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FEDERACIÓN CONCILIO GENERAL DE LAS

ASAMBLEAS DE DIOS DE VENEZUELA


Inscrita por ante la Oficina del Primer Circuito del Registro del Municipio Libertador, Distrito Federal, bajo el Numero
58, Folio 122, Protocolo Primero, Tomo 8, de fecha 22 de Noviembre de 1955. Rif J-00171452-9

DE INTERÉS A LA OPINIÓN PÚBLICA

Se dilucida en este documento, la entrevista en el programa DOSSIER, de fecha 30


de julio de 2019, así como el pronunciamiento, en virtud de las fuertes y delicadas
aseveraciones, del invitado especial, General Roberto González Cárdenas.

Punto Previo

En Venezuela, reconstruir la historia de las religiones, porque son varias, y con


diferencias notables, exige subrayar, de entrada, cuatro períodos significativos que
evidencian el desarrollo de la Iglesia Cristiana Evangélica en Venezuela, a saber: 1)
Un período precolombino, donde las religiones eran tantas como las diversas
culturas indígenas presentes, que integraron Venezuela. 2) Un período colonial,
marcado religiosamente por el monopolio, intentado y crecientemente ejercido con
el apoyo de autoridades españolas, por la Iglesia Católica. Este período, desde 1498
a 1821, está definido, desde el punto de vista religioso, por la implantación y
consolidación del catolicismo como religión única y exclusiva. Es en este contexto,
que surgen datos históricos que se remontan al siglo XVI, cuando el obispo católico
de coro, protesto contra los Welser, y demás protestantes; Incluso, en el año 1824, se
da la invitación de Simón Bolívar, a Joseph Lancaster, Cuáquero inglés, y llegaron
misioneros de la Sociedad Bíblica Británica, que distribuyeron biblias, y para el año
1826, se estableció una Sociedad Bíblica en Venezuela. Hay que resaltar que para
los años 1891, el protestantismo venezolano, comenzó a adquirir contorno de
religión establecida, varios misioneros y pastores evangélicos de Colombia,
Inglaterra, Irlanda, Estados Unidos y las Antillas, visitaron ocasionalmente a
Venezuela.

3) Un período Republicano, iniciado por la guerra de la independencia. Donde


todavía el catolicismo era la religión oficial, y que toda otra religión debía ser
prohibida y extirpada, por las autoridades de aquella época, sin embargo, el
protestantismo, era una realidad social, la cual se contactaba en la fundación de
diversos concilios protestantes a nivel nacional.

4) Un período contemporáneo, en donde se evidencia de manera indubitable,


un gran auge, en el desarrollo de la iglesia cristiana evangélica, y un fuerte
esparcimiento por todo el territorio nacional, generando un incremento de sus
derechos civiles de manera progresiva y ganando carácter jurídico, ya que al
remontarnos al año 1864, la Asamblea Constituyente, consagra la libertad de culto
en la nueva constitución, rechazando el concordato con la santa sede, que acababa
de firmar el gobierno dictatorial de Páez; luego en el año 1881, una nueva
constitución, consagró la libertad e igualdad religiosa, extendiendo a los cultos no
católicos, el privilegio de ser ejercidos fuera de los templos respectivos. A tal punto
que la constitución de 1961, recoge las pretensiones de la constitución de 1881 y
señala de manera taxativa, que se pueden ejercer los cultos tanto públicos como
privados, no obstante, el constituyente de 1999, fue mucho más amplio al señalar,
que el Estado garantizará la Libertad de religión y de culto, y el derecho que tiene
toda persona de profesar su fe religiosa, y manifestar sus creencias de manera
pública o privada. Y menciona de manera fehaciente la independencia y la
autonomía de las iglesias y confesiones religiosas, sin más limitaciones que las
derivadas de la Constitución y la ley. Es decir, que cualquier limitación debe estar
establecida por la ley.
Pronunciamiento

En virtud de la transmisión del programa Dossier, por el canal VTV, conducido


por el periodista Walter Martínez, el día 30 de julio de 2019, en donde estuvo como
invitado especial, el General de Brigada ROBERTO GONZÁLEZ CÁRDENAS,
quien manifestó durante su entrevista, un conjunto de graves aseveraciones, en
contra de una de las instituciones más prestigiosas y serias del país, como lo es el
Pueblo Evangélico Venezolano, constituido por las diferentes Iglesias Cristianas
Evangélicas, quienes actúan debidamente conforme a la legislación venezolana, a
través de los Órganos competentes del Estado. Es necesario señalar, que dichas
declaraciones ocasionaron en el seno del pueblo cristiano, un rotundo rechazo, por
considerar que estas imputaciones infundadas, de una u otra forma, soslayan y
vulneran el prestigio, que esta institución ha ganado durante muchos años, en el
campo social.

Razón por la cual, consideramos útil, necesario y pertinente pronunciarnos, ante la


supuesta amenaza, que representan las iglesias evangélicas, como religión en
Venezuela. El general comenta en la entrevista, que este tema, fue tratado en otras
instancias, específicamente, en sus palabras textuales “en el Ministerio de Industrias
Intermedias”, en el cual manifestó, que él mismo había sido presentado, a manera de
conferencia, y luego discutido por “más de tres horas”, asunto que llama la atención,
puesto que el general invita, según sus palabras textuales “al Ministerio de Justicia y
Paz, la Dirección de Culto…, al Ministerio de la Juventud…, al Ministerio de la
Defensa…, etcétera, etcétera, etcétera”, dando a entender, con esta última expresión,
que se extiende a cualquier otro organismo gubernamental, a realizar una
investigación, a las diferentes organizaciones evangélicas que hacen vida en todo el
territorio nacional, considerándolas una seria amenaza para Venezuela.
Son estas las razones, que nos motivan a descifrar de manera detallada, cada uno de
los señalamientos, que fueron objeto en la entrevista antes mencionada.

1) Acusaciones generalizadas del trabajo de las Misiones Evangélicas.

Las palabras del general socavan la labor que realizan los diversos movimientos
misioneros, que han hecho vida durante muchos años, en las diferentes comunidades
indígenas existentes en nuestro país, Por otro lado, son inaceptables, las palabras
denigrantes, al generalizar calificando de “carátulas de misioneros”, a cristianos
evangélicos, que hacen labor social y evangelística, en lugares recónditos del
territorio nacional, despojándose de manera voluntaria de su estilo de vida,
acudiendo para ayudar física, social y espiritualmente, a las diferentes comunidades
y etnias. De acuerdo a nuestras convicciones cristianas y propósito de la fe
evangélica, los misioneros, se dedican a enseñar lo establecido en las sagradas
escrituras, y es importante señalar, que el texto bíblico, ha sido traducido a sus
lenguas autóctonas, como aporte lingüístico y cultural, a las diferentes comunidades
étnicas.

La iglesia como ente educadora, ejecuta un servicio público, y está fundamentada en


el respeto a todas las corrientes del pensamiento, con la finalidad de desarrollar el
potencial creativo de cada ser humano y el pleno ejercicio de su personalidad, en
una sociedad basada en la valorización ética, consiente y solidaria, en los procesos
de transformación social, consustanciada con los valores y principios consagrados en
la novísima constitución, la cual ignora el entrevistado, que el constituyente recalca,
además, como parte de los derechos de los pueblos indígenas, la educación propia y
un régimen educativo de carácter intercultural y bilingüe. Además, se acusa a la
iglesia de cambios de las tradiciones étnicas, el cual se contrapone, al espíritu de los
misioneros que llegaron con la única intención de Predicar la Palabra de Dios,
considerando que “las sociedades son dinámicas y se encuentran en constantes
cambios con el fin de ajustarse a sus nuevas necesidades sociales”, esto de acuerdo
al autor Samuel P. Huntington en su obra literaria “Choque de Civilizaciones”

El entrevistado, en tales aseveraciones, muestra un total desconocimiento de los


diferentes movimientos cristianos evangélicos que funcionan en el país. Pues
declaró, en sus palabras textuales, “entonces crearon lo que se llama las Iglesias,
Sectas religiosas…”, dando a entender que las iglesias en Venezuela, son derivadas
de la Misión Nuevas Tribus, por cuanto, aseguro además, que estas misiones
“cambian de nombre y se convierten en iglesias protestantes, evangélicas”,
considerándolas también como sectas.

A esto respondemos, en primer lugar, en Venezuela, la presencia de los protestantes


se remonta según lo señalado en el punto previo, desde el siglo XVI.
En segundo lugar, el general manifiesta un desconocimiento cultural, al tratar a las
iglesias evangélicas como sectas, enmarcando este término dentro de su concepto de
una manera simple; una secta, es un grupo minoritario religioso o de otra índole, que
sigue una doctrina o ideología concreta, que se desprende de otro más amplio, y que
por lo general, tiene una connotación mal sana y negativa. La iglesia evangélica en
el mundo, ha sido considerada como una institución religiosa, pues se fundamenta
en creencias, doctrinas y dogmas fundamentados universalmente en la fe en Dios, en
nuestro Señor Jesucristo, en el Espíritu Santo y en la Biblia.

En Venezuela, existen más de 25.000 iglesias evangélicas, que profesan la misma fe


y están amparadas en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en
el artículo 59, al compararnos como sectas, pretende calificarnos como grupos
fascistas, con ideologías dañinas y destructivas, cuando las iglesias evangélicas, han
sumado y seguirán sumando, bienestar a la Sociedad Venezolana.
Es de resaltar, que no somos una secta, como dijo el General González Cárdenas en
la entrevista Dossier, ya que de conformidad con el Artículo 19 del Código Civil
Venezolano, las Iglesias adquieren personalidad Jurídica. Este Artículo establece lo
siguiente:
Son personas jurídicas, y por lo tanto, capaces de obligaciones y derecho:
(…) 2° Las Iglesias de cualquier credo que sean (…).
Además el constituyente de 1999, habla en plural de las iglesias, hecho que se
presenta de manera indubitable, teniendo un reconocimiento constitucional, dándole
autonomía e independencia, de manera tal que el General Roberto González
Cárdenas, emite un error inexcusable, al tratar a las iglesias evangélicas de sectas,
quedando evidenciado que se vulneró las normas ordinarias, como también la norma
suprema, la cual es, la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.

En tercer lugar, señaló, “Eran sectas de corte pentecostal con el apoyo de la


CIA…”
El invitado ignora, a los diferentes movimientos de las iglesias evangélicas, además
de las pentecostales, como bautistas, metodistas, luteranos, presbiterianos, sana
doctrina, entre otras, y es de hacerle saber al general, que la Misión Nuevas Tribus,
no es en específico de la línea pentecostal y cuyo fundador no fue el señor Nelson
Rockefeller, sino, Paul Fleming.

2) Vinculación de la Iglesia Cristiana Evangélica con la CIA.

Negamos rotundamente, que como iglesias tengamos vinculación con la CIA, y con
el Señor Nelson Rockefeller, el cual no fue reconocido bajo ningún concepto, como
líder Evangélico, ni jamás presidió ninguna organización Evangélica en Venezuela,
para tener la potestad de darlas, entregarlas u ofrecerlas al servicio de la CIA.
Es falsa la aseveración y sin ningún fundamento jurídico, histórico y social, que las
iglesias evangélicas estén respaldadas por la CIA, y que reciban recursos de los
Estados Unidos, haciéndose necesario recalcar, que las iglesias cristianas
evangélicas, son instituciones autóctonas, en nuestro país, sus líderes y membresías
mayoritariamente son Venezolanos, que respetan costumbres y modo de vida de la
patria, y que son autosustentables, con aportes voluntarios, y que por su naturaleza,
son instituciones religiosas sin fines de lucro.
Además, el señalamiento dañino e intencional, de acusar a las iglesias, de la cual
plasmó sus logos respectivos en su lámina, expuesta en el programa Dossier, que
sean el brazo derecho de lo que en sus palabras llama “el catolicismo judío
cristiano”. La iglesia evangélica, no se identifica con esta especie de mezcla
religiosas, pues no es católica, ni judía, es seguidora del Evangelio de Cristo, cuyo
objetivo, no se centra en los intereses particulares de gobierno, mucho menos de
gobiernos extranjeros, sino en la predicación del evangelio de Jesucristo.

3) Señalamientos de que la Iglesia Cristiana Evangélica, adoctrina a jóvenes


para el combate.

Rechazamos categóricamente, el señalamiento de formar y realizar adoctrinamiento


de grupos de jóvenes fascistas, Entiéndase por adoctrinamiento; el conjunto de
medidas, prácticas de enseñanzas y adiestramiento, orientadas a inculcar
determinados valores, forma de pensar y comportamientos en los sujetos a quienes
va dirigida, caracterizado por infundir la fe ciega y la ausencia de pensamiento
crítico, además, de la pérdida de la autonomía individual y personal.

Es preciso resaltar, que algunas organizaciones religiosas cristianas evangélicas,


dentro de sus actividades, fomentan la formación de brigadas juveniles, cuyo
objetivo, es consolidar principios y valores, en niños y jóvenes, tales como la
honestidad, respeto, responsabilidad, entre otros, así como la formación de buenos
hábitos y disciplina, manejo del tiempo de ocio, generando actitudes de cooperación,
reciprocidad y servicio en su entorno familiar y en la comunidad. Esto está lejos de
toda intención de adoctrinamiento, para crear o formar grupos neofascistas
evangélicos, en Venezuela, en la cual el General González Cárdenas, pretende
formar una matriz de opinión publica retorcida, de rechazo y repudio a la
extraordinaria labor social, que estas brigadas realizan en la comunidad y sociedad
en general.
4) Acusación de experimento político premeditado de las iglesias
evangélicas.

Por otro lado, negamos la acusación de que las iglesias evangélicas, hayan hecho un
experimento político (una prueba intencional para verificar o comprobar resultados,
de un fenómeno o producto determinado); por cuanto en las pasadas elecciones, fue
candidato presidencial un cristiano evangélico, siendo ya un hecho repetitivo en la
historia venezolana, que otros profesantes de la fe evangélica han sido postulados en
otros procesos electorales. Pues no podemos negar, que la legislación venezolana, y
principalmente la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, establece,
que es un derecho político de todo ciudadano, que reúna los requisitos legales para
postularse a cualquier cargo de elección popular, pueda ser elegido por el pueblo.

Por lo tanto, dichas declaraciones son irrelevante, infundadas y fuera de contexto.

5) En cuanto al alimento Manapack

Todo producto alimenticio, que satisfaga las necesidades de la población


venezolana, debe cumplir con los requisitos legales correspondientes para su debida
distribución, y uno de esos requerimientos es la permisología del Ministerio del
Poder Popular para la Alimentación, previo estudio toxicológico del producto,
asunto que compete exclusivamente a los entes gubernamentales. Este suplemento
alimenticio ingresa al país, cumpliendo con todas las formalidades de ley; en tal
sentido, el entrevistado manifiesta, que es un producto contaminado y adulterado, o
sea, que se trae consigo una intención dolosa, cuestión que refutamos, y va en contra
de nuestros principios bíblicos y de nuestro demostrado proceder cristiano en la
sociedad. Por el contrario, las iglesias evangélicas, se han caracterizado en toda su
historia, por la realización de planes sociales, con el fin de servir a nuestro prójimo,
en libre disposición y voluntad, apegados siempre a los rigores de la Ley.
Conclusiones

Basado en el conocimiento que tenemos de nuestra historia, es verificable, pues


existe numerables documentación, sobre el surgimiento, o nacimiento de los
distintos movimientos misioneros e iglesias evangélicas en Venezuela, y en la tarea
o función que las mismas cumplen en el país, dentro del marco de la Constitución de
la República Bolivariana de Venezuela. Afirmamos que cada uno de los
señalamientos, expuestos por el General González Cárdenas, están fundados en
mentiras, consideraciones personales y acomodamiento particular, en torno a los
sucesos extraídos de su contexto originario, por lo que, no tienen fundamentos
fehacientes de la verdad, los cuales son como castillos de arena, que los vientos
recios de la historia, los desmorona refutándolos a su paso.

En este sentido, destacamos, que es público, notorio y comunicacional, la labor que


hace la iglesia, transformando vidas, fomentando valores y principios familiares, la
cual se ha venido desempeñando en hospitales, comunidades, cárceles, instituciones
educativas, entre otros campos de la sociedad.
El crecimiento de la iglesia cristiana en los últimos años, ha dejado a muchos
sociólogos, educadores, psicólogos, perplejos por el acelerado y sostenido de
alcance dicha institución, y prueba de ello lo podemos constatar que en la Dirección
de Justicia y Culto, se encuentran registradas, es decir, que tienen el visto bueno por
las autoridades competentes más de VEINTICINCO MIL NOVECIENTAS
VEINTICINCO (25.925) iglesias debidamente legalizadas y DIEZ MIL (10.000)
que funcionan de hecho, y no de derecho, lo que hace presumir que en la actualidad
existen entre 4 a 7 millones de Cristianos aproximadamente en todo el territorio
nacional, y cuyo sentir colectivo es satisfacer las necesidades sociales, emocionales
y espirituales de las comunidades, instituciones educativas, hospitalarias,
penitenciarias, que el Estado deja desatendidas, entre estas labores que ejerce la
iglesia Cristiana, se encuentran, el dar calor humano, alimentación, consejería,
asistencia médica, enseñanza, entre otros aportes que de manera voluntaria los
miembros realizan.

Todas estas aseveraciones planteadas por el General Cárdenas, en donde señaló de


manera contundente, imputaciones que de una u otra forma, afecta a la población
evangélica, pudiera dar lugar, a ejercer las acciones legales pertinentes.

En Caracas, a los 05 días del mes de Agosto de 2019.

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