Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
2
Proyecto
Rescate del Medio Ambiente, Cultura y Recursos Naturales.-
3
Primera Edición.
Primavera del año 2013.
Región de Tarapacá.
Nombre del proyecto: Proyecto Rescate del Medio Ambiente, Cultura y Recursos
Naturales. Licitación 802-20-LE13.
De estos últimos son propiedad particular los testimonios íntimos, pasajes de vida,
y experiencias personales relatadas, por lo que todo uso de dicha información, en
los diversos fines y formas que exista, debe ser consultado directamente a las
comunidades involucradas, y expresamente a los autores directos quienes
prestaron testimonio.
4
La Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los
Pueblos Indígenas, aprobada por resolución de la Asamblea General del 13 de
septiembre de 2007, establece expresamente la protección de los derechos de
propiedad intelectual (DPI) de los pueblos indígenas. Así, el artículo 31 de la
declaración establece dos preceptos fundamentales:
5
Autores
Valle de Camiña Bajo: Celestina García & Andrés Rodríguez, Kalatambo; Mario
Ruperto García & Naldo García, Chillaiza; Esteban Viza, Yalacolla; Rafael Aguilar,
Saiña; Juan Viza, Cuisama;
6
INDICE
N° Tabla de Contenidos Página
Presentación. 06
Palabras del Director de CONADI, Subdirección Norte.
Introducción. 08
Espacio geográfico regional 15
Capitulo 1: Altiplano 18
Estado actual de los ecosistemas altoandinos 19
Conocimientos y usos tradicionales sustentables de las 21
comunidades indígenas del Altiplano.
Conocimientos tradicionales de ecología en el área Isluga. 25
Conocimientos tradicionales de ecología del área Cariquima 36
Conocimientos tradicionales de ecología en el territorio Parca,
Capitulo 2: Precordillera 53
Estado actual de los ecosistemas precordilleranos 61
Quebrada de Parca 66
Quebrada de Mamiña 79
Quebrada de Quipisca 92
Quebrada de Macaya 101
Valle de Camiña 105
Camiña Alto 107
Camiña Bajo 118
Quebrada de Tarapaca 132
Tarapacá Bajo 138
Tarapaca Alto 143
Quebrada de Miñe Miñe 163
7
Oasis de Pica 169
Oasis de Matilla y Quisma 176
Epílogo 184
Conclusiones 185
8
Presentación.
Palabras del Director de CONADI, Subdirección Norte. (No más de una plana.
9
Introducción
10
Muchos de los problemas de pertinencia surgen cuando la labor editorial
viene con una carga académica de construcción de la realidad, basada en la
metodología científica de occidente, forma de pensar con la que trabajarán el o los
especialistas convocados para colaborar y trabajar sobre materias indígenas, en la
cual se fragmenta y divide los elementos de una realidad andina única, para ser
analizados por parte (flora, fauna, cultura, etc.), muy alejado de la propia tradición
local de conocer la realidad del mundo, la cual consiste en vivir, interpretar y
transmitir los conocimiento que de ello surgen como un todo indivisible, en el que
priman la relaciones de reciprocidad.
11
ideal es que puedan transmitir sus conocimientos tradicionales, y muchos otros
conocimientos, ideas, experiencias y apreciaciones de la realidad y la vida en sus
propios territorios en forma autónoma y bajo sus propios códigos para mantener
activa su cultura.
12
Debemos dar un paso hacia la descolonización también en este tipo de
publicaciones sobre el pensamiento andino local para que sean realmente un
aporte para las nuevas generaciones provenientes de las comunidades indígenas,
y que hoy residen fuera de los territorios ancestrales, y tal vez alejados de su
cultura originaria. Por ello hemos querido presentar la información en una forma lo
más pertinente posible, pues nos convoca la necesidad de transmitir
efectivamente dichos conocimientos tradicionales sobre medio ambiente y
ecología pues representan formas de desarrollo sustentables, producto de cientos
de años de tradición y experiencias territoriales, frente al olvido y perdida de las
costumbres, la progresiva reducción de los espacios de uso tradicional de los
territorios ancestrales, y el daño irreversible que sufre actualmente el
medioambiente, precisamente por la acelerada explotación extractivista de los
recursos naturales, permitida precisamente por as comunidades que han perdido
sus tradiciones y con ello el sentido de protección medioambiental de su territorio,
lo que tarde o temprano les llevara a la perdida de la identidad cultural.
1
Mallku: Voz aymara para la Autoridad. En este caso una autoridad natural, un cerro tutelar de un territorio.
13
orden de relato, con sus propias palabras y experiencias en su propio territorio
(Troll & Brush, 1987; Arnold et al., 1992; Van Kessel, 2003, entre muchos otros).
2
Pacha: Voz originaria andina para denominar a la tierra, como un Ser- hábitat, no como suelo geológico. Nos
lo ilustra la siguiente cita: “en palabras de Don Héctor A.: "la Pachamama es otro Dios; el Señor está en la
Iglesia, Pachamama está aquí, en el corral, en la Señalada, en el Carnaval". en: Merlino & Rabey, 1993.
14
adultez, pues en ellas encuentra el complemento necesario para ser un
conocimiento íntegro de utilidad.
Por ello, el presente libro no esta pensado para las academias, ni intenta
ser un libro más para nutrir el conocimiento académico o científico, ajeno a la
realidad Andina de la región de Tarapaca, no.
15
Espacio geográfico regional.
16
5 Cortes transversales de la cordillera de los andes en la región de los Andes. En el caso de Tarapaca (en
cuadro nuestro) se aprecian los 4 pisos ecológicos. Tomado de Troll & Brush, 1987.
Sus límites regionales son el Río Camarones al Norte y el río Loa al Sur,
entre ellos ningún otro río llega a la costa, lo que en geografía se denomina
17
extremo arreísmo, sumiéndose las aguas de las quebradas cordilleranas bajo
tierra antes de llegar a la pampa del Tamarugal. Esta situación genera una híper
aridez en el desierto y la costa al no presentar valles ni causes que abastezcan el
litoral con recursos hídricos (Paskoff, 1978-79; Llagostera, 1979 a, 1979b, 1989).
18
Capitulo 1: Altiplano.
19
a) T’olares y pajonales: Arbustos o t’olas (Baccaris sp.) y pastos o ich’us (Stipa
sp.). Mayormente herbáceas.
b) Queñuales: Bosquecillos de queñuas, árboles leñosos de escasa altura.
c) Llaretales: Colonias de llaretas o yaretas (Azorella compacta).
En la imagen el altiplano despegado con todas sus formas vegetales. En primer plano área de t’olares, y
llaretales, en plano medio la cuenca hídrica de Cariquima, y los humedales con bofedales, pajonales y vegas.
20
Estado actual de los ecosistemas altoandinos.
21
Ácidos sulfúricos filtrados en pajonal, al interior de Pica. Fuente: ONG Atacama Sustentable. Chile.
”Riego artificial de humedal altoandino. Impacto causado por la extracción de aguas para la
minería obliga a regar artificialmente este hermoso lugar. En miles de años nunca se necesito
hacerlo... hasta que llego la minería”. Fuente: Sergio Cortez. http://www.panoramio.com
22
Conocimientos y usos tradicionales sustentables de las
comunidades indígenas del Altiplano.
Sector Chichura, por donde actualmente pasa la carretera Huara- Colchane. Década de 1970, momento en
que el trazado del camino recién se comenzaba a hacer.
23
“La tecnología, en la visión andina, será entonces, saber criar y dejarse criar por
la vida.”
“Igual que al hombre hay que criar a la tierra. Si se enferma hay que curarla
bien. Igual que al hombre y al niño hay que criarla”.
24
División territorial tradicional de las parcialidades ancestrales Isluga y Cariquima, en la amplia altiplanicie de la
comuna de Colchane. Provincia del Tamarugal. Dada por elementos propios de la geomorfología, en este
caso una cadena de cerros y lomajes que dividen ambos territorios.
En ellas, los ayllus3 a través del tiempo han ido creciendo con las nuevas
generaciones, estableciendo nuevos grupos familiares, en sectores que eran
usados en forma estacionaria, intermitente y cíclica rotativa para el pastoreo. Con
el paso del tiempo, y el incremento de la población de cada Ayllu, las estancias
pasaron a ser poblados estables habitados por familias que requerían un lugar
para asentarse con su ganado.
3
Comunidad familiar con relaciones territoriales en base a la consanguinidad y parentesco (Isbell, 2005).
25
El uso pastoril del territorio mayor aun persiste sin conflictos territoriales
dentro de los habitantes de mayor edad que respetan los antigas tratados, en
momentos de tensión ecológica producto de sequías o heladas. Cada comunidad
conoce sus límites territoriales en base a elementos geográficos como cerros y
volcanes que en cierta forma contienen en conjunto los recursos naturales de uso
tradicional para su ayllu.
Feria fronteriza en Colchane, 1980. Punto de integración territorial y complementariedad económica. Archivo
Acrata.
26
de suelos y recursos en sectores limítrofes. Respecto de las delimitaciones
territoriales mayores, las formas geográficas mayores como cerros y quebradas
son usados como demarcatorios y guías mentales de la limitación territorial. Don
Antonio Moscos nos da un ejemplo de ello, comoes el caso de Cariquima:
Si bien el pastoreo requiere de la presencia humana, existe una relación colaborativa compleja entre los
pueblos pastores y el ganado, éste se desenvuelve libremente, sin embargo respeta los límites territoriales, se
mantienen como en una constante organización con el pastor o la pastora.
27
Mapa de 1968. Realizado por el geógrafo iquiqueño Fredy Taberna (1943-1973 †), director del Plan Andino
IMI. Publicado en uno de los primeros trabajos de etnografía realizados en la región. Se puede apreciar la
existencia de los poblados antiguos y estancias a la fecha, y la ausencia de los pueblos actualmente ya
consolidados como tales.
28
Conocimientos Tradicionales de Ecología en el área Isluga.
Don Justino Challapa nos indica cómo los cerros resultan ser de
importancia para el orden del espacio territorial, en este caso de Cotasaya:
“ (el cerro) Cabarjaya ese es boliviano, ese cerro grande, ese otro chiquito
que esta, dos… ahí, ese se llama Sicaya, ese otro se llama Chapiliza, dos
cerros hay, otro cerro este el Volcán, Mama Huanapa, después esta nuestro
cerro a lo que responde ese se llama Saucaña”4
4
Los paréntesis son notas del editor para facilitar la comprensión del relato.
29
Cadena montañosa Cabarjaya o Cabarjay, junto a Tata Sabaya.
“ …nada nada nada, así no más, si así no mas estamos dejando ya […] estoy
porque los viejitos que hacían costumbre están dentro de la tierra ya, ¿qué
vamos a hacer?. Pucha, claro yo he visto con mis ojos como lo hacen.
Primeramente hacen vilancha, tienes que darle, eso es la vilancha, un llamo
blanco, sea como sea, para que la experiencia sea bonita, que le sirven al
cerro ser vivo. Bueno es costumbre que hacimos nosotros. ¿Estará vivo o no
estará vivo? Solo dios sabe o tal vez a lo mejor estaríamos amando al diablo,
¿al diablo también podríamos amar? mucho dicen que le dan todas las cosas,
le da más del diablo al cristiano dice lo malo también hay…hay muchos…
como Tata Sabaya que está ahí pues.
30
Claro nosotros tenemos ese respeto… por la pachamama naturaleza ese
claro ese respeto que tenemos, pero allá en la ciudad hay mucho arbolito,
cualquiera cosa, pero no hay respeto. Ahora ya ese respeto está perdiendo un
poco. Por eso estoy diciendo, ese respeto mucho mas antes había, de los
abuelos… ahora ya… así es. Bueno, poniéndose de acuerdo puede rescatar,
no ponen de acuerdo no”
31
mallkus, sino que son considerados como seres importantes, respetados por su
relación reciproca entre este como parte de la naturaleza y las comunidades5
5
Tal como podemos observar en una de las primeras disposiciones reales en Indias (America) que
contemplaba como Ley la extirpación de las costumbres indígenas y la imposición de la cultura hispana y
cristiana (Recopilación de las leyes de los reinos de las Indias, 1841 (1680)):
“Por ello se manda a todas las autoridades coloniales a que hagan derribar y derriben, quitar y quiten los
Ídolos, ares y adoratorios de la Gentilidad, y sus sacrificios, y prohíban expresadamente con graves
penas a los Indios idolatrar y comer carne humana…, ya que van estas abominaciones contra nuestra
Santa Fe Católica, y toda razón natural…” (Libro I. Título I. Ley VII, p. 3)
32
corre adelantada la nevada, mucho, adelantada… va a venir la lluvia, decimos,
sí. Cuando viene atrasado el viento, también nos trae él la lluvia, y eso es lo
que querimos nosotros.”
“ ahora no hay lluvia, porque es puro viento, hay unos cerros que avisan,
significa que va a haber agua, en la mañana me levanta, y mi abuelo me decía:
“mira hijo allá hay un cerrito que se nublo, esta semana hay lluvia (Chijo), si
hay nubes ,esta lleno y ese cerrito no esta nublado, no va a llover”. Ese cerro,
que se ve de aquí ese cerrito, allá al fondo ¿ve?, con puntita, ese cerrito
siempre me mostraba mi abuelo, ese cerro es cerro boliviano no es cerro
chileno, pero mi abuelo me enseñaba sí ese cerrito se nubla es seguro la lluvia,
sí esta nuble y esto esta todo nube acá y ese cerro no esta nublado no hay
lluvia, por ejemplo ahora yo mismo me marco ya pa’ cuando es tiempo de lluvia
Enero o Febrero, miro ta’ nublado ese cerro, calculo va a llover esta semana,
seguro cae lluvia tiene un significado ese cerro. No lo capto tanto yo, la nieve
es cuando la nube queda uno, dos ,tres días, una semana sin despejarse,
Sigue corriendo el viento al ultimo viento se calma la nube, eso ya quiere decir
que va a nevar.
El granizado también, ese cuando viene una nube con rayos fuertes o bien
aquí bota el sol y derepente se junta nube aquí negra (arriba el volcán) y cae
una granizada es peligroso y llegando sol acá, este va a caer lluvia pero va a
caer granizado, esta significando ya ,con rayos, primeramente como esta ya en
la mañana como a las 10 o 12 una sol hace total, total calor al poco aparece la
nube se junta negro y ahí viene tronando, trueno ya, esta es una granizada, los
ganados con la granizada hay que asegurar, con la granizada se va como
cualquier cosa”
33
El espacio se interpreta con su actitud de ser vivo, en cambio la fauna “nos
avisa o nos dice”, se manifiesta al ser humano, la presencia de un ave es que el
ave vino a avisar, al canto insistente, el vuelo de determinada forma y momento,
son expresiones del animalito que nos avisan sobre el tiempo que viene, y así
precaverse. Don Justino Challapa lo explica con claridad:
(Angelaius thilius)
34
Las relaciones de reciprocidad con el medio ambiente están simbolizadas
además en la ritualidad. La relación se mantiene y procura mejorar a través de
celebraciones rituales a los seres vivos, el ganado, el espacio, los vegetales. Así
se le dice a los seres vivos que habitan el territorio y colaboran en la reciprocidad
con las comunidades, “te estimamos, te tenemos presente, te agradecemos, te
damos esto… un obsequio, una ofrenda”. Lorenzo Mamani nos comenta sobre el
cuidado y los ritos tradicionales, su por qué:
“…eso es visión de nuestro abuelos que nos entrego a nosotros, hacer un floreo
o un poco de asado, se pone un poco de cerveza, empiezan a bailar, una
costumbre antiguamente de inca, muy antiguo ese, abuelo nos dejo mostrando
esas costumbres, entonces nosotros no lo perdimos, y mucho la sangre lo tira
porque uno es fanático de esa música, de la cultura que es así, entonces hay
cabros que se fueron de aquí que no quieren saber nada, se creen santiaguinos,
no quieren saber nada de aquí, “que costumbres hacen estos indios y esos
mismos indios vienen hablando”, pero hay otros cabros que van de aquí y
quieren hacer todas esas costumbres. Es una costumbre nomás. Depende de
uno nomás, es como por ejemplo, yo estoy de cumpleaños: “hagamos una
fiestita”, igual que para el ganado, tiene una fecha no cualquier día se hace, por
ejemplo antes de carnear el compadre o comadre un día y esos días se hace,
no cualquiera.
35
tiene un sentido, por ejemplo aquí nuestro abuelos nos decían que siempre
para hacer un floreo así a la pachamama, hay que botar, tirar sangre y tirar unos
cupalitos, coya un montón de cosas, así a su virgen, amo en esta tierra, en el
suelo. Muchas veces el abuelo hacia esas costumbres cuando era niño, los
animales se morían mi abuelo se enfermaba, pescaba un cordero, le cortaba y
le tiraba la sangre y el abuelo se recuperaba, muchas veces hay un poder en
esta tierra.
36
grano para poner en la mesa como ofrenda para que haya la bendición para que
este chiltando en su mesa, el próximo año el pasante, el que paso la fiesta para
que le vaya bien, tenga su más trabajo, más suerte, para eso”.
37
celebra, se pone con este, con reboce, que dicen, con ese bien bonito, con
banquitas, como una mujer que está sentado así.
Bonito, se adorna, entonces ahí hacen las veces voces, con bien bonito, los
bailan allá adentro, después pa juera, bailan, bonito lo hacían antes los
abuelos!, pero ahora esa costumbre un poquito… y ya se perdió ya, ese abuelo
está dentro en tierra también está ya, mi papá, todos esos.
“ Para la misma fecha se cosecha papa, quínoa, era bonito antes, ahora ya
no, no cosechamos así. Cuando al sembrar ya tenemos que ir a una vilancha,
matar un llamito, como sea así una vilancha, primero pa empezar a sembrar
con chicha ¿ve?. Ahora no hay mucha… un poquito, listo! y ahí empieza, así
son ahora.”
“ Nosotros regamos. Ese es… bofedal, adonde está más seco hay que
echarle agüita, más así (agrandar el caudal o canalizarlo señala con las
manos). Hay que mantenerlo los bofedales pa´ los animalitos. Tenís que
cortar con un azadón, con ese tenís que cortar pa´ que dentre el agua. Ese es
la cosa, […] tenís que hacer una acequia pa que dentre el agua allá. Pa que
llegue el agua adonde sea. Canalitos, hacimos canalitos, pa que dentre ahí,
cortamos. Dentra agua donde esta lo seco. Toda la comunidad, los que
necesita, algunos no tienen animalito, bueno, están tranqueando los que tienen
animal, se preocupan.
38
Canales tradicionales para evitar la pérdida del bofedal producto de la extracción de agua para
minería.
39
“ ahora ya septiembre, ya vamos a empezar a sembrar ya, […] quínoa,
algunos papa, habas van a sembrar allá atrás. Somos agricultureros, pero no
será mucho, a veces años da mucho, a veces años no también.
6
En la lengua aymara consonantes y vocales como la D, la E, y la F, son de escaso uso, en
algunos casos de personas aymara hablantes ya ancianas, la pronunciación de letras como la E y
la D, simplemente no se usan, o se usan con mediana complejidad.
40
Unkhalli. (Laphonetta specularioides).
Por siglos así, antiguamente decía mi abuelo peor, pura pala regaban,
hicieron un canal de tierra y traían agüita por ahí, ahora por lo menos
entubamos un resto que tenemos, pero antiguamente más. Entre todos, todo el
41
pueblo hacíamos esos trabajos, organizábamos hacer el canal, regar o por
ejemplo yo riego hoy día y toda la gente nos ayudaba a nosotros, mañana riega
el otro pariente y también ayudábamos todos, así hacíamos unos con otros una
ayuda.
Ahora no existe tanto eso, somos muy poca gente aquí, a veces ayudamos
entre 2 o entre 3, entre hermanos, entre primos pero se sigue turnándose, pero
más adelante como no hay agua, no podemos llevar, como sale agua hace tira
esta tierra, mejor es llevar en un tubo, en una cosa para que no haya tierra y tira
la tierra. Sí tu riegas la quinua y a la quinua llega harta agua, se lo lleva hasta la
quinua (el agua), no ve que aquí el terreno es en pendiente, no es puro plano”.
42
Conocimientos tradicionales de ecología en el territorio ancestral
de Cariquima.
y otros pueblos posteriores en algunos casos al 1900 y constituidos como tal son
Chulluncane, Guaitane, Villablanca, Quebe. El pueblo central es Cariquima
fundado para reunir a las comunidades de pastores en un centro cívico
administrativo, Don Crescencio Chambe de Villablanca, nos comenta el orden
territorial básico:
Mama Huanapa. Phina o Cerro tutelar del territorio. A sus pies el pueblo de Cariquima. Foto hacia
el Weste.
43
Plaza e iglesia del pueblo de Cariquima. Al fondo Mama Huanapa.
“ Ese cerro, que es el más grande, Cerro Huanapa, no hay otro cerro. Este
nomás, este cerro es el más importante pa’ todo el pueblo.
“Chacra (Qallpa) por ejemplo es una porción de tierra habilitada para sembrar
quinua que puede ser hasta seis hectáreas máximo por persona”.
“ Por ejemplo somos vecinos con Ancovinto y tenimos un límite. Por este lado
también, Huaytane es deslinde… […] Como vecinos pasamos, pero no
sembrar o agricultura, eso no. Solamente ganado pasa.”
44
“ … a pesar de esos detalles (la imprecisión de deslindes)7 en los
documentos, los abuelos de Oratorio y los de Chijo continuaron viviendo muy
tranquilos respetando los deslindes fijados por ellos entre Panavinto y
Chapcollo, por más de treinta años o sea hasta 1950.”
“ …se hace la vilancha con llamas. Eso para la pachamama, para que vaya
bien en la siembra y al señor también le echamos. En la fiesta también tiramos
una vilanchita, para la plaza, para la iglesia. Es para darle a la tierra, un
agradecimiento para la tierra, después la tierra da en la siembra. Sino, no
nomas po’. No se puede decir na’, si no se puede conversar con tierra. A
veces da su poco, a veces da más, perdimos nomás, se quemó. Si no hay
lluvia, y no sale la planta, perdimos nomás. Nada. No po’, porque la humedad
es un tiempo nomás, no es año entero. Tampoco se puede sembrar, porque la
siembreason como dos meses nomás.”
“ Eso, no hay aquí, por lo más cordillera, eso hay. Mas cordillera hay esa
agua, tienen su vertiente, tienen su jalsuri.”
7
Paréntesis es de la edición.
45
hay lluvia. Seria en enero, febrero y marzo. Ese es su tiempo. […] Si, se hace
para florear ganado nomás, para tomar cariño, para que ande bonito,
floreadito. Para que se mantenga el ganado”.
“ Si, si llega. Nosotros traemos el agua del mar, claro que con todas nuestras
costumbres, nuestro carnaval, nuestro rito, allá alzamos agüita con todo respeto,
en Iquique.
46
hacemos nuestras costumbres, paguar, y así llegamos acá con el agua de mar.
Llegamos y dejamos en la iglesia, al otro día sacamos a la mesita que es
especial, adonde se espera la lluvia. No me recuerdo en este momento, tiene un
nombre. Allá también esperamos a la lluvia.”
Si, Unaipata le decimos. Hay veces que esperamos en el cerro más alto de
aquí arriba. Si, especial. Ahí de Chijo pa’ arriba se ve un calvario.”
Don Antonio Moscoso nos cuenta sobre la importancia ecológica y ritual del
agua y su relación con los espacios sagrados:
47
Después de la cosecha, también hacíamos esa costumbre. La madre tierra
pide eso. Hay meses que no da muy bien, pero si usted ahí da de corazón,
entonces también la madre tierra los da abundante y así.
Si, antes se hacía en una fecha especial, espíritu santo le decíamos. Ahí se
hacía un rito, pero ahora no se hace. Se comía la papa, la más grande ese día,
y se comía la quinua, se hace un mocuna que le dicen. Después el haba, el
mote, y lo hacían costumbre también antiguamente. La papa más grande en
aymara le dicen Chapara.”
Para el riego nosotros hacíamos acá, para empezar a regar. A la edad mía
ya no, pero mis papas y mi abuelo hacían. Yo me recuerdo cuando hacían, era
una tradición muy interesante, porque cuando para regar el primero de agosto,
salían a reunir toda el agüita de ahí de las vertientes y hacían un holocausto
también ahí, una vilancha, y recién como a estas horas venia la limpieza del
canal para regar”.
48
relacionadas con los ciclos agrícolas, y la observación y augurio del tiempo, sea
fenómenos climáticos, e incluso el horario cotidiano. Es en tales circunstancias de
la vida andina (aprender haciendo) en que la observación de los demás seres
vivos y elementos a los que hay que poner atención cobra vital importancia.
“En mi infancia tenía que ayudar a mi padre a hacer el cultivo, todo lo que pueda
yo como niño y tenía que estar junto yo ayudándolo a sembrar, a cultivar po’.
Así uno va aprendiendo […]
Ahora también decía del tiempo de la flora del monte, este monte. “Cuando
está floreando amarilla, ese monte que se llama Sipu, ya está en punto de
siembra”.
Izquierda: Sipu tóla verde no es tiempo de siembra; Derecha: Sipu amarilla. Tiempo de siembra
“ Cada cerro, río, chacra, tienen nombre aymara que tienen significados.
Estos lugares tienen mucha importancia ecológica para la comunidad. Por que
49
en esos paisajes donde se pastorean animales domésticos; además en estos
espacios pueblan animales silvestres como vicuñas, guanacos, avestruces y
aves de muchas variedades. Los ritos costumbres y tradiciones, no se realizan
especialmente para estos espacios pero se incluyen en las ceremonias de
floreos de animales domésticos.”
Sipu t’ola.
Don Gregorio nos habla del pronóstico del tiempo anual según las
observaciones del territorio y su espacio:
50
que se yo, llegó la sombra, “estamos en la hora, vamos”. Ese es el horario,
nadie trabaja más y nadie trabaja menos”.
Cerro “horario” indicador del tiempo diario. En un tono más oscuro que el resto, va indicando el avance del
tiempo cotidiano, marcando el fin de la faena al tornarse negrito de sombra…
Para los pueblos originarios son parte de la vida, la muerte y los difuntos,
aunque suene paradójico para quienes estén insertos en el mundo urbano
occidentalizado. Los difuntos no mueren realmente, solo pasan a habitar otro
espacio dentro del territorio, un espacio inmaterial, junto con los ancestros y los
pueblos originarios más antiguos, conocidos también como gentiles8. Los difuntos
como todos los seres que habitan el territorio ancestral igualmente aportan al
equilibrio ecológico. Ellos y ellas guían a sus ayllus y familias, y a sus sucesores
territoriales en la vida cotidiana, sea en lo social, en el mantenimiento de las
tradiciones, y en la mantención del medio ambiente en el territorio ancestral. Don
Gregorio Esteban relata el rito, pero en ello afirma la presencia de los difuntos
como habitantes del territorio ancestral:
8
Se le llama gentiles a todos los pueblos indígenas u originarios anteriores a la presencia de los
europeos en América. Esto se da a raíz de la denominación que daban los cristianos a todo aquel
que no profesara la religión cristiana, denominándoles gentiles.
51
“ En sueños sí, hay veces. Se presentan no más. A los seis días, cuando el
finao’ muere, tenemos la costumbre de quemar sus vestuarios. Lo hacemos
una costumbre igual, le recogimos todas sus ropitas, todo, y eso lo
despachamos. Hay veces en que se presenta en el fuego una persona, una
cosa así. Yo me recuerdo cuando niño, aquí en la pampa, veía una persona en
el fuego, quemaban un animalito y ropa, y ahí se daba vuelta una imagen así”.
52
andinos; estos representan nuestra flora y fauna de nuestro contexto andino.
Existen muchos objetos especiales para ceremonias. Los Tatas que lo ejercen,
son los que conocen y saben el significado de elemento ceremonial.”
Textilería aymara, Pozo Almonte. Fuente: Unidad de Desarrollo. CONADI, Sub Dirección Norte. 2012
Para finalizar don Antonio Moscoso nos entrega algunas palabras a modo
de reflexión sobre la tradición y herencia cultural aymara en la actualidad:
53
Capítulo 2. Precordillera.
“…pero vino ese alud de hace 300 años yo creo, yo calculo, que no bajaba el
agua del 98 y el 2001, cambió las partes geográficas del valle de Camiña. Le
cambió la cara, es triste verlo”. Rafael Aguilar, Zaiña.
“ Nosotros para acá esta parte baja, por ejemplo de Chillayza para acá, ya
falla el agua. Por eso es que entonces tratamos de sembrar una sola cosecha
y esa cosecha que más demanda el mercado es la zanahoria. En la parte alta
se rota con el maíz, con la albahaca, van rotando, por el agua”. Celestina
García, Calatambo.
54
Y en otros casos como Bajo Camiña, la sequía forzaba al abandono cíclico de las
tierras de cultivos, como nos comenta y rememora don Ruperto García de
Chillaiza, Bajo Camiña:
“ por ejemplo en los años noventa…eh… de Moquella pa acá abajo era pura
sequía, esto usted cree que aquí iba a correr agua en este tiempo, no había
agua, entonces las comunidades de más arriba, la gente de arriba, ellos
pescaban toda el agua... tenían abarcado terreno, tenían abarcado hasta el
río, entonces como nadie controla el agua…pero la parte baja no tenía agua,
si para Calatambo no se trabajaba, salvo a veces, pero se sacaba una sola
cosecha al año. De Francia más abajo…Acá nosotros hacíamos una represa
en el río, de piedra así...a lo que era el campesino a lo antiguo...claro, en un
estanque. Entonces regábamos con ese estanque, nosotros acumulábamos
el agua, como era el chorro muy poquita agua, entonces nosotros con esa
agua regábamos. Pero hoy día ha ido cambiando po.”
Llampos, eras y terrazas de cultivo en desuso por escasez de aguas lluvias en la parte baja de Huasquiña.
En aparente abandono para los forasteros, estas tierras poseen ciclos de uso de varias décadas de
intermitencia, siendo reutilizadas en momentos de abundancia hídrica.
Valles bajos en Camiña. Recuperados después del gran guaico de marzo del año 2012.
55
De igual manera, la estabilidad del clima permitió un mayor desarrollo de la
biodiversidad local concentrándose en los valles, y paralelamente permitió una
exitosa internación y adaptación de nuevas especies traídas por los europeos,
nuevas especies tanto animales como vegetales, que en parte aportaron al
desarrollo económico y cultural transformándose con el tiempo en cultivos
tradicionales con adaptaciones a cada territorio lo que les brindo nuevas y únicas
características, y a la vez en algunos casos, también significaron la perdida de
antiguas especies locales, sea por capacidad productiva y comercial poco
rentable, sea por mero atractivo de lo exógeno.
56
Transición de Tarapaca Alto hacia Tarapaca Bajo.
57
“ Fíjese, aquí habían del tiempo de antes de la guerra todavía existían, este,
los colonos, llamémoslo así. Los lugareños de este lugar, los nativos en otras
palabras tenían su apellido y […] habían puros apellidos españoles no más acá
poh, y yo digo: ¿por qué pasó?. Cuando vinieron los españoles entonces y
entraron acá y mataron a los nativos y según yo pienso, creo, que mataron, y
otros se los llevaron pa´ arriba y ahí los dejaron porque ahí tienen apellidos de
antes, y acá puros apellidos españoles no más. ¿Entonces a qué se debe
eso?” Como unas “tomas”, o sea se apoderaron de los terrenos y a los dueños,
¿que hicieron? ¿los mataron?
Escritos con tipografía colonial, los Apellidos García y Castro grabados en la piedra caliza. Kalatambo.
58
Ano 1800 (junto a un símbolo jesuita) la cruz y el nombre español antiguo Tseberino F.
60
metálicos, la recolección de leña, yerbas y la cacería de fauna como el guanaco, la
vicuña, y las chinchillas codiciados por su piel, entre otros recursos propios de los
espacios “altos”. En los sectores “bajos” predomino la agricultura, y los cultivos
funcionales a los requerimientos de los grandes centros extractivistas de antaño,
sea generando productos agrícolas y ganaderos para el consumo de la población
humana, o con forraje para la alimentación de los animales de carga, tiraje y
transporte. Un antecedente lamentable, y poco considerado es que la misma
población de las quebradas y valles, por su cercanía a los centros de explotación
colonial, paso a formar parte de los “recursos” a explotar, siendo gran parte de la
población utilizada en trabajos forzados en la mita colonial. Siendo parte de las
poblaciones que vivieron la brutalidad de la esclavitud colonial.
Las quebradas de igual forma son hasta nuestros días los corredores
transversales entre la pampa y la cordillera, en efecto muchos de los antiguos
senderos milenarios fueron el derrotero de los caminos troperos posteriores, las
carreteras de tierra que abrieron paso a las comunidades hacia los centros
poblados y puertos, y finalmente las grandes carreteras que hoy se despliegan en
la región.
61
Estado actual de los ecosistemas precordilleranos
Acopio de desechos de minería, aguas acidas PH2.45 se infiltran en a quebrada, interior de Pica.
62
Por otra parte, igualmente relacionado al desarrollo extractivistas, el sector
agrícola se ha visto terriblemente dañado, debido a la presión que sufre por
exigencias de alta productividad de sus suelos, y por otra parte el inminente
peligro de privatización de las semillas tanto originarias como tradicionales. Nos
entrega un testimonio de ello doña Celestina García, de Calatambo, Bajo Camiña:
“ Ahora puro químico po’ hijo. En todas partes, los animales, en las plantas.
Pero poco nomas po’. Ahora está más la urea, el fosfato. Antes no había
tanta plaga. Ahora llega la arañita y hay que comprar fungicida, insecticida,
raticida… El problema de los transgénicos no es tan, si se puede decir,
complicado. El asunto es que resiste al randap [roundup], al glisofato. Ese es
el problema. Entonces como la misma empresa que trabaja con los
transgénicos, ellos mismos producen el glisofato. Es pa’ la venta eso. Eso es
lo que está haciendo rendimiento nulo a los terrenos. Ahora puro químico po’
hijo. […] …es un herbicida que al final liquida la tierra. Hay matamalezas más
simples que no matan ciertas malezas. Por ejemplo tenemos el H2ME, un
herbicida. No te mata la sanguinaria. Entonces, el randap, mata; el rango
también. Dicen que esas semillas transgénicas resisten ese tipo de herbicida
que mata la planta buena po’. El roundup dice que es malo, porque con el
tiempo dice que están inutilizados los terrenos”.
63
El uso de agrotóxicos y agroquímicos por décadas, a mostrado efectos negativos en los suelos y biodiversidad
“ antes no había plagas, porque estas plagas salieron por intermedio de los
insecticidas y los abonos, ahí vienen las plagas, parece mentira pero así
es…antes se usaban el guano de pájaro, de animal, de caballo, de cordero,
pero nada de urea, ahora está la urea.” Rupeto García, Chillaiza, Bajo
Camiña.
“ Aquí no había mucha peste para las plantas. Parece que vamos a llegar a
sufrir también po’, no va a haber comida, las plantas se van a morir, no va a
haber agua. Aquí la gente tiene que estar al lado con la bomba y si no, no
hay nada po’. Antes no había eso. Yo le voy a decir una cuestión, bien claro,
aquí se ocupaba puro salitre natural y daba lindo los productos. Yo le voy a
decir, aquí en el norte de Chile en esos tiempos corrían las oficinas, muchos
años. Era el salitre natural, Chile era el rey del salitre, exportaba a tantas
naciones, por eso es que había trabajo acá en el norte. ¿Quién nos embromó
acá en el norte de Chile? Fueron los alemanes y los norteamericanos,
inventaron el sintético, ahí fue el desastre más grande. Otra cosa amigo, ese
salitre que viene de allá, ese sintético, yo creo que ese está echando a perder
las plantas. Ese salitre de acá, da lindo los productos, natural po’. Pero como
ya le dije, a nosotros nos embromó los alemanes y los americanos, que
inventaron el sintético. Ese de la urea, esa es pura química no mas. Eso está
pasando ¿ve?” Cecilio Guaucare, Yala Yala, Alto Camiña.
Tras estos efectos esta el mercado externo que presiona con fuerza
demandando los recursos agrícolas que valles como Camiña pueden entregar,
pero pagando bajísimos precios a los productores, mientras que por otra parte
esta la influencia del discurso progresista, que apela al cambio de mentalidad en
las comunidades indígenas, las cuales cada vez reciben con mayor aceptación el
64
modelo de consumo y desecho de las sociedades urbanas, validando sistemas
productivos acelerados y desmedidos, en los que se enmarcan como estrategia
para alcanzar los estándares del mercado, los cultivos no tradicionales, y sistema
de control biológico, entre otros, los cuales constituyen conductas devastadoras en
pro de lograr abastecer oportunamente al mercado externo, pero sacrificando el
territorio ancestral y caducando el desarrollo sustentable a mediano plazo.
Cultivos tradicionales en las diferentes etapas de rotación de la tierra: en Barbecho, suelos blancos ya con
maleza y especies silvestres, preparados y fertilizados con guano y materia orgánica, y finalmente cultivados
produciendo. Zaiña, Bajo Camiña.
Sin embargo para muchos agricultores indígenas originarios, sobre todo los
mayores, poseen plena conciencia del problema, y entienden que las formas
tradicionales de trabajo y técnicas de cultivo son efectivamente sustentables y
saludables.
“ antes no había plagas, porque estas plagas salieron por intermedio de los
insecticidas y los abonos, ahí vienen las plagas, parece mentira pero así
es…antes se usaban el guano de pájaro, de animal, de caballo, de cordero,
pero nada de urea, ahora está la urea. ¿De dónde llego esa peste? No tengo
idea. Hay que estar con la bomba a cada rato. Antes no se veía nada de eso,
65
usted sembraba y sacaba su cosecha. Ahora no, tantas cosas que hay, como
fumigadoras o cuestiones para matar los bichos. Antes no se conocía nada de
eso. Dicen que como uno trae estiércol o cuestiones de afuera, dicen que por
ahí llego la plaga. Ahora hay plaga y altiro le echamos bomba, o insecticida,
yo creo que eso echa a perder el terreno. Usted abona su terreno, lo cuida y
da producto. Si usted está todos los días, que dele vuelta y dele vuelta, el
terreno se desvanece también po’, a menos que le eche un poco de guano o
alguna cosa.
Esquina inferior izquierda se aprecian pequeñas rumas de guano animal, al centro campos preparados para
cultivar.
Antes no se conocía la plaga, nada nada, pasaban los años acá y usted no
fumigaba nunca. Ahora no po’, a la semana hay que estar fumigando. Hay
personas que sacan la cosecha un año, otro año, y no le echan nunca el
estiércol… y eso desvanece el terreno, no tiene fuerza. En cambio uno que
esta continuo con el estiércol, la tierra es igual que uno y hay que dejar un
tiempito que se asolee, porque aquí están continuamente con la zanahoria,
vendimos mucha zanahoria antiguamente amigo. […]
66
Quebrada de Parca
67
ganadería y el pastoreo, y por lo tanto la dependencia económica estaba adscrita
al uso de un amplio territorio por la amplia movilidad giratoria necesaria para la
mantención del ganado, en forma similar a los territorios tratados en capítulos
anteriores de pastores altoandinos. En el caso de Parca particularmente, la
tradición agropastoril de altiplano al valle, se evidencia en el profundo
conocimiento de un territorio amplio en el que se organizaba la movilidad entre
pisos ecológicos. Tal como lo expresa don León Moruna:
68
La apachetas, me contaban los achacáis, que […] son lugares de descanso,
son sagrados, todo arriero y caminante debe hacer su ritual. Siempre se
encuentra a los pasos o portezuelos más altos, donde pasa el camino tropero,
al divisar un valle, quebrada o espacio abierto. Los pininos (piedra puesta
sobre otra) indican el camino, ejemplo: Si un caminante no conoce el lugar, los
pininos van indicando el camino, porque hay caminos que no son principales y
solo se usan ocasionalmente”
.
Apacheta camino bajando hacia Parca desde el altiplano. 1920. Fuente: Colección Acrata Iquique.
69
milenarias probablemente, no cierto, ya practicaban la minería. Porque hay
hornos de fundición… muy antiguos y fundición al aire libre que están
totalmente ya tapados con… están enterrados ya con el tiempo. Yo de
pequeño sí… de pirquinero, la última vez (que trabajo tradicionalmente) fue ya
en… antes que Colorado (la transnacional extractvista minera BHP Billiton)
entrara en su… en su auge justamente, fue lo ultimo.
Paskana con mulares dentro, década de 1970, en momentos que comienzan a llegar los primeros
vehículos modernos a los poblados del interior. Fuente: Colección Acrata Iquique.
70
río… que los antiguos lo conservaban, y con el agua hacían la canalización
justa, con cinco centímetros así de dragado no cierto para que el agua podía
mantener los bofedales y el arbusto. No había que quemarlo porque, porque si
había una crecida de agua era natural que iba a ser un corte o sea una
perforación profunda… entonces llega gente que no es del lugar y
prácticamente queman el lecho del río para que no se hagan posas para que
los animales no se ahoguen, y a la final ha causado un desequilibrio ahí
totalmente…ya no hay bofedales ya no hay nada. Por culpa de eso
simplemente no hay ganado… porque no están los bofedales, porque los
cortan… o sea son profundos, tan profundo porque la arena está ya blanda y lo
come de tres metros, cuatro metros y el bofedal queda arriba y adónde ya, se
seca… y también en los cerros han quemado las pajas, han quemado la
yareta, han quemado una hierba que se llama la colla 9… incluso hasta la
queñoa, ya no existe.
ya no está ese medio pa’ poder tener más ganado… y además la época de
sequía a sido totalmente fuerte …que más le puedo decir… la ganadería tenía
las costumbres, los floreo de ganado que empezaban con un ritual… ese
empezaba con una víspera […], pero tiene otro nombre, me cuesta
memorizar… […] en la casa se espera toda la noche y las personas que
asisten hacen su ceremonia de acuerdo a la costumbre, y al día siguiente se
hace el floreo… se hace la vilancha en la mañana, se sacrifica el animal… y
posterior a eso…el indígena tiene su propia costumbre digamos… no sé si le
puedo contar todo…
9
La Colla es una planta sagrada, fundamental en el uso ritual andino.
71
Parca?. Fuente: Colección Acrata Iquique.
Carretas y arrieros transportando largas vigas de maderaque acercadas a las quebradas, luego serían
transportadas por mulas “parejas” hasta los pueblos, materiales que luego formarían partes de iglesias, y
casa. Fotografía de1865, en algún lugar de la pampa. Fuente: Calisphere UCLA
73
que va a manejar el rebaño, siempre va a andar adelante, siempre todo el
rebaño lo va a seguir” , entonces ese, a ése elegir… igual las hembras es que
siempre dirige al rebaño, ése elegir… ese es el caso del llamo, los corderos los
cabros, incluso las tropas de los animales, los burros, las mulas, le dicen al que
dirige… el rebaño, la manada le cuelgan una campanilla, en el caso de los
arrieros, las tropas van con una campanilla y ese va adelante le van a seguir
todos las animales, no se pierden!.
74
“ Había (ritos y costumbres)… ahora no ya no, la juventud ya no la estila… lo
considera algo que no es… (Silencio) …no es lo ideal… se ha perdido la
cosmovisión del andino o del indígena podríamos decir…” […]
“ En todas las áreas, como le diría yo… en una palabra sea simple... por
ejemplo hoy día la religión tenemos las… las capillas en todos los pueblos no
cierto… el indígena en si tenía bien claro, porque lo del alto, no es cierto, lo
del medio, donde estamos nosotros, y lo que hay debajo de la tierra… por
tanto no cierto… no con el nombre que lo conoce hoy día la religiones, por
ejemplo dice “dios” esta en lo alto no es cierto, y el diablo esta debajo de la
tierra… pero si el indígena lo interpretaba tan perfectamente bien que decía…
para poder hacer una iglesia, “cristiano” pongámosle por ejemplo, “había que
pedir permiso a… al tío”, que le llamaban… “porque aquí este lugar va a ser
p’al altísimo”… entonces en otra ceremonia por ejemplo, en el caso de si
encontraban una veta, una mina…primero piden permiso arriba para poder
yo sacar de acá abajo… “porque aquí voy a hacer la casa divina… aquí no
vay a entrar tu no teni cabida, no teni espacio en este lugar… podi estar por
fuera pero acá no entrai”… “
75
llamo dos llamos… y antiguamente todos tenían ganado… en el caso de
Parca, todos tenían ganado.
…los techos para las casas, la construcción de las casas, todo era lo mismo,
todos juntos…si alguien se casaba, también necesitaba su casa… allá todos
miéchica, “hay que construirle la casa” decían. Siempre ha habido
celebraciones, siempre ha habido rituales… por ejemplo existen dos tipos de
rituales, uno que es el sacrificio del animal y el otro, simplemente que se llama
una pequeña “chollaza” le decimos nosotros, un pequeño ritual en que se
queman los puros productos, no hay sacrificio.
76
Es más importante el ritual… tiene más importancia, pero cuando no, no hay
sacrificio no… ahí depende de la persona, de la familia… o la persona
indicada que va a construir su casa va a hacer siembra… lo que sea… si
quiere hacer vilancha, hace vilancha si quiere hacer un ritual más pequeño…
si ya…allá no hay llamo, no hay oveja, están los puros conejos… la gente
simplemente es más, más cómoda… no está dispuesta a sacrificarse un poco
porque… la misma civilización lo lleva allá… y a ser esclavo del trabajo… y
ahí vive y eso no solamente pasa en Parca pasa en todos los pueblos.
El indígena así, el nativo, tiene una reciprocidad, cierto… que todo se respeta,
todo se respeta y quizá si yo tengo una casa… no puedo quebrarla po… y si
la quiebro es como quien cometió un error… y merezco un castigo… en la
ciudad no po… ahí yo soy yo y yo primero, yo después e incluso simplemente
hay personas que no son creyentes de nada… solo basado en la capacidad
intelectual… […]”
“es la fe, la fe del ser humano, así como tenemos fe en un dios dentro de las
religiones, cierto, el andino tiene una fe profunda en todo lo que le rodea… y
su lectura para poder saber, la tenia dentro del mismo ambiente que le
rodea… de los pájaros, del zorro… que aparecía un águila, una paloma, que
apareció esto, que encontré una culebra… le dan un mensaje también…
decía “bueno pasó un águila negra…no viajo hoy día”… tenía que viajar el
arriero… paso un águila negra y decía… “ah no, mejor descargo los animales
viajo mañana”
“…había rituales para esperar la lluvia… rituales muy especiales, que hoy día
no se practican ya…Que intentaron practicarlo un tiempo pero no dio
resultado porque no… está esa relación hombre naturaleza porque ya se ha
perdido ya no existe ya… […] para esperar la lluvia realmente se hace un
ritual. En el lugar donde se va a hacer el ritual van a hacer víspera anterior,
toda la noche se van las personas… con los elementos que requieren la
costumbre… alguna persona se encarga de venir a buscar el agua al mar, y
tiene que llevarlo antes de veinticuatro horas llegar al lugar… porque según
dicen los antiguos de que el agua a las veinticuatro horas muere. […] la gente
que está esperando, también espera con el agua del lugar, ya sea de las
vertientes, de los bofedales, de los puntos principales, porque los antiguos
tenían su lugar, “esta agua de acá, vamos a juntar las dos aguas”. Muchas
personas compraban utensilios especiales para eso o hacían utensilios
especiales que tenían que ser vírgenes, por primera vez tenían que ser
usados, y estos utensilios podían ser descubiertos o con tapa, cualquiera de
las dos cosas… y hacían el ritual al día siguiente, cuando llegaba el agua
volvían a hacer la costumbre que tienen todos los pueblos anteriores que le
decía yo, la vilancha….”
“ …de las heladas, del hielo se protegía, en la mañana a las cinco… o seis
de la mañana, haciendo humo de estiércol, para que el viento lo lleve en
sentido contrario y eso protegía de las heladas”
Don León agrega una de las causas que han generado uno de los mayores daños
ambientales, en la agricultura y cultura es la mega minería:
78
servicio agrícola ganadero ver si tienen alguna infección o es simplemente el
agua, para nosotros puede ser el agua o el mismo arbusto que ellos comen
no es cierto porque ese sector esta contaminado ya, pero eso yo no lo puedo
asegurar, es una suposición la mía […] los zorros no son tan depredadores,
seria más que sea de peligro porque el zorro come de todo, es igual que el
cerdo. El que podría dar seria el puma, pero el puma no llega a Parca
siempre se localiza en la parte alta… de Noasa hacia la cordillera”
Organización comunitaria en la década de 1970 para la defensa del agua en el altiplano, quebradas y oasis.
Fuente: Colección Acrata Iquique.
79
Quebrada de Mamiña
80
habitantes de origen Quechua: El caravaneo y luego el arrieraje, y la agricultura.
De ello dan cuenta fiel doña Victoria Caqueo y don Lucas Cholele:
Mamiña, plenamente cultivado a principios del siglo pasado, sus casas aun no conocían el zinc. Colección
Acrata Iquique.
81
Tal como en toda comunidad andina los cerros son una presencia viva
fundamental para el desarrollo y sobrevivencia del pueblo y su comunidad, en este
caso la ocupación precolombina de los cerros se evidencia a través de sus
vestigios:
Si, el cerro Piedroso, que es el más alto. Uno nunca tuvo eso de cuidar, de ver
o tomarle interés a lo que es nuestro, ha venido cuanta gente han sacado
cantaros, tanta cosa de valor. […] Ese se llama cerro El Inca. El Piedroso es
más abajo. […] Yo creo que los antepasados tiene que haber hecho algo, tiene
que ellos haber tomado ese cerro como algo precioso, como un monumento,
porque imagínese ir a enterrar sus cosas allá, como quien dice protegiéndolas
de lo que podía pasar, las iban a enterrar allá. Lo que yo vi aquí al frente en el
cerro de la cruz, tres cantaros, que como hay las holladas así en los rincones y
cuando llueve baja el agua, entonces el agua los dejo asomando, pero una
parte. Mi mama decía que uno nunca debe intrusear las cosas que no le
corresponden, entonces nosotros nos fuimos, porque en esos años, después
que llueve en marzo o abril, dan las tunillas, son unos frutos, entonces íbamos
nosotros por detrás de donde estaban los quiscos a recoger los frutos y ahí
salieron los cantaros, inmensos. Después le dije a otra persona que los fuera a
ver, pero ya no existían ¿Quién los sacaría?[…]. Cuando los veo ahí, mi mama
decía, uno nunca debe ser intrusa, no debe sacar las cosas que no le
corresponden, que de repente algunos dicen que ponían a los finaos’, a las
guaguas, dentro de esos cantaros, para dejarlos ahí protegidos, pero nosotros
nunca, ni siquiera los vimos, si no que vimos la parte que se había despejado y
eran así los cantaros.
82
Quebrada de Mamiña en 1940, se aprecia el cultivo hasta las laderas de cerros. Col. Acrata.
Yo recuerdo cuando era niña, mi papa murió cuando yo tenía nueve años, y
mi abuelito hacia los viajes con las verduras, con las flores a las oficinas y de
allá nos traía la mercadería en burro. Había que hacer viaje en burro, la mama
de él también.
Mamiña 1904, frente a la iglesia del pueblo. Se aprecian recuas de llamas cargadas, junto a peleteros
italianos. Fuente: Colección Acrata Iquique.
83
Día por medio salía una persona, por ejemplo si hoy día le tocaba a una
familia, mañana o pasado le tocaba a otra, entonces se encontraban en el
camino unos que iban y otros que venían con las cosas, pero llevaban toda la
verdura y fruta, en el tiempo de fruta, a vender a las oficinas. Algunos tenían
sus caballos también, pero la mayor parte burros. Seis, siete, ocho burros
cargados con las verduras, flores y frutas a las oficinas salitreras, algunos a
Mapocho, a las estaciones también, a Huara, Pozo (Almonte), a esas partes
iban, a la mama de él (Lucas Cholele) yo la conocí viajando en los burros.
Varias personas. Cuatro días se demoraban de bajada y subida.
Habían lugares en varias partes que les llamaban las paskanas, pero
debajo de un árbol tiraban las ramas para protección y ahí dormía la gente
cuando se le hacía demasiado tarde, donde había un chorro de agua para
ponerte, entonces la gente sabía que ahí tenía que descansar, para poder
lograr seguir el viaje.
Muchos animales, algunos tenían hasta diez burros, porque cargaban los
animales para llevar las cosas. Había corderos, se criaban patos, gallinas,
conejos, cuye, todo eso se llevaba a las oficinas para venderlos. Ahora ya no
hay ni siquiera un cordero que uno pudiera decir, mire vamos a comprar,
vamos a matar un cordero. Si todos tenían corderos.
84
Cuando mis niños estaban chicos yo, a dios gracias, nunca compraba nada,
tenía cordero, tenía patos, tenía gallinas, pichones, conejos, entonces uno…
todo natural. Nosotros nos criamos con cosas naturales, no como ahora en la
actualidad, que todo es artificial, que a los dos meses están comiendo las
gallinas, los pollos. […] Si po’, porque ahora están inyectadas, les ponen
hormonas, todo eso que no ve la juventud, cómo esta tan degenerada, tan
gordas, y antes a donde aquí usted veía una abuelita con una cintura que
daba gusto verla. Bien esbelta porque se criaba con cosas naturales, con los
animales que uno criaba, lo que uno plantaba, nada de artificial. […]”
“…Por ejemplo cuando uno plantaba algo que sabía que se iba a helar, los
abuelos nos mandaban a acarrear guano de los animales. Poníamos en las
esquinas y en la tardecita había que prender eso. El humo de eso como que
protegía para que las heladas no cayeran tan fuerte. Eso era, así se hacía. Mi
mama nos mandaba a nosotros a la chacra a dejar así en las esquinas un buen
poco de guano y a dejarlo prendido.” {…]
“ Ahora la urea, dígame usted, es una cosa artificial y antes se iba a la oficina
a traer salitre para abonar las plantas, y el guano de los animales, y se tenía la
verdura, se tenía todo, no se compraba nada. Había papa, había zanahoria,
todo se sembraba. Uno sembraba harto maíz y tenía pal’ año, porque acá se
siembra una sola vez al año el choclo, por el clima, que después se hiela y no
hay. Entonces uno hacia secar, tenía pa’ la harina tostada, tenía el tostado,
tenía los choclos, tenía todo.
Mamiña, antiguas casas coloniales frente a las chacras totalmente cultivadas. Fuente: Colección Acrata
Iquique.
85
No era como ahora que todo se compra. Yo traía abono de la pampa, el
caliche, el salitre. Cuando iban con los viajes, venían los burritos cargados con
salitre, con caliche. Volvían con mercadería y el abono, el caliche y el salitre.”
“ Esa es la vida de Mamiña, la agricultura usted no veía una era de lo que
ahora, todo se ve lleno de maleza, sorona que es lo que más abunda, nada,
todo sembrado de flores, de verduras, de pasto, de maíz.
Los árboles, acá se daba mucho las peras, las ciruelas, los tumbos, o los
membrillos, todo eso se daba y todo eso se llevaba a las oficinas a vender.
Ahora usted no encuentra una pera con la cuestión del polvo, ellos dicen que
no hay contaminación, yo una vez le dije a un señor que estaba a cargo de la
mina en una reunión, ¿Por qué ustedes no enseñan a un mamiñano a controlar
esa máquina del ambiente? Porque si ellos lo controlan, ¿van a decir que hay
contaminación? No po’, no van a decir nunca que si hay. ¿Por qué no
cosechamos una pera?. El membrillo, que es el más firme, todavía hasta hace
dos años atrás, se sacaba pero sacos de membrillo, ahora se encuentra uno o
dos membrillos en una mata. Cuando empezó el mineral fue decayendo
Mamiña, la ciruela nosotros sacábamos, porque yo criaba de todo, esos baldes
grandes llenos de ciruelas que recogíamos para los chanchos, a donde caían
tanto. Mandábamos cajones, allá se mandaba a las oficinas lo bueno y lo que
caía al piso, todo para los chanchos. Ahora no encuentra una. […]
Cerro Colorado, está a una distancia tan corta. Ya no se saca una pera. Ha
cambiado ahora el tiempo ya po’. Ahora no madura, o no se cultiva, está el
árbol pero no da. Usted va y toma una hoja del árbol, esta como que tuviera
tierra, como que tuviera eso. ¿A quién le echamos la culpa?”
87
Ya la demás chacra de todo esto no, porque solamente tienen los nombres
pero se riegan con el agua de la vertiente principal, porque de ahí es el riego
para todo este sector. […]
“ Por ejemplo en la chacra de San Antonio, que es la chacra de mi tío, el
estanque es un estanque chico, y el agua va resumiendo de allá. Cuando
nosotros teníamos esa chacra pagábamos a una persona para que vaya
limpiando, porque de por si a veces cae tierra, o cae una piedra, entonces
queda como un hoyo para adentro, eso es donde va resumiendo el agua.
Para que llene el estanque, hay que mantener el socavón, como nosotros le
llamábamos. Hay que entrar a los socavones a limpiarlos, para que el agua
corra mejor al estanque. No solamente en ese lado, en Huatapa también, lo
que era de don Isidro, también hacían limpiar el socavón para que el agua
llenara más luego el estanque. Eso es en algunas partes, no en todas, en otras
el agua va aflorando de ahí mismo. Hay una vertiente que le llaman el coco,
tiene una entrada así. […] para mí que son nombres de palabras quechuas,
que nuestros abuelos, antepasados, les pusieron su nombre. […]”
“ Antes la lluvia empezaba en diciembre, enero, febrero. En marzo ya había
que limpiar los estanques, los caminos, todo eso. En ese tiempo era así, ahora
está todo cambiado.- Ahora no tenemos ni lluvia y a veces llueve, pero como
una loquera de lluvia, y ya no es provechoso, porque anteriormente usted veía
que llovía, y llovía pongámosle por decir, tres veces a la semana, después
paraba, asoleaba y volvía a llover. Después se veían los cerros verdecitos,
porque las semillas que van quedando después van brotando nuevamente con
la lluvia. Pero si llueve una sola vez y después ya no llueve, eso no va
88
germinando. Las semillas van saliendo y se van aplastando. Anteriormente no
po’, llovía y volvía a llover, entonces crecía y crecía, se veían lindos los cerros
verdecitos. Los quiscos que habían daban frutos, hasta que crecían, después
cuando estaban floreando volvía a llover y ya los frutos eran así.”
Cucúlas o Cuculís, (Zenaida auriculata) Agorera matutina del fin de la vida, se resisten a
abandonar las quebradas gargantas secas de la precordillera…
Por ejemplo esos que le llaman los lucucos, las lechuzas, esos. Eso es lo
que mi abuelito decía, que alcance a conocerlo, cuando estamos en la chacra y
va en la tarde a cantar, cu-cu cu-cu, así cantaba el lucuco, eso era mal agüero.
89
Decía: “alguien de la familia va a morir”, y justo, anunciaba. Yo alcance a
conocer eso y lo pude palpar ahora vieja, […] fue en la calle y ahí no hay
árboles no hay nada, y el vecino de al frente estaba delicado de salud, y
despierto tarde en la noche y siento cantar al bicho. Sabe que a los dos días
murió mi suegra, estaba buena y sana. Le vino un paro, se acostó a dormir y
no se levantó, a las seis... Esos bichos anuncian.”
“ Igual que cuando se encuentra un zorro, también dicen que al ver un zorro
en una parte que nada que ver de donde uno pudiera ver un zorro, también
los abuelos decían que era mal agüero.
Si, se ven y en pleno día a veces. Un zorro que nada que ver, usted lo ve, o
ve un vehículo, y corre a perderse. Pero un zorro que yo pienso que es así, se
queda parado mirando como que si nada. A nosotros nos pasó hace como
dos meses, que murió la Andrea mi cuñada, estaba en Calama. Veníamos
como a las 11:30 de Iquique con mi yerno, y acá en Lugaya, en una chacra,
me dice mi yerno que hay un zorro, pero a esas horas un zorro. Retrocedió la
camioneta y lo veo al zorro: sentadito y me miraba con una cara, y no se
90
movió. “Que estará anunciando este zorro?”. No pasaba nada y murió mi
cuñada, también en el sueño”.
“ Pero muchos años atrás, los familiares iban a dar vuelta la tierra. El dueño
de la chacra tenía que hacer el almuerzo con platos típicos de acá, todo lo que
uno tenía, todo natural. Todas las personas venían a almorzar y uno cuando
iba a avisar a las personas que estaba listo el almuerzo, tenía que quedar la
olla de comida para la tierra y había ollas especiales, unas ollitas de fierro. El
primer plato que uno comía tenía que quedarse para la tierra. Estaba el
91
puchero, el picante… En la chacra se servía y el primer plato era para la tierra,
después ya los trabajadores se servían. Ahora todo eso se ha perdido, […] ya
la tierra no nos quiere producir, porque ya no se hace lo que tenía que hacerse,
porque uno era consciente que la madre tierra era lo más sagrado.
Cuando se cosechaba deshojaban el maíz, lo dejaban en una era y de a
poco lo iban recogiendo. Hasta que se secara bien, porque la gente cortaba el
maíz, cortaban montones y uno iba a ayudar a deshojar. Así se iban tirando
los maíces. […] Acá nunca se hizo vilancha, porque eso era costumbre de
otros pueblos. […] Ya como que se fue quedando el plato de kalapurka como
costumbre, pero eso no es plato nuestro. El puchero y el picante de conejo y la
patasca son platos típicos del pueblo. El puchero es como quien ve una
cazuela, que lleva la carne, la papa, el zapallo y en vez del arroz el maíz
pelao’. El maíz que cosecha se pela y se deja secar y se ocupa cuando uno
quiere y eso se hace cocer y se le echa coles, que es también lo nuestro, y un
poquito de chuño. El maíz pelao’. Ese es el plato típico del pueblo. El otro
plato, la patasca, es el trigo raspado, se raspa el trigo, na’ que mandarlo el
mote que traen, no. Con una piedra. Los abuelos lo remojaban y lo raspaban.
Eso lo cocen bien cocido y se hace con conejo y con papitas. Se hace un plato
exquisito. Eso es algo nativo de lo nuestro.
Mamiñanos y mamiñanas bailando cachimbo en la calle frente a la iglesia, 1904. Col. Acrata Iquique.
“ Seria lindo ver esas verduras grandes, tan lindas, de todo, que además de
que se ocupaban en la casa, se vendían y eso era un sustento para el hogar.
Sería una gran cosa tener nuevamente gallinas, conejos, todas esas cosas. La
agricultura esta más pérdida ahora por el tiempo, no desarrolla como antes la
verdura, será por el clima que se ha echado a perder. Igual que la fruta que
antes se daba, ahora no po’. Dicen que son los gases de las minas, ¿puede
ser no?”
92
Quebrada de Quipisca.
“…el Sur, está con la carretera que va a Mamiña con Dupliza y por el Este con
el cerro de Cerpejo…”
“ Las familias cuyos apellidos más originarios del lugar que forman sus
troncos familiares son: Callpa, Estica, Paicho, Quihuata, Bacian, Cholele,
Capetillo, Caqueo, Martínez, Cautín, Fuentes, entre otros”.
93
Imagen de ruinas arqueológicas de andenería, en la década de 1970, hoy desaparecidas por el paso
aluvional. Colección Acrata Iquique.
94
Respecto de la diversidad de cultivos que se lograban producir
tradicionalmente en Quipisca y las causas naturales del abandono cíclico de los
cultivos, doña Martina recuerda:
“ antiguamente cuando bajaba agua no eran en las cantidades que bajan hoy
en día y bajaba agua y después como eran lluvias continuas y siempre bajaba
el agua… además de que no se podía pasar pero cuando disminuye el agua
ahí se puede pasar un poquito con un burro pa trasladar la mercadería…pero a
la vez favorecía porque quedaba el agua corriendo durante el año y la gente de
Parca, de Mamiña bajaba a sembrar trigo en Quipisca porque había mucha
chacra para abajo que son chacras de esas temporadas y cuando hay harta
agua la sembraban con trigo, zapallo…” […] ya no ya porque ahora están los
molinos y además que casi ya no se siembra trigo también porque no queda de
esa agua corriendo, cuando queda corriendo por lo menos la gente allá los
tipos sabían esta agua va a quedar corriendo hasta septiembre hasta agosto
entonces se sembraba…o a veces quedaba corriendo todo el año también”
“ Lo rico de su microclima, hace que este valle sea apto para el sembradío en
cualquier época del año, muy raras veces se conocían las heladas, los
96
productos que se sembraban habitualmente eran la variedad de verduras,
hortalizas, tomates, ajíes, maíz, flores… cosechas que eran trasladadas en
lomo de animales hacia las oficinas salitreras de esa época, la alfalfa o pasto,
también era comerciable, las familias de aquellos tiempos, debido a su
abundancia, criaban sus propios animalitos para su “gasto”, como se le
llamaba entonces, me refiero para su propio consumo. El guano que juntaban
en sus corrales, lo utilizaban para guanear sus tierras cultivables,
acompañados, del salitre, salitrón o caliche que traían de las salitreras en sus
viajes de regresos de las pampas, todo esto gracias a la abundancia de las
aguas que corren por la quebrada, la cual ayudaba al riego ordenado por
mitas, huertas, pastos, maíces, flores, de acuerdo a una escala jerárquica de
cada siembra, en menor escala sembraban el pepino dulce, la sandía, el
melón, solo para el uso personal de cada familia.
“Morada en la salitrera, cerca de Iquique. Perú”. Se aprecia la recua de llamas, junto al amular. Col. Acrata.
97
“ yo me acuerdo que mi papa cuando ellos trabajaban con mi mama en la
chacra, ellos lo único que usaban el guano y… para ayudarse a veces era el
salitre… y no había nada más que eso, y si tenían alguna peste como yo le
decía el piojillo ese…ellos lo hacían lo combatían con ceniza o si los tomates
era lavándolos no mas. Ceniza sola no mas… eso era lo único que tenían
para poder combatir no…es que no había grandes plagas ni nada. Lo
echaban en la planta y a veces si era necesario a veces en la tierra, ahora yo
siempre veía a mi mama que a veces por el tiempo de repente ella le ponía en
los “pomos” le llaman, en la entrada de la era porque como eran así por
inundación, entonces ahí siempre ponía guano a veces ponían hasta ceniza
ahí entonces eso me decía que para ahuyentar las plagas pero allá tampoco
nunca hubo problema de helada”
“ Es que es una combinación mire…lo que yo sé, que antes casi no veía así
que… se hicieran algunas pawas…casi no los vi pero si era el respeto a la
tierra…el respeto a la tierra que si uno iba a comer algo y le daba primero a la
tierra, el trago por ejemplo si es… por ejemplo eeh… si se juntan alguien así
para poder compartir algo celebrar algo entonces siempre le dan un platito de
comida a la tierra […] en Parca se veía así que habían pawas o collar antes
de sembrar...y en Mamiña también algunos, no todos tampoco… entonces
cuando ahora retomamos otra vez la agricultura en Quipisca ahí nosotros lo
conversamos dijimos que había que pedirle permiso a la tierra para sembrar
así que nosotros apoyamos, y siempre lo hacemos antes de sembrar.
Generalmente se hace una en forma general que es el primero de agosto
de… de collar, de también estar así en armonía con la naturaleza, con los
espíritus de los cerros, con la madre tierra, con el sol, con nuestros
antepasados y por eso que uno tiene que tener la coca hay que tener, la colla,
la cupala que es pa la tierra, pero eso va todo en armonía también con dios.
Collar significa purificar el sector, la tierra y para eso se necesita una hierba
que se ocupa que en los cerros mas pa la cordillera hay… es una hierba y se
llama colla, y es para purificar, para poder pedir permiso y pa la tierra tiene
que ser con la cupala. […] para collar no se ocupa todo los elementos, no se
ocupa todo, la pawa tiene que tener todo, tiene que tener, bueno nosotros lo
98
hacemos más simple… […] la colla igual, la cupala, el incienso, el alcohol…,la
coca también, y el trago para poder brindar… pero más completo ya seria
tener el unto que lo usan, que lo ocupan también que es una parte del animal
y… ¿qué otra cosa más nos faltaría? Bueno otras personas necesitan otras
cosas más pero nosotros hacemos más simple. Como comunidad todos
participan, más bien para apoyarlo puedo hacer uno como familia, por eso le
digo que es algo más completo, nosotros lo que hacemos el primero de
agosto es en forma general y ahí se tiene que pawar”
La pawa, se realizaba para algo importante dentro del pueblo, para iniciar un
proyecto, para la celebración del Inti Raymi (fiesta del sol), para dar gracias,
para pedir permiso a la tierra, esta tenía la cupala, la colla, el hunto, la hoja de
coca, la chicha de maíz, el agua, la mesita, dulces, papelillo, serpentina,
mazorca de maíz, trigo, algunos productos de la tierra, y la infaltable yigya
manta tejida de lana de alpaca, con sus colores tradicionales de la tierra, los
cerros el agua, (colores grises, rojizos, azules, amarillos, blancos). La cual al
extenderla se iba ordenando para el ceremonial, caracterizada por sus 4
esquinas que simbolizan los puntos cardinales, y el salud se hace siguiendo
las manillas del reloj por la derecha, finalizando por la izquierda, todos
incoados, la gran diferencia con el ritual aymara, es que no se pone licor o
cervezas en la mesa estas se reparten después para brindar. Al finalizar la
ceremonia la mesa ofrecida, se quema en la fuego que se debe realizar en
conjunto al inicio de la ceremonia, esta va ofrecida a nuestras divinidades, a
los espíritus, a los cerros (apus), a la madre tierra pachamama.
Luego tenemos las familias que quedaban aisladas por la bajada del agua:
Don Ornaldo Bacian nos entrega unas últimas reflexiones, que concentran la
visión actual de la quebrada, mezclada con los anhelos de los tiempos anteriores,
100
prósperos y llenos de identidad. Y se permite una critica sentida y sincera sobre el
deterioro ambiental de las quebradas y valles y sus causas:
101
Quebrada de Macaya
“ Aquí en Mamiña no, en los lugares más apartados, por ejemplo de Macaya
para arriba, ahí trabajaron hartos pirquineros. Antes no habia huella para alla,
los traían para aca en burro. En Macaya habían pirquineros. El metal po’, el
cobre. Bajaban ahí con lámpara a carburo, no ve que esta oscuro adentro.
Seguían la guía. El campo para las personas que quedaban trabajando ahí
hasta que completaban la cantidad de media tonelada o una tonelada para
traer en vehículo. Primero lo traían en burro pa’ llevar y después hubo huella
para allá, pero no hasta el mismo mineral, hasta cierta parte llegaba el vehículo
y ya lo cargaban e iban a vender. En Mamiña nunca se vio un mineral, de
haber tiene que haber, porque por lo que se ve y lo que contaban los abuelos,
hay minerales, pero no han sido nunca explotados.”
“ tradición minera, ahí está la mina Yabricoya, Citilca, Columtuza, Pila 1, Pila
2, San Ambrosio, San Félix, La Aplanada, La Hundida, La Tigre… pero
rodeado de minas de los españoles que llegaron cuando estaban los
incas…está la mina El Inca también… y hay un paso del Inca. Ahí si tú vas
para allá… existe el cementerio indígena incaico… porque se enterraban en
Chulpas, así redondo con piedras todo… está pero desgraciadamente lo
saquearon... Harán 36 años atrás porque estaban haciendo un camino para la
mina Jauja y en los cerros así en la falda del cerro encontraron… […]
102
…durante las oficinas salitreras los pueblos tenían un comercio bastante
grande, para ellos y yo pienso… la contribución que hicieron ellos al país…
porque imagínate si no hubieran estado ellos qué comen en las salitreras…
tenían verduras, tenían el charqui, a veces traían la coquita… tenían todo, ellos
abastecían a las salitreras. Ahí fueron olvidados, cuando se acabaron fueron
olvidados pero por años, años de años fueron olvidados, porque la mayoría se
entusiasmó y fueron a trabajar a las salitreras… ya muchas familias llegaron
acá, tuvieron sus hijos y después quedaron ahí, otros se vinieron a Iquique,
otros a Antofagasta y así se fue… porque ni hubo ninguna ayuda para los
pueblos…quedaron sin huella… el año ‘57 recién se logró que Macaya tuviera
huella hasta allá mismo, a pulso, y tú tienes que ver hoy día hay pueblos que
tampoco tienen huellas, todavía se trabaja en burros, sacan sus verduras en
burro llegan arriba y ahí recién los tiran, imagínate estamos en el siglo 21 y
todavía el gobierno no, los gobiernos no ayudan a los pueblos, la verdad que
yo creo que quieren exterminar… el indígena porque arriba están todas las
riquezas…
“ …la mujer en la agricultura… había división del trabajo, como los hombres
trabajaban en minería entonces siempre era la mujer la que mandaba porque
ella quedaba a cargo de la casa, de los hijos y todo el asunto, entonces ella
disponía, mandaba… nosotros nos regimos por matriarcado en Macaya… y del
ganado también, pero poco, en comparación de lo que hay ahora antes era
bastante, era mucho ganado… […]
y las bajadas de agua… bueno ellos los veían con los animales, porque los
sapitos empezaban a subir… ya cuando los sapitos, por ejemplo nosotros
estábamos en quebrada, cuando los sapitos llegaban arriba a la primera parte
de la calle así ya decían va a haber el aluvión… y pasaba al tiro… si fíjate que
por ejemplo mi madre… ella iba a un lugar y sacaba ahí mucho cuarzo, sacaba
cuarzo… entonces ella llegaba, sacaba estos cuarzos, los lavaba bien lavaítos
y después llegaba y le echaba sal… y esperaba luna cuarto creciente, lo ponía
afuera así no mas… lo ponía ahí… cuarto creciente, cuando pasaba a luna
llena más o menos en esas fechas sembraba… entonces estos cuando ya
pasaba cuarto creciente lo enterraban en las esquinas de las eras…en las
cuatro esquinas de las eras, entonces después llegaba y cuando había que
sembrar preparaban la tierra, cuando había que sembrar ellos preparaban una
olla de picante o de puchero y toda la gente se reunía, iban a dar vuelta la
tierra y a sembrar, y los asaos o bien el picante, el puchero… se reunían y
antes de eso ellos ponían un manto, una llijlla10… y hacían un hoyo y ahí le
daban alimento a la madre tierra…
10
Pequeño textil de uso ritual, cuya funcionalidad es de servir como mesa ritual.
104
“ No, en Macaya algunas personas como que llegaron de afuera que utilizan
la urea y todo eso, pero actualmente más el guano de cordero… se producía casi
todo, desde habas maíz, trigo, ajo, papa, zapallo… el maíz, porque nosotros
tenemos agua de vertiente, es dulce… entonces tu comes un choclo y comes algo
dulce. si porque es la fuente de vida para nosotros además que son baños
termales… es vida… también se realizaban ceremonias porque, bueno yo siempre
escuche que ahí, esa vertiente tiene su dualidad… te hace bien y también te hace
mal, hay dos entes…ahí, pero siempre nos enseñaron a respetar las dos
entidades y a no tenerle miedo a la entidad “que es mala… que los va a tomar,
que el ojo de agua, que cuando se salga se le pesca de acá del pelo y se le llama,
que no se asuste, que no llore” (como suelen decir), todos esos cuidados… yo
escuchaba de mis tías todos esos temas, de que ellas habían visto… veían ponte
el caso una culebra ahí donde está el ojo y no había que tenerle miedo si no que
al contrario había que saludarla… y no dar vuelta la espalda porque si tú le das
vuelta ahí te toma… entonces si tú por ejemplo que te duelen los huesos, que
tienes alguna herida y tu vas y pides que el agua te haga bien realmente pero
milagrosa te sana… veían te digo cerdos culebras sapos y distintos tipos de
animales… los veían pero después se volatizaban…. […]
yo te voy a contar una experiencia que la viví yo… estando allá hace poco,
el año pasado, yo me levanto a las siete de la mañana y me iba a bañar… cuando
y vivía allá, a las siete, siete y media llegaba allá al baño y me metía, en eso me
meto así feliz de la vida, porque son aguas espectaculares, y miro así y veo un
sapo pero era de este volao el sapo… y me acuerdo y le digo buenos días señor
araraque, porque mi madre le llamaba araraque que eran los guardianes… buenos
días señor araraque qué hace usted acá y el sapo me miraba y yo no me di vuelta
quede ahí y como no se iba, entonces le digo yo señor araraque usted sabe cantar
le voy a cantar y yo no sé porque empecé a cantar canciones infantiles… y
mientras cantaba no le quitaba la vista y de repente este animal hizo esto y se fue
y yo le empecé a retrocederme salí me puse la toalla y partí y me tire de las
mechas me llamaba yo misma y llegue a la casa…
ya paso todo al otro día despierto y tenía los ojos medios raros me voy a ver y era
que asi me chorreaba la pus… me quemo la vista… me fui donde la… estaba
ahí… la enfermera… y me dijo una infección grande que lo que hizo y yo calladita
no mas pero yo fui y sentí que la mirada… es que yo le gane a él entonces
seguramente de rabia me dejo esa cuestión en los ojos… no sentí miedo, al sapo
le llaman araraque guardianes del ojo de agua… claro hay dualidad, te dije dos…
el bien y el mal. El sapo vendría ser el mal, y el bien una entidad buena, que te
sana… la misma agua, la connotación negativa de maldad… el sapo, la culebra, el
ratón, la lechuza, el zorro… también, el zorro allá por ejemplo cuando se va a
morir alguien, cuando va a pasar alguna cosa el zorro llora… cerca de las casas.
Avisa… llora, este pájaro de mal agüero que acá y justo muere una persona, justo
pasa algo… [..] cuando hay sequía o bien cuando se va a secar un pozo los
zorzales como que emiten un sonido como que se va p’adentro como un gorgoteo
así… y eso indica que va a haber poco agua”.
105
Valle de Camiña
106
“ Entonces Camiña así, exportó su cultura y su conocimiento. Sus técnicas, a
pesar que sus técnicas son antiguas. Por ellos han aprendido muchos. Si poh,
muy productivas.” Rafael Aguilar. Zaiña.
107
Valle de Camiña Alto.
El valle y el Mallku Laimisiña, protector de Camiña. “…se llama Laimisiña, empieza a redimir como
el temblor, fuerte, este no es temblor, es el cerro, alguien va a morir, y verdad… muere un anciano
o anciana, […], ya el cerro había anunciao’ ya. son anuncios que hace y hay que tomar en cuenta”
Chullpar, antiguas tumbas de los Curacas o “Principales” gobernantes prehispánicos del valle.
108
En al caso de Camiña Alto, se reconoce la organización territorial ancestral
en términos administrativos, considerando en la parcialidad del Alto las
comunidades de Camiña, Alto Camiña, Chapiquilta, Yala Yala, Apamilca, Altusa,
Nama y Berenguela. Diferenciado de la parcialidad de Camiña Bajo.
Después ya con el tiempo, ¿ya quien va a querer trabajar todo eso?, las
hortalizas se bajaron para acá y la gente de Colchane también. Últimamente
se iba de vuelta, había como 50 o 60 llamitos. Se iba de vuelta a cuidarlos por
un día o dos días, juntarlos y después volvían. ¡Se fueron perdiendo, ahora no
tenemos ni uno! Hay puros burros.”
109
Berenguela. En los faldeos del cerro.
Valle de Camiña visto desde una paskana, o paradero de pastores altoandinos, rodeados de
contoxa: “que es bueno la fruta del cactus para diabetes” Máximo Chamaca.
110
Arrendábamos pasto, que se yo, por los lugareños, por los dueños, y cuanto
ganado…, daba harto de entrada, porque era nuestra fuente de trabajo. Ahora
son año por medio, a veces no, porque a veces cuando llueve hay, a veces no.
Ahora ya nunca es igual como antes, no sale pasto como antes. Hay veces
nomás, casualidad también llueve, pero es poco, ya no es como antes.”
“…los animales han disminuido bastante. En vez de ser 80% ahora hay 30%
en Camiña, muy poco. Lo otro es que en Camiña no se puede tener más pasto
porque las aguas venidas, los aluviones, nos llevó las chacras, entonces hay
menos terreno para cultivar y menos pasto, por eso el motivo de que no hay
animales. Muy poco animales, ya no se vende como antes. Había llamo,
cordero, chivo y los lugareños tenían vacuno. Había queso, carne, pero ahora
ya nunca es igual.”
111
Esto dio paso a nuevos asentamientos periféricos a los grandes centros
como Camiña, y hacia las tierras quebrada arriba, o Camiña Alto, en donde
tendrían cabida también las familias de pastores provenientes del altiplano, que
comenzaban a desarrollar la agricultura, doña Celestina García comenta y
rememora:
“ En ese tiempo cuando yo tenía doce años por ejemplo, mi papa decía hay
que llevar collita, unto y todas esas cosas a quemar allá en la chacra, en
carnaval en febrero. Él tenía una piedrita y nosotros con mi hermana le
llevábamos el unto, la colla y lo quemaba. En la chacra había una piedrita y
ahí lo hacía. También había otros lugares que carneaban animalitos, derramar
sangre. Nosotros la verdad es que acá no, nos mandaban a hacer eso.
Carnaval decían, y después traían los choclos grandes, zapallos que había ya
en ese tiempo de febrero. Sembrábamos primero allá po’, no ve que tenemos
agua, en la parte de Apamilca y Ortuzar. Estoy hablando de esos lados.” […]
“ Pa’ la parte alta como teníamos más agüita, entonces casi nosotros
veníamos de la chacra no más, porque no había así comerciantes que llevaban
el pollo, que llevaban las cosas. Teníamos que criar animales, sembrar los
choclos, las papas, zapallo. Mi papi traía el guano de Pisagua Viejo, de Junín.
Venía con los animales todo este trayecto de esta quebrada, estamos
hablando hasta acá de como 70 kilómetros, todo Apamilca hasta acá. Se iba
por la quebrada y subía con animales, se demoraba seis días. Después venia
y llegaba a la casa, cargaba a los animales con sacos de guano de pájaro.
Eso se le echaba al maíz con esa borra de raspa que le llama, así natural po’.
Con guano de pájaro a el maíz, al zapallo y a la papa. Las papas y los maíces
así grandes, zapallo, todo natural.”
Tanto en la parte alta como en la baja del valle, las relaciones económicas
se vieron fuertemente influenciadas por el desarrollo salitrero, el cual requirió del
abastecimiento de la producción agrícola de los valles y quebradas, así como
también del forraje para el ganado, mayormente desarrollado en la parte baja del
valle.
En Camiña Alto, una de las características geográficas es que posee
recursos hídricos permanentes por medio de vertientes, lo que posibilita el uso de
los suelos por periodos prolongados y variados cultivos que se obtenían sin
mayores limitaciones, así nos lo comenta don Santiago García Copa, de 95 años,
oriundo de Apamilca casi en la cabecera del valle de Camiña. El nos comenta
112
sobre los ritos al agua y al ganado, los trabajos comunitarios para mejorar el
poblado y parte de las tradiciones, un conocimiento tradicional ancestral
invaluable, tal vez de las experiencias de memoria directa más antiguas del valle
de Camiña, Doña Celestina García nos comenta:
Don Esteban Viza, de Yalayusco recuerda bien el rito, de ello nos relata su
experiencia personal:
“ todos tienen que, los que tienen propiedades tienen que ir a una parte que
le llamaban… le llaman toma del Gallo, la bocatoma del Gallo, le pusieron
Gallo porque antes se regaban por una sola bocatoma que nacía mas allá de
frente a Chapiquilta y el cauce venia p’acá abajo entonces y ellos carecían de
agua como esa cuestión se venía pa Cuisama p’acá abajo esa agua nos
113
corresponde a nosotros y sacaron una bocatoma pa las chacras y con eso ya
regaba mejor, dicen que esa vertiente es como ojo de gallo por eso le pusieron
a esa vertiente del gallo yo una vez fue me toco ir a una fiesta a un carnaval
p’a arriba, y fui a una de esas limpias, entonces yo fui…y había uno que tenia
arrendado allá arriba esos días había bajado y no estaba, entonces me dijo el
tu presenta un amigo tuyo presenta y como son de debajo de la quebrada
después tu le cobray… y yo dije ya ya pues yo fui… ahí no po, ahora asi no
mas como le digo un poquito de licor y unas cositas, así no mas, vamos
trabajando la acequia”
Por su parte don Máximo Chamaca, nos comenta con claridad sobre la
tradición de los camiñanos, lo que vio en su juventud:
Don Santiago García, recuerda el pasado con añoranza, sobre todo por la
capacidad de la gente del valle de Camiña para salir adelante y surgir ante la
adversidad, todo en parte debido a las tradiciones culturales de vida en
colaboración recíproca:
“ sí, sabíamos qué mes hay lluvia, qué mes son el invierno, en qué mes se
siembra… nosotros le llamábamos que va a haber lluvia, porque el mes de
febrero o en marzo empieza, es lluvia… “ya”, costumbre teníamos así allá... el
primero de agosto “a ver vamos a ver… hay un poco de nubes, pucha que hay
lluvia salió nube”, al otro día un poquito más: “va a haber lluvia”… como era la
costumbre antigua… claro, los pájaros en tiempo de lluvia va a venir y
cantaban…y la gente conocía porque está cantando el pájaro va a venir, ya
sabían, si…
Me acuerdo…. Floreaban los llamos… es que no hay… todos los años mire
es muy antigua la costumbre. Pa cosechar sí, hacer picante, hacer un asaito
así pa’ cosechar, pa’ traer papa zapallo… había ayni, trabajo de comunidad,
porque cada uno invitaba a su casa a costumbre, así invitaba… ahora, hay
115
unas canchas, unos corrales por ahí… todo en agosto hacer un carneo una
vilancha…seguir con la costumbre, sigue con la tradición..”
“ los insectos tenían alguna importancia, los venenosos si, los chirimaces
mas bien dichos eran malos dañinos, y había algún insecto bueno por ejemplo
la abeja… algunas ranitas, alguno comía (las plagas)… pero los sapos
nosotros los respetamos, dicen… (son) de la virgen, no hay que matarlos
porque no son dañinos, los ratones si, las ratas si... los zorrinos también son
dañinos…[…]
el tite, seguramente en otro lado (es importante, pero en el valle no)… acá hay
avestruz vizcacha, vicuña, guanaco, antes si lo aprovechábamos, y la vicuña
también, pero ahora hay que cuidarlos…nadie puede matarlos mas bien
cuidarlos, es prohibido matarlo, y el puma ése es plaga…”
Respecto del puma, se sabe que no es en realidad una plaga, sino que su
presencia en zonas bajas, y sus ataques al ganado de las comunidades del
altiplano se debe a efectos de intrusión territorial de elementos que obligan al
puma a desplazarse y buscar alimento en otros lugares. La carretera y las faenas
mineras son las principales causas del desplazamiento de la fauna hacia otras
zonas, por estrés medioambiental y el incremento de población humana.
116
“ el ajo, cebolla y zanahoria. Sembraban nomás y la limpieza, y con eso
nada más, (ahora) cansado el terreno, de las tierras, yo creo… mucha plaga,
no, dan ahí no mas, se apestan, antes no se usaban ningún veneno, nada po.
Para abonar las plantas iban a buscar bolsas de raspa en la pampa, las que se
quedaban botadas ahí […]. Ahora traen urea, Urea rosada. pero no es
durable, se madura rápido el fruto, más los choclo maduran, después la
cebolla, el ajo, esa no más, hay plagas nomás ahora. Ahora tiene mucho
veneno, no sé …en el buen tema esas plagas no sé, porque en todas partes
hay ahora problemas… el bicho eso, no sé cuanto le llaman…ataca al ajo, y
ahí no más queda, cuando está madurando la cabeza y se queda ahí no
más…esa plaga está en la tierra, en la raíces, después claro por arriba
también, pero ahí hay un líquido y lo rosean nomás y mueren. Ah no, en ese
tiempo había otro clase de ajo, es rosado, no había ni ajo blanco, ni ajo chino.
El chino es el que están plantando ahora, antes no plantaban. […]
117
…. la salamanca. Esas son chiquititas nomás, igual que el lagarto, pero bien
chiquitas, salen en las pircas por ahí…esas son venenosas.
“ Claro, fíjese po’. Esos años aquí el ajo se exportaba a tantas naciones. La
gente tenía la mercadería por saco. Esta muy cambiado. Aquí llegaban los
pescaos’, los mariscos, ahora ni se conocen ya. Puro atún y salmón. Si po’.
Llegaban las cojinovas acá y se cambiaban por ajo. En ese tiempo ya llegaba
el camino ya, pero muchos años po’. Antes se hacía el cambio encima, con los
caballos, con los burros y se iban andando pa’ arriba. Llegaban hasta la oficina,
por eso de noche andaban así la gente. Día y noche caminaban, se
demoraban como tres días. Antes a los pueblos de acá del interior ni los
miraban. Pta’ si aquí se vendía bueno los productos, todo se vendía. […] si
Camiña era muy bonito. Todo era chacra, por los montes, por ahí adentrito
llegaba. Era bonito Camiña.
Cuando llegó un tiempo el agua loca, puuu… Como barrio la chacra. Llevó
hasta los animales. Dicen que esto pasa cada treinta años, mi taita me
comentaba a mí, el agua de cerro a cerro, la gente arrancaba a los cerros.”
“antes había harta gente que era de acá mismo, como hacen carnaval iban a
collar, hacer las veces para la tierra…, cada uno tenían sus chacreros, en las
tardes quemaban se iban pa allá, otros a otras partes. Para la tierra…después
venían con… es que más antes sembraran papas, zapallo…eh… choclo, y con
eso venían a la casa. Y ahí armaban una mesa y ahí lo challaban, challaban le
decían y tomaban sus tragos… también iban a bailar al carnaval.
118
Camiña Bajo
Uno de los aspectos que resaltan a la vista a lo largo del valle son sus
amplios campos cultivados en eras y terrazas, sin embargo esto no ha sido
siempre. Uno de los grandes problemas del valle en su parte baja ha sido
precisamente el sustento de la agricultura y la vida, el agua. Debido a la
intermitencia del cause en periodos del año, la única forma de abastecerse fue
domesticando el paisaje hídrico, hasta lograr traer o acercar el agua hacia los
lugares poblados y de cultivo, así nos lo cuenta con detalles don Guillermo
Bastovinos de Quistagama:
Esa agua que usted va a tomar acá, era del cerro. El año ’73, en el golpe de
Estado, llego un padre acá, un curita. Nosotros no teníamos agua potable,
teníamos agua de río. Se paró y me dijo: “acompáñeme”, yo dije que si po’,
mas metido que mano de matrona. El viejito vio el cerro y dijo: “oye no habrá
agua allá”. “Quizás padre”, le dije yo. Nosotros nunca habíamos subido ese
cerro, acostumbrados y criados acá. Subí el cerro, fui yo el año ’73, con varios
amigos acá, juntamos como cinco amigos y subimos el cerro, nos fuimos para
119
allá. Justo po’ hermanito!, había agua, oiga, como sale el agua, yo quisiera
que usted fuera alguna vez. Como brota de la tierra, así brota el agua, como
que está hirviendo, y dos piedras, así como que Dios las puso, dos piedras.
De ahí sale el agua. Subimos el cerro, vimos el agua y nos preguntamos:
“¿Cómo la bajamos? No podemos hacer acequia, no tenemos nada”. Entonces
dije yo: “¿Por qué no buscamos una persona, un dirigente o el alcalde de
acá?”. En ese tiempo del golpe militar el alcalde era un teniente de
carabineros. Hablamos con él para que nos dé mangueras, imagínese desde
adonde hasta el pueblo.”
120
del siglo XX. Como testimonio fiel nos comentan doña Celestina García y don
Andrés Rodríguez, en Calatambo:
Jóvenes y niños de pueblos originarios en una salitrera. 1940. Colección Acrata Iquique.
Al igual que don Rafael Aguilar, cuya familia vivió en la pampa salitrera:
“…mi papá trabajaba en la pampa, era derripiador, bota ripio, ahí poh en las
carretas, el medio de transporte. Uuuh, la oficina la Patria, Porvenir, tanta
oficina que me mencionaba. Era patizorro, que le llaman. Bueno, se vino
porque vino la crisis del oro blanco como le dicen, porque en la segunda
guerra mundial, la primera guerra mundial ya comenzó a cojear y ya en la
segunda ya salió el, inventaron el abono, el salitre sintético y ya no tenía tanta
demanda el oro blanco, y comenzaron a parar las oficinas y ¿en qué iba a
trabajar?! y como mi papa conocía y tenía un amigo por acá dijo: “hay que
vivir en la agricultura” y se vino con mi mamá. Mi mamá no quería venirse pa
acá, mi madre es pampina y venirse a vivir entremedio de los cerros aquí, me
asusté dijo ella y después se adaptó acá, porque acá habían más cosas.
121
Pampinos en las calicheras. Imagen inédita. 1890. Colección Acrata Iquique.
122
Puede determinarse como los poblados de mayor representatividad
Calatambo, Francia, Saopagua, Moquella, Cuisama, Quistagama, Zaiña, y
Chillaiza, entre otros sectores poblados en forma intermitente o por temporadas
agrícolas, y otros conformados recientemente, producto del incremento
poblacional de los pueblos antiguos, los cuales se emplazan en los faldeos de los
cerros, junto al camino principal.
Valle de Camiña y poblados, antes de la llegada del camino. Inscrito:Salida al camino del tranque caritaza/
Camiña/ Cachispampa; en le costado superior derecho: Alto de Camiña; y en el costado inferior izquierdo:
Queb. Camiña. Colección Acrata Iquique.
“ …yo amo mucho mi tierra porque ya tengo como 75 años que estoy
viviendo acá y eso a mí me trae muchos recuerdos y frente a las situación que
está viviendo el mundo, en las ciudades, mire yo prefiero quedarme acá, y por
eso que estoy acá.” […] Mira, yo añoro más lo antiguo que lo de ahora, era
más seguro, más alegre, más feliz, ahora tenemos más comodidad pero es
más inseguro, pero más en la ciudad aquí no tanto.
123
En el caso de Zaiña, don Rafael Aguilar nos comenta en un franco
testimonio parte de la historia, memorias y conocimientos tradicionales:
11
Pongo. Voz quechua que significa puerta.
124
“…harta agua, habían más chacras poh, mire, el río sabe qué, el canal, era
como de 6 metros de largo, así no más, todo era chacra pa acá, ahora el río
está más desbordado, más que terreno agrícola, claro… Más antes, por
ejemplo para el tiempo de las oficinas salitreras ellos traían las mulas, los
machos que eran los medios de transporte para transportar el caliche porque
eran carreteros, tenían las mulas que les echaban una tonelada a la carreta y
tenían que llevarlos, los animales estaban flaquitos, llegaban con el pasto para
allá pero después traían toda la mulada después, decían, “para engordar acá”.
Sí… lo recambiaban po…Y se traían los otros… yo creo que cada mes, cada
40 días, no sé cuánto duraría que traían los animales para acá para engordar,
y cuando ya estaban fortalecidos se los llevaban pa’ allá y se traían los otros
de allá. Sí po, era el combustible para los medios de transporte, para los
animales… Esos eran los autos. En ese tiempo era caro una mula costaba
como un auto de ahora, un caballo, ahora qué, a una mula no le dan ni un
apunte.
Las tomas les llaman a donde pasa el canal, de ahí le sacan un canalito pa
la regada, a eso se llama toma. Por Bocatoma, bocatoma… Entonces cada
toma está para cada sector. Tenía su propio nombre, claro. “Anda a la toma de
Zaiña chico” –decían-… toma de allá… “Zaiña grande”… así tienen su nombre.
[…] El Caguasaya de Quistagama de donde sacamos el agua potable. Sale
del cerro el agua arriba…Sí, una vertiente, y esa aprovechamos para abastecer
125
a Quistagama y a Zaiña en el agua potable, a pesar que dicen que tiene mucho
arsénico pero igual sirve… mucho tiempo tomando esa agua, y no pasa nada.
Bueno, aca habían ciertas costumbres que del invierno o verano, ¿no? Las
estaciones… Pero todo eso se sabía por las temperaturas no más poh. Y mi
papá tenía reloj, todo tenía, pero lo sabíamos todos… pero las estaciones y lo
que se esperaba de ciertos acontecimientos por ejemplo que ya la lluvia
comenzaba ahí en enero hasta marzo y las nevadas comenzaban desde junio
hasta septiembre y ahora se está viendo casi igual, en parte… ahora que ayer
estaba más helado… Por ejemplo el buen tiempo era cuando había nevadas
de junio hasta septiembre, entonces buen tiempo, es que el agua no va a
escasear. Y cuando en julio, agosto, y hasta el 8 de septiembre no había
nevada entonces quería decir que había sequía, y la sequia era grande porque
habían muchas chacras y era la forma de regadío por canales que eran así no
más, no eran como ahora, está todo canalizado con cemento, ahora el agua
corre más rápido y hay menos chacras poh. Si Camiña en ese tiempo tenía
como 300 hectáreas, 320 hectáreas, ahora hay 170 no más, todo Camiña.
“ Ah, era por el sol poh. Sí poh! Si salía el sol van a ser la ocho, decíamos y
en el tiempo de invierno salía el sol más tarde que en tiempo de verano,
después cuando se iba a poner el sol, ya llegaba el sol hasta cierta parte en
invierno ahí antes tomábamos lunch, lonche12 se llamaba, después de ahí a
forrajear los animales, tenía una marca en el cerro eso, una piedra, y estaba la
piedra ahí, cuando llegaba en el día la piedra ahí, la sombra, ya hay que tomar
lunch y cortar pasto rápido pa los animales.
12
Lonche, castellanización de la palabra inglesa lunch. Almuerzo.
126
daba a la piedra entonces ya es tiempo de salir, tomar oncecito y mantener a
los ganados.
“…esa piedra era una marca y antes, donde está ese árbol se veían un montón
de piedras un poquito más arribita… […] cuando éramos más chicos
entrábamos y sordo es, cuando salía pa fuera se escuchaba todo el ruido del
viento, del agua, pero de qué año, será… Y habían caminos… por ejemplo ahí
arriba habían caminos, y están borrados donde habían lluvias…un zigzag. No
se ven los caminos, los chasquis como andarían por acá porque este sector
era muy habitado, donde había agua… y había terreno, había habitación. El
cerro blanco.
Desde aquí mirábamos todas las chacras y todo eso era chacra… lo puedo
pintar como era antes, pero… Lo añoro, mi valle de Camiña, yo defiendo al
Camiñano, pero menos al que trabaja en la cocaína a ese sí que no.”
Sector de Zaiña, visto hacia el Weste o la costa. Los cultivos presentan formas diversas en su
extensión, dibujados en el contorno del valle y el cause del río, se aprecian algunas chacras en
suelo blanco o en descanso.
Casona republicana salitrera de Brañes, junto a área de trabajos de enfardado mecánico para el
abastecimiento y engorde de mulas en las oficinas salitreras. Emplazado sobre un cementerio
indígena precolombino, y a pasos de la cueva del diablo de ocupación colonial.
128
Sector de Chapiquilta.
“ y todos los jueves bajaban el arriero con las tropas de animales…allá los
quesos, ahí agricultura había un poco…el pasto verde, lo charqueaban le
llamaban igual […], como charquear la carne así, hacían secar el pasto y
después lo hacían manojo lo llamamos así, lo envolvían bien y lo llevaban a
Zapiga… y ese pasto compraban los dueños de almacén porque bajaban las
tropas, y pa vender a los mismo de acá, llevaban verduras y otras cositas así,
también la cebolla, también se cosechaba algo de cebolla, y con los quesos,
porque tenía mucho queso, cada uno llevaba cincuenta quesos treinta quesos
cien quesos juntaba las demandas… eso era, y la gallina también ponía harta
gallina, llevaban en calentarlo así con estiércol de animal que estaba seco ahí
ponían los huevos pa que no se quiebren… y ahí llegaba el salitre mas allá…
ahora el río… el río era rico, el camarón… puucha, claro el de Pisagua mejor
que el de la mar, no ve con agua dulce acá mejor, y yo le cuento que mi
hermana, que en paz descanse, que ella era mayor que mi, yo era el último de
la familia acá y me decía vamos al río a pescar camarones así es que íbamos
yo pescaba un tarro, los camarones, habían tiempo de lluvia dejaban pozos de
agua uno acá y otro allá y ahí estaban los camarones… en ese pozo de agua
ahí nos llegábamos a hartar de camarones…al otro día quería comer pejerrey
también, hay harto pejerrey en el río…igual claro que un trecho más largo mas
allá, así que el camarón el pejerrey y la carne que no fallaba…”
129
“ en la siembra, y en la cosecha se buscaban ayudante… unos a otros,
hacen cosecha por ejemplo arcos le llamamos acá de maíz… juntábamos ahí
calculado en un lugar…en una era que le llamamos acá en otras partes le
llaman melga en otro lado le llaman cancha, no se porque le llaman cancha,
aquí le llamamos era… así que ahí pone que es mas plano parar un palo al
medio y ahí van arrimando el maíz, chala le llaman, chala, con el maíz ahí lo
deja un mes pa que seque la caña… ahí sale el maíz es más dulce, y cuando
venían ya la cosecha pa la casa ya… ahí buscaba, se ayudaban si alguien
quería ir solo se anotaba pero más buscaban… mi papá cuenta que a
veces…el era criado acá arriba…nació acá en La Capilla y de ahí tenía el
dueño de acá de ahí mi papa salía con el dueño unos día acá… entonces el
contaba, cuando ya se terminaba de cortar el arco de maíz, el que hacia caer
la…está es una de las tradiciones… la última caída de maíz a ese lo
arrastraban de los pies o bien de los brazos y por el suelo lo daban vueltas…
así que se cuidaban nadie quería hacer caer la ultima caña… mi papá contaba
que esa era una costumbre, después se iban a la casa a comer…. el picante
era una comida tradicional, todo tenía que tener picante, una señora así con
intención hacia el picante bien picante y yo que soy cobarde p’al ají… comía un
poquito y dejaba decía ya estoy lleno y decía mi papa esa señora es viva
porque hacía mucha comida pero muy picante pa que la gente no coma… esa
la comida la tradición era comer el picante y tomar un traguito, pa la
cosecha…ahora no se que lo que hay ahora… cada cual cosecha… ahora no
venden choclo”
Casa tradicional de adobe y paja, con puertas de molle o “pimiento”, madera nativa, junto a
construcción moderna en concreto y bloquetas, y techado en zinc.
“ Antes trabajamos bruto, con azadón, con la pala, etc. Ahora no po’, ahora
pura maquina no mas, puro tractor. Mi hijo todavía trabaja con el azadón y
con estiércol, siempre criamos animalitos pa’ echarle guano a la chacra. Aquí
130
no po’, aquí ya no echan guano ya po’. Puro químico nomas po’. A mí no me
gusta. Yo sigo con el guano, por eso criamos animalitos. Nosotros siempre le
echamos estiércol para que no debilite el terreno. Ahora usted para la plaga le
echa matamaleza. […] Antes no conocíamos plaga nosotros, sacábamos
cosecha año a año. Tanta cosa que le echan, parece que mata a los bichos
que están en la tierra y eso no hace florecer al fruto. Antes era todo natural,
no había bicho, ninguna cosa. Ahora cualquier cosa, le echan esto, esto otro.
Casa de cañas sin revestir, usada en temporadas de trabajos agrícolas en sectores lejanos a los
poblados.
Hacen morir a los que están debajo de la tierra, que hacen florecer, o bien
debilitan la tierra. Ahora usted ve todos los productos acá fumigados, antes
nosotros no conocíamos eso, todo natural. Yo desinfectaba la ceniza de ajo
con ceniza, lo ponía a remojar el ajo en la noche, en un tambor, con un poco
de ceniza y después cuando lo iba a sembrar, en un saco lo plantaba con un
poco de ceniza, y no se plagaba na’ po’. Con pura ceniza que sacábamos de
la cocina o de otros lados, porque antes se hacía pan, hoy se compra nomas.
Ahí teníamos el horno, a veces le echábamos fuego ahí al guano que había.
Yo mantengo las tradiciones antiguas. Prefiero vivir sanito y no con
problemas. Igual con la agricultura he trabajado mucho aca, antes
trabajábamos mucho, mucho. Con animales subir pa’ los cerros a entregar la
carga al alto de Quistagama. Pa’ coar las eras había que echarle guano,
ahora hay tractorcito, hay que coar las eras, imagínese con azadón hay que
dar vuelta todo el día, esos cuadritos que ve usted, coarlos a pulso. No había
agua, había que trasnochar pa’ poder regar, ahora no po’, ahora hay agua
continuamente.
Aca le hacemos una fiesta pa’ la siembra, más o menos. Acá en Camiña lo
usan mucho pa’ la siembra del maíz por ejemplo. Tanta gente hay en Camiña,
hay tantas parcelas. Después cuando nos toca limpieza de bocatomas, hay
131
también se hace algo. Todos nosotros hacemos las tradiciones para la madre
tierra, para la Pachamama.
Camiña Bajo
132
Quebrada de Tarapacá
133
La evidente ocupación precolombina de la Quebrada de Tarapaca, ya era
indicada en 1756, explícitamente por O’Brien, entre Mocha y Puchurca
13
Persona que representaba a la comunidad frente a las autoridades coloniales, conocido en voz
indígena como Curaca.
14
Emplazada en el Cerro San Agustín de Huantajaya, cerca de la costa de Iquique.
135
“ En el asiento de San Joseph de Guarasiña, Provincia de Tarapacá en diez y
ocho días del mes de diciembre de mil setecientos sesenta y un años: En
cumplimiento de lo por mi mandado en el decreto antecedente y citación que
se hizo a las partes comparecieron en la casa de mi residencia el Ure. De
Campo don Joseph Basilio de la Fuente a quien se tiene hecha merced de
cincuenta indios de mita en los repartimientos de Tarapaca y Sibaya por el
Real y Superior Gobierno de estos reinos y los caciques y gobernadores por el
repartimiento de Tarapacá Dn. Francisco Lucay y su segunda Polelo
Quigrimcha, como Dn. Francisco Taiña Principal del pueblo de Guaviña, José
Nacaes Principal del pueblo de Mamiña, Lorenzo Bilea Principal del pueblo de
Noasa; y por el repartimiento de Sibaya su cacique y gobernador Don Joseph
Lucay, Pedro Córdoba Principal de Limaxsigña, Juan Cayo Principal del pueblo
de Mocha, Gregorio Caqueo del de Usmagama, Diego Quena del de Sipiza, y
Andrés Esteban del de Guasquiña…
136
”Vista del Celebre mineral de Huantajaya” 1807. En: Archivo de Indias. Disponible en versión digital.
137
Manuscrito de trabajadores de Guantaxaya, 1771. Fuente: Colección Acrata Iquique.
138
Tarapaca Bajo
Inserto sobre Tarapaca en el anuario La Semana Tarapaqueña. 1936. Colección Acrata Iquique.
139
Claro, para el primero uno espera en sus casas a su gente que ha fallecido
y se preparan…se hacen pancitos amasados que le llaman cucule, se hacen
bollitos, calapurca, picante conejo, las coronas, las flores, el agua bendita, todo
se espera, todo, con un mantel negro y se recibe el día primero con las
campanas que tiene que dar el cura…y cuando se van igual, también tocan las
campanas al medio día del día dos y uno tiene que llevar las cositas para el
cementerio y a recoger toda la mesa. […]
“ Al frente. Si, ahí están todos los restos de Tarapacá, del primer Tarapacá
que hubo. Esto siempre fue peruano, antes de la guerra ya se trasladó para
acá, porque ya pasaron los españoles, como el mil quinientos cuarenta,
pasaron los españoles aproximados, cuando era del Perú acá, dejaron sus
casas, sus cosas po… y uno saca conclusiones, ellos dejaron la iglesia, la
torre, ellos nos dejaron la religión…porque ellos y los antepasados que nos
dejaron, que el sol era nuestro dios, que la Tierra es nuestra madre, así pues.
Bueno los recuerdos que yo tengo es frente del cementerio po, del cerro
que está ahí donde está el cementerio, hasta ese costado donde hay una
quebradilla que se ve de acá (apuntado de su casa desde el Suroeste al
Noreste) no conozco del pasado porque son años uf… pero están las casitas,
las callecitas, está todo eso. Ahora llega hasta Tilivilca (Oeste) no más y por el
otro lado hasta Quillahuasa (Este). Si po, si, era de Pachica para acá (Oeste a
Este), yo tengo unas fotos muy valiosas que me gustaría mostrarle, pero las
voy a sacar el día que hagan el museo de acá.
El río, la chacra, los árboles y los cerros…Yo cada mañana que salgo me
paro afuera y me pongo a observar los cerros…me trae recuerdos, recuerdos
de mi infancia, he recorrido todos esos cerros, de palmo a palmo… éramos
niños nosotros y nuestro profesores, don Oscar Gonzales y doña Violeta
Fuentes, que ya deben estar finaitos, porque ya eran viejitos y nosotros
estábamos niños, salíamos a recorrer los cerros y encontrábamos cosas del
pasado, corvos, rifles, sables, que se yo, del tiempo de la guerra…soldados
enteros con sus botones, con sus cositas que se ponían acá (muestra lo
cintura), sus gorritas, sepultaditos ahí…nosotros recorrimos esos cerros a pata
pelá, andábamos en esos cerros nosotros, niños…” […]
140
La torre era lo más importante que teníamos…la torre anunciaba cosas,
anunciaba la muerte, anunciaba las avenidas de agua, anunciaba los
temblores fuertes…si tocaban las campanas no había lluvia, sonaba la lluvia,
hasta ahí llegaba.
“Por ser la gente de ahora son muy cómodos, los agricultores de ahora no son
los agricultores de antes, son muy cómodos, porque todos ahora utilizan la
cocina de gas, antiguamente se usaba la cocina a leña y siempre uno
comúnmente buscaba el chañar, uno buscaba esos árboles para hacer fuego,
para cocinar, para hacer su comida…entonces esa ceniza como es muy noble
ese arbolito, entonces se harneaba y se sacaba, era blanquita la ceniza,
pura… el maíz estaba así de este porte, de unos cuarenta centímetros, de
unos treinta, se llenaba de una palometa blanca dulce, entonces uno le tiraba
141
esa ceniza y se perdía la hormiga, se perdía todo y crecía hermoso el maíz,
después uno lo chaleaba abajo para las hormigas y nada…y uno cultivaba con
el caliche de la salitrera, el puro caliche natural, ese se le echaba y listo, y
seguía su curso el maíz…así era antiguamente, así se conservaba las plantas,
ahora todos recuren a estos fertilizantes. […] No, antiguamente no…ya con el
asuntito con Cerro Colorado las pestes se están viniendo para acá, ahora el
pasto está llena de miel, hay que lavar el pasto para dárselos a los
conejos…ese del Cerro Colorao están acá no más ahora, nosotros vemos las
luces en la noche…eso es catastrófico para nosotros, el mal más grande que
pueda existir, hay árboles que se están secando, se están muriendo.
“ …en Tarapacá viejo, arriba, ahí está la mesa, es una piedra plana,
seguramente que ahí hacían las ceremonias, ahí ofrendaban, arribita de los
petroglifos, ahí ta la mesa y ahí se ofrendaban antes las culturas, quizás que
harían…los verdaderos Tarapaqueños tienen erradas las cosas acá, yo leo
mucho ah, yo leo bastante… y los antiguos tarapaqueños de acá dicen que se
bailaba el cachimbo con vestidos largos, pero eso es de hace unos siglos
atrás, pero los verdaderos los indios, por algo están los recuerdos, las momias,
porque existió otras generaciones antes de los que vinieron de Italia, que se
yo, a las oficinas salitreras y después de ahí se vinieron para acá los de las
oficinas salitreras, esos son de ahora no más, pero los verdaderos ancestrales
son los que se encuentras en las vasijas de greda, en los que están envueltos
en las totoras, los que están con su maíz, están con todo así muertos. Si a la
antigüedad, ese es milenario, cerro Unita.
A pesar de las fuertes influencias extranjeras en Tarapacá, las tradiciones
ancestrales y prehispánicas aun persisten, al menos en la memoria de los
antiguos habitantes, de ello da fe la señora Isabel:
Como se dice la tierra está viva, a la tierra hay que ofrendarla también,
pero quizás como serían los rituales muy antiguamente, nadie sabe lo que las
tribus hacían, pero lo que yo tengo uso de razón, acá en Tarapacá se ha borrado
eso de ofrendar sangre, pero si hay gente que así lo hace todavía, algunos, por
ser de matar un cordero, un ave, un cordero blanco, porque siempre para la tierra
y también para el sol y para Dios, también tiene que ser algo blanco, algo
puro…ahí también las tierras tienen su tiempo cuando se ofrendan, no se ofrendan
cualquier día, tiene su tiempo, por ser en carnaval se puede ofrendar porque
según cuentan los antepasados, que están los cerros abiertos, los Malkus, los
cerros están abiertos, para recibir, la tierra está abierta para recibir, ahí es donde
nuestra madre recibe y ese hoyito donde se mata y se deja caer la sangre, eso se
llama puquio.
142
Mi mamita hacia eso en
la chacra, ella tenía un hoyito
debajo de un vilco y… ella ahí
carneaba a su animalito y le
echaba la sangrecita ahí, con
coca, con vino o cerveza y
hacía su picante, el primer plato
para la tierra, el primer plato
contundente, rico, para que
también sea en abundancia
para nosotros…y no es mentira
todo eso, porque yo el
veinticuatro de junio el día de
San Juan, en Quillaguasa tengo
artos animales, es cierto eso, yo
carneo un par de conejos, le
echo la sangrecita, coso mis
papas, ahí mismo, en la mis
chacra y preparo un picante de
conejo, el primer plato es para
la tierra, con su refresco, con su
Pilsen, con su vino, su coca, su
cigarro, todo. Como le decía,
yo hago eso en la chacra y sabe
que si tengo diez patos, para el
próximo año tengo cien, porque
así como uno da, lo hace con
amor, con cariño, con respeto a
la tierra, también la tierra
provee, y recibe en abundancia,
porque lo hace con cariño, yo
amo mi tierra, yo amo mi tierra,
amo la tierra donde nací, así
que lo hago con amor con harto
cariño.
El carnaval es muy
importante. Es movible, a
veces cae en febrero, a veces
cae en los primero días de
marzo…ahí es donde se abren
los cerros, los Malkus, para
recibir y ahí uno tiene que
ofrendar….el veinticuatro de
junio y el primero de agosto”
143
Tarapacá Alto
Coscaya tributaria de Tarapaca por el Sur. Vista hacia la cordillera (o hacia Lirima)
15
Gobierno con dos gobernantes, diarcas.
144
Alto, y Tarapaca Bajo. Resalta inmediatamente a la vista cuando avanzamos en
viaje ya pasando por Alto Pachica, momento en que empiezan a aflorar pequeñas
plantas con flores hasta incrementarse y presentar t’olas, ich’us y grandes
cactáceas, ya a la altura de Chusmiza.
Quebrada de Tarapaca y sus tributarias desde Alto Chusmiza. Resalta la densa vegetación.
145
límites para evitar que la gente y sus animales se pasen a otro pueblo ( en el
caso de los animales ellos no saben y pasan entre un sector y otro ) entonces
la gente sabia cual eran sus límites y existía el respeto entre ellos la palabra
valía mucho no era necesario tener un documento firmado , nuestros
antepasados eran muy respetuosos. Como puede ver este es nuestro
territorio.
Don Manuel Mollo, de Sibaya, Tarapaca Alto, nos comparte parte de sus
conocimientos tradicionales al respecto:
146
un kilómetro pa’ allá, ahí están los hitos. Al norte esta con Usmagama, que
limita también ahí la quebrada que se llama Piguagua. Al oeste con Huaviña,
llega Sibaya hasta una parte que se llama Gualchalla, de ahí baja a Huaviña.
Yo pienso que antes acá al pie de dónde posiblemente esté la mina Paguanta,
hay un valle igual que esto, pero lo único que es más angosto, eso es pura
alfalfa. Yo cuando niño pastoreaba las vacas ahí del abuelo de Jorge Soria
Quiroga. Ahí manteníamos más de cien vacunos, porque acá en Sibaya es
amplio, más grande, pero cada uno tiene sus propiedades, entonces ya se
multiplica mucho.”
Limaxiña, frente a esta, antiguos sectores de pastoreo de los pastores de Huaviña, hoy secos.
147
Don Manuel Mollo, igualmente rememora y comparte sus recuerdos sobre
el auge de la ganadería y la agricultura:
“ (ahora) se puede decir que hay muy poco, treinta por ciento seria. El papá
de la iñora, esa gordita que estaba allá afuera, tenía sus doscientas ovejas, las
pastoreaba acá, don Evaristo Vilca. Después otro amigo de acá, Waldo
Loayza, tenía ciento cincuenta ovejas, todo eso se mantenía acá, crianza de
ovejas, pero ahora ya no hay eso, cada uno tiene sus veinte, treinta animales,
tiene más a lo mucho. La mayoría no tenemos más de diez.[…]
Arriero a caballo, junto a su mula y ganado “de a pie” en Tarapacá Bajo. 1930. Col. Acrata Iquique.
“ Una señora que vivía acá, hace como tres años que falleció parece, o un
poquito más, ella hacia eso, florear los animales. El día 24 de junio dice que
hay que florear, así que invitaba a florear los vacunos. El otro, el abuelo
Evaristo, invitaba allá a florear los corderos, pero los corderos es fácil
sujetarlos, a un vacuno no po’. El hacía, ahora ya no ya. Cada cual le pone,
148
otra señora que tendrá unos seis vacunos, ella sola con su familia nomás le
ponía flores en la oreja, a los vacunitos, porque ellos como antes tenían llamos
para arriba, pal’ pastoreo, ellos saben y acostumbran eso, el floreo. Esa es
fiesta también po’ y tiene sus canciones, con charango tocan. Yo tuve la
ocasión de estar una o dos veces en eso nomás, pero acá en el pueblo ya no.”
[…]
“ Creo que lo fuerte fue el maíz, trigo, papas, porque hasta 1950, por lo
menos y tal vez más adelante todavía, lo único que la gente vivía acá, mis
papás, mas cultivaban el maíz, las papas, el trigo, para hacer la harina, para
hacer el pancito. Ahora ha cambiado todo, porque ahora ya no nos dedicamos
al maíz, porque el choclo no es comercial. Ahora lo que da más producto es la
verdura, el ajo, tuvimos una época del año ‘70 al ’80, exportábamos ajo de aquí
de Sibaya, éramos segundos después de Camiña. Se exportaban unas 300
toneladas de ajo, por lo menos. Venían compradores, venían de Santiago y de
más al sur, empresas a comprar el ajo. Eso duró como tres años nomás
también y después ya se terminó. […]
149
“ Si porque, el año ’67 recién se abrió la carretera pa’ acá, hasta antes de ese
año nosotros todos llegábamos en animalito pa’ allá a Pachica y antes hasta
Huara, en burrito nomás. Ya pero ese año cuando llegó la carretera pa’ acá,
llegaban vehículos, ahí ya fue cambiando ya el asunto. Encargábamos las
cosas, las mercaderías las trae y las comprábamos acá en la puerta de la
casa, embarcábamos las cosas ahí también en la chacra, pero antes no era así
po’.”
Preparando tiros para la construcción del camino hasta Sibaya. 1986. Colección Acrata Iquique.
“ Difícil la vida, por un lado era difícil, pero por otro lado era también más
positiva, porque nosotros para acá tuvimos una chacrita pa’ abajo, de Limaxiña
por ahí pa’ abajo. Cosechábamos pera, membrillo, cantidad de membrillo
sacábamos nosotros, mandábamos a vender a Iquique y ahora no se produce
na’, da unos poquitos membrillos. Peras ya casi no, la pera de pascua, la que
hay en Huaviña po’. Entonces por una parte, no se será la contaminación o que
cosa, pero se ha descompuesto. El maíz mismo aquí daba lindo, por eso
tengo un librito yo, una adaptación donde dice, el choclo más grande era el de
Sibaya, unos choclos bonitos, ahora no se produce así. Lo demás es pa’ puro
comestible, un poquito de verdura, las papas, ese es para el uso de uno acá
nomás, eso ya no es para vender”.
150
“ …antiguamente en los tiempos, podría decir unos treinta años atrás
Usmagama habían cuarenta familias, y tenían trescientos o doscientos
cincuenta cabezas de ganado, porque eran tiempos lluviosos, donde llovía a
cantaros, empezaba en diciembre y terminaba en marzo… justamente había
un dicho que decía “enero poco, febrero loco” aludiendo a las fuertes lluvias,
después empezaba la nevá’ toda esa semana los ríos caudalosos, y había
harta vegetación… vino la sequía y fue muriendo poco a poco, el juicio, el
terremoto, la gente se mando a cambiar”.[…]
Antes de la construcción de carreteras, senderos caminos de tierra Bajando Desde Alto Chusmiza hacia
Usmagama. 1980. Colección Acrata Iquique.
“ la gente siembra en una forma manual antigua, trabajan con azadón, allá no
hay este tractores ni una cosa…antiguamente había una palabra que se
llamaba ayne; en qué consistía ese ayne…esta chacra era mía, la otra p’abajo
entonces empezaban con la mía y toda la gente me venía a ayudar a mí,
hacían calapurka, comidas, hasta un baile…tremendos pedazos, entre todos le
sembraban a la gente…después le tocaba al vecino, y toda la gente…duraban
una semana diez días sembrando todas las chacras…el ayne se llama eso.
Bueno allá nosotros la gente vive de sus tierras, los sembríos y su ganado…”
151
En el caso de Tarapaca Alto, la mayoría de los pueblos se emplazan
vertiginosamente en las laderas pronunciadas del cajón de la quebrada, la cual en
algunos casos presenta caídas abruptas en forma vertical, de profundidad
considerable. Esta característica de la geomorfología de la quebrada, en cierta
forma ha sido “domesticada” por las comunidades andinas, a través de los
sistemas de cultivo en terrazas, es así que grandes y empinadas laderas
presentan terrazas y canales en zonas imposibles, como vestigio de la agricultura
precolombina, de tiempos de agua abundante que no han vuelto, sin embargo
hasta el presente la lucha por la sobrevivencia aun mantiene viva la técnica de
cultivo en terrazas, enfrentando además nuevos problemas ya no solo climáticos
sino además de la mano humana con el extractivismo minero, tal como lo
comparte a través de su conocimiento tradicional doña Francisca Salazar:
Cultivos en terrazas en las laderas de los cerros, al borde de un profundo acantilado. En efecto
lingüistas peruanos como Cerrón Palominos atribuyen la terminación “iña” a cajón y “aya” a cultivo
en borde de acantilado, posiblemente en lengua puquína, la lengua prohibida de los incas..
152
“ Prácticamente quien tiene la culpa de todo esto es Cerro Colorado. Todas
las tardes Ud. Mira al Oeste y se ve como si estuviera con camanchaca, pero
en realidad es el polvo cimentado que emana de esta mina 16, cayendo sobre
todas las plantas, en el caso de los árboles frutales cuando está saliendo las
flores o ya el fruto pequeño, los mata.
Don Luis Carvajal con basta experiencia en la defensa del agua nos
comparte su reflexión sobre el porvenir del agua, y hace una crítica a la luz del
evidente deterioro de los valles y quebradas por la intervención extractivista:
“ El agua hoy día es… mire estamos pasando por el boom de las mineras
¿cierto? El boom de las mineras no se puede detener, ojala que la gente tome
conciencia y que no se contamine ni el suelo ni el aire.
16
En concordancia con las presunciones, anteriormente mencionadas en el testimonio, sobre la
polución ocasionada por el polvo en suspensión y la depositación de metales pesados provenientes de las
faenas mineras que afecta a la vegetación de las quebradas, estudios realizados por especialistas de la
Universidad Católica de Chile, en el Centro del desierto de Atacama, en Alto Patache, determinaron a través
del análisis de la flora mediante microscopio de barrido un alto grado de contaminación por metales pesados
provenientes de la minería y termoeléctricas en la región. El grave impacto del material en suspensión
producido por la minería sobre el aire, el agua, el suelo, y los seres vivos es uno de los efectos colaterales
más comunes y devastadores del extractivismo minero (Consultar: Robert Moran en Interamerican Association
for Environmental Defense AID)
153
Me ha tocado a mí dar charlas en la Arturo Prat donde han estado las
mineras, Collahuasi, y todos y les digo lo mismo que les digo siempre, cómo no
llegan buenos molinos pa’ que ese polvillo no contamine las plantas, porque
eso es lo que está pasando allá arriba… ya a un punto que lo que se daba ya
no se da ya (cultivos)…como el suelo no botar eso a las cuencas y ese penetra
a las napas subterráneas y eso lo que estamos tomando ahora nosotros agua,
como hacer grandes radienes donde esté… hierro cemento arriba y echar ahí
los desechos y en tiempo de lluvias taparlos, porque también es bueno
repetir… impedir el bum de las mineras es algo difícil…lo veo muy… muy
oscuro el panorama”: […]
154
“ Tenemos a las vertientes, a ellas también se les realiza una ceremonia,
tenemos una principal “Curarica” que abastece el riego, también la vertiente de
Piguagua, ella abastece de agua potable al pueblo y para que no se seque el
caudal y afore más agua se hace esto.
“ Primero se hace ver en la hojas de coca, con personas que saben de esto,
y se pregunta qué es lo que está pidiendo la vertiente, si es un cordero o un
llamo blanco, en esa oportunidad se nos pidió un llamito, se lleva el animalito
vivo a los pies de la vertiente se pawa y se sacrifica, y esa sangre se le entrega
a la vertiente. Una parte del llamo se comparte ahí (asado) con las personas
que fueron, también se hace un hoyito en la tierra, se prende la fogata, una vez
lista las brasitas, se coloca sobre ella el unto y el corazón del llamo, esto se le
entrega a la vertiente y se asa ahí, entonces es para que ella coma. Antes de
matar al animalito este se pawa con coca, alcohol, y se inciensa, aquí sí se usa
el incienso porque es una ofrenda. Se tiene que preparar el animalito antes de
sacrificarlo, todo eso se dice: “que sea en buena hora la ceremonia que se está
haciendo para la vertiente, para que nos de una mejor agu”, o si hay poco
caudal, este que aumente y sea abundante. Una vez terminado todo, se comió
el asado, todos los restos se entierran lo mismo se hace con lo que se le dio a
la vertiente”.[…]
155
Antiguas andenerías, testigos de una agricultura abundante y milenaria.
“ Por ejemplo para las chacras, mi papa decía que hay una época en la cual
se Coya, que es entre abril y mayo, cuando se empiezan a trabajar las chacras
para sembrar y plantar. Ahí se realiza esta ceremonia donde se le pide
permiso a la madre tierra por la intervención y a la vez se le pide que de una
buena producción. Se prepara la coya que va con el unto, que es una grasita
de llamo, coca, esta lleva azúcar, alcohol puro, y otras hierbitas. Se hace un
hoyito en el tierra, se prende una fogata ya sea de carbón o palitos del mismo
lugar y se coloca sobre ésta la preparación que se hizo, también se utiliza la
cópala, que es diferente al incienso, el incienso solo se usa en la ceremonia del
señor para sahumarlo y también a los santos, pero la cópala es distinta, esta
es para agradecer, pedir o cuando se va a iniciar una obra, en este caso se
está dando comienzo a una obra de siembra, entonces se usa cópala. La
cópala es un polvito plomito, mis papas lo compraban de Bolivia, tiene un olor
especial, no es tan fragante como el incienso, este último es de color amarillo.
Todo eso va con la coquita, mi papa también le ponía un pedacito de llucta, la
llucta prepara con el cactus, Ud. lo quema y al quemarlo queda una ceniza
blanquita , eso se mezcla con azúcar y papa cocida, se hace una mezcla como
un pancito ,eso se llama llucta. Antiguamente nuestros papas cuando comían
coca se acompañaba con la llucta y un poquito de azúcar. Todo eso […] se
hecha en el hoyito hasta que se queme todo, sobre todo el unto que es la
grasita del llamo que se le sacan parece del cogote. Y eso es la ofrenda a la
madre tierra para que ella de buena cosecha. Esta es una tradición que
156
nosotros la hemos perdido, yo me acuerdo que antes en todas las chacras se
hacía y hoy día nadie hace eso”.
Parte importante de los ritos y las celebraciones eran las bebidas naturales
preparadas tradicionalmente como la chicha, que no debía faltar, la señora de don
Manuel Mollo y su familia de aun mantiene la tradición:
“ Mi señora hace. Los únicos que hacemos, y vendimos para todos los
pueblos, Usmagama, hasta pa’ allá pal’ lao’ de Mamiña, Macaya, también
hemos llevado chicha. Pa’ Pica también esta yendo, la fiesta del Rosario es
las más grande en Pica, tenemos nosotros una señora bien amiga, que trabaja
en Calama, ella depende de allá, así que todos los años nos compra veinte,
treinta kilos de maíz, se hace chancaca po’ y allá la preparan nomás. Ahí sí
que ahora está reconocida la chicha de Sibaya, la chicha de maíz.
157
Bueno, yo la acompaño y la ayudo a mi señora. Es trabajo, cuesta, son tres
días que hay que estar ahí. Un día, una noche y al otro día, hay que estar
cociéndola po’, es pesao’, pero se vende, porque ahora se está vendiendo a
cinco mil pesos el kilo, entonces si nosotros hacimos treinta kilos, ya son ciento
cincuenta luquitas más que vamos a tener po’ y nos ha dado resultado, es que
nos piden. Ahora en Usmagama también llevaron chicha, ahora pal’ catorce de
septiembre, también ya nos compró lo que estábamos acá, le vamos a llevar
como quince kilos, después la despedida allá en Usmagama es el veintidós de
septiembre, ahí corre más, porque ahí ellos la costumbre que tienen salen al
cerro, al calvario del pueblo, arribita así y llega mucha gente, unas ciento
cincuenta, doscientas personas suben ahí, y de ahí allá la costumbre que
tienen cada uno va con su botella po’. Así que de allá bajan con pura sed
nomas po’, así que la chicha ahí al frente de la Iglesia corre. Pero ya acá en
Sibaya las personas que hacían chicha, ya no están, y las que están, están
muy de edad y no pueden hacer, así que la única que hace es mi señora po’,
así que es reconocida y buscada por ahí po’, hable con la señora Elvira, ella
sabe hacer chicha.
“ Eso también es bueno, porque antes no po’, todos los años maíz, choclo,
no po’. Ahí está el error po’. Ahora si sembramos ajo, un año, dos, y después
sembramos el maíz, el maíz da lindo po’. Y si adonde sembramos maíz,
158
sembrar ajo, el ajo también va a producir mejor. Estamos convencidos de que
la alfalfa, el pasto como le decimos nosotros ahora, esa alimenta la tierra. Una
alfalfa cuando ya está muchos años, la trabajamos y sembramos, lo que
siembre uno da lindo. Dice que las raíces de la alfalfa, alimenta la tierra.
…nosotros tenemos vacuno, así que ese guano es bueno. Ahora no todos
los años nosotros echamos guano antes de sembrar, pero cuando echamos
guano, el ajo y todo produce mejor y la tierra se mantiene más blanda, es
bueno. Por eso muchos que no tienen animales andan comprando guano a
nosotros”.
159
“ Todavía quedan varios como: vizcachas, zorros , búho, hurón , la cacagua,
lechuza, la yagareta, el añazo, lagartos, sapos, pecherre , julichos. Estos dos
últimos son típicos de nuestro pueblo los julichos son de color negro y cuando
llega la fruta este se come las mejores peras, las mas grandes, de hecho en
Huaviña hay un niño que le pusieron ese apodo “julicho” porque hacia puras
maldades. El otro pajarito es el pecherre, en otros lugares le llaman gorrión,
este es muy rabioso, se hace el muerto cuando se le caza, tu lo dejas y este se
para y se va saltando en dos patitas, en nuestro pueblo hay muchos.
Hay otras aves como las tórtolas que son chiquitas y después esta la polola
cuculí, que tiene los parpados bien azules, como se los hubiera pintado. La
lechuza y la cacagua, siempre cuando va a morir alguien, ésta canta en la
noche”.
160
solo presentaban un uso equilibrado y no invasivo en el cual convivían el ser
humano y los depredadores como el puma. En la actualidad el puma se ha visto
presionado a bajar a las quebradas para poder obtener presas que en su antiguo
hábitat ya no hay, o son escasas. A esto se suma la presencia de carreteras,
vehículos y faenas de gran intervención espacial, lo que obliga a animales
territoriales como el puma y el zorro a desplazarse a otros lugares. Don Manuel
Mollo nos cuenta su experiencia reciente con depredadores como el puma:
“ El más este que nos dejó hace poco es el puma po’. El puma también se
acerca pa’ acá po. Ese sí que es malo, nosotros el año ante pasado
compramos dos llamos que traen de arriba a veces, cuando no hay años
lluviosos, ahí los que tienen ganado bajan a vender harto llamo. Compramos
dos grandotes, de un año y medio, ochenta mil pesos cada uno. Acá con
tenerlos unos seis meses, un año, la carne pare’ que fuera de vacuno,
compone al tiro con la alfalfa de acá.
Después empezaron con que el puma llegó, allá arriba había matado unos
corderos. Nosotros los teníamos ahí al frente teníamos una chacra los llamos,
pero eran chúcaros y fortachos. Después llegó uno, mas acá cruzó por el río
pa’ acá y mató una llama, pero esa llama la habíamos visto nosotros, estaba
toda flacucha, viejita. Me dijo a mí un vecino, “Manuel, baja a los animales de
allá porque el puma está rondando por acá”, yo dije, cuando les va a hacer
daño a mis llamos, son chúcaros y fortachos. Tocó que un día como ayer, yo
viaje a Iquique, y mi hijo menor en el terminal tiene una cafetería, así que yo
me fui pa’ allá a tomar desayuno y sonó el teléfono, aquí tenemos teléfono
rural. Ahí en Iquique hay quien atiende la radio rural, don Evaristo Herrera, así
que a él lo llamo mi hijo y mi señora, pa’ avisarme que el puma llegó y mató a
los dos llamos, ese día que yo me fui en la noche. Yo no quería creer, dije
ojala que saquen la carne de las piernas, lo armadito, lo demás se bota todo.
Ese día no pude regresarme, el segundo día vine y sacaron las piernas algo
pa’ hacer charqui seco.
Los que saben dicen que cuando el puma mata esos animales ya quedan
envenenados y no es conveniente ni en charqui, ni hacerles nada. Dicen que
el puma les tira un pollo (saliva) y los hipnotiza, así como el gato marea al
ratón, de ahí listo, los pesca y los mata. Eran grandes mis llamitos. Al día
siguiente salimos con varios amigos a pillar al puma, pero nada. A la noche
dijo mi hijo que lo iba a ir a catear. Al segundo día había bajado a comer un
poco de carne de llamo, así que con otro amigo se fue y llevó petróleo, dicen
que el puma le tiene mucho temor al fuego, así que cuando se meta pa’ la
chacra dijo, nosotros vamos a quemar monte ahí pa’ que no arranque el hueón.
Fueron con palos, pero que si el animal es más habiloso que uno, ellos
estuvieron como hasta las dos, tres de la mañana ahí, entre tres o cuatro
161
amigos. Al otro día en la mañana tempranito venia y había matado cuatro
corderos, mientras ellos estaban esperándolo acá, el puma estaba matando
allá los corderos. Al animal le falta solo hablar nomás, el puma es jodio, menos
mal que no es todos los años que baja, no sé porque. Hace como cinco años
atrás también hizo una matanza y lo persiguieron. A los dos, tres días estaba
matando allá en Parca, en Macaya, acá se mata un caballar, lo había herido
dice, lo quería matar. Después cuando nosotros fuimos el año pasado a Oruro,
ahí fuimos al zoológico y hay de todos portes, el que ronda por acá es así
nomás, no es grandote, eso si las garras que tiene. Hay otro también, uno más
grandote”.
162
La biodiversidad endémica (própia del lugar) y aloctona (foránea implantada) han sido por siglos habitantes
del territorio ancestral, “los primeros originarios”, y en cierto modo hermanos del humano andino. Han
convivido en reciprocidad adaptandose alas transformaciones que el ser humano ha generado en el territorio,
sin embargo la escala actual de transformación del espacio puede ser demasiado violenta para las especies
silvestres, pudiendo sucumbir y extinguirse, como en el caso de el Tite andino, el cóndor, y el puma, alguna
vez grandes señores de los andes, hoy en vías de extinción.
163
Quebrada de Miñe Miñe
Miñe Miñe como territorio ancestral presenta un nutrido relato propio que no
necesita mayores preámbulos, como comunidad lucho y hoy sigue luchando por el
reconocimiento de sus pueblos como parte de la centenaria identidad quechua en
la región, identidad que por décadas fue invisibilizada institucionalmente. Como
toda cultura quebradeña, presenta un conocimiento tradicional sobre su entorno
profundamente arraigado en su espacio territorial, pero como todas las otras
quebradas ha sufrido igualmente el cercano e intenso influjo del mundo
occidentalizado, que con el pasar de los años fue reduciendo su población,
quienes salieron algún día en busca de prosperidad en tierras lejanas,
manteniendo sus conocimientos tradicionales en su anciana población. A pesar
del proceso histórico de la quebrada que ha mermado la cultura local, personas
como don Martín Chambe mantienen aun vivo el conocimiento tradicional, el cual
nos lo transmite con total claridad, en términos territoriales y ordenamiento del
espacio nos comenta:
“…el espacio este comprende entre el camino de Bolivia arriba por el Este
con Alto Esquiña. Por el lado Sur tenemos Asa, Alto Tana y después yendo
por el lado Este está también está Corza, está Chiza, del puente Chiza, sigue
por allá por Alto Hunacarani, Alto Cochiza, hasta Esquiña, ese supuestamente
ese es el territorio de Miñi Miñe. […] Mayormente las actividades son
agrícolas. Es la agricultura el medio por el cual nuestros antepasados se
lograban sustentar. Mayormente era la parte frutícola y en segunda escala, la
parte hortalizas.” […] Miñi Miñe está compuesto, el sector diría, por varios
caseríos, y el centro es la localidad de Miñi Miñe. Los caserios que nos
rodeaban eran Liga, Suca, Corza, Quipinta, Quanaya, Champaja, Miñita,
Cutijmalla, esas son las localidades donde todos tienen predios, es decir, en
distintos caseríos, antes eran caseríos, ahora ya el caso de Suca se ha vuelto
convertida en una junta de vecinos, pero era un caserío, siempre ha sido un
caserío.
164
Respecto de la producción agrícola, esta definida por la “dulzura” del valle,
el cual por sus aguas permite el desarrollo de infinidad de árboles frutales, los
cuales resaltan en sus frutos por la calidad y sabor de estos, Don Martín Chambe
nos cuenta sobre ello, pero además sobre el cambio cultural y el abandono de las
practicas tradicionales por la influencia del mercado y formas de vida inmediatistas
de occidente::
165
alimentarme con carne, yo tenía que tener permanentemente un pequeño
rebaño de corderos de 5, 8, hasta 10 llegaba no más, porque el sector de Miñi
Miñe no tiene pastizales ahí cerca, entonces ahí conseguíamos la carne, hoy
en día la compramos ahí en el terminal y no tenemos que estar un año, así
todos los días alimentando los corderos mañana y tarde. Los corderos no
salían como en otras partes a pastar, sino que siempre estaban encerrados
en corrales, ahí nacían, ahí se criaban, ahí vivían y ahí moría el cordero. No
eran como en el altiplano donde se desplazaban buscando pastizales donde
tener mejor alimento.”
En Miñi Miñe hay lugares donde hacían las ceremonias, que es la Fiesta del
Sol. Hay un lugar que se llama “La Piedra” donde hacían los carnavales. Hay
otro lugar donde también hay una piedra, donde se reciben a los visitantes en
166
las fiestas, las comparsas. Están los petroglifos, los lugares donde existen
petroglifos. Están los cementerios indígenas, en el caso de Quipinca están la
chullpas también en el sector. Se cuenta prácticamente con dos apachetas,
una está yendo al camino de Bolivia y el otro está en Esquiña. Nuestros
antepasados antiguos, no conocían la cruz, no conocían la biblia, pero
siempre en el ser humano había un tercer elemento, que aparte de la parte
física, la parte mental, también está la parte espiritual, había que alimentar de
alguna forma la parte espiritual. Lamentablemente en la parte espiritual, ahí
también jugaban se conjugaban ideas o visiones, de ciertas personas que
inculcaban o que se imaginaban y que se fue creando, que se creó, todo de
acuerdo también a lo que era el proceso de la naturaleza. Al margen de eso
que también había investigaciones, se investigaba, se estudiaba la naturaleza
para ver cómo sacarle el provecho a la naturaleza. En el caso de sacarle
provecho, podríamos decir, está el asunto de conocer el ciclo de la luna, el
ciclo del sol, buscar el momento propicio para sembrar, el momento para
abonar, el momento para cortar un árbol, es decir, porque no es llegar y cortar
un árbol no más, hay que ver un momento para la siembra de lo mío, para
lograr una buena cosecha.
Por otro lado está la creencia espiritual en que uno cree que hay otro ente
que nos puede ayudar, ¿cierto? En este caso es el Sol. De hecho el sol
ayuda, ellos se dieron cuenta que el sol jugaba un papel importantísimo en el
asunto de la agricultura. Mayormente por la situación, yo creo, por la
situación de poder subsistir, ver el crecimiento de la población y ver que a
veces se sufría el efecto negativo de la producción y había problemas para
alimentarse, entonces había que recurrir a algo. Y ahí esta gente recurría al
sol y a veces, en la parte espiritual, a agradar a alguien para pedir algo. La
fiesta del Inti Raymi por ejemplo, no es una fiesta como la que se vive hoy día
en otros pueblos, que prácticamente es una tomatera, donde la gente va a
tomar mayormente. Eran fiestas de reflexión ¿Qué he hecho yo?, ¿qué hago
yo?, ¿cómo puedo agradar al sol para que este nuevo año que comienza
167
pueda haber una buena cosecha? Era una reflexión porque la persona se
miraba a sí mismo, ¿qué es lo que hice mal?, o no agradé al dios sol, o no sé
a otro ente, al abuelo carnaval, también se puede decir, pero no era una fiesta
para ir a allá a bailar, se transformó. Pero esa eran las fiestas antiguas,
generalmente en nuestros antepasados todo se redondeaba en cómo pedir,
cómo agradar para que se nos dé.
El abuelo carnaval es una fiesta, que se supone que es un ser que ayuda a
la producción, se lleva las plagas, es un ser espiritual. En el caso de Miñi
Miñe, habita en una piedra, simbolizado en una piedra. Entonces cuando
comienza la fiesta van allá a la piedra y sacan al abuelo carnaval en forma
simbólica, alguien se viste con los atuendos, baja al pueblo, baila, varios días
están bailando, y después al final van de regreso. Lo van a dejar a la piedra.
168
Capítulo 3: Oasis Desérticos.
169
Sacagaina (Pedro Caucoto), Quilagaina (Pedro Sucaques) y Utali (Pedro
Pacanco) para la parcialidad territorial de Mancazaya. Entrado el periodo
republicano peruano, se transforma netamente hacia la producción de frutales,
destacando cítricos, y frutas como el mango y la guayaba.
Oasis de Pica
170
Valle de Quisma, principios del siglo pasado.
171
Mulares cargados en Altos de Pica. 1950. Isaiah Bowman, 1952.
“ Ya, pidieron las 600 hectáreas, pidieron desde donde está el estanque
redondo, donde empieza el agua potable de aquí, desde ahí hasta Concova,
toda la parte sur. Pero es para captar agua, nada más, quien no entiende eso,
hasta una guagua. No, hay un pozo y ese pozo echan el agua en estanque
redondo, y con el estanque redondo riegan por lo menso 12 a 13 hectáreas y
tienen por lo menos 1.000 limones, si está tan fácil, la filtración y uno es viejo
sabe ya esto. Con que tiene un corte, de más arriba del bunque del agua
potable de aquí, hicieron un corte ahí, llevan el agua a Concova, unos 30
metros de ahí, se llevan toda el agua.
172
Yanqui que estaba perforando, bajo las ordenes de Roberto Dijman y también
había un ingeniero geólogo argentino Carlos Gally. En Pica no se habían dado
cuenta, recién se vienen a dar cuenta, ¿sabe lo que me dijo Dijman, sentado
en la cama?, “una cosa Don José” me dijo: “usted es el que está defendiendo
acá, y usted tiene chacra en Pica, yo le voy a decir lo que va a pasar en Pica,
yo sé mi opinión, […] está saliendo el agua del desaguadero, por la perforación
unos pocos metros más y se va secar todo, así que esto, va a ser un solo
guaracazo y se seca el Resbaladero y la Concova”.
Una cosa muy sencilla, este pillaje es igual al del 12. Hay que preguntar.
Han pedido alrededor de Concova, al resbaladero y han pedido allá cerca de
Villarroel. Yo creo que no tienen dueño. Si no tienen dueño, entonces la
situación es bien peligrosa, porque pueden hacer lo que quieran más arriba
después. ¿Qué extraño que Pica no haya pedido la merced de esos terrenos,
para defenderse, podría haber pedido ya hace mucho tiempo eso?. Está
pasando la misma cosa que acá, acá a nosotros nos saquearon por el gran
vino, y ahora esta compañía que se ha formado, son los que están bien
informados de que la única parte de Chile donde los árboles frutales producen
todo el año es aquí, es la única parte. Si allá pueden tener miles y miles de
hectáreas, pero que ganan con las miles de hectáreas, no tienen las bondades
de estos suelos, no tienen la bondad de este clima. Mientras tanto tiene que ir
creando conciencia ir hablando con los Matillanos, con los Piqueños, para
aunar a todo el mundo y decir: “bueno queremos saber qué es lo que pasa con
esa gente, que se va a venir a instalar aquí, a perforar y no nos dicen nada,
tenemos derecho a saber”. Si en Pica están gritando, si a mí me decían:
173
“como usted defendió a ese pueblo que está muerto, cómo no vienes a
defender aquí que es lo mismo”.
Pica. 1910. Las mulitas, fueron el motor del desarrollo.. Colección Acrata Iquique.
Familias acaudaladas de Pica. Año en que Barros Luco arrebatara las aguas al valle y oasis.
176
Oasis de Matilla y Quisma
177
Valle de Quisma.Izquierda, 1979; Derecha, 2005. Fuente: Colección Acrata Iquique.
“ yo creo que antes se cultivaba menos que ahora, ahora ha decaído por las
pestes, pero estuvo un tiempo que hubo bastante producción y ahora no po,
ahora por la peste que no nos ha dejado la peste hace hartos años que la… la
palomilla blanca que le llaman, esa es la que…”
178
ellos y después salían en huara, un grupo por acá y otro por allá, y se iban acá
a el morro y ahí cantaban dando vuelta a todo el pueblo, con sus versos que
son típicos de Matilla, nosotros tenemos nuestro versos también, parecido a los
de Pica, pero la entonación no es igual, es distinta, siempre tenemos un
poquito de diferencias, cada uno se distingue por sus entonaciones, por sus
costumbres.
bueno, usted ve ahora que todos los cambios son por la atmósfera, que
tanto, tanta cosa, como le dijera este…mmm…ya no es lo mismo que antes,
usted cultivaban algo con puro guano de gallina, ahora le ponen otras cosas,
también en los alimentos de las aves, los alimentos de los animales, ha
cambiado, no es lo mismo, no es natural ya…hay cosas buenas y hay cosas
malas, porque mató el control biológico que tenían los árboles, su propio
control que tenían.
mire el agua yo creo que…es que antes no teníamos todo el adelanto que
hay, porque usted tiene ahora el agua potable que la tiene en la casa,
antiguamente no po, había que ir ahí a la vertiente y todo eso, ir acarreándola
con balde, ahora no po, yo encuentro que eso estamos mejor, encuentro yo, en
cuanto a las comodidades. Que se necesita más agua si po, porque si hubiera
más agua hubiera más producción po, pero siempre… y ahora se dice con todo
esto que ha mermado las napas de agua por las mineras, la mineras usted
sabe que, ellos dicen que no, que no afecta, pero realmente afecta. Yo creo
que es malo, pero lo tienen que aplicar por las peste, pero no creo que es
bueno, es malo, pero ha cambiado todo, todo eso se va a la atmósfera todas
esas cosas. Se dice que sí, se dice ya como ha pasado en Mamiña que está
pasando también acá y a raíz de todo eso también son las pestes también, y
cada día hay más mineras y usted sabe que primeramente están las mineras y
después la agricultura, así que, ese es el tema, que las mineras han afectado
el medio ambiente…lamentablemente es el sueldo de Chile, pero ¿cuál es el
costo que tiene? ese es el costo que tiene para nosotros de los pueblos.
180
”La primera y última impresión de los pueblos desérticos es un agrado duradero. Desde los largos
y calurosos senderos desérticos, hundidos en la chusca, sus jardines nos invitan a varias leguas de
lejanía, y por las noches la luz de su torre sobre los cerros dirige al viajero a sus hospitalarias
puertas. […] En: Desert Trails of Atacama. I. Bowman, 1952.
181
Capítulo 4: Problemas medioambientales de la Provincia del
Tamarugal identificados por las comunidades.
182
4-Intervencionismo de compañías extractivistas y ruptura de la relaciones
comunitaria internas: Se entiende como un conflicto de carácter ambiental, ya que
disgrega a las comunidades y debilita la organización interna que trabaja y
desarrolla comunitariamente el territorio ancestral. El no reconocimiento de las
formas de organización tradicional patrilineal, en donde las decisiones pasan por
los jefes de los troncos familiares, permite a las empresas extractivistas invalidar la
organización tradicional a través de negociaciones, dando poder a habitantes que
están bajo la representatividad de los jefes de familia de relación directa a los
habitantes originarios, generando una ruptura de las relaciones internas,
fracturando las relaciones familiares, y por consiguiente dividiendo a las
comunidades como ocurre en las ecozonas con explotaciones extractivistas.
183
8-Tensión hídrica Altos y bajos: Se presenta como la escasa gestión pública de los
ciclos de los recursos hídricos de manera tal que se implementen sistemas de
optimización de los recursos hídricos en sus periodos de mayor caudal, para que
se pueda contar con un suministro relativamente estable durante el año en las
quebradas y valles precordilleranos.
184
Epílogo
185
territorio sólo su importancia como propiedad privada, y como tal, fuente de
usufructo económico en la cual cualquier explotación y extracción de recursos sólo
significa formar parte de las ganancias, no, eso es parte del pensamiento
implantado, y es nefasto para la conservación del territorio, pues al verla solo
como cosa objeto de cambio y ganancia, olvida que la tierra esta viva, tal como lo
dijimos, desde lo más mínimo a lo más grande, y que de igual manera de ello
dependerá la vida del pueblo que lo habita y sus descendientes.
Conclusiones.
-No se puede cuestionar las formas actuales de expresión cultural de los pueblos
indígenas, pues corresponden a realidades otras, alternas y paralelas a la
occidental, mestizo y urbana. Constituyen por tanto expresiones válidas sean o no
concordantes con las corrientes actuales de desarrollo en el resto del territorio
nacional.
186
indígenas en puntos internodales de la antigua movilidad giratoria, que otrora sólo
eran uso esporádico, cíclico y estacional, periférico a poblados indígenas mayores.
-Los ritos son la entrega solemne de reciprocidad, sin embargo cumplen el rol de
organizar en forma cíclica y calendarizada la vida en el ecosistema, para asegurar
el desarrollo sustentable del ecosistema mismo.
-Una vez comprobados los efectos nocivos producen rechazo de parte de las
comunidades, pero las nuevas tecnologías, invasivas, crean dependencia por el
cambio productivo con mejoramiento de los costos de producción en tiempo y
cantidad, por la presión del mercado, dando escaso margen al retorno de las
antiguas prácticas. El modelo económico presiona sobre la producción,
posicionando a los agricultores en una tensión cultural, retornar a los antiguo y
tradicional con menos producción, o permanecer en lo nuevo y destructivo con
mayor ganancia, pero menor costo.
187
Capitulo 6. Anexos de la Investigación
Objetivos.
17
Considerando la pluriculturalidad que pudiese existir a nivel local como territorios compartidos por dos o
mas etnias.
188
procesada según el entendimiento del investigador o investigadora, vuelcan la
información reinterpretada en los libros, en términos ajenos a la voz original,
siendo los relatos y testimonios pasado a formas distantes a lo originalmente
expresado por quién lo transmitió, usando un lenguaje depurado, vale decir
“normalizado” según las formas académicas, y en resumen ajenas a las
comunidades mismas. Este proceso, es para muchos investigadores formados en
los contextos sociales y culturales de periferia, de raigambre indígena, o de
sociedades otra, una forma colonialista de trabajar los conocimientos tradicionales,
pues valoran sus contenidos reinterpretados, desechando sus formas originales en
que fueren expresados. La importancia real de los testimonios para los
facilitadores de investigaciones decolonialistas radica esencialmente en que son
precisamente sus formas originales del dialogo las formas que deben ser
entregadas a las nuevas generaciones, y pares de su propia comunidad y no de
otra forma, ya que tales formas de transmitir el conocimiento constituyen también
parte de la tradición, y no solo el contenido esencial de lo transmitido.
189
comprensión en los modos originales de transmisión de conocimiento, con las
palabras comunes, y los propios órdenes lógicos que los antiguos habitantes
mayores de las comunidades dan a su transmisión de conocimientos, ideas y
opiniones, memorias y experiencias.
190
lograr una visión holística (que contempla todos los temas) y orgánica (la relación
de todas las partes) del tema a investigar, que permita generar un co-relato de los
distintos testimonios de cada ecozona o piso ecológico.
191
El objeto es presentar los conocimientos tradicionales que se practicaron y
que aun se mantienen y practican de la ecología y la cultura de cada ecozona y
localidades en la provincia del Tamarugal, representada en los conocimientos
ancestrales, para ser entregados a las nuevas generaciones, pero a la vez
potenciar la autodeterminación y revaloración de las formas propias de cada
pueblo originario e indígena de conocer y generar información y conocimientos.
Metodología.
192
A través de la relación eco-antropológica se pretendió dar a entender y
graficar en forma explícita y clara las dinámicas culturales adscritas a cada piso
ecológico, y su relación íntima con la naturaleza, implícito en la cosmovisión,
transmitida a través de la oralidad.
18
Se usa Camiña solo como ejemplo de localidad.
193
naturaleza? ¿Conoce mitos, leyendas o historias que hablen sobre cuidar la tierra, la
naturaleza, o los recursos naturales?. Se debe abrir la respuesta a un cotejo basado en la
observación.
9) Conocer aspectos del traspaso y transmisión de los conocimientos. Las preguntas que
pueden gatillar esta información pueden ser: ¿De qué manera traspasan en su comunidad
los conocimientos ancestrales? ¿Existen otras formas distintas (a la transmisión oral, el
saber hacer a traves de la ayuda al trabajo en la infancia, y el juego representativo de
roles) de transmitir los conocimientos (Sea onírico, representaciones de la naturaleza,
seres y elementos, representaciones espirituales, u otra materia (fuego, agua, humos,
etc.)¿Han cambiado las formas de transmitir los conocimientos? y si han cambiado ¿Por
qué? ¿es bueno o negativo a su juicio?.
194
gatillar esta información pueden ser: ¿Cómo cuidan o protegen sus espacios de
importancia natural o ecológica/cultural? ¿Cómo se organizan estas actividades? ¿Tiene
características rituales?.
195
Selección de Personas y Testimonios representativos para las
comunidades.
196
del área, la cultura local a grandes rasgos, y los conductos regulares de
acercamiento a la organización local que deben ser seguidos siempre. Esto
también ordenó los procedimientos metodológicos de campo, tanto para el equipo
de investigación como para los equipos de registro paralelo y en general de la
Consultora responsable del proyecto.
197
Instrumentos y parámetros de validación/evaluación de
información.
Centro de Artes escénicas de la Ilustre Municipalidad de Pozo Almonte. Salón de la Biblioteca pública.
198
Procedimiento de Ética.
Las iniciativas de este tipo deben comenzar desde la premisa de que los
proyectos investigativos en su etapa de desarrollo resultan muchas veces ajenos a
la realidad de las comunidades en su cotidianeidad, aun cuando cubran una
necesidad expresa y solicitada por las mismas a las instituciones o terceros que
luego ejecutaran la iniciativa y concretaran lo requerido. En este contexto la
presencia de equipos de investigación en las comunidades muchas veces resulta
invasiva y no confiable, dado que por siglos las comunidades han sido fuente de
información etnográfica, científica y de otras índoles, que pesquisan terceros que
en muy pocas ocasiones han retornado la información o beneficiado a las
comunidades. Por lo tanto es profundamente necesario generar cambios
radicales en las formas de trabajo investigativo.
199
CARTA DE CONSENTIMIENTO INFORMADO
El registro de las actividades y testimonios, tiene como fin constituir parte del material de
análisis para la edición de un libro y un video documental, ambos productos de la presente
investigación. El proyecto tiene como propósito ulterior, aportar a la protección del medio
ambiente, educación de las nuevas generaciones de las comunidades de pueblos originarios y
fortalecer organización comunitaria de su territorio, al recabar, cotejar, analizar y visibilizar las
relaciones, percepciones y conocimientos ancestrales de la localidad y el territorio de la comunidad,
constituyendo un documento de libre consulta a disposición de vuestra comunidad. Los materiales
de registro íntegros que comprenden registro de audio, transcripción, textos y fotografías se
mantendrán bajo un marco ético de privacidad compartida, convenida entre el o la investigadora y
la contraparte que preste testimonio. Su participación se presenta en forma anónima, indicándose en
el documento final, sólo bajo iniciales, debido a las necesidades metodológicas de la investigación.
200
Bibliografía recomendada
Ahumada, Mario & Luis Faúndez. 2009. Guía Descriptiva de los Sistemas Vegetacionales
Azonales Hídricos Terrestres de la Ecorregión Altiplánica (SVAHT). Ministerio de
Agricultura de Chile. Servicio Agrícola y Ganadero. Santiago.
Arnold, Denise. Domingo Jiménez A. & Juan de Dios Yapita. 1992. Hacia un Orden
Andino de las Cosas. Tres Pistas de los Andes Meridionales. Hisbol / ILCA. La Paz,
Bolivia.
Calderón, Constantino. 1996. Crianza del Agua y Ecología Andina. En: Ecología,
Cosmovisión y Tecnología en el Mundo Andino. Yachay. Cochabamba. pp. N°12.
Cisneros, Paúl & James McBreen. 2010. Superposición de territorios indígenas y áreas
protegidas en América del Sur. Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza
/Department ro International Development. Quito.
Grosjean, Martin et al., 2001. Mid-Holocen Climate and Culture Change in the Sout-
Central Andes: Humid or Dry?. Science. Volume N° 292:2391-2392. N°5526. Vancouver.
Hardt, Michel & Raúl Ziechi. 2013. Preservar y Compartir. Bienes Comunes y
Movimientos Sociales. Mardulce.
Hidalgo, Jorge. 2004. Historia andina en Chile. Editorial Universitaria. Santiago de Chile.
Isbell, Billie Jean. 2005. Para Defendernos: Ecología y Ritual en un Pueblo Andino. Centro
de Estudios Regionales Andinos Bartolomé de las Casas. Cuzco.
Jaksic, F. et al., 1997. Una Perspectiva Ecológica Sobre el Uso del Agua en el Norte
Grande: La Región de Tarapacá como Estudio de Caso, Estudios Públicos. N°68.
Seminario “Minería y Uso de Agua de Chile”. Centro de Estudios Públicos.
Llagostera Martinez, Agustín, 1979b. 9700 Years of Maritime Subsistence on the Pacific:
An Analysis by Means of Bioindicators in the North of Chile. American Antiquity, Volume
N°44: 309-324. Washington, DC.
201
Llagostera Martinez, Agustín, 1982. Tres Dimensiones en la Conquista Prehistórica del
Mar. Un Aporte para el Estudio de las Formaciones Pescadores de la Costa Sur Andina.
Actas del VIII Congreso de Arqueología de Chile. Ediciones Kultrún. pp:217-245.
Santiago.
Llagostera Martinez, Agustín, 1989. Caza y Pesca Marítima (9.000 – 1.000 a. C.).
Prehistoria de Chile. Desde sus Orígenes Hasta los Albores de la Conquista. J. Hidalgo,
V. Schiappacasse, H. Niemeyer, C. Aldunate e I. Solimano. Editorial Andrés Bello. pp:57-
79. Santiago.
Messerli, B. et al., 1993. Climate Change and Natural Resource Dynamics of the Atacama
Altiplano in the Last 18.000 Years: A Preliminary Synthesis. Mountain Research and
Development, Volume 13:117-127 N° 2, University of California, California.
Noy-Meir, I., 1973. Desert ecosystems: Environment and producers. Annual Review of
Ecology and Systematics, 4, pp. 25-51.
Noy-Meir, I., 1985. Desert ecosystems: structure and function. Hot deserts and arid
shrublands. M. Evenari, I. Noy-Meir y D.W. Goodall, Eds. pp. 93-103. Elsevier,
Amsterdam.
Núñez, Lautaro., 1964. Desarrollo Cultural Prehispánico del Norte de Chile. Estudios
Arqueológicos, Universidad de Chile. N°1: 37-115. Antofagasta.
Núñez, Lautaro & Henri J. Hall, 1982. Análisis de Dieta y Movilidad en un Campamento
Arcaico del Norte de Chile. Bulletin de L’Institut Francais d’Etudes Andines. Volume N°3-4:
91-113. París.
Núñez, Lautaro, 1983. Paleo indio y Arcaico en Chile: Diversidad, Secuencia y Proceso.
Serie Monografías N°3. Ediciones Cuicuilco, Cuicuilco, México.
Núñez, Lautaro et al., 2002. Human Occupation and Climate Change in the Puna de
Atacama, Chile. Science. Volumen N°298:821-824. Vancouver.
Paskoff, Roland. 1996. Atlas de las Formas de Relieve de Chile. Instituto Geográfico
Militar de Chile. Santiago, 288 p.
202
Peng Cui, et al., 2007. A complete mitochondrial genome sequence of the wild two-
humped camel (Camelus bactrianus ferus): an evolutionary history of camelidae. Revista
electrónica BMC genomics (impact factor: 3.76). 02/; 8:241. DOI: 10.1186/1471-2164-8-
241. Key Laboratory of Dairy Biotechnology and Engineering Ministry of Education,
College of Food Science and Engineering, Inner Mongolia Agricultural University, Huhhot,
China.
Porfirio Enríquez, 1996. Reorganización del Paisaje Andino. En: Ecología, Cosmovisión y
Tecnología en el Mundo Andino. Pereira, David & Johnny Mercado. Editores. Yachay.
Cochabamba.
Ramírez de Bryson, Luz M. et al., 2001. Paleoclimatic and Material Cultural Perspective
on the Formative Period of Northern Chile. Revista Chungará, Volumen N°33: N°1:5-12,
Arica.
Santoro, Calogero & Juan Chacama, 1982. Secuencia Cultural de las Tierras Altas del
Área Centro Sur Andina. Revista Chungara, Universidad de Tarapacá. N°9: 22-45. Arica.
Santoro, Calogero M. & Lautaro Núñez, 1987. Hunters of the Dry Puna and Salt Puna in
the Northern Chile. Andean Past. N°1:57-110.
Raggi S. Luis., 2000. Camélidos en Chile. Situación Actual y Perspectivas, Fundación
para la Innovación Agraria, Ministerio de Agricultura, Santiago.
Rivera, Mario. 2002. Historias del Desierto: Arqueología del Norte de Chile, Editorial del
Norte, La Serena, Chile.
Taberna, Freddy. 1968. Isluga Pueblo Sagrado. Boletín de la Universidad de Chile. N°83-
84, año IX, Tomos II y III. Pp.:28-36.
Troll, Carl & Stephen Brush. 1987. El Eco-sistema Andino. Breve Biblioteca de Bolsillo.
Hisbol. La Paz, Bolivia.
Uribe R, Mauricio. 2005. La Cerámica Prehispánica Tardía de Tarapacá, sus Valles
Interiores y Costa Desértica, Norte de Chile (Ca. 900-1.450 D.C.): Una Propuesta
203
Tipológica y Cronológica. Revista Chungará N° 39, 2:143-170, Universidad de Tarapacá,
Arica.
Van Kessel, Juan. 1996. Trabajo y Tecnología en el Mundo Andino. En: Ecología,
Cosmovisión y Tecnología en el Mundo Andino. Pereira & Mercado Editores. Yachay.
Cochabamba. Pp.: 7.
Yañez, Nancy & Raúl Molina. 2008. La Gran Minería y los Derechos Indígenas en el Norte
de Chile. Observatorio Ciudadano. Lom Ediciones.
Van Kessel, Juan. 2003. Holocausto al Progreso: Los Aymaras de Tarapacá. IECTA.
Iquique.
Yañez, Nancy & Raúl Molina. 2008. Las aguas indígenas en Chile. Observatorio
Ciudadano. Lom Ediciones.
204