VOCACION

Un aspecto importante para el desarrollo de nuestra vida es la toma de

decisiones, indispensable para definir nuestro camino y para abrir paso a lo que
queremos hacer realmente, pero además, hay un factor distinto a la pasión que
nos hace determinar nuestros verdaderos sueños, aspiraciones, deseos y es la
vocación.
La vocación viene desde nuestro interior, de los sentimientos y emociones pero
también es un proceso que se desarrolla durante toda la vida que implica
conocerse a sí mismo y determina que quiero ser para luego hacerlo. Teniendo
en cuenta nuestra vocación encontraremos la elección de una carrera, que es
una de las interrogantes que agobian a la mayoría de los jóvenes que están la
búsqueda de un futuro productivo y que requiere del tiempo que sea necesario
para luego no retractarse y arrepentirse de su decisión, con el fin de encajar en
el mercado laboral y cumplir a cabalidad con sus obligaciones con satisfacción y
no por un aporte económico.
En definitiva, podemos tener pasión por muchas cosas y habilidades para otras,
pero la vocación es una mezcla de ambas. La vocación por una actividad es
aquella que absorbe y hace que el resto quede en segundo plano. Es cierto que
en los amplios mercados actuales muchas veces resulta bastante difícil optar por
una actividad en particular y esto no debe ser motivo para frustrarse, sino por el
contrario, debe despertar en cada persona preguntas y analizar las ventajas y
desventajas de elegir una profesión para enfrentar la vida.
Cada persona tiene la libertad de decidir sobre su vida y de ser lo que quiere ser,
si quiere inclinarse por lo que lo apasiona o decide realizar una actividad que
solo le brinde aspectos económicos, lo cierto es que probablemente en algún
punto su vida perderá el sentido y la alegría de hacer lo que nos gusta. Por otra
parte, según los intereses y motivaciones personales mucha gente es feliz
realizando labores que no los llena completamente pero que les retribuya
económicamente bien, pero no debemos olvidar que un trabajo exige al menos
8 horas diarias, y si la vocación es lo suficientemente definida, llegará el
momento en que ese trabajo, por muy rentable que sea, no nos completará como
personas satisfechas con nuestra propia vida y se convertirá en una carga.
Personalmente pienso que debemos luchar por nuestros sueños y descubrir
realmente que queremos para descubrir nuestro camino y de esta manera
encontrar lo más importante que es nuestra felicidad. Además, debemos ser
conscientes de que siempre habrá obstáculos en la vida pero depende de
nosotros luchar por nuestro bienestar y lograr nuestras metas siendo constantes
durante el desarrollo de nuestra existencia.