Vous êtes sur la page 1sur 5

UNIVERSIDAD NACIONAL

AUTÓNOMA DE MÉXICO

ESCUELA NACIONAL PREPARATORIA EZEQUIEL A.


CHAVEZ PLANTEL 7

PSICOLOGIA

PEREZ MARTINEZ MARÍA DE LOURDES

GRUPO: 655

MONTALVO CORTEZ OSCAR

VAZQUEZ VERGARA AMERICA GEMA

REPORTE DE INVESTIGACION: “EL SUEÑO”

INTRODUCCIÓN:
La presente investigación se refiere al tema del sueño, el cual se puede definir como una parte integral de la
vida cotidiana, una necesidad biológica que permite restablecer las funciones físicas y psicológicas esenciales
para un pleno rendimiento. El sueño ha sido y sigue siendo uno de los enigmas de la investigación científica, y
aun a día de hoy, tenemos grandes dudas sobre él. De ser considerado un fenómeno pasivo en el que parecía
no ocurrir aparentemente nada, se ha pasado a considerar a partir de la aparición de técnicas de medición de
la actividad eléctrica cerebral, un estado de conciencia dinámico en que podemos llegar a tener una actividad
cerebral tan activa como en la vigilia y en el que ocurren grandes modificaciones del funcionamiento del
organismo; cambios en la presión arterial, la frecuencia cardiaca y respiratoria, la temperatura corporal, la
secreción hormonal, entre otros.

OBJETIVO:

Dar a conocer la importancia del sueño, los daños que se le ocasionan al cerebro si no se realiza esta acción
adecuadamente, y lograr entender con facilidad este gran fenómeno incluidos los procesos biológicos que
ocurren durante el sueño; los efectos del sueño inadecuado en la salud y el bienestar a corto y largo plazo; y
el efecto de las enfermedades, los trastornos y otras afecciones en el sueño. Además, entender cómo el
sueño inadecuado afecta la conducta y la salud y cómo el sueño beneficia la salud y el desarrollo humano,
para identificar tratamientos efectivos para las personas que tienen insomnio y otras afecciones que impiden
un sueño adecuado.

EL SUEÑO.

Es algo necesario para sobrevivir y gozar de buena salud, pero todavía no se sabe por qué es necesario ni
cómo nos beneficia exactamente. Uno de los beneficios del sueño es su efecto reparador sobre la capacidad
de las personas para funcionar normalmente durante el día. El sueño puede ser reparador porque, durante
este, el organismo elimina del cerebro una proteína tóxica llamada beta-amiloide (un producto de desecho de
la actividad cerebral normal). Cuando esta proteína se acumula, altera el funcionamiento del cerebro.

Las necesidades individuales de sueño son muy variables y por lo general están entre 6 y 10 horas diarias. La
mayoría de las personas duermen por la noche. Sin embargo, muchas deben dormir durante el día para
adaptarse a sus horarios de trabajo, lo cual ocasiona trastornos del sueño.

Entre los estudios que presentarán estos días los investigadores se incluyen algunos tan interesantes como el
realizado recientemente por la Universidad de Pensilvania que revela que ver la televisión antes de dormir
suele generar deudas de sueño, que aumentan el riesgo de caer enfermos.

Pasar demasiado tiempo delante de una consola también se asocia con un déficit de sueño. Según Amanda
Woolems, de la Universidad de Arkansas, los grandes "jugones", es decir, aquellos que pasan más de siete
horas a la semana con videojuegos y se consideran "adictos" a esta forma de ocio, duermen menos de lo
recomendado en los días laborables y sufren somnolencia durante el día. Por su parte, el australiano Siobhan
Banks presenta hoy los resultados de una investigación que demuestra que las personas que duermen poco
ven reducido su apetito y el consumo de comida pero, paradójicamente, también tienden a engordar.

No obstante, tampoco conviene dormir en exceso. Pasar más de 8 horas en la cama aumenta el riesgo de
sufrir diabetes, según otro estudio realizado en Nueva York a partir de datos de casi 30.000 sujetos de edades
comprendidas entre 18 y 85 años. En cuanto a la relación entre el ejercicio y el descanso, Arn Eliasson, del
Walter Reed Army Medical Center, acaba de echar por tierra el mito de que aumentar la actividad física
mejora la calidad y duración del sueño. De hecho, sus experimentos muestran justamente la tendencia
contraria.

¿QUÉ OCURRE EN EL CEREBRO MIENTRAS DORMIMOS?

He recurrido al libro “dormir sin descanso” del Dr. Eduard Estivill Sancho, para explicar el proceso del
sueño.

El Dr. Estivill dice así: “Para comprender el proceso del sueño podemos imaginar que bajamos una
escalera. Al cerrar los ojos estamos dando el primer paso hacia la fase 1 del sueño, denominada
también somnolencia. En ella, los músculos se relajan, la respiración se vuelv e uniforme y la actividad
cerebral es cada vez más lenta. Después de unos minutos, seguimos

el descenso hacia la fase 2, donde las ondas cerebrales se hacen algo más pausadas.
Posteriormente continuamos avanzando hacia un sueño más profundo que recibe el n ombre de sueño
lento o fase 3-4. En él las ondas cerebrales son muy lentas y se precisan fuertes estímulos acústicos
(ruidos, gritos) o táctiles (codazos, pellizcos) para despertarnos.

Este proceso en tres etapas suele durar entre sesenta y setenta minutos, tras los cuales ascendemos
otra vez hacia la fase 2 para entrar a continuación en una nueva situación fisiológica que se caracteriza
por lo movimientos oculares rápidos: la denominada fase REM.

El conjunto de estas cuatro fases (1,2,3-4 y REM) se denomina ciclo y suele tener una duración de
entre noventa y cien minutos. Estos ciclos se repiten en cuatro o cinco ocasiones cada noche. Durante
la primera mitad, pasamos más tiempo en sueño profundo, pero en la segunda predominan las fases 2 y
REM.

¿QUÉ SUCEDE SI NO DORMIMOS LO SUFICIENTE?

El no dormir adecuada y satisfactoriamente nos afecta. A nivel psicológico, y dentro del aspecto
emocional, aparece irritabilidad, cambios de humor, desmotivación, apatía, etc. En el ámbito cognitivo,
surgen problemas de memoria, enlentecimiento y déficit de atención y concentración en tareas
concretas. Todo ello repercute, indudablemente, en la actividad social (amigos, familia, pareja,..) y
comportamental (rendimiento laboral, escolar) de quienes lo padecen. Además, los afectados tienen
mayor probabilidad de padecer ansiedad y depresión, así como mayor propensión
a abusar del alcohol u otras drogas. A nivel físico, además de la fatiga y el cansancio, el sistema
inmunitario se ve perjudicado y quienes sufren trastornos del sueño manifiestan más enfermedades y
necesitan hospitalización con mayor frecuencia.

Las alteraciones transitorias del sueño forman parte de la vida cotidiana y ocurren en todas las edades;
pero cuando la situación persiste en el tiempo, se pueden desencadenar consecuencias muy graves.

Determinados trastornos afectivo/emocionales provocan alteraciones del sueño crónicas. Por ejemplo,
cuando nos enfrentamos a un problema difícil (perdemos a un ser querido, tenemos dificultades en el
trabajo, con la pareja, etc.) es frecuente que nuestro sueño y su calidad, se vea afectado de forma
prolongada. El insomnio, muchas veces, está asociado a síntomas ansioso depresivos y puede actuar
como un modulador de su intensidad.

Determinados trastornos del sueño, de origen neurológico y/o biológico como la narcolepsia y el SAHS
(Síndrome de Apnea/hipopnea del sueño) también tienen un fuerte componente afectivo/emocional y
generalmente, llevan asociados graves síntomas psicosociales. Su diagnóstico resulta, en muchas
ocasiones complicado por el desconocimiento social (e incluso entre los facultativos sanitarios) y
algunos de estos enfermos han recibido tratamientos inadecuados durante años lo que ha contribuido a
empeorar su sintomatología. La aceptación del trastorno generalme nte crónico (y que puede ser
altamente invalidante), y la adaptación a las consecuencias derivadas del mismo, tampoco resulta fácil
para quien lo sufre ni para su entorno más cercano.

Contar con la ayuda psicológica adecuada para conocer lo que ocurre y recibir las pautas, orientaciones
y / o la terapia psicológica adecuada para afrontarlo, contribuirá en gran medida a mejorar la calidad de
vida. Desde el departamento psicológico de Asenarco se ofrece ayuda tanto a los afectados directos
como a personas relacionadas. Se realizan terapias individuales y grupales y se llevan a cabo talleres
de habilidades sociales, afrontamiento, manejo de la ansiedad, miedos, etc. Asimismo, se imparten
charlas psicoeducativas dirigidas a la población general y a los profesionales sanitarios.

CONCLUSIONES:

El sueño juega un papel muy importante con respecto a nuestra salud, dormir 8 horas diarias beneficia mucho
nuestro rendimiento, estado de ánimo, salud, comportamiento entre muchas cosas más.

Es increíble la cantidad de beneficios que tiene dormir adecuadamente, sería preciso que todas las personas
supieran esto ya que por lo general no le dan tanta importancia a dormir como se debe.

BIBLIOGRAFÍAS:

https://www.muyinteresante.es/salud/articulo/la-ciencia-del-sueno

http://asenarco.es/psicologia-y-sueno/

https://www.muyinteresante.es/salud/articulo/dormir-poco-nos-vuelve-mas-primitivos

Vous aimerez peut-être aussi