ 0}
salvo por singularidades aisladas z1 , ..., zn en dicho semiplano, ninguna con parte imaginaria
nula. Primero notar que las singularidades de la función f (z) e−iωz son exactamente las mismas
que las de f . Tomemos ω ≤ 0 y z = x + iy con y ≥ 0, entonces
¯ −iωz ¯ ¯¯ −iω(x+iy) ¯¯
¯e ¯ = ¯e ¯ = eωy ≤ 1,
y entonces ¯ ¯
0 ≤ máx{¯f (z) e−iωz ¯ : z ∈ ΓR } ≤ máx{|f (z)| : z ∈ ΓR }.
Entonces si f es tal que (con la notación de antes) lı́mR→∞ RMf (R) = 0, resulta que
Z ∞ n
X ¡ ¢
ˆ
f (ω) = f (t) e−iωt
dt = 2πi Res f (z) e−iωz , zj ∀ ω ≤ 0.
−∞ j=1
1
Ejemplo 213 Consideremos la función f (t) = 1+t 2 , t ∈ R, que es la restricción a R de la
1
función f (z) = 1+z2 , z ∈ C − {±i}. Por las consideraciones hechas en el ejemplo anterior,
resulta µ −iωz ¶
e eω
fˆ (ω) = 2πiRes , i = 2πi ∀ ω ≤ 0,
1 + z2 2i
y µ −iωz ¶
ˆ e e−ω
f (ω) = −2πiRes , −i = −2πi ∀ ω ≥ 0,
1 + z2 −2i
es decir
fˆ (ω) = πe−|ω| ∀ ω ∈ R.
196 Integrales de Fourier
Estos resultados se pueden mejorar, ya que las condiciones sobre decrecimiento de la función
son innecesariamente
¯ restrictivas:
¯ notar que cuando pedimos ω ≤ 0 utilizamos que (en dicho
caso, para y ≥ 0), ¯e−iωz ¯ ≤ 1. Esta cota no puede mejorarse, pero el procedimiento general si,
estudiando cuidadosamente la integral
Z
f (z) e−iωz dz.
ΓR
Parametricemos ΓR por medio de γ R (t) = Reit , t ∈ [0, π] , de forma tal que γ 0 (t) = iReit , y
Z Z π
−iωz
¡ ¢ it
f (z) e dz = f Reit e−iωRe iReit dt.
ΓR 0
Como ¯ ¯ ¯ ¯
¯ −iωReit ¯ ¯ −iωR(cos t+i sin t) ¯
¯ e ¯ ¯
= e ¯ = eωR sin t
resulta ¯ ¡ ¢ ¯
¯ it ¯
¯f Reit e−iωRe iReit ¯ ≤ RMf (R) eωR sin t ∀ t ∈ [0, π]
(seguimos usando la misma notación para Mf (R)), y entonces
¯Z ¯ Z π Z
¯ ¯ π
¯ f (z) e−iωz ¯
dz ¯ ≤ RMf (R) eωR sin t
dt = RMf (R) eωR sin t dt.
¯
ΓR 0 0
en donde en la primer igualdad hemos usado que la función eωR sin t es simétrica en [0, π] respecto
del eje t = π/2 (por la simetría de la función sin t).
ωR sin(t)
e
1
Esta desigualdad, aplicada a los métodos del comienzo de esta sección, implica de manera
inmediata el siguiente teorema:
Teorema 214
Dos comentarios (relacionados): primero, notar que hemos perdido el caso ω = 0. Eso no sería
una limitación muy severa si pudiéramos asegurar que fˆ es continua en ω = 0, lo cual ocurre si
f es absolutamente integrable en R. Lo segundo, todas las integrales en el intervalo (−∞, ∞) de
esta sección se tomaron como límite de integrar en el intervalo (−R, R) , lo cual no coincide con
nuestra definición (que era integrar, de manera independiente, en los intervalos (−∞, 0) y (0, ∞) ,
y sumar), y no es lo mismo. A este tipo de integral se lo suele llamar el valor principal (o valor
principal de Cauchy), y lo que si es cierto es que si f es absolutamente integrable en R, entonces
el valor principal da lo mismo que la integral. De cualquier manera, se usa el valor principal en
lugar de integrar en cada intervalo y sumar cuando este último procedimiento no funciona. En
resumen, tenemos dos pequeños problemas que se solucionan si f es absolutamente integrable
en R. Desafortunadamente, los casos mas interesantes de aplicación del teorema anterior viene
de cuando f no es absolutamente integrable, pues en general si f es absolutamente integrable
en R, decrece lo suficientemente rápido como para poder aplicar las fórmulas anteriores a este
teorema para calcular fˆ.
t z
Ejemplo 215 tomar f (t) = 1+t 2 , que es la restricción a R de la función f (z) = 1+z 2 analítica
en C − {±i}. El teorema anterior dice que
µ ¶ µ ¶
ze−iωz ze−iωz ieω
fˆ (ω) = 2πiRes ,i = 2πi lı́m = 2πi = iπeω ∀ ω < 0,
1 + z2 z→i z+i 2i
198 Integrales de Fourier
y
µ ¶ µ −iωz ¶
ze−iωz ze −ie−ω
fˆ (ω) = −2πiRes , −i = −2πi lı́m = −2πi = −iπe−ω ∀ ω > 0,
1 + z2 z→−i z−i −2i
Transformada de Laplace
La transformada L (f ) de una función f es una nueva función (de s), cuyo dominio dependerá,
en general, de f . De manera análoga a lo hecho con la transformada de Fourier, vamos a pensar
en L como un operador que transforma una función f (t) en una nueva función L (f ) (s). Si F (s)
es una función tal que F (s) = L (f ) (s) , entonces diremos que f es la transformada de Laplace
inversa de F, y denotaremos este hecho por f (t) = L−1 (F ) (t).
199
200 Transformada de Laplace
Puesto que para s ≤ a la integral diverge, tenemos que el dominio de L (f ) (s) es el intervalo
1 1
(a, ∞), y en tal intervalo vale L (f ) (s) = s+a (ojo, no confundir a L (f ) (s) con s+a : el dominio
de la última función incluye estríctamente al de la primera). Con la notación de arriba, en este
caso tendríamos que µ ¶
1
e−at = L−1 (t) .
s+a
1
-at
e s+a
-a
Nota 218 puesto que para calcular la transformada de Laplace solo necesitamos una función
definida en [0, ∞), pero esto suele ser una limitación a la hora de realizar otros procedimientos,
se suele pensar que las funciones involucradas valen 0 en (−∞, 0) . De aquí en mas tomaremos
esa convención.
Esta propiedad nos dice que f “no crece mas rápido que una exponencial”. Notar que en
la definición no se hace hincapié en encontrar las constantes mas chicas con esa propiedad. Por
10
ejemplo, la función f (t) = t10 ¯es de
¯ orden exponencial con exponente 1, pues como lı́mt→∞ tet =
¯ 10 ¯
0 se tiene que ∃ T ≥ 0 tal que ¯ tet ¯ ≤ 1 si t ≥ T, y entonces t10 ≤ et si t ≥ T (una mejora leve de
este razonamiento muestra que cualquier polinomio es de orden exponencial con exponente α,
2
cualquiera sea α > 0, ejercicio). Por otro lado la función f (t) = e(t ) no es de orden exponencial
2
( e(t ) ≤ M eαt es equivalente a t2 − αt ≤ ln (M ) , la cual no es válida en ningún intervalo del
tipo [T, ∞).
Si tenemos |f (t)| ≤ M eαt ∀ t ≥ T y además sabemos que f es acotada en [0, T ] , entonces
se puede ver (ejercicio) que existe M̃ tal que |f (t)| ≤ M̃ eαt ∀ t ≥ 0. En particular esto es
Transformada de Laplace 201
cierto cuando f es continua por tramos en [0, ∞). Puesto que nosotros vamos a trabajar en
toda esta sección con funciones continuas por tramos en [0, ∞), tomaremos esto como función
de orden exponencial (de hecho, la razón por la cual no se define así directamente es para evitar
disidencias con la mayoría de los textos que tratan el tema).
Ejemplo 220
PN n
1. Los polinomios p (t) = n=0 an t son funciones de OE (α) para cualquier α > 0.
2. Las funciones acotadas son de OE (α) para cualquier α > 0, en particular las funciones
periódicas lo son.
Rt
3. Si f (t) es de OE (α) y continua por tramos en [0, ∞), y g (t) = 0 f (x) dx, entonces g es
de OE (β) , con β = máx (α, 0) (ejercicio).
4. Si f (t) es derivable³ y de 0
2
´ OE (α) entonces f (t) puede no serlo, por ejemplo considerar la
función f (t) = sin et .
Teorema 221 Si f es continua por tramos en [0, ∞) y de orden exponencial, con |f (t)| ≤
M eαt ∀ t ≥ 0, entonces la transformada de Laplace de f, L (f ) (s) existe para todo s > α, es
una función continua en el intervalo (α, ∞) , y
M
|L (f ) (s)| ≤ .
s−α
¯ ¯
Demostración. puesto que |f (t)| ≤ M eαt , entonces ¯f (t) e−st ¯ ≤ M eαt e−st = M e−(s−α)t ∀ t ≥
0. Como la función M e−(s−α)t es integrable en (0, ∞) si y solo si α > s, concluimos que, para
todo s > α, la función f (t) e−st es absolutamente integrable en (0, ∞) , y
¯Z ∞ ¯ Z ∞
¯ ¯ ¯ ¯
|L (f ) (s)| = ¯¯ −st ¯
f (t) e dt¯ ≤ ¯f (t) e−st ¯ dt ≤
0 0
Z " #t=∞
∞
−(s−α)t M e−(s−α)t M
≤ Me dt = − = .
0 s−α s−α
t=0
Para ver que L (f ) (s) es continua en (α, ∞) vamos a ver que es continua en todo intervalo de
la forma [α1 , ∞) con α1 > α (ejercicio, mostrar que con esto alcanza). Para ello, notar que,
¯ ¯
¯f (t) e−st ¯ ≤ M e−(s−α)t ≤ M e−(α1 −α)t ∀ t > 0 y ∀ s ≥ α1 ,
202 Transformada de Laplace
R∞
como 0 M e−(α1 −α)t dt converge, el test M de Weierstrass (para integrales) nos dice que la
integral que define a L (f ) (s) converge absolutamente, y uniformemente en [α1 , ∞), y entonces
cierto teorema (de funciones definidas usando integrales impropias) nos dice que L (f ) (s) es
continua en dicho intervalo.
Es importante destacar que las hipótesis que se piden en el teorema son suficientes pero
no necesarias, es decir, existen funciones que no cumplen tales hipótesis y sin embargo tienen
transformada de Laplace. De cualquier manera, dentro de las hipótesis puestas entran la mayoría
de los casos que se presentan en el uso de la transformada. Otra cosa: la desigualdad que incluye
el teorema dice que la transformada de Laplace decrece cuando s → ∞ “al menos tan rápido”
como 1/s. Esta última afirmación debe tomarse en el mismo sentido que cuando hablamos de la
velocidad con la que decrecen los coeficientes de Fourier de una función.
Ejemplo 222
y la integral diverge si s ≤ 0.
2. Si f (t) = ta ∀ t ≥ 0, donde a > −1, entonces haciendo el cambio de variables x = st, para
s > 0, queda
Z Z ∞³ Z
∞
x ´a −x dx 1 ∞
Γ (a + 1)
L (f ) (s) = ta e−st dt = e = a+1 xa e−x dx = ,
0 0 s s s 0 sa+1
n!
L (tn ) (s) = ∀ s > 0.
sn+1
Demostración.
Z ∞ Z ∞ Z ∞
−st −st
L (af + g) (s) = (af + g) (t) e dt = a f (t) e dt + g (t) e−st dt
0 0 0
= aL (f ) (s) + L (g) (s) ,
EjemploPN224 combinando
n
la propiedad anterior con uno de los ejemplos, concluimos que se
p (t) = n=0 an t (un polinomio de grado N ), entonces
ÃN ! N N
X X X n!
n n
L (p) (s) = L an t (s) = an L (t ) (s) = an n+1 .
s
n=0 n=0 n=0
Demostración. Demo: en estas hipótesis podemos usar integración por partes; entonces para
s > α se tiene que
Z ∞ Z ∞
¡ ¢ £ ¤t=∞
L f 0 (s) = f 0 (t) e−st dt = f (t) e−st t=0 − f (t) (−s) e−st dt.
0 0
£ ¤
Por ser f continua en [0, ∞) resulta f (t) e−st t=0 = f (0) , y por ser de OE (α) y s > α resulta
£ ¤t=∞
f (t) e−st = 0, y entonces queda
¡ ¢
L f 0 (s) = −f (0) + sL (f ) (s) .
Nota 226 Nota: es común encontrar en la propiedad anterior, f (0) reemplazado por f (0+ ) ,
que es por definición lı́mt→0+ f (t) El significado es el mismo que le damos nosotros, ya que al
pedir que f sea continua en [0, ∞), nos estamos refiriendo de manera tácita a un límite lateral
en 0. Utilizando tal notación , podemos pedir f continua en (0, ∞) , y (conservando las otras
hipótesis) tendríamos como conclusión que L (f 0 ) (s) = sL (f ) (s) − f (0+ ).
Ejemplo 228 Si f (t) = sin (ωt) , entonces f 0 (t) = ω cos (ωt) , y f (0) = 0, y entonces
1 ¡ 0¢ 1 ω s
L (cos (ωt)) (s) = L f (s) = s 2 2
= 2 .
ω ω s +ω s + ω2
La propiedad anterior es una de las mas importantes para el uso que nosotros le vamos a
dar a la transformada de Laplace: la resolución y estudio de sistemas modelados con ecuaciones
diferenciales, fundamentalmente por ecuaciones lineales con coeficientes constantes. Veamos el
siguiente ejemplo: tenemos el problema de condiciones iniciales
½
x00 + bx0 + cx = f (t)
.
x (0) = x0 , x0 (0) = y0
Asumiendo que se dan las condiciones necesarias, tomando transformada de Laplace queda
¡ ¢
L x00 + bx0 + cx = L (f ) ,
Lo notable de esto es que el miembro de la derecha es conocido, por lo cual sin resolver la
ecuación, sabemos exactamente cuanto vale la transformada de Laplace de la solución (la única
solución que satisface las condiciones iniciales). De aquí siguen dos alternativas posibles: en-
contrar x “invirtiendo” el operador L, o sin encontrar x, deducir sus propiedades a partir de
su transformada de Laplace. Ambos caminos son muy usados, y ambos dependen de un hecho
fundamental: la transformada de Laplace de una función la determina por completo, según el
siguiente teorema:
Teorema 229 (Lerch) Si f y g son funciones continuas por tramos en [0, ∞) y de OE (α) ,
y L (f ) (s) = L (g) (s) ∀ s ≥ s0 , entonces f (t) = g (t) ∀ t > 0, salvo posiblemente en los puntos
donde f y/o g sean discontinuas.
Transformada de Laplace 205
Demostración. Escapa al alcance de este curso,se puede ver una en Kreider, Koler, Ostberg,
Perkins “Introducción al Análisis Lineal”. De cualquier manera, es importante notar que tanto
el resultado como su demostración son similares a lo que teníamos para transformada de Fourier.
El teorema anterior nos permite hablar con mas autoridad del operador L−1 que men-
cionamos mas arriba. Si φ (s) es una función definida en el intervalo (α, ∞) y sabemos que
φ (s) = L (f ) (s) , entonces, salvo posiblemente por valores puntuales, f es la única función
(continua por tramos en [0, ∞) y de OE) con esa propiedad, y se pone f (t) = L−1 (φ) (t).
La diferencia fundamental con la transformada de Fourier, es que para esta teníamos una
fórmula para³la´transformada inversa, es decir, una fórmula para encontrar f a partir de fˆ
1
(f (t) = 2π F fˆ (−t)). El único camino que tenemos (por ahora) para invertir la transformada
de Laplace es por verificación directa, tanto en transformada de funciones específicas como en
las propiedades del operador L. De aquí en adelante enunciaremos cada propiedad del operador
L con la correspondiente equivalente para L−1 .
Ejemplo 230 1. La linealidad del operador L implica la linealidad del operador L−1 , cuando
se restringe el dominio de L de forma tal que sea invertible. Es decir, L−1 (aφ1 + φ2 ) =
aL−1 (φ1 ) + L−1 (φ2 ).
¡ ¢
2. L−1 1s = 1. En rigor, deberíamos poner “si φ es una función cuyo dominio es el intervalo
(0, ∞) y en dicho dominio φ (s) = 1s , entonces L−1 (φ) (t) = 1 ∀ t > 0, pero semejantes
consideraciones no aportan demasiado y complican enormemente nuestra tarea.
³P ´ P ¡ n! ¢ P
N N
3. L−1 an
n=0 sn+1 =
an −1
n=0 n! L sn+1
(t) = N an n
n=0 n! t .
³ ´
ω
4. L−1 s2 +ω 2 = sin (ωt).
5. Supongamos que f es continua en [0, ∞), de OE (α) , f (0) = 0, y que f 0 existe en “casi
todo punto”, es continua por tramos en [0, ∞) y de OE (α) . Entonces si φ (s) = L (f ) (s) ,
luego
L−1 (sφ (s)) = f 0
Esto tiene poca utilidad práctica (para invertir sφ (s)) ya que las hipótesis en general son
imposibles de verificar. Lo que suele hacerse (si se tiene f = L−1 (φ)) y se quiere invertir
sφ (s) es calcular f 0 , y luego calcular L (f 0 ) (s) y ver si efectivamente da sφ (s). Debido a
que en la mayoría de las aplicaciones la variable t representa al tiempo y la variable s a
la frecuencia, este ejemplo suele leerse como “multiplicar en frecuencia por s es lo mismo
que derivar en t”.
Rt
Demostración. primero, notar que la función g (t) = 0 f (r) dr es continua y de OE (máx (α, 0)) ,
por lo cual tiene sentido calcular su transformada de Laplace. Además g 0 (t) = f (t) en casi todo
punto, y g (0) = 0, por lo cual la propiedad 2 nos dice que
¡ ¢
L g 0 (s) = sL (g) (s) ∀ s > máx (α, 0) ,
ω
Ejemplo 233 puesto que L (sin (ωt)) (s) = s2 +ω 2 , entonces
µ ¶ Z t
1 ω 1
L−1 2 2
(t) = sin (ωr) dr = (1 − cos (ωt))
ss +ω 0 ω
0 0 a
Esta función es muy útil cuando se trabaja con trasformada de Laplace, pues nos da una
notación sencilla para “pensar” que las funciones con las que trabajamos están definidas como
cero en el intervalo (−∞,
¡ 1 ¢0): basta con tomar f (t) u (t) en lugar de f (t) (recordar el comentario
hecho al calcular L −1
s , que según nuestra convención da u y no 1). Por ejemplo, cuando
n!
calculamos L (tn ), lo correcto hubiera sido poner L (u (t) tn ) (s) = sn+1 ∀ s > 0. Pero mas allá
de las formalidades, tiene muchas otras virtudes porque puede usarse como un “interruptor” que
enciende cierta señal en un instante a: puesto que
½
0 si t < a
f (t) ua (t) = ,
f (t) si t ≥ a
Transformada de Laplace 207
resulta que si quiero escribir que a una señal g (t) se le agrega otra señal f (t) en el instante a, la
señal resultante será g (t) + f (t) ua (t). Esto es particularmente útil en el modelado de sistemas
donde diferentes fuerzas actúan en diferentes instantes de tiempo.
Otro uso frecuente de la función ua es para desplazar funciones en su variable: la función
f (t − a) ua (t) tiene la misma gráfica que f (t) u (t) pero con el cero en a
f(t) ua (t)f(t-a)
0 0 a
Ejemplo 234 Cuando uno quiere “filtrar” una señal f (t) y dejarla solo para cierto intervalo
de tiempo [a, b), como ⎧
⎨ 0 si t < a
ua (t) − ub (t) = 1 si a ≤ t < b ,
⎩
0 si t ≥ b
la señal filtrada queda f (t) [ua (t) − ub (t)].
f(t)
ua(t) − ub (t) f(t)(ua(t) − ub (t))
1 1
0 a b 0 a b
Demostración.
Z ∞ Z ∞
¡ at ¢ at −st
L e f (t) (s) = f (t) e e dt = f (t) e−(s−a)t dt = L (f ) (s − a) .
0 0
6
¡ ¢ 6
¡ ¢
Ejemplo 237 1. Si φ (s) = (s+4)4
, entonces como L t3 (s) = s4
, resulta φ (s) = L t3 (s + 4) ,
y entonces µ ¶
6
L−1 = e−4t t3 .
(s + 4)4
s
2. Puesto que L (cos (2t)) (s) = s2 +4
,
se tiene que
µ ¶
−1 s−8
L = e8t cos (2t) .
(s − 8)2 + 4
Nota importante 241 el resultado anterior no es válido si a < 0, probar por ejemplo con
la función f (t) = t + 3 y a = −3. El problema en realidad viene de que cuando uno dice
“f (t) = t + 3” tiende a olvidar que en realidad queremos decir f (t) = (t + 3) u (t). Otro tema
delicado con la propiedad anterior, es que es muy común confundir f (t) con f (t − a) , y la
propiedad anterior no dice que L (f (t) ua (t)) (s) = e−as L (f ) (s) , y en general esa igualdad no
Transformada de Laplace 209
es cierta. Si tenemos que calcular L (f (t) ua (t)) (s) para cierta función f, lo que se suele hacer es
llamar g (t − a) = f (t) , es decir, construyo una nueva función que vale g (t) = f (t + a) ∀ t ≥ 0
(¡y cero para t < 0!), y entonces
(como calcular L (g) es otra cuestión, que se resuelve caso por caso).
¡ ¢
Ejemplo 242 Para calcular L t2 u3 (t) (s) , hacemos g (t − 3) = t2 , es decir, g (t) = (t + 3)2 ,
y entonces
¡ ¢ ³ ´ ¡¡ ¢¢
L t2 u3 (t) (s) = e−3s L (t + 3)2 (s) = e−3s L t2 + 6t + 9 (s) =
∙ ¸
−3s
£ ¡ 2¢ ¤ −3s 2 6 9
= e L t (s) + L (6t) (s) + L (9) (s) = e + + .
s3 s2 s
Que carajo pongo, ah? Que ya tenemos experiencia derivando e integrando funciones definidas
por medio de integrales impropias, así que en esta sección tendremos resultados similares a los
vistos en Fourier?
d
L (f ) (s) = −L (tf (t)) (s) ∀ s > α.
ds
Demostración. Para R ∞ poder∂ utilizar
¡ −st ¢ el teorema que nos permite derivar dentro de la integral,
necesitaríamos que 0 f (t) ∂s e dt converja uniformemente en (α, ∞) , lo cual en general no
es cierto. Por lo tanto apelaremos al mismo truco que usamos para ver que L (f ) (s) es continua
en (α, ∞): vamos a ver que L (f ) (s) es derivable en todo intervalo de la forma (α1 , ∞) , con
α1 > α, y con eso basta (ejercicio). Para ver esto, notar que si |f (t)| ≤ M eαt , entonces
¯ ¯
¯ ¡ ¢¯ ¯ ¯
¯f (t) ∂ e−st ¯ = ¯tf (t) e−st ¯ ≤ |t| M eαt e−st ≤ |t| M eαt e−α1 t ∀ t > 0 y ∀ s ≥ α1 ,
¯ ∂s ¯
R∞
como 0 M te−(α1 −α)t dt converge, el test M de Weierstrass (para integrales) nos dice que la
R∞ ∂
¡ −st ¢
integral 0 f (t) ∂s e dt converge absolutamente, y uniformemente en (α1 , ∞), y entonces
210 Transformada de Laplace
∂
¡ −st ¢
(puesto que ∂s e es continua en todo su dominio) cierto teorema (de funciones definidas
usando integrales impropias) nos dice que L (f ) (s) es derivable en dicho intervalo, y que
Z ∞ Z ∞
d ∂ ¡ −st ¢
L (f ) (s) = f (t) e dt = (−t) f (t) e−st dt = −L (tf (t)) (s) .
ds 0 ∂s 0
Corolario 246 (otro mas) Si f es continua por tramos en [0, ∞) y de OE (α) , entonces
L (f ) (s) tiene derivadas de todos los ordenes en (α, ∞) y ∀ n ∈ N vale que
dn
L (f ) (s) = (−1)n L (tn f (t)) (s) ∀ s > α.
dsn
Demo: inducción en n usando la propiedad 7. Lo notable de esto es que vale bajo las mis-
mas hipótesis para f, es decir, no importa si nuestra función es discontinua o si tiene infinitas
derivadas, siempre su transformada de Laplace (tal como las funciones analíticas) tiene infinitas
derivadas.
Corolario 247 (deo otro corolario) En las hipótesis de la propiedad anterior, si φ (s) =
L (f ) (s) , entonces ³ ´
L−1 φ(n) (s) (t) = (−t)n f (t) .
³ ´
Ejemplo 248 Supongamos que queremos encontrar f y sabemos que L (f ) (s) = ln s+1s−1 . Co-
mo µ ¶ µ ¶
d s+1 s − 1 (s − 1) − (s + 1) 1 1 ¡ −t t
¢
ln = = − = L e − e (s) ,
ds s−1 s+1 (s − 1)2 s+1 s−1
y teniendo en cuenta que
µ µ ¶¶
−1 d s+1
L ln (t) = −tf (t) ,
ds s−1
resulta
−tf (t) = e−t − et ,
2
es decir, f (t) = t sinh (t).
Transformada de Laplace 211
Demostración. primero notar que el enunciado dice que la integral impropia converge. En
nuestras hipótesis, la función g (t) = f (t)
t es continua por tramos en [0, ∞) y de OE (α) (ejercicio),
y entonces la propiedad 7 nos dice que
d
L (f ) (s) = L (tg (t)) = − L (g) (s) ∀ s > α.
ds
Integrando, y teniendo en cuenta que L (g) (s) decrece como 1/s cuando s → ∞, queda
Z ∞ Z ∞
d
L (f ) (r) dr = − L (g) (r) dr = [L (g) (r)]r=∞
r=s
s s ds
µ ¶
f (t)
= lı́m L (g) (r) − L (g) (s) = −L (g) (s) = −L (s) ,
r→∞ t
o sea listo.
sin(ωt)
Ejemplo 251 Si f (t) = t , entonces
Z ∞ Z ∞ h ³ r ´ir=∞ π ³s´
ω
L (f ) (s) = L (sin (ωt)) (r) dr = dr = arctan = − arctan .
s s r2 + ω2 ω r=s 2 ω
En esta sección vamos a usar funciones periódicas (como cuando vimos series de Fourier),
pero teniendo presente que pensamos a las funciones como cero en el intervalo (−∞, 0) . Con esta
convención, una función f (t) será periódica de período T si f (t + T ) = f (t) ∀ t ≥ 0, y nos
referiremos a este hecho como “f es periódica en [0, ∞). En general resulta que f es periódica
de período T en [0, ∞) si y solo si f (t) = g (t) u (t) , con g periódica de período T. Notar que si
f es periódica en [0, ∞) de período T, y es continua por tramos en [0, T ], entonces f es continua
por tramos en [0, ∞) y de OE (0) (ejercicio).
212 Transformada de Laplace
Demostración. Como f es continua por tramos en [0, ∞) y de OE (0), sabemos que L (f ) (s)
está definida ∀ s > 0. Además, si N ∈ N, tenemos que
Z ∞ Z N
−st
L (f ) (s) = f (t) e dt = lı́m f (t) e−st dt =
0 N→∞ 0
ÃZ Z Z !
T 2T NT
−st −st −st
= lı́m f (t) e dt + f (t) e dt + · · · + f (t) e dt .
N→∞ 0 T (N−1)T
Pero ahí aparece una suma parcial de una serie geométrica de razón e−sT (que es menor que 1
pues s y T son positivos), de donde resulta que
µZ T ¶ N−1
X
−st
¡ ¢n
L (f ) (s) = f (t) e dt lı́m e−sT
0 N→∞
n=0
µZ T ¶X
∞ µZ T ¶
−st
¡ ¢
−sT n −st 1
= f (t) e dt e = f (t) e dt .
0 n=0 0 1 − e−sT
Ejemplo 253 Para calcular la transformada de Laplace de la función de período 2 tal que
f (t) = t2 en el intervalo [0, 2), hacemos
Z 2 ∙ 2 2 −st ¸t=2
2 −st s t e + 2ste−st + 2e−st 2 2
−2s 2s + 2s + 1
t e dt = − = − 2e ,
0 s3 t=0 s3 s3
de donde µ ¶
1 2 2
−2s 2s + 2s + 1
L (f ) (s) = − 2e .
1 − e−2s s3 s3
Transformada de Laplace 213
Para utilizar la propiedad anterior se suele usar la función de Heaviside, de la siguiente forma:
si tenemos f (t) definida en [0, ∞) y queremos la transformada de Laplace de la función g (t)
que es periódica de período T y coincide con f en el intervalo [0, T ), entonces
Z T Z T Z T
g (t) e−st dt = f (t) e−st dt = [1 − uT (t)] f (t) e−st dt
0
Z0 ∞ 0
y queda
L (f ) (s) − L (uT f ) (s)
L (g) (s) = ,
1 − e−sT
es decir, en lugar de calcular una integral necesitamos dos transformadas de Laplace.
Ejemplo 254 Para calcular la transformada de Laplace de la función de período 2 tal que
f (t) = t2 en el intervalo [0, 2) con este método, primero notar que
¡ ¢ ³ ´
L t2 u2 (t) (s) = L (t − 2 + 2)2 u2 (t) (s)
³ ´
= L (t − 2)2 u2 (t) (s) + L (4 (t − 2) u2 (t)) (s) + L (4u2 (t)) (s)
2 −2s 4 4
= 3
e + 2 e−2s + e−2s ,
s s s
y entonces ∙ µ ¶¸
1 2 2 −2s 4 −2s 4 −2s
L (f ) (s) = − e + 2e + e .
1 − e−2s s3 s3 s s
Demostración. notar que la propiedad dice que, bajo las hipótesis pedidas, ambos límites
existen y son iguales. Las hipótesis pedidas son exactamente las mismas que las de la propiedad
2, y están puestas pues dicha propiedad es lo único que necesitamos: puesto que
¡ ¢ ¡ ¢
L f 0 (s) = sL (f ) (s) − f 0+ ∀ s > α,
214 Transformada de Laplace
Ejemplo 256 Si
s+3
L (f ) (s) = ,
2s2 + 2s + 1
entonces
¡ ¢ s+3 1
f 0+ = lı́m s = .
s→∞ 2s2 + 2s + 1 2
Nota 257 En general se aplica la propiedad 10 sin poder verificar las hipótesis, ya que no se
dispone de la función y todavía no tenemos ningún resultado que nos de condiciones de suavidad
para f a partir de su transformada de Laplace, L (f ). Sin embargo, utilizando el método de
fracciones parciales, se puede ver que si L (f ) (s) = p(s)
q(s) , con p y q polinomios y el grado de p
menor o que el grado de q, entonces f está dentro de las hipótesis (ejercicio).
Proposición 258 (Teorema del valor final) Si f es continua en [0, ∞) y de OE, y existe
f 0 en “casi todo punto” es continua por tramos en [0, ∞) y de OE (α) con α < 0, entonces
Demostración. Notar que acá necesitamos que f 0 sea de OE con exponente negativo. En estas
condiciones, el primer teorema nos asegura que L (f 0 ) (s) está bien definida y es continua en un
entorno de s = 0, y entonces (usando la propiedad 2)
¡ ¢ ¡ ¢ £ ¡ ¢¤ ¡ ¢
L f 0 (0) = lı́m L f 0 (s) = lı́m sL (f ) (s) − f 0+ = lı́m sL (f ) (s) − f 0+ .
s→0 s→0 s→0
8.7. Convolución
transformada inversa del producto. Es fácil de verificar que, en general, no es cierto que la
inversa del producto sea el producto de las inversas, por ejemplo
¡ ¢ 2 ¡ ¢ 24
L t2 (s) = 3 y L t4 (s) = 5 ,
s s
y entonces no se verifica que
¡ ¢ ¡ ¢ ¡ ¢
L−1 t2 t2 = L−1 t2 L−1 t2 .
Definition 259 Definición 260 Para f, g funciones continuas por tramos en [0, ∞) se pone
Z t
(f ∗ g) (t) = f (r) g (t − r) dr
0
la convolución de f con g.
La integral que define f ∗ g existe para todo t > 0 por ser la función h (r) = f (r) g (t − r)
continua por tramos en [0, t] (ejercicio), por lo tanto f ∗ g es una nueva función definida en
[0, ∞). Esta nueva operación puede ser pensada como un “producto” definido en el conjunto de
las funciones continuas por tramos en [0, ∞), de la misma forma que tenemos el producto usual
en R. En general, no es fácil ver “que pasa” cuando uno hace la convolución de dos funciones
cualquiera, en el sentido de que es difícil predecir como será (que aspecto tendrá) la función
f ∗ g a partir del aspecto de f y g. Uno de los casos mas entendibles es cuando uno piensa en g
como una “campana” simétrica de área 1 (ver dibujo): en tal caso, fijado t, el valor de (f ∗ g) (t)
será un promedio ponderado de los valores de f en un entorno de t. Es por eso que, en general,
(f ∗ g) será una función mas suave que f , pero “parecida” a f (mientras mas concentrada sea
la campana de g, mas parecida será (f ∗ g) a f, hasta llegar al extremo cuando g es la función
impulso o δ de Dirac)
g
f*g
0 0
1. f ∗ g = g ∗ f (conmutatividad)
2. (f ∗ g) ∗ h = f ∗ (g ∗ h) (asociatividad)
4. (af ) ∗ g = a (f ∗ g) = f ∗ (ag) .
216 Transformada de Laplace
Estas propiedades se demuestran muy fácilmente, solo la segunda requiere un m. Por supuesto
que lo que nos interesa a nosotros es la siguiente:
puesto que para todo ε > 0 vale que t ≤ 1ε eεt ∀ t ≥ 0, se tiene que
Eso implica que tenemos definida L (f ∗ g) (s) ∀ s > α + ε cualquiera sea ε > 0, y por lo tanto
∀ s > α.
En cuanto a la continuidad el tema es mas complicado, acá va una idea (que se puede
formalizar como ejercicio): tomo t0 ∈ [0, ∞) y 0 < h < 1 (la razón de tan extraña elección se
verá abajo), entonces
Z t0 +h Z t0
(f ∗ g) (t0 + h) − (f ∗ g) (t0 ) = f (r) g (t0 + h − r) dr − f (r) g (t0 − r) dr
0 0
Z t0 Z t0 +h Z t0
= f (r) g (t0 + h − r) dr + f (r) g (t0 + h − r) dr − f (r) g (t0 − r) dr
0 t0 0
Z t0 Z t0 +h
= f (r) [g (t0 + h − r) − g (t0 − r)] dr + f (r) g (t0 + h − r) dr
0 t0
= I1 (h) + I2 (h) .
Como h < 1 y usando que f es acotada en [t0 , t0 + h] y que g es acotada en [0, 1] , se ve fácilmente
que
lı́m I2 (h) = 0.
h→0+
Acá el análisis se complica: para ver que eso tiende a cero necesitamos usar la noción de con-
tinuidad absoluta (fuera del alcance de este curso) y que g tiene finitas discontinuidades en el
intervalo [0, t0 + 1] , pero debería quedar claro que
invirtiendo el orden en las integrales (lo cual es lícito, por Fubini, en nuestras hipótesis) queda
Z ∞Z ∞ Z ∞ Z ∞
−st
L (f ∗ g) (s) = f (r) g (t − r) e dtdr = f (r) g (t − r) e−st dtdr.
0 r 0 r
Finalmente, haciendo el cambio de variables x = t − r en la integral de adentro queda
Z ∞ Z ∞ Z ∞ µZ ∞ ¶
−s(x+r) −sr −sx
L (f ∗ g) (s) = f (r) g (x) e dxdr = f (r) e g (x) e dx dr
0 0 0 0
Z ∞ µZ ∞ ¶
−sr −sr
= f (r) e (L (g) (s)) dr = L (g) (s) f (r) e dr = L (g) (s) L (f ) (s) .
0 0
Corolario 262 En las hipótesis de la propiedad anterior, si φ (s) = L (f ) (s) y η (s) = L (g) (s) ,
entonces
L−1 (φη) (t) = (f ∗ g) (t) .
Teorema 264 Si f es continua por tramos en [0, ∞) y de OE (α), con |f (t)| ≤ M eαt ∀ t ≥ 0,
entonces la transformada de Laplace de f, L (f ) (s) , existe en todo el semiplano {s ∈ C : Re (s) >
α}, es una función analítica y sus derivadas satisfacen
dn L (f ) (s)
= L ((−t)n f (t)) (s) .
dsn
Además
M
|L (f ) (s)| ≤ .
Re (s) − α
Para poder calcular las derivada parciales de estas funciones vamos a usar el mismo truco que
en la propiedad 7 (cuando calculamos la derivada como función de variable real): vamos a ver
que L (f ) (s) es derivable en todo semiplano de la forma {s : Re (s) > α1 }, con α1 > α, y con
eso basta (ejercicio). Para ver esto, notar que para cada y ∈ R fijo tenemos
¯ ¯
¯ ∂ ¡ −xt ¢¯ ¯ ¯
¯f (t) e cos (yt) ¯¯ = ¯−tf (t) e−xt cos (yt)¯ ≤ |t| M eαt e−xt ≤
¯ ∂x
≤ |t| M eαt e−α1 t ∀ t > 0 y ∀ x ≥ α1 ,
Transformada de Laplace 219
R∞
como 0 M te−(α1 −α)t dt converge, el test M de Weierstrass (para integrales) nos dice que la inte-
R∞ ∂
¡ −xt ¢
gral 0 f (t) ∂x e cos (yt) dt converge absolutamente, y uniformemente en (α1 , ∞) (recordar
∂
¡ −xt ¢
que estamos pensando y fijo), y entonces (puesto que la función (x, t) → ∂x e cos (yt) es
continua en todo su dominio) cierto teorema (de funciones definidas usando integrales impropias)
nos dice que u (x, y) es derivable respecto de x en dicho intervalo, y que
Z ∞ Z ∞
∂u ∂ ¡ −xt ¢
(x, y) = f (t) e cos (yt) dt = −tf (t) e−xt cos (yt) dt ∀ (x, y) : x > α1 .
∂x 0 ∂x 0
y
Z ∞ Z ∞
∂v ∂ ¡ −xt ¢
(x, y) = −f (t) e sin (yt) dt = −tf (t) e−xt cos (yt) dt ∀ (x, y) : x > α1 ,
∂y 0 ∂y 0
La primer preocupación seria que aparece después de probar semejante teorema, es: ?‘que
pasa con las propiedades que tengo probadas en el caso variable real? ?‘siguen valiendo? Y
220 Transformada de Laplace
en caso de que si, ?‘voy a tener que probar todas las propiedades de nuevo? ?‘Es cierto que
para s ∈ C vale que L (t) (s) = s12 ? La respuesta a todas estas preguntas es bastante sencilla de
hacer, gracias a un corolario de cuando estudiamos ceros de funciones analíticas. Con el siguiente
ejemplo vamos a ver el procedimiento general a utilizar: sabemos que si f (t) = sin (ωt) ∀ t ≥ 0,
entonces L (f ) (s) es una función analítica en el semiplano P = {s : Re (s) > 0} (esto se ve
ω
fácilmente utilizando el teorema anterior. Además la función φ (s) = s2 +ω 2 también es analítica
en dicho semiplano,
ω
L (f ) (s) = 2 ∀ s ∈ R, s > 0.
s + ω2
Es decir, L (f ) (s) y φ (s) son dos funciones analíticas en P que son iguales en el semieje real
positivo, y entonces (por un corolario de la sección 5.6) deben ser iguales para todo s en P . Es
decir,
ω
L (sin (ωt)) (s) = 2 ∀ s ∈ C, Re (s) > 0.
s + ω2
Podríamos haber calculado nuevamente la integral que define la transformada de sin (ωt) , pero la
intención es no repetir ningún calculo ya hecho. De la misma forma, consideremos la propiedad
2: Si f es continua en [0, ∞) y de OE (α) , y existe f 0 en “casi todo punto” es continua por
tramos en [0, ∞) y de OE (α) , entonces
¡ ¢
L f 0 (s) = sL (f ) (s) − f (0) ∀ s > α.
Pero en estas hipótesis el teorema anterior dice que tanto L (f 0 ) (s) como L (f ) (s) son analíticas
en el semiplano {s : Re (s) > α}, y por lo tanto L (f 0 ) (s) y sL (f ) (s) − f (0) son dos funciones
analíticas en dicho semiplano, y que son iguales ∀ s ∈ R, s > α, y entonces el citado corolario
dice que
¡ ¢
L f 0 (s) = sL (f ) (s) − f (0) ∀ s ∈ C tal que Re (s) > α.
Con ese procedimiento podemos generalizar a variable complejas todas las propiedades
R∞ vistas,
salvo la propiedad 8, ya que no tenemos definido que significa el símbolo integral s cuando s
es complejo. La propiedad 10 requiere un cambio menor, y la conclusión resulta
¡ ¢
lı́m sL (f ) (s) = f 0+ .
Re(s)→∞
Definición 265 para f (z) analítica en un semiplano P = {z : Re (z) > α}, y para a > α, se
pone
Z a+id
f (z) dz
a+ic
Transformada de Laplace 221
de donde resulta Z ∞
1
g (t) = L (f ) (a + iω) eiωt dω.
2π −∞
y entonces
Z a+i∞
1
f (t) = L (f ) (z) ezt dz,
2πi a−i∞
1. Escribiendo el razonamiento hecho con cuidado se puede ver que la integral en cuestión
converge a f (t) en los t0 s donde f es continua, al promedio del salto donde f es discontinua,
a 12 f (0+ ) en t = 0, y a cero para todo t < 0.
2. Nuestro teorema tiene la falencia de que sólo nos permite hallar f a partir de su transfor-
mada de Laplace, pero no nos permite encontrar una f (t) cuya transformada de Laplace
sea una función φ (s) dada. Es decir, podemos aplicar la fórmula a φ (s) sólo si previa-
mente sabemos que φ es una transformada de una función f que sea Dirichlet en todo
I ⊆ [0, ∞) y de orden exponencial. De cualquier manera, la metodología a aplicar, en
principio, es usar la fórmula de inversión compleja para invertir cualquier función (que
pueda ser una transformada), y si quedan dudas, calcular la transformada de Laplace de
la función obtenida para verificar.
3. Se puede ver (por ejemplo en Churchill “Operational Mathematics”) que si φ (s) es ¯una ¯
función analítica en un semiplano {z : Re (z) ≥ α} y existe k > 1 tal que |φ (s)| ≤ 1/ ¯sk ¯
para todo s en dicho semiplano, entonces existe una función f : [0, ∞) → R continua y de
OE (α) tal que φ es su transformada de Laplace, y
Z a+i∞
1
f (t) = φ (z) ezt dz ∀ t ∈ [0, ∞).
2πi a−i∞
Es decir, en principio sólo bajo estas hipótesis podemos decir que dicha integral converge
y define bien una función de t.
Una de las mejores cosas de la fórmula de inversión compleja es que la integral involucrada
tiene toda la pinta de integral que se puede calcular utilizando residuos, como hicimos para
calcular la trasformada de Fourier. Notar que en las condiciones del teorema anterior, la función
L (f ) (z) ezt tiene todas sus singularidades (aisladas o no) en el semiplano {z : Re (z) ≤ α}. Vale
el siguiente:
Transformada de Laplace 223
entonces
n
X ¡ ¢
f (t) = Res φ (z) ezt , zj ∀ t ∈ [0, ∞).
j=1
iR
z4
CR(a) z3
z2 zn
0 a
z1
−iR
Si tomamos R tal que |zj − a| < R ∀ j = 1, ..., n, el teorema de los residuos nos dice que
Z a+iR n
X Z
1 zt
¡ ¢ 1
φ (z) e dz = Res φ (z) ezt , zj − φ (z) ezt dz.
2πi a−iR 2πi CR (a)
j=1
£ ¤
Parametrizamos CR (a) por γ (θ) = a + Reiθ , θ ∈ π2 , 3π
2 , entonces puesto que para R ≥ 2 |a|
se tiene que
¯ ¯ ³¯ ¯ ´ R ¯¯ ¯
¯ ¯ ¯ ¯ ¯
2 ¯a + Reiθ ¯ ≥ 2 ¯Reiθ ¯ − |a| ≥ 2 = ¯Reiθ ¯ ,
2
224 Transformada de Laplace
entonces
¯Z ¯ ¯Z ¯
¯ ¯ ¯ 3π/2 ³ ´ ¯
¯ zt ¯ ¯ iθ ( a+Reiθ )t iθ ¯
¯ φ (z) e dz ¯ = ¯ φ a + Re e iRe dθ¯ ≤
¯ CR (a) ¯ ¯ π/2 ¯
Z 3π/2 ¯ ³ ´¯ ¯ ¯
¯ ¯¯ ¯
≤ ¯φ a + Reiθ ¯ ¯Reiθ ¯ eat etR cos θ dz ≤
π/2
Z 3π/2 ¯ ³ ´¯ ¯ ¯ Z 3π/2
at ¯ iθ ¯ ¯ iθ ¯ tR cos θ at
≤ e ¯φ a + Re ¯ 2 ¯a + Re ¯ e dθ ≤ e 2M etR cos θ dθ.
π/2 π/2
π
Para esta última integral, notar que si hacemos el cambio ω = θ + 2 y usando una cuenta ya
hecha (y que t > 0), queda
Z 3π/2 Z π Z π Z π/2
tR cos θ tR cos(ω− π2 ) −tR sin(ω)
0≤ e dθ = e dω = e dω = 2 e−tR sin(ω) dω,
π/2 0 0 0
£ ¤
y como t > 0, entonces −tR sin (ω) ≤ −tR2ω/π ∀ ω ∈ 0, π2 , y entonces
Z 3π/2 Z π/2
tR cos θ 1 − e−tR π
0≤ e dθ ≤ 2 e−tR2ω/π dω = π ≤ .
π/2 0 tR tR
y entonces
µ ¶ ¡ ¢
−1 1 e−at eibt e−at e−ibt e−at eibt − e−ibt e−at sin (bt)
L = + = = .
(s + a)2 + b2 2ib −2ib 2ib b
Transformada de Laplace 225
Nota 270 Es muy importante notar que el teorema anterior no se puede usar para invertir
P (s)
trastornadas de la forma φ (s) = e−bs Q(s) con b > 0 y P, Q polinomios, pues no hay forma de
lograr una cota del tipo
De cualquier manera, esto no es una limitación pues se usa para invertir la función P (s) /Q (s) ,
y el factor e−bs implica un corrimiento en la variable t.
Nota 271 (fuera de lugar) si f (z) es una función analítica en C salvo por singularidades
aisladas, y f tiene la propiedad de que f (z̄) = f (z) para todo z en su dominio, entonces ρ es
singularidad de f si y solo si ρ̄ lo es (pues f (z) = f (z̄), y recordar que, en general, si g es
analítica también lo es la función g (z̄) en el dominio adecuado), y
pues si Cw = w + εeit , t ∈ [0, 2π] , entonces para ε suficientemente chico se tiene que
Z Z 2π
1 1 ¡ ¢
Res (f, ρ̄) = f (z) dz = f ρ̄ + εeit εieit dz =
2πi Cρ̄ 2πi 0
Z 2π ³ ´ Z 2π
1 −it it 1
= f ρ + εe εie dt = f (ρ + εe−it )ε (−i) e−it dt =
2πi 0 2πi 0
Z 2π Z
1 −it −it
−1
= f (ρ + εe ) ε (−i) e dt = f (z) dz =
2πi 0 2πi Cρ
Z
1
= f (z) dz = Res (f, ρ).
2πi Cρ
para toda raíz ρ de Q. Si ρ es una raíz de Q de multiplicidad N, entonces ρ es un polo de φ (z) ezt
de orden N. Entonces se puede poner Q (z) = Q̃ (z) (z − ρ)N donde Q̃ es un polinomio sin raíces
comunes con P, y Q̃ (ρ) 6= 0 (notar que no sabemos que Q̃ (z) sea un polinomio con coeficientes
reales, este será el caso únicamente si ρ es una raíz real).
∙ ¸ ∙ ¸
¡ zt
¢ 1 dN−1 N P (z) zt 1 dN −1 P (z) zt
Res φ (z) e , ρ = lı́m (z − ρ) e = lı́m e ,
z→ρ (N − 1)! dz N−1 Q (z) z→ρ (N − 1)! dz N−1 Q̃ (z)
226 Transformada de Laplace
X µ N − 1 ¶ µ P ¶(N −1−j)
N−1
= (z) tj ezt
j Q̃
j=0
y entonces
∙ ¸
¡ zt
¢ 1 dN−1 P (z) zt
Res φ (z) e , ρ = e
(N − 1)! dz N−1 Q̃ (z) z=ρ
N −1 µ
X N −1 ¶ µ ¶
1 P (N−1−j)
= (ρ) tj eρt
(N − 1)! j Q̃
j=0
N
X −1 µ ¶ µ ¶(N−1−j)
eρt N −1 P
= (ρ) tj ,
(N − 1)! j Q̃
j=0
³ ´
P
con Q̃ (ρ) 6= 0 (es decir, aparece en la fórmula efectivamente un factor tN−1 , cuando j = N −1
en la sumatoria). Es decir, ¡ ¢
Res φ (z) ezt , ρ = eρt p (t) ,
donde p (t) es un polinomio de grado N − 1 (y coeficientes no necesariamente reales). Y ahora
distinguimos dos casos:
Caso 1 Si ρ es real, entonces Q̃ (z) es un polinomio con coeficientes reales, y por lo tanto P/Q̃
(y la derivada de cualquier orden de ella) es una función racional con coeficientes reales.
Consecuentemente p (t) es un polinomio con coeficientes reales, y
eρt p (t)
es una función de variable e imagen real.
Caso 2 Si ρ = a + ib con b 6= 0, como Q tiene coeficientes reales, resulta que ρ̄ = a − ib también
es raíz de Q. Además, puesto que P también tiene coeficientes reales, se tiene que
µ ¶
z̄t P (z̄) z̄t P (z) zt P (z) zt
φ (z̄) e = e = e = e ,
Q (z̄) Q (z) Q (z)
con lo cual la nota anterior nos dice que
¡ ¢
Res φ (z) ezt , ρ̄ = Res (φ (z) ezt , ρ),
y entonces, ¡ ¢ ¡ ¢ £ ¤
Res φ (z) ezt , ρ + Res φ (z) ezt , ρ̄ = 2 Re eρt p (t) .
Si ponemos p (t) = p1 (t) + ip2 (t) con p1 y p2 polinomios reales, al menos uno de ellos es
de grado N − 1 y
¡ ¢ ¡ ¢ £ ¤
Res φ (z) ezt , ρ + Res φ (z) ezt , ρ̄ = 2 Re eat (cos bt + i sin bt) (p1 (t) + ip2 (t))
= 2eat (p1 (t) cos bt − p2 (t) sin bt) .
Transformada de Laplace 227
P (s)
En síntesis: si φ (s) = Q(s) , donde P, Q son polinomios con coeficientes reales y el grado de
Q es mayor que el grado de P y sin raíces comunes, entonces al usar la fórmula
X µ ¶
P (z) zt
L−1 (φ) (t) = Res e ,ρ
Q (z)
ρ:Q(ρ)=0
N−1
X
at
£ j ¤
e cj t cos (bt) + dj tj sin (bt) , cj , dj ∈ R, cN−1 6= 0 y/o dN−1 6= 0,
j=0
P (s)
Example 272 Teorema 273 si φ (s) = Q(s) , donde P, Q son polinomios con coeficientes
reales y el grado de Q es mayor que el grado de P y sin raíces comunes, entonces L−1 (φ) (t) es
acotada si y solo si Q no tiene raíces con parte real positiva, y todas sus raíces con parte real
nula son de multiplicidad uno. Además
8.10. Estabilidad
Una de las aplicaciones mas importantes del teorema anterior el la que se da en Teoría de
Control para determinar la estabilidad o no de un sistema físico. Un sistema físico en general se
caracteriza por aceptar entradas (fuerza, voltaje, presión, corriente, etc) y producir una salida
en respuesta a esa entrada. En general caracterizamos las entradas y las salidas con funciones
reales f (t) , t ≥ 0 (pensando que la variable t representa al tiempo).
Definición 274 Un sistema es lineal si la respuesta se comporta de manera lineal con respecto
a la entrada, es decir, si y1 es la respuesta a la entrada x1 y y2 a la entrada x2 , entonces la
respuesta a la entrada ax1 + bx2 será ay1 + by2 . Un sistema es invariante en el tiempo si el
efecto de correr en el tiempo la entrada produce el mismo corrimiento en la salida, es decir,
si y1 (t) es la respuesta a la entrada x1 (t) entonces la respuesta a la entrada y1 (t − t0 ) será
x1 (t − t0 ). La función de transferencia G (s) de un sistema lineal e invariante en el tiempo se
define como la relación entre las transformadas de Laplace de la salida y la entrada, suponiendo
que las condiciones iniciales son todas cero. Es decir,
L (xo ) (s)
G (s) = .
L (xi ) (s)
228 Transformada de Laplace
Se puede ver que para tales sistemas (lineales invariantes en el tiempo) dicha definición es
buena, es decir, no depende de la entrada que elijamos para calcularla. La función de transferencia
caracteriza por completo al sistema físico. Para representar un sistema se utilizan bloques que
identifican la entrada y la salida, y la función de transferencia que lo caracteriza, como el
siguiente:
xi xo
G
Ejemplo 275 si tenemos un sistema masa-resorte forzado y amortiguado como muestra el dibu-
jo, entonces la ecuación que describe el sistema es
v
½
mx00 + vx0 + kx = f (t) k m f(t)
,
x (0) = x0 , y (0) = y0
0
Asumiendo que las condiciones iniciales son nulas (x0 = y0 = 0) y despejando obtenemos
L (x) (s) 1
= 2
,
L (f ) (s) ms + vs + k
es decir, la función
1
G (s) =
ms2 + vs + k
es la función de transferencia de tal sistema. Notar que en la función aparecen todos los parámet-
ros del sistema, y que no depende ni de la entrada ni de la salida.
Para el estudio de sistemas lineales invariantes en el tiempo se utiliza lo que se llama “álgebra
de bloques”, que permite obtener la función de trasnferencia de un sistema que consiste de
varios subsistemas interconectados de diferente manera, y de los cuales conocemos su función
de transferencia. Veamos algunos ejemplos:
Ejemplos:
Transformada de Laplace 229
(la entrada al segundo sistema es la salida del primero), con funciones de transferencia H
y G respectivamente, entonces
L (xp ) (s) L (xo ) (s)
G (s) = y H (s) = ,
L (xi ) (s) L (xp ) (s)
de donde
L (xo ) (s) L (xp ) (s) L (xo ) (s)
= · = G (s) H (s) ,
L (xi ) (s) L (xi ) (s) L (xp ) (s)
es decir, la función de transferencia es el producto de las funciones de transferencias de
c/u de los sistemas.
(hay una entrada a dos subsistemas y la salida del sistema es la suma de ambas salidas),
con funciones de transferencia H y G respectivamente, entonces
L (xh ) (s) L (xg ) (s)
G (s) = y H (s) = ,
L (xi ) (s) L (xi ) (s)
xf xo
H
(hay una entrada a un sistema, la salida del mismo entra a otro, que produce una salida
que realimenta al primero), entonces
1
L (xi ) (s) − L (xo ) (s) = L (xf ) (s) y H (s) L (xo ) (s) = L (xf ) (s) ,
G (s)
El único problema del razonamiento anterior es que, debido a la naturaleza del último teorema
de la sección anterior, se aplica solo a sistemas cuya función de transferencia sea una función
racional, y para entradas cuya transformada de Laplace es una función racional. Si sabemos
que la función de transferencia es una función racional, de todos modos no podemos asegurar
que la respuesta a toda entrada acotada es acotada, pero si que la respuesta a toda entrada
acotada cuya transformada de Laplace es racional es acotada. Esto no es una limitación , ya que
el criterio se usa en control y ya, pero yo no encontré ningún libro que lo tenga y no me sale. ¿Y
como determinamos si tengo polos con parte real positiva? Pues bien, los polos son los ceros de
un polinomio, y ya vimos como encontrarlos cuando estudiamos ceros de funciones analíticas.