riesgo de sufrir consecuencias negativas
(físicas, psicológicas o sociales), a corto o
Milena Vargas
Coordinadora SIG.
Cuando el consumo de alcohol y otras
drogas es un problema
Aunque no todas las personas que tienen
algún contacto con drogas tienen
necesariamente problemas, hay
determinadas situaciones que pueden dar
a pensar que su consumo se está
escapando de las manos:
Cuando el consumo de drogas está
produciendo un malestar en la vida de la
persona (problemas con la gente de los
alrededores, ausencias en el trabajo, en la
escuela, etc.).
A menudo tiene conductas de
riesgo cuando está bajo los efectos de la
droga: conducir un vehículo, mantener
relaciones sexuales sin protección, etc.
Tiene que consumir para disminuir los
efectos adversos.
A veces desea y se esfuerza para dejar
de consumir.
A pesar de todo esto, continúa
consumiendo, aunque tiene consciencia
de las consecuencias físicas y mentales
que tiene sobre su salud.
¿Qué entendemos por beber
demasiado?
Se considera beber demasiado cualquier
consumo de alcohol que incremente el
largo plazo. También cuando se cumple
alguna de las siguientes condiciones:
Cuando se alcanzan los límites de riesgo,
calculados en unidades de bebida
estándar (UBE), establecidos por la
Organización Mundial de la Salud.
Cuando la persona tiene problemas que
se pueden agravar con el alcohol, ya sean
físicos (hepatitis, gastritis, diabetes),
psíquicos (depresión, ansiedad, falta de
memoria) o sociales (conflictos familiares,
bajo rendimiento laboral).
Cuando se bebe en circunstancias en las
cuales está contraindicado (menores de
16 años, embarazadas o madres
lactantes, conducción, ciertos
medicamentos, trabajos en alturas,
manejo de herramientas o maquinaria).
Cuando se necesita beber para
relacionarse con los otros o para afrontar
dificultades personales.
Cuando una persona pierde el control
sobre la sustancia y se siente incapaz de
evitar o moderar el consumo, y esto afecta
de manera importante en sus relaciones y
actividades habituales, quizás es el
momento de plantearse buscar ayuda de
un profesional.
Es por esto que cada día se ha crecentan
en las empresas los programas
preventivos y políticas de no alcohol
tabaco y drogas, ya que consideran el
consumo de estos y como puede llegar a
desfavorecer la productividad de los
empleados, la calidad del servicio
suministrado y además como podría
deteriorar la imagen de las
organizaciones y perjudicar su entorno
familiar es por tal motivo que ofrecen en
algunos casos información básica sobre
las causas físicas, psicológicas, sociales
y laborales, las posibles alteraciones en la
calidad de vida, así como las
consecuencias y el desarrollo progresivo
del uso problemático de sustancias
psicoactivas.
El fin de estos programas preventivos
ante el consumo de sustancias
psicoactivas (alcohol, drogas y
tabaquismo), es desarrollar actividades,
capacitaciones orientadas a la promoción
de estilos de vida y trabajo saludables.