Para Maslow, las necesidades de amor y pertenencia surgen en la medida en que

han sido satisfechas las necesidades de seguridad y protección, que comprenden

tanto el dar como el recibir.
Hace años, Florence Nightingale demostró en la guerra de Crimea que se requería
un deseo de curar, un compromiso emocional con el otro y no solo bastaba con dar
medicamentos, limpiar y curar heridas.
Según Drummond H. en 1991, desarrolló nueve componentes básicos del amor:
delicadeza, entrega, tolerancia, respeto, paciencia, bondad, generosidad, humildad
y desprendimiento; los cuales al ser revisados vemos que han estado presentes a
lo largo del desarrollo de la profesión de enfermería, desde los tiempos remotos
hasta la actualidad donde se prioriza la prestación de cuidados humanísticos, que
concibe al ser humano como un ser integral, con quien se establece un vínculo
afectivo-espiritual.