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Acta Otorrinolaringol Esp 2001; 52: 193-198

INVESTIGACIÓN CLÍNICA APLICADA

TRATAMIENTO DEL VÉRTIGO POSICIONAL PAROXÍSTICO


BENIGNO MEDIANTE LA MANIOBRA DE REPOSICIÓN DE
PARTÍCULAS DE EPLEY. NUESTRA EXPERIENCIA
P. PÉREZ VÁZQUEZ*/**, C. MANRIQUE ESTRADA*, C. MUÑOZ PINTO*, L. BARAGAÑO RÍO*,
M. J. BERNARDO CORTE*, C. SUÁREZ NIETO*
*SERVICIO DE ORL. HOSPITAL CENTRAL DE ASTURIAS. OVIEDO. **SERVICIO DE ORL.
HOSPITAL CARMEN Y SEVERO OCHOA. CANGAS DEL NARCEA. ASTURIAS.

RESUMEN

E
l vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB) es una que se trató mediante la maniobra de Epley. Se consiguieron
de las patologías vestibulares más frecuentes. El desa- unos resultados satisfactorios en el 97% de los pacientes, con
rrollo de las terapias de reposición de partículas ha su- muy buena tolerancia al tratamiento, lo que permite considerar a
puesto un gran avance terapéutico en esta patología. Presenta- esta maniobra terapéutica como altamente efectiva en el manejo
mos una serie de 37 pacientes diagnosticados de VPPB a los de esta entidad.

PALABRAS CLAVE: Vértigo posicional paroxístico benigno. Cupulolitiasis. Canalitiasis. Maniobra de reposición de
partículas. Maniobra de Epley.

ABSTRACT
TREATING BENIGN PAROXYSMAL POSITIONAL VERTIGO WITH THE CANALITH REPOSITIONING
MANEUVER OF EPLEY. OUR EXPERIENCE

B
enign Paroxysmal Positional Vertigo (BPPV) is one of the BPPV treated with the particle repositioning maneuver of Epley. 97%
most common peripheral vestibular disorders. Particle repo- of patients improved and the maneuver was well tolerated. We con-
sitioning maneuvers are simple and effective treatments for clude that Epley Maneuver is safe and effective in the treatment of
patients with BPPV. This study included 37 consecutive cases of BPPV.
KEY WORDS: Benign Paroxysmal Positional Vertigo. Cupulolithiasis. Canalithiasis. Canalith Repositioning.
Maneuver of Epley.

Correspondencia: Paz Pérez Vázquez. C/ Arquitecto Reguera, 3, 6.º A. 33004 Oviedo. E-mail: pperezv@medynet.com.
Fecha de recepción: 15-6-2000

193
P. PÉREZ VÁZQUEZ ET AL. MANIOBRA DE EPLEY EN EL VPPB

INTRODUCCIÓN Globalmente consideradas, estas maniobras denomi-


nadas liberadoras o de reposición de partículas, consi-
El vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB) es guen la desaparición de los síntomas en un 50-80% y la
una de las patologías vestibulares más frecuentes, si mejoría de los mismos en un 20-40% (curación o mejo-
bien debido a su alta tasa de remisiones espontáneas1, ría en un 90-95 % de los pacientes)4,14-18, habiendo cons-
es muy difícil de estimar su incidencia real. Se dan cifras tituido una revolución en el tratamiento de esta entidad
aproximadas de 64 casos/100.000 hab/año2 o de un 10 por su sencillez y eficacia.
a 17% de la patología vestibular3,4.
Esta entidad clínica se caracteriza por episodios bre-
ves y paroxísticos de vértigo rotatorio que ocurren cuan- PACIENTES Y METODOLOGÍA
do la posición de la cabeza del paciente se altera con
respecto a la gravedad, típicamente con la extensión de Se presenta un estudio retrospectivo de los VPPB
la cabeza estando el oído afecto hacia abajo1. tratados en nuestro servicio entre enero de 1996 y mayo
Inicialmente descrito por Barany en 1921, el VPPB de 1999. En total se incluyeron 37 pacientes, a los que
fue después caracterizado por Dix y Hallpike en 19525, se les realizó un estudio nistagmográfico (electro o video-
que describieron la maniobra de provocación que lleva nistagmográfico) completo.
sus nombres. Esta prueba de Dix-Hallpike pone de ma- Se diagnosticaron como VPPB aquellos pacientes
nifiesto un nistagmus típico, caracterizado por ser predo- que tenían los hallazgos clásicos en la prueba de Dix-
minantemente rotatorio, con la fase rápida dirigida hacia Hallpike: vértigo con el nistagmus típico, es decir, con la-
el oído más declive, por presentar latencia, duración limi- tencia, paroxístico, disconjugado mixto torsional-vertical
tada, invertirse al volver a la posición de partida y tener geotrópico, de duración no superior a los 40 segundos y
fatigabilidad al repetir la maniobra 5. Los mismos Dix y con inversión en la incorporación. Se excluyeron los pa-
Hallpike ubicaron el origen de este padecimiento en el cientes con nistagmus mantenidos o atípicos en cual-
conducto semicircular posterior (CSP), si bien es posible quier otro aspecto.
que también ocurra en el conducto semicircular horizon- Los pacientes eran sometidos a tratamiento de reposi-
tal (CSH)1,6-8 e incluso en el superior (CSS)1,8-10. ción de partículas según la maniobra de Epley clásica, rea-
Existen dos teorías fisiopatológicas diferentes para lizada de la siguiente manera: 1. Se lleva al paciente a la
explicar las características del VPPB. La primera de posición de Hallpike hacia el lado del oído sintomático. 2.
ellas es debida a Schuknecht11, que encontró depósitos Giro de la cabeza 90 grados hacia el lado contrario. 3. De-
basofílicos en la cúpula del CSP de pacientes afectos de cúbito lateral sobre el hombro contralateral, con la cabeza
VPPB; es la teoría de la cupulolitiasis que propone que en posición prona (unos 180 grados desde la posición ori-
fragmentos, posiblemente procedentes de la degenera- ginal). 4. Paso del paciente a la posición sentada, con la
ción de otoconias utriculares, se depositarían sobre la cabeza aún girada. Los movimientos se realizaban de for-
cúpula del CSP, haciéndola sensible a la gravedad1,11. ma lenta y progresiva. La duración de cada posición se es-
La segunda hipótesis es la de la llamada canalitiasis, tablecía por la duración del nistagmus asociado a cada
según la cual las partículas reseñadas no se depositarían una de ellas y, de no ponerse éste de manifiesto, por la
sobre la cúpula, sino que estarían flotando en la endolinfa suma de la latencia y la duración del nistagmus apreciados
del CSP. Con los movimientos de la cabeza estas partícu- en la prueba de Hallpike inicial. No se utilizó vibrador en
las se desplazarían por efecto de la gravedad, creando ningún caso. No se empleó ningún tipo de premedicación.
con ello una corriente endolinfática responsable de la esti- La maniobra se realizaba una única vez, no repitién-
mulación del CSP y, por ende, de los síntomas1,12. dose a continuación la prueba de Hallpike. Se les reco-
Actualmente se considera que la mayoría de los ca- mendaba no adoptar la posición de decúbito (dormir se-
sos de VPPB son debidos a una canalitiasis, teoría que, misentados) y evitar movimientos bruscos, amplios y
por su parte, explica mucho mejor que la cupulolitiasis rápidos del cuello en las siguientes 48 horas a la realiza-
las características fisiopatológicas del VPPB1. ción de la maniobra, pero no se les ponía ningún dispo-
Fundamentándose en estas teorías se diseñaron las sitivo de inmovilización cervical; se recomendaba así
dos maniobras terapéuticas más comúnmente utilizadas mismo no dormir sobre el lado afecto durante una sema-
para el tratamiento de esta entidad clínica. La maniobra na. Los pacientes eran revisados entre 7 y 10 días des-
descrita por Semont y Tupet13, basada en la teoría de la pués de realizarse el tratamiento. Se repetía entonces la
cupulolitiasis, tendría como finalidad despegar de la cú- prueba de Hallpike, aún estando el paciente asintomáti-
pula las partículas a ella adheridas y dirigirlas hacia el co. Si ésta era positiva, se repetía de nuevo la maniobra
vestíbulo. Por su parte, apoyándose en la teoría de la ca- liberadora y se procedía de igual forma.
nalitiasis, Epley14 diseñó la maniobra que lleva su nom- En un único paciente se realizó la maniobra descrita
bre, con la finalidad de desplazar las partículas a lo largo por Semont por fallo de la maniobra de Epley en tres
del CSP hacia la crus común y finalmente al vestíbulo. ocasiones.

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Desde el punto de vista objetivo se valoraba a los


pacientes de acuerdo con la prueba de Hallpike, como
positiva o negativa. Desde el punto de vista subjetivo, se 15

Número de casos
11 12
establecieron tres categorías: Asintomático (el paciente 8
10
refiere estar absolutamente libre de todos los síntomas); 6
5
Mejor (el paciente refiere tener menos síntomas, realizar
una vida normal, pero aún tener alguna manifestación de 0
Menos de 3 meses- 1-3 años Más de 3
vértigo/mareo no posicional o con ciertos cambios de po- 3 meses 1 año años
sición); Igual (el paciente refiere no haber notado ningún
Tiempo de evolución
cambio en su sintomatología).
Una vez negativizada la prueba de Hallpike, los pa-
cientes se revisaban trimestralmente. El período mínimo
Figura 1. Distribución de los pacientes según el tiempo de
de seguimiento exigido para formar parte de la serie fue evolución de los síntomas.
de 6 meses.

tes (8%) tres maniobras. Uno de estos tres pacientes


RESULTADOS permanecía sintomático y con prueba de Hallpike positi-
va después de practicadas tres maniobras, por lo que se
En total fueron aptos para el estudio 37 pacientes, decidió realizar una maniobra de Semont, con lo que se
17 varones y 20 mujeres, con edades comprendidas en- negativizó la prueba y desapareció la sintomatología.
tre los 15 y los 86 años (media 52, desviación típica 15), Una segunda paciente no acudió a su cita tras la tercera
no existiendo diferencias en la distribución de edades maniobra; vista de nuevo en la consulta por otro motivo
entre los dos sexos. no otológico, refería una desaparición espontánea de los
No hubo ningún caso de enfermedad bilateral y la síntomas a los dos meses de realizarse el tratamiento,
distribución por lados fue 23 oídos derechos y 14 oídos pero no inmediata al mismo; permanece asintomática.
izquierdos. Creemos importante reseñar que estos dos pacientes
Desde el punto de vista de la etiología, 19 casos comentados, rebeldes a la maniobra de Epley, eran de
(52%) fueron idiopáticos, y se encontraron antecedentes etiología postraumática.
de traumatismo craneoencefálico en 5 pacientes (13%), La tolerancia de los pacientes a la maniobra fue muy
de neuritis vestibular en 5 pacientes (13%), de enferme- buena en todos los casos, no presentándose en ninguno
dad de Meniere en otros 5 pacientes (13%), de cirugía de ellos síntomas de disconfort vestibular tras la realiza-
no otológica bajo anestesia general en 2 pacientes (5%) ción de la misma. No fue preciso utilizar medicación se-
y en uno (3%) coexistía el diagnóstico de insuficiencia dante vestibular tras el tratamiento en ningún paciente.
vértebrobasilar. En dos casos se constató el antecedente Mientras la prueba de Hallpike persistía positiva, los
de otitis crónica no colesteatomatosa, sin presentar la pacientes mantenían los mismos síntomas, en algunos
aparición de los síntomas de VPPB ninguna relación casos atenuados. Tras negativizarse la prueba, 26 pa-
temporal con cambios en su patología otológica y un ter- cientes referían estar completamente asintomáticos
cer paciente había sido sometido a una estapedectomía (72%), 9 pacientes haber mejorado (25%) y sólo 1 pa-
10 años antes, con un control correcto desde entonces ciente relataba estar igual que antes de realizar la ma-
de su otosclerosis; dada la ausencia de datos que pudie- niobra (3%). Como se comentó previamente, en el caso
ran sugerir una causalidad, estos pacientes se incluye- de una paciente la resolución de sus síntomas no podía
ron en el grupo idiopático. ser atribuida al tratamiento, por lo que se excluyó de es-
El tiempo de evolución de los síntomas fue muy va- te cómputo. Si se considera como criterio exclusivo de
riable, desde 3 días hasta un paciente que refería pre- curación la negativización de la prueba de Hallpike atri-
sentar la clínica desde hacía 30 años. La media de la buible a la maniobra de reposición de partículas, esto
serie era de 30 meses con una desviación típica de 64 ocurrió en un 97% de los casos (36 pacientes).
meses y un coeficiente de variación del 122%, por lo La tasa de recidivas fue de un 14% (5 pacientes). El
que creemos más clarificador reseñar los tiempos de tiempo de aparición de la recidiva varió entre 2 y 7 me-
evolución en los siguientes grupos: menos de 3 meses, ses (media 4 meses; desviación típica 2 meses; coefi-
11 pacientes (30%); de tres meses a un año, 12 pacien- ciente de variación 50%). En una de las pacientes se
tes (33%); de uno a tres años, 6 pacientes (16%); más presentó una segunda recidiva a los 17 meses de la pri-
de tres años, 8 pacientes (22%) (figura 1). mera. Todos los casos de recidiva se controlaron con
En 24 pacientes fue presciso realizar una sola ma- una única maniobra de Epley, estando asintomáticos y
niobra (65%) para que la prueba de Hallpike se negativi- con prueba de Hallpike negativa después de ello. La
zara, en 10 pacientes (27%) 2 maniobras y en 3 pacien- etiología de los pacientes que sufrieron recidiva fue idio-

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pática en tres pacientes (60%), traumática en uno y do negativas en todos los casos. Del mismo modo, en
postneuritis vestibular en el paciente restante (20% en caso de persistir síntomas se realizaba la maniobra de
cada uno de ellos). Hallpike contralateral, en un intento de descartar que se
El seguimiento medio de los pacientes de la serie ha hubiera producido un paso de las partículas al CSS. No
sido de 18 meses, con un mínimo de 6 y un máximo de se dio en ningún caso esta situación, cuya frecuencia es
46 meses (desviación típica 9,5 meses). aún menor que la correspondiente al CSH.
El 97% de los pacientes referían una mejoría total o
importante de los síntomas. Sólo hubo 1 paciente que
DISCUSIÓN no notó ningún cambio en su sintomatología, pese a ha-
berse negativizado la prueba de Hallpike. No tenemos
En estudios comparativos utilizando las maniobras una explicación concreta para esta situación. Es posible
de Epley y de Semont15,17, la reversibilidad de los sínto- que exista algún otro problema asociado que sea el res-
mas es igual con ambas. Nosotros utilizamos como tera- ponsable real de los síntomas de este paciente, si bien
pia de partida la maniobra de Epley por considerarla de debe constatarse que las exploraciones clínica y vestibu-
realización más sencilla, pudiéndose llevar a cabo inclu- lar instrumental (ENG) del mismo no mostraban ninguna
so de forma casi pasiva en pacientes de edad avanzada alteración. Se trataba de un paciente diagnosticado ade-
y con limitaciones de movilidad. Debe reseñarse que no más de artropatía cervical, sometido a varios tratamien-
tuvimos ningún caso en el que las condiciones físicas tos rehabilitadores sin mejoría, por lo que puede que los
del paciente, referidas fundamentalmente a problemas síntomas atribuibles a esta segunda entidad se entre-
de movilidad cervical, contraindicaran el tratamiento. En mezclaran con los correspondientes al VPPB, siendo di-
ningún caso hubo mala tolerancia a la maniobra ni se fíciles de separar para el propio paciente. Como dato co-
desencadenó problema vertebrobasilar alguno, ni siquie- lateral, el referido paciente estaba, y aún continúa, en
ra en los pacientes de mayor edad, lo que nos refuerza trámites legales para su jubilación.
en la idea de que la maniobra de Epley es el tratamiento Dentro del grupo de pacientes asintomáticos inclui-
inicial de elección. mos únicamente aquellos que claramente expresaban de
Nuestra experiencia con la maniobra de Semont se forma espontánea que ya no tenían ningún síntoma y re-
limita a un solo caso, tratándose de un paciente joven lataban poder llevar a cabo una vida completamente nor-
sin ninguna limitación de movilidad. No obstante, nuestra mal, realizando todo tipo de movimientos y de cambios
impresión es que no se puede realizar de forma pasiva y posturales. El resto de los pacientes se incluyeron en el
que probablemente en pacientes mayores no se podría grupo de mejoría. En este sentido creemos importante
llevar a cabo con tanta facilidad como la maniobra de reseñar que muchos pacientes desarrollan miedo (y en
Epley, y que por tanto se realizaría de forma inadecua- ocasiones auténtico pánico) a realizar los movimientos
da, lo que alteraría los resultados de la misma. desencadenantes de su sintomatología y que a pesar de
Se ha descrito que las maniobras de reposición de que insistimos en que hagan una vida normal y com-
partículas tienen como complicación, aunque con escasa prueben realmente que los síntomas han desaparecido,
frecuencia (2%), la transformación de un VPPB del CSP muchos de ellos confiesan ser incapaces de intentarlo,
en un VPPB del CSH1. En nuestros pacientes no hemos manteniendo una conducta de evitación persistente, que
constatado ningún hecho de estas características. Quizá impide una correcta evaluación evolutiva.
sea debido a que se trata de una serie relativamente pe- Esta distribución de los resultados (72% asintomáti-
queña. En todos los casos en que el paciente no refería cos, 25% mejor) es en todo similar a la presente en
estar completamente asintomático y la prueba de Hallpi- otras series4,14-18. Hemos apreciado que en los casos se-
ke era negativa, realizábamos las maniobras posiciona- cundarios (trauma, neuritis vestibular, Meniere, cirugía)
les de diagnóstico para detectar esta complicación, sien- es más frecuente encontrar pacientes del grupo asinto-

Tabla 1: Distribución de los resultados del tratamiento según la etiología.


Entre paréntesis, número de casos

Idiopático Traumático Meniere Neuritis Cirugía


Asintomático 60% (12) 80% (4) 80% (4) 100% (5) 100% (2)
Mejor 37% (7)0 20% (1) 20% (1) 0 0
Igual 5% (1) 0 0 0 0

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to de control. En segundo lugar porque pensamos que al


realizar la prueba puede provocarse el que algunas de
las partículas impulsadas hacia el utrículo retornen de
nuevo al CSP (figura 2). Esto podría constituir una expli-
cación al número superior de maniobras necesarias para
negativizar la prueba de Hallpike en los casos en que
ésta se realiza de forma inmediata a la terapia de repo-
sición.
La distribución de etiologías en nuestra serie no fue
esencialmente diferente de la referida en la literatura1-4.
Llama la atención la frecuencia con que este padeci-
miento puede verse asociado a la evolución de la enfer-
Posición final de la maniobra de Epley Posición inicial de la maniobra de Epley medad de Meniere. Quizá sea debido a la liberación de
fragmentos otoconiales como resultado de las disrupcio-
Figura 2. Representación esquemática de la situación de los
nes laberínticas que se producen durante las crisis. No
canalitos en el laberinto en la posición final de la maniobra de
Epley y en la posición de Dix-Hallpike (vista posterior, laberinto tuvimos ningún caso en el que el diagnóstico de VPPB
izquierdo). Se pretende mostrar la posibilidad de que aquellos precediera al diagnóstico de enfermedad de Meniere.
vuelvan a la crus común al repetir la exploración inmediatamente Tampoco hubo ningún caso en el que el tratamiento libe-
después de la maniobra terapéutica.
rador desencadenara un empeoramiento del curso de la
enfermedad o el inicio de una crisis.
Se estima que la tasa de recidiva del VPPB puede
mático que en los casos idiopáticos (tabla 1), si bien el variar entre un 14 y un 30%14,15. En nuestra serie fue de
tamaño de nuestra muestra no permite realizar un análi- un 14%, con un lapso medio de tiempo de aparición de
sis estadístico que pruebe esta impresión. la recidiva de 4 meses. Las recidivas tuvieron lugar en
En ocasiones se ha puesto en duda la efectividad todos los casos en el mismo lado y todos ellos pertene-
real de las maniobras de reposición16,19,20, atribuyéndose cían al grupo de pacientes asintomáticos, lo que nos
la mejoría a una habituación o a una resolución espontá- permite hablar claramente de recidiva. La prueba de
nea. En nuestra serie hemos observado una clara rela- Hallpike se negativizó y la sintomatología desapareció
ción causa-efecto entre la realización de la maniobra y la con una única nueva maniobra en todos los casos.
desaparición de los síntomas y la normalización de la La distribución por etiologías de los pacientes con re-
exploración. Se estima que el tiempo máximo en el que cidivas fue la siguiente: idiopática 60%, traumática 20%
se produce la remisión espontánea es de 2 meses 1,15. y postneuritis vestibular 20%. En estos dos últimos gru-
Dado que el tiempo que transcurre entre la realización pos no existió otro traumatismo ni otro episodio de neuri-
de la maniobra y la revisión del paciente es de 7-10 días tis vestibular previo a la recidiva. Esta distribución de
y que el tiempo de evolución de los síntomas era supe- etiologías no difiere de la general de la serie, por lo que
rior a dos meses en el 81% de los pacientes, resulta po- no podemos hablar de etiologías predisponentes a la re-
co convincente hablar de resolución espontánea casual- cidiva. Llama la atención el que no se produjera ningún
mente asociada a la realización de la maniobra caso de recidiva entre los pacientes afectos de Enferme-
terapéutica. Como se comentó previamente, sólo un ca- dad de Meniere; estos pacientes serían los principales
so de curación de los síntomas era atribuible a una reso- candidatos a ello puesto que el putativo factor etiológico
lución espontánea. continúa existiendo.
El número medio de maniobras necesarias para ne- En la literatura especializada, mayoritariamente nor-
gativizar la exploración fue de 1,5. En las series consul- teamericana, se considera al VPPB como la causa de
tadas4,15-17, el número de maniobras por término medio vértigo más frecuentemente vista en la consulta de
fue de 1,3 a excepción de la serie de Smouha16, en la ORL1-3,10,15. En nuestra serie, la incidencia estimada sería
que la media ascendía a 2,5 maniobras. Este último au- de sólo 7,5 casos/100.000 hab/año. Si tenemos en cuen-
tor, a diferencia de los otros, inmediatamente después ta que esta entidad remite espontáneamente en el 50%
de completar la maniobra de reposición realiza de nuevo de los pacientes en un período de tiempo que no sobre-
la prueba de Hallpike; si es positiva, repite la maniobra pasa los 2 meses1,15 y que en nuestra serie sólo 11 pa-
terapéutica, y así sucesivamente. Nosotros preferimos cientes (30%) tenían un tiempo de evolución de los sín-
no realizar la prueba de Hallpike inmediatamente des- tomas igual o inferior a dos meses, mientas que el grupo
pués del tratamiento por dos motivos: primero, porque la de pacientes con una evolución superior a 12 meses era
negatividad de la prueba puede no ser debida a la reso- del 38%, cabe pensar que una buena parte de los casos
lución del VPPB, sino a la fatigabilidad propia de esta de VPPB tenga una remisión espontánea antes de con-
patología, con lo que tendría poca utilidad como elemen- cluir la ruta a través de los cauces habituales necesarios

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para acceder a la consulta especializada y que única- dos de VPPB que nunca llega a la consulta especializa-
mente estamos tratando una parte de ese 50% de casos da.
que no se curan de forma espontánea. Es un hecho am-
pliamente constatado que muchos de los pacientes
aquejados de VPPB son sometidos a múltiples trata- CONCLUSIONES
mientos médicos y con cierta frecuencia a tratamiento
rehabilitador cervical (en las franjas de edades en las La maniobra de Epley es una terapéutica sencilla y
que se suele dar esta patología no es raro que los pa- efectiva para el tratamiento del VPPB, con una excelente
cientes tengan datos clínicos o radiográficos de artropa- tolerabilidad por parte de los pacientes y con unos resulta-
tía cervical) antes de acceder al otorrinolaringólogo. Si a dos satisfactorios en el 97% de los casos. Un mejor cono-
todo esto añadimos la benignidad y, en general, buena cimiento de este proceso patológico en la esfera de la me-
tolerancia de los síntomas de esta patología, creemos dicina primaria facilitaría que un porcentaje mayor de
que hay un porcentage importante de pacientes aqueja- pacientes pudiera beneficiarse de este avance terapéutico.

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