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Seminario Esepa

Consejería Pastoral II

Consejería en adolescentes

Una perspectiva desde el presente

Docente:

Roger Vargas

Estudiante:

Geovanny Alfaro Vindas

II Cuatrimestre, 2019
Objetivo General:
1. Comprender la etapa de la adolescencia desde el presente como una
herramienta fundamental para la consejería en dicha población.
Objetivos Específicos:
1. Conocer e identificar la etapa de la adolescencia.
2. Mirar la adolescencia como el presente de nuestra sociedad, los retos que
enfrentan.
3. Consejos prácticos para un buen manejo en la consejería.
Introducción
Se estima que aproximadamente a los diez años de edad comienza la etapa de la
adolescencia para los actuales niños y termina a los veintiún años. Una etapa que
pareciera ser un caos, porque la persona está trabajando en buscar una identidad,
un camino para encontrar respuestas y sentido a la vida. Datos de la UNICEF
muestran que se calcula un aproximado de 1200 millones de jóvenes a lo largo y
ancho del mundo que se encuentran en esta etapa.
Más de cuatro quintas partes de la población viven en países de desarrollo,
específicamente zonas urbanas. Están trabajando y realizándose en áreas muy
importantes como la comunicación, los negocios, la cultura, la moda, deportes,
etc. Sin embargo también se están enfrentando a grandes retos que una sociedad
más que moderna les está imponiendo.
Por lo que este trabajo procura mirar a los adolescentes no solo como el
futuro de la sociedad, sino como el presente. Una generación que se enfrenta
probablemente a uno de los retos más grandes en la historia. Que necesita de
padres, mentores y consejeros que comprendan con naturalidad la etapa que
viven, y desde ahí puedan trabajar.
Etapas del desarrollo en adolescentes

La etapa de la adolescencia se puede subdividir en tres etapas importantes. La


adolescencia temprana que abarca de los diez a los catorce años, la media desde
los quince hasta los diecisiete y la tardía desde los dieciocho años hasta los
veintiuno. A continuación se mostrará las diferentes etapas y las áreas de
desarrollo.

Adolescencia temprana (10-14)

Física:
 Aumentan rápidamente su crecimiento en altura y peso
 Aparecen características sexuales y mucha preocupación por estos
cambios.

Cognitiva:
 Tienen procesos de pensamiento más concretos.
 Viven el presente.
 La relación entre la causa-efecto no está bien entendida.

Social:
 Tienen una mayor autoconciencia social más que conciencia social.
 Desafían la autoridad en especial la de sus padres.
 Viven la soledad y presentan cambios de humor.
 Empiezan a presentar argumentos para no acatar las órdenes, para
desobedecer.
 Tienen una intensa amistad con el mismo sexo.
 Y el contacto con sexo opuesto solo se encuentra en grupos.

Espiritual:
 Comienza a formar la base de una cosmovisión.
 Cuestiona la veracidad de la fe.

Identidad:
 Daydreamer, tienen una audiencia imaginaria.
 La metas profesionales cambian frecuentemente.
 Surgen sensaciones sexuales.
 Se enfocan más en sus problemas, “creen que nadie los entiende”, además
descubren que los padres no son perfectos.
 Muestran preocupaciones por ser normales.

Adolescencia media (15-17)

Física:
 Sus características sexuales secundarias son más avanzadas.
 Alcanzan el 95% de la talla de adulto.

Cognitiva:
 Crecen en su pensamiento abstracto.
 Vuelven a los procesos de pensamiento concreto bajo estrés.
 Mejora el entendimiento de la causa-efecto.
 Suelen tomar decisiones muy impulsivas sin tomar en cuenta las
consecuencias.
 Mucha de su ansiedad está relacionada con el rendimiento escolar.

Social:
 Hay conflictos con la familia
 Comportamiento fuerte de la fidelidad por pares.
 Surgen los impulsos sexuales.

Espiritual:
 Ya no depende de la fe de sus padres.
 Busca sus propias respuestas a las preguntas.

Identidad:
 Alterna entre expectativas poco realistas y preocupaciones por el fracaso.
 Surge la pregunta: ¿quién soy?

Adolescencia tardía (18-21)

Física:
 Termina y se nivela su madurez física y su crecimiento reproductivo.

Cognitiva:
 Se logra establecer el pensamiento abstracto.
 Tienen una mayor orientación del futuro.
 Son capaces de entender y perseguir objetivos a largo plazo.
 Son más filosóficos e idealistas.

Social:
 Se relaciona más con individuos que con sus pares.
 Hay un gran énfasis en la justicia.
 Selecciona a la pareja basada en la preferencia individual.

Espiritual:
 Miran y examinan todas las visiones del mundo.
 Prueba las creencias.
 Muchos abandonan su fe.

Identidad:
 Persiguen objetivos vocacionales relacionados con formación y empleo
profesional.
 Se relaciona con la familia como adulto.
 Se establece un sistema de valores éticos y morales.
 Son más capaces de tener relaciones íntimas y complejas.

El crecimiento y los cambios son necesarios aunque a menudo un poco


desordenados. En la adolescencia temprana el pensamiento aun es bastante infantil
y concreto por lo que no pasa su tiempo pensando en su identidad personal. De
manera intuitiva puede preguntarse “¿quién soy?” pero no de manera consciente.
Justo surgen preguntas importantes relacionadas a su fe que necesitan ser
evacuadas. Justo aquí los padres suelen pensar en sus hijos como niños, no les
toman en serio y olvidan sus responsabilidades en temas de gran importancia. Así
que ellos mismos buscan personas que los puedan tomar en serio y desde ahí
responder sus preguntas existenciales.
Esto hace que muchos lleguen a la adolescencia media con mucho más
preguntas por no tener respuestas satisfactorias, además de que están en una
búsqueda más intensa de su identidad y pertenencia. Y para cuando se den cuenta
estarán atravesando el final de la adolescencia, probablemente, mal preparados
para hacer esa “transición” a la vida real.

Dos preguntas importantes

Sin duda la etapa de la adolescencia es una etapa de fuertes y grandes cambios,


una etapa que se caracteriza por traer desesperación en los familiares que conviven
con algún adolescente. Aunque hay una conciencia de esto, sin intentar tapar el sol
con un dedo, sigue siendo solo una de las muchas etapas que atraviesa cada
persona a lo largo de la vida. No existe una sola persona que de manera natural no
atraviese cada uno de estos caminos. Así que el mirar desde una perspectiva del
ahora, del presente, nos debe llevar a analizar la razón por la cual esta etapa es tan
difícil. La razón no necesariamente radica en que estén descubriendo quiénes son,
qué deben hacer, cuál es la verdad, y qué es lo que les depara del futuro. Parte de
esto radica en la falta de compromiso del adulto al no tener paciencia para entender
la etapa natural del adolescente.

¿Quién soy?

Hay una lucha en ellos por comprender realmente esta pregunta. Hacer una relación
entre el “yo real” con el “fuera de mi”, con todo lo que su entorno le rodea. Si hay
diferencia entre el “yo como estudiante”, el “yo como hijo”, el “yo como cristiano” que
asiste a la iglesia. Lena Venditti profesora de teología y experta en desarrollo de
liderazgo comenta: “En realidad, los adolescentes aún no se conocen a sí mismos,
pero anhelan profundamente ser conocidos. Trabajan por formar su identidad, por
mirar cuáles son sus dones, habilidades y talentos.

¿Qué es la verdad?

Juntamente con su intelecto, comienza a desarrollarse todas las preguntas, las


respuestas. No les es suficiente afirmaciones dogmáticas y enseñanzas que han
recibido desde que eran pequeños; hay una necesidad por cuestionar y probar si
cada una de esas enseñanzas son reales. El mundo en el que vivimos contribuye a
generar todas estas preguntas en donde la cosmovisión bíblica no forma parte de
la realidad de una gran porcentaje de adolescentes en el mundo. La sociedad actual
llama a lo malo bueno y a lo bueno malo.

El presente

Los adolescentes aunque formarán parte del futuro, serán los siguientes líderes y
tendrán en sus manos responsabilidades muy grandes, ellos son el presente de la
sociedad. Al igual que la etapa que viven los niños, los adolescentes no son
personas en progreso, no son casi personas. Son personas que atraviesan una
etapa distinta. El no aceptar esta realidad solo convierte a la sociedad en
adultocentrista y es justo lo que el consejero necesita evitar. El consejero o mentor
necesita salir de ese lugar en el que está encasillado con el resto de los adultos que
creen que tienen todas las respuestas a la vida desde su óptica.
El 12 de agosto del 2019, en el Colegio Monterrey en Costa Rica se celebró
una vez más el Día Internacional de la Juventud. Y como parte de las actividades
habituales que se pueden dar en una institución educativa, se abrió un espacio de
diálogo acerca del tema. Sin embargo, en esta ocasión no fue adulto hablando a los
adolescentes del colegio, si no que generaron un excelente espacio para que los
mismos estudiantes pudiesen dar unas palabras a una generación que está
sedienta de nuevas oportunidades y cansadas del menosprecio.
Varios estudiantes estudiantes dieron palabras de aliento a los demás en
temas emocionales y espirituales. Pero el presidente estudiantil del colegio
atinadamente expresó la gran inquietud que se abarca en este tema. ¿Se está
observando a los adolescentes desde una perspectiva del presente? ¿Se está
tratando a los adolescentes con el respeto que se merecen? Y sobre todo, ¿están
los adultos buscando la manera de acompañarlos en el día a día y guiándolos de
manera correcta para que puedan realizarse ahora? ¿Será que están siendo una
buena guía para el futuro?
Tanto los padres y madres de familia, como los consejeros deben conocer a
profundidad las etapas de desarrollo de los adolescentes. Y no solo conocerlas,
deben estudiarlas, deben dedicar tiempo a observarlos con gran detenimiento y
procurar ponerse en sus zapatos como popularmente se dice.

Consejos generales

Invertir en los adolescentes

Kofi Annan, el Secretario General de las Naciones Unidas dijo: “Una sociedad que
se aísla de sus jóvenes, corta sus amarras: está condenada a desangrarse”. Tanto
los padres, como los consejeros y mentores tienen una gran responsabilidad y el
deber de brindarle a los adolescentes los espacios necesarios para que puedan
desarrollar su fuerza, creatividad y su pasión que genera esperanza. Los
adolescentes por naturaleza son soñadores y aun en las situaciones más difíciles
pueden encontrar respuestas de la mano de adultos responsables que les
indiquen el camino correcto.

Darles oportunidades

Muchos de los adolescentes mientras dan tres pasos hacia adelantes, dan dos
hacia atrás. Hay una cultura llena de trampas por lo que es necesario darles
oportunidades para continuar y no estancarse en la desesperación. Es necesario
brindarles una atmósfera que los aliente a permanecer aprendiendo y
descubriendo.

Alimentar su potencial

Alimentar su potencial significa poder tener un acompañamiento con cada uno de


ellos. Cuando los adolescentes tienen lazos coherentes, positivos y emocionales
con adultos responsables, entonces ellos pueden sentirse más seguros y de esta
manera generar una herramienta para enfrentar y resolver los problemas que la
vida pueda generar. Ganarán más confianza y tendrán una autoestima positiva.

Consejos prácticos
 Recordar su valor como persona amada por Dios.
 Identificarse con el adolescente y su etapa.
 Tener conciencia y respeto por su persona.
 Reconocer sus diferentes talentos y habilidades.
 Explorar con ellos su medio ambiente, su contexto.
 Conversaciones abiertas y honestas.
 Utiliza rituales para reforzar su identidad.
 Escucha atentamente cómo se siente.
 Afirma su crecimiento en las diferentes áreas.
 Muéstrale tu ejemplo como un estilo de vida digno de imitar.
Referencia

COLEMAN, J. O. H. N. C. H. E. N. D. R. Y. L. E. O. B. (2003). PSICOLOGIA DE LA ADOLESCENCIA. Place


of publication not identified: EDICIONES MORATA S L.

Allen, B. (2019). Etapas de la adolescencia. Lugar de publicación: Healthy Children.


https://normasapa.com/como-citar-referenciar-paginas-web-con-normas-apa/

Venditti, L. (Ed). (2017). Enseñanza Bíblica. INSTE.

https://www.unicef.org/ecuador/pub_adolescence_sp.pdf

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