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Aceptado: 1 de abril de 2016 Este artículo pretende caracterizar la ideología de la extrema de-
recha chilena a través de su historia. Se realizó un análisis del
discurso de los manifiestos y declaraciones de principios de cua-
tro formaciones de ultraderecha de distintos momentos de la his-
toria de Chile: el Movimiento Nacional Socialista, el Movimien-
to Revolucionario Nacional Sindicalista, el Frente Nacionalista
Patria y Libertad, así como Patria Nueva Sociedad. El enfoque
retórico de la ideología ultraderechista permite reconstruir las
autodescripciones ideológicas, las articulaciones del autoritaris-
mo, los marcos figurativos y las principales construcciones argu-
mentativas de la extrema derecha chilena.
* Artículo de reflexión
** Doctor en Filosofía por la Universidad Complutense de Madrid, profesor de la Universidad Austral de Chile. Correo electrónico: jgonzalez@spm.uach.
cl. C/ Volcán Corcovado, 5036, Puerto Montt, Chile.
HALLAZGOS / ISSN: 1794-3841 / Año 14, N.° 27 / Bogotá, D. C. / Universidad Santo Tomás / pp. 19-41 19
La retórica de lo extremo en la ultraderecha chilena
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Juan Antonio González de Requena Farré
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La retórica de lo extremo en la ultraderecha chilena
En una perspectiva politológica, podríamos étnica o política, así como por una disci-
considerar —con Norberto Bobbio— que el plina y forma de organización paramilita-
aspecto extremista de una posición política res. Por otra parte, los partidos de extrema
radica en la apuesta estratégica por la exal- derecha de las últimas décadas del siglo
tación de la violencia, la temeridad heroica, XX no se caracterizan por un único rasgo
la resolución autoritaria y la impugnación como la hostilidad al progreso o la posi-
de los marcos de legitimación de la demo- ción antidemocrática o anticomunista, sino
cracia moderna (la soberanía popular y la que exhiben también aspectos como el na-
razón pública, así como las libertades igua- cionalismo extremo, el etnocentrismo, la
les y garantías personales asociadas al Es- xenofobia, el apego a la ley y el orden, la
tado de derecho), sobre el fondo de cierta demanda de liderazgos autoritarios, entre
denegación reaccionaria del legado de la otros. Betz (1993) describió a los partidos de
Ilustración (Bobbio, 1996, pp. 76-82 y 161- extrema derecha surgidos en la década de
163). Desde ese punto de vista, podríamos los ochenta como formaciones radicales, ya
considerar que la extrema derecha contem- que rechazan el sistema establecido cultural
poránea no solo ha naturalizado la división y político establecido (el Estado del bienes-
de lo social y la distribución desigual de los tar, la burocracia y los partidos políticos), a
recursos y oportunidades sociales, sino que la vez que apelan a la iniciativa y logro in-
además recurre al discurso antisistema, a dividuales en el libre juego del mercado, así
cierta retórica revolucionaria o a la justifica- como a la reducción de la intervención esta-
ción del empleo instrumental de la violen- tal. Además, serían partidos de derecha por
cia política, como herramientas para con- su rechazo de la igualdad, su oposición a la
traatacar las reivindicaciones igualitarias integración social de los grupos excluidos
asociadas a la revolución democrática mo- y su posición xenófoba o abiertamente ra-
derna, disciplinar orgánicamente lo social, cista. Por último, se trataría de formaciones
para la dominación autoritaria y el control populistas, que instrumentalizan los temo-
del orden, así como para la inmunización res y sentimientos del hombre común o el
comunitaria o la exclusión identitaria. descontento popular y consagran el sentido
común del pueblo.
Ciertamente, no existe un perfil homogé-
neo de la extrema derecha política. Los Según Mudde (2000), la mayoría de las ca-
fascismos del siglo XX no solo se caracte- racterizaciones del extremismo de derecha
rizaron negativamente por su rechazo del contemporáneo incluyen rasgos como el
parlamentarismo liberal y del materialismo nacionalismo, el racismo, la xenofobia, la
marxista. Según Michael Mann (2004), los posición antidemocrática y la valoración de
movimientos fascistas también se han de- un Estado fuerte, de manera que podríamos
finido positivamente por su proyecto na- reconocer un núcleo ideológico central de la
cionalista y estatista, en procura de cierta extrema derecha actual: al nacionalismo y a
trascendencia de los conflictos sociales en la aspiración a la congruencia político-cul-
un nuevo orden armónico; asimismo, se tural mediante la homogeneización interna
distinguen por el recurso a la exclusión de la sociedad y la expatriación de extran-
identitaria, la agresión y la purificación jeros, se suma la xenofobia como visión el
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mundo que considera lo ajeno a lo conven- Sofía Correa Sutil ha privilegiado la des-
cional o lo nacional como algo negativo y cripción de distintas oleadas de la derecha
amenazador y, por tanto, como un enemigo chilena en el siglo XX, enfatizando el prota-
interno o externo. De la combinación de na- gonismo de las élites organizadas, así como
cionalismo y xenofobia, se siguen políticas la flexibilidad, la capacidad de negociación
socioeconómicas en beneficio exclusivo del y la cooptación que caracterizaron a la de-
propio pueblo o de los connacionales (cierto recha tradicional, esto es, a los partidos
chauvinismo del bienestar) y políticas exter- conservador y liberal. En la reconstrucción
nas proteccionistas y de afirmación de la so- histórica de Correa, el estilo político flexible
beranía nacional de fuerzas exteriores. Por y negociador de la derecha tradicional dio
último, se da un apego a la ley y el orden, paso a posiciones populistas y nacionalistas
o sea al mantenimiento de un sistema legal (como las del Partido Conservador Social-
estricto y la aplicación rigurosa de las reglas cristiano o el Partido Nacional) que inten-
(Mudde, 2000, p. 177). En suma, pese a la taban canalizar o contener la emergencia y
diferencia de designaciones de la extrema creciente protagonismo de nuevas fuerzas
derecha contemporánea (derecha populista sociales y sectores populares en la realidad
radical, populismo xenófobo, nacionalismo económica y política del siglo XX. En el
populista o derecha radical), cabe reconocer escenario político posterior a la dictadura
algunos rasgos característicos de su marco pinochetista, Correa identifica la irrupción
ideológico: en primer lugar, la perspectiva de una nueva derecha en que confluyen
de cierto nativismo, la noción exclusivista y posiciones gremialistas y neoliberales; se-
etnonacionalista de la ciudadanía y su posi- mejante constelación ideológica habría sus-
ción antiinmigración; en segundo lugar, la tentado el diseño de la institucionalidad y
retórica populista y antiestablishment, que del orden económico-social que dieron for-
divide a la sociedad entre el pueblo y la ma al modelo político aún vigente en Chile
élite corrupta; por último, el autoritarismo, (Correa, 1989; 2005). En tanto que historia
el apego a la ley y el orden, el conformis- de la derecha de las élites tradicionales y
mo y la sumisión a los valores tradicionales reconstrucción de la conformación del ac-
(Muis e Immerzeel, 2016). tual modelo político y económico chileno,
los trabajos de Correa no dan cuenta de los
Por supuesto, existen variantes locales en el
movimientos de extrema derecha extrapar-
despliegue de los movimientos de extrema
lamentarios ni del influjo ideológico de la
derecha contemporáneos, por ello resulta
ultraderecha en la constelación política de
preciso estudiar específicamente las tenden-
la derecha en Chile.
cias históricas y constelaciones ideológicas
de las diferentes ultraderechas en cada rea- Otras reconstrucciones politológicas de la
lidad política; por ejemplo, en Chile. En las derecha chilena e historias intelectuales del
reconstrucciones históricas y politológicas pensamiento conservador en Chile también
de la derecha chilena, no siempre se ha con- llevan a cabo esta desconexión entre la de-
siderado el papel que han desempeñado las recha y la extrema derecha (Cristi y Ruiz,
posiciones de extrema derecha en el siglo 1992; Scully, 1996). Por otro lado, hallamos
XX. En sus reconocidos análisis históricos, reconstrucciones de la historia política de
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efecto, del Programa de la Falange Españo- pues, impropio el adoptar ideologías ex-
la se recoge todo el discurso de la nación tranjeras y no se reconoce como una forma-
como unidad de destino en lo universal, la ción nacista, ultraderechista o totalitaria. En
visión valórica del ser humano, el repudio al todo caso, pese a su escrupulosa afirmación
sistema capitalista, el concepto orgánico de de autoctonía, el texto de Patria y Libertad
la producción social, la concepción nacio- remite interdiscursivamente a la doctrina
nalsindicalista del sindicato único, así como de la seguridad nacional propagada por Es-
la apelación a un estilo ético revolucionario tados Unidos en Latinoamérica tras la revo-
(Falange Española de las J.O.N.S., 1934). Por lución cubana, y refleja nítidamente su anti-
otra parte, el Movimiento se desmarca del comunismo beligerante; también recoge el
nazismo alemán, por no compartir su teo- discurso autoritario y desarrollista del fran-
ría de la superioridad racial ni el principio quismo español, así como su defensa corpo-
de jefatura vertical; también se distancia rativista de la representación política orgá-
del nacionalismo chileno más combativo, nica, la apuesta por una producción social
por considerar que carece de proyecto po- sostenida en la propiedad privada y el deber
lítico. El proyecto del Movimiento Revolu- del trabajo, o bien la consagración y estímu-
cionario Nacional Sindicalista tiene como lo de la iniciativa privada (Ley de principios
meta la institucionalización del convivir del movimiento nacional de 1958, 1967). El
comunitario en un Estado de Comunidad proyecto del Frente Nacionalista apunta a
Nacional, pero también la realización de la concretar un Estado Nacionalista Chileno:
unidad de los pueblos de Iberoamérica en se trata de lograr un Estado Integrador, que
una Comunidad Iberoamericana de Nacio- unifique orgánica y armónicamente a la co-
nes. En cuanto a los términos antagónicos munidad chilena; un gobierno autoritario,
de la propuesta Nacional Sindicalista, se regido por la ley y el orden; una población
señalan la plutocracia, el liberalismo y el so- comprometida con la responsabilidad co-
cialismo marxista, la democracia liberal, el lectiva y encuadrada por la disciplina so-
reformismo y el imperialismo; con un po- cial; un programa juvenil que convoque a
sicionamiento abiertamente revolucionario, las nuevas generaciones; una empresa inte-
el Movimiento se autoconcibe como una grada, que involucre a los trabajadores en
“Oposición Extraparlamentaria y Anti-par- la codirección de la producción; finalmente,
tidista” (1969, proposición 44). una democracia funcional y corporativa, en
la cual se haga efectiva la participación real
Respecto al Frente Nacionalista Patria y Li- de los gremios y las corporaciones. Para
bertad de comienzos de los setenta, no exis- lograr este propósito de un Estado Nacio-
te renuencia a la autodescripción como una nalista Chileno, el Frente Patria y Libertad
ideología política, el nacionalismo, que pre- no tiene reparos en luchar por la conquista
tendería expresar inherente y transparente- del poder tanto mediante la colaboración
mente los intereses espontáneos del pueblo electoral con los partidos democráticos, sin
chileno, o bien de un nosotros inscrito como pactos ni alianzas, como mediante la lu-
nuestro pueblo o Chile, bajo la única inspira- cha revolucionaria, la escalada armada y el
ción de la Historia de Chile y el amor a la apoyo a un eventual pronunciamiento mi-
Patria. El Frente Patria y Libertad considera, litar. En el discurso del Frente Nacionalista
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Patria y Libertad se hace más explícito el an- interdiscursiva a la Nueva Derecha france-
ticomunismo y el antagonismo al marxismo, sa de los años ochenta y noventa: comparte
cuestionado como una ideología totalitaria, con ella el tono reflexivo metapolítico y la
foránea y destructora de los valores de la pretensión de hegemonía cultural; la crítica
civilización cristiana. También se esbozan del progresismo, del proyecto de moderni-
como antagonistas la demagogia, el siste- zación desarrollista y del nuevo orden mun-
ma político parlamentario imperante, los dial surgido de la globalización; la combi-
ideologismos intrascendentes, la burocracia nación de una cosmología naturalista y del
estatal, la manipulación de la juventud, la holismo ecológico con motivos comunita-
empresa capitalista, el Estado paternalista, ristas y con cierta reivindicación pluralista
la democracia liberal inorgánica, o bien el de las identidades culturales y del derecho
sectarismo y divisionismo de los partidos a la diferencia; el llamado a una democracia
políticos tradicionales. realmente participativa y centrada en la ini-
ciativa popular; por último, una organiza-
El discurso que la formación Patria Nueva y
ción de la producción que, más allá del pro-
Sociedad sostuvo entre los años 1999 y 2010
ductivismo, la especulación financiera y el
se autocaracterizó como una Cosmovisión
consumismo, se ponga al servicio de la vida,
Socialista Nacional, que no asociaba el so-
preserve lo local y asuma una escala huma-
cialismo a un modelo económico o a una
na (Benoist y Champetier, 2000). El proyec-
teoría política, sino a la expresión espiritual
to de Patria Nueva Sociedad involucra la
del altruismo vital y la reciprocidad natural
realización de un Estado Orgánico, bajo la
de los intereses comunitarios, y vinculaba
premisa de que el Estado no es un fin en sí
su concepción nacional a la pertenencia y
mismo, sino solo un medio artificial al ser-
preservación de la Comunidad del Pueblo,
vicio de la conservación, adaptación y ex-
más que al nacionalismo. En ese sentido, Pa-
presión de la identidad nacional, cultural y
tria Nueva y Sociedad habla primariamen-
natural de la Comunidad del Pueblo. En ese
te en nombre de la Comunidad del Pueblo,
sentido, el Estado Orgánico está en constan-
entendida como la expresión territorial, cul-
te proceso de adaptación a la voluntad de
tural, lingüística, tradicional e histórica de
la Comunidad del Pueblo y no constituye
una población humana; adicionalmente, la
una estructura institucional inmodificable
cosmovisión Socialista Nacional se presen-
sino un Estado óptimo y a escala humana,
ta como la verdad misma de la Naturaleza,
capaz de sostener la homeostasis social, de
de su sentido espiritual y su ecología de la
manera que la legalidad y el derecho solo
mente, la manifestación de la diversidad
obtienen legitimidad en la medida en que
cultural y biológica de los pueblos y razas
expresen la preservación de la justicia en la
humanas en el seno de la comunidad de
Comunidad del Pueblo. El proyecto político
vida planetaria. Por otra parte, Patria Nue-
asociado a la cosmovisión Socialista Nacio-
va Sociedad interpela a los chilenos orgullo-
nal involucra, además, el gobierno descen-
sos de sus tradiciones, cultura y estirpe, sin
tralizado, la jerarquización horizontal de
distinción de situación socioeconómica. De
las responsabilidades y la autoridad social,
modo implícito, en la cosmovisión de Patria
un modelo político corporativo, un orde-
Nueva Sociedad se reconoce la remisión
namiento gremialista de la producción, un
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de nuestro pueblo y a una larga tradición implica sumisión, sino colaboración respon-
histórica que nos revela como libertarios, sable. Del mismo modo, en los discursos del
amantes del derecho y de la juridicidad” Movimiento Revolucionario Nacional Sindi-
(1971, p. 32) y a “los valores esenciales de la calista y en Patria Nueva Sociedad, se hace
civilización cristiana” (p. 5). Por lo que res- presente la valoración de la jerarquía. No en
pecta a Patria Nueva y Sociedad, las tradi- vano, los nacionalsindicalistas consagran la
ciones y costumbres históricas se consideran jerarquía como expresión de la trascenden-
constitutivas de la identidad cultural y la ex- cia humana que toma forma en culturas y
presión de la nacionalidad de la Comunidad derechos y deberes humanos, y se proponen
del Pueblo, de manera que han de ser valo- crear cultura y reconocer la jerarquía para
radas, respetadas y promovidas, en nombre posibilitar la realización humana; al fin y al
de la preservación del equilibrio ecológico y cabo, la jerarquía se perfila como un princi-
sustentabilidad de las formas de vida. A di- pio trascendente que “operando en función
ferencia de las otras formaciones de extrema de valores, posibilita la integración, ordena-
derecha, el Movimiento Nacional Socialista ción y dinamización del proceso histórico de
de los años treinta se caracterizaba por una un pueblo” (1969, proposición 3). Asimismo,
decidida inspiración revolucionaria, que Patria Nueva Sociedad defiende una estruc-
se expresa en la constante invocación de lo turación del poder sociopolítico sustentada
nuevo de la situación: la nueva etapa, las en “jerarquías horizontales y circulares, que
nuevas aspiraciones y las nuevas fuerzas. reflejen la ordenación y flujo natural de la
responsabilidad y la autoridad social” (2003,
El conservadurismo, la obsecuencia con la
concepto 55); se trata de una valoración de
autoridad y la sumisión autoritaria también
la jerarquía que no asume los privilegios,
se encuentran articulados en los manifiestos
sino que antepone la responsabilidad colec-
y declaraciones de propósitos de la extrema
tiva de los individuos con la Comunidad del
derecha chilena. El principio de autoridad se
Pueblo. La asunción de que el individuo ha
afirma explícitamente en los textos del Fren-
de trabajar para el colectivo y subordinar sus
te Patria y Libertad y en las concepciones de
intereses a los de la sociedad y a la función
Patria Nueva Sociedad. En efecto, Patria y
social aparece con fuerza en el discurso del
Libertad apuesta por un gobierno autoritario
Movimiento Nacional Socialista; al mismo
que restituya el principio de autoridad, sin
tiempo que el nacismo chileno apela a la se-
el cual no habría orden, progreso, armonía
lección de personalidades fuertes y decidi-
social, justicia legal o democracia legítima,
das, define su ética política en términos de
pues no se cumplirían y acatarían las normas
disciplina, orden y renuncia individual en
ni se sancionarían las infracciones sin privi-
beneficio de la Comunidad del Pueblo. Tam-
legios ni sectarismos. Por su parte, Patria
bién el Frente Nacionalista Patria y Libertad
Nueva Sociedad consagra la autoridad legí-
considera esenciales la disciplina social y la
tima que emana de la voluntad de la Comu-
responsabilidad colectiva, como medio para
nidad del Pueblo y resulta representada por
la organización de la comunidad sin discri-
los mandatarios y la “vocación de servicio
minaciones, el abandono de la demagogia y
de los líderes” (concepto 56). En todo caso,
el logro de la justicia social.
se argumenta que semejante autoridad no
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Tabla 1.
Expresión de actitudes de autoritarismo de derecha y de orientación a la dominación social en algunos
partidos de la extrema derecha chilena.
Movimiento
Movimiento Revolucionario Frente Nacionalista Patria Nueva
Nacional Socialista Nacional Patria y Libertad Sociedad
Sindicalista
Tradicionalismo + + +
Principio de
+ +
autoridad
Disciplina y
+ + +
responsabilidad
Jerarquía y Subor-
+ + +
dinación individual
Principio de ley y
+ +
orden
Rigor sancionador + +
Justificación de la
+ + +
lucha violenta
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el movimiento lógico y el discurso explica- las partes, incluir a todos los elementos so-
tivo de una extrema derecha que naturali- ciales y definir las funciones sociales que
za y consagra la expresión de lo propio, la integran el conjunto de la vida colectiva.
autenticidad identitaria y la autorreferencia Bajo la premisa identitaria de tratarse de
de toda pertenencia comunitaria e identi- un movimiento concerniente al conjunto
dad cultural, al mismo tiempo que excluye nacional, los nacionalsocialistas chilenos
la intromisión externa, el influjo foráneo y comprometían autorreferencialmente con-
las ideas extranjeras. Como premisa, la tau- sagrarse como chilenos en nombre de Chile
tología de la identidad implica toda esa lógi- para la grandeza de Chile. De modo análo-
ca identitaria de conjuntos que Castoriadis go, el Movimiento Revolucionario Nacional
(1989, pp. 22-34) caracterizó como la deter- Sindicalista caracteriza la cultura en térmi-
minación exhaustiva de relaciones entre los nos identitarios, como “la expresión de la
distintos elementos de un conjunto defini- autenticidad de un pueblo en el enfrenta-
do; de esa manera, cada elemento y cada miento consigo mismo, la sociedad, la his-
individuo pueden ser adscritos e identifi- toria y el universo todo” (1969, proposición
cados como contenidos de algún conjunto, 6). Además, la doctrina nacionalsindicalista
y, bajo esta lógica identitaria conjuntista, se concibe la revolución como un reencuentro
esbozaría un sistema social completo, com- con los valores propios y una consumación
puesto como una jerarquía estáticamente de la comunidad nacional de los chilenos, y
articulada de conjuntos o subsistemas. El promueve un Estado de Comunidad Nacio-
discurso de la pertenencia comunitaria y nal en que las distintas funciones sociales se
el léxico organicista de los cuerpos sociales asocian a organismos definidos y cuerpos
expresan nítidamente esa lógica identitaria sociales acotados, de modo que las activida-
conjuntista en los textos de la extrema dere- des humanas se organizan como funciones
cha chilena. del conjunto de la nación y de la conviven-
cia de las comunidades. El Frente Patria y
En la extrema derecha chilena existen dis-
Libertad lleva la premisa identitaria hasta el
tintas modulaciones de la premisa tautoló-
paroxismo, en la medida en que considera
gica de la identidad y de su lógica identi-
que Chile, como cualquier otro país, tiene
taria conjuntista, según el modo en que se
que inspirarse en su propia realidad y re-
especifican las relaciones que definen las
chazar la injerencia externa o la influencia
pertenencias de conjunto: la autoexpresión
foránea. Desde ese punto de vista, el nacio-
genuina de lo propio, la autorreferencia
nalismo sería una ideología propia de cada
inmanente del conjunto e, incluso, la co-
país que afirma su peculiaridad identitaria,
pertenencia de medios y fines, o bien de
se inspira en el amor a la patria y en las pro-
problemas y soluciones. En el Movimien-
pias tradiciones, y trata de dar una respues-
to Nacional Socialista Chileno de los años
ta nacional a los problemas nacionales. El
treinta, ya se hallaba presente la premi-
nacionalismo que defiende el Frente Patria
sa identitaria y la lógica conjuntista, en la
y Libertad sería un desarrollo de la tautolo-
medida en que el nacismo se definía como
gía identitaria en forma de ideología prácti-
un movimiento nacional capaz de activar
ca: “una respuesta chilena a los problemas
el orgullo de pertenencia racial, armonizar
chilenos” (1971, p. 9). Pero, para consumar
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esa autorreferencia identitaria, Patria y Li- fuerza una percepción dicotómica de la si-
bertad requiere de una concepción integra- tuación. Puesto que uno de los cuernos del
dora del Estado y de la empresa, así como dilema aparece marcado negativamente, la
de la democracia funcional, de modo que estrategia argumentativa de la dilematiza-
todos los elementos chilenos puedan parti- ción refuerza la conclusión lógica de que la
cipar en el conjunto de la decisión política vía correcta es la propuesta defendida por
y la producción social. Por último, también la parte que argumenta, sin que resulten
el discurso de Patria Nueva Sociedad res- concebibles otras opciones. Por ejemplo, el
ponde a la lógica identitaria y desarrolla la Movimiento Nacional Socialista de los años
premisa tautológica de la identidad, aun- treinta describía una encrucijada fatal en
que su concepción de los conjuntos sociales que estaría comprometido el provenir his-
y de la jerarquía de los sistemas y subsis- tórico de Chile: o bien se seguía el camino
temas alcanza un rango planetario y ecoló- agotado de la democracia liberal, del libe-
gico. En ese sentido, el Socialismo Nacional ralismo económico y político, así como del
de Patria Nueva Sociedad concilia la visión constitucionalismo y el régimen parlamen-
identitaria de las pertenencias, las solida- tario, que nos arrastraría por la pendiente
ridades y las expresiones auténticas de lo de las revueltas, la anarquía y las aventuras
propio, con una visión pluralista, orgánica caudillistas; o bien se apostaba por el cami-
y corporativa de los conjuntos sociales e no escarpado y riguroso en que una nueva
institucionales (esto es, las Comunidades fuerza política regenere la vitalidad de la
de los Pueblos y sus ordenaciones políticas), nación, rescate el orgullo de raza y encauce
ecológicamente incluidos en el sistema de el destino colectivo, como pretendía el Mo-
sistemas de la Naturaleza. En suma, bajo vimiento Nacional Socialista. El dilema es
la premisa tautológica de la identidad, la tan aparente como obvia es la conclusión in-
extrema derecha chilena desarrolla impla- ducida: la vía correcta es la del extremo na-
cablemente las implicaciones lógicas de la cionalsocialista. En el Movimiento Revolu-
relación de pertenencia, de la expresión cionario Nacional Sindicalista, encontramos
de lo propio y de la inclusión de las partes, algunos ejercicios semejantes de dilemati-
como si existiera una distribución fija de los zación: se nos hace elegir entre el reformis-
elementos en relaciones determinadas y en mo que solo reajusta el aparataje del Esta-
conjuntos definidos. do, reducido a la fórmula de la democracia
liberal, de manera instrumental a la domi-
En la arquitectura lógica de los discursos de
nación plutocrática, y, por otra parte, el ser
la extrema derecha chilena, cabe reconocer
revolucionario, que pretende conquistar el
cierta estrategia argumentativa de pola-
poder y crear una nueva forma de vida, sus-
rización tajante de las opciones y división
tentada en la trascendencia, la jerarquía y la
excluyente de los términos, que podríamos
plena realización de lo humano. El Frente
designar como dilematización. Al presen-
Patria y Libertad utilizó profusamente los
tar la situación social e histórica como una
dilemas aparentes para forzar cierta repre-
encrucijada de caminos divergentes, se in-
sentación de la situación política entre los
viste como un dilema lógico cierta codifica-
años sesenta y comienzos de los setenta.
ción ideológica del escenario político, y se
El principal ejercicio de dilematización de
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Patria y Libertad consistió en contraponer principio del tercio excluido. En efecto, las
rígidamente dos vías para modernizar la formaciones de la extrema derecha chilena
vida política y responder a la crisis de la suelen definir su posición como una terce-
democracia liberal: el marxismo, basado ra vía que excluye los polos opuestos del
en una ideología foránea y totalitaria, en espacio político (izquierda y derecha, ca-
la democracia popular y el capitalismo de pitalismo y marxismo, democracia liberal
Estado; o bien el nacionalismo, sustentado y democracia popular, etc.) y, en un gesto
ideológicamente en la propia realidad chile- hiperbólico de superación, las trasciende
na, y promotor de la democracia y empresa en una forma de vida y una organización
integradas. Para Patria y Libertad, el nacio- institucional más lograda y más allá de las
nalismo era “el único camino de quienes as- oposiciones convencionales. Por ejemplo, el
piran a frenar al totalitarismo prosoviético, Nacional Socialismo chileno se autodescri-
superando nuestros problemas y encarando be como un movimiento que no se identi-
resueltamente nuestras debilidades y defec- fica con el tradicional sistema de partidos
tos” (p. 10). Pese a su pretensión de aportar de la democracia liberal ni con el marxismo
una cosmovisión comprehensiva, el discur- internacional; se opone igualmente a la plu-
so de Patria Nueva Sociedad no elude la tocracia asociada al liberalismo económico
representación polarizada de las opciones y al materialismo económico del “comu-
sociales y políticas; incluso las amplifica a nismo moscovita” (p. 21). De ese modo, el
escala planetaria como un dilema cósmico Nacional Socialismo a la chilena prometía
concerniente a la vida misma de la Natura- trascender una situación histórica superada,
leza: por un lado, está el camino del nuevo mediante el enérgico movimiento discipli-
orden mundial, del dominio del mercado nado de una nueva fuerza espiritual. Por
trasnacional capitalista, de la mercantiliza- su parte, el Movimiento Revolucionario
ción global de todas las formas de vida, del Nacional Sindicalista apuesta más explícita-
consumismo, el materialismo productivista mente por la trascendencia revolucionaria
y el nihilismo; por otro lado, aparece la vía creadora de cultura y de valores, más allá
de quienes expresan auténticamente las tra- de la opción entre el régimen demo-liberal
diciones, cultura y estirpe de la Comunidad imperante y su alternativa marxista, en vir-
del Pueblo, y quienes luchan por forjar una tud de un Estilo ético en abierta oposición
nueva Civilización planetaria acorde a la anti-partidista. También el Frente Nacio-
ecología del espíritu y del equilibrio de la nalista Patria y Libertad se presenta como
Naturaleza. En ese sentido, los argumentos una vanguardia en oposición al marxis-
del extremismo de derecha se sirven cons- mo totalitario y a la democracia partidista.
tantemente de la retórica de los extremos y Abiertamente, el Nacionalismo de Patria y
de la estrategia de la dilematización. Libertad se posiciona como una ideología
que no es ni de derechas ni de izquierdas,
Aunque el pensamiento político de la extre-
y se sitúa más allá de la democracia liberal
ma derecha chilena se pliega a la premisa
y la democracia popular; el nacionalismo
identitaria y fuerza la dilematización de
trascendería ambas opciones mediante una
la situación histórico-social, no puede de-
organización de avanzada auténticamente
cirse que su lógica respete exactamente el
democrática y libertaria, que compartiría
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La retórica de lo extremo en la ultraderecha chilena
con la izquierda la identificación con los ex- del realismo, la dureza, el pesimismo e, in-
plotados y recogería de la derecha el princi- cluso, el cinismo en la naturalización de lo
pio de la ley y el orden. Por último, Patria dado y, por otra parte, de cierto espiritua-
Nueva Sociedad participa de esta retórica lismo grandilocuente y fe indefinida en la
de la superación, al presentarse como una trascendencia. En ese sentido, la retórica de
cosmovisión más allá del marxismo y del lo extremo de la ultraderecha chilena no es
capitalismo, más allá del igualitarismo libe- sino el despliegue de las propias tensiones
ral y del colectivismo marxista, más allá del lógicas sin resolver derivadas de su marco
estatismo marxista y el “enanismo estatal” naturalista, sus tautologías identitarias, sus
(2003, concepto 35) capitalista y, en defini- dilemas aparentes y sus envites de seudo-
tiva, más allá de la izquierda y la derecha trascendencia total.
políticas tradicionales. La puja por rebasar
las posiciones políticas superadas lleva a Conclusión: la
Patria Nueva Sociedad a apostar por una ultraderecha en el poder
forma de trascendencia que, más que solo
política o económica, alcanza dimensiones Como parte de la labor de desconexión de
planetarias y ecológicas, pues se trata de la derecha chilena tradicional con respecto a
las “leyes trascendentes del Espíritu, de la los movimientos de ultraderecha, tampoco
Vida y de la Naturaleza” (concepto 110) que se suelen reconocer los vínculos ideológicos
debieran inspirar una Civilización superior. que atan a la Dictadura Militar con el pen-
samiento de la extrema derecha. Aunque
En suma, la arquitectura lógica del pensa-
algunos observadores contemporáneos no
miento de la extrema derecha chilena des-
dudaron en asociar a la derecha golpista
pliega tensiones argumentativas que pare-
y al régimen militar con una forma de fas-
cen seguirse consecuentemente del rigor de
cismo (Carmona, 1973; Ramírez Necochea,
sus premisas identitarias, de sus dilemas
1978), se ha vuelto frecuente la designación
excluyentes, de sus pretensiones de trascen-
de la dictadura militar como un tipo de Es-
dencia absoluta y, en el fondo, de toda la re-
tado burocrático autoritario, básicamente
tórica de lo extremo que se esboza en su dis-
caracterizado como una institucionalidad
curso. Estas tensiones se agudizan cuando
comandada por la Fuerzas Armadas y las
la premisa tautológica de la identidad de lo
grandes empresas. Se trataría de un tipo de
propio, la dilematización forzada de las op-
aparato estatal al servicio de la alta burgue-
ciones políticas y la seudotrascendencia de
sía trasnacionalizada, abocado a implantar
todas las oposiciones tradicionales se sitúan
represivamente el orden social, subordinar
sobre el trasfondo de todo un marco figu-
y excluir a los sectores populares, suprimir
rativo naturalista y organicista, que cosifica
la participación democrática y la represen-
la praxis social y las realizaciones institu-
tación popular, despolitizar los problemas
cionales humanas. De esta particular lógica
sociales bajo la apariencia de una raciona-
de la ultraderecha chilena, cabría sostener
lidad técnica, normalizar la economía y ga-
que —como Simone de Beauvoir afirmaba
rantizar la acumulación capitalista (O’Don-
del pensamiento político de la derecha, en
nell, 1982, pp. 60-62). Sin embargo, a pesar
general— induce una síntesis no dialéctica
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La retórica de lo extremo en la ultraderecha chilena
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